POV Lay
Mi cabeza es un desastre. No sé qué hacer, que pensar, que decir. Todo es tan extraño que ya ni irreal es, parece una película barata de terror. Pero ¿Qué podía hacer?
Es decir, había visto el cambio en el color de sus ojos, había probado que “leía” la mente. Me había mostrado esos dientes raros que tenía.
Soy humano, y como tal siento miedo. No es algo que pueda controlar.
Cada vez que lo tengo cerca me aparto inconscientemente y los latidos del corazón golpean muy fuerte contra mi pecho. Wu Fan no estaba. Cuando entramos a la habitación temí por mi pobre vida y me mantuve apartado de él, contra uno de los ventanales.
Su mirada estaba apagada, estuvimos un rato en silencio hasta que de la nada se levantó y se fue, dejándome solo. Y yo no quería estar solo, solamente quería pensar un poco. Adaptarme de alguna manera a la situación, pero con él a mi lado.
Me tire sobre la cama mientras una que otra lagrima se deslizaba por mis mejillas. Estuve así un buen rato hasta que escuche la puerta abrirse, ya era de noche y no tenía idea de cuánto tiempo había pasado allí recostado, llorando.
-¿Wu Fan?- pregunte, se quedó quieto al instante. Todo estaba demasiado oscuro, solo podía notar su pecho subir y bajar al ritmo de su respiración. Baje de la cama hasta ponerme frente a él.
Sabía que le había dolido mi reacción y quería remediar la situación -¿Wu Fan?- volví a preguntar.
-..Mh- susurro. Alce mi brazo algo temeroso, tomando una de sus manos entre las mías. Estaba frio como siempre. Acaricie con mis dedos la palma de su mano, siguiendo el recorrido de sus venas que se perdían en las muñecas.
-Lo siento- respondí con la voz entrecortada -Y-yo tenía miedo y…- Me corto el discurso, poniendo uno de sus dedos sobre mis labios. -Está bien Yixing, yo entiendo- sentí lagrimas aglomerarse en mis ojos. Sin poder evitarlo me abracé a él, apretándolo por la cintura, transmitiéndole mi calor. No quería separarme de él, no quería perder la única cosa que había llegado a querer.
Sus fuertes brazos me hacían sentir seguro. Restregué mi mejilla contra su pecho oliendo su perfume, un suspiro escapo de mis labios sin que yo lo supiera. -¿Sigues teniendo miedo?- apoye la frente contra uno de sus hombros. -Si…- dije tímidamente -Pero si estás conmigo sé que voy a estar bien-
Pude escuchar la tenue risa que salió de sus labios. Me separe de él, yendo por el control remoto para prender las luces. Me senté en la cama, palmeando el colchón a mi costado para que me acompañara. Tenía muchas preguntas que hacer.
Sonrió de medio lado haciéndome caso -Dime…- Gire mi cuerpo hacia él, sentándome sobre el colchón cruzando mis piernas en pose de indio -¿Cuántos años tienes?- imito mi acción, asi que ahora lo tenía frente mí
-Bastantes…-
-¿Cuántos?- volví a preguntar, sonrió rascándose la nuca -Digamos que te llevo algún que otro siglo- abrí mis ojos a mas no poder ¿Enserio Vivian tanto? No tuve tiempo de preguntar otra cosa cuando por mi cabeza paso la idea de que yo iba a morir y el seguiría sin mí, además de que no envejecería ¿Por qué no envejecía, no?
-¿Qué piensas Yixing?- susurró tomando una de mis manos y entrelazando nuestros dedos. Negué con la cabeza -Vamos, dime prometo no reírme
-¿Qué va a pasarme cuando este viejo y feo?- No cumplió su promesa y lanzo una carcajada, sentí mis cejas fruncirse y retire la mano ofendido - No no, lo siento. Dame esa mano- decía mientras trataba de descruzar mis brazos. Negué con la cabeza empezando a reír.
Wu Fan se aclaró un poco la garganta para finalmente responder mi pregunta -Veras… Eres mi pareja- asentí no muy convencido "su" concepto de la palabra - Las parejas se vinculan entre ellas y bueno de alguna forma te vuelves como yo-
No tengo idea de que cara puse, pero el rubio volvió a reír o través, mordí mi labio inferior y tire fuerte para que soltara mi mano, pero no resulto. - No vas a chupar sangre Yixing, digamos que “vivirás” más - ¿Eso que significaba? ¿Qué iba vivir con él muchos siglos? ¿Cuándo nos moríamos?
-¿Cuándo vamos a morir?- pregunte dudoso, un suspiro salió de sus labios - Hasta que uno de los muera- fruncí las cejas, luego recordé eso de vinculación -¿Qué es vinculación?-
-Cuando tu pareja te acepta como tal, desde ese momento son uno y lo que le pase a uno le pasara al otro- Asentí medio ausente. Que tremendo lio era todo esto.
Seguimos hablando un rato más, hasta que empecé a bostezar y el rubio me obligo a ponerme el piyama para ir dormir. Me metí rápido en la cama esperando impaciente a que saliera del baño para poder seguir hablando.
-Wu Fan - pregunte una vez que se hubiera acomodado -¿Puedes poner los ojos del otro color?- frunció las cejas ante mi pedido - Es que me gusta. Como quedan. Con tu cara- hable todo entrecortado e inentendible. Pero es que ¡Era muy hermoso con ese color!
No podía apartar la mirada de esos ojos miel, me tenían como hipnotizado, con uno de mis dedos delinee el contorno de sus ojos, pequeña bolsas se producían allí. Estaba cansado y yo lo seguía molestando. Bese su frente y me acomode sobre su pecho para poder descansar yo también.
Un ruido en el pasillo me despertó, mire al rubio pero estaba completamente dormido con sus brazos alrededor de mi cintura. Como pude me deslice de su agarre y camine hasta la puerta.
Unos sollozos se escuchaban detrás de la puerta, y después un sonido como si alguien estuviera vomitando. De repente recordé que Luhan estaba enfermo y golpee la puerta -¿Luhan? ¿Estás bien? ¿Puedo pasar?- No me respondía, así que opte por entrar directamente.
-¡¡Por dios Luhan que te pasa!!- Lo grite muy fuerte, pero… Estaba muy mal. Su tono de piel estaba entre amarillo y verdoso y ardía de fiebre. Gracias a mi grito tenía a Wu Fan a mis espaldas que me ayudo a llevar al rubio a su habitación. Acariciaba la frente del mayor, compadeciéndolo - ¿Qué le pasa Fan? - pregunte. Me miro raro por cómo le llame pero rápidamente se dispuso a responderme.
-Yixing, Luhan esta así… porque va a tener un…. Eh…. ¿bebe?- Lo mire como si estuviera loco ¿Cómo un hombre va a tener un bebe, era completamente ilógico y era imposible que…. ¿Acaso algo de todo este lio tenía una pisca de realidad?
-Por eso hable con Chen, él trabaja en el hospital era para que reservara la sala - Mi mirada estaba puesta en el piso ¿Cómo iban a sacarle a ese bebe? DIOS, ¡Tenía algo creciendo en su pansa! Por eso tiene estos dolores.
- los dolores los va a tener todo el ciclo, por suerte es corto- ¿Iba a sufrir así todo este tiempo? Pobrecito
-¿Cuánto dura?- pregunte dudoso
- Algo así como tres meses-
Otra vez nos habíamos acostado después de dejar a Luhan cuando ya se sentía un poco mejor. Si yo estaba cansado no quería imaginarme como estaría Fan. Pase mi brazo por su estómago, dejando mi mano abierta reposar alli. Me gustaba tener contacto con el más alto.
-Yixing…- susurro, pero estaba muy dormido como para responderle así que solamente presione más mi mano, dándole a entender que lo escuchaba.
Estaba preparando el desayuno mientras miraba como JongIn prácticamente se dormía sobre las tostadas y por suerte Luhan estaba comiendo. Ahora ya no era el solo quien se tenía que mantener, tenía a alguien más a quien cuidar. El hecho me causaba escalofríos.
Por la puerta entre Wu Fan peleándose con los puños de la camisa, otra vez. ¿Qué nunca lo iba a poder hacer solo? ¿Toda su “vida” se la paso pidiéndole ayuda a los demás? Ahogue una risa dispuesto a ayudarlo.
- Dame - dije suavemente. Extendió sus brazos más cerca de mí. Con cuidado abotone la camisa, acariciando su mano antes de sepárame. Fan me sonrió y sentí que mis mejillas se coloreaban.
-¡Jongin! ¡Que acaso no entiendes! - grito de repente el rubio, pegándole en la cabeza al moreno. El otro casi escupe todo lo que estaba comiendo - No me hiciste caso y fuiste a verlo igual -
Kai mordió su labio inferior rodando sus ojos - ¡Encima lo has besado! Dios, deja de pensar esas cochinadas. ¡Eres insufrible!-
- Entonces no me leas - dando un golpe en la mesa el moreno se levantó y salió apresuradamente de la cocina. No entendía de qué estaban hablando así que interrogue a Fan alzando una de mis cejas. - Luego te explico - dijo lanzando un sonoro suspiro.
Miró la hora en su reloj, y se apresuró a tomar su saco. - Hoy no vienes al instituto Luhan - le dijo después de besar su cabeza tiernamente. Lucia como todo un padre, era tan extraño.
- Nos vemos - Dijo acercándose a mí y dejando un beso en mi mejilla. Pude sentir como se me subían los colores y sonreí inconscientemente.
POV Luhan
Me sentía tan mal. Lo único que quería era estar con Sehun, pero el menor estaba en el instituto y tendría que esperar para verlo. Levante la vista del desayuno justo en el instante en el que Wu Fan besaba a su pareja. Desvié la vista incomodo, si bien había sido en la mejilla, mirar a tu padre haciendo eso era incómodo.
Sí, yo consideraba al rubio mi padre y bien sabía que él me amaba como a un hijo. -Si necesitas algo por favor dímelo ¿Si?- asentí con la cabeza ante la ayuda de Yixing y me excuse yendo a mi habitación.
Frente al espejo, observe mi rostro. Se veía fatal, sin contar que el tono de mi piel era algo así como verde. Lleve una de mis manos hasta la remera subiéndola un poco, incline la cabeza mirando mi abdomen. Estaba plano y suave como el de los bebes humanos. ¿Cómo se volvería mi pansa? ¿Sería muy grande? ¿De qué sexo iba a ser? ¿Cómo íbamos a ponerle? Mordí mi labio inferior, de enserio que necesitaba a Sehun.
El teléfono vibro sobre la cama y me acosté en ella antes de leer de quien se trataba. Al parecer el rubio había escuchado mi llamado Hola Lulu ¿Cómo estas hoy? Mordí mi labio inferior. ¿Cómo se le diría? Apenas si ayer le había confesado lo que era.
Un poco mejor, tendré que hacer reposo Respondí rápidamente. Estuvimos hablando un rato más y quedamos en que vendría a casa por la tarde junto con Fan y Kai, de repente empecé a tener mucho sueño, así que acomode la almohada un poco mejor y me dispuse a descansar.
Podía sentir unos dedos acariciando mi pelo y paseándose por mi frente. Abrí los ojos con algo de pereza, la cabellera rubia de Sehun fue lo primero que vi, después le siguió su hermosa cara.
- Hola - susurro con una sonrisa mientras acariciaba mi mejilla. Le devolví la sonrisa y tome su muñeca tirándolo contra mí, dejándole un espacio para que se acostara a mi lado. Lo abracé por la cintura apretándolo contra mí.
Sus dedos jugaban con los pelos de mi nuca, mientras yo dibujaba figuras abstractas por sobre la remera en su abdomen. - ¿Cómo te fue? - pregunte apoyando la barbilla en su hombro, intentando poder verle la cara. - Masomenos, te extrañe - dijo besando mi frente. Mordí mi labio inferior y alzándome un poco dejé un beso sobre su cuello.
Escondí mi cara en esa zona y suspire cansadamente. Tenía que decírselo cuanto antes, no podía seguir mintiéndole. Me separe de él sentándome en la cama esperando que secundara mi acción. Me miro con las cejas levantadas sin comprender del todo.
- Sehun, sé que recién ayer te has enterado de todo este rollo - empecé. Asintió rascándose la nuca
- Veras… yo… diferente….- Aish era demasiado complicado.
- Luhan, ven - Me pidió Sehun, sin mirarlo directamente me acomode entre sus piernas. Podía sentir su respiración sobre mi nuca, también el suave movimiento que su pecho hacia al bajar y subir contra mi espalda. Suspire complacido con aquella posición.
Sus finos dedos se asomaron por mi cintura, acariciándome suavemente, extasiado me recosté contra su pecho. - Ahora que este más tranquilo - susurro sobre mi oreja, haciéndome temblar -Cuéntame -
Cerré los ojos fuertemente, tratando de darme más valentía. - Mi cuerpo no es como el de humano - empecé suavemente, acariciando distraídamente uno de los brazos del rubio alrededor de mi cintura - Ósea lo somos exteriormente - me corregí rápidamente - Hay algunas funciones de nuestro organismo que están “alteradas” -
-Mh.. - respondió sobre mi nuca, besándola suavemente
Pude sentir un escalofrió recorrer todo mi cuerpo - Sehun, ¿Te acuerdas la última vez que estuviste aquí? - Se aclaró la garganta acomodándose un poco mejor sobre la cama, le había puesto incómodo. - Nunca hemos hablado de eso y yo…-
- ¿Hay necesidad de hablarlo ahora? - mordí mi labio superior y con delicadeza quite las manos de Sehun de encima. Dándome vuelta sobre el lugar y quedando frente a frente. - Si… la hay. Porque lo que tengo que contarte está relacionado - sus finas cejas se fruncieron y me miro con confusión. Desvié la mirada de su rostro, concentrándome en el acolchado de la cama.
- Nosotros… lo hicimos Sehun - trague duro y espere unos segundos antes de seguir - Lo siento fue mi culpa, es que yo había entrado en celo y - Sus ojos se abrieron desmesuradamente
-WOWO ¿Cómo que en “celo”? ¿De que estas hablando? Eso lo tienen los animales ¿sabías? -
Lo mire dolido, eso era para él. Un animal. Un bicho raro. Él no me consideraba otra especie, para su mente yo era “anormal” . La angustia me invadiía y podía sentir un nudo en la garganta.
- L-lo siento, no quise decir eso - se excusaba alargando su mano hasta mi cara, pero me aparte abruptamente. Gateando hasta el borde de la cama, para bajarme y salir de la habitación, quería estar solo.
- Espera Luhan, no seas así. Entiéndeme un poco ¿Qué quieres que piense si me dices eso? - Me retenía agarrando una de mis manos. Pero igual me sentía mal ¿Y a mí quien me comprendía? Yo también tenía sentimientos y temores.
- No quiero hablar ahora Sehun, por favor… - suplique casi al borde de las lágrimas. Sus manos subieron acariciando mis brazos y tomándome por los hombros, me obligo a girarme hacia su cuerpo.
Reacio a mirarle la cara, tenía la vista fija en su pecho. Con sus finos dedos tomo mi cara entre sus manos, alzándola para que nuestras miradas se cruzasen. - No llores ¿Si? Perdóname - dijo dejando un beso sobre una de mis mejillas, cerré los ojos disfrutando del contacto. Lo abrasé por la cintura pegando mi mejilla contra su pecho.
- Soy especial Sehun - susurre con los ojos cerrados, mientras acariciaba su espalda -¿Sabes lo que pasa cuando los animales entran en celo y se aparean? - sabía que el lenguaje no era el correcto pero ya me importaba poco. Su silencio me incomodaba así que decidí decirlo de una vez por todas - Quedan preñados - respondió.
La puerta se abrió de golpe y Wu fan entraba buscándonos con la mirada.... Otra vez no, suplique.
- Sehun, sal afuera tenemos que hablar -
- No - dije separándome lentamente de sus brazos y poniéndome delante de su cuerpo. Fan abrió los ojos exageradamente. Era la primera vez que le llevaba la contra. - Ya no soy tan débil, yo quiero decírselo -
- ¿Decirme que? - escuche como susurraba Sehun
- No lo creo Luhan, ahora déjame seguir con… - sentí mis cejas fruncirse y le interrumpí. - Eh dicho que no. ¿Por qué no me dejas a mí? - Sus mejillas se tornaron carmesí. Lo había hecho enojar con mi mala educación
- ¡Luhan! - me reprendió - Aquí se hace lo que yo digo, ahora basta de estupideces y déjame hablar con Sehun - Volvió a repetir autoritario.
El rubio me aparto tiernamente, adelantándose un poco - Ya vuelvo ¿si? Esta pelea no tiene sentido - Apretó mi mano y salió por la puerta.
Me senté en la cama, odiando por primera vez en mi existencia a Wu Fan, por no dejarme resolver mis problemas.
Las lágrimas me azotaron con fuerza y tape mi cara, hundiéndome mas en mi mismo por la vergüenza que había tenido que pasar.