[Lawliet]
Ya he hablado con Roger. Después de haber asumido lo de Watari le he convencido para coger un vuelo temprano por la mañana. Necesito asistir a su funeral,y no voy a permitir que nada lo impida. Incluso Light me ha preguntado si necesito compañía, pero esto,debo hacerlo solo. Además tenemos muchas cosas pendientes de varias materias y no quiero retrasarle en los estudios. Se quedará con Kira hasta que vuelva. Kira...ha sonado como si fuese nuestro hijo. Sonrío ante aquello,me hace gracia que compartamos la responsabilidad de un pequeño gato. Hace que sienta a Light mas unido a mi.
Estamos en mi dormitorio,tumbados en la cama mientras vemos una comedia en la pequeña tele que tengo en el escritorio. Light me ha rodeado con el brazo y puedo ver desde ese lado del colchón como Kira juega en su cesta con una bola de papel de la que se ha encaprichado.La verdad es que siempre he querido tener un gato,pero por unas cosas u otras al final nunca lo había tenido.
Me ladeo de cara a Light,mirándole y hundiendo el rostro en su torso,inhalando su perfume. El que tanto me gusta. Me siento extraño,ausente y débil. Mi cerebro no consigue desconectar por lo ocurrido y vagamente acuden a mi mente recuerdos de mi vida en Inglaterra. Me pregunto que seria de mi si hubiese vivido aún allí,en estos momentos seguramente me sentiría igual pero totalmente abandonado. Sin nadie con quien poder ahogar mi dolor.
-Light...
Me mira,sin dejar de acariciarme el pelo:
-Dime.
-Gracias por estar aquí. Gracias por...salvarme... - noto como de nuevo mis ojos se empapan a causa de las lágrimas que se deslizan por mi mejilla. Hundo la cara contra su pijama.
Light me rodea con los brazos y entonces se tumba sobre mi,mirándome y lamiendo con suavidad mi mejilla,quitando el rastro de dolor que ha salido en forma de agua. Suspiro,acariciando sus brazos y abriendo las piernas para que se acomode entre ellas. Se siente tan bien su calor...
-Light,¿me vas a echar de menos?
Light se ríe un poco,dándome suave besos en el cuello,llenándome con ellos la piel. Le rodeo con los brazos para rozarle por completo,sintiendo la calidez que me envuelve gracias a eso.
-Pues claro,Kira y yo vamos a estar aburridos sin ti... - baja con sus labios por el hueco desnudo que hay en la parte superior de mi pijama haciéndome suspirar.
Cierro los ojos,respirando tranquilo,acariciando sus cabellos castaños mientras me sube la camiseta para besarme el vientre. Entonces,Light se incorpora y vuelve a elevar el rostro hasta estar sobre el mio,le muerdo el labio,poniendo las manos en su cara para acariciarle:
-¿Por que no sigues?...
Light me mira en silencio,seguramente no se haya atrevido a continuar por temor a que no sea un momento adecuado. Pero estoy triste,y necesito su calma junto a mi. Además,pensar que tengo que viajar y él se queda en Japón...me pone un poco inquieto.
-¿Quieres que siga?... - baja con su mano hasta casi mi entrepierna y suavemente,roza mi miembro sobre la ropa interior.
Asiento con la cabeza,deseo que lo haga,de verdad que si. Mi cuerpo despierta bajo Light,casi como un animal dormido que espera a su amo.
Nos desvestimos con lentitud,mirando nuestros cuerpos desnudos que ahora se rozan con insistencia. Relajo el cuerpo sobre la cama y dejo que Light me llene de besos tiernos y juguetones,que van bajando hasta mi pecho mientras su lengua juega con mis pezones,haciéndome gemir muy levemente. Acaricio su espalda,arañándole un poco durante el trayecto de mis dedos. Quiero marcar su carne,quiero que mañana se acuerde de mi.
Light masajea mi excitación muy lentamente,besándome sin apenas dejarme respirar. Gimo en su boca,queriendo que lo sienta,que sienta todo lo que me provoca. Cierro los ojos al notar como su miembro duro y palpitante se roza con el mio,casi jugando. Necesito a Light,todo de él. Es como si de repente,me hubiese dado cuenta de todo lo que me ha hecho sentir en tan poco tiempo,a lo mejor lo estropeo,a lo mejor no debo dejarme llevar tan pronto por todo esto pero...Light,creo que estoy perdidamente enamorado de ti.
Me muerdo los labios al notar como mete uno de sus dedos dentro de mi,moviéndolo para meter otro más. Dios,es como una explosión de placer que me inunda y me desborda. Abro mas las piernas,comiéndole la boca,mordiendo sus labios y notando la humedad de la saliva que compartimos gracias a nuestras lenguas traviesas. Le miro,sonrojado,entre gemidos leves y respiración agitada:
-Light...te quiero dentro de mi...
Light sonríe juguetonamente,intentando fingir inocencia con aquel gesto. Me gusta cuando lo hace,porque de inocente tiene poco.
Entonces,llega la primera estocada,suave,cuidadosa. Que hace que enlace mis piernas en su espalda,buscando un mejor ángulo y posición para sentirle lo mas profundamente que pueda. Esto es increíble. Lo vuelve a hacer,gimiendo junto a mi y agarrándome las muñecas con suavidad mientras se mueve placenteramente. Nuestros cuerpos arden y el movimiento cada vez mas intenso de la cama,hace que choque un poco contra la pared. Gimo fuertemente,al sentirla del todo dentro de mi:
-Ahh...L-Light...sigue...justo ahí...uhmm... - me muerdo con fuerza el labio,casi temiendo hacerme sangre.
Light ha encontrado mi punto mas placentero,las primeras veces que lo hacíamos ni yo sabia que podía sentir todo esto. Pero conforme mi cuerpo se ha acostumbrado al suyo...Light parece hecho para estar dentro de mi. Golpea una y otra vez mi interior,con un ritmo acompasado,perfecto y salvaje. Gimo desesperado,volviéndome loco,clavándole las uñas y mordiendo su cuello.
[Light]
Lawliet...Lawliet...tu cuerpo es demasiado para mi. Noto como su interior se estrecha alrededor de mi miembro,como se mueve y me calienta. Esto es increíble. Creo que nunca me cansaré de hacerle todo esto. Masajeo su miembro duro con las manos provocando que gima roncamente,desesperado,dispuesto a tomar todo lo que le ofrezco. La tiene caliente,hinchada y casi al límite. Lo noto por el temblor de su cuerpo,el que ya conozco como la palma de mi mano.
Me excita tanto saber que soy el único que ha visto sus gestos,su temblor,su intimidad mas pura...
-Lawliet...ahhh...quiero ver como te corres...
Lawliet arquea la espalda,gimiendo con fuerza sin poder contenerse. Ni si quiera se si me ha escuchado porque su cuerpo está apunto de llegar al límite,entonces le embisto contra la cama,viendo como me rodea con un brazo y me muevo con un vaivén placentero dentro de él,notando como mis músculos se tensan,como mis ojos se cierran con fuerza apunto de alcanzar el clímax del orgasmo dentro de Lawliet:
-¡Ahhh! ¡Light! - Lawliet grita mi nombre,justo cuando su semen sale para mancharme los dedos,caliente y espeso.
Me muevo dentro de él,sin detenerme,pese a su temblor. Y gimo roncamente,de forma animal,desesperada,notando como lleno el cuerpo de Lawliet al llegar al orgasmo. Mi cuerpo se tensa y se relaja al momento,dejándome caer sobre él,con el cabello adherido a la frente por el sudor,la respiración alterada y el corazón latiendo de manera frenética.
Me pongo boca arriba a su lado,intentando calmar mi respiración y enseguida,noto como Lawliet apoya su cara en mi torso,también alterado. Sonrío al mirarle y le doy un mordisco en la mejilla.
Veo que alcanza los pañuelos de la mesita y nos limpiamos un poco,para acomodarnos de nuevo entre las sábanas,mirándonos sin decir nada. Me fijo en sus ojeras marcadas,los ojos oscuros que siempre me transmiten calma y paz. Ciertamente,le voy a echar mucho de menos mañana.
-¿Cuantos días estarás fuera? - le acaricio el dorso de la mano bajo la sábana.
-Pues supongo que dos o tres...no lo sé – baja la mirada,triste. Pongo los dedos en su barbilla para que me mire.
-Todo saldrá bien.
Lawliet asiente tristemente,se aferra mas a mi,abrazándome:
-Aún no puedo creer que se haya ido...me siento tan...estúpido. Nunca hablábamos mucho por teléfono,preferíamos contarnos las cosas a la cara y nuestra relación se hizo distante cuando llegué a Japón. Me siento tan triste...Watari nunca sabrá cuanto le quiero.
-Vamos Lawliet, él sabia de sobra cuanto le querías. Era tu padre. Quizás no de sangre pero lo era. Un padre sabe el amor que tiene un hijo hacia él. Seguro que está orgulloso de ti.
Lawliet pareció tranquilo ante mi respuesta,sonrió y ambos miramos como Kira acababa de subirse a la cama,estirándose y acostándose a nuestros pies,ronroneando mientras nos miraba. Tiene unos bonitos ojos azules,y el pelo semi largo. Parece un peluche. Lawliet le hizo un gesto con los dedos, lo que provocó que Kira se acercase en pose de cazador hacia él,tirándose con impulso hasta su mano:
-Acaba de llegar y ya estás mimándole con malas costumbres.
-Light,no te pongas celoso, – me dice,besándome la mejilla – si quieres,te compro un ovillo de lana y te lo tiro para que juegues.
Me echo a reír ante aquello:
-Muy gracioso. - miré el reloj y besé a Lawliet – Creo que deberíamos dormir,tu vuelo sale temprano.
Lawliet asintió y tras acariciar a Kira lo dejó en el suelo,viendo como volvía a la cesta con la manta que ambos le habíamos preparado. Me abracé a él,acomodándome entre sus brazos y estrechándolo,quizás con la esperanza de que mañana siguiese en la cama conmigo.
El despertador sonó varias veces antes de que pudiese abrir los ojos,escuchaba ruido cerca. Seguramente era Lawliet preparando la maleta. Me senté en la cama con dificultad y sonreí al ver como Kira movía el rabo siguiendo los movimientos de Lawliet por el dormitorio,de un lado a otro. Cuando nuestras miradas se cruzan,Lawliet se acerca y me da un suave beso:
-Buenos días... - dice,con un gesto algo triste.
Le sonrío,acariciándole el pelo para transmitirle tranquilidad. Siguió echando en la maleta algo de ropa y giré el rostro,viendo un plato vacío en el escritorio con algunas migajas de fresa y nata:
-¿Has comido tarta de anoche?
Lawliet ríe con suavidad:
-Soy yo,¿que esperabas?,las tartas no suelen durar mucho aquí.
Sonreí,en eso tenia razón. Miro de nuevo el reloj:
-¿Quieres que vaya al aeropuerto contigo?
-Light...tienes clase,y además recuerda que ahora,tenemos...una especie de hijo en común – señaló a Kira que se estaba dedicando a arañar la sábana.
-Está bien – le sonrío,viendo como terminaba de prepararlo todo.
Cuando Lawliet se fue,me dirigí al baño para darme una ducha antes de preparar las cosas para Kira,quedé con Lawliet en dejarle comida,agua y cerrar el dormitorio,al menos para que no pudiese salir ni escaparse. Volvería después de las clases para verlo,tenia la llave,así que no seria un problema. Me sentí muy solo cuando volví al cuarto para vestirme y él ya no estaba conmigo. Sonreí,y eso que solo estaría fuera un par de días. ¿Estaba empezando a ser dependiente de su presencia? Quizás si,y eso me asustaba.
Había dejado a Kira una buena ración de comida y agua,al menos hasta que volviese después de las clases. Aún de cuclillas junto a su comedero,le preparé una caja con arena para que hiciese sus necesidades y le acaricié el lomo,jugando un poco con él antes de salir de allí. Cerré la puerta con llave y suspiré. Hacia un buen día.
Caminé hasta casa y entré con un saludo,mi madre y mi hermana me saludaron con la mano ofreciéndome el desayuno y me senté junto a ellas,porque hacia tiempo que no me relajaba en aquel comedor:
-Light,últimamente se te ve poco por aquí – Sayu estaba sonriendo,mirándome curiosa mientras se tomaba un café suave.
-Sayu tiene razón hijo,¿has vuelto con Takada?
Aquello me pilló por sorpresa. Las madres son temibles.
-¿Como me dices eso? No,no estoy con Takada,estoy con otra persona...
En ese momento escucho la voz de mi padre entrando en la cocina:
-Vaya,mi hijo tiene otra novia. Eres un rompe corazones Light.
Sonrío un poco,dándole un mordisco a la tostada que mi madre me había preparado:
-Bueno,sigo siendo de los mejores de la clase así que...dejadme que disfrute.
-Podrías invitar a tu novia a cenar,hijo. Nos gustaría conocerla al igual que conocimos a Takada en su momento.
Carraspeo la garganta,bebiendo zumo para evitar pensar en aquella escena. Lawliet cenando con mi familia,presentándose como mi novio. Uff...demasiado para mi. Y mas para ellos.
-Es pronto aún – lo digo por que quiero salir rápidamente de la situación.
Sayu se ríe cruzándose de brazos:
-A lo mejor no quieres traerla porque en realidad...¡Es un chico!
Toso,rojo como un tomate ante eso. Maldita Sayu...¿como se le ha podido ocurrir eso? Vale que sea cierto pero...mi hermana a veces me da mucho miedo.
Mi padre frunce el ceño:
-Por dios,Sayu.Tu hermano es una persona decente. - escupe las palabras,con rencor,malicia y repugnancia. Mi padre nunca se ha mostrado abierto de mente con la homosexualidad.
Sayu se encoge de hombros,sin volver a sacar el tema. De repente el desayuno me da naúseas y cuando acabo,me pongo en pie para coger las cosas del instituto e ir a clase. No tengo ganas de estar mucho en esta casa. Sobretodo después de lo que ha dicho mi padre.¿Una persona decente? Imagino que si se enterase de que tengo novio...yo seria una persona poco grata y le avergonzaría. A veces odio lo clásico que puede llegar a ser.
Salgo de allí rumbo hacia el instituto,encontrándome por el camino con varios conocidos de clase a los que saludo,uno de ellos,el novio de Hanako.Me rodea el hombro para ponerme junto a sus amigos:
-Hanako me ha contado que llevas ya tiempo con otra tía...Yagami,te lo montas bien,¿eh? Y seguro que es una tía adulta,universitaria o algo así.
Sonrío,arqueando una ceja. Bueno,mejor que piense eso a que se entere de la verdad:
-Ya le dije a tu novia que no quería hablar mas de esto. No se por que es tan horrible que Takada y yo lo dejásemos y tenga otra novia.
Takashi se echa a reír,dándome una palmadita en la espalda:
-Pero si no pasa nada hombre. Además Takada tiene pinta de ser...ya sabes,algo rancia. Seguro que ahora follas como un condenado.
Intento ignorarle porque no me hace ni puta gracia como Takashi comenta este tipo de cosas. Pero tampoco quiero partirle la cara en la calle.
Uno de ellos,mira curioso el cruce donde normalmente solemos encontrarnos con los compañeros del instituto. Al fin y al cabo,está cerca de la entrada del edificio:
-¿Y Lawliet? ¿No ha venido hoy? Vaya,que pena. Ken me dijo que le tenían preparada una sorpresita...
Le miro maliciosamente,algo irritado. Ken era uno de los abusones del instituto,amigo del chico con el que Lawliet se enfrentó cara a cara:
-¿Que sorpresa?
El chico me mira,arqueando la ceja como valorando si soy lo suficientemente de confianza como para saberlo,deduzco que al final decide que no porque pasa de mi y se larga a otro sitio.
Cuando entro a clase,miro inevitablemente el pupitre de Lawliet.Va a ser muy aburrido sin él. Me siento en mi sitio y Takada se sienta a mi lado. Hacia tiempo que no se sentaba aquí:
-¿Te importa si me siento?
-No,para nada. - sonrío algo distraído,sacando el libro y el bloc de apuntes para dejarlo en la mesa. Veo que ella mira hacia el sitio de Lawliet.
-¿Donde está? Nunca falta a clase.
-Creo que ha tenido que viajar por algo personal,supongo que estará un par de días fuera.
Ella asiente,mirándome a los ojos.
-¿Os lleváis muy bien,no? Quien lo iba a decir...
Me rio entre dientes,me hace gracia esa frase. La verdad es que cuando estoy con Lawliet pienso que somos dos personas opuestas que se atraen inevitablemente una hacia la otra.
-Bueno,Lawliet me ha caído bien desde que llegó. Al menos no es un capullo como los demás.
-Ya...aunque dicen por ahí que tiene unos gustos peculiares...ya sabes,que le van los tíos. Alguien como él,tan rarito y solitario...
Aprieto el lápiz con la mano,intentando serenarme. Ya basta,Takada,deja su sucia lengua viperina dentro de la boca.
-No sé,a mi siempre me ha dado mal rollo. Con esas ojeras siniestras y...bueno,es igual. - veo de reojo que prepara el temario en la mesa.
-Takada.
Ella me mira,ladeando la cabeza,puedo ver en sus ojos un brillo esperanzador.
-Estoy saliendo con Lawliet.
Las palabras me salen solas,casi sin pensarlo,sin pensar en todas las horribles consecuencias que esa frase va a ocasionar en mi relación con Lawliet. Takada se ha quedado muda,con la boca un poco abierta y mirándome incrédula:
-P-pero Light...eso...tú no eres...imposible,Light,me estas tomando el pelo...
No digo nada,me quedo en silencio. Si no me cree,pues que se joda. Miro como el profesor entra en clase y los demás toman asiento,Takada sigue mirándome y continua así cinco minutos después hasta que le llaman la atención para que lea en voz alta.
Va a ser un día muy largo.