https://www.youtube.com/watch?v=uaQpFiscfsI
Siento Un dolor
Que Nace en mi interior
Y quema poco a poco el corazón
No sé por que
No me deja ver
Pero ha pintado todo
Y ahora estoy tan
Solo, solo…
Ya No sé quien soy
Ni hacia donde voy
Podré despertar
En medio de la nada
Y es tanto el dolor
Que hay en mi interior
Dime a donde ir
Ya no veo el sol
Mira donde mi
Ya no veo el sol
Capítulo 12: Debo hallar la forma.
Tenía un horrible dolor de cabeza, el fuerte aroma del alcohol producido por el pequeño carcho en la costosa alfombra de su sala lograba recordarle la razón de todos sus pesares “Naruto”.
El pelinegro se levantó del sofá balanceándose sobre su cuerpo, el efecto del alcohol aun permanecía en su organismo y lo que es peor la resaca no sería en lo más mínimo compasiva con tu anatomía.
Camino a paso indeciso hacia su habitación y se metió en la ducha sin siquiera quitarse los zapatos, sin saber en que momento las lágrimas volvieron a atravesar sus mejillas y se camuflaron agiles entre el agua fría que caia sobre el. Con rabia se dejo caer en el suelo de la bañera y golpeo las baldosas enfurecido, nuevamente recordaba que todo era su culpa…
Pasaron al menos unos 20 minutos en la misma posición, pero finalmente decidió armarse de valor, se quitó las ropas que mojadas se apegaban a su piel y las dejo en una esquina de la bañera, con rapidez y agilidad tomo un “rápida” ducha y luego cerro el grifo, salio del cuarto de baño sin una toalla que le cubriese el cuerpo tembloroso y empapado.
Aquella era la descripción grafica de como se sentía, de alguna forma desnudo y desvalido, tan solo, tan amargamente frio, cerro sus ojos intentando evadir la realidad observo aquella gigantesca cama sola, solo tomo un par de ropas y salio de ese deprimente lugar.
Penso que al dejar la habitación sería capaz de escapar del fantasma de Naruto, sin embargo aquel espectro rondaba toda la casa, recordándole que estaba terriblemente solo y se lo merecía…
Asi pasaron al menos 5 dias, no tenia ánimos de nada, se había recluido el mismo dentro de aquella cárcel que antes reconocia como su hogar.
Por supuesto su hermano estaba preocupado, también el rumor se había esparcido por todos sus conocidos, ya varios sabían como estaban ocurriendo las cosas, no era novedad la separación de aquel “perfecto” matrimonio, varios se sintieron felices de ver la ruina del Uchiha, sin embargo sus mas cercanos se preocuparon profundamente.
Sasuke no quería salir, no hablar con nadie, la gran parte de su extensa colección de licores había sido consumida por si mismo en aquellos pobres 5 dias, pero ni si quiera el alcohol era capaz de ayudarle a olvidar y constantemente lloraba y gritaba pidiéndole a su esposo mil perdones, rogándole que volviera junto a el.
El sexto dia fue diferente, nadie entendió que había sucedido, Sasuke se levanto pulcro y sobrio durante la mañana, se dio el tiempo de vestir nuevamente su costoso traje marca Armani, peino sus brillantes cabellos azabaches y rasuró por completo la horrible barba que había cargado los ultimos cinco dias.
Incluso Itachi se vio sorprendido cuando le vio entrar a su oficina por la mañana, como si los últimos cinco dias no hubiesen pasado jamas.
-Sasuke, es bueno verte hermano- Saludo Itachi, sin saber bien si seria buena idea mencionar el reciente episodio traumático en la vida de su hermano.
-Hola Itachi, también me es bueno verte, hay un par de asuntos que quisiera hablar contigo- Hablo el menor con voz clara y fuerte.
-¿quieres discutir esos temas de inmediato?- Pregunto el mayor alzando una ceja.
-Seria una buena idea, sin tienes tiempo claro- Expuso, al tiempo que tomaba asiento en su propio escritorio, y dejaba el paso libre para que su hermano hiciera lo mismo.
-Por supuesto ¿De que quería hablar?- El mayor de los Uchihas tomo asiento en la silla frente a su hermano.
-Se todos los rumores que rondan a mi persona y realmente no me importante en lo mas mínimo Itachi, sin embargo hay algo que deseo saber… ¿Dónde dice la gente que esta Naruto?
¿Habia escuchado bien? Su hermano quería saber dónde estaba el pequeño rubio ¿ Acaso deseaba hacerlo volver a la fuerza para seguir dañándole?
-Sasuke, no creo que sea…-
-Tu sabes donde esta Itachi, no me mientas, ni intentes alejarme de la verdad, se que todo lo que hice termino por destruir a Naruto- Estampo su puño contra el roble de su escritorio- sin embargo…-
Itachi abrió sus ojos desmesuradamente, su ototo levanto el rostro luego de haber estampado aquel golpe contra el escritorio, esperaba observar aquella mirada fría y calculadora que desde niño había portado Sasuke, sin embargo el menor había dejado ver su rostro cubierto en lagrimas.
-Necesito tu ayuda hermano- Musito con la voz quebrada- Ya no puedo vivir con este cargo de consciencia, no sé que es lo que hare cuando sepa donde esta, realmente no tengo un plan pero ¡Dios! Itachi estoy desesperado, necesito hacer algo…
-Esta en un pueblo a unos varios kilómetros de aquí, con Deidara- Susurro el mayor, quien había obtenido esa información gracias a Sai, obviamente Naruto se había contactado con ellos, pues no quería que Garra se alterara luego de su reciente parto.
-¿El bulímico?- Sasuke le conocía, había sido un viejo amigo de Naruto en la secundaria, se había retirado antes de la graduación, para esos entonces todos conocían a fondo la situación de Deidara “El bulímico”- Diablos Itachi ¿Crees que este bien? Digo ellos dos son como una bomba de tiempo, ¡Hay que ver! ¿Cuál de los dos se muere primero?- Exclamo el menor, sus palabras no eran del todo serias sin embargo se sentía realmente preocupado, recordaba como fueron los últimos meses de Deidara y temia que Naruto terminase de la misma forma.
-No hables asi Sasuke, ese muchacho tuvo su rehabilitación, el debe ser un buen ejemplo para Naruto en estos momentos- Replicaba el mayor esperando que sus palabras fuesen ciertas.
Itachi realmente nunca había tenido contacto con Deidara, el era unos buenos años mayor que aquel rubio, el pelinegro estaba por graduarse cuando Deidara recién había ingresado a primer año de la secundaria, jamas cruzaron palabras, aunque por los tiempos pocos rumores Itachi sabia sobre la enfermedad del menor, sin embrago no llego a sentir nada mas que lastima por el.
-Ahora que sabes esto ¿Que pretendes hacer Sasuke?
-Ya te lo dije hermano, realmente no tengo un plan yo, solo quiero ayudar, necesito ayudar de alguna forma a Naruto…
- Esta bien hombre, he de reconocer que me gusta el hecho de verte asi de derrotado, sin embargo derrotado no me sirves- Itachi acaricio los cabellos negros de su hermano, luego le dio un golpe con el dedo índice en la frente y sonrio- Cuenta con tu “ Nii-chan…
Luego de decir eso salio de la habitación dejando a Sasuke sumido en sus pensamientos…
.:*Deidara*:.
Hacia dias que había llegado su amigo a vivir junto a el, los primero dias habían sido como una intensa lucha, hacer comer a Naruto se le hacia realmente difícil, y con todos los esfuerzos intentaba mantenerle vigilado, pues a pesar de que su amigo había dicho querer hacer todo lo posible para sanarse realmente se contradecía enormemente a la hora de intentarlo.
No podía culparlo, Deidara conocía ese sentimiento, el también quería curarse hacia años, sin embargo le era tan difícil hacerlo, incluso ahora años después su dieta era total y completamente controlada, tenia poco espejos en casa, ninguno de ellos de cuerpo completo, y no había una sola bascula en su hogar, le temia, temia las basculas con todo su ser.
La lucha no solo se había establecido en la comida de Naruto si no en la suya propia… Reiteradas veces se había descubierto a si mismo dejando la mitad del plato ¿Sentia envidia de su amigo? Claro que si y no podía evitarlo, sabia de sobra que Naruto estaba enfermo, conocía de sobra aquella enfermedad sin embargo no era capaz de evitar envidiar la figura de Naruto, y cada dia se convertía en una horrible lucha para si mismo.
Cuando ya había pasado una semana desde la visita de su amigo recibió una extraña llamada que le dejo por completo perplejo.
- Hola, Habla Deidara- Contesto el teléfono de su hogar
-Hola Deidara-kun, fue muy difícil dar con tu número telefónico, habla Itachi Uchiha- escucho por el auricular.
-Uchiha…- Repitió el rubio- ¿Se puede saber que asuntos tengo yo pendiente con usted señor Uchiha?
-Jajajaja, no seas tan serio Deidara-kun…
-Corrección Itachi, tu deberías ser mas serio, dígame ya ¿ Que quiere usted conmigo?
-Bueno, bueno, yo en particular contigo nada, sin embargo, deseo ayudar a mi hermano sabes, el esta completamente desequilibrado desde que Naruto se ha ido de aquí y lo único que repite todo los dias es “Tengo que hallar la forma de ayudarlo” y “Necesito ayudar a Naruto” o también “Ya no puedo mas con esto, necesito saber como esta el”. No hay nada que me puedas decir Deidara, se perfectamente que mi hermano la cago, sin embargo tiene buenas intenciones con Naruto…
-Uhhmmm- Gesticulo Deidara.
-Se bien que en este momento Naruto esta mejor en tus manos que en las nuestras, pero tan solo, tan solo deseamos ayudar, tenemos la dirección de un buen psicólogo en tu ciudad y también el de una nutricionista, nos gustaría dejar a Naru-chan en tus manos, yo confio en que tu puedes ayudar mucho a mi cuñado, pero además quisiera pedirte un gran favor, si es posible nos mantendrías informados de sus mejoras, tanto como de sus recaídas, y a lvez decirnos si les falta algo, si necesitas ayuda de cualquier tipo, en estos momentos solo somos capaces de darte solvento económico, el dinero no nos falta y aunque desearía ayudarte de otra forma realmente no se como..
- Itachi-san…- Susurro Deidara pensando en todo lo que el Uchiha había dicho- Esta bien, yo hare lo que usted me pide.
-¡Enserio! Muchas gracias, realmente lo aprecio.
Deidara no era compasivo, sin embargo Itachi realmente le había roto el corazón con aquella confesión y logro encontrar en su voz un verdadero deje de preocupación.
-Cuidate Deidara-kun…
El rubio no había esperado oir eso, pero Itachi tenia razón, si quería ser capaz de cuidar a Naruto primero debía cuidarse el.
-¡Muy bien Naru! La cena esta servida- Exclamo el rubio mayor sirviendo una contundente y saludable cena.
-Dei-chan me quieres matar- Reprocho el menor haciendo un puchero.
-Ahora reclamas, pero cuando lo pruebes querras repetir, esta comida me ha quedado realmente buena y alégrate, no tiene muchas calorías.
La cena continuo con calma, Naruto finalmente fue vencido por el hambre y comio todo lo que había en su plato aunque luego de aquello sintió su estomago realmente pesado.
-Naruto me han dado la dirección de una buena nutricionista y un psicólogo también, estaba pensando… Sera una buena idea sacar una consulta con ellos también…
Horas que se van
Hacia ningún lugar
No veo el norte
Y ahora me encuentro tan
Solo, solo…
Ya no sé quien soy
Ni hacia donde voy
Podré despertar
En medio de la nada
Y es tanto el dolor
Que hay en mi interior
Dime a donde ir
Ya no veo el sol
Ya No sé quien soy
Ni hacia donde voy
Podré despertar
En medio de la nada
Y es tanto el dolor
Que hay en mi interior
Dime a donde ir
Ya no veo el sol
Mira donde mi
ya no veo el sol