Los primeros rayos de sol se asomaban por la ventana, Milo quien había tenido una noche muy larga se levanto con los ojos rojos y la cabeza que se le partía de dolor, estaba tan descompuesto que había avisado a su padre que faltaría a la escuela, ya que el horario que tenia era hasta la tarde y no aguantaría
—Hijo puedo pasar—la voz de su madre retumbaba en sus oído provocándole jaquecas bastante fuertes
—Mama me estoy cambiando que pasa— este con poca paciencia le contesto
—Mi amor esta Rick, vino a desayunar contigo— esta le dio la noticia con una sonrisa de oreja a oreja
—Que hace acá, le dije que hoy no quería verlo— este abrió la puerta mirando a su madre con furia
—pero es tu novio, aparte le comente que estas enfermito así que quiere hacerte compañía— esta lo entro de un empujón para buscarle algo para que se ponga
—mama soy grande deja que busque yo que ponerme—este le quito la ropa que tenía en sus manos para tirarlas a un costado
—Que te sucede, nunca me hablas de esta manera—esta puso cara de perrito mojado, tratando de cambiarle el humor a su retoño
—Perdóname, solo quiero estar tranquilo en casa, dile a Rick que lo veo mañana— esa fue su última palabra antes de entrarse a bañar
El agua caía sobre su piel, estaba aun dolorido pero ya se tomaría algo para calmar esa molestia
Estaba pensando cómo hacer para no cruzarse a su vecino ya que de seguro debe pensar lo peor de su persona
Thanatos por su parte ya estaba despierto mirando por la ventana, en eso ve al novio de su amado salir furioso, estaba hablando solo mientras pateaba la llanta de su auto
—será que Milo lo dejo— eso fue lo primero que se cruzo por su mente, mientras pensaba como hacerle para verlo hoy
—Deja de espiar a ese joven y veni ayudarme a limpiar el fondo, ya que tengo clases que dar a la tarde — el gemelo de los rizos de oro le tiro una escoba y salió de la habitación
—Que mala onda— este se levanto ya que no le gustaba estar peleado con su hermano y se dispuso a ayudarlo
Después de unos minutos ya estaba todo limpio y perfumado
—Por fin, ahora seguir con mi plan— el gemelo menor salió de la casa topándose con Camus quien estaba parado en la entrada
—que haces vos acá? — este lo tomo del brazo para alejarlo de su casa
—Suéltame animal, me lastimas—el joven empezó a empujarlo para soltarse de su agarre
—te dije mil veces que te alejes de mi hermano y de mi casa— este lo miro muy furioso
—no me alejo porque lo amo y el a mi también— este empezó a gritar poniendo de nervios al mayor
—mira mocoso yo se que tipo de persona sos y no me agradas —
—a mi me importa poco lo que digas, el y yo nos vamos a casar por que nos queremos— dicho esto salió corriendo hasta la puerta de la casa para tocar fuerte el timbre
El gemelo dorado salió quedándose sin palabras, tomo al chico de la mano y lo metió rápido para que nadie lo vea
—te dije que no vengas a mi casa—
—lo sé amor, pero no puedo estar sin verte—
—Pero eso no es excusa, aparte no fuiste al colegio hoy?—
—Me levante desanimado y no tenía ganas—
—Si ibas a clase me ibas a ver a la tarde—
—a mi no me basta porque a todo momento te extraño— este lo abrazo para acercar su labios a los suyos, los dos empezaron a besarse muy apasionadamente, el rubio lo subió a la mesa para acomodarse al medio y así poder excitarlo mas
—Siempre te gusto hacerlo arriba de la mesa— este le sonrió pícaramente, mientras el mayor estaba que ardía
En eso entra Thanatos dando un fuerte golpe con la puerta —lo siento no quise interrumpir—
El gemelo mayor se alejo de Camus acomodándose la ropa — no te hagas drama, se va quedar un rato—
—Dale así puedo conocer tu casa, y prometo que después me voy— este se bajo de la mesa para abrazar a su amante
Thanatos se disponía a salir nuevamente hasta que otra persona se topa en su camino
—Milo que haces acá— el peli gris se quedo mirándolo embobado por su belleza
—Solo… quería… disculparme por lo de ayer, la verdad lo pensé tanto que decidí dar la cara—este puso una mirada de decepción ya que siempre se había portado bien
—pero no hiciste nada malo, solo bebiste un poco de mas—
—sí pero no soy borracho—
—Nunca pensaría eso de vos, aparte tuve la oportunidad de conocer tu habitación—
—Qué vergüenza estaba un desastre—
Los dos se miraron por un momento hasta que el mayor lo invito a pasar
—Veni te muestro el jardín— este lo llevo hasta el fondo, ahí su hermano se encontraba plantando unas semillas
—Quien es es? — el acuariano se paro frente al escorpión mirándolo de pies a cabeza
—me llamo Milo, un placer— este se presento estrechándole la mano
—y dime Milo que haces en esta casa—el joven miro a Hypnos muy enojado, ya que era muy celoso
—Es nuestro vecino nuevo, y para sorpresa mía también mi alumno— este no hizo caso a su mirada y abrazo al joven griego
—Es cierto, solo que falte hoy por qué me sentía mal—el escorpión miro al rubio para luego sonreírle
—Bueno, ya somos dos ya que también me sentía mal— este abrazo al peli azul para alejarlo del rubio
—Bueno preparare algo de tomar— el dios de la muerte se dirigió a la cocina mientras el dios del sueño se iba a bañar ya que debía cumplir con sus obligaciones
—Milo se que no te conozco pero debo advertirte algo, Hypnos no es solo mi profesor, es mi novio y nos amamos— el otro joven se quedo sorprendido por lo que estaba escuchando
—que confesión, nunca me lo hubiera imaginado— este se quedo pensando por unos segundos, la verdad no entendía por qué algo en su interior le molestaba
—Sé que es difícil de creer que un joven de tan solo 16 años haya conquistado a un hombre de 27 años, que ya tenía un futuro, pero el amor es más fuerte—
—Si dicen que es hermoso vivir una historia de amor—
—Si la verdad es un hombre maduro, lleno de proyectos, educado, nada que ver con el cavernícola de su hermano quien no hace nada, vive de la plata que le dejaron sus padres—
—que diferente son, pero de seguro también Thanatos debe tener algo hermoso—
—No creo, pero vale la pena soñar—
—Bueno me voy ya es casi mediodía— este salió de ahí sin entender lo que le estaba pasando, en eso siente la vos del rubio quien estaba parado cerca de la puerta
—pensé que te quedarías a comer—
—no puedo, mis padres deben de estar llegando—
—Sabes eres un niño muy dulce, tus padres deben de estar felices de tenerte—
Milo quien sintió un impulso, se acerco a él mirando esos hermosos ojos los cuales se quedaron clavados a los suyos
—Gracias profesor— este lo beso en la mejilla dejando al otro sorprendido por esa actitud
—Nos vemos mañana en la escuela— este se acaricio el rostro, mirando como la puerta se cerraba
—que haces en la puerta pensé que te ibas a bañar— el gemelo menor lo miro extrañado
—sí, pasa que baje a subir el calefón y vi a Milo que se iba—este miro a su hermano quien soltó la bandeja, dejando caer todo al suelo para salir a buscarlo
—Estás loco— el mayor corrió a levantar los vidrios que estaban esparcidos en el suelo, Camus quien escucho el quilombo entro para ver qué pasaba
—Amor que le pasa a tu hermano— este busco la escoba para ayudarlo
—No lo sé, pero debo arreglar las cosas antes que se pongan feas—
—Thanatos que te sucede— el escorpión quedo mirándolo, mientras el otro se sentaba en su sillón muy angustiado
—perdona si te asuste, solo quería saber por qué te fuiste— este le tomo de la mano para sentarlo a su lado
—Es que mi madre ya viene y debo estar acá—
—Entiendo, ahora te invito a tomar un helado— este estaba ansioso ya que no podía quitarse de su cabeza el rostro de su vecino, estaba enamorado totalmente de él y debía conquistarlo
—Suena divertido, pasa por mí a las cuatro—este le sonrió provocándo un montón de emociones en su cabeza
—Me encanta verte sonreír— este le acaricio el rostro provocándole un sonrojo al peli azul
—Ahora anda que ya llegan mis padres— este lo levanto empujándolo hasta la puerta—
—Cuando te veo así deseo comerte— una sonrisa maliciosa se dibujo en sus labios, poniendo nervioso al escorpion
—lo siento era solo una forma de decirte que eres tierno— este se corrigió ya que no deseaba asustarlo