¿Quién demonios se cree ese enano para pedirme semejante estupidez? Porque era simplemente eso, una increíblemente enorme estupidez pedirme eso, aun puedo recordar claramente su voz chillona decirlo:” Si yo me enamorara… quisiera que me dejaras tranquilo, yo hare todo lo que tú quieras hasta que… si me llego a enamorar de alguien y ese alguien me corresponde, por favor, déjame ser libre”.
Por Dios, le respondí que si por la urgencia que tenia entre las piernas, en realidad no me salía responderle eso, ¿Si le llega a gustar alguien lo voy a dejar tranquilo? “Dejarlo Tranquilo” y una mierda, rompí mi record perfecto de puntualidad, tuve que enfrentarme a esa mierda rara que había creado Anna y también se lo presente a mi viejo, (aunque en realidad la ultima no importa) pero he hecho muchas cosas inútiles porque sí todo eso es inútil ya que en nada me favorecen por ese mártir patético hablador hijo de su puta madre.
Juro que cuando me dijo eso me dieron unas ganas de romperle el culo como solo a mí se me ocurriría pero el enano era ingenioso y me beso e hizo disfrutar de sus gemidos y hasta de esos movimientos inconscientes de cadera que hizo para que se me medio olvidara mi encabronamiento, sabe que me atrae sexualmente o al menos debería de hacerse esa idea, ahora que lo pienso ese chiquillo si se jugara bien sus cartas hasta me tendría una considerable ventaja pero considerando que tiene un hueco en el cerebro no me dará ningún problema.
Estaba hasta pensando no tratarlo TAN mal por haberse preocupado por mí y suturarme las heridas pero ahora puede que hasta lo humille por esa estúpida oración, ¿Es que acaso no podía quedarse callado? ¿Tragarse su deseo de libertad?... pero también puede que lo haya dicho para tener un apoyo emocional y no desmoronarse como lo haría cualquier secuestrado, ¿Sera que lo hizo subconscientemente? Si era así el enano no era tan bruto, mejor me olvido de esa mierda.
Pero se lo prometí, maldita sea, hice un puto trato con él… trato que jamás se va a cumplir en lo que a mí respecta. No soy egoísta, pero yo encontré a ese mocoso y nadie va a llegar de la noche a la mañana a quitarme lo que yo marque como mío.
Después de que lo hice tocar el cielo el chiquillo se desmayo, parecía que nunca lo habían hecho sentir tanto placer, esa posición no es de mis favoritas ya que tengo que cargar con el peso del pasivo también y se me dificulta un poco embestir pero como Daika no pesa, se me hizo más fácil, de hecho, logre una muy buena penetración pero igual prefiero estar al nivel de suelo o en una cama.
Nunca lo habían hecho sentir tanto placer… puff, yo ni siquiera recuerdo cuando fue la primera vez que metí mi miembro en otro ser vivo, tendría como 14 o 15 años… son buenos recuerdos, seguro fue con una prostituta, total lo cargue como un saco de patatas medio desnudo y lo lance sobre mi cama mientras yo me vestía, el sexo me pone de buen humor y el que no lo sepa es porque ni siquiera ha cruzado palabra conmigo.
No voy a malgastar mis preciadas neuronas por esas palabras desesperadas, está bien, no lo voy a tratar tan mal puede que hasta se me salga el lado cariñoso que tengo pero no voy a decirle cursilerías al oído y regalarle chocolates o peluches eso es de enamorados y Daika es solo mi juguete, un juguete, un juguete muy lindo pero nada más que eso, ni que me fuera a enamorar de él, solo he amado a dos personas en esta vida y no pienso amar otra, hasta ahora no lo pienso.
Mis pisadas retumban en el pasillo desierto que tránsito hacia una de las tres clases que el viejo me hizo impartir porque domino esas materias, espero que hayan hecho mi tarea de la Segunda Guerra Mundial, uno de mis temas favoritos, me fascina, uno de los puntos por los que me gusta mi tierra natal, además de que mis bisabuelos participaron en esa guerra, uno era Nazi y el otro japonés ambos pertenecientes a la triple Alianza. Pero a los japoneses los jodieron con las bombas nucleares, los italianos fueron los primeros en rendirse y los alemanes los terminaron de joder cuando Hitler se suicido en su bunquer con un retrato de su madre y su recién esposa Eva Braun con la cual llevaba un día de casado, que mierda, se caso un día para el siguiente suicidarse, y en honor a mi bisabuelo japonés mi madre me dio su nombre, eso no le gusto a mi padre pero se tuvo que conformar ya que yo ya era su perfecta copia al carbón. Mi madre decía que yo era mi padre pero en miniatura.
Mi árbol genealógico muchos lo conocen, el cómo llegue a estar aquí solo tres personas, después de la guerra mi bisabuelo tuvo a mi abuelo y este a mi padre, un alemán puro, mientras que en Japón mi otro bisabuelo había emigrado a Rusia, se había casado con una rusa y de ahí mi abuelo, se caso con otra rusa y tuvieron a mi madre, el único rasgo japonés que tenía mi madre eran sus ojos tan oscuro como la noche, los cuales yo herede, pero de resto era rusa, mis padres se conocieron en un barco, mi padre no dominaba el castellano mientras que mi madre sí, me dijeron que fue amor a segunda vista porque la primera vez que se conocieron se habían dado mala espina mutuamente.
Pero yo en ese tiempo, un niño de ocho años ¿Que va a saber de primera, segunda o hasta tercera vista? lo ignore y hasta ahora no sé que me quisieron decir con eso ya que nunca me he enamorado, luego de eso se conocieron mas y se casaron, a mi padre lo criticaron por haber ensuciado la raza aria germánica pero no importaba y me tuvieron a mí su primer y único hijo, aun recuerdo sus profesiones, mi padre como lo dictaba la estirpe familiar era militar, mi madre era pianista. Mis dos únicos seres amados.
Como mi futuro era también ser militar mi padre me entreno desde muy pequeño enseñándome varias disciplinas, la primera vez que dispare un arma tenía 7 años y mi madre para quitarme un poco de ese peso de encima me enseño a tocar su adorado instrumento el cual desde ese maldito día no he vuelto a tocar.
Un recuerdo doloroso, sangriento, ensordecedor, borroso, me recuerdo con una edad de 9 años asesinando mierdas que no merecían respirar el mismo aire que yo, bañado en sangre, las primeras tres veces que sentí como ardía mi cuerpo por los disparos, mis tres primeras cicatrices de bala, la primera vez que mate y disfrute matar, me carcajeaba como un lunático con mi voz de niño chillona mientras lloraba y me seguía moviendo.
Nadie los mando a hacer lo que hicieron.
Nadie les dijo que los atacaran.
Nadie les dijo que me subestimaran.
Nadie les dijo que los mataran.
Nadie me dijo que mi vida cambiaria de una llena de sonrisas y el querer hacer sentir orgulloso a alguien a una tan vacía y dolorosa con recuerdos que me flagelaban la piel y me hacían despertar en la madrugada llorando y gritando, llamando a los padres que ya no tenía pero Lucifer supo cómo hacer que lo superara.
Lucifer. El viejo… mi nuevo padre, alguien al que también quise hacer sentir orgulloso. Alguien al que también llame “Papa” por necesitar apoyo emocional, estaba desesperado, necesitaba que alguien me tendiera una mano y me sacara de ese agujero oscuro y vacio con un silencio tan intenso que rompía mis tímpanos. El viejo me tendió esa mano y se lo debo. Abro la puerta y veo a toda mi clase algunos hablando otros saludándome, camino hasta el escritorio para tomar la silla y sentarme para comenzar la clase.
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De nuevo, siento que estoy sobre algo muy suave, creo que otra vez estoy en la cama de Kai… ¿Qué paso? ¿Cómo llegue aquí? Lo último que recuerdo es a mí con la cara ardiendo mientras gemía y disfrutaba… me sonrojo violentamente al recordar que tuve relaciones con Kai en un baño público, ¡UN BAÑO PÚBLICO! ¡QUE VERGÜENZA! ¡Alguien pudo haber entrado y vernos! ¡Alguien pudo vernos en esa situación tan bizarra!
¡Dios mío! cometí una locura, recuerdo que sí llegue al trato que quería con él, pero también le dije que haría todo lo que él quisiera, ¡Todo! Lo moleste con mis palabras pero fue una suerte que en ese momento el tarado pensara mas con el miembro que con el cerebro. Debería estar más tranquilo después de haber hecho ese trato, de hecho, creo que estoy más tranquilo.
Suspiro cansado, me remuevo un poco en las sabanas y noto mi desnudez, solo tengo un toalla enredada en la cadera y aun siento mi cabello mojado, miro mi cuerpo y noto algunas marcas rojas ¿En qué momento me hizo esto? Llevo mi mano hasta mi trasero y lo palpo un poco para sorprenderme que no me duela tanto como la otra vez, ahora siento solo una pequeña molestia, nada más, aunque por supuesto, esta vez Kai metió sus dedos primero como si estuviera preparándome para la anaconda que tiene entre las piernas, por una parte le agradezco eso, no me trato mal, ahora llevo un dedo a mi entrada para saber si tengo que limpiarme porque recuerdo claramente como él dejo su semilla en mi interior mientras yo lo hacía en su marcado abdomen y me sorprendo de encontrarme limpio, Kai me limpio después de haber tenido relaciones.
Si, tenía que reconocer que se sentía muy rico tener relaciones con Kai pero a la vez me daba vergüenza, soy un muchacho, yo debería hacer eso con una chica y no ser la “chica” cuando estoy con el cenizo. Esas sensaciones fueron… increíbles, intensas, asfixiantes… me sentí tan bien… ¡¿Qué se supone que pienso?! Estoy enfermo…estoy enfermo porque reconozco que quiero repetir eso.
Me muevo más en la cama y llego hasta el extremo donde él duerme y entierro mi rostro en su almohada respirando la fragancia del shampoo de menta que usa Kai y también percibo una colonia de hombre que tengo que reconocer me gusta el olor, me acurruco mas y tomo mas sabana para cubrirme entero, la toalla esta mojada y me molesta por lo que me la quito y termino completamente desnudo, nunca había dormido en esta condición, se siente tan extraño, la fricción de la sabana contra mi miembro es un poco molesta por lo que busco una mejor posición y no sé por qué tengo tanto sueño y vuelvo a caer en la inconsciencia con el recuerdo de Kai comiéndose mis labios. Y a mí devolviéndole el gesto como mejor sé.
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Ya mi buen humor se fue al carajo, con la primera clase estuvimos bien, la mayoría hizo la tarea pero los problemas vinieron cuando pasamos a la clase de Física donde tenían una prueba y no querían hacerla ya que ninguno estudio, serán imbéciles, solo Yume sabia las formulas y no perdieron tiempo en ponerse en grupo, ella, su novio Cesar y el cara de bebe de Eian, los demás se jodieron y tengo que hacer un recuperativo, este lugar no es una escuela, pero todos tienen que tener el coeficiente intelectual de un universitario ¿Por qué? Nunca se lo pregunte al viejo, yo solamente les enseño lo que sé.
Pero lo peor fue la clase de lenguaje, les enseño Ingles y otro idioma el cual ellos escogen, este año eligieron el Ruso, es más sencillo hablarlo que escribirlo, hacer que digan una oración es ganar una guerra, no me quejo, aprenden rápido, más de lo que le tomaría a un ciudadano promedio, yo hablo ruso por mi madre que me enseño, al igual que me enseño un poco de japonés aunque no es mi fuerte y también se defenderme con el italiano el cual me enseño un poco mi padre. Se 5 idiomas y no planeo aprender más, las diferencias de pronunciación y escritura son abismales y estoy bien con los que sé, los que más uso son castellano, alemán y ruso, los otros dos debería perfeccionarlos pero me da pereza aparte de no tener tiempo para eso.
Se termina la clase y voy al despacho de mi hermana antes de que comience a dar su clase de Química, al llegar me dice que se va a tardar un poco más en darme el suero porque se le hace difícil separar las moléculas y un montón de cosas más que ignore, nunca me gusto la Química, abandono el lugar y me desplazo por los pasillos cuando siento que algo se aproxima hacia mí, pero no es una persona, aparto el rostro y veo como la daga se clava en la pared, volteo y descubro a Carlo que ya ha vuelto de ir a buscar mi espada al bosque, el siempre intenta asestarme un golpe, una patada o en este caso un arma blanca para saber que tan atento estoy de mi alrededor pero nunca lo ha logrado y es simplemente porque mis reflejos son rápidos, me la entrega y sigo mi camino, la única persona que me puede dar competencia, pelea y una buena compañía es mi “compadre” el cual no está presente.
Mi compadre, un asesino de mi nivel, con la misma altura, musculatura y edad que yo. Tenemos hasta los mismo vicios, gustos, aventuras y vocabulario, la primera vez que yo tuve sexo él también se estaba estrenando en la habitación de al lado con otra puta, cuando teníamos 15 años me hice mi tatuaje en la espalda, el también se hizo uno en el pecho de un escorpión, también la primera vez que nos emborrachamos fue juntos al igual que cuando aprendimos a fumar, ya sea droga o tabaco.
Él sabe todo de mí y yo todo de él, somos como hermanos porque nunca me lo voy a follar. Aparte de que el si es hetero pero no le molesta que yo sea bi. El hermano que me da competencia, en una pelea entre mi compadre y yo, entre Dominic y yo no hay restricciones de ningún tipo, nos hemos fracturado huesos y botado más de un diente. Con ese desquiciado australiano puedo ser la máquina de matar que en realidad soy.
Llego a mi habitación y abro la puerta descubriendo a Daika aun dormido pero ahora de mi lado de la cama, se mueve mucho al dormir por lo que la sabana se ha deslizado toda y solo le está cubriendo una pierna y un poco su miembro, dejando al descubierto todo su pecho, cintura, cadera y una de las piernas, como el aire acondicionado no está encendido no siente frio, dejo mi arma en donde va, me acerco y veo más de su piel canela tan cremosa, me apoyo de la cama y me posiciono encima de él.
Levanto una de mis manos y comienzo a acariciar su pecho, a lo que empieza a removerse al sentir que lo estoy tocando, tiene el sueño pesado y como no me sirve follarmelo estando inconsciente tengo que despertarlo, opto por besarlo, el dijo que haría lo que yo quiera, no sabe lo que dijo y mucho menos a quien se lo dijo, vamos a disfrutar encanto.
Atrapo sus labios y los mordisqueo, Daika abre los ojos de golpe y comienza a forcejear, lo tomo de las muñecas y me mira amenazante.
-¿Qué crees que haces?
-Cogerte-Que pregunta tan idiota, estoy encima de él tocándolo, ¿Qué mas querría hacer?
-¡Ya lo hicimos en el baño!… ¿Es que no te basta?-Se ruborizo al decirme eso, seguro recordando lo que hicimos hace horas, ahora que recuerdo la hora son las tres de la tarde, este enano lleva durmiendo mucho tiempo, parece que lo cansa mucho el sexo.
-No, no me basta, soy muy exigente y quiero tenerte de nuevo, así que no te quejes.
-No, tienes que conformarte con lo que ya hicimos-Esta muy renuente pero no me importa.
-¿Es que acaso no te gusto?
-…-
Silencio, eso se interpreta como un “Sí, me gusto pero me da vergüenza admitirlo”.
-¡Ja!-Me burlo y su sonrojo aumenta junto al forcejeo.
-¡No te burles!
-¿No te da curiosidad?…-Logro captar su atención aunque aun me mira desconfiado-¿No quieres sentirte mejor que esa vez? Te aseguro que puedo hacerte convulsionar de placer-No era mentira, desde hace mucho que soy bueno en esto. Él lo piensa y cuando parece que ya se le ocurrió algo para negarme su verdadero deseo lo hago callar con las últimas palabras que estoy seguro terminaran esta estúpida discusión-Tu prometiste hacer lo que yo quisiera ¿Recuerdas?-Abre los ojos como platos y reconoce la verdad en mis palabras.
Suelto sus muñecas y solo me mira serio, algo triste, pero no es nada que dentro de poco desaparezca.
Me pongo sobre mis codos y quedo a escasos centímetros de su rostro, parece que voy a tener que ser romántico para lograr mi cometido-Cambia esa cara…relájate-No fue una orden, se lo dije suave y tranquilo como si de verdad fuera mi enamorado, acaricio su mejilla roja y me acerco a su oído-Entrégate, encanto- Bajo al hueco entre su cuello y hombro para besarlo y de vez en cuando rozar la punta de mi nariz con su piel.
Al ser un adolescente su cuerpo reacciona al placer rápidamente, ahora me apoyo solo con mis rodillas cuidando no aplastarlo, bajo mis manos y rozo sus pezones, mientras bajo de su cuello a la clavícula, su piel es exquisita.
-Ah…-Y ahí está ese canto celestial, me encanta este enano.
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Se me escapo un gemido, que vergüenza, aunque pensándolo bien, el único que me va a ver en esta situación va a hacer el, pero sería tan horrendo aceptar mi derrota ante sus caricias, si, me gusta, me encanta, pero ¿Dónde está mi verdadero yo? El que no se dejaría tratar así…
-Ahh…-Vuelvo a gemir, su boca esta sobre mi pezón, Dios… ese hormigueo tan rico volvió, quiero que me toque ¿Qué me pasa?
-No te guardes la voz, belleza-Lo miro confundido ¿Es que acaso se volvió loco que me está tratando así? El cenizo me ve a los ojos y se acerca para besarme la frente-Eres precioso.
Y reconozco estar cayendo en este juego, no parece la misma persona, me besa y acaricia como si me fuera a romper, muevo mis manos hacia su pecho que aun está cubierto de tela y el entiende lo que quiero, se incorpora y comienza a quitar los botones de su camisa, miro hacia abajo por la pena de verlo fijamente mientras se desviste y veo como mi miembro ya esta duro y oculto bajo un poco de tela de la sabana, un dedo en mi mentón hace que suba la mirada y Kai vuelve a besarme lentamente, saboreando mi boca, aun no se besar bien y de vez en cuando nuestros dientes chocan pero él no se molesta.
Paso mis manos por su pecho marcado, fuerte y lleno de cicatrices, Kai pasa las yemas de sus dedos acariciando desde debajo de la axila hasta llegar a los muslos, chupa mi otro pezón y yo cierro los ojos y cumplo con su pedido.
-Ahh…ah-No son altos pues me da mucha vergüenza y entonces siento como se recuesta sobre mí, no por completo pero su miembro aun dentro de los pantalones comienza a presionar el mío que esta solo cubierto por un poco de tela, la cual siento ya mojada, comienza a simular embestidas, son fuertes pero lentas, me desespera, comienzo a jadear y a gemir mientras Kai baja sus manos y masajea mis piernas, aprieto las sabanas y el sigue en ese desquiciante movimiento por varios minutos, me mordisquea el cuello y jadeo más alto, aprieto mas las sabanas, el rostro me arde, todo mi cuerpo arde, quiero sentirlo más.
K-Kai-Lo llamo jadeando, quiero que deje de hace eso, me voy a correr si sigue así.
Él lo comprende y se quita de encima y comienza a bajar sus pantalones, yo desvió la mirada y de pronto me alza las piernas, quedo en una posición muy incómoda ya que el peso de mi cintura hacia abajo esta sobre mi tronco y mi entrada esta justo frente sus ojos y hace algo que creí imposible, mete su lengua en mi entrada y la acaricia con ese húmedo y caliente musculo.
-AHH…No ah…-Jadeo y siento como mi miembro se endurece mas, se siente demasiado bien, es una caricia tan embriagante. Kai lo sigue haciendo llegando hasta lo máximo que le permite su lengua, se detiene y veo como mete tres de sus dedos en su boca, los saca ensalivados y los lleva a mi entrada para comenzar a acariciar los alrededores relajándome sin tener que usar palabras, de vez en cuando besa mis nalgas o los muslos y me siento tan bien, son como mariposas, siento que comienza a adentrar un de sus dedos pero ya mi entrada esta tan relaja que puede meter dos de una sola vez, regreso la molestia y veo que mueve los dedos buscando algo y lo encuentra.
Acaricia ese punto dentro de mí que me hace gemir fuerte su nombre y comienzo a mover la cadera para que el meta mas los dedos, luego mete un tercero que si me dolió un poco, comienzo a sentir mis piernas dormidas por la falta da sangre y el termina con el masaje, de nuevo se acerca y me mordisquea el cuello para tomar mi miembro con una de sus manos y comenzar a masturbarlo, yo trato de detenerlo porque siento que voy a llegar al final si sigue y Kai vuelve a incorporarse.
Abre mis piernas y se posiciona tomando su miembro y comienza a meterlo, si, siento dolor, molestia y veo que se detiene y me besa los parpados, sin darme cuenta estaba llorando y el las seco así, le sonrió y él me devuelve el gesto con sus perfectos dientes, reanuda el movimiento y siento que sus testículos tocan mis nalgas, está completamente dentro y yo me siento tan lleno, es muy grande y me gusta que sea así.
Comienzo con ese movimiento y se acerco a mí de nuevo apoyándose sobre sus codos y un sonido obsceno se escuchaba cada vez que nuestras pieles se juntaban.
-Ah-Ah Ka-i… Ma-Y me calle, Kai dejo de moverse y me miraba entre burlón y cariñoso.
-Dilo bebe, dime lo que quieres-No sé si era la situación pero su vos sonaba tan profunda y ronca que me hacia querer nunca salir de ese momento en el tiempo.
-Mas… ah mas-Me salió entre suspiros y jadeos, el sonrió y me comió la boca y junto mi lengua con la suya de una manera muy obscena, se separo del beso y lamio mis mejillas, el movimiento volvió y yo comencé a mover mis caderas para lograr sentirlo más adentro, me beso de nuevo y yo subí mis manos, con una desesperada izquierda tome sus cabello gris y lo jale y con la derecha clave mis uñas en su amplia y musculosa espalda, cuando hice eso las embestidas aumentaron, salía y entraba casi por completo, tocando siempre en ese punto… no aguantaba mas, mi boca era una “O” y sentía como mi saliva descendía por la comisura de mis labios que Kai lamia y limpiaba, creo que mis gemidos se escuchaban hasta afuera y en esa posición toque el cielo, arqueando mi espalda, clavando mas mis uñas en su espalda, jalando mas sus cabellos y gritando su nombre.
Me vine entre nuestros estómagos y el dentro llenándome de ese liquido caliente que ya no me parecía tan molesto, fue mágico ese momento, fue esplendido, me beso otra vez más calmado y salió de mi mientras que sentía como el liquido descendía y manchaba mis glúteos y las sabanas.
Se recostó a mi lado y yo volví de golpe, me dio vergüenza todo lo que hice pero no pude protestar porque el hablo primero.
-Y así-Me vio a mí y después a él-Hacen el amor los amantes-No entendí por lo que el continuo-Te dije que si no te daba curiosidad y tú con tu silencio respondiste que si, así que te voy a mostrar todas las maneras que se tener sexo, esa era la romántica y tierna vamos a ver cómo te va con las demás.
Mi pecho dolió por lo que me parecieron siglos, todo lo que me hizo y dijo esas palabras lindas de: “Belleza” “Eres precioso” “Encanto” “Bebe” todas eran parte de un libreto… y yo me las creí. Que imbécil, le di la espalda, tome la frazada y me cubrí, sentía muchas ganas de llorar. De pronto me abrazo por la espalda y beso mi hombro.
-No te pongas así, enano tonto-No quería escucharlo-Hacia lo hacen los amantes y adivina ¿Qué carajo crees que somos tu y yo?-
Quite la frazada y lo mire de frente.
-¿Qué somos?-Le pregunte.
-Eres mi amante Daika, aunque en lo personal esas frases de cariñito se me hacen babosas si quieres escucharlas te las diré, ¿Sabes por qué?-Negué con el rostro y abrí los ojos sorprendido ante su respuesta-Porque eres solo mío.
Quede flotando en el espacio por eso y después volví Kai ya se estaba vistiendo y me lanzo otra camisa y un pantalón más pequeños.
-En la mesa de noche hay pañuelos húmedos, límpiate y por cierto-Me dijo de nuevo cuando ya estaba a punto de cruzar la puerta-Mejor te apresuras porque ya se va a acabar la hora del almuerzo-Me guiño un ojo y se fue dejándome con la cara roja y procesando todo lo que dijo “Solo Suyo” y volví de golpe cuando mi estomago rugió me apresure y me vestí para emprender una rápida caminata a la cafetería y calmar mi tripa.
CONTINUARA…