Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¿QUIEN TE DIO PERMISO? por Yuzuki Eiri

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola mis queridas y adoradas lectores ¿Cómo están?, yo confieso que las extrañe ¡Horrores! Pues no pensé que fuera tan difícil dejar de hacer algo que me gusta por darle tiempo a la universidad y si fue un arduo trabajo pero al fin después de terminar lo que nosotros aquí llamamos “veranos” pude volver a retomar esta historia que me muero por continuar.


Con respecto a la historia siento que me falto la narrativa pero en verdad es difícil volver a acoplarme a mi modo de escribir sin haber puesto en práctica este arte, bueno no quiero adelantar mucho espero les gusta va dedicado a ustedes mis lindas lectoras y lectores claro está que me han tenido paciencia y para quien recién empieza con esta historia le doy la más cordial bienvenida.


No les quito más tiempo…¡Comenzamos!  

SHUICHI.


-4:37 a.m. –


Al abrir los ojos la luz blanca me encegueció por un instante y al tratar de moverme pude advertir que no es buena idea quedarse dormido en el suelo y menos aún el del baño, de hecho me costó trabajo recordar la situación que me llevo el estar aquí.


-Yuki…- dije despacio,  la curiosidad me gano a tal grado que solo cepille el cabello para salir a su encuentro, al llegar lo vi acostado de frente a mí, la oscuridad hacia resaltar su tez blanca con tal impacto que su respiración me hipnotizo de tan tranquila sentí la necesidad inmensa inundando mi ser que quise estar junto a él por ende me senté en una orilla y con una mano recorrí su pecho, incluso intente hacerlo despacio para no despertarle.


Su piel fría a causa de no estar tapado me incitaba a estar aún más cerca y en ese instante me decidí a acostarme lo más lento que pude con tal de no despertarle, tratando de controlar mi respiración convenciéndome con palabrillas como “cero nervios por favor”, “tranquilo Shu”. Sé que este placer me durara solo unas horas pero… estoy tan cansado que quisiera contemplarle toda la noche aunque ya no puedo mantenerme despierto pues el sueño me hace su presa entonces me perderé entre lo infinito de la noche y la locura que me provoca su ser.


 


-9:00 a.m.-


YUKI.


                El vibrar de mi teléfono me hizo despertar con los sentidos alerta por el sobresalto, un minuto después abrí los ojos costándome trabajo ver al frente y es que toda la habitación estaba inundada por la luz de la mañana y eso era sorprendente, no había dormido en tanto tiempo que ya no recordaba esa sensación tan placentera.


-carajo, dormí- lo dije casi sin voz y es que en mucho tiempo no había tenido una noche sin esa horrible pesadilla que perseguía mí existencia, ahora caía en la cuenta de donde estaba recapitulando mi noche con todos los estragos que había causado, lo cual me llevo a preguntarme ¿a qué hora habría venido a dormir  el mocoso que ahora tengo aprisionado entre los brazos?, algunos cabellos están pegados a su rostro por lo que solo los retire para verle mejor, con cada segundo que pasa me provoca besarle aunque en definitiva si lo hago despertara, eso arruinaría faz que embarga su ser… no quiero hacerlo.


Al pasar de unos minutos él despertó por su voluntad, no dijo nada solo me miraba fijamente estudiando mi rostro.


-hola Yuki eto…- se incorporó tallando las gemas que tiene por ojos- ¿dormiste bien?


-más de lo que pensé. – respondí con toda la sinceridad, aún hay partes de este juego que no entiendo como el hecho de saber exactamente porque me ha elegido a mí y menos las expectativas tan altas que tiene al respecto de este encuentro- tardaste demasiado en regresar- lo solté el comentario casi sin pensar.


Se llevó la mano a la cabellera sonriendo enrojecido –lo siento- y repentinamente se acostó cubriéndose hasta la cabeza con el edredón lo que me pareció una reacción un tanto infantil por ende despacio jale la prenda para descubrirle.


-¿Qué te sucede?- le pregunte casi sin entender su reacción.


-ammm… es que … no sabía qué hacer y bueno…


Y con esas sencillas palabras entendí mucho más de lo que hubiese querido, por ello le tome la barbilla despacio le di un beso, uno sin ganas de querer reclamar. Tardo un poco en salir de ese trance en el cual estaba y en instantes se incorporó quedando sentado.


-¿y qué haremos hoy?- me dijo efusivo – podríamos ir a desayunar y después al cine, o tal vez podríamos…


Mientras hablaba me incorpore quedando muy cerca suyo, acomode mis cabellos con la mano y posteriormente sin dudarlo atrape sus labios jugueteando un poco con su lengua pues era mucha la charla y lo mejor sería dejándonos llevar por ese mar de sensaciones de los cuales seriamos presa por un momento lo deje sin aliento y quería que esto llegase a durar, aunque me equivoque.


-¡¿Qué es ese ruido?!- al voltear un hombre alto con cabellos dorados amarrados en una coleta nos apuntaba con un arma de largo alcance, mientras nos observaba fijamente.


-hello pink boy, tienes un llamado de última hora.


-K espera, prometí pasar el día con…


-oh sure, después continuaras el romance.


Y en ese instante los vi desaparecer tras la puerta, estaba perplejo por la situación, en verdad nunca imagine ver a ese hombre que el mocoso llamo su manager y menos que interrumpiera nuestro encuentro furtivo, supongo que estaba tan sorprendido que solo alcance a tirarme en la cómoda cama tratando de entender ese pequeño acontecimiento.


                Al pasar unos minutos y ver que todo se encontraba perdido hice lo más sensato que fue tomar una ducha, arreglarme y salir de esa habitación de hotel, ahora me encuentro frente al volante de mi auto tal cual inicie el día solo y peor pues estuve tan cerca de tocar el cielo y tan lejos, esto me incito a meter la mano en el bolsillo del saco encontrándome con el tan afamado conejo, suspire un poco hasta que el sonido de un auto me hizo sobresaltarme acto seguido coloque ese juguete en la guantera.


 


-11:45 a.m. –


Con toda calma llegue al apartamento y como era de esperarse encontré notas por todas partes puestas claro está en arreglos florales así como cajas con envoltura de regalo, nada fuera de lo común, siguiendo con el recorrido en mi cama estaba un traje acompañado de una nota cortesía de Mika:


“Este traje será lo apropiado para esta tarde, procura llegar temprano inicia 4:00 p.m.”


-Tan autoritaria como siempre- me dije en voz alta, ella ha organizado todo un circo para este día y dudo sinceramente en ir, la ropa es un traje compuesto por pantalón y saco todos a un color beige, la camisa es con tonalidad más clara pero esa misma gama,  me siento como un muñeco en este juego tan absurdo. Pienso en dejarla plantada aunque la verdad no tengo nada mejor que hacer, lo pensare tal vez.


 


-4:23 p.m.-


                Al llegar a mi destino un valet parking tomo mis llaves para estacionar mi auto, el camino que me restaba era iluminado por un sol irradiante, los arboles sakura me acompañan adornando el lugar con su aroma particular.


-¡joder no contesta!


Vi a Mika de espaldas, entonces metí la mano a mi bolsillo sacando el celular tenia tantas llamadas perdidas que bien ya podría pensar la policía estaba buscándome como loca, me decidí contestarle.


-¡Eiri donde estas!


-aquí.- le conteste calmadamente.


-no juegues, ¿en dónde estás?, todos los invitados ya están aquí y tu…


-calma mujer…


-¿Cómo quieres que me calme Eiri?, eres un grosero ¡¿Dónde estás?!.


-aprende a escuchar, te he dicho que estoy aquí, más específicamente detrás de ti.


Si sus ojos fueran cuchillas ya estaría muerto desangrándome sin remedio, la vi suspirar para después efusivamente abrazarme senti en sus hombros la tensión.


-pensé que no vendrías.


El contacto fue realmente escaso con esto daba por terminada su escena, me tomo del brazo guiándome entre los invitados presentándome a algunos otros tantos los saludaba con poco interés en ese camino encontramos a Tohma Seguchi, esposo de mi hermana y dueño de la disquera NG de la cual se pavonea al hablar.


-Feliz cumpleaños Eiri-san- me miraba con su típica sonrisa de la que nunca se despega supongo que ni para dormir- acompáñame por favor quisiera que saludaras a alguien.


Voltee a verle -¿otro? – todo el tramo desde que encontré a Mika hasta ahora me la he pasado entre presentaciones, y saludos forzados siendo honesto ya no quisiera saber de nadie más.


-bueno Eiri en realidad no es simplemente un saludo solo puedo adelantar que a quien encontraremos ha venido desde Kioto para estar contigo en esta fecha tan especial, atravesamos el lugar de la recepción hasta topar con parte trasera de escenario, con ello de una puerta salían un pequeño grupo de personas todas preparadas para actuar, y unos pasos más adelante se acercó el productor de NG con aire de nerviosismo.


-Seguchi-san estamos esperando el llamado para salir a escena.


Los chicos llegaron a nuestro encuentro.


-Eiri-san ellos participaran en… -lo interrumpió la acción realizada por el jovencillo de cabellos rosados que sin pensarlo dos veces se abalanzo hacia mí por ello lo único que hice fue abrazarle para calmarlo pues ya se me hacía demasiado conocido.


-¡Yuki!.


Todos se quedaron perplejos de la situación, y mi cuñado como era de esperarse inicio interrogatorio.


-pero… ¿es que acaso se conocen?


-claro que lo conozco- dijo Shuichi sin parar de mirarme- dormimos juntos.


Todos abrieron los ojos perplejos de la situación preguntándome con la mirada si era cierta esa declaración.


-es cierto- pues fue parte de lo que hicimos y quería saber cuál sería la reacción de Seguchi, entrelace su mano con la mía y comenzamos a caminar para salir de ese lugar.


Confieso que en mi vista periférica los alcance a mirar algunos estaban enrojecidos aunque el más sorprendido era mi cuñado que después de unos instantes trato de detenerme.


-Eiri-san …


Alce la mano indicándole que no era el instante justo y es que ¡cómo serlo!, el destino le había puesto nuevamente en mi camino, imagine nunca volvería a toparme con él en todo lo que me restaba de existencia y pareciera que a este chiquillo le pasaba lo mismo.


-te fuiste del hotel. –me declaro tímidamente.


-después de que el loco de la magnum te llevo. –Refute pues la culpa no fue mía- imagine no regresarías pronto.


Saco una risilla que se notaba excelente en su rostro, por mi parte no entendía esta jugarreta del destino pero igual pensaba aprovecharla.


-¿te gustaría vernos después del evento? – le dije despacio en el oído a lo cual se sobresaltó un poco.


-piénsatelo y recuerda ser discreto– de antemano sabía que tal vez no estaríamos juntos en todo lo que restaba del evento, de hecho no sabía siquiera si le vería en algún momento pues cuando eres una figura que se debe al público nunca te encuentras solo.


 


SHUICHI.


Es increíble que el destino nos volviera a reunir tan pronto pues al  regresar a ese cuarto de hotel lo encontré completamente vacío sin rastro alguno. Me recuerdo muy bien esa desilusión al esperar todo y encontrar la nada a la vez… fue desolador.


-Shindou-san, ¿podríamos hablar?


Escuche la “melodiosa voz” proveniente del dueño de la disquera, y solo asentí.


-recuerda que no necesitamos escándalos en esta fiesta por lo que recomiendo que pase lo que pase forme solo parte de tu vida privada sin involucrar a nadie más- y dicho esto me dio la espalda y antes de irse pronuncio- recomiendo no tener muchas expectativas con Eiri-san.


Me ha dejado perplejo todo lo que me ha dicho y es que nunca hemos tenido un trato cercano, tan solo la relación entre dueño de la disquera y cantante como es de esperarse solo firmas de contratos y juntas directivas pero nada personal lo que me hizo pensar demasiado ¿en verdad le preocupa tanto Yuki? ¿Por qué?


-¡chicos a escena! – escuche a Sakano y con esto salí de mi letargo, subí al escenario y comencé a cantar claro está presentándome y haciéndolo lo mejor posible. Juro entregue mi alma pues era dedicado especialmente a ese primer amor que había tocado mi ser tan efusivamente haciéndome olvidar mis penas, quienes éramos en medio de esa pista de baile, inclusive de mí.


Tan rápido como me fue posible lo ubique se le veía serio platicando con unos hombres todos con trajes occidentales y junto a él una castaña con un hermoso kimono con un hermoso paisaje en la parte baja, ella sonreía a su vez se le acercaba tanto como podía hacerlo hasta que llegó el momento en que lo tomo del brazo, juro que quería bajarme a decirle que quitara esa mano de encima de Yuki pero de algún modo sus ojos dorados se encontraron con los míos y con esa mirada sentí que no pasaba nada, que no importaba todo lo que estaba pasando pues él había prometido verme, y le creo pues no tengo otra opción, quisiera pero no es así…


No sé cómo sobreviví a no bajarme del escenario antes de tiempo pero cumplí hasta el final, unos minutos después de quitarme el sudor de los reflectores me dispuse a caminar entre los invitados, como era de esperarse tuve que firmar algunas servilletas y posar para fotos, por esta misma razón preferí que mi recorrido ya no fuera en el centro si no ir por los orillas de este modo podía pasar desapercibido hasta que sentí me tomaron por el hombro de golpe voltee encontrándome con esos cabellos dorados.


-Yuki…


Quedamos uno frente al otro, por su parte me tendió la mano y cuando la tome sentí un papel pequeño el cual apreté sin decir nada, de pronto sentí un flash en mi rostro y en efecto era un reportero que nos tomaba supongo tal vez para armar su columna o dar una noticia extra, pero esto fue suficiente para que Yuki tomara nuevamente su lugar en la fabulosa fiesta en su honor, por mi parte volví atrás de los escenarios donde me tope nuevamente con Seguchi.


-Shindou-san, espero no te moleste que te esperara a que terminaras, Usumi Ayaka ha insistido en querer agradecerte la presentación que has dado para Eiri-san.


Para mi sorpresa la chica que lo acompaña es la misma que tomaba con tanta insistencia del brazo a Yuki, pero igual tuve que fingir una sonrisa.


-no es nada, solo hice mi trabajo.


-canta usted excelente Shindou-san un gran gusto el conocerle, y le agradezco esta presentación en honor de mi prometido.


La sangre se me helo al escucharle, ¿prometido?, ese maldito de Tohma lo hizo con toda la intensión de dañarme pero no me derrumbare y como pude fingí una pequeña sonrisa para congraciarme con la plática.


-le agradezco los cumplidos señorita pero por el momento es mejor que retire para dejarles continuar con la reunión.


Hice una pequeña reverencia y camine un poco rápido pues quería alejarme lo más rápido posible de ese lugar, de pronto tuve esa sensación de vergüenza yo fui quien estuvo con Yuki toda la noche y ella viene a agradecerme por mi presentación para su prometido, en definitiva existen cosas que no puedo evitar sentir y una de ellas es ese remordimiento… es una lucha interna la mia por un lado sé que está mal que quiera salir con un hombre comprometido pero por otro quiero vivir este sueño, quiero tocar el cielo por una noche.


 


YUKI.


-10:18 p.m.-


Para escabuirme del recinto tuve que dar algunas propinas para saber que puertas podrían sacarme al estacionamiento hasta que por fin alegremente estaba fuera, aun sin saber si llegaría a nuestro encuentro o se lo había pensado mejor y declinaba mi oferta.


-10:35 p.m.-


Por el eco del lugar se comenzaron a escuchar algunos pasos hasta que por fin lo vi, ya no vestía ese atuendo lleno de cuero sino unos vaqueros con una playera grisácea y chaqueta un minuto después ya le tenía como pasajero en el auto. Solo nos miramos sin decir una palabra y con esto me puse en marca.


En el camino tome un sendero iluminado por completo con la luz de neón, como era de esperarse algunas personas iban lento por la calle mientras nosotros nos movíamos lo más rápido que permita el trafico diurno y unos minutos después ya estaba aparcando en el estacionamiento de mi apartamento. Nuestros pasos nos dirigieron hasta el ascensor y todo esto en completo silencio sepulcral, debo confesar que estoy extasiado y pensativo pues su actitud no es la de ayer. Él no es tan callado, no lo entiendo; tiene esa faz pensativa que llega a desconcertarme y un momento después casi sin darme cuenta ya estábamos en la puerta.


-Pasa – le dije, lentamente lo vi quitarse los zapatos dejándolos en el vestíbulo y en instantes se fue a parar justo en donde está el enorme ventanal que da vista al exterior, por su parte note que no quitaba sus amatistas de la luna.


-¿Qué te pasa?- le dije despacio.


-¿esto durara?


-no sé, ¿Por qué me preguntas algo que es del tiempo?


-porque no se tantas cosas.- lo vi llevarse una mano a la cabellera- no te entiendo Yuki.


-yo tampoco te entiendo- le dije en un susurro muy cerca de su boca.


-¿Qué sientes por mi Yuki? –sus amatistas brillaban con todo su esplendor y me atrapaban a cada instante.


-aun no lo defino, es algo más que una atracción- y con esto nos fundimos en un beso apasionado por su parte entrelazo sus manos en la parte trasera de mi cuello por lo cargue hasta la habitación más cercana recostándolo en la cama sin dejar sus labios, posteriormente seguí con su cuello repartiéndole caricias, con ellas le quite la playera y vaqueros hasta dejarle solo bóxer.


-te haré sentir bien –mientras desabrochaba uno a uno los botones de la camisa que me cubría su mirada fija en mi me producía una excitación extenuante, en instantes los pantalones que me cubrían se perdieron en alguna parte de la habitación.


-Yuki- susurraba mi nombre mientras posaba sus manos en mi cabellera pues estaba en la felación, es la primera vez que hago esto y pareciera que no soy malo pues lo escucho gemir y mi mente ha jugado conmigo por momentos pues lo imagine bailando seximente quitándose la ropa.


-ah…Yuki… - musitó con la respiración entrecortada, instantes después se corrió con ello no pude más y lo tome en la pose en la cual podía tenerlo de frente me encanta con solo ver su cara de placer, con calma me abrí paso en su ser hasta entrar y fundirnos.


-Shuichi – gemí en sus labios.


Las envestidas son lentas y cadenciosas, me gusta ver su cara con los ojos cerrados y disfrutando las sensaciones, con sus manos me atrapo el rostro besándome lenta y apasionadamente.


-ahh… más… no puedo más…- lo escuche gemir en mi oído por ello lo abrace con más fuerza hundiendo mi rostro en su cuello hasta que termino por venirse nuevamente, su entrada se contrajo con ello no aguante y vino la oleada de placer del orgasmo, un instante después nos dejamos caer en la cama fundidos en lo que tal vez sería el último beso de la noche y así fue como caí presa del placer y cansancio.


 


-9:47 a.m-


Abrí los ojos a un nuevo día tan lentamente pues no quería hacerlo, estaba de lo más relajado posible inundado por las hormonas producidas por una noche de pasión, al voltear espere verle a mi lado aunque lo que encontré fue un lugar vacío, tan rápido como pude me pare a buscarle por todo el lugar hasta que me di por vencido.


- se fue…


 


CONTINUARA…

Notas finales:

¿Qué tal el capítulo 3?, espero les guste el lemon que escribí y el camino que va tomando la historia en realidad, me puse a pensar en la situación del pobre Shuichi enterarse que Yuki tiene una prometida no creo que sea nada bonito siento que la historia puede dar más cosas y la continuare claro está con su apoyo y sugerencias. Les agradezco infinitamente que me dejen un comentario pues eso me anima a continuar escribiendo y la continuación espero tenerla pronto pues tengo algo de tiempo que aprovechar. Les mando un gran abrazo, cuídense bye…


P.D. Por si alguien me quiere contactar estoy en Facebook como Yuzuki Eiri.


P.D. 2 ¿sugerencias para el capítulo 4?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).