Kakashi sintió la fuerza del impacto y con el corazón en la boca Salió disparado hacia alla.
Sakura estaba llegando cuando escuchó la explosión.
Obito 3 sintió la conmoción desde su reciente habitación, igual que Sasuke y Naruto 2.
Kakashi san y Obito 2 se dirigieron al lugar del que provenía el ruido.
Sakura al ver que Sasuke estaba lastimado corrió hacia él y Naruto mientras Obito 3 se dirigía hacia el herido Shisui.
Shisui abrió los ojos lentamente. Le escocía la garganta y trató de aclararla antes de recordar lo que le había pasado.
-¿Qué intentas imbécil? ¿Abrir tus suturas?—le regañó la persona a su lado y al mirar pudo ver al esperado Itachi. De pronto recordó la última imagen que le dejaran ver sus pupilas. Un anbu lo tenía entre sus brazos mientras gritaba su nombre, luego se quitaba la máscara y era Itachi.
-¿Tú? ¿An-bu?—preguntó con su voz leve, cada sílaba atenazaba su garganta con un dolor rasposo.
Itachi miró un momento para un lado. Esperaba que el otro no recordara ese momento pero al parecer carecía de tal suerte. Los ojos negros perdieron el brillo pues era algo ultra secreto que él pertenecía al prestigioso grupo. Quizás no debiera esconderlo de él pero era una grave infracción por eso lo ha hecho. Ahora en su mente pujan su lealtad al Hokage y a Shisui.
-Esperaba que no lo recordaras—aceptó el pelilargo.
-¿Cu-ando?—preguntó el pelicorto.
-Desde que Sasuke es Hokage—contestó el otro—Mi hermano sentía que solo confiaría en los anbus si yo estaba al mando—añadió mientras tornaba a mirarlo. Los ojos sorprendidos del otro le devolvieron la mirada.
¿En verdad Itachi era el jefe de los Anbus ahora? Se preguntó el menor con una sensación de sorpresa y tristeza en su interior. Si era así más cosas de las que imaginó los separaban. Puso cara de tristeza y de pronto su cara fue alzada y unos labios pasionales se cerraron en torno a ella. Itachi no soportaba verlo sufrir.
Tengo que saberlo, se decía Obito esperando en el corredor. Una sospecha muy cierta latía en su corazón que se negaba a desechar.
La cabeza rosada dejó la nueva habitación mientras sus sobrinos y Kakashi san lo acompañaban.
¡Tío, te ves pálido!—decía Sasuke en el momento de que ella salía.
A Obito no le importó la descortesía de dejarlos parados a todos por ir tras ella. La agarró desprevenida y ella lo miró con sorpresa--¿Obito san?—
-Necesito tu ayuda—dijo este.
Por supuesto, lo que…--antes de poder decir “quieras” su mano fue halada hacia el bajo vientre del Uchiha dejándolos pasmados a todos—¿Obito san que…?—preguntó ella.
Haruno pudo ver la desesperación en sus ojos y Kakashi se sintió destrozado. Obito se negaba a aceptar que ese bebé ya no existía. Era doloroso verlo en ese estado.
Por su lado Sasuke y Naruto 2 se pusieron tensos. ¿Acaso Obito san estaba diciendo que él y Kakashi san…?
Sakura debió decir lo que pensaba por muy duro que sonara—Obito san… el bebé si es que lo hubo… sabe que no es posible que un ser tan pequeño sobreviviera a la maldición de la que usted por los pelos se salvó—dijo la kunoichi.
¡Pero yo sé como me siento! ¡Yo puedo sentirlo en mi interior!—gritó el desesperado Obito al entender que nadie le creía, que se compadecían de él. Se volteó hacia Kakashi que se le había acercado--¡Tienes que creerme! ¡No desvarío! Puedo sentirlo. Desde lo del pasillo yo…--añadió perdiendo la fe en que le creyera de a poco. Su voz se apagó mientras lágrimas desesperadas escapaban de sus ojos.
Las manos de Hatake lo rodearon y su voz susurró en su oído—Yo te creo—el corazón del pelinegro se paralizo un momento. Sus manos apretaron las ropas a su alcance mientras sentía el aliento del otro en su oreja. ¿Lo diría para tranquilizarlo?
El abogado divisó al gemelo de su Uchiha y lo llamó. Todos sabían la habilidad del otro Obito para entonces—Necesitamos de ti otra vez. Dinos que ves—dijo el peligris separándose del otro Obito y poniéndolos frente a frente. Obito 3 entendió y activando su sharingan pudo ver la radiografía de su gemelo.
Los ojos de Obito volvieron a la normalidad y miró a esos dos, luego a Haruno—Sakura chan… ¿Puedes ayudarme?—pidió y ella frunció el ceño mientras se acercaba al otro Uchiha y hacía la lectura de chacra que este le había pedido—Mi habilidad sirve si tienes huesos rotos o eso pero es difícil para mi…--no pudo terminar porque entonces la pelirrosada miró con estupor al otro Obito.
¡Es… cierto!—contestó ella a su interrogante mirada.
La felicidad inundó el corazón del catedrático.
-¿Cómo pudo…?—preguntó sorprendido el médico shinobi.
-En realidad no lo sé, tal vez sea…--dijo el académico.
-Tu sangre—dijo de pronto Hatake atrayendo la atención de todos.
-Después de todo un hijo suyo sería…--intervino Sasuke 2.
-Mitad vampiro—dijo Naruto 2 y luego miró su vientre para frotarlo. Tal vez su indefenso bebé no estaba tan indefenso pensó con un poco de alivio el ojos azules.