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Jeho divoké oči (Ojos salvajes) por yue-sama

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Notas del capitulo:

hola!! muchas gracias por sus rw, ya fueron contestados.

hoy estoy de muy buen humor, mi hermana se graduo!! 

espero les guste mucho este cap.

aqui el cap.

 

Naruto miró a su padre ayudándolo a bañarse con calma, la verdad es que a él no le importaba ayudar a su papá, a pesar de que durante todos los días que había pasado ahí no habían visto ninguna mejora, pero, aun así, de cierto modo Minato se había acostumbrado a la presencia del joven Omega, aunque al día siguiente no se acordara de él.

 

 

Con mucho cariño le enjuagó el cabello mientras Minato lo miraba fijamente, a veces Naruto pensaba que iba a salir de la bruma, se acordaría de todo y podrían conversar tranquilamente, que, de alguna manera, por milagro de Dios, su cerebro funcionaría bien.

 

 

—¿Por qué eres tan amable conmigo?

 

 

—¿Por qué no serlo? —preguntó Naruto mirándolo también.

 

 

—Eres joven, y de hecho ¡eres hermoso! ¿Por qué cuidarme a mí?

 

 

—Usted también es hermoso, ¿por qué no quería venir a admirarlo?

 

 

Minato lo miró duramente y luego una pequeña sonrisa se asomó por sus labios, Naruto le ayudó a envolverse en la toalla para luego llevarlo al cuarto a que se cambiara.

 

 

—Eres un chico raro —informó más cómodamente.

 

 

—Creo que me lo ha dicho muchas veces desde que vengo de visita…

 

 

—¿Vienes muy seguido?

 

 

—Supongo que sí —dijo con una sonrisa.

 

 

—Lo siento mucho —pudo ver el momento preciso en el que el ánimo de Minato bajo—. ¡Lo siento por olvidar tantas cosas!

 

 

—No se presione por favor —dijo suavemente—. No me importa volver cada día y presentarme de nuevo, con tal de conocerlo y verlo sonreír.

 

 

Minato se llevó una mano al pecho y quiso llorar, aquel chico era muy amable, nunca antes se había sentido así de querido. Se sentó en la cama buscando calmarse y Naruto le pasó unas ropas.

 

 

—Saldré un momento y volveré, solo iré por su comida y luego podremos ir a ver los jardines.

 

 

Minato asintió y vio como aquel rubio salía de ahí, él solo suspiró queriendo golpearse la cabeza para poder recordar… Odiaba aquel vacío que a veces sentía.

 

 

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Naruto regresó con los platos de comida y entró al cuarto encontrando a su papá enfrente de la ventana leyendo un diario, supuso que era de él, así que no le dio mucha importancia y solo dejó los platos, captando la atención de Minato.

 

 

—A veces siento que quien escribió esto era otra persona, otras veces pienso que esto es lo único que me haría recordar mi pasado y todo lo que pasé…

 

 

—¿Recuerda algo? —preguntó, consiguiendo que Minato sonriera radiante.

 

 

—En estos momentos se quién soy y quienes me rodearon…

 

 

—¿¡Es un día bueno!? —dijo feliz Naruto.

 

 

—Parece ser que sí, a veces pienso que tus visitas me hacen bien.

 

 

—¡Es una buena muy buena noticia!

 

 

Minato se acercó a él y agarró su cara para verlo fijamente, lo olisqueó un poco mientras Naruto se dejaba hacer, era la primera vez después de mucho tiempo que Minato hacía algo así, y pudo escuchar claramente cuando el rubio mayor comenzó a dar una especie de ronroneo.

 

 

—Te siento parte de mí… Eres mío, ¿verdad?

 

 

—Sí —dijo casi sin voz y Minato lo soltó viéndolo fijamente como siempre hacía.

 

 

—Eres mi cachorro… y estás tan grande… y tú me encontraste a mí —a Minato se le llenaron los ojos de lágrimas y sin poder evitarlo lo abrazó, acunándolo en sus brazos provocando que Naruto se sintiera flaquear—. Eres mi Menma…

 

 

—No, Minato —dijo una voz atrás y Minato lo soltó un poco—, él ahora se llama Naruto —completo la Sra. Mornin.

 

 

—Naruto —dijo sonriendo mientras lloraba—, un nombre raro para mi cachorro. ¡Eres tan hermoso!

 

 

Naruto se restregó un poco contra él, dejándose impregnar con el suave aroma de su padre Omega y ronroneó libremente, sintiendo una fuerte conexión con su papá.

 

 

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A pesar de la hermosa tarde, el día había tenido un final triste, así como Minato había hecho click, se había desvanecido y no recordaba nada, pero, Naruto había aprovechado todos lo minutos lúcidos que tuvo su padre hablando de tantas cosas con él, una de ellas fue sobre su Alfa… Minato parecía ilusionado al verlo hablar de Sasuke de esa manera tan enamorada, pero era inevitable.

 

 

Bajó del taxi y buscó las llaves de la casa de Tsunade, al entrar los vio en la mesa comiendo, ambos lo saludaron y Naruto brincó atrapando al lindo leoncito que andaba de arriba para abajo, huyendo de sus papás.

 

 

—Cachorro travieso —dijo Naruto al ver a Daichi pegar pequeños rugiditos de enojo por no dejarlo andar a 4 patas.

 

 

—Es un rebelde —confesó Tsunade—. No dejó que Dan lo alimentara, y eso solo puede significar que tendremos otro Alfa —dijo orgullosa.

 

 

—Otra pequeña bestia como tú ¿eh? —dijo pegándole suavemente en la naricita causando que el cachorro empujara su dedo con sus patitas y enseñara esos tiernos dientecitos que apenas salían.

 

 

—¿Qué tal tu día? —preguntó Dan con una sonrisa.

 

 

—Fue un día muy bueno.

 

 

Y con toda la ilusión del mundo contó todo lo que ocurrió y tanto Dan como Tsunade sonrieron felices al saber que Minato había reconocido a Naruto, entonces Tsunade recibió un mensaje y lo leyó.

 

 

—Oye Naru —dijo interrumpiendo sin querer—, Sasuke te está esperando afuera

 

 

—¿¡Qué!? —dijo alarmado Naruto.

 

 

—Dan, necesitamos comprarle un celular —dijo la Tsunade logrando que el pequeño Omega asintiera con gracia.

 

 

—¡Dile que espere! —gritó mientras salía corriendo a su cuarto para poder cambiarse y ponerse bonito, eso causó una gran sonrisa en Dan.

 

 

—Yo le diré, cuida a Daichi —Dan salió afuera de la casa y vio a Sasuke recostado en su carro, al notarlo el Alfa lo saludó rápidamente—. El ya viene, acaba de regresar de ver a su padre.

 

 

—No quise ser inoportuno.

 

 

—Nada de eso, Naruto siempre te recibirá con una enorme sonrisa.

 

 

—Aunque no era así hace tiempo —recordó Sasuke.

 

 

—Fue porque lo dejaste después de tener relaciones, pero cuando le explicaste lo que pasó, él comprendió y volvió a ser el Omega meloso que siempre es contigo.

 

 

Sasuke asintió recordando, el día después de encontrar a Itachi había ido a hablar con Naruto, pero el Omega apenas había querido verlo, estaba molesto por haberlo dejado después de hacer el amor, y claro que comprendía a su Omega, pero cuando le explicó —a medias—, lo que había pasado, Naruto lo había perdonado, ya que entendía que era su trabajo después de todo.

 

 

Sasuke iba a seguir hablando con Dan, pero las palabras se le atoraron en la garganta al ver lo bonito que se había vestido Naruto para salir con él.

 

 

—Bien, los dejó. Cuídense —dijo Dan, dándole a Naruto un suave beso en la mejilla para luego entrar a la casa.

 

 

Naruto asintió y fue a los brazos de Sasuke, buscando rápidamente su aroma. Sasuke besó su cuello y Naruto lo apretó más contra él, sus labios se buscaron y los suaves mordiscos que se dieron los dejaron ronroneando a ambos.

 

 

—Es un camino largo —informó Sasuke—, así que será mejor apurarnos si queremos llegar antes de la madrugada.

 

 

Naruto asintió para luego subirse al carro.

 

 

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—¡Está muy oscuro!

 

 

—Ya… ya voy.

 

 

Entre risas y tropezones Naruto y Sasuke entraron a la casona, pocos segundos después el Omega cayó de rodillas al tropezar con algo y Sasuke lo buscó entre las sombras.

 

 

—Oye —rio más fuerte—, ¿dónde estás?

 

 

—Esto no es gracioso —se lamentó Naruto agarrándose de lo que pensaba era Sasuke.

 

 

—¡Pero no agarres mi trasero de esa manera! —rio más fuerte y pudo apostar que Naruto estaba sonrojado a mas no poder—. Sí que tienes manos fuertes ¿eh?

 

 

—Deja de burlarte —se levantó apurado y Sasuke lo tomó de la cintura en medio de toda esa oscuridad.

 

 

Caminaron a tientas, con sus labios buscándose sin tregua y probando el sabor de los contrarios, causando que Naruto gimiera aferrándose con más fuerza a su Alfa.

 

 

Cuando al fin detuvieron su caminar y Sasuke se despegó de sus labios relamiéndose, Naruto estuvo a punto de quejarse, pero en ese momento Sasuke le dio la vuelta y el rubio se quedó sin aliento al ver la hermosa vista que tenían.

 

 

—Debía traerte a este lugar, que si así lo quieres puede ser nuestro…

 

 

Naruto se estremeció, era completamente hermoso, se podía escuchar el romper de las olas contra las rocas y la luna llena dejaba ver el paisaje entre toda la oscuridad, mostrándose ante sus ojos el hermoso mar y la tranquilidad del lugar.

 

 

—¿Nuestro? —reaccionó un poco lento.

 

 

—Esta residencia es mía —informó—, pero nunca la quise porque sabía que este lugar era mágico y si no lo compartía con alguien no iba valer la pena tenerlo. Por ello estuve a punto de venderla.

 

 

—¿Me estas pidiendo vivir aquí, contigo?

 

 

—Y formar una linda familia —dijo más que seguro.

 

 

—¿Matrimonio?

 

 

—A la manera menos convencional, pero sí.

 

 

—¿¡Qué!? —pegó un chillido—. ¿¡Me estás pidiendo matrimonio!? ¿Quieres casarte conmigo?

 

 

Sasuke rió contra su oreja y lo volteó para verlo a los ojos.

 

 

—Sí quiero… —dijo Sasuke besándolo rápidamente—. Y no fui yo quien lo preguntó, ¡vaya que tengo un Omega valiente! Hasta trajo unos anillos que tiene guardados en su chaqueta.

 

 

—¿Qué…? —dijo sin voz, confundido, llevó sus pequeñas manos a su bolsa y notó una cajita, por lo que se le fue la respiración, ¡Sasuke tenía planeado todo eso!

 

 

Sasuke agarró sus manos suavemente y besó cada una de ellas, luego abrió la cajita dejando ver dos hermosos anillos.

 

 

Naruto se sintió flojo, sonrojándose cuando Sasuke tomó nuevamente sus manos para ponerle el anillo, luego vio como el Alfa agarró el otro y se lo puso en el dedo correspondiente, despacio y sin prisa, lo vio brillar en la oscuridad.

 

 

Su corazón acelerado no lo dejaba tranquilo, más aún cuando Sasuke volvió a besarlo y con cuidado lo pegó contra el ventanal.

 

 

*

*

*

 

 

Gaara maldijo al golpearse sin cuidado contra una mesa, estaba en un hotel y después de eso viajarían a su luna de miel, habían pasado unos días desde su boda con Sai, y, aunque le hubiera gustado estar con su marido, este no se había presentado ante él después del matrimonio y le molestaba no saber porqué Rasa no dejaba en paz a Sai, pero supuso que cuando el Alfa llegara al hotel para recogerlo e irse a la luna de miel todo se calmaría y al fin tendrían tiempo para ellos dos.

 

 

Se acomodó el cabello y acarició su vientre, no lo podía evitar, desde que sabía que una vida estaba ahí, siempre hacía lo mismo, los síntomas de su embarazo al fin se estaban haciendo evidentes, y a veces le molestaba el malestar de querer vomitar todo, pero, por otro lado, se sentía muy feliz.

 

 

Como siempre odiaba sentirse dividido, no sabía cuándo sería el día en el que su persona y animal estarían de acuerdo.

 

 

Recogió sus maletas listas y escuchó los suaves toques en la puerta, por lo que fue directo a ella, encontrándose con los dos pozos negros de su pareja. No sabía muy bien cómo actuar con él, después de todo las únicas veces que cruzaron palabras fue para hablarse mal o faltarse al respeto.

 

 

—Siento el retraso, tu padre me mandó a una misión lejos de aquí, necesitaba información.

 

 

—Está bien, supongo.

 

 

—¿Estás molesto princesa? —preguntó Sai con un deje de diversión.

 

 

—¿Quieres que te golpee? —amenazó viéndolo mal y Sai sonrió de lado.

 

 

—Cuando quieras muñequito.

 

 

Gaara arrugó el ceño, entonces se volteó para agarrar sus maletas y luego se las tiró de mala gana, haciendo que Sai se golpeara.

 

 

—Ahí están mis demás maletas —dijo señalándolas y sin más salió del cuarto dejando a un Sai un poco divertido.

 

 

Cuando todas las maletas estuvieron por fin guardadas en el maletero del carro que los llevaría al aeropuerto, Sai subió tras Gaara con rumbo a su destino, pero una llamada rompió el silencio en la cabina y el Alfa contestó rápidamente, cambiando su cara apacible por una dura mientras sus ojos negros se volvían escalofriantes.

 

 

Al término de la llamada, Gaara lo miró fijamente exigiendo sin palabras que le dijera algo si es que él estaba involucrado, pero Sai le otorgó al silencio un poco más de tiempo y Gaara se sintió sofocado, aumentando su malestar al pasar de los segundos, ya que nada en la expresión del Alfa había cambiado y cada vez todo se ponía más tenso.

 

 

—Habla —demandó el Omega.

 

 

—Tu padre está muerto.

 

 

Gaara se quedó mudo, pero aun así no dejó ver cuánto le habían afectado esas palabras, no se iba a permitir que lo vieran débil nunca en la vida, solo una persona podía verlo así y ese no era Sai ni mucho menos el chofer del auto.

 

 

—Da la vuelta —dijo al conductor, pero al ver que no le hacía caso elevó la voz—. ¡Da la maldita vuelta!

 

 

Entonces el conductor paró y dio la vuelta para regresar por el camino antes recorrido.

 

 

Cuando llegaron a la vieja casa, Gaara se bajó sin el permiso de Sai y fue apresurado hacia adentro, varios de sus hombres lo miraron, pero después bajaron la cabeza, ahora todo el poder recaía en la pareja y a Gaara no le podía importar menos eso, se dirigió directamente a donde alguien supiera darle explicaciones.

 

 

— Gaara-sama —Temari estaba ahí—, lo encontraron en su despacho y…

 

 

Gaara salió directo al despacho, encontrándose a varios de los hombres de mayor nivel de su padre. Dentro de la habitación había un pulcro desorden, no parecía haber sucedido una pelea, todo estaba en su lugar, pero, cuando dirigió su vista al escritorio de Rasa, lo encontró ahí recostado, sosteniéndose la garganta con una mano mientras que en la otra sostenía una foto de toda la familia.

 

 

En ella se veía a Rasa abrazando a Karura y entre ellos estaba Kushina y Gaara… todos sonreían.

 

 

El Omega sintió unas fuertes ganas de vomitar, todo estaba lleno de sangre e incluso los papeles se había mojado con ella, de pronto se sintió desprotegido y muy mareado, pero segundos después sintió un pecho tocar su espalda sosteniéndolo antes de que cayera al suelo.

 

 

—Bien, tenemos que hablar —dijo Sai lentamente.

  

Notas finales:

Bien, bien, espero saber que les pareció el cap.

Todavía estoy pensando en hacer doble actualización la próxima semana, en todo caso estén pendientes por si me decido a hacerla, sería un especial y el cap que corresponde a la semana... pero ojo! todavía estoy decidiendo.

Aquí están las imágenes del cap.

dar clik para ver.

Casa pronto a ser uchiha namikaze.

casa 

anillos

el dibujo que mencione la vez pasada, me inspire en mi historia.

tigre

si tienen alguna duda por favor hacerla.

nos vemos.

 

 


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