[Lawliet]
Miro el reloj del salón,algo impaciente. Estoy frente a mi portátil,en cuclillas sobre la silla y comiendo un buen pedazo de pastel de nata. Se que le prometí a Light que le esperaría antes de comerme un pastel el día de mi cumpleaños pero...el azúcar es demasiado peligroso.
Me siento un poco avergonzado y nervioso. Normalmente mis cumpleaños suelen ser tranquilos,no pasa nada nuevo,como tarta y leo en la cama. Lo normal para una persona que no ha tenido relaciones hasta ahora y alguien tan raro como yo. Pero Light se empeñó en hacer algo especial conmigo y ahora mismo está en su casa,supongo que buscando una escusa hacia su familia para dormir aquí esta noche.
Le echo de menos,llevamos un mes y medio juntos. Como pareja formal me refiero. A mi me parece mucho tiempo,me asusta el necesitarle tanto a mi lado,pero tampoco le he preguntado si para él es demasiado o ya se ha cansado. Soy consciente de que ha estado con otras personas antes que conmigo y la verdad...sigo sin entender que vio en mi. Para colmo,apenas nos hemos visto esta semana,todo por culpa de los exámenes y trabajos que nos han puesto. A veces odio la educación escolar aquí,es demasiado estresante.
Nadie sabe que somos pareja,no he querido sacar el tema porque en realidad,estamos cómodos así. Ya me tienen como el tío raro de la clase como para encima soportar que me insulten por estar con un hombre. No,definitivamente,estamos bien así. Pero debo reconocer que Takada me provoca ansiedad. Hanako y ella se pasan el día detrás de Light,intentando adivinar de donde provienen esas marcas rojas que a veces lleva en el cuello,intento controlarme pero con esos ojos castaños...es complicado.
Odio a Takada,me gustaría estrangularla y pegarle un puñetazo en la nariz. Odio cuando habla con Light,e incluso cuando le pide ayuda con los deberes.¿A quien intenta engañar? Por favor,es la chica con la calificación mas alta de nuestras compañeras de clase. Solo lo hace para ver si consigue conquistar de nuevo a Light. Es odiosa. Me molesta cuando Light le sigue la corriente con su amabilidad. Se que mi novio...Si,MI novio,no puede evitar ser cortés y educado pero...a veces me pregunto si no lo hace para molestarme. No sé,no quiero sentir que estoy compitiendo contra dos tetas bien puestas debajo de un uniforme.
Suspiro,alargando la mano para terminarme el pastel y frunzo los labios al darme cuenta de que ya me lo he terminado. Light,espero que seas un buen novio y me traigas una tarta debajo del brazo. Aunque yo no haya tenido paciencia ni voluntad para aguantar que llegues antes de comer azúcar. Miro la pantalla del ordenador y veo un mensaje instantáneo de la conversación que tengo abierta con Light:
Light : Lawliet,salgo en diez minutos. Mi hermana está muy pesada,no deja de preguntarme por mi “novia”.
Lawliet : Umm. ¿?
Light : hombre...supongo que algo se imaginan. Duermo fuera,estudio fuera...se nota que estoy con alguien.
Lawliet : que poco discreto eres,Yagami.
Me imagino su risa traviesa en este mismo momento. Cuando quiero mosquearle le llamo por el apellido.
Light : espero que me hayas esperado y no hayas comido nada. Y cuando digo nada, digo P-A-S-T-E-L.
Río. Ahora me siento un poco mas culpable.
Lawliet : no,no he comido.
Light : no te creo,aun recuerdo cuando me dejaste en la cola del cine plantado porque fuiste a por un algodón de azúcar.
Lawliet: estaba en oferta!! es difícil contenerse! No lo entiendes!
Sonrío, pero el sonido del móvil me distrae y cuando me levanto para buscarlo entre las mantas del sofá otro ruido de mensajería online hace que mire la pantalla. Light ya viene de camino,estupendo,tengo hambre. Y no precisamente solo de pastel.
Miro el número de la pantalla del teléfono.Desconocido.Bueno,aprieto el botón y contesto:
-¿Diga?
-¿Lawliet? - una voz familiar hace que tuerza el gesto.
-¿Roger? ¿Ocurre algo? - comienzo a preocuparme,Roger solo llamaría en caso de emergencia.
Se hace un silencio algo incómodo,puedo escuchar la respiración del viejo a través del teléfono:
-Lawliet...lamento tanto decirte esto por teléfono...pero...Watari...
El corazón se me detiene,o al menos,eso es lo que siento en aquel mismo instante,comienzo a temblar y recuerdo la llamada de Watari aquella mañana para felicitarme el cumpleaños. Justo antes de irme a clase,como siempre. Lo había notado algo extraño,distante...¿le habría pasado algo?.
-¿Que pasa Roger? Habla. - casi se lo exijo,me sorprendo a mi mismo por la mala educación de aquello. Pero al viejo,no parece afectarle.
-Lawliet,Watari ha sufrido un repentino infarto...ha sido...mortal.
Mortal. Ha dicho mortal. Eso significa que está muerto,no,es Watari...No puede estarlo. Aprieto el teléfono,casi con tanta fuerza como aprieto mis labios. Los ojos me arden,el cuerpo me tiembla y ando dando tumbos hasta el recibidor apoyando la mano en la pared.
-R-Ro...ger...¿que dices Roger? Quiero hablar con él.
Roger parece soltar un sollozo que hace que mi cuerpo se hiele en cuestión de segundos. Comienzo a llorar,silenciosamente pero de manera dolorosa. Me arde el pecho,tengo incluso que poner la mano sobre el corazón sintiendo como late de manera frenética. Una soledad se apodera de mi,me consume lentamente. Acabo de perder a mi tutor,a mi único amigo,mejor dicho,acabo de perder al que para mi,ha sido mi verdadero padre. Y lo peor,es que no he podido despedirme. Rápidamente,recuerdo la conversación que he tenido con él aquella mañana. Hemos hablado de las clases,del tiempo...de cosas tan absurdas que ahora me arrepiento de no haberle dicho cuanto le quiero.
Roger me habla,no le escucho,tan solo siento el golpeteo del ritmo cardíaco captando mi atención. No reacciono ni si quiera cuando escucho el timbre de la puerta. Seguramente sea Light,mi novio,aquel chico que Watari nunca conocerá. Me dejo caer,con la espalda resbalando en la pared hasta tocar el suelo con el cuerpo,el móvil cae a mi lado y mi respiración se altera de manera intermitente. Hacia mucho tiempo que no tenia principio de ansiedad. No puedo respirar,quiero quitarme la camiseta,quiero liberar mi cuerpo y que entre aire en mis pulmones. Grito,grito a la vez que lloro desesperado. Escucho como Light golpea la puerta,seguramente porque me ha escuchado.
[Light]
Joder,Lawliet.Que está pasando ahí dentro. Dejo la caja de cartón y el regalo de Lawliet en el escalón de la entrada y entonces,saco la pequeña llave que él me dio para emergencias. La verdad es que no pensé que lo haría,pero puso mucha confianza en mi con aquel gesto. Abro la puerta,despacio y de forma precavida. Me daba miedo lo que podía encontrarme. Nunca había escuchado gritar a Lawliet así. Entonces le veo,en el suelo,llorando de manera descontrolada,dolorosa y horrible. Casi puedo sentir su dolor atravesar mi cuerpo con una facilidad asombrosa:
-Lawliet... - meto las cosas en la casa dejándolas en el recibidor y cierro la puerta,acercándome a él y poniéndome de cuclillas,apartándole el cabello del rostro.
Me mira con ojos cargados de dolor,¿que ocurre,Lawliet?.Le abrazo,sin perder un segundo,sintiendo como tiembla y me rodea con las manos mientras llora en mi camiseta. Acaricio su pelo,besando su piel y en silencio. No quiero que hable,quiero que se desahogue. Lo voy levantando despacio del suelo,caminando hacia el salón y sentándome con él en el sofá. Enseguida me abraza,ahogando su lloro desesperado en mi cuello,y yo le acaricio la espalda sin decir nada.
No se cuantos minutos estuvo Lawliet llorando de aquella manera,solo se que cada sollozo suyo era un puñal en mi estómago. Jamás lo he visto así. Entonces,siento que su cuerpo se va relajando,aunque me aferra aun contra él,quizás con miedo de que pueda dejarle solo:
-Lawliet...estoy aquí,contigo...no voy a irme...tranquilo.
Lawliet tiembla un par de segundos,y entonces siento que abre la boca,lo sé porque sus labios rozan mi piel al hacerlo:
-...Wa...Watari ha muerto...
Me quedo callado,intentando asimilar aquello. No he conocido a ese hombre pero se de sobra lo importante que es en la vida de Lawliet,ha sido su padre a pesar de no compartir la misma sangre. Y se que a Lawliet debe de dolerle el alma estar ahora mismo en Japón y no poder despedirse de él por última vez. Además,el día de su cumpleaños,eso es hasta cruel.
Lo abrazo,cerrando los ojos al oler su cabello e intentando transmitir con mis brazos que estoy junto a él.Lawliet se separa un poco de mi y me mira a los ojos,le limpio el surco que sus lágrimas han dejado en las mejillas y beso de forma casta sus labios.
-Lo siento mucho. - le doy un beso en la mejilla,aún viendo los pequeños espasmos que tiene a causa del shock emocional.
-Has...has tardado mucho en venir... - veo que hace un amago de sonrisa y entonces sonrío yo también,mordiéndole la mejilla con suavidad.
-No he podido venir antes,tenia que traer tu regalo y el pastel.
Lawliet me mira a los ojos,apretando los labios,un par de pequeñas lágrimas vuelven a salir por sus ojos y se deslizan por su cara.
-¿Quieres abrir el regalo?
Lawliet asiente y se sienta en el sofá mientras que camino un poco desorientado hacia el recibidor. Todo esto nos ha pillado por sorpresa. Quería hacer algo especial para Lawliet hoy pero me parece que el plan no va a salir como había esperado. Miro su móvil en el suelo y lo recojo poniéndolo sobre la caja de la tarta. Entro en el salón y entonces me pongo de cuclillas frente a él,dejando un pequeño transportin que va tapado con una tela de color oscuro:
-Feliz cumpleaños,Lawliet.
Veo que mira curioso el regalo,aun tembloroso por la noticia de Watari.Por un momento deseo que se olvide de eso,que al menos disfrute con lo que le he regalado. No sé si le gustará pero creo que es lo único que le hará realmente ilusión y ahora mismo...lo necesita.
Levanta algo temeroso la tela y entonces se pone de rodillas,abriendo la pequeña puertecita de hierro del transportin. Mete las manos y saca un pequeño gatito de color negro y blanco,que duerme aún hecho un ovillo en sus manos. Me mira,con los ojos brillantes y las lágrimas recorriendo en silencio su rostro:
-Light...
Le sonrío con suavidad,mirándolos a ambos. Hacen una escena bastante tierna,ese gatito me había seguido a casa el día anterior y en cuanto lo vi,me recordó mucho a Lawliet.
-¿Te gusta?...he pensado que te puede hacer compañía. Yo tengo a la pesada de mi hermana y tú tienes ahora a una bola de pelo adorable.
Lawliet asiente,sin dejar de mirar el gato y sonriendo levemente al acariciarle tras las orejas:
-Yo...Light...no se que decir...es lo mejor que me han regalado nunca...
Le doy un beso en la mejilla y me deslizo hasta sus labios. Saben salados por las lágrimas:
-Me alegro,Lawliet. - me pongo de pie cuando él lo hace con el gato en el regazo. Me siento un poco celoso de esa bola de pelo.
Cojo la tarta y la acerco a nosotros,abriendo la caja para que Lawliet la vea. La he pedido de nata y fresas porque se que es uno de sus sabores preferidos. Lawliet me mira y me besa la mejilla dándome las gracias. Deja al gato hecho un ovillo ronroneando en el sofá y después alcanza su móvil,enviando un mensaje. Parece que le cuesta mucho hacerlo.
-Deberías pensar un nombre pronto. - le digo,mirando al gato.
-Ya se como voy a llamarle.
Miro a Lawliet y le rodeo con los brazos,besando su mejilla:
-Voy a llamarle Kira.
Abro los ojos ante esa frase,ese nombre,mis sueños...de repente todo es demasiado extraño. Intento no pensar de nuevo en el tema de las pesadillas. Y menos ahora,Lawliet me necesita.