-Se lo que están pensando, sin embargo como miembros de la asociación de cazadores es nuestro deber seguir las reglas con el fin de proteger la mayor cantidad de personas aun si esto significa sacrificar a algunos de nosotros. Todo sea por el bien común-
-¡Esto es ridículo, el no representa una amenaza para nosotros!-
Apretó los puños mientras veía al anciano frente a él.
-¡Así es! Zero no es una amenaza, él siempre ha sido un cazador, incluso nos apoyó contra la invasión de Rido Kuran y logro vencerlo.-
-Usted mismo lo ha dicho Kaien, logro vencerlo he incluso se le culpa de la muerte de la vampira sangre pura Shizuka Hio, no dudo que la asociación de vampiros hará algo al respecto sobre esto. Para ellos son muy valiosos sus sangre puras-
Hablo uno de los del consejo de ancianos.
-Supongo que saben lo que esto quiere decir. Nosotros no podemos entrometernos para defender a un vampiro que en cualquier momento caerá al nivel E.-
-Así es. Él no es más un cazador. Ahora pertenece a ellos-
Agrego una mujer
-¡Él es un cazador!-
Defendió Yagari.
-No. Él era un cazador.-
-¡¿Estás diciendo que lo abandonaremos después de que lucho tanto tiempo de nuestro lado?!-
-Usted debe entender cazador Yagari Touga. En el momento en que Zero fue mordido por un vampiro ya no pertenecía más a nosotros. Sin embargo el cazador kaien Cross aquí presente nos ocultó la información y nosotros lo seguimos utilizando como cazador sin saber el riesgo que corríamos. Esto me parece una irresponsabilidad muy grande viniendo de un notable cazador. Aunque al parecer usted también se enteró de esto ¿No es así?-
-Así es-
Recordó como había llegado a la academia y había visto a su alumno esforzándose por no caer al nivel E y le había disparado.
Apretó los puños.
-¡Pero él nunca cayo al nivel E!-
Agrego.
-Solo es cuestión de tiempo, pero lo hará y nuestras reglas deberán respetarse. Cuando un cazador es mordido por un vampiro se le da la pena de muerte ya que al caer al nivel E se vuelven más peligrosos que los vampiros normales que caen en la locura.-
Soltó otro miembro de la asociación.
-Debo recordarles que ahora mismo el probablemente este cayendo en esta condición, por lo tanto será agregado a la lista negra y será cazado hasta que su vida sea tomada-
Kaien apretó los labios y las manos, no podía permitir que su hijo fuera asesinado por su propia organización, tenía que hacer algo.
-¡Presidente por favor reconsidérelo! Yagari y yo lo mantendremos a raya y será nuestra responsabilidad-
-Entiendo…. ustedes son muy valiosos para la organización por lo que les pediré que se mantengan fuera de esto, no necesitamos perder más cazadores en este momento-
Pareció considerarlo unos momentos mientras veía a los dos hombres frente a él, sería un problema si estos se ponían en contra de su propia asociación siendo estos los cazadores más fuertes.
-¡No puede hacer esto!-
Yagari y Kaien se pusieron en guardia listos para atacar si era necesario y el presidente de la asociación noto esto, mirándolos seriamente mientras los demás miembros murmuraban cosas entre sí.
-Te equivocas es por el bien de toda la organización-
Soltó la mujer y ambos la miraron furiosos haciendo que esta diera un respingo aterrada.
El presidente los miro desde su posición.
-Sin embargo debido a ustedes y considerando los hechos, he decidido que en unos días será enviado un investigador para ver al joven Kyriuu, si no parece correr peligro de caer al nivel E se le concederá una prórroga de tiempo, de ser lo contrario se le mandara asesinar inmediatamente-
-Entiendo, estamos de acuerdo-
Soltó Kaien mientras Yagari lo miraba seriamente.
-Bien siendo así no veo más problemas. Ahora el siguiente tema es sobre la camarilla de vampiros.-
Ambos lo miraron fijamente.
-Aún no sabemos una decisión concreta del consejo de vampiros sobre el joven Zero, al parecer querrán que les sea entregado para su destrucción por el crimen cometido contra la sangre pura de la familia Hio y también lo culpan de la muerte de Rido kuran sin embargo este último al ser considerado un traidor contra su propia especie al intentar atacar a su rey sangre pura ha sido descartado. En cuanto llegue la decisión de los vampiros se les comunicara para discutir los términos.-
Ambos asintieron dando una pequeña reverencia y salieron del lugar. No podrían hacer más por el momento, solo regresar a casa para apoyar a su hijo. Habían perdido muchos días intentando llegar a un acuerdo con esos ancianos.
-Esto será un problema con el consejo de vampiros-
Hablo el anciano presidente regresando a su asiento con todas las miradas puestas en él.
-No creo posible que perdonen a un nivel E por matar a dos vampiros sangre pura, siendo estos tan escasos, habrá que prestar especial atención a sus movimientos-
Agrego otro miembro de la asociación.
-No puedo creerlo ¿Cómo se atreven a querer matar a mi hijo?-
Murmuraba Kaien caminando de un lugar a otro de manera nerviosa y enfadada.
-Cálmate Cross, yo también estoy molesto pero por el momento no podemos hacer nada-
Cross suspiro y se acercó al otro cazador para sentarse a un lado de él.
-Me preocupa la decisión que tome el consejo de vampiros-
Miro a Yagari y este parecía mirar al suelo mientras recargaba sus brazos flexionados en sus piernas y apoyaba en estos su cabeza pensativo.
-Solo podemos esperar, una vez que den a conocer sus intenciones con Zero podremos hacer algo al respecto, hasta entonces no podemos actuar precipitadamente o podríamos ocasionar una guerra entre vampiros y cazadores-
Kaien lo miro asustado y después suspiro. Tenía razón por el momento no podían hacer nada.
-También me preocupa el tiempo que hemos estado fuera, tenemos que regresar mañana mismo, Zero está solo y me preocupa la manera en que lo dejamos-
Se recargo en el hombro del otro cazador y este lo miro sonriendo y pasando el brazo sobre sus hombros para abrazarlo.
Le gustaba que se preocupara más por Zero y le prestara más atención ahora que la chiquilla sangre pura ya no estaba.
-Yo también estoy preocupado por el, ese idiota aprendiz necesita recuperarse pronto y entrenar más para no caer en la locura, si no lo ha hecho en todo este tiempo no creo que lo haga justo ahora-
Acaricio el pálido rostro sobre su hombro, los ojos dorados miraron al suyo azul grisáceo, paso su mano por los cabellos rubios y largos y se fue acercando hasta unir sus bocas en un beso suave, su mano bajo por su cuello, desabrochando el abrigo negro y largo que portaba hasta deshacerse de él.
Metió una mano bajo el suéter negro de cuello alto que llevaba, acariciando la tersa piel pálida de su pareja, terminando el beso para recorrer con sus labios el cuello dando pequeños besos.
Cross lo miro con las mejillas levemente rojas y se sacó el suéter negro frente al cazador, este agrando su sonrisa y se deshizo de su preciada chaqueta de cuero y la camisa blanca que llevaba bajo esta y volvió a sentarse en el sofá de la habitación del hotel donde estaban, atrayendo de un brazo con él a Kaien.
Habían sido días muy difíciles de ir y venir a la asociación para discutir con los ancianos sobre el futuro de su aprendiz. Le hacía falta más tiempo con el cazador puesto que pronto volverían a arreglar todos los problemas en la academia y la situación de Zero.
Se concentró en la piel frente a él besando cada parte y lamiendo.
Se encontraba parado frente a Yagari con una pierna flexionada en el sofá apoyándose y él lo apresaba de la cintura con ambas manos acariciándolo, las manos se movieron deshaciéndose del cinturón y desabrochando el pantalón negro.
Lo miro, amaba aquel ensortijado cabello negro y el hermoso rostro, este lo miro con una leve sonrisa y el ojo visible azul grisáceo, no pudo evitar acariciar su rostro y este le beso el abdomen bajándole los pantalones junto a los bóxer.
Sintió su rostro arder, una de las manos se posó en su trasero apretándolo mientras la otra toco su miembro ya despierto para acercar su boca y comenzar a lamerlo.
-Ahh.. ah Yagari…-
Acaricio los cabellos negros con cariño y este engullo su miembro por completo comenzando un vaivén con su boca.
-¡AHHhh…ahh! –
Le costaba mantener el equilibrio y se sostuvo con sus manos apoyadas en los hombros de su pareja, su cuerpo estaba completamente caliente y las sensaciones de placer lo invadían, el ritmo aumento y se sujetó con fuerza de los hombros arqueando un poco la espalda.
Yagari lo miro y mientras una mano sujetaba con fuerza la cadera frente a él, la otra la deslizo hasta la entrada de su cazador jugueteando con entrar en ella para después adentrar uno de sus dedos en esta lentamente.
El cuerpo de Kaien respingo por la intromisión mientras respiraba entre cortado sintiendo como la lengua jugaba con su miembro, sintió todo su cuerpo temblar levemente cuando el segundo dedo entro en él, intento relajarse ocultando un pequeño atisbo de dolor en su rostro.
El vaivén de aquella boca aumento, haciendo imposible no retorcerse de placer mientras intentaba no perder el equilibrio y caer, la mano apreso con fuerza su cadera sujetándolo para evitar que se moviera, estaba a punto de correrse y el tercer dedo entro mientras jugaban dentro de él, la boca seguía haciendo su trabajo.
-ya..ahh Yagari…-
El mencionado lo miro sin despegarse, tenía una vista magnifica y sorbió con fuerza el miembro escuchando un pequeño grito de su pareja para después soltar unos cuantos gemidos apunto de correrse y el agarre en sus hombros aumentaba causándole un poco de dolor y evitando que Kaien cayera.
Libero su semilla dentro de aquella boca y este lo trago para después besar la punta del miembro.
Miraba el techo intentando calmar su respiración agitada y se dejó caer sobre Yagari quien lo tomo y lo acomodo en el sofá besándolo profundamente mientras se posicionaba encima.
Lo separo un poco colocando sus manos en el pecho de este para apartarlo recibiendo una mirada de duda del mayor a lo que solo sonrió.
Se sentó en el sofá y respiro profundamente para después sonreírle a su pareja quien lo miro sin entender.
Se levantó del sofá y se inclinó sobre él, recostándolo y poniéndose ahora él arriba.
El cabello rubio acaricio su rostro y los ojos dorados lo miraron un momento para después bajar y besar su cuello tímidamente, subió un brazo y acaricio la estrecha cintura de Cross.
Fue bajando hasta el grueso cinturón el cual desabrocho y quito ante la atenta mirada de Yagari quien se apoyaba con un brazo en el sofá quedando semi acostado, desabrocho los pantalones y los bajo lentamente junto a los bóxer azul marino, dando un pequeño beso al miembro despierto.
-Mi turno-
Pronuncio.
Yagari lo miro sonriente y entrecerró los ojos, su pareja podía ser muy sexy cuando quería, su hermosa cara frente a su miembro era algo digno de ver, la pequeña lengua salió un poco tímida lamiendo de arriba abajo y dando pequeños besos por la extensión mientras una mano la sostenía, engullo de apoco el miembro y escucho un leve gemido ahogado salir de la boca de su amante, Kaien sabia como enloquecerlo cuando se lo proponía.
Lamio la punta de la caliente extensión, mientras su mano la recorría de arriba a abajo y se colocó el cabello de lado engullendo el miembro frente a él mientras sus ojos dorados veían el rostro del cazador voltear al techo.
Sonrió comenzando el vaivén lamiendo y ayudado por su mano tornándose cada vez más rápido.
Escuchando leves gemidos roncos de su pareja.
Yagari lo miro y esa pequeña boca engullir su gran miembro definitivamente lo mataba, el sonrojo en su mejillas, los hermosos ojos dorados entrecerrados que lo miraron, mientras el cabello rubio se movía sutilmente de arriba abajo por la acción.
-Suficiente-
Soltó.
Sintió una mano acariciar su cabello para después ser jalado bruscamente de este hacia arriba atrayéndolo por la nuca para unirse en un beso salvaje y violento siendo cambiado de posición quedando ahora el recostado sobre el sofá con Yagari arriba.
Se separaron un poco y noto la mirada pervertida frente a él. Una agresiva mordida en su labio lo hizo estremecer y soltar un gemido de dolor para después ser besado de manera profunda y lenta.
Las manos recorrieron su espalda y su cadera hasta llegar a su miembro jugando un poco con este mientras se acomodaba entre sus piernas.
-Ya no puedo esperar-
Posiciono su miembro en la pequeña entrada y lentamente fue entrando en él, los gemidos no se hicieron esperar y aguardo un poco a que se acostumbrara, sintiendo como era engullido por esa deliciosa entrada caliente y apretado con fuerza.
Su respiración se descontrolo por la invasión y el dolor recorrió su cuerpo, su pecho subía y bajaba intentando calmarse, consiguió calmarse un poco y miro a Yagari frente a él, quien parecía intentar controlarse.
Levanto una mano hacia su rostro acariciándolo, pasando sus dedos rosando el parche que cubría aquella herida. Este se acercó para besarlo y comenzar a moverse lenta mente dentro de él.
No era la primera vez que lo hacían pero no lo habían hecho en un tiempo por todo lo sucedido, por el ataque a la academia y los diferentes problemas que surgían. Su pareja seguía tan estrecha y deliciosa como la primera vez y ese exquisito y sensual cuerpo al igual que los gemidos que salían de este lo excitaban bastante.
Los gemidos de placer inundaban la habitación y comenzó a moverse más rápido dentro de él, tornando las embestidas fuertes y rápidas.
Kaien sentía que se desasía en placer abrazado fuertemente a su cuello.
Ambos se miraron y las embestidas aumentaron al igual que las caricias en su miembro, hasta que ambos se corrieron uno entre ambos cuerpos y el otro en su interior.
-Te amo-
Pronuncio Yagari aun sin deshacer el abrazo y Kaien se sorprendió un poco para después sonreír y pegar su cabeza al hombro contrario un momento intentando regularizar su respiración
-Yo también…Te amo-
Llegaron al aeropuerto por fin regresarían a casa. Las miradas se fijaban en ellos y suspiro mirando a Yagari quien llevaba su chaqueta de cuero estilo vaquero y su sombrero. Parecía que le costaba mucho trabajo pasar desapercibido. Les esperaba un largo viaje pero al fin regresarían.
Felicitaciones por su compromiso rey Zero.
Hablo un hombre realizando una reverencia frente a él, mientras sonreía y Zero lo miro.
Vlad se acercó a él y el hombre se puso nervioso y se retiró rápidamente.
-Era uno de los mensajeros de Alemania, al parecer no están satisfechos con el resultado-
Tomo una de sus manos y Zero se tensó un poco. El rey de Alemania… lo recodaba aquel hombre rubio de sonrisa pervertida.
-No solo eso, parece que Francia también desaprueba nuestro compromiso.
El hombre de cabello rizado y oscuro. Frunció el ceño.
¿Por qué no estarían de acuerdo? Estos eran países aliados necesarios para apoyar a su país por sus grandes potencias militares.
Vlad acaricio su rostro sorprendiéndolo un poco.
-No pienses demasiado en ello, Hungría y Eslovaquia me han cedido su territorio, al igual que Moldavia. Ya que estos temen una guerra contra España y Francia. Mientras que Polonia pronto intentara tratar contigo para evitar una creciente guerra entre él y Alemania.
Lo miro en silencio fijamente. ¿Tan mal estaba la situación entre los países aliados?
Lo hizo dudar, entonces ¿En qué países aliados podía confiar?
Le estaba tomando más tiempo del esperado, una horda de vampiros lo rodearon a las afueras de una antigua mansión abandonada y cubierta de vegetación muerta, al parecer se habían estado escondiendo en ese lugar, cadáveres se encontraban semi destrozados en los alrededores, al igual que huesos y personas muertas a medio enterrar y cubiertas de maleza, la noche caía sobre ellos llevándose los últimos rayos del sol, se fijó en las maletas, zapatos, un pequeño oso de peluche y demás cosas regadas, uno de los vampiros dio la señal y los ghouls se abalanzaron sobre él.
Se limitó a sonreír y a sacar su preciada arma semiautomática Casull .454 enorme y pesada de 0,39 m disparando sus balas explosivas fundidas de una cruz de plata de la catedral de Manchester.
Los putrefactos desperdicios de vampiros explotaban regándose en pedazos hasta desaparecer uno a uno, mientras los vampiros se adentraban en la mansión.
Al terminar entro en está notando lo vieja y derruida que se encontraba y soltó una pequeña risa macabra. ¿Debería prenderle fuego? No, no sería tan entretenido después de estarlos casando por tanto tiempo hasta que lo dirigieron a esa mansión.
Paso por la entrada, los muebles derruidos y mordisqueados por las ratas que se encontraban en el lugar, cadáveres cubiertos de polvo y otros siendo roídos por los insectos, la peste inundaba el lugar, los cuadros dañados que se sostenían apenas de una esquina en aquellas paredes de tapis maltratado, un ojo rodo sobre el piso de madera hasta llegar a la alfombra del corredor donde se encontraba, chocando y deteniéndose contra la orilla de este, un ghoul se precipito por su espalda al que simplemente le disparo volándole la cabeza en pedazos sin cambiar su posición.
Continuo caminando por el corredor, sentía la presencia de vampiros y humanos. Sus pasos resonaban por el lugar.
Entro a la primer habitación, esta se encontraba a oscuras al igual que todo lo demás pero mantenía el viejo televisor encendido que mostraba estática iluminándolo, frente a él se hallaba un sillón individual al que se encontraba amarrada una pequeña niña de aproximadamente 7 u 8 años de edad con las muñecas sujetadas a los lados, un vestido azul y cabello largo y café, sus ojos se encontraban vendados por un pedazo de tela blanco y olía a sangre, se los habían arrancado. Frunció el ceño y salió de la habitación.
Había estado siguiendo la pista de vampiros artificiales quienes experimentaban y usaban a humanos como medio de entretenimiento, los secuestraban para torturarlos y mutilarlos para después cambiarlos por otros en el mercado negro y de los que se alimentaban los convertían en ghouls o como aquella niña y los cadáveres que se encontraban por el lugar, los torturaban para después dejarlos morir mientras los observaban.
Termino de recorrer el pasillo y llego la cocina, tres vampiros lo interceptaron lanzándole cuchillos y uno de ellos saco una enorme metralleta haciendo que su cuerpo golpeara contra la pared recibiendo los disparos, la sangre cayó al piso y enormes huecos se apreciaban en su cuerpo mientras su cabello un poco largo le cubría la cara.
Los vampiros sonrieron mirándose entre sí.
-Pero si no era nada este tipo-
Dijo uno de ellos mientras los otros reían.
-Regresemos con…-
No pudo terminar de hablar ya que la risa violenta y terrorífica inundo la habitación.
Miraron al hombre frente a ellos, este sonreía y se despegaba de la pared aun con hoyos en todo su cuerpo. Era imposible no podía seguir con vida después de eso. El hombre con la metralleta volvió a disparar pero las heridas absorbían la sangre cerrándose al momento.
Saco a su magnífica arma Jackal con cañón Anti Monstruos de 3mm hecha de metal negro y soltó un disparo hacia la cabeza del vampiro que portaba la metralleta, la bala de mercurio atravesó su cabeza haciendo que esta se destrozara cayendo en pedazos al piso y su cuerpo soltó el arma cayendo, deshaciéndose en llamas azules. Los otros lo miraron aterrados. Alucard les sonrió y un aura roja envolvió su cuerpo mostrando sus colmillos.
-¿Qué pasa? ¿No van a utilizar sus poderes?-
Uno de ellos volteo he intento huir pero lo sostuvo con un mano por el cuello, elevándolo y con la otra mano disparo en su estómago. La sangre y los órganos cayeron al piso para después desaparecer convirtiéndose en las mismas llamas azules.
El vampiro que quedaba aprovecho el momento para escapar recorriendo el pasillo hasta las escaleras para alcanzar el segundo piso, Alucard lo siguió tranquilamente.
Podía sentir la enorme aura que lo perseguía y ordeno a los ghouls del lugar atacarlo mientras subía hacia el segundo piso.
Los ghouls se precipitaron sobre el intentando alcanzarlo, pero este los elimino fácilmente con sus armas y comenzó a subir la larga escalera hasta llegar a la habitación donde había ingresado el otro tipo.
Sentía la presencia de humanos en esta y de otros vampiros, atravesó la pared y estos lo miraban sorprendidos, al final de la larga habitación se encontraba una celda repleta de humanos en condiciones terriblemente deplorables que parecían estar más muertos que vivos.
Los cinco vampiros frente a él se abalanzaron intentando matarlo pero no lo alcanzaban, uno de ellos tomo a una joven humana amenazando con romperle el cuello mientras esta parecía ida con la mirada vacía y el cuerpo maltratado.
Se detuvo unos momentos y los vampiros lo rodearon, el líder quien era el más fuerte de ellos apareció por atrás de el con un hacha enterrándosela en el cuello y desprendiendo su cabeza que rodo por el piso mientras el cuerpo caía llenándolo todo de sangre.
Los vampiros rieron era imposible que siguiera con vida, el hombre que tenía a la chica la acerco para beber de su sangre y esta solo se dejaba hacer a pesar de que moriría.
La atmosfera se tensiono inundándose de aire frio mientras la cabeza y el cuerpo de Alucard se volvían sangre, dirigiéndose a una de las paredes donde su sello se activó mostrándose grande y escrito con sangre para después comenzar a formarse su cuerpo ante la atenta mirada de los vampiros aterrados frente a él, su cuerpo comenzó a salir de la pared, ahora su cabello era largo y su traje negro y pegado al cuerpo.
El arma negra apareció en su mano y disparo hacia los miembros de los hombres frente a él, volándoles una pierna, un brazo, el hombro, una mano. Sin matarlos, escuchando sus gemidos y gritos de dolor.
Llevo una de sus manos frente a él señalándolos y su guante blanco remarco el sello encendido en rojo.
-Fueron y tomaron todas esas vidas masacrando a los humanos. ¿Fue divertido? ¿Acaso eso es lo que hace falta para que basura como ustedes imitaciones de vampiro se entretengan? No los veo más que como una simple presa para alimentar a mi mascota-
-Baskerville-
Pronuncio y una enorme masa negra comenzó a formarse frente a ellos para después abrir cuatro pares de ojos rojos en fila y tomar forma de una bestia, quien se precipito hacia ellos devorándolos y salpicando de sangre las paredes y el suelo.
Alucard miro sin expresión a las personas que no se habían movido desde que entro y sin más salió de la mansión. Los hombres de la organización lo esperaban y al verlo salir entraron en esta para encargarse de limpiar el lugar y rescatar a las personas.
Regresaría a Inglaterra quería ver lo antes posible a Zero.
Al estar cerca de esta no sintió su presencia y se molestó entrando directamente a la oficina de integra atravesando las paredes.
Esta lo miro acostumbrada a la invasión en su oficina sin avisar por parte del vampiro.
-Buen trabajo Alucard-
Lo miro recargando los brazos en su escritorio y apoyando su cabeza en estos.
-¿Dónde está el?-
La miro seriamente y esta cerró los ojos calmada para después encender un puro y dirigirlo a su boca.
-Regreso a su casa en Japón, después de destruir mi helicóptero, las cámaras de seguridad, invadir el área militar y ocasionar una explosión-
Alucard soltó una pequeña risa de burla.
-¿Acaso no amabas ese helicóptero?-
-Suficiente, de cualquier forma ya he pedido otro.-
Frunció el ceño y el vampiro la miro con burla para después voltearse y dirigirse hacia una de las paredes.
-Nos vemos-
Levanto la mano sin mirarla en forma de despedida.
-Espera, tienes que regresar pronto ¿Entiendes? aún hay mucho trabajo por hacer-
Se levantó apoyando las manos en el escritorio.
-Manda a la chica policía ella es capaz de hacerlo-
Finalizo para traspasar la pared.