Eran las 7 de la mañana y Sasuke se habia levantado para darse una ducha antes de ir al Instituto. Al terminar, pasó por su cuarto en el que aun se encontraba durmiendo el rubio y pensó que seguramente seguiria durmiendo asique dió unos cuantos golpes en la puerta haciendo que Naruto se despertara y diera un salto callendose de la cama.
- ¿Te has caido? - Pregunto Sasuke al oir como algo se estrellaba contra el suelo.
- Noo.. - Decia Naruto mientras intentaba ponerse en pie, ya que habia aterrizado con la cabeza y habia quedado un poco atontado.
- Date prisa en arreglarte. Haré que por una vez llegues puntual al Instituto. - Sasuke se alejó de la puerta y fue al comedor a esperar a que sus sirvientas le trajeran el desayuno mientras que Naruto aun seguia dolorido en el cuarto del pelinegro. Se levantó y pensó en lo que le habia dicho Sasuke.. ''Date prisa en arreglarte..''. Naruto miró a su al rededor. ¿Con qué se suponia que se tenia que arreglar? No estaba en su casa y mucho menos tenia ropa limpia allí. Tras pensarlo detenidamente decidió ponerse algo de la ropa del pelinegro, a pesar de que no le agradara mucho la idea. Rebuscó en sus enormes armarios, buscando algo que no fuera muy llamativo. Tras un rato de busqueda encontró una camisa negra y unos vaqueros ajustados y se los puso. Tambien cojió una chaqueta de color azul marino y se la puso. La chaqueta olia a Sasuke.. Se detubo unos instantes para inalar el olor del pelinegro que probenía de la chaqueta. De pronto, la puerta se abrió de golpe.
- Uhm - Dijo Sasuke mirando al rubio con una mirada de decepcion.
- ¿Uhm? ¿Esa es una manera normal de entrar en un cuarto? ¡Casi me matas de un susto! - Dijo Naruto con una mirada de miedo mientras que se agarraba la camisa intentando que su corazon se tranquilizara.
- Venia a ver si seguias vivo. Vamos - Sasuke se dió al vuelta y comenzo a caminar.
- ¿A don-de..? - Naruto no obtubo respuesta asique dedició hacer caso al pelinegro y lo siguió unos cuantos pasos alejado de este. Tras recorrer el inmenso pasillo llegaron a una sala muy glamurosa iluminada por la luz que entraba desde una enorme ventana. La sala estaba adornada con una decoracion moderna, con algunos cuadros de retrato, cullos apagados rostros parecian seguir con la mirada a los que se encontraban en la sala. Esta tambien estaba adornada con una pequeña mesa de cristal rodeada por unos, apatentemente, muy cómodos sillones en los cuales habia una persona vestida muy elegante, con el pelo negro y largo, leyendo el periodico mientras daba unos pequeños sorbos a una taza de café. Naruto se limitó a hacer una pequeña reverencia con la cabeza. Del techo colgaba una increible lámpara de araña la cual sonaba al chocar unos cristales con otros por la brisa que entraba por el ventanal. Naruto contemplaba aquel lugar asombrado, mientras que Sasuke actuaba con normalidad mientras cojia un bollo que habia en la mesa y se lo lanzaba a la cabeza del rubio.
- Cometelo por el camino - Dijo Sasuke segundos antes de salir de allí por una inmensa puerta con adornos tallados en la madera, la cual daba al exterior de la mansion.
- ¡He-Hey! ¡Esperame Teme! - Dijo Naruto mientras seguía al pelinegro corriendo, a la vez que Itachi miraba a los dos niños alejarse.
- ¿Ese es? - Dijo un señor que entraba por la puerta.
- Si. ¿Que tengo que firmar? - Decia Itachi mientras deja a un lado el café y el periodico. Y el misterioso ser ponia en la mesa unos cuantos papeles.
- Firme esto - El señor se sento en el sillón que se encontraba frente al Uchiha. - ¿Y por que quieres a ese chico como criado?
- Se acaba de quedar totalmente huerfano y digamos que.. Es un regalo de cumpleaños para Sasuke - Dijo Itachi zanjando la conversacion mientras continuaba firmando papeles.
Por otra parte, Sasuke y Naruto ya estaban a medio camino de la escuela. El rubio se habia comido el bollo que le habia dado Sasuke, pero seguia con mucha hambre y no paraba de frotarse la barriga pensando en un buen plato de ramen. De pronto, un coche se paró al lado del joven Uchiha y bajo la ventanilla para mejor comunicacion.
- Joven Señor, Déjenos que le llevemos el trayecto que queda hasta la escuela. - Dijo un hombre vestido de negro y con gafas oscuras.
- Puedo ir yo solo. Larguense. - Decia Sasuke sin darle mucha importancia a aquellas personas.
- Pero Señor..
- He dicho que se lárguen. - Por fin el pelinegro miró a los del coche con enfado y estos no tubieron otra que acatar las ordenes de Sasuke asique aceleraron y pronto desaparecieron. - Dobe.
- No me llames asi - Dijo Naruto algo enfadado y confundido por lo que acababa de pasar.
- Yo entraré primero. No quiero que nos vean entrar juntos.
- ¿Eh? Y-Yo tampoco quiero que nos vean juntos..
- Bien - Sasuke continuó caminando dejando atrás al rubio.
- //¿Que pensabas? Que te iva a extender la mano como en los viejos tiempos?// - Pensaba el rubio para si mismo mientras que se apollaba en la pared. - //¡Baaka!// - Naruto se dió un golpe en la cabeza el mismo.
- ¿Por que te pegas? - Dijo una voz femenina que le hablaba.
- ¿Sakura? - Dijo el rubio reconociendo la voz, aun con los ojos cerrados.
- ¡Despierta! ¿Acaso quieres llegar tarde a clase otra vez? - Sakura le dió la vuelta a Naruto y lo empujó para que caminara.
Al cabo de un rato llegaron al insti y en el patio central estaban todos sus amigos a los cuales saludaron haciendo un gran escandalo. Por otra parte, bajo un arbol se encontraba Sasuke con sus amigos mientras que leía un libro. Al cabo de un momento sonó el timbre que indicaba que las clases ivan a comenzar y todos los alumnos se dirigieron a sus respectivas clases. Mientras que subian las escaleras, como habian muchas personas empujando para llegar cuanto antes al colegio, Naruto, se chocó con Sasuke el cual solo dijo: Dobe. Y Naruto se limitó a acerle una mueca. Llegaron a su clase y se sentaron en sus pupitres y al cabo de un momento el profesor comenzó la clase. Al llegar la hora del recreo todos abandonaron el aula, a excepcion de Sasuke que se quedó mirando por la ventana. Naruto y los demás se pusieron a jugar a la pelota en el patio mientras que Sasuke los observaba mientras que se comia una manzana, no obstante, al cabo de un momento Naruto le dió una fuerte pata al balón rompiendo asi una ventana. Enseguida los profesores acudieron al patio y comenzaron a echarle la bronca y , como no, castigando al rubio. Enseguida comenzaron las clases y al llegar la hora del almuerzo todos avandonaron la clase. Naruto se dirigió a la cafeteria ya que tenia que trabajar y al llegar a esta vió a su jefe hablando por telefono sin percatarse de que allí se encontraba Naruto.
- P-Pero.. Yo no puedo hacer eso. El necesita el trabajo... S-Si.. Lo entiendo. Lo haré. Adios. - Naruto tocó en la puerta para hacer notar su presencia.- ¡Ah! N-Naruto - Exclamó el señor poniendo cara como si acabara de ver a un fantasma.
- ¿Pasa algo? - Preguntó el rubio extrañado por la actitud de su jefe.
- No. Bueno si. La cuestion es..
- ¿Si~?
- No puedes seguir trabajando aqui. - Naruto se quedó en estado de shock. De pronto se puso palido y sus ojos casi se salen de sus orbitas.. Nesitaba ese trabajo. Tiene que pagar la escuela y la casa en la que se aloja.. Y ahora más que nunca ya que lo tendria que pagar el todo.
- Pero.. Pero ¿Por que? ¿E-Es por lo de ayer? Lo siento mucho, muchisimo. No volvera a pasar. Pero porfavor, no me despida. - Suplicó Naruto.
- Lo siento. Ya esta echo. - El señor se dió la vuelta y se metió en la cocina para luego ponerse a cocinar. Naruto salió de bar.. No tenia nada más que hacer allí asique se dirigió al patio y se sentó bajo la sombra de un arbol. Revisó su cartera en busca de dinero para poder comprar algo de comida pero lo unico que habia era un tiquet para dos masajes gratis, un boton y lo que parecia un preservativo '' Nunca se sabe cuando va a hacer falta'' solia decirle Jiraya. Al ver que no tenia dinero decidió echar una siesta para asi almenos no pensar en el ambre que tenia. Al cabo de 2 horas volvió a sonar el timbre pero Naruto no lo oyó asique siguió durmiendo y a pesar de que algunas personas lo vieron, a nadie se le ocurrio despertarlo. Pasaron las dos horas y sono el timbre que significaba ''Libertad'' para muchos haciendo que una marabunta de personas saliera corriendo de la instalacion.
- ¡Hey! ¡Naruto! - Dijo Kiba sacudiendo al rubio para que despertara.
- Sakura.. Dame un besito - Decia el rubio en sueños mientras que hacia morritos. Sakura, al oir esto, le dió una patada en la cara haciendo que se despertara de golpe.
- Auch.. O-Oye.. ¿Por que estais con las mochilas? - Preguntó el rubio confundido al ver que los alumnos se ivan ya.
- Te has perdido las dos ultimas clases listillo - Dijo una rubia de ojos azules se apollaba en el hombro de Sai muy posesivamente.
- ¿QUE? ¿ENSERIO? Mierda.. - Gritó el rubio poniendose en pie de un salto.
- Bueno.. Nos vemos - Dijeron varios.
- ¿Eh? ¿No me esperais?
- Estas castigado, ¿recuerdas? - Dijo Rock Lee que ya estaba fuera del recinto. - ¡Hasta Mañana!
- ¿Castigado? - Naruto habia dormido demasiado y aun no estaba muy centrado en la realidad. - ¡A si! La pelota.. - Dijo al fin dandose cuenta del motivo de su castigo.
- Naruto, ¿por que no has asistido a las dos ultimas clases? - Dijo el profesor Kakashi que acababa de aparecer a las espaldas de Naruto, dandole un gran susto a este.
- Ah~ .. Kakashi-sensei. Me-Me deje dormir - Se escusó el rubio mientras que sonrreia y se pasaba la mano por detras de la cabeza.
- Bueno. Te recomiendo que le digas a tus compañeros que te pasen la tarea. - Decia el peliblanco mientras que seguia caminado hacia la salida. - Y Naruto. Lo siento mucho por lo de Jiraya. - Continuó diciendo el peliblanco.
- Ah.. Si.
- ¿Estarás bien?
- C-Claro. No se preocupe sempai.
- Si necesitas algo. Dimelo.
- Lo haré. - Kakashi continuó caminando y desapareció al dar la vuelta por una calle mientras que Naruto se habia quedado pensando en Jiraya y de nuevo estaba muy triste, pero se dirigió a la sala de ciencias ya que su castigo era limpiar los recipientes del laboratorio. Al llegar a este comenzó a limpiar unos bols que tenian un extraño liquido verde en su interior. Ya casi habia acabado hasta que un portazo le hizo tirar un recipiente al suelo haciendose trizas.
- Que torpe eres - Dijo Sasuke mientras se acercaba lentamente a donde se encontraba el rubio
- ¡E-Es por tu culpa! - Gritó el rubio mientras que se agachaba a recojer algunos cristales. - ¿A-A que has venido?
- A recojerte.
- ¿R-Recojerme?
- Esacto. Tienes que venir a mi casa.
- ¿Y si no quiero? ¡A-auch! - Se quejó el rubio al cortarse con un pequeño cristal. Sasuke cogió la mano lastimana y se introdujo el dedo indice en su boca para luego chupar la sangre que no paraba de salir de la herida del rubio. Rapidamente corto un cacho de camisa y enrrolló el dedo del rubio en este.
- Procura tener más cuidado. No quiero tener que volver a ir al Hospital.
- B-Baka - Dijo Naruto agarrandose el dedo vendado a la vez que se ponia rojo.
- ¿Ya has acabado?
- Si.
- Pues vamos - Sasuke se levantó y se dirigió a la puerta.
- Ya te dije que no pienso ir contigo.
- ¿Es que tengo que dejarte inconsciente para llevarte? Por que lo haré sin pensarlo dos veces.
- Tu no tienes poder sobre mi, teme.
- Eso no es asi esactamente..
- ¿Q-Que quieres decir?
- Ven y lo averiguaras - Sasuke salió por la puerta y comenzo a caminar mientras que Naruto seguia en el suelo pensando en que habia querido decir. - ¡DATE PRISA! - Gritó Sasuke a lo lejos haciendo que Naruto se levantara desganado y le siguiera. Al salir del edificio, un coche de color azul marino los esperaba y ambos se subieron.
Tardaron un rato en llegar a la casa de los Uchiha, tanto que comenzó a atardecer. Al entrar a la mansion unas cuantas personas estaban esperandolos, en fila, y hicieron una reverencia. Por otra parte, en el sillon se encontraba Itachi que les pidió que se sentaran.
- ¿Como estais? - Dijo el mayor intentando ser amistoso con ambos.
- Valla al grano, por favor. Quiero irme a casa cuanto antes. - Dijo el rubio que se sentia muy nervioso e intimidado en esa enorme casa. Habia demasiado silencio.
- A casa.. La cuestion es, Naruto, que no vas a poder volver a casa. - Continuó diciendo Itachi, ya no tan amistoso.
- ¿Q-Que? ¿Por que? - Naruto no entendia nada.. ¿Que estaba pasando allí?
- Veras Jiraya, el cual era tu tutor legal, tenia una gran deuda con nuestra empresa.
- ¿D-Deuda? ¿De cuanto?
- 80.000.000
- ¡¿ 80.000.000 ?! - Gritó en rubio mientras que Sasuke se levantaba y se dirigia a su cuarto.
- Tenemos que recuperar ese dinero, y el que él esté muerto no nos va a detener.
- ¿Q-Que quieren de mi..? ¿Me van a matar?
- ¿Matar? Jajaja. No, Naruto. Hemos embargado tu casa y sus muebles. Pero desgraciadamente, todo esto solo costaba 12.983. Deberiamos matarte, si. Pero me apiadaré de ti.
- ¿Que..?
- A partir de hoy viviras en esta casa. Comeras. Dormiras. Te asearas. Pero acambio de todo eso, tu trabajaras como criado. Y asi, cada mes te pagaré 500.000 y asi podrás ir pagando la deuda de Jiraya.
- ¿C-Criado?
- Esacto. Lavar, planchar, limpiar... ¿Lo haras?
- Y-Yo.. - Naruto no se lo podia creer. ¿Por que le pasaba esto a el justo ahora?.. - De acuerdo.. - Acabó accediendo el rubio con la cabeza agachada.
- Genial. Seras el criado personal de Sasuke. - Decia el mayor mientras que Sasuke se aproximaba a donde se encontraban ambos zanjando el trato
- ¡¿Q-Que?! - Dijo Naruto poniendose en pie.
- Y Naruto..
- ¿Ha-hai..?
- Si desovedeces aunque sea una sola y minuscula orden, seras despedido y necesitaré los 80.000.000 en dos horas. ¿He sido lo suficientemente claro?
- S-Si.. Señor.
- Esta bien - Dijo Itachi sonrriendo. - Me iré a la Oficina un rato. - Dijo el Uchiha antes de cojer las llaves del coche y salir por la puerta.
- Dobe. - Llamó el pelinegro, que aun se encontraba en la entrada de la sala.
- ¿S-Si, Señor? - Naruto intentó contener toda la rabia que tenia acumulada en ese momento. Deseaba llorar. Llorar y patear y golpear algo asta que sus propios huesos se quebrasen.
- Ven conmigo - Sasuke caminó a su cuarto y el rubio le siguió mucho pasos atras. Al entrar a este Sasuke le tiró la camisa a la cara. - Lavala.
- S-Si, señor - Dijo el rubio dandose la vuelta.
- Dobe.
- ¿S-Si..?
- ¿No estaras llorando de nuevo?
- Y-Yo.. No lloro - Sasuke se habia acercado a Naruto y lo giró. Estaba a punto de llorar.
- Eres un lloron.
- No quiero esto.. -Dijo el rubio casi susurrando.
- ¿Que?
- Y-Yo.. No quiero esto. - Naruto se dejó caer al suelo y se sentó en este.
- Está bien, la camisa puede esperar. - Dijo Sasuke mientras cerraba la puerta del cuarto y , tras poner un cojin al lado del rubio, se sentó en este. - No esperes palabras de cariño y consuelo de mi, Uzumaki.
- Eso ya lo sabia.. -
- Apollate en mi hombro.
- ¿Eh? Yo no pienso-..
- ¿Has olvidado lo que te dijo Itachi?- Naruto recordo las aterradoras palabras del pelinegro y se apollo un poco en el hombro del pelinegro.
Estubieron un rato asi hasta que se hizo completamente de noche y Sasuke le dijo al rubio que fuera a su nueva habitacion que se encontraba al lado de la de Sasuke, en la que estaban todas sus cosas. Naruto colocó la ropa en el armario y puso algunas cosas en el escritorio. Estaba cansado, por lo que decidió dormir y ya al dia siguiente lo organizaria. Por otra parte, Sasuke mandó a pedir algo de cenar y , tras comerselo en la cama, se acostó y pidió que lo fueran a recojer.
- Que descanse, Señor. - Dijo la criada mientras recojia la bandeja.
- Espera - Dijo Sasuke ya que se le habia ocurrido una idea.
- ¿Si?
- Tienes otro traje de esos ¿verdad? - Dijo Sasuke refiriendose a la vestimenta de la criada. Era un traje negro, con volantes y un delantal, con una diadema a juego y unos cuantes blancos.
- S-Si Señor, ¿por que lo dice? - Sasuke sonrrió diabolicamente y le pidió a la chica que le dejara el otro traje en la habitacion de al lado junto con una nota que escribió el pelinegro en un instante y se echó a dormir.
A la mañana siguiente el rubio se despertó a las 5:30 de la mañana por culpa de un despertador que no recordaba que estubiera alli y , tras varios intentos, consiguió apagarlo. Cuando se despertó lo suficiente, se dirigió a la puerta para buscar un baño y darse la ducha pero habia algo colgado en la puerta. Se acercó y lo miró. Era un traje de Maid con una nota que decia: ''A partir de hoy seras mi Criado, asique tendras que vestirte como tal asique esta sera tu nueva única vestimenta dentro de la Mansion. Es una orden ♥''. Naruto agarró el papel con fuerza, estrujandolo y pegó un fuerte grito: ¡¡ESTUPIDO TEME!!
Por otra parte, Sasuke oyó el grito y se limitó a mostrar una pequeña sonrrisa, satisfecho de su mandato...