Capítulo XXXVIII: Presentimiento
Cuidad de Kokuyo, 10 años en el futuro
Sawada Tsunayoshi, actual jefe de la familia Vongola miraba su escritorio, una sonrisa juguetona surcaba en sus labios. Aun recordaba cuando conoció a Reborn, aquel hitman sin duda alguna había cambiado su vida.
También estaban sus amigos y actuales guardianes y sobretodo, Mukuro… Observo el reloj que colgaba detrás de su escritorio, en verdad se sentía atemorizado, pero tenía que ser fuerte. Escuchaba cuando cada manecilla del reloj avanzaba, detestaba escuchar como el movimiento de cada segundo.
Miro el reloj, todo en el mundo de la mafia era un caos, los arcobalenos estaban muertos, si. Eso incluía a Reborn, aun recordaba la última vez que había hablado con él.
« Estaré bien dame-Tsuna, solo asegúrate de cuidar a tu familia», y el solo le había respondido: —No seas tan tímido Reborn, admite que quieres que sobre todo cuide a Lambo.
Con aquella contestación se había ganado un par de golpes del hitman, pero era divertido ver a su tutor sonrojarse ligeramente, el tema era demasiado parco para expresar sus sentimientos aun se preguntaba “¿qué es lo que Lambo veía en él?”, pero eso era algo que solo le concierne a su guardian del trueno.
Las últimas palabras de Reborn, todo era muy normal ese día. Reborn era fuerte, incluso algunas veces sentía que aún no era tan fuerte como su tutor.
Se culpaba por ello, no debía haber enviado a Reborn solo a negociar con los Millefiore un cese al fuego.
***
Kokuyo época actual.
Lo admitía toda aquella situación en la que había sido arrastrado era ridícula, había comido “VERDURAS”, no sabia por que no podía negarle nada a aquella mujer. No recordaba mucho a su madre, pero tan solo aquella mujer que lo engendró desaparece después de haber hecho que el Noveno lo reconociera como su hijo.
— Xanxus-san, deberia quedarse a descansar en nuestra casa —ofreció la mujer.
— No, debo retirarme —era verdad aun no había encontrado donde quedarse.
— Vamos, ya es noche. Por que no pasa la noche en nuestra casa, además debería tomar un baño, luce algo tenso.
Esa mujer era capaz de leerlo completamente. Tenía que salir de ahí.
— Vamos Xanxus —dijo Iemitsu mientras abrazaba a Nana—. No seas necio, no puedes ganar en contra de Nana.
Pasó la noche en la residencia de los Sawada, no pudo objetar mucho.
***
Tsuna, observó su tarea aun le faltaba terminarla, era mucha. “¿El porqué?”, siempre existe una respuesta, “Reborn”, el hitman se había encargado de recoger sus tareas y ahora con lo del pleito de los anillos terminado se seguía sintiendo intranquilo.
Observo el anillo que que seguía sujeto a una cadena de su cuello, “Tanto alboroto por un anillo”.
« No es un simple anillo», escucho una voz.
— Pero, su historia está envuelta en sangre.
« Lo sé, en un principio solo quería que Vongola… Ayudará a las personas»
— ¿Qué fue lo que cambio? —pregunto, pero no escucho la respuesta.
Debería preguntarle a Reborn… Él siempre lo sabía todo…
***
Un nuevo día iluminaba la Cuidad de Kokuyo, Tsuna aun no era capaz de levantarse. Sentía el cuerpo torcido y pesado por haberse dormido en la silla, no se dio cuenta de cuan cansado estaba, no había terminado la tarea. Reborn, lo mataría.
Por su parte Xanxus, permanecía dormido.
***
Castillo Varia(presnete).
No era raro para los Varia, ver a Xanxus completamente despierto después de la una de la tarde, algo así se imaginó Squalo así que fungirá como despertador internacional. (Investigue la diferencia de horario entre Japón e Italia, Japón tiene siete horas de Ventaja).
Era la una de la madrugada en Italia, vaya que tenía que estar loco para despertar a Xanxus, pero afortunadamente estaban en distintos países.
Squalo se comenzaba a impacientar, el estúpido ex-jefe no contestaba el teléfono.
***
Xanxus escuchó que el celular chillaba, odiaba al maldito teléfono por interrumpir su sueño, trato de alcanzar el movil, pero usó fuerza de más y el celular había quedado destrozado. Bueno, seguiría durmiendo. O eso creía él cuando escuchó que tocaban a su puerta.
«¿Quien era el incauto que intentaba despertarlo»
— Xanxus-san, debe prepararse para ir a la escuela —era la voz de una mujer.
De golpe recordó el día previo, es verdad estaba en la casa de los Sawada.
— Voy —respondió Xanxus, no podía decirle a esa mujer, ya voy escoria. Aunque pensándolo bien él no respetaba a nada ni a nadie.
El desayuna paso sin pormenores, de alguna forma los presentes se comportara y más bajo la mirada atenta de Reborn.
Xanxus estaba casi listo para salir. La basura castaña y la basura bovina ya estaban vestidos con sus uniformes.
Tsuna se sentía algo intranquilo, pero no era la presencia de Xanxus la que lo alteraba. Algo estaba por ocurrir.
Cuando salió de casa, el menor de los Sawada vio a Hayato, esperarlo, como todos los día afuera de su casa.
— Hayato-kun, deberías entrar a desayunar en casa.
— No se preocupe por mi Juudaime —aseguro Gokudera.
— Deberías hacerle caso a Tsuna, Ahodera.
— Callate vaca aprovechada —gruño Gokudera.
De pronto salió Xanxus de la residencia de los Sawada, Gokudera ya estaba en posición para defender a su preciado Juudaime.
— Xanxus.
— Escoria apártate —gruño Xanxus.
Era como si Xanxus huyera de algo… Pero quién sería aquella persona capaz de lograrlo aparte de Juudaime.
— Xanxus-san —llamo Nana.
«Oka-sama», pensó Gokudera, en definitiva solo alguien como la madre de Juudaime era capaz de tal proeza.
— ¿Que ocurre b..Nana-san? —inquirió Xanxus.
— Toma —dijo la mujer mientras le entregaba in caja de almuerzo—. Si no encuentras donde alojarte, puedes quedarte en nuestra casa tanto como gustes. Además de que sería como un invitado, por ser el hijo de Timoteo-san.
— Lo pensaré —dijo Xanxus, esa mujer es peligrosa.
***
Por su parte en en salon de Segundo año, todos los alumnos se habían presentado temprano por órdenes de Rokudo Mukuro.
— Es bueno que hayan llegado temprano —dijo Rokudo mientras observaba a su séquito de seguidores.
— ¿Que ocurre Mukuro-sama? —preguntó uno de los alumnos.
— Vamos a deshacernos del conserje-sensei… Alguna sugerencia.
Chikusa y Ken observaban a Mukuro-sama. Ken que era el más calmado de los tres se pregunto mentalmente “¿En que pensaba Mukuro-sama cuando apostó contra el arcobaleno?”.
***
Ciudad de Kokuyo, 10 años en el futuro.
Tsunayoshi, se había levantado.
— Juudaime —era la voz de Hayato.
— Lo se Hayato —dijo Tsunayoshi—. Esto ya no se soluciona con una alianza.
— Tsuna —esta vez era la voz de Yamamoto—. Debemos encontrar la forma —Yamamoto mordió su labio.
— Lo sé… «Todo inicia ahora»
— ¿Esperaremos a que lleguen los demás? —inquirir Gokudera.
— No se si sea buena idea, Lambo está destrozado…
— Tsuna, no debes culparte… No es tu culpa, Lambo lo sabe.
— Ese día debí haber ido yo —fe la respuesta cortante de Tsuna.
— No es tu culpa, Tsuna —era la voz de Lambo—. Todo es culpa de Byakuran —afirmó—. El inicio la guerra, nosotros la terminamos.
Tsuna observó a sus amigos, todo dependía de la decisión que eligiera, solo esperaba no estar equivocado.
***
Secundaria de Kokuyo, época actual.
Xanxus observa a la escorias que eran sus alumnos.
— conserje-sensei —hablo una de las alumnas—, ¿que clase nos impartirá?
— Que bueno que preguntas —una sonrisa surcó los labios del sensei—. Tenemos clase de educación física, podemos comenzar corriendo unos diez kilómetros.
— Esta demente —gritó una de las alumnas.
— Yo demente, bueno basura…
Xanxus sonrío mientras les enseñaba a sus alumnos un par de hojas.
— ¿Qué son esas hojas? —gruñó uno de los estudiantes.
— Verán basuras, antes de llegar al salón me encontré con sus padres… Y ellos dijeron algo así “Xanxus-sensei, está autorizado a realizar cualquier método de enseñanza que considere pertinente”. Al parecer basura, ni siquiera escuchan a sus padres, mira que me hacer que me autorizan cualquier método de enseñanza. Les menciones que estuve en una universidad militar.
— ¿Está bromeando Sensei? —dijo una alumna.
— Yo nunca bromeo, basura. Por cierto tambien les dare, cálculo y biología, no debe ser tan complicado. Incluso, para ver mas de cerca la clase de bilogia iremos a visitar una morgue.
Los alumnos se estaban enterrando, ese hombre “era perturbador”...
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BONUS CHAPTER:
Secundaria de Namimori.
Tsuna observaba la pizarra, el maestro de aritmetica solo hablaba sin parar. Quería bostezar, pero debía prestar atención a las clases de su otro yo.
— Sawada, pase a resolver el ejercicio.
Tsuna observó el pizarrón.
— Apresurarse, Sawada no tenemos todo el día —dijo el profesor.
— Pero sensei —dijo Tsuna.
— ¿Que no entiende del problema?
— Siendo sincero, está mal transcrito —afirmó Tsuna.
El profesor se iba a quejarse, cuando Gokudera se levantó abruptamente de su asiento.
— Juudaime, tiene razón —aseguró el de cabellos plateados—. Esta mal esa “X”, en ese lugar tiene que ir una “Y”.
— Tsk —gruño el sensei.
Uno de los alumnos se levantó de improviso al ver que Tsuna corregía el problema.
— ¡Es el apocalipsis! —grito la alumna.
— ¿Que insinuas maldita? —gruño Gokudera, mientras Yamamoto lo sujetaba.
— Hayato, Takeshi… No se peleen.
Tsuna sonrió, era como volver a ver a sus amigos cuando recién se conocieron.
***
Secundaria de Kokuyo.
Tsuna recorría los alrededores de Kokuyo, nunca había venido a esta escuela, se le hacía raro. De pronto vio a Enma, no pudo evitarlo y corrió a saludarlo.
— Enma-kun —saludó el castaño.
— Tsuna-kun… Es raro que estés solo.
— En serio —sonrió nervioso.
— ¿Que haces Enma? —pregunto el castaño.
— No mucho, a decir verdad el lugar ha estado tranquilo desde que se graduó tu novio.
— Es verdad —dijo nada convincente.
— ¿Se pelearon? —inquirió Enma—, es raro que no haya venido a almorzar contigo.
« Mukuro y su yo de este mundo almorzando juntos… Sería algo interesante de ver».
— Por tu rostro, dedujo que sí.
— No es eso, Enma-kun… A decir verdad… Yo… Soy de un mundo paralelo.
« Es verdad, con Enma-kun, siempre podía hablar de lo que fuera… Le contaría todo».