Suspiro buscando la forma de serenar mi mente para poder pensar con claridad, estoy verdaderamente confundido, Lucius no me ha ayudado nada, para cualquiera seria un sueño hecho realidad que un hombre como lo es él te preste la atención que me ha estado dedicando pero… no es mi tipo, si, es dulce, es atento, me entiende y sabe tratarme pero… no sé, siento que no es el hombre para mí. No lo es.
Ahora mismo lo estoy buscando para decirle lo que pienso, no quiero seguir ilusionándolo haciéndolo pensar que podrá tener algo conmigo, me parece muy cruel jugar así con una persona, no tardo en encontrarlo, le expongo con mucha vergüenza y pesar mi punto, él no dice nada, escucha todo que tengo que decirle sin interrumpirme un solo segundo, me duele mucho ver tal seriedad en su rostro, pensé que me insultaría o me ignoraría al terminar mi discurso pero no fue así.
Me hizo una reverencia, tomo mi mano, beso su dorso y me agradeció el haberlo intentado.
Me siento mal por lo que hizo, hubiese preferido mil veces que me insultara y me injuriara a que hiciera lo que hizo, no me sentiría tan mal.
Paso el resto del día solo, Daika no ha salido de la cocina desde que me dijo que le haría un pastel a Kai, me parece muy tierno eso, Daika seria la pareja perfecta para Kai, se que se gustan y estoy seguro que Kai está enamorado de Daika… que lindo es eso. Saber y tener la certeza de que alguien te ama, es muy lindo.
Tomo la chaqueta y la abrazo mas a mi cuerpo, hace un frio de los mil infiernos, veo a Daika salir de la cocina con una caja blanca y sonriendo, buena suerte amigo. Lo veo desaparecer por la puerta y me levanto a buscar algo que comer y con qué distraerme, me encuentro con Cesar y Yume y hablamos un rato sobre una tarea de Matemáticas que ninguno de nosotros entiende ¿Cómo esa maldita raíz de x al cuadrado igual a dieciséis se volvió un más o menos cuatro? No entiendo.
-¡Maldita matemática!-Grita desesperado el español pero se ve interrumpido cuando sin previo aviso le dan un golpe a la cabeza, bastante suave-Ouh-Se queja y mira hacia arriba… es Dominic.
-No insultes la asignatura solo por no comprenderla-Después de decir eso vuelve a retomar su camino pero Cesar es más rápido.
-¿Tu si sabes cómo se hace esto?-Levanta el cuaderno lleno de notas y Dominic lo ojea para luego soltar un bufido.
-¿De verdad no saben cómo hacer eso?-Por su forma de decirlo, parece que lo que nos ha estado sacando canas verdes es una de las operaciones más sencillas en el mundo matemático. Toma asiento con nosotros y rápidamente nos explica el ejercicio que ahora que lo sé es una completa tontería, aprovechamos y le seguimos preguntando y al final habían como tres chicos más que nosotros que también estaban escuchando la explicación, con sinceridad, Dominic es muy bueno explicando matemáticas.
-Gracias hombre-Le agradecen los otros chicos y rápido se van dejándonos de nuevo como al principio. Solo Yume, Cesar, Dominic y yo.
-De nada-Con esa seriedad que siempre muestran tanto él como Kai cuando están alrededor de muchas personas parece que está preparándose para levantarse con las muletas.
-¿Como sigues con tus medicamentos?-Busco hacerle conversación, Cesar y Yume me miran extraño-¿Qué?-Les espeto mirándolos-Nos acaba de ayudar con la tarea me parece que preguntarle un poco sobre su salud y agradecerle es lo menos que podemos hacer.
Ellos rápidamente están de acuerdo conmigo y eso hace que Dominic se quede con nosotros, explicándonos que ya no toma nada y que solo tiene que esperar como dos semanas más para que su esguince se termine de curar y poder caminar bien y sin, según él, “Las Putas muletas”.
-¿Y Kai que no lo he visto en todo el día?-Suelta la pregunta el español.
-Hoy es el peor día del calendario para él-Nos explica solo lo necesario-Tal vez no se aparezca hasta dentro de tres días.
-Hoy es su cumpleaños ¿No?-No entiendo por qué Kai desprecia tanto este día, es su cumpleaños, siempre, en todos los años que llevo viviendo aquí, este día es como una autoimpuesta fecha de infelicidad para él. Me pregunto si Daika sabrá la razón.
-Si-Dominic me observa de reojo-Supongo que yo también estaría así sí el día de mi cumpleaños hubieran matado a mis padres frente a mis ojos-
-¡Oh Dios mío!-Yume exclama con asombro y sus manos cubren su boca, Cesar abrió sus ojos desmesuradamente sin poder creerlo y yo siento un gran escalofrió en mi espalda. Entonces recuerdo ese día hace meses cuando hablamos de cumpleaños frente a Kai y el dijo “No tengo nada que celebrar ese día” Ahora todo tiene sentido. Kai está pasando un luto hoy.
Inmediatamente siento la necesidad de disculparme-Per…-
-¿Para qué te vas a disculpar conmigo? En sí, no es mi problema, además ninguno de ustedes sabía nada y es que así lo prefiere mi compadre a él…-Se queda callado un momento-El odia que las personas sepan lo que le paso, no sé, tal vez siente que lo verán con pena-Saca un cigarro de su camisa y busca el encendedor.
-¿No tienes problemas con tus pulmones?-Juraría que más de una vez lo escuche toser como si su esternón se fuese a quebrar y él sigue fumando. Encuentra unos fósforos y no tarda en encenderlo.
-Te lo dije una vez niño-Me mira fijamente y exhala el humo del cigarro justo sobre mi rostro, comienzo a toser ahogándome con el humo-Tal vez quiero morir.
Un gran silencio se cierne sobre la mesa y Yume como intermediaria busca destensar el ambiente.
-Entonces eso explicaría porque Kai siempre esta tan callado y serio, debió de haber sido horrible.
-Lo fue-No tiene expresiones faciales evidentes al hablar, seguro es porque la nicotina lo relaja.
-Y a ti Dominic no te paso nada traumático de pequeño ¿Verdad?-En estos momento agradezco enormemente que Cesar sea curioso-Quiero decir… a ti nunca te paso algo así ¿No?-Esa pregunta me llena mucho de curiosidad.
-No-Contesta cortante y simple. Supongo que ya Cesar está comenzando a tener miedo de la actitud tan autoritario y directa del australiano.
-Sí, pero…-Ahora es Yume.
-Solo respondo preguntas directas así que si quieren saber algo no hagan rodeos-Vuelve a exhalar el humo que se pierde con sus formas extrañas de la vista de todos.
Inmediatamente me armo de valor.
-¿Cómo fue tu infancia?-
Un silecio se cierne sobre nosotros hasta que Dominic vuelve a exhalar humo y suelta el cigarro aplastándolo con su zapato.
-El primer recuerdo que tengo es estar metido en un cubo de basura, tendría como 4 años-
-¿Pero si tenias 4 años quien te cuido cuando eras un bebe?-Yume no aguanta quedarse con la incertidumbre.
-No lo sé-Responde con simpleza-Mi padre era un borracho y mi madre una adicta que cuando me tuvo o se canso de mí, no lo sé, me tiro a un bote de basura… eso me dijeron algunas personas que estaban en la calle igual que yo, nunca los conocí, no sé quien me cuido cuando era bebe después de que mi madre me botara-Hace una pausa y sigue-Pero rápidamente tuve que aprender a defenderme, no habia mucha comida y hacia un frio de los mil infiernos en la noche, a veces tenia que compartir con los perros callejeros y soportar las golpizas de cualquiera persona que estuviera en mi misma situación, la mayoría eran niños pero a veces eran adultos vagabundos que sí que golpeaban duro.
-Tú eres australiano ¿No? ¿Cómo es que conociste a Lucifer?-Pregunto cuando no consigo hilar los puntos.
-Como cualquiera tuve que aprender a defendreme, era solo un mocoso, no media mas de medio metro pero a pesar de todo consegui fortaleza, claro que era difícil porque no comia mucho y casi siempre estaba débil pero hacia lo que podía. Una vez trate de robar a un sujeto que note siempre se paseaba por las calles a una hora especifica… no hace falta decir que no pude robarle nada.
-¿Ese era papa?-Suelta la pregunta la japonesa.
-No, era un traficante de niños-
Al escuchar eso la sangre se me congela eso quiere decir que a Dominic… ¿Lo violaron?
-¿A ti te…?-Dejo la pregunta en el aire.
-Solo preguntas directas-Me vuelve a aclarar y tomando valor lo suelto.
-¿Te violaron?-
-No-Suspiro de alivio al igual que la pareja-Hay diferente tipos de traficantes, unos que se dedican a vender a los mocosos como juguetes sexuales y otros que los usan de entretenimiento, como era mi caso, me golpearon, me desmaye y cuando desperté estaba en un lugar en donde hacia mucho frio, mucho mas del que yo me quejaba cuando dormía en la calle.
»Me llevaron a Alemania, a donde la gente del bajo mundo hacia sus apuestas y ponían a pelear a las personas como animales hasta que solo quedara uno en pie. Yo aun no estaba preparado para eso, no recuerdo mi edad, tal vez tendría 8 o 9 años.
-¿Y como fue que conociste a…?-Cesar hace un ademan con las manos que deja ver que no quiere mencionar su nombre, no sabemos qué reacción tenga si preguntamos por “ella”.
-¿A Julia?-Mi corazón duele por la forma tan decaída en la que dice su nombre-Fue antes de que me secuestraran, no recuerdo que edad tenia pero me estaba muriendo, tenia días sin comer y un frio terrible y ella… paso caminando por la calle acompañada de su padre, no se de donde venían pero ella me miro, se soltó de la mano de su padre fue hasta mi y me dio un pedazo de pan con una sonrisa, asi fue que la conoci.-Miro al suelo y veo porque la quería tanto, ella lo salvo-Pero volviendo al tema, por un año entero me dieron comida y proteínas para que crecira mas y alcanzara ganar con el menor esfuerzo, cuando tuve 10 años comencé a pelear.
»Algunas peleas eran difíciles, otras mas fáciles, me pagaban un poco por eso pero era mas un perro que un niño y entonces a los meses me pusieron a pelear con un niño de mi edad con el cabello gris-Sonrie, supongo que recoradando-
-Ese era Kai ¿No?-No preste atención a quien pregunto perdiéndome en la sonrisa de entre burla y alegría de Dominic.
-Si, era él-Hace una pausa y continua-Tenia un año de haberle pasado lo de sus padres y aun lo estaba superando pero tenia terribles problemas de ira, por eso Lucy lo puso a pelear, para que se descargara-Suspira y apoya las manos de la mesa-A diferencia de él, yo no tenia entrenamiento militar, él si, el maldito era rápido, preciso y parecía endemoniado, me miraba como si de verdad me odiara y quisiera matarme.
»Me defendi como pude, él tenia mas fuerza, no sé de donde la sacaba pero yo tampoco iba a dejar que me ganara, el combate era a muerte y no queira morir tan joven a pesar de que mi vida fuese una mierda, seguimos peleando y me comenzaba a cansar, Kai parecía que aun podía seguir por horas, después de un rato, en medio de la pelea se metió Lucy y le declaro a mi propietario que me llevaría con él porque vio que yo tenia potencial.
»En ese entonces no sabía quiénes eran y tampoco sabía porque el que era mi dueño acepto con tanto miedo, después, al tiempo, supe que ya Lucy tenía una reputación bastante aterradora, nadie buscaba problemas con él y en su mayoría todos preferían ser negociantes a ser uno de sus tantos trabajos, me llevo con él al final.
-¿Pero… entonces si tu fuiste el segundo por que Lucifer dice que Kai, Anna y Carlo son sus tres primeros “hijos”?-Cuestione sin entender ese extraño calculo.
-Porque me escape… si dure un dia con Lucy y Kai fue mucho, después nos volvimos a encontrar, como tres años-Se queda pensativo- Mas o menos, después, antes de que se fuera de Alemania y volvió a acogerme, esa vez no me escape y comencé a vivir con ellos, ya Anna y Carlo estaban con ellos, pero Kai no era muy comunicativo.
»El se expresaba con golpes, era bastante grosero, el problema era que yo también era asi, por eso al principio nos desagradábamos, los dos éramos “Plasta de mierda” para el otro. Pero después vimos que nos llevábamos bien, demasiado bien. Teníamos gustos demasiados parecidos, comenzamos a entrenar como se debería en vez de hacerlo como buscando matar al otro. Todo se volvió más moderado pero no por eso menos competitivo, fuimos creciendo y ahora estamos aquí-
-Pero entonces…-Yume al recordar lo de “Preguntas directas” continua-Si solo viste a Julia una vez en la calle cuando eras un niño ¿Cómo fue que después ustedes se reencontraron?
-Por un trabajo-Responde tranquilo-Kai y yo estábamos haciendo equipo, teníamos que encontrar a la hija de un ricachón que habían secuestrado y estaban amenazando con matarla, la encontramos, yo si la reconocí, no sabía si ella me recordaba pero cuando la devolvimos a su casa ella me dio su número telefónico y correo, seguimos en contacto hasta que llego un día en que fui a su casa, la “secuestre” y la traje para acá.
Ya no sabemos que preguntarle y yo no quería ahondar más en el tema de Julia por lo que se despide y se levanta con las muletas, trato de ayudarlo pero parece que su orgullo de macho se siente herido si lo ayudo por lo que desistí de la idea. Ya tengo una idea más clara de lo que Dominic siente por Julia pero… ¡Por Dios! Sigo en lo mismo, ya Julia murió, Dominic tiene derecho a reconstruir su vida amorosa, no puede dejarse morir, no puede. No conmigo amándolo.
No volví a ver a Daika en toda la noche, ya son cerca de las 11 pm por lo que me meto a hurtadillas a la enfermería y tomo el medicamente que estoy buscando, se parece a la droga pero no es tan nocivo sobre la salud, antes no lo hacía porque ya en si los medicamentos que usaba Dominic lo dejaban bastante adormecido y todo parecía ser un sueño pero ahora que ya no le están administrando nada pues… debo aprovechar, tengo ganas de dar en siguiente paso y por fin tener relaciones con él, no una simple mamada.
Me preparo en mi habitación, me pongo la peluca y me lubrico la entrada para hacer las cosas más rápido, tardo bastante tiempo alistándome por lo que son las 2. 30 a.m. cuando salgo preparado de mi habitación, supongo que ya Dominic está en el quinto sueño y es seguro colarme en su habitación.
Abro la puerta con mucho cuidado, las visagras no rechinan, tienen un buen mantenimiento pero aun asi, ser precavido no es malo, avanzo con cautela hasta la cama y lo veo durmiendo con el rostro enterrado en la almohada dándome su escultural espalda como vista, me acerco lo suficiente y le entierro el dardo con el medicamento, inmediatamente se levanta exaltado, aprovecho que aun esta medio dormido y todo está obscuro para esconderme bajo la cama, siento como da vueltas en el lecho por el colchon hundiéndose y espero que el medicamento haga efecto.
Después de 15 minutos llenos de ansiedad supongo que ya es hora, me deslizo fuera de la cama y me levanto para verlo, ahora parece más dormido que antes, boca arriba y roncando como león, quito las sabanas poco a poco para que no reaccione con algún reflejo involuntario y solo se remueve al sentir el frio tocando su piel, la calefacción esta encendida pero aun asi hace frio, el invierno es terrible, mis piernas tiemblan por mi falda.
Lo observo ya sin las frazadas, admiro el tatuaje de su pecho junto a sus cicatrices, conserva la parte baja del pijama, unos pantalones blancos largos y se nota que son suaves, me subo y me siento a ahorcajadas en sus piernas y comienzo a masajear sus pectorales y abdomen, no hay mucha reacción por lo que me acerco y saco la lengua para lamer un poco de su cuello, suspira de gozo y sus manos suben a mis caderas sin que él aun haya abierto los ojos. Hago de las mias y chupo el lóbulo de sus oreja y comienzo a susurrarle, no importa que despierte, no recordara nada.
-Despierta, dormilón…-Hago una pausa y comienzo a besar sus labios que después de unos segundos me envuelven en un beso apasionado-Quiero que me des algo-Le menciono coqueto con mi voz de “Mujer” quito sus manos de mis caderas y me siento sobre su miembro para comenzar a mover mi trasero y ponerlo duro.
Dominic por fin abre los ojos y suelta un gruñido, noto que me ve y a la vez no, es una buena droga, se incorpora con sus codos y trata de masajear mi peluca rubia pero no lo dejo y le doy un zape con la mano, el entiende que no va a tocarme y toma con fuerza las cubiertas de la cama, me mira con deseo, insomnio y excitación.
Me alzo y me quito de su entrepierna acomodándome para poder atender a su “Amiguito”. Bajo sus pantalones para ver sus bóxers negros, me relamo los labios y comienzo a mosdisquearlo y masajearlo sobre la ropa, lento, luego rápido, hago que apriete los dientes y suelte el aire con fuerza, cada vez que quiere tocarme la cabeza lo alejo de un manotazo, no habla, solo gruñe, supongo que por la droga no esta muy conciente… ¿Esto se considera violación? Voy a meter su pene en mi culo, en todo caso yo seria el que podría salir lastimado, Dominic va a disfrutar, no es violación.
Quito sus bóxers besando la punta de su pene y observo lo inmenso que es, rojo con la punta rosada, venoso, grueso… y aun no está totalmente erecta, duda poder cerrar mi mano a su alrededor cuando esté totalmente duro. Paso la lengua por el glande y luego por todo el tronco babeándolo y haciendo los sonidos que excitan siempre a cualquier hombre, llego a sus testículos y los meto en mi boca uno a uno, son muy grandes para meterlos juntos, veo su pene y comienzo a pensar que se sentirá tenerla dentro, mi entrada se aprieta por el pensamiento y me lastimo un poco por el dildo que tengo metido ahí.
Engullo de lleno su enorme miembro y la parte que no puedo tragar la masturbo con mi mano, siento como levanta la pelvis queriendo meterla más en mi boca pero es imposible, ya no me entra, me atraganto un poco por lo que con mi otra mano lo empujo hacia la cama para que entienda que me esta ahogando, parece comprender y trata de no hacerlo otra vez, hago el movimiento delirante de subir y bajar rápidamente, luego más lento, ronroneo, chupo y mordisqueo solo un poco su verga levanto mi vista después de varios minutos en mi ardua tarea de darle sexo oral y lo veo con los ojos cerrados, la frente sudorosa y la mandibula apretado, es tan sexy, su pecho comienza a subir irregularmente, los espasmos y su pelvis ya no los puede controlar.
Se que se va a correr pero esta vez no, esta vez no saldré de esta habitación hasta haber cabalgado su pene.
Me detengo haciendo que su pene salga de mi boca con un “Pop” bastante húmedo y él abre los ojos desesperado, abre la boca soltando un delicioso gemido ronco, pronto, pongo mi dedo sobre sus labios distrayéndolo, sin que se de cuenta bajo mi otra mano y me quito el dildo para ponerlo entre las sabanas, me quito la lencería de mujer y se la arrojo a la cara, él la aprieta en su mano y cuando trata de levantarse yo vuelvo a sentarme en su cadera, levanto solo un poco mi falda, tomo su miembro con una mano mientras con la otra mantengo el equilibrio y siento la punto rozando mi entrada.
Siempre he querido esto, la anticipación me esta matando, me penetro y con solo la punta siento que ya puedo correrme como una cascada, bajo mas y se abre camino entre mis nalgas, siento como me expando y mi pene se endurece mas y mas, es tan rico, quiero, necesito tocarme pero no puedo, no mientras Dominic me este viendo tan fijamente, sigo bajando y comienzo a preguntarme cuando llegare a la base, se me hace interminable la sensación, el grueso y lo largo me matan, jamás había estado con un hombre que la tuviese así, cuando al fin mis nalgas tocan su cadera no lo aguanto y en seguida apoyo mis manos en su pecho y empiezo a moverme.
-Ng… ng mmm-De mi boca solo salen sonidos lascivos, de mi trasero el chapoteo húmedo me enloquece más y ¡Dios! Su pene, podría morir feliz en este momento-Ah ¡Ah!… ahmmm- Me muevo mas y mas y Dominic toma mis caderas con sus grandes manos y me ayuda a subir y bajar empalándome en su maciza verga. Sus musculos sudorosos se tensan de forma erótica y me mira con sus ojos envueltos en un gran y puro deseo-¡Dios! ¡Sí! ¡Sí!-Encuentra el angulo correcto de mi próstata y su cadera sube y baja penetrándome, llenándome, reclamándome.
Me quedo arriba con ayuda de mis rodillas y cuando el sube la cadera yo bajo mi trasero con fuerza clavándome en su enorme pene-¡Ahí! No pares ¡Que rico!-Lo repetimos una y otra vez, echo mi cabeza hacia atrás con las corrientes eléctricas recorriendo mi espina dorsal, el cosquilleo y la calentura me vuelven loco, siento el calor en mi vientre, es magnífico. Muevo mi cadera en forma de 8 lento y el grune con sudor bajando por sus mejillas y nariz, se que lo vuelvo loco, lo hago tan lento después de haber tenido ese ritmo rápido que Dominic de un momento a otro me tumba sobre el colchon y mi mayor deseo se cumple.
Sentirme dominado bajo su enorme cuerpo, su respiración agitada en mi cuello su miembro penetrándome sin piedad, llenándome profundamente con cada estocada, clavo mis uñas en su espalda y me arqueo del placer-Ng… Ahn…mmhg-Dominic me levanta por debajo de los brazos y nuevamente estoy cabalgándolo, ahora con la diferencia de que él esta sentado, hago mi cabeza hacia atrás y grito de placer-¡Dominic! ¡Domi… humm!-
Ya no aguanto más, no puedo, siento que voy a explotar, vuelve a tirarme en la cama y la peluca se me cae pero no importa, me olvido completamente de tocar mi erección, solo con el placer de mi culo voy a terminar. Dominic sigue y el movimiento de su cadera entrando y saliendo de mi me enloquece, grito corriéndome y apretando su pene.
Dominic gime quedo y de pronto siento su semen caliente innudandome, otra de mis fantasias… sentir como me llena al terminar, es glorioso, calido, no puedo regular mi respiración, siento que mis piernas como gelatina, los espasmos me hacen temblar, jamás me lo habían hecho tan salvajemente.
El Alacran se desploma sobre mí sin sacar su pene de mi culo y respira agitado, yo masajeo su espalda un poco sangrante por sus anteriores heridas y los rasguños que acabo de hacerle y beso su cara, no me importa que este sudado, amo todo de él. Luego de un rato con mucho esfuerzo lo quito de encima y por fin saco su pene, me siento muy vacio sin nada ahí, su semen llena las sabanas y yo me toco sintiendo lo dilatada que me dejo, no es de sorprender, una gran sonrisa de felicidad surca mi cara y mis mejillas se tiñen al tocarme donde estuvo él.
Estoy inmensamente feliz, al fin pude estar con él.
Tomo mi peluca y mi dildo, al poner mis piernas en el suelo me tambaleo como un ciervo recién nacido, claro que también duele pero no me importa, salgo de la habitación y me apoyo de la puerta suspirando como colegiala, mi hipótesis de que Dominic era un animal en la cama está totalmente comprobada, soy indudablemente feliz.
Me voy al baño a quitarme toda la evidencia y noto que en medio de mi total extasis no me percate de cuando me hizo chupones en el cuello, los observo y los toco sintiéndome feliz ¡Al fin! ¡Al fin! Estuve con mi amado Alacran. Voy a mi habitación a dormir un poco ya que son casi las 3:30 a. m. me duermo imaginando sus brazos a mi alrededor y su pecho en mi espalda.
Despierto cerca de las 8 de la mañana me levanto y nuevamente siento los efectos de haber pasado una noche con Dominic, después de un rato camino normal, o bueno, más normal, la bufanda y los guantes me ayudan a disimular todas las marcas que me hizo mi amado en el mar de pasión que tuvimos anoche.
Voy al baño, me hago mi aseo y voy al comedor tengo que contarle todo a Daika, explotare si no lo hago, entro y veo que él ya esta ahí, sentado con su amado peli-gris, voy hasta el castaño lo mas rápido que mis piernas me lo permiten y lo jalo del asiento llevándomelo, le hago un ademán de saludo con la mano a Kai pero no es mucho.
Me lo llevo hasta la fila para tomar la comida y lo suelto.
-¡Daika lo hice!-Le expreso totalmente feliz.
-¿Qué cosa?-Daika esta en las nubes hasta que su mente hace click y me ve con ojos impresionados-¡¿Qué?! ¿En serio?-Su boca sigue abierta de la impresión y la cubre con ambas manos-¿Cómo lo lograste?
-Fui a la enfermería y pues… me puse a investigar alguna droga y la conseguí-Me encojo de hombros al decir mi táctica.
-¿Lo drogaste?-Parece totalmente perprejo por mi plan pero es que no se me ocurrió nada mas.
-Sí, pero eso no le impidió naaadaaa-Hago énfasis en la última palabra, tomo sus manos y las aprieta-Dominic es un animal, mis piernas aun tiemblan como gelatina-Daika se pone rojo de inmediato.
-¡No me digas esas cosas!-Suelta mis manos de inmediato y se tapa los oídos, que tonto, como si él nunca hubiese tenido sexo con Kai.
-¡Es la verdad! La próxima vez tengo que amarrarlo, hasta se me cayó la peluca de tanto que me subía y bajaba, fue increíble estar con Dominic, Daika y su enorme pe…-
-¿Qué dijiste?-Una tercera voz se hace presente detrás de mí y no necesito voltear para saber que es Kai. Un terrible escalofrió invade mi columna-Repítelo-Me doy vuelta y lo veo de frente, su cara es una muestra de incredulidad, molestia y mas incredulidad.
-Kai no…-Daika se trata de acercar pero Kai lo detiene antes.
-No, Daika-Lo interrumpe subiendo su mano y dándole a entender que en este preciso momento no va a hacerle caso-Te pregunte algo Eian, respondeme-Me pongo muy nervioso, las manos me comienzan a sudar, Kai siempre me dice Cara de bebe, nunca me llama por mi nombre.
-Kai, solo hablábamos de la comida-Trato de a como dé lugar desviar el tema.
-¿Tuviste sexo con Dominic?-Las palabras se me traban en la garganta y agradezco que no nos estén prestando atención, solo asiento, no recuerdo como hablar-¿Qué hisciste?-Sus preguntas son directas y claras, sabe que me da vergüenza por lo que no busca hacer preguntas que no impliquen mucha explicación.
-Tome una droga de la enfermería-Kai aprieta los ojos y la mandibula-¡Pero él no lo recordara!-
-Si, si lo hara-Me dice de frente-No sabes lo que hiciste-Me habla en siseos-Meterte en su cama no es algo que una persona pensante haría y menos un hombre Eian-Rechina los dientes pero no hace ningún ademan de querer golpearme, Kai me está regañando.
-Pero no lo sabrá, yo me disfrace y…-
-¿Qué?-Sus ojos se abren de total impresión-No, no, esto no puede estar pasando-Mueve la cabeza de izquierda a derecha junto a sus palabras y luego me mira de frente otra vez-¿Tu… eres la “Señorita”?-
Trago saliva.
-Si-
Kai suelta el aire por la boca, como un jadeo estrangulado y me mira totalmente aflijido, su mano móvil va hasta su cara y cubre sus ojos estrujándolos.
-Pero él no lo recordara-Vuelvo a decir y Kai me mira de frente.
-Si lo hará Eian, te lo aseguro, el no es el tipo de borracho o drogadicto que olvida todo al día siguiente, sin importar lo que ingiera, te recordara-
-Pero antes con los medicamentos él creía que eran sueños-Me defiendo tratando de convencerme de que lo que Kai dice es mentira.
-Porque esos eran medicamentos, no droga-Vuelve a sisear con molestia, me toma el hombro-¿El te vio?-Estoy muy nervioso, Kai parece muy preocupado y bastante desesperado por mi respuesta-Sé que estabas disfrazado pero… ¿Dominic te vio?
Lo pienso pero no creo que ese momento cuando se me cayo la peluca…
-Hombre crei que no te vería en días-Se hace presente la voz del Alacrán el cual avanza con sus muletas hacia nosotros. Kai enseguida parece como si nunca se hubiese molestado.
-Si… me ayudaron bastante ayer-Se da la vuelta y se miran de frente-¿Cuándo te van a quitar esa cosa? A mí me quieren quitar esto y ponerme un cabestrillo-Hace alusión a su brazo enyesado.
-En unas semanas sere libre de estas putas muletas-Siguen hablando hasta que…-Niño-Se que me habla a mi-¿Y la coneja? ¿No vas a sacarla a estirar las piernas como la otra vez?-
-Si, cierto-Veo mi oportunidad para escapar, estoy muy nervioso, comienzo a caminar con la cabeza gacha saliendo del comedor, un escalofrió vuelve a recorrerme y mi corazón latiendo asustado no me ayudan a mantener la calma, corro por los pasillos y llego a mi habitación, tomo a Aria con las manos temblando y camino hacia el jardín, debo parecer relajado, no creí que todo se pondría asi.
Kai me puso muy nervioso, no se si deba creerle o no, tal vez solo eran habladurías suyas y ya. Doy vuelta en la esquina y me estampan contra la pared, no…
Esto no puede estar pasando.
-¿No vas a chuparme la verga, puta… o es que necesitas tu peluca?-
CONTINUARA…