Ayer acompañé a Tao a pintarse el cabello… bueno, mejor dicho, a despintárselo, porque se decoloró el cabello para dejárselo totalmente blanco. Resulta que saliendo de la estética dimos una vuelta por el centro comercial y nos encontramos nada más y nada menos al amigo que no ha dado señales de que está vivo como por un mes; Sehun.
Iba saliendo de una tienda de bebés junto con otra persona, yo no sabía quien era, pero luego luego me di cuenta de que era una niña, más chiquita que Sohee.
La niña era bonita. Mucho. Bastante. Ojos almendra, chaparrita, buen cuerpo y con mucho maquillaje, tiene el cabello perfectamente estilizado tambié . Lleva un vestido que se ve súper fino y una bolsa de Gucci. Sus zapatos también se veían carísimos.
-Hola.
-Hola.
-Ellos son Minseok y Zitao, ella es Joy- nos presentó Sehun, y luego le dijo rápido a Tao: -Y ahora, ¿Qué te hiciste en el cabello?
-¿Pues que no ves?- responde Tao rápido, nada más se le quedaba viendo a Joy, como sorprendido, intrigado.
Nadie sabe nada de lo de Sehun y la niña; Baek y yo no le hemos contado a nadie, pero creo que es hora de que Sehun le diga a todos…
-A mi me gusta como se te ve- dice Joy. Su voz es tan bonita, y ella es tan amable, muy diferente de como uno se hubiera imaginado.
-¿De verdad?- Tao se agarra el cabello emocionadísimo.
-Sí, además, ¡que valiente!- exclama Joy.
Tao sonríe, y se me hace súper chistoso porque tiene los dientes y el cabello del mismo color, como un pastel de chocolate con crema batida abajo y arriba.
Esa Joy me cae bien.
-¿Qué hacen por aquí?- pregunto yo, de la nada, todo se queda en silencio, Tao mira la bolsa que trae Sehun en la mano y luego ve la tienda de bebés.
Sehun no dijo nada, pero se puso muy pálido. Estaba como medio metro lejos de nosotros, como si se quisiera ir de ahí pero YA.
-Estamos tomando unos cursos de maternidad y paternidad- explica Joy como si fuera lo más natural del mundo.
-¿Qué?- Tao también se puso pálido y intercalaba miradas entre Joy y Sehun –P-pero ¿no es tu hermanita?
Estuve a punto de meterme para calmar a Tao, porque parecía que le fuese a dar un ataque de nervios y Joy se quedó con la boca abierta como si no supiera que contestar; iba a decirles que si íbamos por una nieve o por un café, para platicar y aclararle dudas a Tao, pero Sehun me ganó.
-Bueno, nos vemos- dijo y le agarró la mano para empezar a caminar para la otra dirección.
-¿Cuándo vas a volver a ir a la universidad?- medio le grito para que me escuche.
-No sé, ¡Adiós!
Y se van. Sehun caminando como si tuviera pulgas en los calzones y Joy detrás. Me cayó bien. Joy volvió a voltear y nos dijo adiós con la mano y una sonrisa.
-¡¿DE DÓNDE SE CONOCEN?!- Tao me agarró por los hombros y me empezó a sacudir –DIME POR FAVOR QUE SEHUN NO HIZO ALGUNA ESTUPIDEZ.
-Creo que necesitamos un café.
Empezamos a caminar a un Starbucks.
-¿De verdad se me ve bien el cabello?
-No, se te ve culerísimo, horrible, de verdad.
Tao se rió, me pasó la mano por los hombros y nos fuimos al café.
Cuando le dije el chisme a Baekhyun, no lo podía creer.
-¡No mames! ¿En serio los viste salir de ahí? ¿Cursos para ser padres?- se rió.
-Así es.
-¿Y cómo es en persona? ¿Es guapa o fea?
Le conté todo, con detalles incluidos. También le conté que a Tao y a mí nos cayó súper bien.
-Pinche Sehun, si al menos agarró a alguien bueno.
-¡Sí!... ustedes dos sí que tienen suerte.
Baekhyun se ríe –Y estoy seguro de que el cara de niña también será súper famoso.
Me río –Pero hubieras visto a Sehun, salió de ahí como si estuviera a punto de explotar una bomba.
-Pues es normal, de seguro es bien difícil para él ser padre a los veinte, y con alguien de diez años.
Eso hace que me ponga a pensar en mi hermana, últimamente siempre pienso en mi hermana. Pero esto lo amerita.
-¿Crees que hayan hablado del aborto?
-Pues no sé… pero entonces, ¿Joy si lo va a tener?
-Sí, Sehun ya es mayorcito y sabe lo que hace, y la niña se ve que tiene un buen de dinero, pero mi hermana todavía no se decide.
-Suho también tiene un buen de dinero...
-Un hijo es para toda la vida- me dijo Luhan hace como dos días, discutiendo sobre mi hermana.
Luhan me apoya en que no lo tengan, pero tampoco le encanta la idea; dice que por Suho no hay problema, que en su universidad hay una chava que tenía anorexia y cuando tuvo un bebé se recuperó.
-¿Pero cuántos años tenía?
-Como 21.
-Ahí está, el problema no es Suho, es mi hermana, que tiene 17 años. A los 21 años al menos ya sabes lavar tu ropa, pero mi hermana no puede ni limpiarse los mocos ella sola.
-Pero tener un hijo no deseado es igual de cabrón a los 17 y a los 37.
-Ahí está, me estás dando la razón.
-Pues sí y no… yo sólo digo que vean como está el show, que piensen en lo que van a ganar y en lo que van a perder, ah, y que ya le digan a Suho porque él también tiene derecho a opinar.
Yo nada más deseaba que pensaran “perder”, “mucho perder”, y que no le dijeran nada a Suho porque el idiota es capaz de decir que sí lo tenga, pero que él no se hace responsable.
-Que piensen bien las cosas.
-Exacto- terminó Luhan.
Sabía que Luhan tenía razón… y me puse a pensar que era un Luhan muy diferente al de hace dos años.
Baekhyun bostezó, de seguro ya se hartó del tema de mi hermana, últimamente hablamos siempre de eso, pero a escondidas de Lay o de Suho.
En eso mi celular empezó a sonar, y yo no supe que hacer.
-Es el tío Kyuhyun.
-Pues contéstale.
-Seguro habla de parte de mis papás.
-Como quieras- dijo y se metió al baño.
Tardé como otras tres timbradas para deslizar la pantalla y contestar.
-Hola, tío Kyu, ¿Cómo estás?
-¿Cómo estás tú, Min?
Nunca lo había escuchado así, estaba entre preocupado y enojado, hasta se me hace que tiene la voz parecida a la de mi padre.
-¿Dónde estás?
-En casa de Baekhyun.
-¿Ahí estás viviendo?- No digo nada, me pongo a darle vueltas a la sala de Baekhyun, me imagino cinco patrullas afuera de su casa esperando por mí, me asomo y sólo hay un camión de mudanzas en la casa de enfrente –Xiumin, no te estoy hablando de parte de tus papás… y si crees que te van a ir a buscar y pedir que regreses, no lo harán- auch, eso me dolió –Pero están preocupados, claro, todos estamos preocupados por tí.
-Pues estoy muy bien, estoy trabajando.
-¿Cómo que trabajando? ¿Y la escuela?
-Trabajo solamente los fines de semana. En una productora de cine- dije para sonar importante –El novio de Baekhyun me ayudó a conseguirlo.
Tres hombres empezaron a bajar un sillón color agua puerca.
-¿De verdad?
El tío Kuhyun sonaba intrigado. Hasta me dieron ganas de que les contara a mis papás para que se sintieran orgullosos.
-Bueno, pero ten cuidado, eres menor de edad y te pueden explotar.
Me reí, pero no era una risa de: “estás loco”, era una risa de “pues, de hecho, me explotan, pero nunca te lo voy a decir”.
-¿Qué ha pasado con Sohee, tío?
-¿No sabes?
-No.
No me contestó, pensé que se había cortado la llamada. Los hombres terminaron de bajar el sillón y comenzaron a bajar una mesa color caca.
-¿Tío? ¿Hola?
-Están en China.
-¿En China? ¿Quiénes?
-Kangin, Leeteuk y Sohee…
-¿Para?
-Le van a hacer un legrado.
Cuando escuché eso, el cuerpo se me hizo de gelatina. La abuela Choi siempre decía algo como “nunca desees tanto algo porque se te puede llegar a cumplir”. Nunca pensé que sentiría tan feo después de que pasara algo que yo quería que pasara.
La mesa se les cayó y se le rompió una pata.
-¿Minseok?
-Aquí estoy.
No pude hablar, simplemente pensaba en sangre, y en más sangre, y en mi hermana llorando por perder a su bebé.
-Minseok, yo sé que no me tengo que meter en esto, pero sé por qué te saliste de tu casa, ya no aguantabas a tu papá.
-Pues sí…
-Pero él está echándole todas las ganas del mundo para recuperarse.
Legrado. Que horrenda palabra. Que horrenda acción.
-Anda medio insoportable, mi hermano- se ríe Kyuhyun –Todo el tiempo habla de su grupo y de los doce pasos.
-¿Está yendo a clases de baile?- Kyuhyun casi se parte de la risa -¿Qué?¿De qué te ríes?
-Los doce pasos para los alcohólicos, busca en internet.
-Sí.
-Bueno, me tengo que ir, cuídate mucho, ¿sí? Ah, y háblale a tu mamá y a tu hermana, te necesitan en estos momentos.
-Sí, adiós tío.
Me cuelga, y lo primero que hago es buscar un contacto en específico en mi celular, no es mi mamá ni mi hermana. Marco pero no me contesta, así que busco otro contacto en chinga y también le marco.
“¿Hola?”
-Lay, ¿estás con Suho?
“Si, ¿por?”
-Pásamelo.
“¿Para qué?”
-¡Pásamelo!
“Calmado, calmado. Espera, deja lo pongo en altavoz… listo” Se escucha la voz de Suho “¿Minseok? ¿Qué pasa?
-¡Eres un cabrón, Kim Junmyeon!
“¿Qué? P-pero Min…”
-¡MI HERMANA ESTÁ EMBARAZADA! ¡DE TI!
“¿QUÉ?” se escuchó el grito de Lay y Suho al mismo tiempo.
-Tiene más de cinco meses y ahorita está en China porque están a punto de hacerle un legrado. Así que escúchame Suho, si a ella le pasa alg- ¿Suho? ¿Suho? ¿Lay?- me colgó.
Baekhyun se tardó otro ratote en salir del baño, para cuando salió, yo ya me había quedado dormido llorando.
Hace una semana vi una película que se trata de un tipo que va a un lugar donde te borran la memoria, porque quería olvidar a una ex novia, pero ya que se la están borrando, se arrepiente porque va a olvidar todo lo increíble que vivió con ella.
Y me puse a pensar que yo no quiero olvidar nunca lo que vivo, porque cada pedacito de mi vida es increíble.
Bueno, por un lado, es medio feo; me fui de mi casa, mi familia me odia, no tengo un peso, mi hermana abortó, etc. Pero por otro lado, es increíble, de verdad; vivir con mi mejor amigo, estar enamorado de Luhan, hasta trabajar es divertido.
¿Existirá la felicidad? ¿Existirá algún punto en la vida donde digas “todo es perfecto”? Yo creo que no; porque siempre algo malo va a pasar; te pueden atropellar en la esquina, se puede tocar en tren muy lleno, te pueden asaltar.
La felicidad no es una forma de vivir, no es como cuando terminas tu carrera, o cuando consigues el trabajo de tus sueños. La felicidad es algo que siempre está ahí, mezclada con cosas feas, a veces va, a veces viene, y tú decides si quieres ser feliz o no.