Eran alrededor de la una de la madrugada cuando las sirenas, que indicaban la entrada de alguien a la fuerza en aquella mansión, comenzaron a sonar.
Varios hombres con armas y vestidos con trajes formales empezaron a salir por todos lados pero poco les servían las armas frente al intruso que no se dignaba a tratar de hablar tranquilamente con ellos, después de todo había ido a por el jefe del lugar.
~~~ Mientras tanto en Varia ~~~
-Ahora que lo pienso me pregunto a donde habrá ido el Boss – hablo un peliverde de manera calmada, se trataba de Fran que junto al resto de guardianes se encontraban en una sala de la enfermería, asegurándose de saber todo sobre el estado de su capitán.
- Shishishi lo más seguro es que haya ido con el Noveno ya que puede que el conozca más respecto a lo que sucede al capitán idiota – le respondió el príncipe al ilusionista al momento que le lanzaba cinco de sus cuchillas.
- Itai, deje de lanzarme esto sempai – dijo mientras se quitaba los cuchillos y los doblaba enojando al peli rubio.
- Porque lo preguntas Fran-chan – intervino el peleador con lentes de sol evitando que el príncipe nuevamente lanzara las cuchillas al pequeño cuerpo del peliverde.
- Es solo que recordé que cuando vamos a la mansión del Noveno Vongola debemos enviar un aviso antes con el motivo de la visita para que nos esperen, pero ese trabajo lo hace normalmente el capitán y el Boss se fue sin hacerlo así que – dejo la frase al aire haciendo que los presentes en ese momento se compadecieran un poco, solo un poco, de los guardias que seguramente caían uno a uno en la mansión Vongola.
~~~ En la mansión Vongola ~~~
Ciertamente los hombres que supuestamente eran lo mejor de lo mejor caían sin cesar, pero era algo natural después de todo Xanxus, el intruso, estaba harto de que no le permitieran llegar a su objetivo y antes de que las bajas en la mafia más grande de todas aumentaran salió la única persona que podría parar al moreno en ese momento.
-Se puede saber qué es lo que estás haciendo Xanxus – se pudo escuchar una voz grave pero con un toque amable, al escucharla los hombres que aún no caían inconscientes hicieron inmediatamente una reverencia hacia el dueño de la voz, el Noveno.
- Tks –chasqueo la lengua y tiro lejos al tipo que sostenía sobre el suelo para luego ver al Noveno – Quiero hablar contigo -, fue lo único que dijo, el anciano al ver como se tranquilizaba el oji rojo por verlo además de que noto en su voz un tono de preocupación que le extraño mucho decidió llevarlo a su oficina para que hablaran con calma.
- Incluso siento tú, Xanxus, envías un aviso antes de venir, que paso esta vez para que no lo hayas hecho – dijo el Noveno mientras se dirigían a su oficina pero al no recibir respuesta de su hijo decidió desistir de intentar hablar con él por el momento.
Una vez dentro de una oficina amplia, decorada con un estilo victoriano se dirigieron al centro de esta donde se encontraba un escritorio de madera tallada, el Noveno se sentó en el sillón de terciopelo rojo claro, detrás del escritorio, mientras que su hijo Xanxus se sentó en una silla frente a él.
-Y bien, ¿qué significa esta visita tan tarde Xanxus? -, cuestiono el anciano observando seriamente a su hijo dándose cuenta del portafolio que traía y no había visto antes.
Xanxus saco el reporte de Squalo, el cual leyó mientras se dirigía a ese lugar y claramente decidió que cuando se recuperara castigaría de alguna manera a su capitán, y se lo dio al noveno para que lo leyera así como las bitácoras del experimento.
El Noveno se extrañó cuando vio las bitácoras ya que había acordado con Xanxus que enviaría a alguien por ellas, pero concentro su atención en el reporte perfectamente elaborado.
Pudo notar enseguida que se trataba de la misión de la guarida rusa a la que, al parecer, su hijo había mandado a su capitán. Era seguro que la misión fuera todo un éxito pero mientras más leía el reporte se tensó de inmediato cuando comprendió la situación que había llevado al más joven hasta ahí.
-¿Esto significa que? Squalo está -, no termino la oración porque pudo ver como el rostro de su hijo se oscurecía, el Noveno sabia de los sentimientos guardados de su hijo hacia su capitán.
- El doctor más capacitado de Varia dijo que un virus de esta misión está acabando con su sistema inmunológico y que si no administramos la cura de inmediato, el tiburón morirá -, dijo el oji rojo con la mirada hacia abajo pero inmediatamente la alzo para decir - así que, viejo me vas a decir donde encuentro a los cabrones responsables de todo esto ahora mismo – amenazo al noveno mientras sacaba sus pistolas y apuntaba al mayor.
El anciano que se esperaba algo como eso ignoro las armas que apuntaban a su persona y decidió que lo más sensato sería ayudar a su hijo, por lo que le contaría lo que sabía.
-Bien, escucha Xanxus entre las mafias rusas hay una que siempre ha estado obsesionada con obtener al guerrero perfecto sin importar el método, sospechábamos que usaban humanos para experimentar con ellos y, como tú ya sabes a pesar de ser mafiosos o asesinos, está prohibido hacer ese tipo de experimentos en personas por otro lado lo han intentado desde hace tiempo pero necesitábamos pruebas concretas. Como te decía esto solo era una sospecha hasta hace poco que nos enteramos de un escondite donde realizaban las armas bioquímicas para probarlas en personas, le dimos la misión a Varia porque era seguro que la cumplirían y con las bitácoras que acabas de darme puedo dar la orden de eliminar a esa familia con esto como prueba -, el anciano observo como en ese instante los ojos de su hijo se encendieron, estaba seguro que deseaba ser el quien cumpliera con aquello.
- Además -, siguió el Noveno – hay varios reportes que indican que cada cierto tiempo una carga sospechosa le llega a esta mafia es posible que se trate de la cura, pero no estamos seguros, que dices Xanxus te gustaría tomar la misión de acabar con la familia rusa de Ivanov Dmitriy -, observo como una cuantas cicatrices aparecían en el rostro de su hijo, pero aun así este le sonrió con esa arrogancia característica en él.
- Por supuesto viejo -, acepto el líder de Varia ya que tendría con quien desquitar su ira el responsable de todo y además de que estaba cerca de encontrar la cura, el noveno le dio otras indicaciones necesarias y partió de ahí de inmediato, no podía perder mucho tiempo.