Está Noah con su 1'62, una corta melena pelirroja y sus ojos verdes. Tiene un solo amigo: Joaquín y un secreto: el baloncesto. El clásico chico bajito, inteligente y empollón que es el objeto de todas las burlas, pero éste con su malhumor no se deja pisotear agravando, en muchas ocasiones, la situación.

Por otro lado, está Ian con su 1'90, pelo negro y corto y ojos oscuros como la profundidad de un abismo. El típico popular con un estilo skater, un par de dilatas y dos piercing en el labio inferior. Ligón y prepotente, conocido por todos, pero solo considera que tiene dos amigos: David y Héctor. Juntos forman el llamado "Trío Popular", uno de los tantos que se meten con la pequeña Noah.

Ser adolescente no es sencillo, eso es algo que todos sabemos.

Pero ser un adolescente con un pasado oscuro, enamorado de un tipo al cual no conoces pero que te envía cartas, eso, sin duda no es normal.

Por si fuera poco, ser un adolescente que se siente vagamente atraído por su hermanastro, el cual te mira con desprecio, es peor.

Si quieren agregarle un poco, ser un adolescente perseguido por otro tipo que se autoproclama galán de la escuela, tiene un asistente sumamente fiel, el cual te amenaza y te exije que te alejes, eso sí es terrible.

Y si quieren más, ser un adolescente con un par de amigos anormales, uno agresivo e intimidante y el otro frío hasta los huesos, que solamente arruinan tu reputación, eso es realmente malo.

Oh... pero espera... Creéme, no hay nada peor que ser un adolescente que tuvo que soportar el divorcio de sus padres y a una hermanita que encontró refugio en la actividad más pervertida que nunca debió conocer.

Porque eso, mis queridos amigos, eso sí es el infierno.

Aunque bueno... no hay que exagerar... quiero decir... ¿Qué tan malo puede ser tener una fujoshi en tu vida?

Mucho, más de lo que Takashi Kotori alguna vez pensó.

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La precuela del CAFF!!! ;)