Chanyeol le prometió a Baekhyun de llamarle con regularidad mientras estaba fuera del país. También le había dicho a Kris que cuidara de Baekhyun mientras él no estaba, que lo alejara de todo peligro, y que cuidara de sus bebés; Jongdae también lo hacía, puesto que Baekhyun era su mejor amigo. Cuando Chanyeol se fue Baekhyun empezó a deprimirse, no obstante, se recuperó porque tenía que ser fuerte por sus bebés.
Kris empezó a hacer todo por Baekhyun las siguientes semanas y meses, debido al embarazo del castaño cada día se sentía más fatigado y su espalda dolía, su vientre había crecido aún más y ya no sentía que pudiera sostenerse con tanta facilidad como meses atrás. Jongdae por compromisos con sus clases se alejó un poco, así que sólo Kris quedó con Baekhyun. Todos los días lo acompañaba a casa y cargaba su mochila o lo que fuera que llevara a casa, lo llevaba en su auto y Baekhyun no pudo evitar sentirse incómodo al principio; Kris era amigo de Chanyeol, no suyo, sin embargo, eso pasó a segundo plano. Las semanas siguientes no estaba incómodo y parecían llevarse bastante bien, jugaban algunas bromas entre ellos y, en ocasiones, Baekhyun le contaba algunas anécdotas de su embarazo; como cuando lo despertaban a mitad de la noche porque al parecer les gustaba jugar y patear el vientre a esas horas.
Hablaba con Chanyeol y aunque las llamadas fueran demasiado cortas se aseguraba de decirle siempre un "te amo" antes de colgar; lo extrañaba mucho. La fecha de parto se acercaba y Baekhyun no veía para cuando Chanyeol regresara, de verdad quería que el padre de sus hijos estuviese ahí, pero quizás, eso no fuera a suceder. Había querido mudarse a la casa en la que había vivido con Chanyeol, aún guardaba las llaves de ésta, pero Kris le dijo que no, que lo más seguro era que se quedara en casa de sus padres.
Un mes, un mes para que los bebés nazcan. Llevaba un embarazo bastante sano gracias a que no consumía ni alcohol, ni alguna sustancia tóxica, y tampoco ni hablar de que la comida chatarra no era mucho lo suyo, los bebés pedían mucho fruta, piña y uvas para ser exactos. Ya tenía su incapacidad y estaba en casa por si el trabajo de parto llegara a suceder en algún momento. Baekhyun seguía esperando a Chanyeol, esperando la llamada en donde le dijera que todo estaba bien y que iba a regresar a Corea justo a tiempo para el parto, pero no.
Un día antes al parto había hablado con Chanyeol y seguramente era la llamada más larga que habían tenido desde que se fue, y quizás, le había dicho lo que Baekhyun tanto esperaba: que todo se estaba solucionando y que lo más probable es que pudiera estar de regreso para fin de mes. Y al día siguiente había quedado con Kris para salir a tomar un café y platicar sobre cosas de la facultad que se había perdido esos días.
Pero las cosas no siempre salen cuando y como las planeas.
Estaban de lo más normal conversando cuando Baekhyun empezó a tener contracciones y la fuente ya se le había roto justo en ese momento. Kris alarmado se puso de pie y ayudó a Baekhyun a hacer lo mismo, cuando ya estuvo de pie dejó dinero en la mesa y lo cargó sobre sus brazos para llevarlo al auto y conducir al hospital.
—Baek, aguanta, no puedo manejar tan rápido, sino puedo provocar algún accidente.
Y para Baekhyun fue como si escuchara a Chanyeol decirle eso, su gigante no estaba ahí, en ese momento tan importante. Se lo estaba perdiendo.
—Cha-Chanyeol. Llama a Chanyeol —articuló, sintiendo fuertes espasmos de dolor por toda su cadera y vertebra.
—Lo haré, no te preocupes.
Cuando llegaron al hospital y se llevaron a Baekhyun a una habitación para esperar que su cuerpo se dilate más, Kris salió al pasillo y se apresuró a llamar a los padres de Baekhyun y cuando terminó, sin dudarlo le llamó a Chanyeol.
—¿Baek? —se oyó al otro lado de la bocina— ¿Qué pasa? Nunca llamas a estas horas, ¿estás bien?
—Chanyeol, escucha, soy Kris. Baekhyun acaba de entrar en labor de parto, Chan, necesitas estar aquí.
Se escuchó un suspiro pesado y un pequeño sollozo al otro lado de la línea. Kris sabía que pasaba.
—No puedo estar ahí, Kris. Soy el peor padre del mundo, no voy a estar cuando mis pequeños nazcan, no los podré ver. Estoy demasiado lejos de Corea como para llegar en un par de horas.
—Escucha, Chanyeol, tú no eres el peor padre del mundo, tú los has cuidado de lo que sea que les pudiese pasar, eres el mejor. Ahora, ¿quieres hablar con Baekhyun? Estoy seguro que él sí quiere.
—Gracias por cuidar de él, Kris. Sí, sí quiero hablar con Baek —Kris abrió la puerta de la habitación y se adentró en ella. Baekhyun estaba acostado con una bata de hospital puesta y sudaba por el dolor, estaba fuertemente agarrado de los barandales a los costados de la cama.
—Es Chanyeol —avisó—. Quiere hablar contigo. Estoy seguro que le gustaría estar contigo ahora mismo —le dijo y le entregó el teléfono celular.
—Channie. Channie, ya van a nacer —se apresuró a decir en cuanto tuvo el dispositivo en manos—. Channie, tengo miedo, te necesito.
—Baek, estoy contigo, no tengas miedo, todo va a salir bien, los gemelos nacerán perfectamente sanos, tú los has cuidado maravillosamente. Estarán bien.
—Channie, te necesito —sollozó—. Necesito que estés aquí ahora mismo. ¿Cuando regresas? Los bebés necesitan conocer a su papi.
—Pronto, Baek. Todo está bien, regresaré pronto, lo prometo; regresaré y nos casaremos como lo prometimos. ¿Tienes el anillo aún? Estoy seguro que sí. Nos casaremos, tranquilízate, estaré ahí pronto.
—Chanyeol... —habló con tristeza.
—Le diré a Kris que entre contigo al parto, ¿esta bien? Confío en él. Tranquilo Baek, aunque esté lejos estoy para ti. Tal vez no estoy físicamente pero si en tu corazón, ¿cierto? Estoy contigo, Baek.
—Te amo, te amo demasiado.
—Yo también, ¡y a los gemelos! Me gustaría estar ahí con ustedes. Los amo demasiado.
Baekhyun iba a hablar de nuevo cuando contracciones más fuertes y con más intensidad se hicieron presentes. Era la hora.
—¿Chan? Baekhyun ya va a dar a luz, te llamo después. Hiciste lo correcto y ya eres el mejor padre del mundo. Voy a colgar.
Era la hora, enfermeros se llevaron a Baekhyun a quirófano, iban a realizarle cesárea, los bebés estaban en mal posición y tendrían que sacarlos de esa manera. Baekhyun le dijo a uno de los enfermeros que quería que Kris entrara, sus padres estaban llegando con el bolso preparado para el momento cuando ya Kris había entrado con Baekhyun.
La operación no duró mucho y cuando el primer chillido se escuchó Baekhyun no pudo evitar llorar, le hubiera gustado que Chanyeol lo reconfortara, pero en su lugar estaba Kris, diciéndole que lo estaba haciendo muy bien. El segundo chillido se escuchó y Baekhyun estaba demasiado feliz de que por fin podría cargar y abrazar a sus bebés después de nueve meses de espera.
Le cerraron la herida y le entregaron un bebé a Kris y el otro a Baekhyun. Eran hermosos, tan iguales a ellos, tan perfectos. Baekhyun empezó a llorar de felicidad mientras le sonreía mucho a Kris, estaba demasiado feliz de tener a sus bebés en brazos. Youngri había sacado las orejas de Chanyeol y el perfil de Baekhyun, mientras Youngmi tenía los ojos grandes de Chanyeol y los finos rasgos de Baekhyun. No eran gemelos idénticos, pero eran hermosos, y los dos tenían algo de Chanyeol.
—Felicidades Byun Baek, ya eres toda una madre y Yeol todo un padre. Son tan hermosos, tienen tanta suerte de tener dos niños tan hermosos. Los felicito con sinceridad. Estoy seguro que cuando Chanyeol los vea va a morir, los va a consentir más de lo que tú.
—Gracias, Kris —esbozó una sonrisa sincera—. Yo también estoy seguro.
Lo llevaron a la habitación para poder tener visitas. Sus padres entraron minutos después de que fue trasladado, y más minutos después una enfermera llegó con sus dos bebés en brazos. La ahora abuela cargó a Youngri y el abuelo a Youngmi. Kris, que estaba presente, salió al pasillo, pues, su celular no dejaba de sonar, era Chanyeol.
—Hey, Chanyeol, tus bebés son hermosos. Felicidades grandulón, ya eres oficialmente padre.
—¿Cómo está Baek? ¿No sufrió nada malo? Obvio que iban a ser hermosos, seguro son muy parecidos a Baek. Heredaron su belleza. Gracias, Kris, y tú ya eres oficialmente tío, así que esperamos que les des algún regalo —bromeó.
—Baek está bien, un poco cansado pero bien. Y no dudes que los llene de regalos, son muy hermosos. Youngri sacó tus orejas —rio un poco—. Ustedes son tan afortunados, tienen a unos hijos hermosos y una buena relación. ¿Cuándo piensas regresar? Tienes que conocerlos, vas a amarlos.
Chanyeol suspiró —Aún no lo sé, Kris. Creo que mi padre ya no tiene problemas, tenía planeado estar ahí a fin de mes. Es difícil todavía.
—Si tienes problemas financieros sabes que puedes contar conmigo. A cambio tendrás que dejar que yo cuide a tus bebés.
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Chanyeol se encontraba en LAX, aeropuerto de Los Angeles, esperando su avión regreso a su amada Corea, donde viven su actual amor de su vida con sus hermosos hijos. Gracias a la ayuda de Kris —que prometió no cobrarle el dinero— consiguió un boleto para su regreso. No le había dicho nada a Baekhyun, éste ya había sido de alta unos pocos días atrás del hospital, quería que fuera sorpresa. Un viaje de trece horas seguro iba a ser demasiado cansado, lo primero que tenía planeado, regresando a Corea, es ir directo a casa de los padres de Baekhyun a ver a su prometido y darle la sorpresa, apenas ayer había hablado con él por teléfono y le había dicho que seguía esperando por su regreso. Debido al cambio de horario, cuando Chanyeol esté pisando tierra coreana, ahí sería medio día, si sus cálculos no le fallaban.
Baekhyun había sido dado de alta del hospital una semana antes, estaba realmente cansado, cuidar de gemelos no era fácil y aunque su madre le ayudara seguía siendo cansado; apenas y lograba pegar un ojo en la noche cuando Youngmi o Youngri lloraban, era demasiado cansado, no obstante, lo disfrutaba. Cuidar de sus pequeños era su adoración, a pesar de sólo tener algunos días de nacidos hacían unos pucheros realmente adorables y eran bastante risueños, Youngmi era más seria, pero era muy linda. Los gemelos eran tan pequeños, parecían muñequitos, su piel era blanca como la leche y ambos poseían facciones finas, cuando estaban en el hospital las enfermeras que se acercaban a Baekhyun le decían que sus gemelos eran demasiado hermosos, que cuando crecieran sería probable que en la escuela fueran populares; Baekhyun se sintió muy alagado por eso. Los gemelos eran bastante tranquilos, no le daban tanto problema a Baekhyun.
Sus padres estaban encantados con sus nietos y Baekbom, hermano mayor de Baekhyun, había ido a visitar a sus sobrinitos después de enterarse del nacimiento de éstos. Kris, Jongdae y Joonmyeon lo había ido a visitar y llenaron de regalos a los gemelos. Sin duda alguna, los gemelos eran queridos por todos.
Eran aproximadamente las 2:00 pm cuando Kris se encontró con Chanyeol en el aeropuerto de Incheon, su mejor amigo había regresado, después de tres meses de no verlo. Cuando Kris lo vio salir de la sala de arribados, caminó hacia él y lo abrazó con cariño. Kris estaba feliz, su mejor amigo impresionaría a Baekhyun con esto; condujo el auto rumbo a la casa de los padres de Baekhyun mientras tenía una amena charla con Chanyeol.
A Kris le hubiera gustado quedarse a ver la cara de emoción de Baekhyun, pero no podía. Chanyeol iba sin darle aviso o pista a su prometido, así que, tendría que conformarse con que su amigo le contara. Dejó a Chanyeol en el frente de la casa de los Byun y le deseó suerte antes de poner en marcha su auto.
Cuando estuvo frente a la puerta principal de aquella casa tocó el timbre, nervioso. Esperaba que Baekhyun le abriera, en vez de eso fue la señora Byun quién lo hizo. La señora Byun no pudo evitar emocionarse al ver a Chanyeol ahí, para ella Chanyeol era uno de los mejores hombres que había conocido —después de su esposo, obvio— y le gustaba mucho para Baekhyun, por lo que no pudo evitar soltar un pequeño grito de emoción al verlo, quería mucho a Chanyeol. Pero cuando Chanyeol le dijo que no le había informado a Baekhyun sobre estar en Corea y que era una sorpresa, la señora Byun asintió y los dejó solos, no sin antes avisarle a Baekhyun que iría al centro comercial. excusándose.
Tres meses sin ver a su prometido y aproximadamente una semana viendo a sus pequeños retoños sólo por fotos. Claro que Chanyeol iba a estar emocionado y nervioso a la vez, no sabía como su prometido reaccionaría —sí lo sabía pero igual los nervios lo comían—. Subió cuidadosamente por las escaleras tratando de no hacer ruido, no quería arruinar la sorpresa. Sin embargo, conforme se iba a acercando a la habitación, que pertenecía a Baekhyun antes de mudarse a vivir juntos, escuchó la voz de su amado prometido. Estaba cantando, y, cuando estuvo lo suficiente cerca como para asomar la cabeza, vio a Baekhyun parado frente a la cuna doble, cantándole a sus bebés mientras los arrullaba; era una canción de cuna, suave y linda, y pudo jurar que era la escena mas tierna que haya visto en su vida.
Baekhyun miraba con tanto amor a sus bebés mientras cantaba con tanto sentimiento y los arrullaba y cuando hubo terminado se inclinó a la cuna y besó quedamente la frente de sus gemelos mientras les susurraba "Los amo". Para eso Chanyeol había salido de su escondite y estaba parado en el marco de la puerta observando con detenimiento y cuando Baekhyun se giró para salir de la habitación se encontró con su gigante prometido, mirándolo con una de esas sonrisas bobas que tanto le encantaban, por un momento se quedó estático en su lugar porque no se la creía, Chanyeol, el padre de sus hijos, estaba parado frente a él y no al otro lado del mundo. Cuando pudo reaccionar corrió hacia a él colgándose en su cuello.
Finalmente era él, era Chanyeol, el hombre que más amaba en el mundo. Era él.
Baekhyun podía jurar que sintió estar separados como por veinte años, lo había extrañado demasiado. Hundió su cara en el cuello del mas alto y le dio pequeños besos cariñosos ahí mientras su abrazo era correspondido.
—Baek, he vuelto. He vuelto por ustedes, por nosotros.
Fue lo que dijo Chanyeol y en ese preciso momento se activó algo en su prometido porque empezó a llorar.
—Yeol... —dijo entre sollozos— Yeol, te extrañé. Estás aquí —afirmó abrazando más a su novio.
En su lugar Chanyeol dio caricias a la espalda de Baekhyun mientras éste se mantenía aferrado a su cuello sin soltarlo hasta que se hubiese calmado. Minutos después Baekhyun se separó de Chanyeol para poder mirar su rostro y con la yema de los dedos recorrió la cara de su prometido, parando en el cuello de su playera para halar de él hacia abajo y juntar sus labios.
Rieron entre el beso, ambos estaban muy felices de estar juntos de nuevo, no pasó de ser un beso cálido y cómodo, no querían llegar a más, era como si demostraran el afecto guardado los últimos tres meses en aquél beso. Se separaron algunos segundos después y se sonrieron para sí, Baekhyun tomó la mano de Chanyeol y lo guió a la cuna con una gran sonrisa.
—Son nuestros bebés, Yeol —los presentó y rio un poco emocionado—. Son nuestros y somos sus padres. Han estado esperando por ti desde que te fuiste, yo he esperado por ti también —sonrió y mostró el anillo de compromiso en el dedo anular izquierdo. Lo miró a los ojos sonriente—. Sabía que ibas a regresar, sabía que no nos ibas a dejar. Eres el mejor, Yeol. Te amo mucho.
Chanyeol sonrió grande a su prometido y lo besó en las comisuras, miró a sus pequeños y su corazón latió rápido, justo como todos le han dicho: son hermosos. Casi llora cuando los vio tan plácidamente dormidos, sus manitas cerradas en pequeños puños, ambos portaban el mameluco de Pororo que Chanyeol les había obsequiado meses atrás, tan hermosos. Abrazó a Baekhyun por la espalda y en su oído le susurró:
—Gracias por todo, Baek.
A penas pasados pocos minutos Youngmi empezó a llorar, Baekhyun la sostuvo en brazos y la calmó, le preguntó a Chanyeol si quería cargarla y en cuanto Youngmi estuvo en sus brazos la bebé le regaló una gran sonrisa, era pequeña, pero lo hizo y Baekhyun sentía el corazón saliéndose porque era la primera vez que sonreía así con alguien.
—Hola, Youngmi —empezó Chanyeol hablándole con demasiada ternura—. Soy papi, eres tan hermosa y tan pequeña. Papi va a cuidar de ti como de Youngri y de papi Baek. Los amo —lo último lo dirigió a su prometido— Los amo, Baekhyun.
—Channie, Youngri ha despertado, ¿quisieras...?
—¡Por supuesto! —apuró a decir.
Baekhyun se deleitaba viendo la imagen de Chanyeol hablándole con mucho amor a sus gemelos, sentía que su corazón crecía cada vez más y un constante cosquilleo en el estómago se hacía presente. Yeol será un buen padre, lo sabe.
Por un momento recordó que, cuando recién se mudaron a vivir juntos, emocionado despertó a Chanyeol al rededor de las 4:00 am porque había sentido un leve movimiento en su vientre y era la primera vez que lo experimentaba, los bebés se habían movido por primera vez, lo que causó su repentino insomnio y emocionado hasta el borde despertó a Chanyeol para informarle y llevar la mano de éste a su vientre. Y ahora su futuro esposo estaba mimando a sus bebés.
Había entendido la repentina desaparición de la familia Park y la ausencia de Chanyeol en el parto y no sentía rencor, porque, sabía y confiaba en Chanyeol que algo pasaba. Inconscientemente acarició su vientre que regresó a ser plano y una sonrisa se le escapó cuando Chanyeol a su muy pesar tenía que regresar a los gemelos a la cuna, éstos se habían despertado sin razón alguna —se sospecha que fue por haber escuchado la voz de su papi— y tenían la necesidad de regresar al mundo de los sueños.
Con ayuda de Baekhyun los recostaron de nuevo y notó que los dos emitían los lindos soniditos que Baekhyun igual emite cuando duerme . Son tan adorables como su prometido.
—Wow, Baek. Son tan hermosos, como tú —terminó y acarició la mejilla derecha de su prometido estirando una mano para alcanzarle. Baekhyun sonrió y sostuvo la mano del otro.
—Hicimos un gran trabajo, Channie.
—Te amo, Baek. Demasiado, no te imaginas cuanto.
—Y yo a ti, Channie.
Y por segunda —¿o tercera?— vez en el día juntaron sus labios, Baekhyun abrazó el cuello de Chanyeol y disfrutaron uno del otro después de tanto tiempo, se habían extrañado y querían recuperar un poco del tiempo perdido. Sin importar la cuarentena sin sexo que el doctor le había puesto a Baekhyun, al final del día la había desobedecido e hizo el amor con Chanyeol, aprovechando que sus padres no se encontraban en casa, haciendo el menor ruido para no despertar a los gemelos.
Y Baekhyun no sabia que se tendría que preparar, además de su próxima boda y compromiso con Chanyeol, para la llegada de otro bebé. Estaba fértil y no habían usado preservativo. Los gemelos pronto tendrán un hermanito.