¡Quédate quieto!—le dijo severa—Aunque que estés así es alentador—dijo después ella con una sonrisa. De pronto él se sintió muy agotado por el esfuerzo y con los brazos en tierra miró en derredor para ver que pasaba, como estaba yendo todo y descubrió que estaban en un prado verde. Sakura estaba peleando con un Obito intentando levantarse, repetía que ella podía sola y que se encargara de Naruto hasta que sus ojos se encontraron y ella gritó su nombre con una sonrisa aliviada. Kakashi sensei estaba con su torso apoyado en un árbol masajeando su cabeza como aturdido, él supo que era el sensei por sus ropas. El otro Kakashi estaba más allá en un grupo de cuatro con el otro Sasuke, el otro Obito y un Naruto también desfallecido. Los gritos seguían y de pronto se dio cuenta que eran a su espalda y que una de las voces era de Sasuke. Lo miró, el Hokage y él discutían mientras Shisui e Itachi 3 miraban feo a Sasuke.
¡No nos inmiscuiremos más con una persona de tan poca confianza! Puede que seas un Uchiha pero eres un traidor—dijo Sasuke Hokage a Sasuke kun.
Con esas duras palabras Naruto recordó las revelaciones que hiciera Orochimaru antes plantando las semillas del caos. De pronto se percató que a un lado suyo había otra figura inerme. ¿Kabuto Yakushi? Tenía un muñon toscamente vendado y lucía un moretón en la sien.
Obito 3 intentaba no inmiscuirse pero después de la batalla ese Kakashi lucía diferente. Se acercó después de ver que la sorprendente muchacha pelirrosada había logrado curar rápidamente su propia herida. Era una shinobi con mucho talento. Inclusive más que él a su edad. Siempre se había sentido un estorbo para el clan, todo de talentosos ninjas y él no tenía por alguna extraña razón ni la mitad de las habilidades de un Uchiha normal. Muchos escondían secretos, tal vez él no era del todo Uchiha se dijo más de una vez.
Sacudió su cabeza para no hundirse en la desesperación. Esos pensamientos le asaltaban a veces sin razón aparente solo su simple cobardía para enfrentar el simple hecho que de los Uchihas él era el menos dotado.
Se acercó al peligris y le preguntó después de estar parado un momento a su lado--¿Qué te sucede? ¿Estás herido?—
Hatake lo miró un momento confundido hasta que recordó que ese Obito podía muy bien no conocer ese ataque de Sharingan. ¡Quizás en su mundo sus ojos no tenían ese poder!
No te preocupes ya me…--decía Kakashi al levantarse.
No me preocupo…—le decía Obito viendo hacerlo pero de pronto las piernas del otro fallaron y acudió para atraparlo antes de que diera con el suelo--¿Qué te está sucediendo?—preguntó lleno de stress el pelinegro. De pronto el otro se veía muy desvalido como si estuviera herido pero desde lejos no observó nada. Tal vez dentro de sus ropas, lo apoyó en el tronco y comenzó a desvestir su torso antes de ser consciente de lo que estaba haciendo. No había tocado su cuerpo desde ese día, sus manos se detuvieron mientras su corazón se aceleraba y sintió que su cara le ardía.
¿Qué haces?—le oyó decir con voz rasposa a Kakashi y sus manos atrapar las suyas, estaba paralizado y con las manos del otro así era peor—Te dije que no te preocuparas—dijo el peligris mientras apartaba sus manos de él. Un acto que lo desconcertó y lo… ¿Entristeció?
Trató de mirarlo a los ojos pero el otro tenía la mirada baja y una mano en la cabeza como si esta le doliera. Algo le había pasado solo que no quería contarle.
¿Kakashi sensei se encuentra bien?—le preguntó Haruno apareciendo y haciendo que el Uchiha se sintiera fuera de lugar.
¡Estoy bien! ¿Qué hay de ti Sakura?—preguntó el peligris.
Obito se sintió fuera de lugar, esas palabras de camaradería no lo incluían. En silencio se levantó y los dejó. No fue consciente de la mirada de la que fue objeto por parte de Hatake.
Narutoko trataba de evitar que su igual se levantara. Era obvio que estaba débil pero el desgraciado luchaba como una fiera por ir al lado del Uchiha. ¿Sería posible que en todas las dimensiones los desgraciados Sasukes los tuvieran enloquecidos?
¡Dejame ir!—le dijo el otro rubio.
¡Que no!—le contestó ella con el ceño fruncido al igual que él--¡Deja que esos idiotas se arreglen entre sí!—le dijo Narutoko fastidiada. ¿Por qué ellos debían apoyar siempre a esos bastardos? No conocía a su Uchiha pero si era como el suyo terminaría abandonándolo a su suerte como Sasuke la abandonó a ella. Las palabras compañero o amigo no valían nada para esa clase de gente.
¿Qué clase de amigo sería si lo dejo así?—preguntó Naruto.
¡La que se merece!—le dijo ella impávida.
¡Ahora entiendo porque Sasuke te abandonó en el altar!—le gritó el furioso ojos azules, ella quedó destrozada por tal afirmación.
Sasuke 3 que discutía con Sasuke 1 cerca de ahí estaba a mitad de una frase cuando escuchó ese grito que ahogó sus palabras. Miró hacia el costado y la vio toda impactada. Y el rubio abría la boca para decir más.
Naruto se sintió mal un momento después de darse cuenta de lo que le estaba diciendo iba a pedirle perdón cuando una atroz mano lo arrastró de ahí y lo golpeó contra un árbol cercano—¡Maldito mocoso…!—con horror Naruto vio la katana empuñada contra su garganta pronta a cercenarla, de milagro Itachi llegó a salvarlo a tiempo. El ataque fue veloz y en los ojos Uchiha ardía el sharingan. El mayor de los hermanos sostenía el brazo del menor sorprendido de esa actitud. Normalmente su ototo era un tipo frío que no trasuntaba lo que pensaba o sentía. Pero se trataba de Narutoko, solo ella lo enloquecía así--¡Suéltame Itachi! ¡No lo mataré!—dijo y su hermano lo soltó.
Narutoko miraba su espalda sorprendida. ¿Qué había sido eso? ¿Por qué lo atacó así? ¿Por lo que dijo? ¿La estaba defendiendo a ella?
Sasuke—le llamó.
El la miró un momento y chasqueó la lengua antes de irse.
¡Oy! ¡Hokage! No puedes dejar esto así. ¿Qué haremos con el otr…?—le dijo Itachi.
¡Te esperas!—fue lo que dijo Sasuke 3 antes de desaparecer entre los árboles mientras Naruto 1 trataba de asimilar lo sucedido.
¡Oye tú! ¿Cómo estás?—preguntó una voz conocida a Naruto 1 y este miró a su lado, Sasuke lo observaba arrogantemente.
Creo que sobreviviré—dijo el joven rubio con la mano tras la cabeza y una sonrisa boba.