Judal seguía en silencio, no podía creer lo que tenía frente suyo, Indra por su parte solo bajo la mirada nunca quizo que alguien se enterara ni siquiera Madara e Izuna lo sabían, siempre se encargó de ocultarlas bien.
—Indra... ¿qué?..— Seguía sin palabras el menor.—¿Cómo fue que te hiciste esto? ¿Es por las peleas?..—
—No Judal, no fue por las peleas.— Ocultó su mirada, un escalofrío le recorrió la espalda al recordar el motivo de esas marcas.— Cuando era niño nunca supe lo que era el cariño de **** *****. Cualquier cosa que hiciera estaba mal, el haber nacido estaba mal, todas esas marcas y muchas otras son el recuerdo de aquello es algo con lo que tendré vivir siempre.—
—P-pero, tío Madara e Izuna, ¿lo saben?— La respuesta fue negativa, lo cual le sorprendió de cierta manera.—¿Como que no lo saben? Indra, ¡esto es muy grave! Con esto l* podrías llevar a la carcel.—
—No es tan fácil Judal, e***** es demasiado peligros*. Nunca supe muy bien a lo que era capaz de llegar pero no tengo ganas de averiguarlo.— El menor noto como al mayor le dio un escalofrío no se quería ni imaginar todo lo que tuvo que pasar.
—¿Qué fue lo que te hizo?—
—Nunca me ha gustado hablar de esto.—
—Tal vez te puedas desahogar.—
Indra se lo pensó un rato siento esperado por Judal pacientemente, hasta que después de un suspiro se decidió.
FlashBack
Llegaba de la escuela un joven de cabello negro largo, había tenido un pésimo día, los mismos mocosos que le molestaban lo habían hecho ese día. Como deseaba ya no ir pero debía mantener buena calificación.
Entro a su hogar encontrándose con su ***** quien al verlo solo bufo antes de soltarse a reír, el aspecto que llevaba era lamentable.
—Ni para esto sirves en serio. Deberías dejar de ser un miedoso de mierda.—
—¿Igual que tú? Alguien que dice ser valiente cuando solo ladra pero no actúa.— Mala respuesta, y se dio cuenta de esto al sentir el primer golpe.
Luego de ese primer golpe ante la más minima contestación, negativa o mirada de reproche, Indra sufria golpes y humillaciones.
Judal recordó en esos momentos las veces en las que el mayor le había defendido de bravucones o los típicos tipos que solo se podían mover en manada.
—¿Recuerdas cuando te defendía?— Esas palabras sacaron de sus pensamientos al menor quien asintió.—Bueno, pues eso no era suficiente para *****, no sé cómo le hacía para enterarse de cada pelea en la que me metía. Pero decía que le daba vergüenza, aprovechaba cada oportunidad para humillarme. Me mantuvo amenizado con lo de... con hacerme sufrir más de lo que ya lo hacía.— Tantas imágenes de su pasado volvían, ese vacío en su interior comenzó a hacer acto de presencia.
Después de un rato en el que Indra le contó una pequeña parte a Judal, omitiendo cosas que no quería volver a tener en su mente, con mucho esfuerzo había logrado dejarlos en lo más profundo de sus pensamientos.
—Ahora que estás más tranquilo, creo que podrás dormir, ¿no?— Comentó el menor levantándose.— Descansa.— Iba a avanzar cuando un pequeño tirón en su ropa sintió.—¿Indra?—
—¿Puedes quedarte?— Murmuró desviando la mirada cosa que le hizo sonreír y asentir, se acomodaron en la cama del mayor acompañados de Shiro para perderse en el mundo de los sueños, el cuál extrañaba.
Tobi había despertado primero, estaba emocionado pues volvería a salir con aquel hombre que conoció al final de la presentación, pero necesitaba ayuda para verse "presentable" pues Kakashi se lo había pedido, y que mejor que ir con sus primos.
Se dirigió a la habitación de Judal dando pequeños saltitos emocionado antes de ser callado por un grito.
—¡Deja dormir Tobi!— Si, el grito venia de Sasuke. Entro a la habitación de su primo de ojos rojos encontrándola vacía, cosa que le extraño, fue a la de Itachi y lo vio dormido, quizo despertarlo pero un recuerdo le golpeó.
Flash Back
Era la mañana del 25 de diciembre, lo cual logró que el buen chico se despertara antes que todos, emocionado por poder abrir los regalos ya, pero necesitaba a un cómplice que le ayudara y que mejor que su primo Itachi.
Entro en la habitación de este abriendo la puerta de una patada.—¡Itachi!— Cabe recalcar que su grito se escucho por toda la calle.
Pero esto no fue de agrado para nadie, mucho menos para el que fue llamado, quien con unas grandes ojeras agarro uno de sus zapatos para lanzárselo al buen chico.
—¡Largo y deja dormir!—
Fin Flash Back
En su vida volvería a hacer eso, así que fue con Indra, que si bien tampoco era de tener un buen humor si le despertaban de golpe, era el único (aparte de Izuna) que no terminaba golpeándolo. Abrió la puerta y antes de gritar lo vio dormido junto con Judal y Shiro, quien tenía una de sus patitas en la boca de Judal, con el estomago hacia arriba.
El único despierto no pudo evitar el tomar unas (diez) fotos de la escena. Se acercó a Indra y moviéndolo suavemente.
—Indra~.— El nombrado abrió los ojos lentamente.
—¿Qué hiciste ahora Tobi?—
—Nada, solo necesito tu ayuda.—
— Ya te dije que yo no voy a esconder el cuerpo.— Óbito se quedo en blanco, parecía que su primo continuaba algo dormido.
—No, no, de eso no hablo, necesito vestirme más ¿normal?— Al no ver respuesta en Indra el buen chico lo tomó de los pies para jalarlo fuera de su cama sacándole un susto.
—¡¿Qué te sucede?!— Reclamo despertando a Judal quien al sentir esa conocida patita dentro de su boca se fue al baño a lavarse los dientes, mientras que un tranquilo Shiro se volvió a acomodar en la cama para dormir de nuevo.
—¡Te estaba hablando Indra! Pero conseguir estabas soñando con Ashura para que ni tus luces en despertar.— Hizo un puchero Tobi, sacándole un suspiro a Indra quien solo negó con la cabeza.
—Ahhh~ ¿Que sucede Tobi?— Termino por rendirse escuchando como su primo se lavaba con fuerza los dientes.
—Necesito que me ayudes a arreglarme, Kakashi me dijo que me llevaría a un lugar donde necesitaba ir Bien arreglado y así.— Apenas Indra iba a responder cuando Judal volvió.
—¡Yo me encargaré de eso!— Y se llevo al buen chico a rastras.
Al parecer iban a tener una cita Tobi y Kakashi.