Justo cuando la estaba pasando tan bien en uno de esos programas de variedades le piden que realice trabajos en solitario. La idea arruino sus animos de inmediato, primero porque se alejaría del pequeño y hermoso bebe Yoogeun, y segundo, no quería irse sin arreglar el tema con Jonghyun, aquella noche no fue del todo… ¿Normal? Fue demasiado extraña. Para empezar, estaba hablando de Minho y él, ¿Por qué? ¿Qué tenia que ver el menor en todo esto? Y pasar tiempo con el no debería afectarle en absoluto. Entre todos sus pensamientos solo encontró una respuesta clara, celos, era obvio, ¿Qué más podría ser?, lo estuvo ignorando desde que apareció Yoogeun, era tan dulce y tierno, imposible no estar pendiente de él, además demostraba todos sus dotes como buena omma, bueno en realidad como padre, la costumbre de ser tratado así por los demás… En fin, desde esa noche no podía dejar de pensar en el moreno, aunque no era novedad, ya llevaba tiempo extraño, aunque siempre culpaba al estrés del trabajo, ¿Qué más podría ser la razón?
Los días pasaron aburridos, agotadores en realidad, solo llegaba a descansar, dormir era todo lo que deseaba. Su última noche finalmente antes de volver a la rutina con los demás, y fue cuando todo… Todo se volvió una gran confusión.
Fue su móvil el que le despertó de un sueño profundo. Su reaccionar obviamente no sería de los mejores, había olvidado silenciar el maldito aparato, pero claro, el enojo no le afecto tanto cuando vio que se trataba del moreno. Contesto con aquella voz adormilada que tenia en el momento, no haría ni siquiera el intento por cambiarla, este tenia que saber la gran maldad que había realizado, despertarlo de un sueño como ese, al menos lo que este tenia para decirle debía ser importante.
—Jonghyun.. ¿Jong? ¡Jonghyun! —
Había repetido su nombre probablemente cientos de veces, ¿Hasta cuando le haría esperar? ¿Marcó por casualidad o qué? De ser así seguramente lo mataría al verlo, debía levantarse temprano para regresar y hasta el momento con suerte había pestañado.
—K-Key— Finalmente escucho la voz del otro lado. — ¡Oh! Perdóname, ¿Te desperté?
—¿Tu qué crees? — Respondió de mal gusto.
—Lo siento. —Dijo en una voz suave y baja. — Quería saber cómo estabas..
¿Cómo estaba? ¿Estaba preguntando realmente como estaba? ¿Estaba preocupado o algo parecido? Espera.. ¿Por qué le llamaría solo para saber cómo estaba?
—¿Eh? ¿Estas preocupado por mi? —Dijo confundido.
—No me has llamado estos días, ni un mensaje enviaste. ¿Estas bien? —
Llamadas, mensajes… Como si hubiera tenido tiempo para eso, con suerte recordaba alimentarse, que de lo contrario Jonghyun lo regañaría, no podía adelgazar más de lo que se encontraba.
—No pensé que fuera necesario llamarte. Además están con Yoogeun. No podrías contestarme. —
—Por las noches sabes bien que podemos hablar con libertad. —
—Me quedaba dormido—Hizo una pausa— Como ahora. —Dijo bajando el tono en su últimas palabras. — ¿Por qué te preocupaste?
—¿No puedo preocuparme por mi mejor amigo? —
¿Preocuparse? ¿Solo porque si?, era extraño escucharlo de esa forma, incluso ese tono que utilizaba, no era… ¿Real? Bien estaba medio dormido, no había forma en la que fuera una preocupación diferente, eran amigos, era obvio que la preocupación luego de unos días existía.
—Hm.. Bueno. Estoy bien. Mañana estaré con ustedes. —
—¿En serio? —Pronunció un poco más emocionado.
No pudo evitar reir, paso de tener un tono de su voz tan desanimado y un tanto molesto a unas energías de un niño pequeño con aquella tonalidad.
—Estas extraño. Deberías ir a dormir. —Dijo en una suave risa que fue interrumpida por un bostezo.
—Iré entonces. — Respondió el moreno.
—Extrañaba escucharte. —Dijo o más bien confesó cerrando sus ojos en busca de un poco de descanso, solo un poco.
Sus ojos se abrieron por la mañana con una molesta alarma. Quería lanzar el móvil lejos, odiaba despertar tan temprano, pero trabajo era trabajo. No recordaba en realidad como termino la conversación de la noche anterior con Jonghyun, mientras cepillaba sus dientes miraba su reflejo como si buscara la respuesta en su otro yo, claro que la imagen no le hablaría, aunque podía imaginarlo hacerlo de solo encontrar la respuesta a su pregunta.
No calentó más su cabeza, después de todo vería a Jonghyun en unos minutos. Tomo sus cosas, y salió hasta el vehículo que le esperaba. El viaje fue un poco largo, logro descansar lo suficiente para despertar radiante al momento de llegar a la nueva casa de la familia SHINee con su hijo. Bajo agradeciendo al conductor y finalmente ingreso. A esas horas de la mañana esperaba que los demás estuvieran despiertos, quizás desayunando con Yoogeun o algo parecido, pero tras abrir la puerta se encontró a su pequeño bebe solo sin sus otros padres.
Lo recibió en sus brazos y dejo que este acariciara su rostro. Las cámaras ya estaban encendidas, los trípodes frente a él con tres tomas de cámara diferente. Planos americanos seguramente y otro primer plano en su rostro con el bebé, pues tenía la cámara a la altura de sus ojos. Por lo visto con apenas dos personas del staff a esas horas de la mañana, suficientes para sostener dos ángulos diferentes que le siguieran hasta la habitación.
Beso gustoso a su hijo e ingreso a la habitación para realizar su papel de madre y despertar a los miembros del grupo. Con la ayuda del bebé todo resulto más fácil. Comenzó con Minho quien no demoro en abrir sus ojos para Yoogeun, seguido de el fue Jonghyun. El solo verlo causo una extraña sensación en su cuerpo, dios, ¿Por qué?, quería ver sus ojos, pero este los tenia en el menor. Apenas dejo al moreno fue donde Taemin, mientras el no pudo evitar dar una mirada rápida a Jonghyun, necesitaba esa conexión como asegurarse de que todo estaba bien, y claro que lo estaba, la conversación de la noche anterior no pudo ser mejor.
Para su mala suerte, ¿Mala suerte?, no sabia si llamarlo de esa forma, el era la Omma, mejor dicho, el mejor Appa de todos, debía hacerse cargo de la vacuna de Yoogeun. Felizmente fue con los otros dos, en el camino pensaba que tan difícil sería poner una vacuna a un bebé, comenzando por los resultados que estos habían tenido con el corte de cabello, claro, no estaba el para conseguir el cometido, pero tampoco olvidaba que una vacuna era algo más complicado que un corte de cabello, sin duda tendría un lío. Pero su suerte no estaba tan mala como pensaba, consiguieron la vacuna y volvieron en menos de lo que esperaban a casa.
Encontrarse con Jonghyun una vez más, ver su sonrisa y hacerlo reir era algo que le agradaba bastante, porque las sonrisas que este tenía eran suyas, el las provocaba, ¿Qué podía sentirse mejor que eso? Entre risas y risas noto la obra de arte del líder. Por primera vez olvido a Yoogeun para divertirse con Jonghyun, bien, debía admitirlo, pasar el tiempo con Jonghyun incluso frente a las cámaras era divertido, más que Yoogeun.
La noche llego, las cámaras se apagaron y todo volvió a la normalidad. Estaba agotado por despertar tan temprano, por ende fue al baño primero para acabar en la cama tirado preparado para dormir. Se acomodó junto a Jonghyun, no le importaba meterse en medio de el y Taemin, el moreno era su mejor amigo, y quería estar a su lado, después de todo se habían perdido unos días de verse, no era la gran cosa pero deseaba tenerlo a su lado un poco más. Pero sus ojos se cerraron lentamente sin poder aguantar, aun asi, era simple cansancio de mantener sus ojos abiertos, pues aun asi no podía descansar, como si le faltara un guardián que cuidara de sus sueños, y ahí, llego el moreno.
Sintió su presencia a su lado, más no abrió sus ojos, estaba cansado, suficiente tenía con despertar todos esos días temprano, quería dormir bien esa noche y nada mejor que dormir con el moreno a su lado. Entonces, sintió como si este le estuviera observando, ¿Era cierto?, cualquiera podía equivocarse, aunque se decía que todos tenían un sexto sentido que advertía la mirada de alguien más. Sin dejar pasar la oportunidad de creerle a los científicos, abrió sus ojos y si, justamente estaba ahí la mirada del moreno.
—Jong.. —Susurro luego de unos segundos de intercambiar miradas.— ¿Por qué me ves así? — Preguntó.
—¿Así comó? —Preguntó sin quitarle la mirada de encima.
—Como si fueras a comerme….—
¿Por qué dijo eso? Bueno, es que el no veía su mirada como él la sentía, por dios, realmente pareciera que quisiera devorarlo con la mirada. Estaba examinando cada parte de su rostro y lo ponía nervioso, muy buenos amigos serán pero, estaban tan cerca, y esa mirada… No era “sana”
—No te miro de forma especial, solo.. Te miro…—
Jonghyun acomodó su cabeza sobre una de sus manos. Una posición con la cual más de sus nervios aparecieron, definidamente esa mirada lo estaba devorando, lenta…Muy lentamente.
—M-Me… Me pones nervioso. Detente. —
Se dispuso a cambiar de posición, la noche acompañada de su mejor amigo no se llevaría a cabo, menos con una mirada como esa. Pero el moreno lo detuvo posicionando su mano en su hombro para evitar cualquier movimiento.
—No… No quiero que Taemin te vea dormir. —
Se quedó estático mirando los ojos ajenos. ¿Qué acababa de decir?.
Estaba nervioso, muy nervioso. Se encontraban en una habitación compartida pero sentía que eran los únicos en el lugar, incluso escuchaba su corazón palpitar a un ritmo que ni siquiera creía posible. ¿Por qué? ¿Por qué se sentía así?, Jonghyun estaba siendo jodidamente sexy, dominante, no sabía comó explicarlo. Tenía un carácter bastante fuerte para detenerlo y lograr descansar de una vez, pero no, no había forma de detenerlo con esos nervios, quizás… No quería hacerlo. Era una de esas sensaciones en las que se sentía tan bien que temía continuar.
El silencio inundo la habitación, sus ojos se perdieron en los contrarios, no quería detenerlo, no quería. Lo vio acercarse, sentía su rostro tan cerca del suyo, sus respiraciones chocar. ¿Qué estaba haciendo? ¿Por qué se sentía tan bien?, era completamente idiota lo que estaba pensando, pero deseaba esos labios, sabía que mañana se arrepentiría de todos sus pensamientos y acciones probablemente, pero en ese momento su corazón saltaba de gozo por tener al moreno tan cerca.
No había sentido algo asi por una mujer, todas aquellas que se acercaron con esa intención, ninguna logro provocar mariposas en su estómago o que su corazón latiera de esa forma, ni mucho menos sentir ese nerviosismo como si el mundo estuviera girando a una velocidad diferente, más acelerada.
—Te extrañe…—Susurro.
Necesitaba decirlo. Debía dejarlo salir, además, sus bocas estaban tan cerca que probablemente en una palabra más esa distancia acabara.
—También yo…—Pronunció el moreno— También yo Key.
Nadie entendería como su corazón enloqueció ante esa respuesta. Y aunque Jonghyun no lograra ver su sonrisa, ahí estaba, estaba sonriendo, leve, una tenue sonrisa pero estaba en sus labios. Relamio sus labios por inercia a la espera de un contacto, logrando apenas, por muy poco un roce con el labio inferior del moreno. Su mano en su mejilla, esa corriente en su cuerpo, ¿Qué significaba ese deseo? ¿Tensión sexual? ¿A esa edad? Tampoco era un niño pequeño pero, ¿Lo necesitaba? ¿Realmente?
—Key…—Susurro el moreno.
No dijo palabra alguna. Estaban jugando con el libido del otro, aun en esa posición era consciente de estar con sus compañeros, y cámaras que aunque se encontraran apagadas, nunca sabia cuando se encenderían. Pero lo deseaba, deseaba tocar esos labios.
Sintió como el mayor se detuvo alejándose apenas, un arrepentimiento, al igual que él. No estaba bien, los mejores amigos no hacían ese tipo de cosas, no se excitaban con el otro. Mierda… Esa sensación, no se iba, al contrario, le mantenía lleno de ¿Felicidad? Debería ganar un premio como record en un mar de sentimientos, nadie podía haber sentido todas esas emociones en una sola semana, será demasiado.
Necesitaban una excusa para separase, y no busco entre las palabras, lo hizo por sus acciones. Lo abrazo, sentir su aroma, dejar que su corazón latiera contra su pecho, se conectaran, como sea, lo necesitaba al menos para calmarse. ¿Dónde se había ido su sueño?, ya definitivamente no podría dormir, ni siquiera pegar un pestañeo.
—Key…—
—No digas nada… Descansemos. —Susurró.
No quería recibir excusas o algo parecido, toda esa felicidad se iria con el abrir de la boca del moreno, por ende prefería detener todo antes de ser arruinado, ya que el igualmente hubiera buscado excusas para explicar algo como eso, pero a diferencia de Jonghyun, él no se arrepintió a último momento. Quizás eso necesitaban, una excusa para separarse, esa unión era peligrosa, sobre todo con los compañeros en el lugar, ¿Qué pensarían de ver a dos de sus compañeros besándose?, no era normal, se espantarían, ya que ambos eran hombres. No era bien visto ver ese tipo de parejas, homosexuales, aunque creía que entre los idols existían más de una pareja de ese tipo, o sea, era bastante obvio, pasar el tiempo a diario con sus compañeros, existían amistades que se verían alteradas por el fanservice. Incluso creía saber de alguna que otra pareja, podría asegurarlo, más no hablaba del tema, no era un tema para hablarlo con naturalidad.
Aun con las cámaras sin encender, abrieron sus ojos encontrándose con el rostro del moreno frente a él. Los nervios lo inundaron de inmediato, ¿Tan cansado se encontraba esos días?, debió ser un efecto del sueño el actuar de esa forma con Jonghyun, estuvo a punto de besarlo, lo peor era que ambos eran conscientes y… Aun recordaba ese deseo que tenia por unir sus labios con él, ¿Cómo olvidar esa sensación?. Mierda.
Se levantó rápidamente y realizo su rutina matutina para encargarse de Yoogeun por la mañana. Ya con todo el staff en la sala más sus compañeros comenzaron a grabar con total naturalidad ni siquiera notaron cuando las cámaras se encendieron, ellos disfrutaban de estar con el bebé. Donde le pareció extraño incluso ver como Jonghyun interactuaba más con él. Existió un momento en el que este le tomo de los hombros, consiguiendo nada más que tomara una silla y se sentara frente a Yoogeun, pues una corriente recorrió su cuerpo, esos nervios volvieron a hacerse presentes.
Jamás había visto tanto interés por parte de Jonghyun en el pequeño, pero le pareció completamente divertido, además de interactuar con total normalidad frente a las cámaras, era de ello de lo que quería asegurase. Además, sentía una ligera molestia, como si Jonghyun estuviera evitando lo ocurrido la noche anterior. No dijo nada en absoluto, menos con las cámaras ahí. En cuanto llego la noche… Llegaron sus problemas.
Tenían el aviso de la grabación al día siguiente, una maldita promoción de pollo. Onew seguramente era el más feliz de todos. Mientras ellos estaban haciéndose la idea de levantarse temprano al día siguiente, otra vez a dormir poco.
Termino de acomodar a Yoogeun con Minho para volver a la habitación por sus cosas. Ahí ya había encontrado a su líder en el móvil mientras que Jonghyun estaba acomodándose para dormir.
—Jonghyun, ¿Podemos hablar? —Dijo Key rompiendo el silencio.
—¿Hm? ¿Sobre qué? —Elevo su cabeza desde el futón.
—Eh.. Sobre lo que paso ayer. —Dijo con temor a ser cuestionado por su líder.
—Oh.. Eso. —Hizo una pausa. —¿No íbamos a olvidarlo?
—¿Olvidarlo? ¿Cuándo dijimos eso? — Preguntó extrañado.
Vio como Jonghyun miro a Onew aun en su móvil como asegurándose de que este no entendiera o prestara atención a la conversación. Este se puso de pie y se acercó hasta quedar frente a él. Pero a pocos segundos de haberse encontrado sus miradas, la del contrario se desvió enfocándose tras su espalda. Por las voces supo que se trataba de los menores, eran interrumpidos, aunque tampoco tenía en mente hablar en un lugar como ese, necesitaba sentirse seguro, sin cámaras y si la suerte lo acompañaba, necesitaría que ningún tipo de tecnología estuviera con ellos.
Sintió la mano del contrario tomar su muñeca para alejarlo de la habitación hasta el jardín. Ahora que lo pensaba, habían cámaras en toda la casa, era difícil encontrar uno donde no fueran vigilados, además del baño, pero ese lugar no tenía el ambiente que necesitaban para hablar con tranquilidad, por ende, al llegar, prefirió guiar él esta vez al moreno unos pasos más lejos, cerca de un árbol donde este cubría perfectamente la cámara, además de entregar una sombra que esta ni siquiera captaría sus siluetas, era perfecto.
—Bueno.. Eh… —Comenzó el moreno algo nervioso. — ¿Cómo explicarlo?
—No intentes inventarme algo, ¿Ok? —Aclaro de inmediato. — Ni de la basura en el ojo, algo en la cara, nada… Dime la verdad…
¿Por qué estaba siendo tan directo?, en realidad siempre lo era, incluso frente a las cámaras, pero en ese momento deseaba escuchar algo de los labios ajenos, ¿Tanto se notaba? Y una vez más esa sensación de agrado estaba en su cuerpo, solo por la cercanía entre ellos para mantener los susurros y el que estuvieran solos.
—Tampoco iba inventarte algo. —Se excuso Jonghyun. —No sé ni siquiera como explicarlo…
—Estabas por besarme. De hecho.. —
—Si. Lo sé. —Interrumpió. —Y obviamente no sería algo diferente…
Era cierto, era imposible decir o inventarse algo con la cercanía de sus rostros. Su lengua toco el labio ajeno, estaba seguro de ello, quizás Jong lo sintió como un roce, mientras él, todo lo contrario.
—¿Entonces? ¿Por qué fue? —Preguntó.
—No lo sé… ¿Un impulso?... Además…—Hablo calmado. — ¿Por qué no me detuviste?
¿Detenerlo? No quería hacerlo, no quería detenerlo, ni siquiera en ese momento. De ocurrir una vez más la escena de la noche anterior, con el pensamiento que tenía ahora, probablemente el seria quien acabará con la distancia. Lo admitía, queria besarlo incluso en ese instante.
—¿Y si no quería hacerlo?.— Dijo sin pensarlo. — Bueno... Todo ocurría tan rápido, ¿Como debería reaccionar?
Aunque la realidad era diferente, las escenas fueron tan lentas que cualquiera de los dos podía hacer algo al respecto, pero ninguno se inmutó a hacerlo.
—¿Cómo es eso de que no querías? —Preguntó el moreno más serio.
—Hm... En ese momento.— Desvío su mirada. —No quería... Detenerte
—Key...¿Sabes lo que estás diciendo, no? —
—Osh.. Claro que lo se.—Dijo volviendo su mirada seria al moreno.— Al menos te respondo con sinceridad y ni evado las preguntas.
—Te dije que no lo sabía. —
—¿Cómo no vas a saberlo?, ahora dime que acercarte así es normal.— Bufó molesto.
—¿Y por qué no? Eres mi mejor amigo.— Se quejó.
—No es normal querer besar a tu mejor amigo. Y...—
—¡Hey! ¡Ustedes dos! ¡A la cama! —
La voz de Onew les interrumpió, aunque gracias a él notaron como su voz paso de ser solo susurros a un tono más elevado, incluso un par de gritos.
Su mirada se conectó una vez más a la ajena, no estaba molesto, aunque claro, hace unos minutos así lo sentía, en ese momento se sentía extraño, quería saber cual era la razón de ese acercamiento, pensó que el escuchar a Jonghyun le ayudaría a aclarar sus pensamientos, y sus sentimientos, ese extraño revoltijo que tenía en su estómago producto de las malditas mariposas.
Desvío la mirada del moreno solo para tomar camino hacia la habitación, ya no había caso en continuar con el tema, tampoco era como si Jonghyun quisiera hablar de ello, más bien ignoraba la situación. ¿Tenía que olvidarlo también? Imposible, algo como eso no era fácil de olvidar, quizás si, pero las sensaciones no.
Con Yoogeun parecía que nada había sucedido, ni la discusión de la noche anterior, ni el casi beso que habían llegado a tener. Todo era normal, incluso se sonreían el uno al otro con naturalidad ¡Y era lo que más le molestaba! ¿Cómo podía fingir tan bien? Al final termino tomandole más atención a Yoogeun. Pudo notar como este se ponía celoso por verle con el bebé, más cuando le estaba dando de comer, y lo hacía con más intención aún, si el estaba actuando como si nada ocurrió el también podía hacerlo y su atención claramente la tendría más el bebé.
Le enternecio ver a Yoogeun buscando la atención de ellos, ya estaba acostumbrado a pasar su tiempo a su lado, por lo que el lazo era más fuerte. El pequeño gritaba por su atención, al final la grabación se la pasaron preocupados de su hijo, solo se tranquilizaron hasta tenerlo nuevamente con ellos.
Para su suerte las cámaras no los acompañaron hasta casa. Por Taemin al día siguiente irían por un pinic, por lo que la madre de Yoogeun se despidió de él hasta la puerta debla la casa y les dejo a solas con el pequeño. Jugar con el fuera de cámara era tan divertido como en medio de las grabaciones. Con el cansancio, Minho fue el primero en dejarlos junto con su líder, siemore buscando una excusa para alejarse del bebé.
—Key Hyung—Pronuncio Taemin.— Estoy cansado... Me ire a dormir
—Esta bien. —Respondió sosteniendo al bebé entre sus brazos casi dormido.
En momentos como ese se preguntaba como la madre podía dejarles a ellos un bebé, aunque claro, llevaban bastante tiempo con Yoogeun, la costumbre lo era todo, ya ni siquiera demoraba en dormirse.
—Jonghyun, ¿Me acompañas a la habitación de Yoogeun? —Dijo poniéndose de pie con el pequeño en sus brazos.
Después de la aceptación del moreno este de inmediato le ayudo a ponerse de pie, sosteniendo que de sus brazos no cayera el bebe. Tuvo la compañía silenciosa del mayor hasta la habitación, donde este se detuvo en la puerta mientras el se encargaba de acomodar a Yoogeun en la cama. Lo cubrió bien, lento, ya que por alguna razón sentía la mirada de Jonghyun sobre él. Tuvo que tragar en seco para evitar los nervios. “Evitarlos” Claro, era un chiste, no pudo ni siquiera ignorarlos unos minutos, maldito Jonghyun que ahora no tan solo viendo sus ojos le ponía nervioso.
Se quedo observando un momento a Yoogeun, como excusa para aburrir a Jonghyun y que este se fuera dejándolo finalmente solo, pero no lo logro. Cuando se voleto ahí estaba el moreno recargado del marco de la puerta corrediza mirándolo fijamente. Esa intensa mirada lo volvería loco, definitivamente loco. Sus nervios lo estaban atacando con todo, pero debía mantenerse fuerte, después de todo había sido el mayor quien le estuvo evitando por culpa de sus propias acciones, ¡El no tenia la culpa!
—Listo. Vamos. —Intento ser seco para pasar a su lado como si nada.
Dio un par de pasos sintiendo la victoria cuando su muñeca es tomada por la única persona además de él en ese lugar. Jonghyun. Se giro para verlo, tenia esa seria expresión en su rostro como si estuviera buscando una respuesta, pero de su boca claramente no saldrían respuestas, sino preguntas, miles y miles de preguntas comenzando aquella noche, por la casi unión de sus labios.
Soltó el agarre del moreno y se dispuso a caminar una vez más intentando librarse de la conversación, pero una vez afuera de la habitación de Yoogeun, Jonghyun lo tomo una vez más, esta vez asegurándose de tener su cuerpo acorralado contra la puerta corrediza, sin forma de escape.
—¿Qué mierda te sucede? —Se quejó ante el golpe de su espalda.
—Shh…—Llevo su dedo a sus labios.
—Tu fuiste el que me empuja y me haces callar. — Se quejó.
—Shh…—Cubrió esta vez su boca callándolo. — No querrás despertar a Yoogeun…
Solo rodo sus ojos, no podía decir palabra alguna con la mano del moreno sobre sus labios, aunque no le desagradaba, al contrario, se sentía tan nervioso como molesto. Nervioso por la situación en la que se encontraban, molesto por Jonghyun, quien no admitía que aquella noche deseaba besarlo.
—Hm.. —Se quejó una vez más.
Sus ojos seguían conectados. Sus manos libres, de querer alejarlo podría haberlo hecho con facilidad, pero no era lo que deseaba. Jonghyun estaba demasiado cerca, una vez más y tan solo viendo sus ojos, de esa forma tan perdida… Mierda… ¿Por qué Jonghyun? ¿Por qué un hombre?
—Odio que te pases el tiempo con Minho ahora… —Admitió el moreno sin quitar la mirada de sus ojos. — Y perdóname… Esa noche…—Pronunció entre susurros alejando lentamente su mano de su boca, para dejar que sus dedos acariciaran sus labios.
¿Por qué hacía eso? ¿No sabía que de hacerlo provocaba en el más deseos de besarlo?
—Ash.. —Se quejo bajando sus manos hasta la cintura contraria, tomándolo con fuerza para acercarlo a su cuerpo. — Esto no está bien Key… No podemos.. ¿Lo entiendes?... —Miro sus ojos.
Su boca podía estar alejándolo a palabras, pero sus acciones eran diferentes, el solo sentir el agarre de su cintura, primero fue molesto, por ser tratado como una mujer, por otro lado no, produjo una sensación de excitación en él.
—Somos mejores amigos…—Pronunció el moreno.
—¿Por qué estaría mal? ¿Lo quieres, no? —Dijo jugando con la cercanía.
Tan solo asintió mirando los labios ajenos, tan cerca mientras hablaban, ambos pendientes de los movimientos del otro.
—Somos hombres.. —Susurro.
La distancia de sus cuerpos solo permitía susurros.
—Pero esa noche no te estaba importando que fuera un hombre… —Tomo una pausa. — Como ahora…
—Me arrepentiré de esto. —
Sus bocas, finalmente se estaban acariciando con roces, más aun no existía una verdadera unión, hasta claro…
—Veremos si lo haces…—
…Ese momento.
Sus labios… Finalmente unidos.