La reacción fue inmediata en ambos. Saltaron tras sus árboles para arreglar tal cuestión. Sasuke no podía creer que estuviera así nada más por ver la cara del estúpido de Naruto bajo él, ese ambiente de idiotas lo estaba afectando en serio, dedujo con algo de furia mientras con su ceño fruncido desataba el lazo que aprisionaba su ropa para ir a… ¡No quería ni pensarlo!
Entonces su mano tocó su duro falo y por primera vez en su vida tembló de gozo por el contacto, la reacción fue inmediata lo que lo sorprendió en extremo ya que antes no había sido así. Tampoco le daba por masturbarse. ¡Eso era asqueroso! Pero nunca había estado así en su vida.
Empezó a friccionarse con ansiedad de que todo eso terminara de una buena vez mientras cerraba los ojos fuertemente y es que ni él se podía ver mientras su mano machacaba y machacaba cierto asunto. Trataba de convencerse de que era como ir al baño pero miércoles si se sentía así orinar.
Sus piernas se fueron tensionando mientras el orgasmo parecía precipitarse. En esos momentos la mente busca algo que sea el punto disparador de esa reacción, lo que a veces no es elegido por la mente consciente, y Sasuke imaginó una muy genial… cara de Naruto todo sonrojado. Lo que fue complementado por ciertos aparatosos gemidos que provenían del árbol cercano.
En ese momento Sasuke pensó con su mente racional que si los descubrían así por su culpa mataría al desgraciado mientras su mente no racional estaba reaccionando a los altos gemidos y su cuerpo pues… ¡estaba ardiendo!
Tras otro árbol el rubio tenía problemas para concentrarse porque a cierto zorro le cayó la ficha de que molestarlo en tal estado era muuuuuuyyyyyy divertido.
¡SE TE PUSO DURA! ¿A QUE SI?—
La mente de Naruto intentaba ignorarlo y nada más agrada a Kurama que un reto.
¿Y SI LLAMAMOS AL CHUPACABRAS? TAL VEZ CHUPA ALGO ADEMAS DE CABRAS—
Por un segundo la imagen de Kurama chupando aquello se le vino a la cabeza “¡Oye! ¡Déjame tranquilo para…!” trató de reprenderlo.
¡INDECENTE!—le dijo el bijuu—¿A QUIEN IMAGINASTE CHUPÁNDOLA?—
Ni en sueños Naruto contestaría aquello. Sería como ganarse un enemigo de por vida.
¡ANDA! ¡DÍMELO!—pidió el zorro.
“¡No! ¡Y deja de molestarme porque si no tendré esto todo el día!” le recriminó el rubio.
¿A MI QUE ME DICES? NO ME IMPORTA. DESPUES DE TODO VA A IR ACOMPAÑADA DE TU CARA NO DE LA MIA—se rió el bijuu.
“¡Bastardo!” le gritó mentalmente pues se había dado cuenta de que no podía chantajearlo con nada. Ese hijo de zorra iba a meter su cola en su vida hasta que la muerte los separara. ¡Como si lo viera!
¡ESTA BIEN CHICO! VOY A DEJARTE CUMPLIR TUS NECESIDADES—le dijo el buen zorro.
“¿En serio?” preguntó el ojos azules nada confiado en la buena voluntad de su amigo.
EN SERIO. ME COMPORTARE COMO UN BUEN ZORRO Y TE DEJARE TERMINAR—dijo el “inofensivo” Kurama.
Uzumaki no se la creía del todo pero tenía que confiar. Empezó a sobar la cuestión y en segundos pues estaba listo para concluir cuando…
Tan, tan, tan, tan…
¡DE VERDAD QUE ESTA BUENO SASUKE! ¿NO?—
¿No has encontrado nada? Me pareció que era por aquí—dijo Itachi mientras cerca Shisui miraba por si encontraba a alguien.
¡No, nada!—contestó el otro.
Estaba algo desanimado, confuso y apenado.
¿Qué pasaría de ahora en adelante entre su amigo y él?
Estaba angustiado pero no se atrevía a hablarle, iba detrás suyo como su sombra mientras el otro buscaba y el fingía tener la mente en lo mismo pero no podía concentrarse. Entonces Itachi volteó y lo miró a los ojos.
Sobre lo de hace un rato…--dijo Itachi y Shisui se puso a la expectativa—Es mejor que lo olvidemos—añadió.
Si… claro—respondió Shisui atribulado, su mano que se alzara unos centímetros por sobre la cadera hacia el otro pelinegro volvió a bajarse mientras un nudo en la garganta le dificultaba el expresarse.
¡Será lo mejor! Esto solo fue una confusión de momento—explicó Itachi antes de seguir de largo y pasar a su lado.
¿Por qué en su corazón se decía que eso no fue una confusión momentánea? Se preguntó Shisui mientras algo estrujaba su corazón.