Después de terminar la pequeña cena que fue en la casa de los señores Kim, todos charlan animados y alegres, por fin podían sentir algo de paz en sus corazones. Sonrisas iban y venían acompañados de bostezos por parte del embarazado que ya comenzaba acomodar su cabecita en el fuerte pecho de su novio y escuchando sus latidos comienza a caer en los brazos de Morfeo.
— Mi pequeño bebé se ha dormido — Susurra la señora Kim mirando a Junmyeon con ternura. Quien duerme escuchando los latidos tranquilos de Yixing quien lo mira con amor y remueve unos mechones rebeldes del rostro de JunMyeon.
— A tenido un día largo, era de esperar que terminara dormido.
Dice Sehun mirando a JunMyeon en los brazos de Yixing y sonríe al verlo tan relajado y soltando suspiro de vez en cuando.
— Creo que es mejor que nos vayamos a casa. — Yixing comienza a moverse para cargar con cuidado a su novio.
— No se vayan ¿Porque no se quedan esta noche aquí? El cuarto de JunMyeon está intacto. — Esta vez habla el señor Kim levantándose del sofá donde descansaba y se acerca a la pareja.
— Esta bien. No quiero despertarlo. — Sonríe Yixing y con ayuda del padre de JunMyeon lo logra cargar al estilo princesa.
— Con cuidado cariño. — la madre de Junmyeon se adelanta por las escaleras y corre a la habitación de su hijo para acomodar las mantas. Yixing deja a su lindo JunMyeon en la cama y lo cubre con las mantitas.
El más bajo de inmediato se acomodo y frunció su carita buscando al cuerpo del alto. — Yixing-ah~ — Susurra adormilado.
— Aquí estoy amor— Yixing se acuesta a su lado y lo abraza pasando sus brazos por la cintura del más bajo.
La señora Kim los deja solos en la habitación y vuelve a la sala con el resto.
— Yo también ya debería retirarme. — Comienza a decir Sehun levantándose del sofá pero una mano pequeña y delgada lo detiene.
— Sehunnie todavía no te vayas. — Luhan lo mira con una sonrisa. — Quédate un momento más.
— Mañana tengo clases. — Sonríe Sehun. — Pero antes de irme, te llevare a tu cuarto.
— Sehun, ya eres como la de familia puedes quedarte el rato que quieras.
— Gracias señora Kim.
— De nada cariño, y muchas gracias por cuidar de nuestro Luhan.
— Lo hago con mucho gusto.
Sehun carga a Luhan al estilo princesa como si fuera una pluma y el mayor siente sus mejillas subir a un tono rosa. Siempre lo termina avergonzado al frente de sus padres.
— Ya es hora de descansar princesa.
— Tonto. — Luhan infla sus mejillas mientras es dejado en su cama y Sehun lo arropa con una manta.
El alto lo queda mirando y toma asiento a los pies de la cama justo al frente de Luhan que comienza a sentirse nervioso por la penetrante mirada de Sehun, que pareciera leer cada recóndito de su ser.
— Aun recuerdo tus palabras Luhan...Cuando dijiste que yo comenzaba a gustarte... Quiero saber si eso es verdad. — habla por fin Sehun luego de algunos segundos de silencio.
— Si, lo fueron y lo siguen siendo. y ya no es un "Creo" ahora es un Me Gustas Sehun. — Se atreve a decir Luhan con su corazón latiendo a mil por horas y sus mejillas tan rojas como unas frutillas. Su mirada brillosa llena de esperanza no se despegan de los oscuros ojos del alto.
Sehun suspira y revuelve su cabello.
— Yo...No negare que me encanta pasar tiempo contigo y todo este último tiempo he conocido al verdadero Luhan y me fascina la persona que estoy conociendo...
— hay un "pero" ¿Verdad?
El rostro de Luhan de cae y sus ojos ya no miran a Sehun ahora solo ven sus manos.
— Hey, todavía no termino. — Sehun levanta el rostro de Luhan con delicadeza y acaricia su mejilla. — No te negare que cada vez que estoy contigo siento muchas cosas nuevas, y que van creciendo cada vez mas. Pero tampoco te negare que aun siento algo por Suho, un amor no se va de un día para otro.
— Lo sé...— Susurra Luhan pero ya con un deje de esperanza creciendo en su corazón. El mayor toma las grandes manos de Sehun y la entrelaza junto la suya.
— Encajan a la perfección. — Dice con una sonrisa — Se que para ti es difícil, pero haré que te olvides de mi hermano y solo me mires a mí. Después todo no te soy indiferente ¿verdad?— Pregunta con un leve temor en su voz.
— No Hannie. — le dice cariñosamente. — No eres indiferente para mí.
Luhan sonríe conforme con la respuesta y se acerca poco a poco al rostro de Sehun, donde ya solo unos cuantos Centímetros los separaban, sus alientos se entremezclaban y sus narices juegan la una con la otra. Luhan fue quien acorta la distancia de sus labios los cuales se juntan en suave roce.
Solo unos segundos estuvieron así y Luhan se separa tapando su rostro avergonzado. Sehun solo ríe y descubre el rostro del mayor dejando un tierno beso en su mejilla.
— Que descanses Luhan. — Susurra y termina alejándose del mayor quien lo mira avergonzado y con ganas de tomar nuevamente la mano del alto para que no salga por la puerta.
— ¿Vendrás mañana?
— Claro, debo venir a cuidar de una princesa.
Sehun lo mira con una sonrisa de medio lado y sale de la habitación dejando aun muy sonrojado Luhan quien chilla de la emoción y tocas sus labios con la punta de sus dedos aun sintiendo el cosquilleo de los labios contrarios.
...
Los días pasan rápido y ya se encuentran a lunes -una semana ya había pasado. Junmyeon está junto a su madre viéndola tejer unos zapatitos que serán un color celeste pastel para su futuro nieto, mientras come un rico postre de frutas. Su padre y Luhan no se encuentran en casa.
Su padre salió con sus amigos al golf y Luhan está con Sehun en la universidad, debía rendir exámenes especiales para no perder el semestre y Sehun se ofreció a llevarlo a la Universidad ya que el mayor aun no podía caminar bien.
Yixing toda la mañana y parte de la tarde se la pasa en la empresa junto a su padre, volviendo a levantar la empresa "Zhang" poco a poco, ambos ayudándose y apoyándose. Y no era nada fácil volver a ganar la confianza de los inversionistas.
Para Yixing era difícil tener que estar en el trabajo y mantener su mente ocupada con JunMyeon con miles de preguntas. ¿Estará bien? ¿Habrá comido? ¿ Le dolerá algo? Los primeros días fueron difíciles donde Yixing llamaba a cada minuto a su novio y es por eso que JunMyeon tomo la decisión de pasar la tarde junto a su madre, hasta que Yixing saliera del trabajo y lo fuera a buscar.
Ahora Yixing lo llama solo 3 veces al día y el resto solo son mensajes preguntando cómo se encuentra, mensajes que le sacan sonrisas y mejillas sonrojaditas al menor.
— De nuevo un mensaje de Yixing. — Afirma su madre con su vista fija en el tejido.
— Si. Me ha preguntado si estoy comiendo bien. — Ríe JunMyeon mientras acaricia su vientre y deja el pote de vidrio vacío sobre la mesita de centro. —
— Yixing siempre tan atento.
JunMyeon asiente e intenta calmar las parásitas fuertes de su príncipe. — Al parecer alguien extraña a su padre. Yo también lo extraño bebé, pero no seas malito con papi.
—¿Quieres ir a recostarse cariño?
Su madre lo mira preocupada ya levantándose del sofá pero JunMyeon niega de inmediato.
—No te preocupes madre, estaré bien además ya solo falta media hora para que llegue Yixing. No quiero que al llegar me encuentre dormido. — Dice JunMyeon acomodándose en el sofá y constantemente ve la hora en su teléfono siendo ya las "17:30"
— Cariño no quiero parecer una madre entrometida. Pero estoy preocupada por tu futuro.
JunMyeon centra su atención en su madre y suspira pero sonríe.
—Madre no te preocupes, se que congele mi carrera pero cuando mi príncipe nazca y tenga un año la retomare, ya hable con esto con Yixing y el está de acuerdo conmigo.
—Me alegra oír eso.
JunMyeon le dio una sonrisa tranquilizadora a su madre y justo en eso se escucha el golpeteo en la puerta principal.
— Ese debe ser Yixing. Quédate aquí cariño yo iré.
JunMyeon volvió a su posición. Cómoda en el sofá mientras ve a su madre desaparecer por el pasillo. Para luego oír la voz de su amado Yixing.
— ¡Amor! — Dice Yixing al verlo y sonríe en grande apresurándose a llegar hacia el menor que lo espera con un puchero en sus labios que tiemblan.
— Yixing ~Ah...
Yixing sonríe y besa su puchero el cual JunMyeon corresponde de inmediato. — Te extrañe mucho, nuestro príncipe también te extraño mucho.
— Y yo los extrañe mucho.
Ambos se miran con amor y dulzura como si se hubieran separada por largos meses, se besan tiernamente en sus labios y mejillas para luego terminar abrazaditos en el sofá.
— Ustedes son una ternura. — La señora Kim dice con una cámara en mano sacando fotos a la pareja abraza en el sofá.
— ¡Madre! — Exclama avergonzado JunMyeon.
— ¿Qué? Es su culpa por ser tan tiernos.
Ambos ríen y Yixing se levanta del sofá, sin soltar la mano de su JunMyeon ayudándolo a levantarse.
— ¿Ya se irán? — Pregunta la madre de JunMyeon con un deje de tristeza en su voz.
— Si, suegra— Dice Yixing -Ya desde unos días diciéndole suegra.— Es mejor irnos ahora quiero que mi JunMyeon descanse y mi príncipe también.
— Esta bien. Entiendo...
— Me despide de Luhan ¿Si madre? Y mi padre ¿A qué hora llegara?
Pregunta JunMyeon con curiosidad.
— No te preocupe por tu padre cariño, ahora que se va al golf con sus amigos llega ya de noche. — Dice despreocupadamente la señora Kim.
— Esta bien, entonces también me despide de mi padre y le das un beso de mi parte.
—¿Vamos amor? — Yixing lo mira sonriendo y JunMyeon asiente regalándole una linda sonrisa y ojitos de media luna.
Antes de salir recibieron un abrazo y por parte de la madre de JunMyeon y su bendición. — ¡Te veré mañana cariño! — grita desde la puerta la señora Kim y JunMyeon levanta su brazo despidiéndose y asintiendo para luego subir al auto del mayor.
...
Ambos bajan del auto e ingresan al edificio tomados de la mano, saludan al conserje con sonrisas que son recibidas y caminan al ascensor.
— ¿Yixing~Ah como estuvo el trabajo? — Pregunta el menor mirando a su pareja.
— Algo estresante pero todo parece ir marchando sobre ruedas...— Ríe el alto sin despegar sus ojos de los ojitos dulces del más bajo.
— Me alegró mucho.
El sonido de las puertas los saco de su conversación y salieron del ascensor, caminaron a paso tranquilo hasta el apartamento del mayor, donde introdujo la llave y al fin ingresaron a su hogar.
— Ya estamos en casa. — Dice el alto abrazando por la espalda el chiquito cuerpo de Suho quien apoya sus manitos sobre las de Yixing.
— Al fin en casa.
—Mañana iremos juntos al doctor a ver como sigue nuestro pequeño príncipe. — Dice Yixing sin dejar de abrazar al más bajo, quien asiente ansioso con ver de nuevo a su pequeño y escuchar sus latidos.
—Cierto...Ahora voy a cocinar algo rico para los tres. ¿Sí?
— Esta bien. ¿Quieres que te ayude? — Termina preguntando el alto separándose del cuerpo de Junmyeon quien asiente con una sonrisa. Le encantaba pasar ese tiempo con Yixing.
—Deberías haber estudiado gastronomía, amor. Tus manos están bendecidas por los dioses _ Dice Sacando las verduras y comienza a lavarlas escuchando la risa del más bajo.
—Tal vez. La verdad lo tenía considerado pero me gusta enseñar y las matemáticas.
—Lo sé, eres excelente...
Los dos terminaron de cocinar en tiempo record, yixing siendo un muy buen ayudante en la cocina y un buen aprendiz después de todo el había dicho —"Debo aprender a cocinar para mi familia—" algo que le saco una sonrisita encantadora al más bajito.
Comieron tranquilos en la sala mientras se reproducía una película "La bella y la bestia" que hace mucho quería ver Junmyeon y con buen novio que es Yixing la compro.
—Amor, ¿quieres mas jugo?— Pregunta ya a la mitad de la película yixing desviando su atención a un dormido Junmyeon para su sorpresa.
Una sonrisa se formó en yixing quien de inmediato retiro el plato de comida—ya vacio— de las piernas del más bajo.
—Mi pequeño Durmiente. —Lo mira y remueve algunos de sus cabellos con delicadeza y besa su mejilla gordita. —Vamos a la cama.
Lo carga con cuidado y suspira. —Sí que has subido de peso amor —Ríe levemente Yixing admirando la carita adorable de su dormido novio.
Llego a la habitación y lo recostó en la cama retirando sus zapatos y arropándolo con muchas mantas a pesar de que no hacía nada de frio.
Yixing retiro su ropa y solo quedando en bóxers se acostó al lado de su tierno Junmyeon quien de inmediato busco el calor del cuerpo del alto y lo abrazo pasando una de sus piernas por las de yixing.
Yixing lo abrazo por su cintura mirando sus mejillas gorditas, sus labios cual cerezos, sus pestañas largas y su piel suavecita y esponjosita que le daban ganas de morder. Al fin lo tenía con él y no lo dejaría ir nunca.
...
Alguna que otra lágrima cae por los ojitos de JunMyeon haciendo su camino por sus gorditas mejillas que Yixing limpia de inmediato y le da tiernos besitos ambos sonriéndose con amor.
— Entonces chicos tienen la hora programada para el parto, para el 1 de septiembre. — Dice con una sonrisa el doctor quien ingresa con nuevas fotografías de su bebé. — Lo estás haciendo muy bien JunMyeon y tu también Yixing.
— Gracias doctor. — Dice con una sonrisa rebosante de felicidad JunMyeon acariciando su vientre. Ya quedaba muy poquito para tener a su príncipe en brazos.
— Bien chicos nos vemos en un mes más.
— Adiós doctor. — Se despide Yixing y JunMyeon, juntos saliendo de la consulta.
Sus pasos se dirigen a las afueras del hospital y pronto llegan al auto donde suben muy contentos.
—Te voy a dejar a donde tu madre y luego me iré al trabajo. — Dice Yixing apretando delicadamente la pequeña mano de JunMyeon.
JunMyeon no le quedo más que suspirar y asentir con desgano, el no quería separarse de Yixing.
—¿No puedo ir contigo a la empresa? — Pregunta de repente JunMyeon mientras el auto avanza por la carretera.
—Te aburrirás y no estarás cómodo amor, además tengo una reunión importante no podré estar al pendiente tuyo.
— Pero Yixing~Ah — Reclama el más bajo. — Me en prestaras tus computadora para que no me aburra y yo sé cuidarme solo.
JunMyeon frunce su carita y cruza sus brazos sobre su barriguita.
Yixing suspira, pero termina cediendo antes los lindos pucheros de su novio.
— Esta bien amor, iras conmigo.
—¡Sí!
La luz se volvía roja y Yixing pudo robarle un tierno beso a su novio que termino igual que una manzanita, caricias en sus manos sobraban y sonrisas de reojo flotaban de un lado a otro. Estaban felices y tranquilos después de mucho tiempo.