13 de febrero, dos meses antes de la boda:
Sehun está intrigado, esperando a que sus padres y una señora joven pero con pareja salgan de la oficina de su padre, mientras él está sentado en el sofá del living con el compañero de la señora y sus tres hijos, dos niños, el mayor no más de tres años, y una bebe casi recién nacida en los brazos de su padre. Y ese día llega Luhan de China por la tarde, cerca de las cuatro, por lo que se supone que sus padres y el irán a buscarlo, pero siendo que ya son las tres y cuarto y aun no van en camino, Sehun duda de que puedan siquiera llegar al aeropuerto a tiempo, en ese momento unos cinco guardias salen apresuradamente por la puerta y Sehun cree que ellos van a ir por Luhan.
Unos veinte minutos después sus padres por fin salen con la otra mujer, todos felices hablando de lo que eso les puede ayudar y Sehun no comprende de que hablan.
-¿Dónde está Luhan? –Pregunta de pronto su madre mirándolo intensamente a él. –Ya debería estar aquí.
-No sé, supongo que estará llegando al aeropuerto.
En ese momento su madre mira con sorpresa a su padre.
-No te preocupes cielo. –Dice su padre inmediatamente. –Ya envié a un grupo de guardias por él, con una autorización firmada de ser necesario. –Con esas palabras su madre se relaja.
-Ok, entonces podemos esperar a que él llegue para contarles a los dos el nuevo arreglo, ¿les parece? –Dice la mujer castaña mirando a los padres del menor.
-Si está bien, mientras tanto les mostraremos sus habitaciones, vengan. –Su padre señala al otro hombre en la habitación, el cual no ha dicho ninguna palabra desde que llego, este se pone de pie y los sigue mientras se pierden por los pasillos junto con los niños.
Sehun se queda ahí, pensando en que es lo que acaba de ver, de que estaban hablando sus padres, para que vino esa señora, pero luego de unos minutos decide dejar sus preguntas de lado e ir al cuarto de estudio para aprovechar su tiempo, además se supone que sus padres le dirán todo una vez que Luhan llegue.
Varios minutos después escucha el grito de su madre desde lejos, de seguro Luhan ya llego piensa Sehun, y Hunnie salta emocionado por ese pensamiento, haciendo que Sehun baje hasta llegar a la entrada y encontrarse con su madre asfixiando a Luhan en un abrazo, a Luhan con una maleta a su lado y una mochila a su espalda, pero lo que más le llama la atención es el nuevo color en el cabello de Luhan, al parecer el mayor también se tiño el cabello, pero él lo hizo de color rojo y se ve bastante bien.
Después de los cordiales saludos y las preguntas de cómo has estado, que tal esta está tu padre, pasan a sentarse en el living de nuevo, Luhan y Sehun en un sofá y sus padres en el del frente, esta vez la señora de nombre desconocido está ahí, pero no hay rastro de su compañero o los pequeños, y Sehun ve como Luhan mira a la señora con curiosidad, pero con disimulo, dándole a Sehun un poco de celos infantiles, Luhan y él no se han visto por bastantes días, el mayor debería mirarlo a él, notar que se cambió el color de cabello y preguntar porque lo hizo o darle un cumplido no mirar a la extraña mujer, Hunnie gruñe en su interior estando de acuerdo.
-Bueno chicos de seguro tienen muchas preguntas rodando por su mente, en especial tu Sehun, pero esas dudas serán contestadas dentro de poco aunque no por mí porque tengo algunas cosas importantes que terminar. –Chung Ho se levanta, dejando a su esposa mirándolo con cara ofendida. –Amor diles tú por favor. –Dice a varios metros de distancia, haciendo que su esposa lo fulmine con la mirada.
-Miren chicos, lo que pasa es que el doctor con quien hacían las mediaciones antes renuncio para hacer un viaje, no me pregunten de que tipo o hacia donde porque no lo sé, pero para que ustedes sigan conociéndose hemos traído a ella. - Young Mi señalo a la otra mujer en la sala haciendo que Luhan y Sehun le echaran una mirada rápida para después volver a mirar a Young Mi. –Por lo tanto ustedes la respetaran y obedecerán en todo lo que ella les diga, además de que ella tiene métodos distintos al anterior psicólogo. Ahora por favor preséntate. – Young Mi señala dramáticamente a la mujer a su lado.
-Buenas tardes chicos, yo soy Jung Jessica, psicóloga especializada en las relaciones humanas y vine desde Estados Unidos con mi compañero Tyler Know y mis hijos para tratar especialmente con ustedes. Mis técnicas de trabajo son más potentes que las de algunos otros psicólogos que prefieren la lentitud de las cosas, yo fuerzo un poco a que se creen lazos, pero funcionan y no generan problemas en el futuro. Las clases serán en cualquier momento del día, pero nunca en los fines de semana o días feriados. Espero que nos llevemos bien.
***
Horas más tarde Sehun y Luhan están yendo a sus respectivos cuartos para acostarse a dormir después de la cena, no han podido pasar mucho tiempo juntos y es una bendición para Sehun ya que no sabe que responder en caso de que Luhan le haga la pregunta del millón de wones, ¿porque lo beso?, es algo que ni el mismo se puede responder aun y Hunnie no lo ayuda a pesar de que ese estúpido lobo fue el que inicio el beso.
-Oye Sehun, ¿tienes un minuto? –Justo cuando el menor escucha la pregunta de Luhan se queda paralizado con su mano en la manilla de la puerta, su lobo en su interior corriendo desesperado y sin saber qué hacer, Sehun quiere decir que está totalmente ocupado aunque solo se ira a dormir, pero sabe que eso es ser muy descortés con Luhan y secretamente quiere tener un momento a solas con el mayor.
-No, estoy bien, ¿qué pasa? –Sehun casualmente se apoya en la puerta de su cuarto, muchos pensarían que es para verse sexy, pero la verdad es que es porque está nervioso y necesita algo para no caer, sus piernas le tiemblan nerviosas por lo que pasara en ese momento.
-Sabes, respecto a lo del beso, hace como dos semanas… -La voz de Luhan se diluye y se oye poco a poco más lejana para los oídos del menor.
Sehun mira cualquier cosa menos al mayor acercarse, sus zapatillas son lo que más le llama la atención, son blancas o al menos lo eran, ¿desde cuándo están tan sucias? Antes de lo que Sehun esperaba hay otro par de zapatillas frente a las suyas y el levanta lentamente la mirada, tratando de evitar o atrasar lo máximo posible el encuentro de sus ojos con los del mayor.
Pero en lugar de encontrarse con los ojos del mayor, son sus labios se encuentran con los de Luhan, el mayor lo está besando, algo que Sehun no se esperaba que sucediera ni lo había pensado asique sigue el beso tímidamente, el mayor tiene más experiencia que él, eso sorprende un poco a Sehun, ¿de dónde es que el mayor tiene experiencia? El mayor saca la lengua un par de veces, dándole pequeñas lamidas a los labios del menor, otras veces los mordisquea suavemente o solo mueve sus labios dirigiendo el beso, haciendo que Sehun apreté sus manos en un puño o rasguñe un poco la puerta en su deseo de poder tocar a Luhan, pero no sabe si puede hacer eso. Luego de unos pocos minutos, que para Luhan solo fueron segundos, este separa sus labios de los de Sehun, permitiéndole al menor recuperar el aire perdido, momento que Luhan aprovecha para ir sigilosamente a su cuarto.
¿Por qué haces eso? –Le dice Lu en su mente. -¡Quédate con él, puede haber repetición!
Eso es todo por hoy, si continuamos es posible que Sehun nos aleje pronto, además así nos aseguramos de que él nos busque mañana para saber por qué lo hicimos o el mismo se sienta en el derecho de volver a darnos uno y solo tal vez podamos empezar una relación, tal vez. Mañana será un nuevo y gran día.
¿Y qué es lo que le dirás si te pregunta por qué lo besaste, genio?
Le diré que le estaba cobrando el beso sorpresa que él me dio primero.
En el cuarto de al lado Sehun no deja de repetirse la misma pregunta: ¿Porque lo hizo y luego se fue? Algo contestado siempre por Hunnie, tal vez por vergüenza o porque tu hiciste lo mismo.
Pero aun así pudo haberme dicho que me iba a besar o al menos decirme después porque lo hizo, no dejarme solo en el pasillo.
Tú hiciste algo muy parecido, la única diferencia es que le diste un empujoncito para que caminara y tomara su avión. No puedes reclamarle nada después por copiar tus actos. Aunque ahora puedes pedirle explicaciones en lugar de dárselas tú.
Bien, es algo que puedo hacer mañana, no tiene sentido ir ahora, posiblemente ya se durmió.
Con esos pensamientos ambos se fueron a dormir esperando que mañana algunas preguntas puedan ser respondidas.