Buscaba con desesperación total por toda aquella pequeña poblada, en su ruidosa motocicleta vagaba por todas las callejuelas sin lograr encontrar aquello a lo que buscaba con tal fervor y miedo de no poder encontrar jamás a esa persona que con tanto empeño buscaba en ese entonces, nada se le facilitaba para volvérselo peor pues conste caminaba, las calles se vaciaban con más frecuencia pues no era normal ver a alguien tan grande y mucho menos por estar montado en ese armatoste ruidoso del demonio …
Cansado se estacionó en una taberna para poder pedir una habitación para poder darse una ducha y refrescarse de ese modo para poder seguir al día siguiente con su búsqueda que cada vez parecía estar más y más difícil y de pronto simplemente se ha levantado y de su mochila ha sacado una simple toalla para echársela al hombre, pensó en sacar sus prendas para después del baño pero ha preferido simplemente entrar así, ya después se encargaría de vestirse …
Tranquilo trató de divisar el cuarto de baño al que entro y en unos quince minutos se encontraba fuera completamente desnudo con la toalla en la cabeza para secarse sus mechas rojas pasión mientras bostezaba pesadamente para luego llegar a su mochila y sacar únicamente sus interiores para colocárselos y de un pequeño salto subirse a la cama para luego cerrar los ojos y dedicarse a dormir pero no sin antes pensar en una sola cosa …
“Sólo espero que estés bien enano”
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Mientras el pelirrojo se encontraba tirado dormido en su cama rentada, cierto inquilino de una posada vecina se encontraba dando vueltas en su cama tratando de analizar la conversación que antes había tenido con aquel pecoso que se hacía llamar como a quien buscaba, era bastante sospechoso y no se pensaba dejar engañar por nadie, así que encogiéndose en su cama bajo las mantas se había dispuesto a dormir pero no sin que antes una línea se le viniese de pronto a la mente …
“¿Ese Eusstas – Ya será alguien importante para mí?”
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En la calle …
Algo no iba ni iría bien seguramente la noche sería buena cómplice para lo que ahora mismo pasaba, esa charla tendría lugar en la noche, una charla rápida, un trato cerrado, un apretón de manos y una risa absurda se escuchaba por parte de aquellos dos hombres que al terminar de hablar simplemente cada uno ha tomado su lado y se han separado saliendo cada quien a su respectiva calle …
Al salir a la luz de las lámparas, en uno de esos dos individuos se pudieron notar como en sus mejillas se encontraban ciertas pecas que ya cierto moreno conocía …
-Esto será divertido, “Law – Chan” … -Seguida a esa línea, una risa espontanea se ha soltado por parte del pecoso que había seguido caminando por el lado de su acera perdiéndose a lo lejos en la oscuridad con su sonrisa socarrona bien marcada en sus labios y su rostro irradiaba total felicidad- … Si me tengo que volver alguien que no soy, pues lo seré y así de fácil, que no es como si nunca hubiese jugado así de sucio, en lo que te metiste Law – Chan …
Al día siguiente se vería que es a lo que se refería con esas líneas aquel moreno pecoso que sólo se ha visto entrar en un edificio algo viejo, todo podría pasar ahora que la confusión ya estaba bien hecha …
O eso pensaba él …
Continuará …