Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

No puedes perder lo que jamas fue tuyo... por Shana18

[Reviews - 14]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Siguiente capitulo, espero les guste

Canción: Si te vas

Aclaraciones: Naruto no me pertenece, si no el final hubiera sido diferente 

Sentía el agua recorrer su cuerpo, demonios, como disfrutaba la sensación, era tranquilizante, siempre lo era, después de un día muy estresante, y claro, ese había sido un día en especial estresante, había hablado después de mucho tiempo con sus hermanos y cuñados, y que alguien le dijera lo contrario, pero tener a los dos Namikaze-Uzumaki enojados, encerrados en una habitación de cuatro paredes, con sus dos hermanos viendo como debatirse entre ayudar a su idiota hermano menor a salvar su pellejo o ayudar a sus parejas a degollarlo vivo y ponerlo colgado en una pared con una placa advirtiendo a los enemigos de la familia “muerto por idiota”, era y fue algo que no quería volver a repetir, pero bueno al menos había explicado las cosas a sus hermanos y cuñados, su… situación, y aunque claro hubo un momento en el que casi lo dejan sin su colgante favorito, bueno no solamente de él a Naruto también le encantaba, y era por él que lo habían perdonado.

Era consciente del peligro al cual se sometió, y al menos había envejecido mínimo dos años de su preciada vida, sabía que Gaara era de cuidado, su mirada en si congelaba e intimidaba a cualquiera, pero sabía que no le haría daño… bueno no más del necesario, claro. Y Deidara, él era más “tranquilo” era explosivo con muchas cosas, pero era más racional que Naruto y Gaara, bueno al menos eso había creído, suponía que realmente la había cagado y la prueba estaba en la vestimenta que había el suelo de aquel baño, escucho la puerta abrirse y cerrarse

-vamos estúpido hermano- escucho la voz de Itachi –que al menos han accedido a escucharte

-ya lo sé Itachi – dijo serio – aunque aún siento que quieren cocinarme vivo

-vamos, solo era un poco de harina y huevos, no seas tan chillón – escucho la burla de Sai – además ya te trajimos ropa

Al salir se topó con las dos figuras de sus hermanos, sus rostros estaban serios, y lo estudiaban de arriba abajo, se sintió vulnerable, y en reacción se cubrió las cicatrices de sus brazos,  su piel siempre fue muy  sensible, y ahora con todo esto se le formaban enormes hematomas

-maldición Sasuke – exclamo Itachi acercándose y tomándolo de la mano para inspeccionar el hematoma más reciente, su rostro ahora mostraba una mueca de dolor

-no es tan malo como se ve – dijo tratando de quitar sus manos de encima

-no, es peor aún – dijo Sai a su otro lado – eres un idiota ¿lo sabías?

-no quería preocuparlos – dijo mientras tomaba la ropa y se cambiaba

-eso te hace más idiota – volvió a hablar Sai molesto – somos tu jodida familia y todo esto nos concierne, carajo

-Sai, basta – pidió Itachi – él tuvo sus motivos para hacerlo

-si, es porque es un idiota, y no un idiota cualquiera, es la clase de idiota que esconde a su familia que estaba enfermo y que quiere solucionar las cosas solo – dijo alzando la voz – y solo las complica más, pues no solo jodida enfermedad arruina su vida, si no que aleja al amor de su vida, a esta idiota familia que ahora está preocupada mucho más por él

-lo siento- murmuro -  solo que no quería que se mesclaran con toda esta mierda – dijo enfrentando a sus hermanos

-carajo Sasuke, es que no lo entiendes – dijo exasperado Sai – somos familia

Dio vuelta y salió de la habitación azotando la puerta

-se le pasara – comento Itachi – él siempre ha procurado cuidarte hermanito idiota

Sasuke sonrió triste

-todos lo intentamos Sasuke, y no importa qué clase de mierda sea, somos familia y la familia se mete en la mierda más profunda para sacarnos – puso una mano en su hombro – apresúrate, todos te esperamos en el comedor – salió dejando a Sasuke solo en aquella habitación, mientras terminaba de arreglarse

Como odiaba toda esta situación, y si no hubiera sido por la estúpida de Sakura y su maldito rumor de que se iba a casar con ella, no hubiera hecho esto, detestaba ver a su familia así, enojada y triste, desesperada, y sobre todo, odiaba no tener a su rubio a su lado.

Estuvo a punto de recuperarlo, de alcanzarlo, le había importado un reverendo cacahuate la prohibición de su familia, después de buscarlo por un mes, y por fin lo localizo, ahora se preguntaba porque no había buscado primero ahí, era lo más lógico, al encontrarse por fin con Hinata, ella le había contado que sí estuvo ahí pero que se marchó, no le dijo a donde ni el porqué, solo que se fue

Se recargo en pared más cercana, y se deslizo por ella, mantuvo la cabeza agachada respirando lentamente, tranquilizando a su inquietante corazón y el dolor que sentía, dejo salir el aire que retenía en los pulmones, levanto la mirada hacia el techo y recordó el día siguiente a la primera vez que Naruto estuvo a punto de marcharse

 

Habían pasado la noche ahí, sentados y en completo silencio, él sabía que algo había cambiado, algo había sido roto para siempre, fue deshaciendo el abrazo que retenía a Naruto, y este cuando se vio libre salió disparado hacia el baño cerrando con seguro, él se quedó ahí escuchando el agua correr, junto con algunos sollozos más, se puso de pie estirando sus engarrotadas piernas y camino hacia su habitación, observo que la cama estaba intacta, y se sintió extraño, se recostó en ella, y sin darse cuenta se quedó dormido…

Naruto salió del baño con una toalla en la cintura, entro a la habitación y encontró a Sasuke dormido, tenía el rostro afligido, tuvo unas ganas irresistibles de tumbarse a su lado y abrazarlo, suspiro y comenzó a vestirse, tomo una mochila pequeña y guardo algunas prendas, se colocó de nuevo sus tenis, y se sentó en la orilla de la cama  y lo observo dormir, no sabía qué hacer, primero comenzó a limpiar el tiradero de la noche anterior, y en su travesía se encontró con el saco de Sasuke, dudo un momento, suspiro y comenzó a revisar el contenido de sus bolsillos, y fue ahí donde lo encontró, el dichoso celular, estaba apagado, bueno al menos en eso no mintió, no tenía pila, lo conecto a la luz, y espero que prendiera, el protector de pantalla era una foto de ambos, sonrío levemente, fue cuando le llego un texto

                “gracias por lo de anoche…xoxo”

Dejo el teléfono en el mueble y termino de limpiar, volvió a la habitación y lo miro una vez más, tenía el ceño fruncido, se preguntó en que estaría soñando, lo observo, le dolía mucho lo que había hecho y necesitaba pensar en lo que harían o en lo que el haría, se puso de pie, tomo una chamarra y se la coloco, metió algunas cosas más en la maleta, la tomo y camino hacia la puerta, volteo a verlo una vez más y  salió por ella

Bien dicen que el primer paso es el más difícil, y ahí se encontraba, enfrente las escaleras, detrás la puerta recientemente cerrada, soltó el aire que retenían sus pulmones, y bajo el primer escalón y así consecutivamente, hasta llegar al sótano, paso el auto negro, ignorándolo por completo, ahora se preguntaba si cuando Sasuke veía a su amante no llevaba auto, y cuantas veces había pasado eso, como para volverlo una rutina, siguió caminando hasta llegar a su motocicleta, un regalo de cumpleaños de parte de su hermano Gaara, nunca le había tomado tanto cariño como hoy, subió a ella y la encendió el ronroneo le dio seguridad salió del estacionamiento, miro por los espejos laterales su edificio y como desaparecía a lo lejos….

 

Escucho una melodía a lo lejos, sabía que esa melodía significaba algo, ¿pero el que? No lo sabía, volvió a escuchar el sonido y estiro la mano en dirección al ruido infernal, se encontró con el apartito y la luz de la pantalla anunciaba “Itachi”, junto con una foto de su hermano y una gorra de béisbol

-¿Qué? – dijo con voz ronca, maldición tenía sed

-tienes una idea de la hora que es, y que has pasado por completo el compromiso que tenías hoy – demonios, estaba enojado – a lo que me lleva a preguntar ¿Dónde carajos estas?

-lo siento Itachi, me quede dormido – se fue estiro  tanteando el otro lado de la cama, buscando el calor de Naruto, pero la cama estaba fría, eso y las imágenes de la pelea de anoche le quitaron el sueño de golpe, escucho el regaño de Itachi a lo lejos, y comenzó a pasear la vista por la habitación, descubrió puertas del closet abiertas, y la falta de prendas, pocas pero suficientes para notar su ausencia

-Sasuke, carajo te estoy hablando – el grito de Itachi lo saco de su ensoñación y lo hizo todo real

-lo siento Itachi, te marco después – y colgó, se puso de pie deprisa y comenzó a buscar a su  rubio compañero, descubrió  que el tiradero de anoche fue recogido, ¿Cuánto tiempo había dormido?, tomo el teléfono descubrió que habían pasado horas desde que durmió, pasaban de las dos de la tarde, había dormido mucho

-Naruto – llamo, aunque sabía que era imposible que respondiera, él no estaba ahí, pero bueno últimamente cometía muchas idioteces, así que siguió llamándolo – Naruto

Recorrió el departamento de arriba abajo, la sala, la cocina, el estudio, el baño, la bodega, la habitación de invitados, la cocina de nuevo, pero no lo hayo, comenzó a sentir desesperación, fue de nuevo a la habitación de ambos y recorrió los cajones con la vista, hacía falta una mochila de colgar y bastante ropa, su temor fue creciendo, escucho el teléfono sonar y corrió a contestarlo

-Diga

-Sasuke, ¿estás bien? – Era su madre – Itachi me llamo, me dijo que sonabas ausente

-si mamá, estoy bien – mintió – perdona mamá, ¿Naruto está contigo?

-no hijo – su madre dudo un poco - ¿está todo bien?

-si – confirmo más para converse a si mismo que a su madre – solo que se fue sin despertarme

-seguramente porque te vio cansado hijo – su madre trato de calmarlo – ya trataste de llamarlo

-no, creo que es lo que hare – no espero respuesta y colgó, inmediatamente marco el número de su novio, la  pantalla se llenó con una foto del rubio dormido, esa imagen con la que siempre despertaba y que ahora estaba ausente, espero los tonos de llamada y escucho el mensaje de buzón de voz, volvió a intentarlo tres veces más, la cuarta paso inmediatamente al buzón, eso significaba que Naruto no quería hablar con él.

Suspiro derrotado ¿Naruto lo había dejado?

Se sentó en el sofá, recordando la pelea, que ni siquiera el dejo que se llevara a cabo, no tenía palabras para decir lo que era más que obvio, pensó en cómo habían llegado a ese punto él también era consciente de que se habían alejado, las pláticas que antes eran diarias ahora incluso pesaba iniciarlas, recordaba como él fue el que se fue al vivir al departamento de Naruto, una noche solo llego con una maleta y de ahí comenzaron a compartir el departamento, le gustaba la compañía del rubio, su imperfecta personalidad, tan escandalosa algunas veces, tan desesperante, odiaba esa manía de tronarse los dedos, cuando estaba eufórico o contando alguna anécdota mientras comían hablaba con la boca llena, siempre le daba la razón a él, más para evitar peleas que la tuviera, como se muerde las uñas cuando está nervioso, pasearse las manos por el cabello cuando sabe que está seguro de algo. Y él hasta donde sabia Naruto jamás se quejaba de sus defectos, parecía y se lo habían dicho más de uno, que  Naruto lo amaba completamente, aun con todos sus jodidos defectos.

Y ahora él no estaba, extraño su presencia al despertar, extraño ese beso matinal y nocturno, esa sonrisa que le regalaba cuando lo veía llegar cansado del trabajo, como se ofrecía a darle un masaje para relajarse, dios lo extrañaba

Se puso de pie y corrió a su habitación, se puso unos pantalones deslavados, y una playera ajustada, tomo la primera chamarra que encontró y sus llaves, bajo corriendo las escaleras, tropezando más de una vez, corrió lo más rápido que pudo, chocando con su audi negro, lo encendió y salió a toda velocidad del estacionamiento.

Fue por las avenidas principales, había notado que la moto de Naruto no estaba, así que debería de ir a lugares con estacionamiento o abiertos, ya había oscurecido ¿Cuánto tiempo se quedó sin hacer nada? Las luces de la ciudad se abrían camino, pasó por restaurantes, locales de música, de ropa, de accesorios de cocina, llamo a sus amigos preguntando por él, pero nadie tenía una idea.

 

Naruto había comido en un local escondido, en un lugar que solo él conocía, había descubierto ese lugar en sus tiempos de escuela, y  era donde se relajaba cuando se sentía muy estresado, enojado, o triste, y esas eran las emociones que en ese momento sentía, ordeno la especialidad de la casa, y espero, comió despacio, fue cuando se acercó la chica

-hoy no sonríes, ni por qué te di mi especialidad Naruto, ¿Qué pasa? – la chica lo tomo asiento frente a él, y espero que hablara

-me engaño – dijo sin rodeos, observo como ella abría los ojos sorprendida, y se mordía el labio para contener una grosería, ella era muy hermosa, cabello castaño y ojos verdes, tez morena claro, labios delgados y nariz respingada

-vaya – se recargo en la silla – eso es una mierda

-lo se

-¿y qué vas a hacer?

-no lo sé – escucho un suspiro

-te diré algo Naruto – se puso sería – y no será bonito, pero alguien tiene que decírtelo – cruzo las piernas y lo observo – aquí tienes de dos sopas, primera – dijo alzando uno de sus dedos – mandarlo a freír espárragos y terminar la relación – tomo aire – y segunda – subió otro de sus perfectos dedos – pasar por alto las cosas y olvidarlo

Naruto se sorprendió por la sinceridad de esa mujer, pero era cierto

-se te olvida que siempre hay una tercera – dijo con una sonrisa amarga – fingir que nada paso y ser igual que él

-por favor, esas son patrañas – dijo molesta – no puedes ponerte en el mismo costal de harina querido, debes ser mejor, nunca igual o peor – dijo observando a sus trabajadores – no eres igual que él querido, pues tu aun lo amas – hizo una pausa – pero te diré algo, si escoges las primera, debes ser realmente valiente para no volver a caer – saco uno de sus largos cigarrillos de su mandil y lo encendió – porque vas a estar tentado a hacerlo – le dio una calada y exhalo el humo – y si lo haces significa que escoges la segunda – lo miro fijamente –  y debes ser mucho más valiente, porque no va a ser la primera ni la última vez que lo haga, cuando una persona engaña por primera vez se vuelve vicio, y puede prometer no volverlo  hacer, pero lo ara – apago el cigarrillo en el cenicero – así que si lo perdonas tienes que estar preparado y ser fuerte, porque recuperar la confianza que ha roto es un trabajo duro para los dos, el por lograr conseguir tu perdón, y tú para lograr perdonarlo – le dio una caricia en la mejilla y se alejo

Naruto siguió sentado, no toco su plato de nuevo, solo lo dejo ahí, pensando, analizando las cosas que ella le había dicho, recordó todas las cosas que hasta ese momento había vivido con Sasuke, y eso hizo que le doliera más su traición, se puso de pie, se acercó a la caja y pago sin esperar el cambio

-gracias – murmuro – Mei

Volvió a tomar su moto, y antes de encenderla sintió como vibraba su teléfono, lo cogió pero no contesto, observo la foto de Sasuke, con una ligera mueca que trataba de ser una sonrisa, y dejo que sonara, una, dos, tres veces, antes de la cuarta y de que su coraje flaqueara apago el dichoso aparato, era justo que él sufriera un poquito, se montó en la moto y arranco, se perdió por la ciudad, descubriendo lugares nuevos, recorriendo lugares que nunca había recorrido con Sasuke, fue cuando se acordó, del lugar que mayor recuerdos le traía de este, dudo un poco, seguramente era el lugar donde principalmente lo buscaría… aunque quien sabe, bien dicen que lo más obvio a veces pasa desapercibido

Llego después de diez, seguía igual, se sentó en aquella banca y espero…

 

Sasuke recorrió de arriba abajo los lugares que generalmente eran típicos del rubio, había faltado al trabajo, no había comido en Ichiruka, incluso fue a casa de sus padres y cuñados, y nada, estaba desesperado, y cada vez más alterado, fue entonces que los vio, una pareja de preparatorianos caminando de la mano, y en lo más profundo de su mente hubo un “click” avanzo por las calles de la ciudad hasta que llego

Primero encontró la moto, y supo que estaba en el lugar correcto, bajo del auto y corrió buscándolo, lo hayo sentado en la que era su banca, la banca que tenía grabada la fecha en la que habían iniciado su relación

Naruto alzo la vista al escuchar sus pasos, los ojos que siempre parecían un estanque cristalino, ahora eran un par de mar tormentoso, estaban oscurecidos, aminoro su paso y se acercó hasta ponerse enfrente de él

-Hola – dijo Sasuke, Naruto no contesto, solo agacho su mirada, tenía las palabras atoradas, no sabía que decir, intento tocarlo, pero incluso eso le daba miedo, tenía miedo a su rechazo, se quedaron en completo silencio, era obvio que él tenía que dar el primer paso, pero carajo, como le costaba trabajo, abría y cerraba la boca más de una vez, fue cuando observo que Naruto suspiraba y comenzaba a negar con la cabeza, entendió que si no hablaba en ese momento, lo perdería, lo perdería para siempre – perdóname

¿era esa su disculpa? Que patético sonaba, él lo sabía, pero había logrado que Naruto alzara la vista un momento, se arrodillo para quedar a su altura, tenía una oportunidad

-Naruto – tomo su mentón para girarlo en su dirección, haciendo que sus ojos chocaran – perdóname – insistió, vio la duda en sus ojos, Naruto se estaba debatiendo entre perdonarlo u olvidarlo, veía que si existía esa oportunidad – te amo Naruto, por favor perdóname

Entonces lo vio, Naruto se rompió, sus lágrimas comenzaron a caer, se acercó buscando sus labios, le dio un pequeño beso, apenas rozando sus labios, esperando la contestación de Naruto, todo dependía de eso

Y Naruto contesto… lo beso de regreso… el beso fue más desesperado, ambos lo necesitaban… lo necesitaban para poder seguir avanzando, pues Naruto lo había perdonado

 

Suspiro, las cosas después de eso, habían cambiado, habían recuperado la chispa… aunque fue por poco tiempo, pues después de eso, Naruto se volvió excesivamente celoso, al extremo de revisar sus cosas, Sasuke lo sabía y más de una vez pelearon por ello, Naruto ya no confiaba en él.

Y no lo culpaba, pues Sasuke lo volvió a hacer, no una, sino varias veces, llego un momento en el que incluso a Naruto ya le daba igual, se había acostumbrado a los engaños de Sasuke.

Y Sasuke se dio cuenta de que empezaba a perder a Naruto, ya no reclamaba, ya no lo esperaba despierto, si tenían relaciones Naruto solo esperaba que Sasuke terminara.

Naruto se fue apagando, ya no tenía ganas de hacer nada, ni de pelear con Sasuke por alguna llamada desconocida, ni porque se ausentara fines de semana, ya no sonreía, y su familia lo fue notando, incluso con ellos Naruto se portaba arisco, y Sasuke, bueno él solo le importaba que Naruto siguiera a su lado…

Escucho la puerta una vez más, suspiro y se puso de pie, la abrió y le regalo una pequeña sonrisa a su madre, la tomo de la mano y juntos caminaron hacia el comedor, estaban todos, su familia, Shikamaru, Temari, Hinata, Kiba, Suigetsu y Karin, acompaño a su madre a su lugar y se colocó enfrente de todos

-Estoy enfermo – dijo con voz seria – tuve envenenamiento de la sangre y tengo un problema muy serio de trastornos mentales – la habitación quedo en silencio

Notas finales:

Besitos


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).