Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tunnel por Galaxy_0068

[Reviews - 47]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Son casi las dos de la madrugada, pero tenía que actualizar antes de dormir xD

Les traigo un poco más de esta interesante historia del amor entre el SULAY combinada con un toque de James bond y misión imposible XDD

No sé ni que piñas digo, es muy tarde y mi cerebro ya no sirve xD

Pasen a leer ^^

(POV LAY)

 

[El día del secuestro]

 

Desde pequeño me habían preparado para cualquier tipo de situación. El secuestro era una de ellas, ya que yo provenía de una de las más grandes e influentes compañías en China. Pero como decían, “La práctica hace al maestro” y yo no tenía ninguna práctica.

Medio desperté cuando mi cabeza golpeó con algo duro.

Pronto me di cuanta de que tanto mis muñecas como mis tobillos habían sido amarrados y de paso una cinta adhesiva de color gris cubría en su totalidad mis labios.

El espacio en el que me encontraba era muy reducido y por fin me di cuenta de que estaba en el maletero de mi Lamborghini.

El auto pasó por otro hueco en la carretera y salté golpeándome de nuevo.

Intenté buscar algo en mi maletero, pero no encontré nada útil, suspiré en resignación al no encontrar una solución.

La maletera se abrió mostrando al tipo de voz hosca que me había raptado minutos u horas antes, la verdad no tenía idea.

-¿Tuviste un bien sueño, princesa? –dijo despectivamente para reírse.

Me agarró sin ningún cuidado y me puso en su hombro como saco de papas.

A esta altura ya no trataba de zafarme; sería más inteligente y esperaría una buena oportunidad para escapar, o eso pensaba.

Entramos a lo que era la puerta de un almacén en deplorables condiciones.

El olor era nauseabundo y asqueroso. Era una combinación de humo de mariguana, tabaco y alcohol.

Mientras pasábamos por lo que era un pasillo, pude ver como este lugar estaba dividido con lonas o mantas que hacían como pequeños cuartos. En estos “cuartos” alcancé a observar mujeres semi-desnudas que no tenían ninguna expresión en la cara y estaban pálidas. Algunas eran ultrajadas por otros hombres, mientras que otras eran atendidas por unos sujetos que les inyectaban algo intravenoso; cocaína. 

Un prostíbulo clandestino fue lo primero que vino a mi mente. Genial, ¿a dónde había parado?

Me llevó a un cuarto aparte en donde me dejaron sentado en una silla de metal fría al contacto.

-Espera aquí princesa, ya regreso. –dijo cínicamente para salir del lugar.

Miré a mi alrededor para encontrar alguna salida, pero fue en vano porque no había ni una ventana en el bendito cuarto. Esto me estaba comenzando a sacar de mis cabales y a ponerme nervioso al no encontrar solución a esta situación.

Luego de unos minutos, un hombre gordo con un reloj de oro y cadenas del mismo metal, entró junto al otro tipo que me había raptado.

-Así que esta es la nueva adquisición. –dijo lentamente examinándome con sus ojos libidinosos.

Se acercó y agarró mi quijada para que lo volteara a ver.

-Tiene muy buenos rasgos, definitivamente nos darán mucho por este. –finalizó para reírse de una manera tan asquerosa que me dio ganas de vomitar en sus feos zapatos.

Me moví rápidamente para que dejara de tocar mi cara con sus asquerosos y gordos dedos.

-Uh~ eres de los que da guerra –rio- me gusta~ -dijo con una sonrisa que mostraba sus amarillentos dientes, producto de fumar para luego salir del cuarto.

El tipo que antes me raptó se acercó que golpeó la mejilla con el ceño fruncido. –A ver si así aprendes modales, zorra. –para salir del cuarto riendo.

Impotencia invadía mi cuerpo. Lagrimas caían entre la mezcla de lo incierto y sólo un nombre, Suho, apareció en mis pensamientos.

¿Sería capaz de volverlo a ver?

 

[D-DAY]

 

Dos días habían pasado desde que ingerí el último alimento. Mi estómago rugía y ya no hallaba manera de calmar mi hambre.

Me habían intentado violar antes, pero no pudieron darse el lujo, porque su jefe había llegado y les había aguadado el jueguito, pero mis ropas se habían rasgado en el intento.

Nunca olvidaré esa noche, cuando entre lágrimas sollozaban para que pararan de tocarme, mientras rompían con desesperación mi vestimenta. Lo bueno fue que no llegó a más.

Había llorado tanto esas noches, perdiendo mi esperanza, perdiendo mi dignidad, perdiéndolo todo que ya no tenía más lagrimas que derramar.

Mis párpados se sentían pesados. Tenía ojeras debajo de mis ojos y mi piel era más pálida que lo que era normalmente.

Mis labios estaban resecos y cortados.

 Los días anteriores, sujetos me habían estado inyectado cada 5 horas algo que me mantenía somnoliento y mareado. Concluí de nuevo que probablemente era cocaína pura.

Mi cuerpo temblaba en espasmos producidos por la droga, probablemente el inicio de una sobredosis.

-¡Princesita! –dijo un sujeto azotando la puerta al entrar.

-Deberías estar contento, hoy viene tu nuevo papi para llevarte a Francia, eres toda una belleza exótica que no le importó pagarnos millones de euros por ti. –rio entusiasmado al pensar en el dinero.

No podía sentirme más deplorable. Después de todo. ¿Qué es peor que ser tratado como mercancía?

Pero aún así mi rostro no mostraba nada. Ningún sentimiento. Me había rendido.

-¿No vas a decir nada, zorra arrastrada? –escupió en el piso y una sonrisa se ensanchó en su cenizo rostro.

-Bien, entonces ¿Por qué no mejor disfrutamos de tu estadía hasta que tu nuevo dueño venga por ti? –dijo acercándose peligrosamente.

-Pero antes, agreguemos un poco de sal a la situación~ -dijo para sacar una jeringa con un liquido blanco, el mismo que me habían puesto antes.

Mi brazo estaba lleno de pequeños agujeros a causa de todos los piquetes anteriores. Sin tomarse mucho su tiempo, ingresó la aguja y pasó el liquido.

Mi cuerpo comenzó a removerse más que antes, pero al parecer no le importó lo más mínimo porque comenzó a tocar mi cuerpo.

-Tienes un hermoso cuerpo…-susurró y todo su aliento de tabaco llegó a mis fosas nasales, pero en ese momento me había vuelto como las mujeres que vi al principio, sin expresiones.

Acarició mi pierna y subió su sucia mano a mi entre pierna, de ahí la pasó a mi abdomen para acariciar todo a su paso.

Terminó de romper la fina tela de mi camisa que ahora descansaba rasgada a mi lado, mostrado mi pecho y mi abdomen.

Pasó su sucia lengua por mi pecho y se bajo el cierre de sus pantalones.

-Prepárate para tocar el cielo hoy, princesa~ -dijo entre risas y una lasciva mirada que me comía.

Cerré mis ojos en son de derrota y me dejé hacer. Imaginé a Suho en nuestra primera cita, su hermosa sonrisa aparecía claramente en mi memoria y dejé salir un suspiro de resignación al pensar “no lo veré de nuevo

Cuando estaba a punto de darme realmente por vencido con todo. Un gran ruido inundó mis oídos. El sonido de armas siendo disparadas se hacía cada vez más cercano.

Abrí inmediatamente mis ojos y el tipo que estaba a punto de violarme se levantó alarmado.

-¡¿Pero qué car-…-no terminó de formular la pregunta cuando la puerta salió volando y lo estampó contra la pared, dejándolo inconsciente.

Dirigí mi vista hacia la entrada del cuarto en donde había estado la puerta de metal rojo antes y divisé a un hombre de estatura baja con una cabellera ahora rubia, parado.

Estaba tan débil que sólo un susurro salió de mis labios. –S-suho…- Para luego no poder resistir más y cerrar mis ojos.

Antes de dejar ir mi conciencia pude escuchar su grave voz llamándome desesperadamente, pero luego no fui capaz de escuchar.

 

***

 

Estaba recostado en un sillón blanco y el viento pegaba contra mi rostro, haciendo que mis mechones de cabello se revolvieran.

Me levanté y caí en cuenta que me encontraba en medio de un valle extenso y verde.

¿Acaso había muerto? ¿Esto era el cielo?

Esas preguntas se formulaban en mi mente, pero de alguna manera me sentía feliz de no estar sufriendo mas.

Cerca de mi, un piano blanco de cola, se encontraba abierto. Me acerqué y rocé con mis dedos el teclado, para luego sentarme y tocar la melodía que mi abuela tocaba cuando era pequeño.

Repentinamente unos brazos fuertes pasaron por mis hombros y me abrazaron. Volteé sobresaltado pero sonreí al ver que solo era Suho abrazándome. Nada podía ser mejor. Esto definitivamente era el cielo.

Pero bruscamente el escenario cambió y se tornó en una pesadilla.

 Ahora me encontraba de nuevo amarrado en una silla de metal, en un cuarto oscuro y con sólo una lámpara fúnebre de techo alumbrando a donde yo me encontraba.

Sujetos aparecieron y se comenzaron a acercar a mi persona. No lograba ver sus caras, pero escuchaba sus risas cínicas y pervertidas que decían. “Hoy serás nuestro”

Sollocé al verlos muy cerca de mi y comenzarme a tocar deliberadamente cada parte de mi cuerpo.

-¡NO! ¡NO! ¡ALEJENSE! ¡NO ME TOQUEN!-

-¡Lay!-

-¡NO ME TOQUEN!-

-¡Yixing, despierta!-

-¡NO!-

-¡Lay!-

Abrí apresuradamente mis ojos y sólo pude ver blanco por todas partes.

-Lay… amor… ¿Estás bien?-

Direccioné mi mirada a donde la voz provenía y ahí se encontraba un Suho ojeroso con una facha que denotaba preocupación.

Al ver que no contestaba preguntó de nuevo. –¿Me reconoces? … ¿Soy Suho, tu novio… Kim Junmyeon… recuerdas? –dijo en un tono un tanto temeroso.

-S-suho… -susurré

-Si amor, aquí estoy. –lágrimas salían de sus ojos al pasar su mano por mi mejilla suavemente. –Perdón … Perdón… nunca podré perdonarme por haber dejado que te hicieran tal cosa… Perdóname Yixing…-

-No es tu culpa. No te preocupes… y gracias… gracias por venir por mi- dije sonriendo quedamente poniendo mi mano que tenia una cánula.

Más lágrimas salieron de los dos y un beso transmitió todas los pensamiento y los sentimientos que debieron de ser transmitidos.

Suaves golpes se escucharon en la puerta. –Pasen- dijo Suho, luego de despegarse de mi.

De la puerta entraron Chanyeol y Kai, seguido por un Sehun que traía un ramo de flores.

Al verme despierto, sonrieron y se acercaron a mi camilla.

-¡Lay, te extrañamos tanto! –dijo Chanyeol para abrazarme y ponerse todo sentimental. Lo hormonal se le había pegado de tanto juntarse con Baekhyun.

Sehun viró los ojos y puso el ramo de flores en un envase que contenía agua para dejarlo en la mesita a lado de mi cama.

-¿Cómo te sientes, hyung? –preguntó Kai para luego sentarse a la orilla de mi camilla.

-Pues, todavía un poco débil, pero mejor. –dije con una sonrisa.

-Eso es bueno, espero que te recuperes pronto para que vallamos a bailar al salón. –terminó con un guiño Kai para animarme.

-Claro, intentaré lo mejor para recuperarme pronto~ -

-Yixing, debiste de ver a Suho-hyung cuando te rescató. Hasta parecía James Bond encubierto, matando a los tipejos como su fueran cucarachas –explicó un muy emocionado Chanyeol moviendo sus manos de un lado a otro mientras daba toda la explicación de lo que pasó. –Y eso que yo pensé que los maestro de matemáticas solo eran ñoños que sólo eran buenos en los números, pero me retracto. –confesó e inmediatamente se ganó un golpe de Suho, haciéndonos reír a todos mientras se tiraba al piso dramático, quejándose del chichón que le saldría

No me atormentaría por lo que pasó si no que seguiría adelante porque se me había otorgado la oportunidad de seguir vivo y no la desperdiciaría lamentando lo ocurrido.

 

Notas finales:

LALALALALALALALLA SUHO-BOND AL RESCATE XD

Nos leemos lueguín, ciao~

-XOXO


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).