Cap.5
Y allí se encontraba el peli rosa, en cuclillas frente a la tumba del que fue su mejor amigo, con traje blanco puesto y un ramo de nubes y lirios blancos que dejo con una triste sonrisa en aquella tumba, acariciando el nombre allí marcado con la yema de sus dedos...
-...no sabes cuanto me gustaria que estuvieras aqui...compartiendo esta alegria conmigo...por fin hoy...despues de tanto tiempo...me caso con Eiri...jeje...si, ahora le llamo por su nombre...aun no me acostumbro pero me siento feliz, sabes... Ayaka-san esta embarazada, tendras un hijo...apuesto a que hubieras sido un magnifico padre...te extraño tanto, no te imaginas la falta que me haces...Hiro
-Shuichi, tenemos que irnos ya, o llegaremos tarde- decía fujisaki con un traje negro, muy elegante
-si, ya voy...siempre vas a tener un lugar en mi corazón...eso nunca lo dudes...vendre luego Hiro- al momento que se levantaba del lugar y daba un gran suspiro, caminando hacia la salida y llegando al auto que lo iba a llevar
-Seguchi me acaba de llamar, ya están todos en la iglesia, te están esperando Shindou-kun- ese era Sakano con su teléfono en mano y un poco de desesperación en su rostro, algo ya muy natural en el
-si, es solo que...tenia que venir antes- al momento que les daba una sonrisa llena de paz
-es natural, pero ya vamonos pink boy, no querrás llegar tarde a tu propia boda- ese era K quien esperaba recargado en la limosina blanca que el escritor había mandado pedir para el pelirrosa, quería que ese día lo recordaba de por vida, con mucha alegría
-claro- mientras subía a la limosina
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Mientras tanto en la iglesia ya estaban todos los invitados esperando fuera de la iglesia la llegada de Shuichi, quien no aparecía por ningún lado, comenzando a alterar al rubio escritor...
-no llegan...- decía Eiri en un suspiro mirando su reloj por centesima vez en 5 minutos
-¿y si se arrepintió? Yo lo haría- decía su "simpático" hermano menor a un lado de él, oh si, definitivamente esa era una gran manera de tranquilizarlo
-no seas un idiota, tatsuha, ¡no ves como esta Eiri!- regaño su hermana, Mika
-vamos hermanito, el te ama con locura, seguro que se le atraveso alguna manifestación- el azabache con total tranquilidad dandole un par de palmadas en la espalda al rubio que solo le miraba con irritación
-...-
-K. Dice que no tardan en llegar, parece que Shindou decidio hacer una breve parada- ese era Touma que se acababa de acercar al ver la expresión del escritor
-¿en...donde?- el escritor viendo a los ojos del dueño de NG
-el cementerio- con total calma, viendo como el Eiri volteaba su mirada empezando a buscar uno de sus cigarrillos en su traje
-....-
-claro, eso lo explica todo, Hiroshi era muy especial para el, seguro que le gustaría compartir este dia con el- esa era Mika que de alguna manera comprendía el sentimiento del pelirosa
-si te ve con esa cara Shu-chan se asustara~- ese era Ryuichi que acababa de llegar con kumagoro en mano y una sonrisa
-¡Ryuichi!- regaño Touma al dueño del peluche rosado
-no...dejalo Touma...tiene razón, no esta bien que este así en este día tan especial- dando un gran suspiro para después intentar calmarse, el castaño tenia razón, no podía estar con esa expresión en ese un día tan importante y especial
-¿para ti? ¿O para el?- el azabache que se había quedado apartado de la conversación gracias a su hermana
-para ambos...- termino por decir el escritor con una hermosa sonrisa en sus labios
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La boda había sido todo un éxito, el pelirosa no había parado de sonreír en todo momento aquello le parecía simplemente un sueño, cosa que Eiri se aseguro en recordarle que era verdad, risas, comentarios burlones, recuerdos de todo tipo, lagrimas por larte de las chicas, periodistas queriendo ingresar al "gran evento del siglo" fangirls tanto de Bad luck como del escritor, haciendo todo tipo de cosas con tal de tener una foto de esos dos juntos. Aquel día fue uno de los mas locos en la vida de esos dos y que sin duda recordarían de por vida.
Después de ello, apenas y había tenido tiempo para despedirse y es que debían de tomar un vuelo que los llevaría a su luna de miel, Eiri se había encargado de que aquello fuera una gira entre muchos lugares de Europa, tomando fotos, girmando autógrafos y pasando noches llenas de pasión, dos semanas después ya estaban de vuelta en Japón, para continuar con sus responsabilidades y su vida juntos siendo un matrimonio lleno de amor y felicidad.
********6 años después********
-se te ve realmente feliz, Shuichi- decía cierto castaño a un lado del pelirosa
-lo soy, Ryuichi, muy feliz, creo que no podria desear nada mas- no sabia como el castaño había dado con el, pero le alegraba haberlo visto y estar hablando un poco con el, y su actitud madura que rara vez salía
-me alegra mucho escuchar eso, Touma me dijo que tiene muchos proyectos para Bad luck- decía mirando a un pequeño niño de 5 años que corría persiguiendo a una mariposa
-si, estamos planeando una gira para finales de año, pero todavía hace falta ver los detalles, aparte quiero pasar año nuevo junto a mis amores- con una bella sonrisa viendo al pequeño saludarlos con su manita y después seguir persiguiendo aquella mariposa
-lo entiendo, bueno, tengo que irme, un gusto hablar contigo Shuichi, hasta luego Hiro- al tiempo que gritaba al pequeño niño con una sonrisa
-adiós, tio Ryuichi- decía el pequeño de cabello pelirosa, despidiéndose con su manita
-lo mismo digo Ryuichi...-con una sonrisa mientras le veía irse, después de dejar un ramo de lirios y risas blancas en la tumba frente el, llamo a su pequeño con cariño- ¡¡Hiro!! ¡¡Hiroki!! Ya es hora de irnos, vamos- con alegria mientras tomaba la mano del pequeño niño que antes de irse volteo a ver hacia la tumba que habían ido a visitar como cada año, en esa misma fecha
-si, mamá, adiós tío Hiro- con una linda sonrisa mientras movía su manita en forma de despedida
-hasta luego..Hiro..- en apenas un susurro acompañado de una sonrisa
-hasta luego Shuichi...- fue lo que escucho el pelirosa al tiempo que sentía como si alguien le hubiera abrazado con cariño por la espalda, cosa que le saco una sonrisa
-¡papá! -grito el pequeño al momento que salían del cementerio soltandose de su mamá para ir al encuentro de Eiri, el cual le cargo al instante
-sabia que los encontraría aquí, que les parece si vamos a comer a un restaurante- decía con el pequeño en brazos, recibiendo a su querido esposo pelirosado con un beso
- de verdad, Eiri, eso no es necesario- tomando la mano de su esposo, al tiempo que empezaban a caminar con tranquilidad
-¡¡si!! ¡¡yo quiero postre!!- alzando sus manitas al aire con emoción
-ya oíste a Hiroki, anda, vamos, Shuichi- tratando de convencer al pelirosa el cual termino cediendo a la petición de sus dos grandes amores
-esta bien, pero primero vas a comer vegetales- mirando al pequeño que al momento de oir la palabra vegetales hizo un gesto de desagrado
-iu~~ no me gustan los vegetales- abrazando a su padre por el cuello, recargando su cabeza en el hombro contrario al lado donde iba Shuichi
-los comerás, si es que quieres postre- continuo el cantante a lo que el escritor soltó una pequeña risa, porque sabia que aquello también tuvo que usarlo alguna vez para que shuichi comiera sus vegetales
-esta bien~~- el pequeño resignadamente, sabia que el postre valdría muy bien la pena
-¿Shuichi...eres feliz?- tomando con fuerza la mano del cantante el cual le miro extrañado
-muy...muy feliz, Eiri ¿por que?- con intriga
-por nada en especial.-suspiro-...gracias por haber entrado en mi vida y no alejarte, por haberme dado tanta felicidad en estos años...por haberme dado un hermosa familia...es mas...de lo que hubiera podido pedir..-mirando con amor a su amado pelirosa
-no agradezcas...te amo..Eiri- deteniéndose un momento para poder dar un leve beso al escritor, y evitar despertar al pequeño que se había dormido
-y yo te amo a ti...Shuichi-
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Fin. <3