Al día siguiente hizo algo de frio a pesar de que temprano el sol estaba cálido y bastante agradable, Pepper quien estaba sentada a un lado de Tony esperaban como siempre al rubio faltante para comenzar a caminar, pero la brisa fresca haciendo contraste con la anterior temperatura del clima hizo que los dos chicos allí se entumieran, cuando Tony apenas iba a comenzar a hablar respecto al tema del clima aunque sea para que entrara en una cálida conversación el celular de Pepper comenzó a sonar haciendo que se fuera su esfuerzo por querer hablar algo con ella ya que por lo que escuchaba tendría más cosas que hacer
Pepper: Tony, mi padre me acaba de llamar, me dijo que irían a visitar a la abuela, no te molesta si esta vez me voy antes –pregunto con un tono de tristeza por dejar a su amigo solo, pero igual entendería ya que la abuela de Pepper era muy importante para ella-
Tony: Descuida, yo estaré esperando aquí a Steven, puedes irte, y saluda a tu abuela de mi parte –le dijo tranquilamente y al escuchar eso la chica rubia de un salto se levantó y se despidió dándole un beso en la mejilla al castaño para desaparecer de ese lugar, Tony simplemente dejo salir un pesado suspiro, porque Steve demoraba tanto, pero dejo de preguntárselo al escuchar una voz conocida que se hacía más y más cercana-
Steve: ¿Perdóname Anthony, pero aún hay cosas que había que aclarar, tú sabes, cosas de chico nuevo, además de que el clima cambio, te agradaría ir a tomar un café mientras hablamos sobre nuestro proyecto? –pregunto amablemente mientras lo veía extrañado, ya había un mes desde que había llegado a esa escuela, pero extraño, era como si conociera a Tony de nuevo cada día que lo veía-
Tony: Me agradaría la idea, sirve que hablamos más tranquilamente ya que mi padre ahora debe de estar en casa con escándalo de máquinas y esas cosas de ingenieros –se puso de pie y como acostumbraba con Pepper tomo el brazo de Steve, pero ya sin ningún temor, puesto que ya eran varias veces las que él lo acompañaba hasta su casa-
Llegaron hasta un café en donde Steve había comido el primer día que llego a esa ciudad y le había gustado mucho, pero extrañamente estaba más lleno de lo normal así que fueron hasta su segundo piso, aunque con todo el barbullo de la gente y para poder pasar más fácilmente se colocó detrás de Tony y puso sus manos en los hombros del castaño mientras le dijo casi como un susurro “seré tus ojos, confiaras en mi”, Tony se tensó un poco pero era agradable, era algo extraño pero quizá de eso se trata el que te gustara alguien no?.
Comenzaron a hablar de mil cosas y ninguna a la vez, la razón del porque estaban allí se había perdió por completo y a causa de eso de un segundo a otro Steve olvido totalmente que Tony no podía ver.
Steve: Enserio, deberías de ver ese video donde los gatos se asustan al ver a un pepino y…-y fue allí cuando cayó en cuenta y se dio una bofetada mental- yo…disculpa –y sin más bajo la mirada apenado, como es que pudo mencionar algo así-
Tony: Descuida Steven, si me dieran un dólar cada vez que pasa eso, bueno creo que no seguiría siendo ciego –rio-, no tienes por qué disculparte –le dijo mientras intentaba poner el foco de su atención directo a él, pero para Steve simplemente veía a un punto perdido-
Steve: Siempre fuiste así, quiero decir, ¿jamás pudiste ver? –pregunto curioso y un poco apenado, pero algo en él quería saber más de Tony-
Tony: Desde que tengo uso de memoria, pero sabes, no es tan malo como lo pintan, tiene sus ventajas, a veces la gente te hace favores, pero creo que es más por lástima que por otra cosa, aunque llegas a acostumbrarte –le respondió tranquilamente mientras jugaba con sus dedos índices entre las piernas, jamás nadie le había preguntado algo así, Pepper ya lo sabía pero nunca nadie se había interesado en saber más de él aunque escuchaba que fuera muy guapo comentarios como “lástima que sea ciego” siempre resonaban en su mente-
Steve lo veía, era alguien bastante peculiar, pero a veces realmente olvidaba ese “inconveniente” como hace unos segundos, nunca había conocido a alguien así y era algo fuera de lo normal, ya que podía sentir que realmente Tony podía ser sincero sin necesidad de alguna otra cosa o pretender alguien más, en realidad le intrigaba aunque no pudiera ver, ya sería algo que no pasaría por alto cuando se le ocurrió otra “brillante pregunta”
Steve: ¿Eso quiere decir que jamás has ido a un cine? –dijo y se quedó encerrado en su mente “realmente lo dije o lo pensé, eres idiota o algo así Rogers?- Yo, perdona, creo que debería dejar de hablar jeje –soltó una risita apenada, mientras pasaba su brazo detrás de la nuca al ver como Tony sonreía de medio lado-
Tony: No, jamás, pero he escuchado y he leído mucho de ellos, seria divertido si pudiese ir alguna vez, aunque obvio, no creo que exista un cine en braille –y al escuchar eso Steve simplemente no pudo hacer más que pagar la cuenta y tomar a Tony de la mano para que se levantara sin que fuera a caerse cosa que lo tomo por sorpresa y volvió a guiarlo a la salida- ¿A dónde vamos Steven? –pregunto un tanto desconcertado-
Steve: Iremos al cine –le dijo animado, y de nuevo como si se olvidara que Tony no podía ver, algo en él quería llevarlo, que se sintiera como alguien “completo”-
Llegaron al cine y Steve compro entradas para una película de comedia, y de nuevo guiado por el rubio fueron hasta unos asientos cerca de las escaleras, Tony evidentemente no podía ver nada pero sentía una cierta emoción, como si de un segundo a otro pudiera ver aquella enorme pantalla que estaba frente a él, como es que a ese rubio loco se le había ocurrido llevar a un ciego al cine, se dijo a si mismo pero no podía evitar sonreír, comenzó la película y el escuchaba absolutamente todo con atención, reía cuando los demás lo hacían no solo por inercia, sino porque realmente le causaba gracia, aun sin ver las escenas graciosas, y cuando pasaba algo y el no entendía por qué le preguntaba a Steve que había pasado, casi media película fue de Steve diciéndole que era pero entre risas se escuchó un “SHHH” detrás de ellos, a lo que solo atinaron a reír muy bajo.
Después de que termino la película era un poco tarde, las 7pm para ser exactos, así que la temperatura del día había disminuido levemente, pero al salir del cálido ambiente del cine y sentir la fresca briza Tony no pudo evitar temblar un poco, porque el clima tenía que cambiar así, si pudiera ver sabría si al menos eso pasaría, Steve al notar eso no dudo en pasar su ligero abrigo por la espalda de Tony para que mitigara un poco el frio
Tony: ¿Pero y tu Steven? –pregunto algo desorbitado-
Steve: Descuida, yo vengo de una ciudad donde los días así son normales, la necesitas más que yo, no quiero que te llegue a dar un resfriado y morir a manos de Pepper porque te descuide, además no es ningún problema, me la pase realmente genial hoy –contesto alegre mientras sentía la mano de Tony sostenerse de su brazo para comenzar a caminar a casa del castaño-
El camino se hizo bastante corto ya que se envolvió de una continua y agradable platica, al llegar a la entrada de la casa de Tony sintió como si jamás quisiera llegar, pero por más que él no quisiera debía de ser así, después de decirle a Steve que también se lo había pasado de lo mejor se despidió dándole un apretón de manos y entro a su casa, comenzó a caminar hasta su habitación y al no escuchar nada significaba que su padre había salido, llego a su habitación y después de dejar su mochila en el mismo lugar de siempre se dejó caer en la cama de nuevo, se sentía realmente bien, pero como seria conocer a esa persona que te dejaba un enjambre de mariposas en el estómago y no poder verlo, quizá esa sería una ventaja para él, así el físico no sería ningún problema, Steve realmente lo traba de una forma como nadie, pero a lo que había sabido de él ese día, la cortesía era de familia y más por tener a un padre ex militar, se quedó pensando mientras recordaba lo que le dijo respecto a los favores que le hacían solo por ser ciego, es que acaso el también sentía lastima por él, se preguntó pero al sentir ese característico perfume de Steve recordó que había olvidado entregarle la sudadera, mientras estaba recostado en el silencio de su habitación se colocó la capucha que la prenda tenia y se abrazó a sí mismo para sentir aún más ese aroma y esa cálida sensación…
Tony: Creo que realmente…estoy enamorado –se dijo a si mismo mientras cerro los ojos y se dejó llevar por su mente mientras comenzaba a quedarse dormido bajo el perfume del rubio, como si estuviera allí con el abrazándolo mientras dormía-