IDEAS ESTUPIDAS
Los gemelos se recuperaron rápido, Milo aun seguía algo adolorido del cuerpo, los golpes fueron demasiado fuertes, y la verdad nosotros no por nada ya teníamos cierta cantidad de años encima y nuestra resistencia ya no era la misma.
-No sé porque me quede en este lugar, hubiese sido mejor ir y venir. –Me paseaba por todas partes en ese gran edificio. –Este lugar aun así es bastante tranquilo, aquí no he tenido ningún problema o interrupción al leer, pero me comienzo a aburrir… que digo, estoy hablando solo…
-Acuario.
-Pandora. –Esa chica es bastante extraña, me dan escalofríos en ocasiones pasara a su lado, pero es bastante amable, a comparación de cómo se comporto durante la guerra.
-¿Cómo se encuentra Milo?
-A… Milo esta… -Por su nombre, tantas libertades les daría Milo a los espectros, todos me preguntaban por él cada que me ven, hasta los de más bajo rango. –El está mejor, pero aun no puede salir de la cama.
-Espero que se recupere, díselo por mí por favor.
-Claro… a señorita Pandora…
-¿Si?... Pero solo Pandora por favor.
-¿Milo significa algo para ustedes?
-Milo es muy amable, no veo algo malo en preocuparse por él, cuando estuvo aquí era muy atento, y jamás vi al señor Hades como cuando estaba con él charlando.
-De qué forma…
-Bueno el señor Hades generalmente no es muy accesible, pero con Milo siempre tenía tiempo para cualquier cosa, fuera la hora que fuese si Milo necesitaba algo el dejaba sus deberes y lo atendía o charlaba con él.
-Comprendo.
-Tengo tareas que hacer, con tu permiso.
-Adelante…
Volví a la habitación de Milo, este estaba durmiendo. No podía creer lo que sentía en ese momento, me sentía celoso de Hades, Milo me aseguraba que no eran más que amigos, pero ambos son padres de los gemelos, quizá si ese día no hubiese tratado de esa forma a Milo; como un juguete; el no habría quedado tan confundido.
-Camus… ¿no has dormido verdad?
-Estoy bien, descanse hace un momento.
-Ven y duerme un rato aquí conmigo… ¿ocurre algo?
-No es nada Milo, todo bien.
-… No te creo, sabes que puedo ver con claridad cuando algo te está molestando, una minúscula señal aparece en tus ojos.
-Quisiera hablar sobre algo contigo Milo, es sobre… sobre Hades.
-Creí que ya habías preguntado todo, sabes que solo es amistad.
-Es solo que Pandora menciono que ustedes se llevaban muy bien, y eso no lo mencionaste nunca.
-… -Milo me observaba con esos ojos picaros, es señal de que algo pasa por su cabeza alocada. –Ya entiendo, así que Camus esta celoso de Hades.
-No es eso Milo…
-Camus… ¡Ay!… pero no me aprietes aun me duele el cuerpo…
-Eso te pasa por decir cosas asi, lo que quiero saber es como eran las cosas, bien, que me digas todo, quiero que seas honesto bicho.
-Bueno Hades era muy amable conmigo después de todo lo ocurrido, y yo no tenía porque comportarme de forma grosera.
-Pandora me dijo que el interrumpía todo por ti…
-Eso… se debe a que necesitaba charlar y el accedía, además…
-¿Qué?
-Lo siento Camus eso no te lo puedo decir… ¿Camus?...
-No quieres morir de risa verdad Milo, si no me dices te are cosquillas hasta que ya no puedas mas. –Le aria cosquillas funcionaba muy bien.
-Espera Camus, es solo que se trata de algo muy… jajajaja… es algo my… jajajajaja…. Camus… se supone que yo soy el bromista… jajajaja… Camus… ¡Camus es algo muy personal y serio, no te lo puedo decir!... ha… -Pare la tortura, Milo no dijo nada mas, con ello me constaba que era algo muy serio. –Es solo que… se trata de algo que no se si debe decir.
-Sabes que no lo diré a nadie más.
-Sí, pero… Camus te lo diré si prometes guardar silencio y no mencionarlo a nadie jamás.
-Veo que de verdad es serio, tienes mi palabra de caballero.
-Camus…
-De caballero y de persona común.
-Está bien… Camus sucede que cuando viene a quedarme aquí, Hades se porto muy amable conmigo, y si necesitaba hablar con alguien me escuchaba, en una de las charlas, yo le hice una pregunta… como quería saber algo de él, le pregunte porque era amable conmigo.
-Y que dijo…
-Me conto que me comprendía a la perfección, ya que a él lo abandonó Perséfone… y por eso me escuchaba y deba consejo si lo necesitaba.
-Perséfone… es verdad jamás la he visto por aquí, se supone es su esposa.
-Era. –Mira a Milo sorprendido, estaba al tanto de situaciones que afectaban los dioses. –Perséfone parece ser que se aburrió y abandono a Hades, solo no volvió nunca.
-Pero había un trato, por eso Perséfone no se podía ir de aquí siempre, solo podía salir la mitad del año.
-Sí, pero me dijo que Perséfone no volvió, la estuvo esperando horas, días, semanas, hasta se fue a buscarla, y resulto que ella no pensaba volver.
-Pero se suponía no podía romper el trato.
-Eso se suponía pero Hades la dejo irse, me dijo que si Perséfone ya no lo quería ya no la ocupaba para nada. –Con que era eso, imposible de creer. –Me sentía extraño de escuchar todo eso, y yo darle consejo a un Dios… solo soy un humano, pero me escuchaba y yo a él Camus, entiendes ahora porque decía era privado.
-Lo comprendo Mirlo… pero tú en algún momento…
-No, por supuesto que no, solo es amistad… Camus en verdad crees que Hades podría hacerme cambiar de opinión, es un Dios, pero ni él ni ningún otro me podría ofrecer lo que tú me das, no me importa ser inmortal, me importa pasar la eternidad con alguien que tenga sentimientos sinceros conmigo.
-Milo…
Claro estaba para mí que cuando Milo dice algo es sincero, es un escorpión muy sincero aun con todas sus locuras y demás que lo caracterizan. Pero no me quede muy tranquilo, tenía razón, solo eran celos, pero sin fundamentos, no podía reclamar nada, si por tanto tiempo rechace a Milo, el que fuera “amigo” de Hades me causaba cierta incomodidad, aun asi después despejaría dudas.
-¿Cómo te sientes hoy Milo?
-Mejor Pandora, gracias por preguntar.
-Supongo que pronto podrás irte…
-Justamente te quería preguntar algo Pandora… ¿Cuándo me dejara salir de aquí Hades?
-Dijo que hasta que te restablezcas del todo.
-Pero ya me siento mucho mejor, quisiera ir al santuario ya, y ver a mis hijos también, no los he visto.
-Ellos están en los Elíseos, como sabes no está permitido pasar.
-Eso lo tengo claro, aun asi quisiera verlo.
-Se lo diré al señor Hades para que se los comunique.
-Gracias Pandora.
-Acuario se marcho al santuario, me pidió te lo dijera, regresara después de ir por algunas cosas que necesitaba.
Camus se había puesto extraño, tal vez solo se encontraba preocupado, dijo que casi moría por la golpiza, además sus dudas, no es alguien que dude muy a menudo. Lo esperaría, mientras tanto quería ver a mis hijos, yo no tengo permitido entrar a los Elíseos es muy obvio, sigo vivo, además de que no es lugar para mi, ya no lo merezco.
-Milo.
-Adelante Hades…
-Vine para llevarte con los niños, ellos también querían verte, están esperándote.
-¿En dónde?
-En mi estudio.
Me podría levantar de esa cama por fin, Hades solo me ayudo a andar un momento después pude seguir yo solo, pero no sabía a dónde me estaba guiando. Esperaba que Camus al volver no se preocupara por no encontrarme en la cama, probablemente me regañaría al verme, pero estaría bien.