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Maniaco por Diana123

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Notas del capitulo:

Holiiii...... siento la demoraaaaa.... espero les guste mucho, espero sus comentarios, el anterior no tuvo casi y eso la verdad fue ligermanete desmotivante.

igual las y los amoooo.

disfruten 

Cap 10

Cuando despertó sintió el peso y el dolor que se intensificaba al abrir los ojos. Los tenía hinchados… adoloridos.
Se sentía incapaz de mover una mínima parte de su cuerpo, y su mente estaba tan nublada que por un segundo olvidó lo patético e irremediable de su situación.
Las pesadillas y terrores nocturnos no le habían permitido dormir en absoluto aquella noche.
Después de lo sucedido el día anterior sentía como si el alma le hubiese abandonado…. Tenía la sensación de haber perdido el habla y todos los sentidos. Solo quería morir. Morir y nunca despertar.
Recostó su cuerpo de lado y sintió como poco a poco un escalofrío le recorría la espalda desde muy adentro en su interior. Lentamente empezó a acariciar la piel ligeramente cicatrizada donde antes se había rascado.
Todo estaba obscuro. Sin embargo no tan obscuro como para impedir que distinguiese las sombras que le rodeaban; parecían monstruos asechándole desde la penumbra.
Un temblor le invadió por completo… no quería que nadie lo viese, y aunque estaba completamente solo sentía como si todo el universo estuviese contenido allí en ese cuarto, burlándose de su debilidad.
Estaba completamente aterrado; como nunca antes lo había estado.
Quiso volver a perder la conciencia. Sin embargo su mente estaba más despierta que nunca. Sus miedos brotaban desde lo más profundo de sus pensamientos hasta su piel, materializándose justo en frente de sus ojos como las peores alucinaciones que podía tener.
Intentó pensar en algo que le hiciese tranquilizar; se imaginó hablando con Hanji y con Erwin pero aquello solo le causó una profunda nostalgia, acompañada con la ansiedad de quizás nunca poder volver a verles.
Tenía la sensación de que en cualquier momento Eren aparecería a través de esa puerta para torturarlo. Sabía que no podía escapar de la humillación, y aquello le hacía querer desaparecer.
Se imaginó siendo invisible; viendo cómo el moreno le buscaba por toda la habitación con la frustración de no poder encontrarle… aquella imagen lo reconfortó.
Hacía frío, mucho frío…. Su cuerpo tiritaba y el aliento se le escapaba de la garganta. De su nariz emanaban pequeñas nuevecitas de vapor al exhalar, condensándose y generando algunas gotitas de agua que le humedecían las aletas.
Sentía como la gelidez del ambiente le inundaba hasta calarle los huesos. Cada pequeña respiración le significaba un estremecedor escalofrío; el aire parecía congelar al tacto…. Quizás era invierno…. Quizás estaba nevando; quería ver la nieve, y sentir el viento golpeándole el rostro.
Quería respirar la humedad del aire frío y mojado…. Tender sus manos hacia el cielo y alcanzar los pequeños copos de nieve. Ver las estrellas que comúnmente eran más evidentes en las claras y despejadas noches de invierno.
Habían tantas cosas que extrañaba, y tan pocas esperanzas de volver a ellas.
Estaba sucio…. Su piel permanecía nívea, pero estaba manchada por una ligera capa de mugre. Se sentía satinado y pegajoso…. No olía mal, sin embargo era suficiente con aquella sensación para causarle profundo nerviosismo; y es que el lugar no estaba precisamente limpio. El suelo embaldosado estaba lleno de pólvo y arenilla. Las paredes tenían algunas telarañas y olía a humedad.
Era horrible. Necesitaba un baño…. Tenía la necesidad de sentirse pulcro una vez más… quizás aquello le devolviese algo de dignidad.
Ya había tenido más de 4 ataques de pánico…. Hacía demasiado tiempo que no tenía uno, y ahora había tenido 4 en un periodo de menos de 4 días…. No podía dormir; el insomnio era permanente, y los terrores nocturnos más frecuentes de lo normal.
La falta de descanso y el sueño agotador, además de su cuerpo maltratado le estaban pasando cuenta.
Algo que agradecía era que Eren nunca hasta el momento había estado en los momentos en los que realmente perdía el control: cuando la ansiedad lo invadía y su cuerpo no reaccionaba ni siquiera para un acto tan vital como respirar. Y sentía como el aire le abandonaba, como su pecho intentaba llenarse pero no obtenía nada…. Solo esa sensación de ahogo y completa desesperación. Entonces empezaba a temblar frenéticamente y su rostro empalidecía.
Aquel inevitable y perpetuo pensamiento de que todo a su alrededor se cerraba. Las paredes cada vez más cerca. El sentimiento que le generaba la sensación de encierro. Las lágrimas. La desesperación. Los gritos suplicantes de ayuda. La resignación…. Y finalmente cuando sentía que ya no podía más…. Que sus pulmones estaban colapsándo por la falta de aire y el pánico; entonces se desmayaba, y por fin la calma del sueño pesado y vacío lo llenaban.
Había bajado mucho de peso, sus huesos se marcaban de forma exagerada y sentía una profunda y masiva debilidad que creía por cada día que pasaba. Sentía su estómago pequeño. No tenía hambre y pensar en comida le revolvía las entrañas, haciendo que el esófago se le cerrara.
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Ew:-“tengo que hacerte una pregunta eren-“
susurró mientras observaba cómo el menor organizaba algunas muestras del laboratorio. Eren dirigió su mirada hacia el rubio, mientras intentaba fingir una sonrisa amable, que le resultó como una horrible mueca., Erwin lo miraba con aquellos ojos azules que tanto le fastidiaban; aún más que la omnipresente sonrisa de Hanji en sus labios. El más alto sostenía una taza de café humeante entre sus manos; se imaginó volcándosela encima.
Ew:-“¿ Tu… tú que harías si alguno de tus amigos desapareciese súbitamente… …?..... si por ejemplo Mikasa se fuera una noche y simplemente no volviera…. Y la razón de ello fuese… no se….. Que los dos discutieron… o que simplemente la trataste un poco mal…. Bueno no importa, Por lo que fuera…. Tú ….. ¿Qué harías?.”-
El rostro del más anotó se contrajo en una mueca dolorosa, sus ojos estaban ligeramente vidriosos, como si en cualquier momento una lagrima fuese a abandonarlos. Aquello le causó una mezcla de asco, lastima y gracia. Sin embargo se dedicó a expresar su mejor cara de tristeza.
Hizo lo que pudo.
En:-“ wow…. Yo…. Eso sería terrible…. Debe ser algo demasiado doloroso…..”- hizo una pausa para pensar exactamente que diría –“…. Jum…. Bueno… la verdad es que si Mikasa o Armin se fueran porque están enojados conmigo no podría culparlos, supongo que sería justo darles un espacio y permitir que se alejen un poco de mi… que piensen las cosas… digo; por más doloroso que resulte, es bastante razonable que una persona quiera sentirse tranquila para poder superar su enojo, y que no desee ver a la persona causante de esa molestia…. ¿esto…. Me pregunta esto por El Capitan?”-
Erwin retiró la mirada y se llevó una de sus manos hasta su nuca, rió con algo de pena y asintió mientras bebía un sorbo de café, se acercó a la ventana para mirar a través de ella de manera pensativa.
Ew:-“ jamás pretendí ser una molestia para él….. nunca quise que se alejara…. Ya no sé si volverá. Han pasado 5 semanas, y en lo único que pienso es en ir a buscarle…. Estoy realmente cohibido en este momento y no tengo la más mínima idea de que se suponga que tenga que hacer.”-
A Eren le sorprendía (y molestaba) lo realmente evidente que podía llegar a ser ese tipo con sus sentimientos; tratar con la estúpida de Hanji podía ser una verdadera molestia, sin embargo no existía persona más irritante que aquel rubio de ojos intensos.
En:-“comandante….. usted…. Usted no tiene la culpa de nada de esto. El Capitan Levi es una persona muy fuerte. Le aseguro que él estará bien donde quiera que esté….. usted….. Usted en verdad lo ama ¿no es cierto?”-
Una sonrisa burlona de camufló en su rostro al notar como todo el cuerpo del rubio se tensaba por la repentina pregunta. Este se volteó con el rostro completamente rojo por la vergüenza.
Ew:-“¿¡que!?¡por supuesto que no!.... él… él solo mi compañero…¿Cómo puedes si quiera pensar en ello?... por dios…¡los dos somos hombre!…”-
Aunque en su mente lo único que pensaba como una respuesta era:
-“si, si, si, si….. lo amo… lo quiero… no pudo dejar de pensar en él…. Lo amo….. Si…..si….si”-
Eren se sintió complacido al lograr fastidiar al ojiazul, quien estaba realmente incomodo y ligeramente apenado… podía decir lo que quisiera, pero eren sabía perfectamente que Erwin Smith estaba completamente loco por su querido azabache, y aquello le hacía enojar sobremanera.
En:-“¿Qué?... a… nooo… no me refería a “ese” tipo de amor…. Quiero decir… usted lo ama como un amigo…. Como su mejor amigo… ¿no es así?”-
Fingió una mueca de vergüenza, mientras soltaba una ligera risa incomoda… era muy bueno fingiendo o esas personas eran demasiado fáciles de engañar; o quizás ambas.
Ew:-“heee… jajajajaja….. diciéndolo así por supuesto que lo amo…. Demasiado quizás… ese idiota es… bueno él es una persona muy especial…. Fuerte y siempre tan rudo… ¡pero ese amor no es diferente que el que siento por Hanji o el que tú sientes por Mikasa o Armin!..... son personas que ocupan un lugar en mi corazón…. Él ocupa un lugar en mi corazón…”-
“Uno muy muy grande” pensó para sí mismo.
En aquel instante entró por la puerta una castaña de cabellos despeinados, miró a Eren, luego a Erwin y luego entornó los ojos.
H:-“Maldición Erwin, otra vez hablando del enano con mi pupilo…. ¡te he dicho que dejes de distraerlo!... y ocupa tu mente en cosas más productivas que Levi Ackerman…. Ese idiota debe estar pasándosela genial en sus pequeñas vacaciones autoimpuestas…. Deja de atormentarte tanto por ello….”-
Erwin frunció el ceño, parecía realmente enojado y soltó un puño contra la pared, a manera de expresar lo que sentía
“Demasiado bruto” pensaron Eren y Hanji al unción.
Ew:-“¿como puedes si quiera pensar en eso?….¿como estás tan segura de que él está bien…?... no entiendo…. ¿¡como mierdas es que no lo extrañas en lo más mínimo estupida!?
El ambiente se estaba volviendo tenso, eren quería seguir allí… le gustaba escuchar pelear a ese par de idiotas… sin embargo no podía dejar eso en evidencia… sería algo un poco sospechoso.
Un gritó se la castaña lo sacó de sus pensamientos
H:-“¿¡que!?.... ¿acaso estás loco?... por supuesto que lo extraño bruto…. También es mi amigo… también me hace falta… pero qué mierdas consigo con andar lamentándome…. Él decidió irse… tienes que dejar que se le pase la rabia y de seguro volverá”-
Ew:-“¿¡pero qué estás diciendo¡?... Han sido 5 semanas…. No ha vuelto…¡ cómo puedes no estar preocupada!
H:-“¡por supuesto que lo estoy!¡simplemente no quiero que tú también andes deprimido!... tengo suficiente con un amigo desaparecido… no necesito esto… ¡ni tú tampoco!”-
En:-“dis… disculpen…”- susurró, fingiendo una mueca apenada-“creo…. Creo que es hora de que me valla”-
Ambos mayores le dedicaron una mirada al ojiverde, un instante después un color rojo les invadió el rostro. El primero en hablar fue Erwin.
Ew:-“siento mucho que hayas tenido que escuchar eso”-
H:-“ si… en verdad… estoy… estamos muy apenados. Por favor discúlpanos”-
Eren cerró los ojos sonriendo y con un gesto indicó que todo estaba bien.
En:-“si, si…. Lo entiendo… pero ya es hora de que me valla. Ya saben… tengo un horario de entrenamiento, así que será mejor que lo cumpla”-
Pronunció sonriente mientras caminaba hacia la puerta… que lastima no haberlos escuchado discutir más… cuanta gracia le causaba ser el motivo de todos los sufrimientos y preocupaciones de ese par.
Al ir saliendo escuchó como Hanji le decía a Erwin que todo estaría bien.. que Levi volvería.
Eren no pudo evitar soltar una pequeña risilla.
-“no, no lo hará”-
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El almuerzo era ternera al vino con puré de papas y espárragos al horno…. Tenía hambre…. Levi también debía tenerla, pensó.
Se aproximó con su bandeja a una mesa apartada en donde comían una pelinegra y un rubio. Sus amigos.
Armin dejó de lado la manzana que comía para saludarle con un gesto amable. Mikasa apartó la mirada.
A:- “¡hola Eren!.... ¿Cómo te ha ido?”-
M:-“¿donde haz estado metido?”-
Preguntó interrumpiendo al rubio, quién hizo una mueca de fastidio, pero en seguida la borró de su rostro.
A:-“siéntate con nosotros, hace tiempo que no estamos los tres juntos”-
E:-“lo se, lo lamento chicos, pero he estado realmente ocupado”-
Un silencio permaneció en la mesa por unos segundos hasta que Mikasa le miró a los ojos de manera penetrante y espetó
M:-“¿Qué es lo que tanto te ocupa en el bosque?”
Eren pareció sorprendido, luego molesto y por último incómodo. Pensó su respuesta por un segundo y por último decidió sonreírle de una manera completamente irónica y burlona a la chica, quien reconocía todos y cada uno de sus gestos.
E:-“ja, parece que ya no puedo tener nada de privacidad….. ¿Cómo sabes que estaba en el bosque?”-
Mikasa retiró la mirada…. Ambos estaban molestos, y Armin demasiado incómodo… el ambiente era tenso.
M:-“te vi… y luego te seguí hasta que perdí tu rastro”-
Eren torció la boca, frunciendo el ceño.
E:-“ deberías darle su espacio a las personas Mikasa…. Eso es.. muy grosero de tu parte… no lo vuelvas a hacer”-
A:-“estoy de acuerdo con Eren.”-
La muchacha parecía muy enojada, gruñó y por último se levantó de la mesa, haciendo caer la taza de té que Eren había preparado para su querido azabache.
M:-“bien, me mantendré alejada de ti… haz lo que quieras…”-
Claramente eso no sería así, lo seguiría al bosque y descubriría que era lo que tanto le ocultaba.
A:-“wow…. Lamento que se haya puesto así, ya sabes cómo es…”-
Eren asintió, estaba muy concentrado pensando en que haría… esa maldita de Mikasa era una completa entrometida….
Pensó en lo que Erwin le había dicho.
La quería….. la quería lejos de él y de todo lo que eso implicaba.

Terminó de comer en silencio y se despidió de su amigo. Tenía cosas a por hacer. Tenía una pequeña y linda boca que alimentar… un hermoso cuerpo que torturar

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El crujir de la puerta lo despertó. Un escalofrío le recorrió el cuerpo. El miedo lo inundó por completo.
E:-“buenos días dormilón, te traje algo de comer”-
Se sintió incapaz de mover el cuerpo. Incapaz de gritar o patalear. Empezó a temblar, permaneció inmóvil mientras de sus ojos caían ríos de lagrimas; llevó una de sus manos a su boca y se mordió el dorso intentando no entrar en pánico.

Tuvo el control hasta que sintió una mano sobre su cadera; aquella mano.
Empezó a gemir y sollozar mientras mordía con aún más fuerza su muñeca. Quería gritar. Quería pedir ayuda, pero nada más que ruidos sin sentido escapaban de su garganta…. ¿se habría quedado mudo?. Claro que no, solo estaba completa y absolutamente aterrorizado.
El temblor se incrementó, convirtiéndose en una especie de convulsión desenfrenada.
Empezó a sentir como lentamente sus pulmones se cerraban, negándose a recibir aire.
Eren había dejado la puerta abierta. Le miraba con aquella mueca burlona que siempre llevaba pintada en el rostro.
E:-“mírame”-
Levi sintió como la voz del menor le entraba por los oídos y se le clavaba en sus miedos, haciéndole intensificar su llanto.
E-:”mírame ahora mismo”-
Sintió una vez más aquella mano, ahora en su quijada. Cerró los ojos. Chilló con todas las fuerzas que pudo ante el terror que estaba sintiendo.
E:-“ basta de llorar… mírame… abre los ojos y mírame…. Llorón de mierda… puta de alcantarilla.”
Levi abrió lentamente sus párpados. Sus orbes estaban llenos de lagrimas. Estaba avergonzado. Quería insultar a ese bastardo, quería golpearle.
Quería matarlo.
E:-“tsh… que fastidio… te dije que dejes de llorar. ¿Eres un niñito o que es lo que te pasa?”
Levi negó con la cabeza, detuvo como pudo los gemidos aunque se estaba quedando sin aire y no podía evitar hipar debido al llanto y las lágrimas que seguían escapando de sus ojos.
E:-“mira… la puerta… está abierta… ¿por qué no corres?..... vamos, escápate de una vez…. Lárgate Levi… huye…”-
Levi miró hacia la puerta… agachó la mirada…. Quería salir de ese maldito sótano… quería largarse de una vez por todas. Pero tenía miedo. No sabía que le estaba pasando. Quizás era la droga. O quizás él mismo era incapaz de pronunciar palabra alguna, o moverse con agilidad; no importaba porque, estaba paralizado.
Reunió todo el valor y las fuerzas que le quedaban. Levantó la mirada y la dirigió hacia el rostro de Eren. Sólo alcanzó a ver su boca; esa maldita sonrisa.
Tomó todo el impulso que pudo y se abalanzó de la camilla.
Cuando ambos pies tocaron el piso sintió que quizás podría lograrlo. Dio tres pasos y calló al piso.
Intentó incorporarse, se puso a gatas y empezó a arrastrarse como pudo en dirección hacia la puerta.
De fundo escuchaba las sonoras carcajadas del moreno. Aquello le hacía querer darse más prisa.
Estaba ya a punto de cruzar el umbral de la puerta cuando sintió una mano aferrarse a su tobillo con fuerza.
Empezó a chillar desesperadamente y por fin las palabras emergieron de lo más profundo de su garganta. Más como una súplica a quien fuera que pudiese escucharlo.
L:-“…¡¡¡¡¡ayudaaaaaa!!!!!..... ¡¡¡¡¡¡ngh!!!!!!..... ¡no!.... ¡¡¡¡¡por favor!!!!!....¡ayudaaaa!…..”-
Sintió como Eren empezaba a arrastrarlo una vez más dentro de la habitación. Perdió el equilibrio de los brazos y chocó contra el pisto y entras pataleaba intentando resistirse y seguía gritando a todo pulmón.
Estiró su mano hasta alcanzar el borde de la puerta y se aferró a este con todas sus fuerzas, intentando impedir que lo encerraran una vez más. Eren no paraba de reír.
Le tomó de torso y le dio la vuelta, obligándole a soltarse de la puerta.
L:-….¡¡¡¡nooooo!!!!!!!... ¡¡¡¡¡¡¡¡suéltame!!!!!.....¡ayuda!......¡no…n…noooo¡… ¡¡por favor!!-
Lo sostuvo con fuerza y lo levantó. Cargándole hasta la camilla y sentándolo sobre esta, mientras daba amplias zancadas hasta llegar a la puerta. Aún riendo con aquella mueca sadica pintada en la boca…. esos ojos brillantes y aterradores.
Levi se tiró de la camilla. Se había arrancado con el primer salto el catéter y la sonda, y le dolía todo. En especial la espalda baja. Sin embargo no le importó… intentó arrastrarse una vez más hacia la puerta pero esta ya estaba cerrada.
Empezó a darle puños y golpes mientras chillaba y gritaba suplicando ayuda.
Eren no paró de reír.
Lo tomó una vez más del tobillo y lo arrastró hasta el otro lado de la habitación. Levi intentaba regresar hacia dónde estaba la puerta; estaba sangrando.
E:-“eres un idiota…. Ya te lo dije antes… hahahahhahahaa. Nunca…. NUNCA vas a salir de aquí. No importa cuánto grites o supliques; nadie va a venir por ti…. Te quedarás aquí quieras o no. Y serás MÍO….”-
El más bajo intentó escabullirse una vez más hacia la salida…. Seguía gritando, seguía llorando.
Esta vez Eren lo agarró del brazo lo sujetó de ambas muñecas y lo levantó hasta tenerlo a la altura del rostro.
No pudo evitarlo. Su cuerpo simplemente se soltó al ver los horipilante y destellantes ojos del menor. Fue incapaz de contenerse. Sintió la orina caliente corriendo por sus muslos; aquello No podía ser más humillante.
El moreno bajó la mirada y soltó una pequeña carcajada al ver el charquito amarillo y el líquido bajando por las piernas del albino.
E:- “eres un verdadero asco, te hiciste encima… no puedo creerlo… ¡ja!... ¡te hiciste encima!....”-
Aquello parecía ilarante para el moreno, sin embargo Levi no podía parar de llorar mientras se retorcía de un lado a otro, intentando escapar del agarre.

Eren lo dejo caer. Caminó hacia el escaparate y sacó una cuerda. Los ojos de Levi se llenaron de pánico al presenciarlo.
Se aproximó mientras el más pequeño tan solo intentaba escapar, arrastrándose desesperadamente.
Eren lo tomó por las muñecas amarrándolas con un fuerte nudo. Luego le hizo otro alrededor del cuello.
Le tomó de la quijada haciéndole mirar hacia el techo, donde había una polea metálica de la que nunca se había percatado.
E:-“será mejor que te castigue…. No es de niños buenos intentar escapar… y luego… orinarse en los pantalones…. Haz sido muy muy malo pequeño….”
Levi no podía parar de sollozar… intentaba no parecer patético pero aquello resultaba imposible. Sentía el camisón mojado y tibio… se sentía sucio.
Eren lo levantó…. Sintió como la cuerda le apretaba la garganta, no alcanzaba a ahorcarle pero resultaba muy molesto y doloroso.
Sus pies no alcanzaban a tocar el piso; estaba colgando de sus brazos. Aquello era mi incómodo y realmente angustiante.
Eren caminó una vez más hacia el escaparate y de este sacó algo que el mayor no pudo distinguir hasta tenerle de frente; era el látigo.
L:-“…¡no!.... ¡déjame!....¡no quiero!.......¡suéltame por favor!.... agh…. ¡Por favor!...”-
Eren lo miró con aquel rostro retorcido, jugueteando con la fusta entre las manos.
E:-“¿donde te golpearé primero….?...”-
Susurró mientras paseaba la extensión de cuero por las piernas del mayor.
E:-“creo que sería mejor si te quito toda la ropa de encima…..”
L:-“¡no!¡no!.... por favor…. Déjame ir por favor… no me hagas esto… no otra vez…..”-
Levi parecía completamente desesperado. Retorcía su cuerpo de un lado a otro intentando liberarse del amarre, los brazos le dolían, y la cuerda le tallaba en el cuello.
No quería que le quitara el camisón, aquello lo dejaría completamente expuesto; esa idea lo hizo estremecer.
E:-“….. si…. Sera mejor que te desnude……”-
Sentenció mientras ponía sus manos sobre el camisón y lo rasgaba con fuerza. El torso del mayor quedó expuesto. Su pecho se elevaba por cada gimoteo. No quería que lo tocaran. Se sentía tan sucio.
L:-“….. por favor… déjame…. Déjame…. Dejame….. por…. Por favor….. no me hagas esto….. por… por favor…..”-
Su rostro se llenó de un color tan rojo como la sangre cuando el menor retrocedió para contemplarle.
E:-“Dios pero que lindo te ves cuando súplicas….. adorable maldición”-
Espetó entre una carcajada, mientras levantaba el látigo con una de sus manos a la altura del rostro del más bajo.
E:-“voy a azotarte hasta que se me cansen los brazos…. Y luego… luego te cojeré tan fuerte que sentirás como si te hubiese partido en dos pequeño bastardo de mierda”-
Gruñó mientras soltaba el primer latigazo. La fusta silvó y luego chocó contra la blanquecina piel; el golpe fue tan fuerte que le hizo sangrar. Levi gritó, mientras gruesos lagrimones caían de sus ojos asustados.
Eren no podía parar de reír a carcajadas, después de ese los azotes no pararon; y cada uno resultaba más fuerte y humillante que el anterior.
Pronto sus brazos se cansaron, le ardían y sentía como si lentamente el peso de su cuerpo estuviese desgarrándole los hombros. Empezó a sentir como la cuerda le ahorcaba. Tosía repetidas veces y los sollozos no paraban.
Eren no se contentó con golpearle con el látigo. Cuando se cansó del sonido sordo que este producía al moverse por el aire decidió cambiar su tortura.
Empezó a patearle y cachetearle con todas las fuerzas que su cuerpo le permitían.
Un golpe tras otro, un puño tras otro; Levi sentía como lo rompían por dentro y por fuera.
Estaba lleno de moretones, heridas y miedos.
Sentía que por más tiempo que pasara eso nunca acabaría.
No solo le dolían las contusiones y laceraciones que se extendían por todo su cuerpo.
Le dolía el alma, porque no entendía como; todo lo que Eren le decía… todos los indultos, ofensas y agravios resultaban completamente destrozadores.
Estaba siendo ultrajado de todas las formas conocidas y posibles. Y aquello no iba a detenerse.
Solo quería morir…. De una vez por todas.
L:-“….Ma… mátame…. Por favor… se que me odias…. Solo mátame…. Te lo pido… yo… por favor…acaba conmigo de una vez por todas.”-
Aquello tomó por sorpresa al castaño, quien detuvo los golpes por un momento para mirarle a los ojos. Le tomó por la quijada y le obligó a posar su mirada en él.
Sonrió, mientras frotaba el sangrante pecho con sus manos. Levi se estremeció.
E:-“eso no va a pasar bonito…. No te odio… y muerto no me sirves para un culo…. Eres MÍO… yo decido que hacer con este cuerpo, y decido que no vas a morir… vas a ser mi puta… las sordas como tú no sirven para nada más que eso, así que no me jodas…”-
El rostro del azabache parecía extremadamente adolorido. Su expresión era absolutamente decadente.
Mejillas suscitas y marcadas por los rastros que dejaban las lágrimas. Las ojeras casi guturales. Sus ojos sin brillo, llenos de lágrimas e hinchados de tanto llorar. Y los labios morados por el frío que le penetraba la piel como cuchillas.
Quizas fue por lo que dijo… o porque ya parecía demasiado cansado para seguir soportándolo, pero Eren se detuvo. Segundos después soltó la polea permitiéndole caer al piso. Le soltó el amarre en las muñecas, pero el azabache no se movió; permaneció tendido allí, en el sucio suelo. Con el rostro empapado en llanto.
El menor lo observó por un segundo. Se aproximó a él y le acarició el cabello. Levi se encogió ante el gesto.
E:-“levántate Levi… vamos, te limpiaré el cuerpo…”-
El cuerpo del azabache se contrajo contra sí mismo, con un ligero temblor…
L:-“no…. Estás mintiendo… tu… me vas a violar… vas a volver a hacerlo…. No… no…. No dejaré que hagas “eso”…. No me toques… ¡aléjate!”-
Gritó mientras se llevaba las manos al rostro, cubriendo su mísera expresión.
Eren entornó los ojos, mientras sostenía con fuerza el cuerpo del mayor y lo arrastraba hasta donde se encontraba el baño.
Levi gritaba y forsejeaba, no quería que lo tocar, ese maldito y sucio bastardo no debía tocarlo.
El castaño abrió la llave del agua, la cual se derramó sobre un vieja cubeta. Esperó hasta que esta estuviese llena y la volcó sobre el níveo cuerpo.
El más bajo empezó a temblar al sentir el agua helada en contacto con su cuerpo. Se percató de que todo parecía un poco más lejano. El dolor… el miedo.
Eren tomó el jabón y lo frotó contra sus manos generando espuma. Se aproximó al pequeño y delgado individuo que tenía delante y notó como este intentaba resistirse al tacto.
E:-“ escúchame Levi…. No te haré daño… no voy a abusar de ti… no en este momento… solo déjame limpiarte… déjame atender tus heridas.”-
L:-“¡las heridas que tú causaste!”-
El más pequeño parecía muy alterado. Una mezcla de enojo, temor y Pena se arremolinaban en su estómago, gestando una angustia incomprensible.
Eren se vió obligado a forzar al mallor.
Le lavó el cuerpo y el cabello y pronto Levi volvía a estar limpio.
El olor del jabón le hizo tranquilizar. Tenía miedo de que el menor volviese a forzarlo, pero estaba tan cansado y tenía tanto frío que lo único que quería era estar dormido.
El moreno le curó las heridas. Todas y cada una de ellas; al parecer en una de las patadas le había fracturado la canilla de la pierna izquierda. Cuando sentía el tacto contra aquel hematoma el dolor resultaba insoportable. Eren la cubrió con un ungüento verdoso que le causó una sensación de calor y adormilamiento reconfortante; le hubiese gustado sentir aquello en todo su cuerpo.
También devolvió a su sitio la cánula d ela sonda y el catéter.
Esta vez no le vistió con un simple camisón.
De entre uno de los cajones sacó un abrigado suéter de lana gruesa y unos pequeños shorts color negros y se los tendió, permitiendo que él mismo se vistiera.
Seguía inseguro, pero ya no estaba desnudo. Aquello lo tranquilizaba un poco.
Después de aquello Eren le tendió las píldoras de narcoticos.
Él las recibió ansioso y se las tragó sin siquiera dudarlo; las necesitaba para olvidar… para ya no llorar más como un estupido cobarde.
Más tarde el moreno rescordó que había traído algo de comida y se la ofreció a Levi, quien ni siquiera se atrevió a mirarla.
Sin embargo Eren le obligó a comerla, haciéndole tragar cada bocado. Terminó tan lleno que sintió ganas de vomitar.
No supo a que horas, pero la sensación de calidez, llanura y pulcritud.. además de las drogas le hicieron caer rendido de cansancio.

Al despertar estaba solo.
Sintió alivio al saber que aquel desgraciado no le había hecho “tanto” daño.
Lo había golpeado, pateado y azotado; pero no le había violado, y eso era lo que resultaba más aterrador de todo lo que el moreno pudiese hacerle.
Intentó sentarse, pero sintió como si sus huesos se quebraran con cualquier ligero movimiento.
El abrigo era tan cálido y por fin tenía algo que le cubría su intimidad; aquel short era corto, pero por lo menos le hacía sentir seguro.
Sus costillas estaban rotas, lo sabía. Sabía cómo se sentía ese dolor, y estaba seguro de ello. Además su tobillo parecía dislocado; estaba hinchado y de un color verde amoratado, dolía, pero menos que su pecho, sus hombros y sus brazos.
Estar allí, suspendido de sus extremidades superiores no había resultado para nada cómodo.
Sentía como sus brazos se habían desgarrado. Le dolía mover cada parte de su cuerpo, cada pequeño músculo.
Ni siquiera la pesadez de las drogas podía aminorar aquel sufrimiento, quería poder dejar aquel lugar y olvidarlo todo.
En aquel momento incluso morir parecía mejor que seguir existiendo porque;
1. Nadie lo estaba buscando.
2. Estaba solo en el mundo.
3. No tenía posibilidad alguna de escapar.
4. Estaba extremadamente asustado.
5. Y más importante que todo lo anterior; quién sabe que le haría aquel sincopara la
siguiente vez que entrase por esa puerta.
Cerró los ojos, pero se vio obligado a abrirlos de inmediato. sintiendo como de a poco su mente se llenaba de aquello que tanto miedo le daba. Todas las imágenes, todos los recuerdos y frases hirientes; todo aquello se acumulaba arremolinándose como un enorme cúmulo de pesadillas. Pero lo peor de todo era la inclemente imagen de aquellos horripilantes ojos.
Lo odiaba.
Lo detestaba.
Y aquello no iba a cambiar jamas; estaba condenado a vivir el resto de su vida con ese desgraciado.

No supo cuando pero sintió como una vez más sus ojos antes implacables y llenos de confianza se llenaban de pequeñas lágrimas amenazantes por brotar. Se llevó una mano hasta su rostro y sintió la humedad producto de su llanto.
Aquello solo intensificó su tristeza. Quería volver a ser fuerte. Quería que sus ojos dejasen de sangrar aquellas gotitas de sufrimiento. Se odiaba a si mismo por ser tan débil. Por sucumbir ante la humillación y perder todo rastro de seguridad.
Pero eso era ahora, ahora era una víctima. Ahora era un misero juguete sexual, que puedes usar y dejar de lado sin más.
Todo aquello le atormentaba. Todo resultaba extremadamente injusto.
Escuchó un sonido más allá de la puerta. Estaba seguro de que era Eren. Sintió un escalofrio llenándole todo el cuerpo. Su respiración se aceleró y quiso correr a esconderse de inmediato.
Sin embargo pasaron algunos segundos, y el menor no se asomó por la puerta.
El miedo se convirtió en desconcierto y confusión.
Escuchó unos golpeteos nerviosos en la puerta, seguidos de una voz femenina que en aquel momento no le resultó familiar.
M:-“¿hola?.... ¿hay alguien aquí?...”
Sintió miedo de hablar, pero el pánico de volver a ver al ojiverde ganó la contienda.
Se bajó de la camilla con cuidado y gateó cautelosamente hasta la puerta, donde tocó una sola vez, con la mayor de las angustias
M:-“¿hola…?... ¿Quién está allí adentro?....”
Levi se echó a llorar, no podía parar de gimotear por la angustia que sentía; aquella podía ser su única oportunidad de escapar.
L:-“…a….ayúdame…..ayuda… por favor…”.-
No podía controlarse…. Toda su angustia salió a flote en aquel momento… solo quería salir… quería poder escapar.
M:-“…¿¡c-Capitan!?.... ¿Es usted?.....-“
La pelinegra estaba atónita, sin embargo lo único que recibía del otro lado de la puerta está un llanto extremadamente desesperado.
L:-“….. sácame…..¿ ¡por favor sácame de aquí!?... por favor… tengo miedo…. Quiero salir…. Por favor.. ayúdame….”-
La muchacha no daba crédito a lo que escuchaba… aquella persona no podría ser Levi Ackerman….. El Capitan de la legión jamás podría llorar de aquella forma…. ¿o si?.
M:-“cálmese por favor…. Necesito saber quién es….¿ Que fue lo que sucedió?...”-
El azabache estaba en pánico, empezó a golpear la puerta con desesperacion, mientras lo único que gritaba eran “quiero salir” y “ayuda” entre los sollozos y gimoteos.
M:-“deje de hacer eso…. Van a escucharnos….. por favor cálmese un poco y dígame su nombre”-
No sabía porqué, pero la chica estaba extrañamente nerviosa. Quería ayudar a aquella persona… pero también sabía que aquello sería traicionar a Eren.
-------------------------------------------------------- 3 horas antes ----------------------------------------------------
::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::Perspectiva Mikasa::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::
Eren se estaba alejando caminó al bosque….. hacia ya algunas semanas que aquello se le había vuelto costumbre.
Estaba escondida detrás de un árbol de pino robusto. Se había desistido a seguirle.
Caminó con pasos cautelosos a través de la nieve, siguiendo el rastro del muchacho hasta una extraña abertura entre unas piedras, que estaba cubierta por una espesa capa de helechos y plantas.
Titubeó unos instantes antes de adentrarse entre la roca. El interior de la caverna se abría en una especie de cámara que al fondo poseía una bajada hacia unas extrañas escaleras.
Había eco en aquel lugar.
Bajó las escaleras con cautela. Sintiendo un extraño estorsijon en el estomago.
Estaba conmocionada por su descubrimiento.
Estuvo a punto de devolver su andar, pero le pareció oír un gritó proveniente de las profundidades. Entonces se dio la vuelta. Dando pasos cada vez más inseguros mientras se adentraba en el pasillo, escuchando como los gritos de auxilio cada vez se hacían más fuertes.
Entonces se topó con una extraña puerta metálica que solo tenía una cerradura.
El pánico la llenó. ¿De que mierdas se trataba todo aquello?.
Se quedó allí, con el oído pegado a la puerta, escuchando las voces detrás de esta.
Identificaba una perfectamente; era Eren…. ¿Pero quien era la otra persona de voz angustiosa?
¿Qué estaba pasando allí adentro?...
Al dejar de escuchar las voces decidió salir. Esperó hasta que Eren saliera y estuviese fuera de su vista para volver a adentrarse en el extraño escondrijo.
Y entonces tocó la puerta.

M:-“deje de hacer eso…. Van a escucharnos….. por favor cálmese un poco y dígame su nombre”-
El azabache intentó controlarse. Respiró profundo tres veces y dejó de gimotear, mientras limpiaba sus lágrimas se permitió sentir algo de vergüenza por su actitud desesperada y respondió a la pregunta de la joven, intentando soñar claro.
L:-“soy Levi…. Levi Ackerman…. Por favor sácame de aquí…. Por favor…. Ya no puedo más con esto… sácame… te lo suplico… sácame… sácame…..”-
Seguía llorando, pero ya no estaba tan ansioso y asustado. Solo quería aprovechar aquella oportunidad y huir de una vez por todas.
M:-“por dios…. Capitan…. ¿está bien?... no lo entiendo……”-
Sintió un escalofrío a sus espaldas. No alcanzó a voltearse antes de escuchar aquella aterradora voz. Era la voz de Eren… la voz de su mejor amigo. Pero sonaba diferente.
E:-“te dije que no te metieras en asuntos que no son de tu incumbencia…… Eres una zorra de mierda…. No quería tener que lastimarte o llegar a extremos contigo, porque te tengo aprecio…. Pero tú me obligas a hacerlo. Lo siento Mikasa.”-
-----------------------------------------------------------continuará------------------------------------------------------

Notas finales:

Espero les haya gustadooooo.... muak muak.... ya lo sé, estoy bien desquiciada del coco 


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