Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Chang Ai por N3K0-Ch4N

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Era un nuevo día en la casa de playa del Señor del Fuego, Aang y Zuko continuaron con su entrenamiento de fuego-control mientras Katara y Toph (quienes ahora vestían sus conjuntos robados de la Nación del Fuego), los observaban. Ambos, maestro aire y fuego, estuvieron entrenando por una larga hora pero, como siempre, parecía que nunca se cansarían de hacer eso, la conexión entre los dos se hacía más fuerte con cada flama lanzada, y la armonía y la sincronía eran perfectas, tal como las habían aprendido. Los movimientos eran rápidos y certeros, pero a la vez eran realizados con cuidado y afecto, cualquiera que se detuviera a observarlos, se sorprendería de la armonía que esos dos compartían, peleaban casi como si estuvieran bailando y se miraban como si estuvieran mirando el reflejo de un espejo, era uno de los pocos momentos donde podían ser ellos mismos sin correr el riesgo de temer a compartir dicha conexión o de llegar a ser descubiertos.

El entrenamiento fue duro y cuando se dieron la oportunidad de tomar un respiro, se miraron el uno al otro y se agradecieron en silencio con una pequeña sonrisa dibujada en sus rostros.

-¿No es extraño que nos estemos escondiendo en la casa del Señor del Fuego?-preguntó Katara mirando a Toph, quien estaba recostada en el frío suelo de piedra, sus ciegos ojos cerrados y ambas manos colocadas debajo de su cabeza.

-Te dije que mi padre no ha venido aquí desde que nuestra familia está relativamente feliz-respondió Zuko a la maestra agua mientras se secaba el sudor con una toalla-y eso pasó hace mucho tiempo, este sería el último lugar donde nos buscaría-le entregó un vaso de agua a Aang quien lo tomó y bebió todo el contenido.

-Ustedes no van a creer esto. Hay una obra de teatro sobre nosotros-dijo Sokka apenas él y Suki regresaron a la casa y caminaban hacia sus amigos.

-Estábamos en la aldea y encontramos este póster-dijo Suki con entusiasmo mostrando el póster en la mano de Sokka.

-¿Qué? ¿cómo es eso posible?-preguntó Katara mientras se acercaba a apreciar aquel póster, al igual que Aang.

-Escuchen esto-dijo Sokka mientras comenzaba a leer-"El Niño en el Iceberg" es una nueva producción del aclamado escritor Puan Tin, quien viajó por el mundo recolectando información sobre el Avatar, desde el helado Polo Sur hasta el corazón de Ba Sing Se. Sus fuentes incluyen nómadas cantantes, piratas, prisioneros de guerra y un conocido comerciante de coles-

-Traido a ustedes por los aclamados actores de la isla Ember-continuó leyendo Suki, una vez que terminaron, Zuko soltó un suspiró quejumbroso.

-Mi madre solía llevarnos a verlos-dijo Zuko con una postura que denotaba cansancio pero que en realidad solo quería expresar que estaba aburrido-matan "Amor entre Dragones" todos los años-

-Sokka ¿tú crees que es una buena idea que asistamos a una obra sobre nosotros?-preguntó Katara mientras desviaba la mirada hacia su hermano y la guerrera Kyoshi junto a él.

-Oh, vamos ¿un día en el teatro? es la clase de tonterías que he estado extrañando-insistió Sokka mientras observaba a los demás integrantes del grupo con una enorme sonrisa.

El equipo Avatar no pudo oponerse a la insistencia del guerrero de la Tribu Agua del Sur, por lo que fueron al teatro más tarde esa misma noche. Cuando llegaron allí, vieron que había muchas personas listas para asistir al show, Aang tuvo que usar un sombrero en la cabeza para esconder sus tatuajes de flechas y Zuko una capa oscura para esconder la cicatriz en su rostro, el maestro fuego siguió al grupo mientras subían las escaleras hacia un balcón que estaba desocupado, llegaron al balcón sin que muchas personas los miraran de cerca, pero Zuko tuvo que ajustar un poco más la capucha de su capa con esperanza de que no lo notaran, Katara lo miró mientras se movían hacia las filas de asientos de los cuales estaba compuesto su balcón, y movió la cabeza para indicarle donde debía sentarse… entre ella y Aang. Zuko sintió un pequeño estimulo de ansiedad burbujear dentro de él ante la idea de sentarse cerca del niño aunque sea por unas horas, pero Aang, bueno, él no estaba con el mismo pensamiento, trató de sentarse al lado de Katara porque quería ver la obra con su amiga, pero Zuko se le adelantó y se sentó primero dejando al joven Avatar un poco decepcionado.

-Hey, uh… yo quería sentarme allí-dijo Aang decepcionado.

-Solo siéntate junto a mi ¿cuál es el problema?

-Pero solo quería… está bien.

Aang no discutió más y se sentó al lado del maestro fuego, Zuko, por otro lado, tuvo que contener el impulso de rodear con su brazo el hombro de Aang como Sokka lo estaba haciendo con Suki.

-¿Por qué estamos sentados en el sector de hemorragias nasales?-dijo Toph quejándose de la elección de los asientos-mis pies no pueden ver nada desde aquí-

-No te preocupes, le diré a tus pies lo que está pasando-le dijo Katara.

Las luces se apagaron y la obra comenzó con Sokka y Katara en una canoa, los verdaderos Sokka y Katara se emocionan al ver esto, la actriz que interpreta a Katara da un largo discurso sobre la esperanza mientras el actor que interpreta a Sokka hace bromas sobre lo hambriento que está, para decepción de los verdaderos Sokka y Katara. Se encuentran con un iceberg con un muñeco de Aang dentro, la actriz de Katara usa su "agua-control" para liberarlo, apenas el actor real sale a la superficie, Aang se sorprende al ver que una chica lo está interpretando, los actores se dan cuenta de que Aang es el Avatar y de paso, Appa emerge del iceberg diseñado de manera similar a un dragón chino. La actriz que interpreta a Aang es insoportablemente alegre y entusiasta, además de que le gusta jugarle bromas pesadas a todos irritando al verdadero Aang, para diversión de Toph.

La siguiente escena muestra a los actores de Zuko e Iroh navegando en el océano, el actor que interpreta a Iroh es muy bajo y gordo, mientras que el actor que interpreta a Zuko tiene una mascara de cicatriz en el ojo incorrecto, el actor de Iroh le sugiere a Zuko que coma un poco de pastel, pero éste último dice que no tiene tiempo, que debe recuperar su honor al encontrar al Avatar.

-Me hicieron totalmente rígido y sin sentido del humor-comentó Zuko un poco molesto.

-En realidad, creo que ese actor está bastante acertado-bromeó Katara.

-¿Cómo puedes decir eso?-le preguntó el maestro fuego aún molesto con el patético desempeño que hacía el actor sobre sí mismo.

La obra transcurre resumiendo de forma muy satírica todas las aventuras que el equipo Avatar vivió en el Libro Uno: Agua, Aang encuentra a Momo (retratado con un títere de calcetín) en el Templo Aire del Sur, quien al moverlo le dice a la audiencia "¡Hola a todos! ¡los amo!", el actor de Sokka vestido como guerrera Kyoshi, se acerca y le pregunta a la actriz que interpreta a Suki si ese vestido hace que se le vea gordo el trasero lo que avergüenza al verdadero Sokka y hace reír un poco a Suki. En la escena que representa la ciudad de Omashu, el Rey Bumi desafía a Aang a salvar a Katara y a Sokka, y la actriz de Katara se desmaya por la presión, en la siguiente escena, se ven a los piratas atacando al equipo Avatar para recuperar el pergamino de agua-control.

-¿Por qué tuviste que robar ese pergamino de agua-control?-le preguntó el actor de Sokka a la actriz de Katara mientras caminaba a pasos de gallina.

-¡Simplemente me dio mucha esperanza!-exclamó la mujer entre sollozos mientras sostenía un tubo de cartón pintado para que parezca el pergamino de agua-control, ese comentario solo ofendió más a Katara.

Luego, la escena cambió hasta el momento en que Aang es capturado y llevado a la fortaleza de Zhao como prisionero, solo que en lugar de ser Zhao quien lo capturó, en esa obra era Zuko.

-¡El Avatar es mío!-exclamó el actor de Zuko elevando sus brazos al cielo-espera ¿quién está ahí?-

-Soy el Espíritu Azul, la amenaza de la Nación del Fuego, estoy aquí para rescatar al Avatar-exclamó el Espíritu Azul mientras aparecía en escena para salvar a un capturado Aang, no sin antes tener una pequeña batalla con el actor de Zuko quien al verse derrotado, sale corriendo de allí.

-¡Mi héroe~!-exclama la actriz de Aang con un tono enamoradizo y salta sobre su cabeza para posteriormente abandonar el escenario, esto solo hizo que Aang y Zuko se sintieran un poco incómodos al tiempo que desviaban las miradas por la vergüenza que sentían en ese momento, por favor ¿acaso se veía tan obvio?

Jet destruye una aldea invocando una inundación solo para complacer a Katara, quien al parecer está locamente enamorada de él.

Sokka y la princesa Yue se besan en el Polo Norte, y Sokka sospecha que ella cenó pescado en escabeche debido a su mal aliento. Yue se despide de él, ya que tiene importantes "deberes lunares" que atender y asciende al cielo, confirmando después que efectivamente, sí, comió pescado en escabeche. Esta escena hace que el verdadero Sokka derrame lágrimas, Suki, por otro lado, no podía creer que Sokka hubiera besado al espíritu de la Luna.

La actriz de Aang, vestida con un traje de pez koi azul, pisotea y patea unos pequeños modelos de barcos de la Nación del Fuego que eran movidos por unas cuerdas en el suelo al tiempo que sujetaba un muñeco de Zhao en su mano y lo sacudía con fuerza.

-¡El Avatar ha vuelto para salvar el día! ¡yaaaay!-gritó con entusiasmo, apenas cayó el telón concluyendo así la primera parte de la obra, el público, incluyendo Toph, aplaudió y gritó eufórico, mientras que el equipo Avatar gruñó molesto por la mala interpretación.

Luego de ver esa penosa parte de la obra, el equipo Avatar salió para el intermedio, todos disgustados y avergonzados por la forma en que fueron retratados.

-Hasta ahora, este intermedio es la mejor parte de la obra-comentó Sokka bajando las escaleras con una bolsa de carne seca y tomó asiento junto a Suki-el dramaturgo cree que soy un idiota que hace chistes malos sobre comida todo el tiempo-

-Sí, haces chistes malos pero de muchos otros temas-le dijo Suki al guerrero de la Tribu Agua del Sur con una sonrisa burlona.

-¡Ya lo sé!

-Al menos el actor de Sokka se parece a ti-dijo Aang tratando de encontrar el lado positivo de la obra cuando no había nada bueno que resaltar-la mujer que interpretó al Avatar no se parece en nada a mi-

-No lo sé. Estás más en contacto con tu lado femenino que la mayoría de los chicos-comentó Toph encogiéndose de hombros, Aang desvió la mirada un poco sonrojado y tuvo que reconocer que la maestra tierra tenía razón en lo que decía.

-Relájate, Aang. No son representaciones precisas-dijo Katara intentando levantarle el ánimo-no es como si yo fuera una predicadora llorona que no puede evitar dar exagerados discursos sobre la esperanza todo el tiempo-la maestra agua se calló al ver que todos sus amigos, incluyendo su hermano, la miraban un poco extrañados-¿qué?-

-Sí, esa no eras tú en absoluto-dijo Aang apoyando el comentario de su amiga mientras se sentaba de nuevo en la escalera.

-Escuchen amigos, el dramaturgo hizo su investigación. Sé que duele, pero lo que están viendo en el escenario es la verdad-dijo Toph.

Regresaron para ver el segundo acto, comenzó con ellos tratando de encontrar un maestro tierra-control para Aang, la verdadera Toph se percata de que este era el momento de su aparición y se emociona, el falso Toph aparece como un hombre extremadamente fornido, lo que sorprende a todos, aunque Zuko se muestra un poco aturdido ante la aparición.

-Bueno, Toph, lo que acabas de oír es la verdad. Te duele ¿no es así?-dijo Katara intentando burlarse de la maestra tierra, pero Toph en lugar de sentirse herida o avergonzada, estaba muy satisfecha con su interpretación.

-¿Estás bromeando? No lo habría elegido de otra forma-exclamó la maestra tierra mientras se reía-al menos no es una chica voladora y calva-

En vez de usar sus pies para ver y sentir las vibraciones de la tierra, el actor de Toph emite una onda sónica a base de gritos, rápidamente grita aturdiendo a todos en la audiencia, los que los deja un poco conmocionados. Toph, sin embargo, luce una gran sonrisa demostrando lo deleitada que estaba con su personaje. La obra continúa mostrando a Zuko e Iroh tomando caminos separados porque Iroh piensa que el cabello de su sobrino es "demasiado largo", más tarde, se puede ver a todos arrinconando a la princesa Azula quien escapa con suerte engañando a Zuko y a los demás para que miraran al cielo.

-¿Qué es eso?-dijo la actriz de Azula mientras señalaba al cielo-¡creo que ese es tu honor!-

-¡Escapó! Pero ¿cómo?-exclamó la actriz de Katara mientras miraba a la audiencia.

En la siguiente escena, Azula y Aang pelean sobre un taladro, lo que hace que el público se duerma de aburrimiento. Luego la obra muestra a Jet siendo hipnotizado para atacar a Aang por el Rey Tierra pero es aplastado por una roca de papel mache, el verdadero Zuko se muestra un poco impactado por la revelación.

-¿Jet acaba de morir?-le preguntó Zuko a Sokka sentado detrás de él.

-Meh, eso nunca lo sabremos-respondió Sokka despreocupadamente.

La siguiente escena de la obra muestra a Zuko y Katara encarcelados en las catacumbas de cristal, la actriz de Katara empieza a coquetear con el actor de Zuko haciendo que sus respectivas contrapartes se sintieran un poco incomodos ya que no fue así como pasó y esto los obliga a alejarse un poco. Aang no pudo resistir más y salió del teatro, aunque creía las palabras del maestro fuego, no era capaz de aceptar que eso no sucedió en realidad, únicamente mencionaron el hecho de que Katara era la "chica del Avatar" y que a Zuko no le interesaba Aang en lo más mínimo, podía ser una actuación pero el dolor que sentía dentro de sí era muy real. Luego de que todos salieran del teatro, el grupo se sentó en uno de los pasillos para descansar de la pesadilla y esperar a que el intermedio terminara, Sokka y Suki estaban discutiendo mientras que Zuko estaba sentado en el suelo.

-¿Alguno de ustedes vio a Aang?-preguntó Zuko desde su lugar en el suelo.

-Salió a comprarme unos snacks hace diez minutos y sigo esperando-respondió Sokka poniendo los ojos en blanco en señal de impaciencia y aburrimiento, Zuko desvió su mirada hacia Katara.

-No te preocupes, revisaré afuera-le dijo la maestra agua.

-No, déjame ir. Algo me dice que yo tengo la culpa de todo esto-le dijo Zuko, se levantó del suelo y fue a tras el menor. Apenas llegó al porche, encontró a Aang muy molesto por lo sucedido en la obra, apoyándose contra el barandal mirando al mar-oye ¿está todo bien?-

-No, no está bien-le dijo Aang mientras miraba al maestro fuego a los ojos-odié esa escena-se quitó el sombrero de la cabeza y lo arrojó con fuerza al suelo.

-Se que suena horrible, pero creo que estás exagerando-le dijo Zuko intentando calmar al niño.

-¿Exagerando?-el joven Avatar se giró para mirarlo-si mi chakra no estuviera bloqueado, probablemente estaría en el estado Avatar-

Claramente estaba molesto y Zuko se dio cuenta de ello, pero intentó mantener la calma, se acercó al niño y se puso de pie a su lado, apoyando su pecho contra el barandal del porche.

-Sé que estás molesto, pero yo también. Te entiendo.

-¿Por qué razón estás tan molesto?-le preguntó Aang mirándolo fijamente.

-Para mí, están mostrando todos los errores de mi vida y me los echan en cara-respondió Zuko bajando la mirada, miró la playa iluminada por la luna, la cual brillaba en el cielo nocturno-mi tío… él siempre estuvo a mi lado, incluso cuando las cosas estaban mal, siempre estuvo ahí para mí, me enseño muchas cosas ¿y cómo se lo agradecí?-el maestro fuego elevó su mirada-clavando una daga en su espalda, ese fue mi mayor error y es posible que nunca pueda redimirme-

Ambos volvieron a contemplar las olas del mar, todo parecía estar tan tranquilo y calmado, pero sus corazones estaban afligidos y adoloridos.

-Zuko… déjame preguntarte algo ¿era cierto lo que dijiste allá?

-¿En dónde? ¿de qué estás hablando?

-En el escenario, escuche a ese actor tuyo decir que yo no significaba nada para ti y que no sientes lo mismo por mi-Aang volvió a mirarlo, ambos quedaron frente a frente.

-Nunca dije eso, fue ese actor quien lo dijo-respondió Zuko, ahora comprendía la molestia del menor.

-Pero es cierto ¿no? quiero decir, tu y yo nos abrazamos y besamos en el día de la invasión y creí que después de eso todo estaría bien entre nosotros y estaríamos juntos. Especialmente cuando traicionaste a tu familia, a tu nación y te uniste a nuestro equipo-dijo el joven Avatar, la expresión en su rostro se estaba tornando cada vez más y más triste-pero eso no sucedió, no estamos juntos… al menos no de la forma que yo quiero-

-¿De qué estás hablando?-dijo Zuko sin entender lo que Aang le estaba diciendo, el menor bajó la cabeza nuevamente apretando los puños fuertemente, miró al maestro fuego y lo abrazó con fuerza.

-Te amo, Zuko. Te amo tanto que no puedo dejarte ir, no importa cuanto lo intente-dijo Aang mientras escondía su rostro en el pecho del maestro fuego-y quiero que estemos juntos pero no solo como amigos, sino también como… como novios-

Zuko no habló, solo permaneció en silencio al recibir el abrazo del joven maestro aire, luego reaccionó y correspondió el abrazo envolviendo sus brazos alrededor de la cintura del menor con fuerza en un intento por mantenerlo cerca de él todo el tiempo posible.

-Sabes que nadie ha sospechado de nosotros-dijo Zuko mientras reconfortaba al niño-hay personas que se preocupan por ti y te cuidan, incluso Katara ha hecho todo lo posible para que estemos juntos, en resumen, sabes exactamente como me siento por ti, ya te dije que yo te…-se detuvo por un segundo pensando en lo que iba a decir a continuación y finalmente encontró las palabras adecuadas-que tú me gustas, pero creo que ahora no es el momento de comenzar una relación, estamos en una guerra y cuando te enfrentes a mi padre no quiero que te quedes a mi lado o te preguntes si estoy bien, pero, como ahora estoy bien, siempre debe haber una promesa involucrada-

-¿Me prometes que no morirás en la guerra? ¿o que si yo muero serás feliz con alguien más?-preguntó Aang, los celos y el miedo a perderlo eran más fuertes que nunca.

-No-dijo Zuko, algo que hizo que el menor frunciera el ceño pero el maestro fuego se rió de su irritación-no puedo prometerte eso porque… cuando la guerra termine, y si ganas, quiero que estés a mi lado ya sea como mi amigo, mi novio o… mi esposo, honestamente no me importa-

Los ojos grises del joven Avatar se abrieron y brillaron, si hubiera elegido a Katara para quedarse a su lado, sabía que algo así nunca sucedería, pero con Zuko era diferente, sentía que era la persona adecuada para él.

-¿El Príncipe Zuko, hijo del Señor del Fuego Ozai casado con el Avatar?-dijo Aang, no podía creerlo, si alguien más escuchara eso, pensaría que la idea sonaba loca pero era el tipo de locura que solo a Aang le encantaría cometer.

-Sé que se oye loco y que sería un escándalo, pero me encanta ser el centro de atención-respondió Zuko mientras le guiñaba el ojo a Aang, pudo ver un sonrojo aparecer en sus mejillas-pero, claro, solo si tu aceptas mi propuesta-se acercó y cerró la distancia besando al pequeño monje, fue un beso dulce y un poco húmedo, cuando se separaron vio el rostro de Aang teñirse por completo de rojo-bueno, voy a entrar, nos vemos adentro. Me alegra que hayamos arreglado las cosas entre nosotros-

Y así, Zuko le dio la espalda y se fue, sintiendo su propia cara calentarse y ponerse roja.

-Soy un idiota apasionado-dijo Aang, recogió su sombrero del suelo y se lo puso en la cabeza, volvió al teatro y se sentó junto a Zuko, Katara se había ido y ahora estaba sentada al lado de Sokka y Suki, todo el grupo había entrado para ver esa pesadilla que parecía no tener fin.


-Viejo ¡esa obra fue horrible!-se quejó Sokka una vez que salieron del teatro. Todos habían salido de allí con un mal sabor de boca, al final la obra resultó no ser más que una gran sátira de todos sus errores y para el último acto, la batalla final contra el Señor del Fuego Ozai había salido mal, todos sus planes habían fallado, Zuko murió peleando contra su hermana, Aang murió enfrentando a Ozai y la Nación del Fuego ganaba la guerra.

-Todas sus obras son así-respondió Zuko mientras se abría paso por el empinado sendero que conducía a la casa de playa, Aang caminaba cerca de él mirando el suelo.

El grupo entró en la casa haciendo ruido y se dirigieron a sus respectivas habitaciones, Aang siguió a Zuko sin dejar de mirar al suelo y sin prestar atención en donde estaba, en eso, Zuko se detuvo abruptamente.

-¡Oof!-jadeó Aang cuando tropezó con Zuko y cayó de espaldas al suelo-¿qué no...?-al ver que estaban en casa, se detuvo, no tenía idea de dónde estaba hasta ese momento.

-¿Estás bien, Aang?-preguntó Zuko-te veías bastante distraído desde que salimos del teatro-

-No ¿yo? ¿distraído? ¡estoy bien! ¡en serio!-respondió el maestro aire, pero la mirada en el rostro del maestro fuego le mostró que no creía en nada de lo que decía-¿a quién estoy engañando? No, no estoy bien… al menos no del todo-

-¿Cuál es el…?

-¿Qué pasa si no puedo hacerlo?-lo interrumpió el joven Avatar-el destino del mundo cae sobre mis hombros pero no sé si pueda hacer esto-

-Aang.

-¿Qué pasa si no soy lo suficientemente poderoso?

-Aang, yo…

-Y no estoy seguro de que pueda vencer al Señor del Fuego y mucho menos quitarle la vi…

-¡AANG, ESCÚCHAME!-gritó Zuko haciendo callar al menor, suspiró y se dejó caer en la cama, Zuko se sentó a su lado con su brazo alrededor de los hombros de Aang-necesitas relajarte, cuanto más te preocupes, menos confianza tendrás. No puedes rendirte para entrar en la desesperación, debes tener esperanza-Aang miró a Zuko con lágrimas en los ojos y colapsó sobre el maestro fuego, sujetando con fuerza su túnica, Zuko se sobresaltó al principio, pero lentamente comenzó a acariciar la espalda de Aang y luego envolvió sus brazos alrededor de él. Después de unos minutos, Aang consiguió calmarse-todo estará bien-elevó el rostro del menor para verlo a los ojos-no tienes que hacer esto solo, me tienes a mí, a Katara, Sokka, Toph y Suki para ayudarte. No tienes por qué hacer esto solo-

Zuko se sintió un poco tonto por ser tan… femenino, pero sabía que eso ayudaría a Aang y sabía que lo que decía era verdad.

-Gracias, Zuko-dijo Aang mientras sonreía tímidamente y envolvía sus brazos alrededor de la cintura del maestro fuego, Zuko sonrió y colocó su mano sobre la espalda de Aang, al separarse, lo ayudó a ponerse de pie.

-Necesitamos ir a la cama, tenemos mucho entrenamiento que hacer mañana y debemos levantarnos al amanecer-Aang asintió y se levantó, se quitó la túnica negra pero se dejó puestos un par de pantalones ligeros, por lo general hacía frío aunque fuera una noche de verano. Zuko también se quitó su túnica y sintió que el aire frío le golpeaba el pecho-va a hacer mucho calor mañana-

Aang asintió sin tener ganas de mantener una conversación, estaba cansado y su cuerpo temblaba. Zuko retiró las mantas y luego ambos se subieron a la cama, apagó la lámpara y se recostó mirando al techo, quería dormir pero no podía hacerlo, su mirada se concentró en Aang quien, a su vez, se volteó para mirarlo, ambos se miraron y se rieron, Zuko puso su mano sobre el pecho de Aang y la acarició suavemente, ocasionalmente amasando la suave piel con sus nudillos, Aang aceptó que aquella mano cálida lo tocara, sus músculos se relajaron y pronto se quedó profundamente dormido; sin embargo, Zuko permaneció despierto por otra hora agonizante.

Aang tiene que derrotar a mi padre, tiene que hacerlo o este mundo ya no existirá…

Con ese último pensamiento en mente, Zuko se dejó llevar por el ligero y cálido abrazo del sueño.


Los primeros rayos del sol de la mañana comenzaron a aparecer a través de la ventana de la habitación, iluminándola con su suave luz dorada. Zuko sintió el intenso calor e inmediatamente despertó, se sentó y desvió la mirada hacia Aang quien no mostraba signos de vida a excepción de los constantes ascensos y descensos de su pecho al respirar, el maestro fuego bajó de un salto de la cama y se colocó una túnica ligera sabiendo que el calor de ese día sería insoportable, se acercó al lugar donde dormía el joven Avatar y lo sacudió suavemente, Aang se acurrucó contra la almohada, Zuko lo sacudió nuevamente y esta vez, el niño apartó sus manos y se cubrió la cabeza con la almohada. Zuko estaba a punto de levantarlo de la cama a la fuerza pero tuvo una mejor idea, salió de la habitación y entró en la sala de estar, allí encontró a Sokka sentado frente a la chimenea y Katara estaba descansando en el sofá.

-Katara ¿puedes venir aquí por un segundo?-la maestra agua miró a Sokka quien se encogió de hombros, pero siguió a Zuko a la cocina de todos modos, donde tomó una jarra de agua y luego caminaron por el corredor hasta la puerta de su habitación-Aang se niega a despertar-le susurró-cuando le quite la almohada tu…-

-¿Le lanzo la jarra de agua?-terminó la oración con una sonrisa perversa, Zuko asintió y entraron en la habitación, el maestro fuego estaba parado detrás de Aang listo para quitarle la almohada de sus manos, levantó tres dedos y comenzó una cuenta regresiva silenciosa, tres... dos... uno... Zuko quito la almohada de las manos de Aang y se apartó del camino al tiempo que Katara le arrojaba el agua al menor, el agua fría le mojó el rostro y parte de su pecho.

-¡AAH! ¿QUÉ PASA?-Aang miró a su alrededor solo para encontrarse con Zuko doblándose de risa y a Katara de pie junto a él abrazándose en un esfuerzo por calmar en dolor en sus costillas por la risa, el maestro aire suspiró pesadamente-está bien, está bien. ya estoy despierto ¿ahora qué?-

-Ahora…-dijo Zuko al tiempo que su estómago dejaba escapar un fuerte gruñido-ahora vamos a desayunar-

Aang salió de la cama, se secó el agua del cuerpo, se vistió y siguió a Zuko y a Katara hasta la cocina.

Después de desayunar con el resto del equipo Avatar, ambos (maestro fuego y aire) salieron de la casa para continuar con su entrenamiento, pero Katara recordó algo importante que tenía que preguntarle al maestro fuego, así que salió y fue a buscarlos.

-Zuko, necesito preguntarte algo-lo llamó la maestra agua mientras Zuko y Aang dejaban de caminar para poder empezar con su entrenamiento, éste se volteó para mirarla-¿dónde está el mercado más cercano para conseguir suministros?-

-El único que conozco está en la isla Pyrus. Hay un ferry en el lado oeste de la isla que puede llevarte allí, es un viaje bastante largo. Si se van ahora, pueden tomar el ferry y regresar mañana por la mañana-le dijo Zuko.

-¡Genial! ¡gracias, Zuko! ¿ustedes necesitan algo?-preguntó ella sabiendo que no iban a volver hasta mañana por la mañana.

-Carne, por favor-dijo Zuko con un tono suplicante en la voz. Katara asintió y volvió a entrar a la casa para buscar a su hermano, a Suki y a Toph, Aang y Zuko retomaron su entrenamiento, haciendo practicas de fuego-control por un par de horas hasta que decidieron detenerse y regresar a la casa, el calor era increíblemente insoportable-¡hace tanto calor afuera!-lentamente, el maestro fuego se recostó en el suelo frío. Ambos, él y Aang, estaban empapados de sudor-¿qué podemos hacer para refrescarnos?-

Enseguida tuvieron una idea de que podían hacer para quitarse el calor de sus cuerpos, se miraron y sonrieron.

-¡LA PLAYA!-gritaron con entusiasmo, se cambiaron la ropa por los trajes de baño, tomaron un par de toallas y corrieron lo más rápido que pudieron hacia la playa. Zuko arrojó las toallas y ambos corrieron hacia el océano, Aang se metió en las profundas aguas y se sumergió hasta desaparecer de la superficie, el agua estaba fría y agradable, Zuko flotaba justo debajo de la superficie, al darse cuenta de que Aang no estaba por ninguna parte, desesperado comenzó a buscarlo, pero todo lo que veía a su alrededor era agua y las olas que golpeaban violentamente contra su torso. De pronto, de la nada, Aang apareció detrás de él y lo lanzó al aire, el joven Avatar salió a la superficie para ver a Zuko caer al agua con un poderoso chapoteo, nadó hacia el maestro fuego mientras se reía.

-¡Eso fue por el rudo despertar de esta mañana!-dijo Aang riéndose, Zuko sonrió y se quitó el cabello mojado y enmarañado del rostro.

-Hey, Aang. Hay una pequeña isla no muy lejos de aquí, solía nadar por ahí cuando era niño, está perfectamente apartada-le dijo Zuko, Aang le sonrió.

-¡El último en llegar es un pez zorrillo podrido!-gritó Aang mientras se alejaba nadando de allí.

-¡Pero ni siquiera sabes dónde está!-le gritó Zuko detrás de él, suspiró y comenzó a nadar siguiéndolo. Finalmente lo alcanzó y se dirigieron a la isla.

Aang observó la pequeña isla, a través del pequeño matorral de palmeras y vegetación, pudo ver que del otro lado estaba el lado opuesto de la isla.

-Esta es una isla realmente pequeña-comentó Aang mientras se sentaba en la arena.

-Sí, pero lo bueno aquí es que nadie puede vernos-le dijo Zuko mientras sonreía y recostaba su cuerpo cansado en la arena.

-Entonces… solo estamos tu y yo aquí ¿no?-preguntó el joven Avatar con una sonrisa.

Inesperadamente, Aang se sentó en las piernas de Zuko, colocó sus manos en su pechó y masajeó la húmeda piel, el maestro fuego suspiró sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo, su miembro palpitaba con anticipación y Aang sintió que sus pantalones comenzaban a ser una molestia, Zuko tomó a Aang por la cintura con ambos brazos y lo atrajo hacia él solo para besarlo tierna y (con el paso de los segundos) apasionadamente, los labios de Aang se separaron y la lengua del maestro fuego se introdujo rápidamente dentro de su boca, recorriendo la boca del joven Avatar, pronto sus lenguas comenzaron a entrelazarse, jugar entre sí y la saliva se escurría de las comisuras del labio inferior de Aang, el menor jadeó y gimió, y se recostó en el pecho de Zuko sin romper el beso al tiempo que éste envolvía sus brazos alrededor del cuerpo de Aang mientras su pierna rozaba ligeramente su entrepierna haciendo que el joven Avatar dejara escapar un profundo gemido, algo que hizo sonreír al maestro fuego, pero luego se incorporando quedando él arriba. Zuko se sentó sobre Aang, besándolo con fiereza, se separaron solo por un momento jadeando por aire, luego, Aang envolvió sus brazos alrededor del cuello del maestro fuego pasando sus dedos sus cabellos y lo atrajo hacia sí para darle un ardiente beso. El joven Avatar continuó pasando sus manos por el cabello del maestro fuego y luego éstas descendieron por su espalda, movió a Zuko hacia arriba, haciendo que se incorporara ligeramente, pasó sus manos por sus pantalones rojo oscuro y lentamente se los quitó exponiendo su miembro, Aang envolvió su mano alrededor de la erección de Zuko, bajó su cabeza y colocó sus labios en la punta, presionándolos suavemente contra ésta, el maestro fuego gimió apenas su pene se deslizó en la cálida y húmeda boca del menor, lo que provocó que el maestro aire succionara más rápido y más fuerte, Zuko bajó la mirada nuevamente para poder verlo a los ojos, pudo ver que un ligero sonrojo había aparecido en el rostro de Aang, se veía tan adorable.

-Aang… por favor, no te detengas-rogó Zuko entre gemidos, Aang solo asintió y comenzó a succionar rápida y rítmicamente, disfrutando de los gemidos de placer de Zuko. El maestro fuego embistió su miembro hasta lo más profundo de su garganta, luego lo sacó y repitió sus penetraciones una y otra vez, sujetó con fuerza la parte posterior de la cabeza del niño penetrando el interior de su boca con más fuerza y profundidad, después de un par de embestidas, Zuko dio un fuerte gemido gutural y se corrió dentro de su boca. Aang tragó todo el semen que pudo, nunca había imaginado que el semen podría llegar a ser tan delicioso, el de Zuko era dulce pero también un poco ácido, después de tragar todo el semen que podía, Aang se tumbó en la arena suave, miró a Zuko con ojos que parecían rogarle que metiera la polla dentro de él. El maestro fuego no podía creer lo que estaba viendo, Aang estaba de rodillas y le ofrecía su trasero para que lo follara, debía estar soñando, sí, solo eso era, un sueño, pero... si se trataba de un sueño, entonces no quería despertar nunca más y si de verdad se trataba de un sueño, entonces tenía que aprovecharlo antes de que despertara. Zuko se inclinó y le quitó los pantalones al joven Avatar, sabía bien lo que Aang quería pero a su vez quería prolongar su placer tanto como le fuera posible, por lo que el maestro fuego se inclinó, tomó el miembro de Aang y lo introdujo en su boca comenzando a mover su cabeza arriba abajo lamiendo de lado a lado, el maestro aire (ya excitado por haber tenido que estimular el miembro de su amante) se sintió abrumado por las sensaciones que estaba experimentando y pronto se corrió dentro de la boca de Zuko, quien se tragó su esencia gustoso y luego unió sus labios con los del niño en un brusco beso, Aang ya estaba cansado luego del intenso orgasmo que acababa de tener pero sabía que esto aún no había terminado-ponte de rodillas, Aang. Quiero probar algo diferente-Aang obedeció y se apoyó sobre sus manos y rodillas frente a su amante, Zuko tomó su erección posicionándola contra la entrada del menor y presionó la punta dentro de su estrecha entrada-¿estás listo para esto?-

Aang asintió y se relajó para poder acostumbrarse a la intromisión, una vez que vio que ya estaba lo suficientemente acostumbrado, Zuko introdujo su miembro por completo dentro de él, luego lo removió lentamente y repitió esta acción varias veces.

-Oh… Z-Zuko… m-más rápido, por favor…-dijo Aang gimiendo de puro placer al sentir que le quitaban su virginidad. Zuko aceleró sus embestidas, llegando a tocar un punto en especifico dentro del menor, las paredes internas de Aang se presionaron alrededor de su miembro creando una deliciosa fricción, Zuko llevó una mano al hombro del maestro aire mientras la otra trazaba su propio camino hacia su erección y comenzó a frotarla y jalarla, al tiempo que sus embestidas se tornaban más rápidas y certeras. Los gemidos de Aang inundaban sus oídos mientras gruñía y jadeaba, el placer se incrementaba cada vez más dentro de sus cuerpos, Zuko aceleró sus embestidas sintiendo la piel del menor chocar contra sus muslos. Después de algunas embestidas más intensas, ambos gimieron ruidosamente alcanzado el límite, Zuko se corrió dentro de Aang llenándolo con su esencia y Aang se corrió manchando la mano de su amante, tras unos minutos intentando regular sus respiraciones, el maestro fuego sacó su miembro de la entrada de Aang y se dirigieron a descansar bajo la sombra de las palmeras-oh… Zuko… eso fue increíble-logró decirle, Zuko lo miró y sonrió, el maestro aire se recostó en su pecho y éste se recargó contra una palmera, acariciando el pecho del menor-te amo-Zuko no respondió, simplemente se inclinó y besó la cabeza de su amor y continuó acariciando su pecho, en cuestión de minutos, Aang se quedó dormido. La tarde cayó lentamente en esa pequeña isla, las olas se movían con más calma que en la mañana, el sol se escondía detrás del mar reflejando sus rayos dorados en el agua, Aang y Zuko dormían cómodamente contra una palmera, abrazándose. Se hubieran quedado en esa posición durante unos minutos más, pero Zuko se despertó en algún punto de la tarde, desvió la mirada hacia su amante quien lo estaba abrazando con fuerza completamente desnudo.

-Aang-susurró Zuko suavemente en el oído de su amante mientras le acariciaba el pecho lentamente, Aang solo sonrió y se movió. Al maestro fuego le encantaba sentir su suave piel, miró hacia abajo notando que el niño ya estaba excitado, sonrió para sí mismo, Aang se removió en su lugar, miró a Zuko medio dormido y luego a su erección. Zuko no sabía por qué, pero no tenía duda de que quería complacer al maestro aire, así que, sin pensarlo, llevó su mano hacia el miembro de Aang y comenzó a acariciarlo lentamente, se sentó para descansar mejor su espalda contra la palmera, un brazo estaba envuelto alrededor de la cintura de Aang y el otro acariciaba su miembro. Aang dejó escapar un suave gemido, por alguna razón, su cuerpo flanqueó ante la sensación, aunque ya había dejado de ser nueva y diferente desde hacía rato, sus piernas trazaron surcos lentamente en la arena. De repente, su cuerpo se tensó, y pudo sentir a Zuko acariciando su miembro más rápido y más fuerte, el maestro aire arqueó su espalda, presionando su cabeza contra el pecho de su amante y sus pies se enterraron bajo la arena, gimió y suspiró mientras Zuko continuaba frotando su erección.

-¡Zuko! ¡más por favor!-exclamó Aang entre gemidos sabiendo que no se le negaría su petición. El joven Avatar quería correrse y quería hacerlo ahora, pero también quería que esas sensaciones se prolongaran un poco más, Zuko movió una de sus manos hacia la boca de Aang y lentamente introdujo su dedo índice, éste tomó su mano y comenzó a chupar el dígito, su cuerpo se tensó nuevamente, su espalda se arqueó y su respiración se tornó pesada. La mano de Zuko se movía rápidamente por su miembro arriba y abajo. Aang nunca había hecho algo así y menos a un ritmo tan rápido, su cuerpo se tensó de nuevo, pero en lugar de arquear la espalda, se corrió y su semen lo ensució a él y a Zuko en el rostro, el resto cayó lentamente en la mano del maestro fuego. Zuko se lamió la mano, nunca se cansaría de probar el semen de Aang, el maestro aire se levantó y se sentó junto a Zuko, mirándolo fijamente a los ojos-qué día tan increíble. Nunca lo olvidaré-

Zuko sonrió y lo besó una vez más, esta vez fue dulce y tiernamente. Tras separarse, se voltearon y se sentaron uno junto al otro para contemplar la puesta de sol, cuando la luz del sol comenzó a desvanecerse, se sumergieron en el agua fría y nadaron de regreso a casa. Una vez que llegaron a la orilla, caminaron con pasos agotados hacia la casa y se lavaron el agua salada de sus cuerpos, sus cuerpos estaban adoloridos y necesitaban descansar, así que después de lavarse se dirigieron a la habitación, se acomodaron en la cama y en cuestión de minutos estaban profundamente dormidos.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).