Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Jeho divoké oči (Ojos salvajes) por yue-sama

[Reviews - 852]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

hola! muchas gracias a todas por sus rw! ya les conteste!

este cap me gusta mucho y en las notas finales les dejare como un bonus de imagenes.

espero les guste como a mi.

Pasó algún tiempo y no recibió ningún otro trato brusco, eso lo calmó, pensó que sería peor, pero, para empezar, no sabía que estaba pasando, ¿acaso ellos eran del zoológico?

 

 

No tentaba su suerte tampoco, lo habían dejado ahí, como si nada, pero aun así no se había levantado y se mantenía en una esquina, además hace tiempo había dejado de llorar, ahora solo le preocupaba infinitamente Sasuke.

 

 

¿Qué planeaban hacer con ellos?

 

 

Escuchó la puerta abrirse y se tensó, los pasos sonaron fuerte y claro, cuando se detuvieron frente a él, no supo qué hacer, sin embargo, unas manos suaves le tocaron el cabello y quitaron las vendas de sus ojos.

 

 

Naruto parpadeó varias veces para acostumbrar sus ojos, y cuando al fin pudo ver se topó con el hermoso rostro de un pelirrojo, quien a su parecer tenía los ojos más tristes que había visto jamás, éste volvió a acariciar su cabello y se agachó un poco para examinar sus golpes.

 

 

—¿Te golpearon en algún otro lugar?

 

 

—N-no.

 

 

—Bien… —el pequeño Omega pelirrojo comenzó a limpiarle la cara suavemente, evitando ser brusco al tocar los golpes que el rubio tenía—. ¿Te duele algo más?

 

 

—El brazo —dijo suavemente.

 

 

Cuando lo habían tirado al suelo, lo que había amortiguado su caída había sido su brazo, su hombro le dolía mucho y tenía miedo de que estuviera quebrado o zafado.

 

 

—Voy a revisarlo ¿sí?…

 

 

El asintió y dejó que las pequeñas manos del bermejo le jalaran un poco la camisa para comenzar a tantear su brazo.

 

 

—Umm —gimió de dolor.

 

 

—Parece que solo es el mallugón, tranquilo.

 

 

La puerta fue abierta bruscamente y ambos pegaron un gran salto, luego vieron entrar a otro Omega con cabello largo y rubio, además de unos ojos azules como los suyos… No pudo evitar pensar que se parecían mucho, si él se hubiera dejado el cabello largo, serían casi gemelos.

 

 

Lo único feo que Naruto veía en él, era el ceño fruncido que tenía y la molestia en su cara. Parecía furioso.

 

 

—¿¡¡Qué demonios estás haciendo Sasori!!? —masculló casi a gritos, pero teniendo cuidado de no ser tan ruidoso—. Me dijiste que ibas al baño, ¡¡eres un mentiroso!!

 

 

—Calla —dijo Sasori—. Tenía que ayudarlo.

 

 

—Eres tan bueno —dijo Deidara suavemente—, pero este es el pequeño bastardo por el cual Itachi casi me deja.

 

 

—Dei tienes que entender… Él no tiene la culpa.

 

 

—¿¡¡Qué!!? ¿¡Ahora lo vas a defender!?

 

 

—¡Basta! ¡¡Deja de gritarme!!

 

 

Naruto pudo ver cómo el pelirrojo se llevaba una mano al vientre y aun con todo el miedo que tenía sintió mucha curiosidad, pero un ruido suave los alerto a todos. Parecía que esos dos estaban ahí en secreto, el pelirrojo volteó a verlo y le dio unas pastillas para el dolor haciendo que las bebiera rápidamente para luego volver a ponerle las vendas.

 

 

—Lo siento —dijo en su oreja, acariciando sus cabellos suavemente—. No puedo hacer nada más, pero… sé valiente, ten voz y defiéndete… Vive la vida de una mejor manera que la mía, promételo.

 

 

Naruto quiso llorar por la infinita tristeza que escuchó en su voz, asintió rápidamente y lo sintió alejarse.

 

 

Escuchó los pasos apresurados de los dos Omegas al salir de ahí rápidamente, dejándolo solo de nuevo.

 

 

Espero que alguien más entrara y cuando eso no sucedió se acostó de lado, tenido cuidado con sus ataduras que comenzaban a rozarle mucho la piel, lastimándolo, aun así, trató de dormir, sus nervios se lo pedían y tal vez al despertar se sintiera mucho mejor.

 

 

*

*

*

 

 

Cuando Sasuke recobró la conciencia —aún un poco aturdido—, y lo primero que vio fueron unos barrotes, se dio cuenta de que estaba en una jaula para animales grandes.

 

 

Se sostuvo de los barrotes queriendo mantenerse en pie, solo llevaba unos pantalones, —al parecer sus zapatos y camisa habían sido quitados—, y su cabello estaba despeinado.

 

 

Se golpeó tontamente contra las paredes de la jaula. Parecía que era un lugar de peleas clandestinas de animales, no le sorprendería estar en uno de los inframundos que las mafias tenían como entretenimiento.

 

 

Hombres en sus formas animales matándose entre sí en una pelea callejera.

 

 

Y él… ¡Maldición! Él estaba en una de ellas. Cuando recobró un poco más los sentidos dos hombres se metieron a la jaula para empujarlo hacia una pequeña arena, si bien no había un público, estaban casi todos los que conformaban ese clan de yakuzas, sonriendo burlones y expectantes ante la escena sangrienta que se iba a presentar.

 

 

El cayó de lleno contra la arena, comiéndosela, y con un poco de dificultad se levantó, quiso salir de la arena, pero las puertas de salida fueron cerradas mientras que por el otro lado entró un hombre grande, tanto que parecía medir más de dos metros.

 

 

—¡¡Ragnarök va a disfrutar esto!! —gritó el hombre.

 

 

—¡¡Sköll!! ¡¡Sköll!! —comenzaron a gritar todos apoyando a su luchador.

 

 

Sasuke lo miró mejor, claro que no parecía asiático, el tipo era alto y fuerte, su piel era clara y su cabello de tono rojo anaranjado, llevaba barba y unas largas trenzas, tenía que ser de otro país.

 

 

—Levántate hombre —escupió al suelo y comenzó a frotar sus manos, Sasuke miró sus ojos, notando unos ojos demasiado claros.

 

 

El hombre lo empujó y él se golpeó contra las paredes haciendo que todos ahí se rieran sin pena alguna y él se sintió mal, lo estaban humillando, se aprovechaban de la pesada droga que todavía estaba en sus venas.

 

 

Trató de pelear así, pero no podía, era inútil, sólo podía recibir los golpes cada vez más fuertes, dejándolo con heridas. Todos ahí gritaban eufóricos al ver como el nórdico lo golpeaba.

 

 

Sasuke rugió enfadado y cambió a su forma de tigre, gruñó fuertemente dejando a todos callados mientras enseñaba sus grandes dientes y comenzaba a caminar en círculos viendo a su presa, sin embargo, el nórdico sonrió de lado y el lugar volvió a llenarse de ruido.

 

 

Comenzaron un suave coro de “Sköll, Sköll, Sköll”, todos al unísono, para después ir aumentando el volumen. Cuando el nórdico levantó las manos, se transformó en su animal y Sasuke tuvo que retroceder al ver al enorme oso negro que estaba frente a él.

 

 

Sus largas garras estaban a la vista y todos vitorearon felices al ver a su luchador en su forma animal, entonces ambos se lanzaron uno contra el otro. Lo primero que Sasuke sintió fue las fuertes garras del oso incrustadas en su espalda, por lo que rodó llevándose al oso con él. Ambos se revolcaban dándose zarpazos, era lo más puramente salvaje que alguna vez Sasuke había hecho.

 

 

Los dientes clavándose en la piel contraria y todo dándole vueltas, el oso golpeó fuertemente su cabeza contra el suelo, dejándolo atontado, ambos estaban gruñendo marcando su maldito territorio.

 

 

Cuando el oso saltó encima de él con afán de acabarlo, Sasuke se impulsó y clavó sus dientes fuertemente en su garganta, él nórdico gruñó fuertemente por el dolor y comenzó a sacudirse para quitárselo de encima, si bien, el oso era más grande Sasuke, este incrustó sus garras de felino reteniéndose bien de su piel.

 

 

El oso lo golpeó contra las paredes de la arena, pero aun así no se soltó y siguió resistiendo, apretó más su mandíbula y jaló su cabeza para atrás arrancando un gran pedazo de la garganta del oso. Todos en la arena se quedaron callados y el oso cayó al suelo desangrándose.

 

 

El tigre de Sasuke botó el gran pedazo de carne, pero su pelaje blanco ya se había llenado de la sangre del contrario, toda su boca escurría ese líquido y así enseñó los dientes.

 

 

Se transformó en humano y en su cuerpo desnudo fueron claras las heridas que había recibido, aún sangraban, sin embargo, toda su cara y boca estaban llenas de sangre del nórdico, proporcionando una imagen muy espeluznante.

 

 

*

*

*

 

 

Lo despertaron de manera un tanto brusca, pero no se quejó ya que no había sido con violencia. Por el fuerte aroma supuso que era un Alfa, este lo cargó como princesa fuera de esa gran habitación donde había estado, prefirió no hablar, tenía miedo de decir algo que los conllevara a usar la violencia con él, el dolor había mejorado y estaba agradecido con el pequeño Omega pelirrojo por ayudarle.

 

 

Pararon después de un rato, lo pusieron en una cama muy dura y pequeña y luego le quitaron le vendas de los ojos, viendo frente a él a uno de los Alfas que lo había secuestrado.

 

 

—¿Vas a hacerme daño? —murmuró y el Alfa lo volteó a ver.

 

 

—¿Quieres que te mate? —enseñó sus dientes de tiburón y Naruto negó rápidamente haciendo sonreír al Alfa—. Entonces no me incites.

 

 

—¿Serás bueno conmigo? —dijo inocente y el Alfa lo vio por un rato.

 

 

—No soy bueno, Omega…

 

 

—Naruto.

 

 

—¿Qué? —se acercó para quitar las ataduras rápidamente.

 

 

—Me llamo Naruto —sonrió un poco y el Alfa quiso sonreír también, pero estaba ahí por órdenes de su jefe, es más, ni siquiera tenía que estar hablando con el Omega.

 

 

—Ya me voy, sigue durmiendo.

 

 

El Alfa se dio la vuelta para huir de ahí, pero la pequeña mano del Omega agarro su camisa.

 

 

—Tu nombre —infló los mofletes—. No es justo, yo me presenté.

 

 

El Alfa se jaló, soltándose, y caminó hacia la puerta, pero antes de salir lo volteó a ver de reojo, acostándose en la cama listo para seguir durmiendo.

 

 

—Kisame…

 

 

Y vio los bonitos ojos azules brillar con gusto.

 

 

--------------------------------------------------

 

 

—¡Kisame!

 

 

—¡¡Voy!!

 

 

Kisame entró a su casa, después de haber movido al pequeño rubio había quedado con un vacío en el estómago, no sabía lo que iba a pasar con él, lo imaginaba, pero no quería pensar que fuera cierto, él no era tan cercano a su jefe como lo era Kakuzu, pero seguía órdenes.

 

 

Ya no quiso pensar más en eso, pero fue inevitable al ver a su hermosa hija ir corriendo de aquí para allá con sus pequeñas piernitas, era una niña vigorosa de 3 años, y además una linda Omega.

 

 

Quizá por eso era el más blando de todo Akatsuki, ya que él tenía familia, y solo de pensar en que a su hija le pudiera pasar algo como lo que le ocurría al rubio, se le revolvía el estómago, nunca en su vida dejaría que le hicieran algo a su dulce niña.

 

 

Era idéntica a su madre, cabello rosa junto con unos lindos ojos plateados como los suyos, si bien, él era un tiburón y su Omega un lindo pájaro, su hija había salido como un pájaro también y estaba orgulloso de ello.

 

 

Vio a su esposo salir con un delantal para luego correr hacia él, restregándosele un poco. Kisame olisqueó a su Omega y lo apretó fuerte contra sí mismo.

 

 

—¡Papi! ¡¡Papi!!

 

 

Su pequeña demandaba mucho amor, ellos lo sabían, así que su esposo sonrió de lado y se colgó de su alfa, sacándole la lengua a su hija.

 

 

—Es hora de papi y mami, así que ¡shuu! —la corrió.

 

 

La niña comenzó a hacer pucheros y ambos rieron, Bara se alejó un poco y así Kisame bajó hasta la altura de su hija para besar su frente.

 

 

—Ve a jugar con tus muñecas —dijo suavemente.

 

 

—Carros —dijo la niña.

 

 

Kisame sonrió y asintió, así su hija se fue a su cuarto de juegos y ellos dos, sonrieron y se encargaron de tener un encuentro rápido.

 

 

Cuando ambos terminaron, Bara estaba en su pecho y él lo acariciaba suavemente, entonces … lo miró con sus grandes ojos verdes.

 

 

—Algo te preocupa Alfa.

 

 

—No.

 

 

—¡No me vengas a mentir!

 

 

Su esposo podía ser el ave más fiera que había, así que lo tranquilizo un poco, él era un hombre de caricias rudas, pero aun así trataba de ser tierno.

 

 

—Hay un Omega y… creo que lo matarán.

 

 

—¿¡Qué!? ¿¡Por qué!?

 

 

—Órdenes del jefe.

 

 

—¡Tienes que ayudarlo!

 

 

—Bara, es imposible —suspiró—. ¡Iría contra las reglas!

 

 

Bara se separó de él y lo miró serio, cruzó sus brazos sobre su pecho desnudo y frunció el ceño.

 

 

—No te gustaría que tu hija pasara por lo mismo, ¿¡verdad!?

 

 

—Lo sé —dijo exasperado—. No ocupes a mi cría para hacerme cambiar de opinión.

 

 

—Solo piénsalo —dijo suave. Se levantó con su desnudez y comenzó a buscar en sus armarios, hallando un papel con un número—. Si cambias de opinión, llámale.

 

 

—¿¡¡Por qué tienes su número!!? —un gruñido fuerte se atravesó por su garganta.

—Lo dejé todo por ti, pero no iba a cortar mis raíces, así como así.

 

 

El Omega se puso una bata y salió rápido de la habitación.

 

 

--------------------------------------------------

 

 

Los días iban pasado, mientras él veía e interactuaba más con Naruto, sabía que el chico no tenía la culpa de nada, además gracias a Sasori se enteró de un poco más de su historia, aunque no tanto como le hubiera gustado, pero sabía que el chico iba a pagar por algo que no le correspondía, y, si estaba en sus manos salvarlo de un cruel destino, lo haría.

 

 

Por supuesto que tenía miedo por su familia, si Orochi llegaba a enterarse de su desfachatez seguro iría tras ellas. Al menos no eran tan bruscos con el Omega rubio, pero a veces era atacado por pura diversión y eso, tampoco le gustaba.

 

 

Se recostó contra una pared y suspiró fuertemente, en serio debería estar loco si iba a hacer algo como eso, que Dios lo amparara, porque si el diablo aparecía se iba a ir todo a la mierda.

 

 

Pensó también que lo haría por Itachi, por su descuidado amigo que no había podido cuidar a su cría.

 

 

Agarró su celular y marcó el número que Bara le había dado, escribiendo rápidamente un mensaje con pocas palabras.

 

 

Le dio enviar, esperando no equivocarse.

 

 

*

*

*

 

 

Su celular vibró y abrió el mensaje que le había llegado. El cuarto estaba a oscuras y lo único que alumbraba su rostro era la pantalla de su computadora.

 

 

Sonrió de oreja a oreja viendo el mensaje.

 

 

“Estoy adentro

Kisame’’

 

 

—Maravilloso —murmuró.                                            

Notas finales:

y que tal? espero sus rw con ansias

se preguntaran quien es bara?

pues den clik y vean.

Bara

y el es el hermano gemelo de...

sakura

asi que les presento a los gemelos haruno!!!

aqui hay una imagen de kisame y bara.

imagen

y esta es la imagen de sasuke en la pelea.

pelea.

solo imagen que tiene pelaje blanco y estamos en la misma sintonia.

si tienen preguntas hacerlas, nos vemos en la proxima.

les quiero mucho!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).