[Lawliet]
Cuando me subí en el coche solo pude suspirar de alivio. Menudo día tan largo y cansado había tenido en Wammy's House. Aunque por fin y gracias a toda la ayuda que nos proporcionaron, parecía que el acuerdo de agrandar la mansión para poder darle un hogar a mas niños había sido aceptado. Dentro de poco comenzarían las obras y yo estaba muy ilusionado. Ver las caritas de los pequeños emocionados era un premio para mi.
Conduje tranquilo mientras canturreaba en voz baja las canciones que sonaban en la radio y sonreí tontamente al pensar en Light. El maldito demonio de cabellos castaños me había enviado un par de mensajes tórridos al móvil y me había tenido con el culo inquieto toda la mañana. Nunca mejor dicho.
Ahora mismo soy muy feliz, tan solo por pensar que Light está en casa esperándome. Rezo porque haya hecho algo de comer porque no he tenido ni tiempo para desayunar en condiciones hoy y me muero de hambre. Rebusco con cuidado en la guantera sin apartar los ojos de la carretera pero solo veo envoltorios vacíos de pastelitos. Maldita sea, tengo que reponer con un par de dulces de fresa y nata mas tarde.
Aparco cerca de casa y cuando salgo del coche me abrocho la chaqueta hasta arriba temblando un poco por el frio, aunque los días soleados ya empiezan a alternarse con los nublados. Ya era hora. Cuando entro en casa escucho maullar a Kira de forma lastimera, no me preocupo porque también escucho a Light reír (seguramente desde la cocina) regañando a nuestro gato obeso . Dejo la chaqueta en el perchero y camino por el pasillo:
-¡Light! ¡Ya estoy en casa!
Light asoma el rostro desde la puerta de la cocina y sonríe de forma inocente. Maldito seas, demonio. Rio un poco entrando y dándole un beso suave en los labios ya que está cocinando y todo huele tan bien que no quiero que se queme. Me siento en la silla estirando los brazos:
-¿Como te ha ido el día?
Light sonríe mientras va sacando las patatas de la sartén:
-Bien, aunque he tenido que hablar con Mikami cerca de cinco veces porque aún no se apaña solo en Japón. Creo que vendrá pronto. Tiene que supervisar la nueva empresa así que... - con un ágil movimiento, Light echa el resto de las patatas en un plato hondo.
Frunzo el ceño ante eso, se que Mikami sabe de sobra lo mio con Light pero me sigue avergonzando la situación que vivimos junto a Jon y él cuando estuvieron aquí. Sonrío un poco pensando en Jon. Mark me ha informado de que ahora vive en Noruega, por lo visto volvieron a proponerle un traslado a un centro educativo de allí. Me alegro, porque así al menos no se dará la vergonzosa situación de encontrarnos por Londres.
Observo como Light mueve la carne con salsa que está haciendo y me muerdo el labio inferior al ver como se le marca el culo bajo los pantalones finos. Me pongo en pie y rápidamente le rodeo la cintura con los brazos, hundiendo mi rostro en su cuello y cerrando los ojos para oler su colonia. Por acto reflejo, mis manos se aferran con fuerza sobre su piel.
-Lawliet, me vas a romper los huesos.
La risa de Light me contagia y aprovecho que gira el rostro para morderle los labios y darle un beso suave que se vuelve demandante y posesivo al cabo de los segundos. Light suspira un poco y aparta la carne del fuego apagando la vitrocerámica y dándose del todo la vuelta abrazándome contra él sin dejar de besarme:
-¿Te han gustado mis mensajes? - se ríe dándome suaves mordiscos por el hombro.
-Eres un pervertido y un provocador.
Light suelta un ronroneo ante eso, me sujeta con fuerza la nuca y su lengua explora mi boca con salvajismo, moviéndose a la perfección mientras su cuerpo se restriega de forma leve contra el mio. Es increíble que nos excitemos tan deprisa tan solo con eso. A veces me pregunto como es posible tener tanta química con una persona, no quiero sonar muy cursi pero parece que hemos nacido el uno para el otro. Por eso tengo tanta curiosidad por ir a la casa de Alisha esta tarde e investigar el tema de los sueños.
Me coge en brazos haciendo que tenga que rodear su cuerpo con las piernas y le dejo hacer. Sonrío de forma satisfecha al ver como vamos hasta el salón y me deja con cuidado sobre el sofá, bajando con su lengua por mi cuello y subiéndome la camiseta blanca para poder lamer y jugar con mi torso. Suspiro, gimiendo casi con un susurro y le acaricio el cabello mientras cierro los ojos para disfrutar de sus caricias:
-Ummm...Light...la comida se va a enfriar...
Light ríe un poco y se pone de rodillas entre mis piernas bajándome el pantalón y la ropa interior, abro los ojos viendo como también está muy excitado y se desnuda de cintura para abajo. Sonrío de medio lado al ver su erección y muevo de forma instintiva las caderas hacia él, consiguiendo que nos rocemos. Vuelve a besarme mientras que nos masturba a ambos con la mano, haciendo fricción entre nuestros miembros excitados. Gemimos casi a la vez y le muerdo el cuello, dejándole una marca roja en la piel. ¿Como será hoy? Me parece que rápido y salvaje.
Enseguida lo tengo dentro de mi, embistiéndome con fuerza y provocándome gemidos de placer y algo de dolor, mezclados entre si y consiguiendo que todo mi cuerpo tiemble bajo su roce. Volveré a sonar cursi pero si, definitivamente, Light está hecho para mi.
Le araño la espalda, clavo mis uñas en su suave piel y dejo que me muerda, que me bese hasta que nos duelen los labios y elevo mis piernas sobre su espalda, encorvando mi cuerpo y notando el descontrol que ejercen sus penetraciones dentro de mi:
-Ahhh...Lawliet...¿te gusta así?...
Suelta una risita divertida mirándome y penetrándome con fuerza, sin dejarme descansar ni un solo segundo. Noto que me sonrojo mas aún con aquella pregunta. Siempre consigue avergonzarme con esas cosas.
-Sabes que si. - echo la cabeza hacia atrás y aprieto los dientes al sentir como me ha mordido la nuez.
Entonces me alza un poco entre sus brazos y comienza a embestirme justamente donde mas me gusta. Eso solo hace que del temblor tenga que sujetarme a su cuerpo con mas fuerza y ahora si que mis gemidos salen totalmente descontrolados junto a los suyos. Se mueve rápido, demandante y tan posesivo que el placer que me provoca hace que nuestros besos sean húmedos y desesperados. Muevo la cara y ladeo el rostro, cerrando los ojos con fuerza y notando el orgasmo mancharle el vientre. Mi cuerpo cae totalmente relajado entre sus brazos y él me embiste un par de veces llenándome por completo. Nos dejamos caer en el sofá respirando tan alterados que somos incapaces de decir palabra. Tan solo le acaricio el cabello, enredando mis dedos en sus mechones castaños.
Cuando por fin nos relajamos, Light se acomoda sobre mi, con el rostro apoyado en mi torso justo donde late el corazón. Me acaricia la piel con los dedos:
-¿A que hora tenemos que irnos luego?
-Sobre las cinco.
Me besa la mejilla, dándome un suave mordisco como siempre hace.
-He pasado por el supermercado antes de llegar a casa.
Me rio un poco mirándole a los ojos:
-Eso suena tan de marido y mujer...
Light se ríe también, besándome el cuello y acariciando uno de mis brazos:
-Si bueno...si tus listas de la compra fuesen mas normales...
-¡Oye! ¡Lo son!
Light se sienta en el sofá y carraspea la garganta, levanta la mano y va enumerando uno por uno:
-”Leche” , “Pienso para Kira” , “Tarta de fresa” , “Pastelitos de nata” , “Batido de chocolate” , “Carne”... y volvemos a los dulces de nuevo, Lawliet. La señora de la tienda siempre me mira de forma extraña cuando hago la compra.
-Seguro que está intentando adivinar donde metes todo eso. - me llevo el pulgar al labio inferior mientras lo pienso.
Light sonríe dándome un beso fugaz y levantándose para vestirse:
-Me gusta cuando haces eso, es un gesto tan tuyo... que si lo veo en otra persona me resulta hasta extraño.
Se inclina, besándome la frente y después va hasta la cocina, llamándome para que le ayude a poner la mesa.
[Light]
La casa de Alisha estaba perdida entre las pequeñas casitas que se amontonaban un poco a las afueras de Londres. Era una zona natural, con muchos jardines y vegetación. El silencio era inmenso y tan solo se escuchaba el piar de los pájaros y el sonido de los cuervos.
La mujer nos recibió con una suave sonrisa, dándonos paso dentro de su casa. Discretamente, me fijé en la decoración india y extraña que tenia aquel lugar, incluso el fuerte incienso que reinaba en el aire hizo que frunciese un poco el ceño, mirando hacia otro lado para no parecer descortés.
-Por aquí.
Nos guió hasta una pequeña habitación donde había dos sillones largos en el centro y apenas había ningún mueble. Lawliet charlaba un poco con ella, intentando relajar el ambiente. Tomamos asiento juntos y no se por que, pero enlacé mi mano con la de Lawliet sintiéndome un poco cohibido por la situación. Alisha nos miró y sonrió:
-Ustedes tienen mucha química juntos. Puedo notar el fuerte amor que los une.
Vi como Lawliet se sonrojaba y sonreí, besando su mejilla.
-Bien, eso facilitará las cosas. Os voy a explicar como lo haremos. La hipnosis es un método sencillo que nos ayudará a vislumbrar un poco parte de esos extraños sueños que los unen. Cuando Lawliet vino a verme y me contó sus pesadillas, llegamos a la conclusión de que estaban fuertemente unidos en una vida pasada. No es extraño que algunas personas puedan rememorar durante las horas de sueño, sucesos ocurridos en otras vidas o incluso planos astrales. Como los viajes astrales.
Fruncí el ceño pensando en aquello, todo me sonaba desconocido pero si que sabia algunas cosas sobre los famosos viajes astrales.
-Cuando hablas de planos astrales... ¿es lo mismo que lo de la reencarnación?
La mano de Lawliet me apretó con mas fuerza, seguramente él pensaba lo mismo.
-Bueno, no tienen por que ser lo mismo. Es más, quizás... lo que ustedes han soñado esté pasando aquí y ahora. A lo mejor no es una vida pasada, a lo mejor es un plano diferente.
Vale, ahora si que empezaba a acojonarme. Tragué saliva mirando de reojo como Lawliet miraba a la mujer de forma curiosa, con el pulgar en el labio y sus ojos brillantes. De los dos estaba claro que él era el interesado en estas cosas.
-¿Eso quiere decir que en este mismo momento las cosas que ocurrieron en los sueños están sucediendo ahora?
-Eso es lo que vamos a intentar averiguar.
-Pues entonces hagámoslo. - Lawliet me miró y me dio un fugaz beso en la mejilla, era su manera de tranquilizarme.
Alisha se puso en pie y nos pidió que cada uno nos tumbásemos en un sillón, debíamos relajarnos y dejar la mente en blanco para proceder a la hipnosis. Miré como Lawliet cerraba los ojos y sonreía con suavidad, relajándose por completo, yo sin embargo solo podía intentar no ponerme mas nervioso aún.
-Agarraos de la mano, así la conexión será mucho mas fuerte.
La obedecimos y cerré los ojos unos segundos para relajarme. Enseguida el olor del incienso, la suave música que Alisha había puesto y sus palabras, relajaron mi cuerpo por completo.
No supe que ocurrió después, solo escuchaba la voz de la mujer cada vez mas lejana en mi cabeza. Era como si de repente fuese desapareciendo y mi cuerpo cada vez mas relajado pesase tanto como una suave pluma. Ya no sentía el sillón, no sentía mi propio peso, y cuando abrí los ojos me encontré flotando casi de forma mágica. Vi mi propio cuerpo reposando relajado en el sillón junto a Lawliet e intenté no asustarme. Ahora volvía a escuchar las palabras tranquilizadoras de Alisha que me ordenaba concentrarme en alguno de mis tantos sueños. Cerré los ojos y cuando los abrí, una luz fría impactó sobre ellos.
Estaba flotando sobre la cama de un dormitorio extraño, seguramente en Japón. Reconocí al instante por la ventana los árboles y el tipo de calle que se veía. Escuché pasos cercanos y mi propia voz acercarse al dormitorio. Tragué saliva cuando me vi a mi mismo entrar y soltar los libros del instituto sobre la cama. Por un momento temí que aquel Light Yagami que había entrado pudiese verme, pero enseguida me calmé al ver como me atravesaba el cuerpo al coger un par de cosas de la estantería.
-Ryuk, ya puedes salir. No hay cámaras ni micrófonos. La policía y L se han encargado de quitarlos por fin.
Abrí los ojos del todo al ver al monstruo entrar en el dormitorio. Lo reconocía de mis sueños pero verlo así, tan imponente y oscuro frente a mi, me produjo un temor que me hizo temblar de arriba a abajo. Miré al otro Light, cruzado de brazos y riendo entre dientes con una expresión que ni yo mismo reconocía. Aquel Light tenia un brillo oscuro y malicioso en los ojos. Me pregunté si alguna vez yo me había visto de aquella manera.
-Estúpido L... cree que es mas listo que yo, cree que es mas listo que el Dios del nuevo mundo.
-Jejeje...Light...cuando dices esas cosas pareces un psicópata.
¿Dios del nuevo mundo?. Arqueé la ceja al verle salir del dormitorio al escuchar ruido en la planta inferior, sin embargo, aquel monstruo seguía allí.
-¿Y quien eres tú?
Mi corazón latió tan deprisa que por un momento temí que se me saliese del pecho, dolía sentirlo bajo la carne, frenético y desesperado. Aquel monstruo me estaba mirando a los ojos, sonriendo ampliamente. Por un momento dudé en contestarle. ¿Me escucharía?.
-Yo...
-¿Tú también quieres ser el Dios del nuevo mundo? La apariencia ya la tienes, jeje.
Su risa era socarrona y ronca. Me hacia sentirme intimidado.
-Considérame un...mero espectador.
-Eres un Light de otro mundo aburrido que ha venido al otro lado para ver el espectáculo. Lo pillo.
Se movió por el dormitorio para flotar sobre la cama, sacando una manzana y dándole un fuerte mordisco.
-Te aseguro que no te vas a aburrir, segundo Light Yagami.
-Vas...¿Vas a decir algo de esto?...
El monstruo me miró a los ojos soltando una risita entre dientes:
-No, me da igual.
Asentí y escuché de nuevo al otro Light subir las escaleras, cuando entró y cerró la puerta, sonrió satisfecho cruzándose de brazos:
-Ryuk, vamos. Toca hacer una visita al cuartel general de L.
Ryuk asintió y mirándome de reojo salió del dormitorio, le imité y atravesé la puerta para seguirles aprovechando que ahora prácticamente, era como un fantasma.