Apretó el agarre en la manija de la puerta y la abrió saliendo del lugar, aun no anochecía, miro alrededor detalles que no había notado la última vez, la mansión realmente era enorme al igual que el bosque que la rodeaba.
Ingreso nuevamente en el bosque, vería que podía encontrar aparte de las fuerzas militares de la última vez.
Solo encontró árboles y una que otra trampa que burlo fácilmente, después de todo estaba entrenado como cazador.
Tal vez con los militares podría encontrar un arma bastante potente como para poder acabar con ese vampiro o alguna forma de escapar.
Camino dirigiéndose hacia ellos. ¿Debería ocultarse o enfrentarlos directamente?
Recordó como el vampiro había aparecido la última vez para llevárselo y un escalofrió recorrió su cuerpo, definitivamente no se disfrazaría.
Se acercó lentamente a los soldados intentando no ser visto y se metió a una de las campañas, estas eran sencillas y tenían lo necesario para sobrevivir, no encontró ningún arma y nada que le fuera de utilidad.
Sintió una presencia humana acercase, lo habían descubierto, al abrir la campaña el hombre se sorprendió al ver a Zero y le apunto con un arma, este levanto las manos para evitar que le disparara.
Salieron de la campaña y todos lo empezaron a rodear observándolo fijamente, poniéndolo nervioso.
-¿Quién eres tú y como entraste aquí?-
Lo miro de cerca uno de los soldados.
-Si me indican la salida, con gusto me marchare-
Apretó los labios mirándolos fijamente.
La respuesta pareció molestar a los militares y el que hizo las preguntas lo empujo con el arma.
-No te hagas el listo con nosotros y contesta adecuadamente-
-Seguramente es un espía-
Soltó uno de los soldados.
-En ese caso tal vez prefiera que juguemos con su cuerpo para hacerlo hablar-
Comento otro.
Esas palabras molestaron a Zero pero parecieron agradarle a la mayoría de los soldados que comenzaron a acercársele amenazadoramente.
Uno lo tomo del rostro con una mano.
-Tienes una cara bastante bonita no es así-
Zero estaba a punto de golpearlo pero sintió una presencia que le resulto vagamente familiar acercarse a ellos.
-¡Capitana!-
Grito uno de los soldados al verla acercarse.
-Encontramos a este tipo en una de las campañas-
-Lo sé y escuche lo que dijeron, si fuera ustedes me alejaría de el-
Sonrió y se pinchó la cara con un dedo pensando.
-¿Por qué capitana, este hombre es peligroso?-
-Bueno… es un vampiro-
-¿Lo conoce?-
Preguntaban los soldados
- Es que… Alucard sama se enojaría si lo molestan-
Rio de manera nerviosa.
-No puede ser él es el chico de la última vez, de Alucard sama su...-
Todos lo voltearon a ver fijamente bajando inmediatamente sus armas.
-¡Si se entera nos matara!-
Zero se quedó quieto. ¿Qué pasaba en ese lugar, acaso todos estaban locos?
Bajo las manos y los miro fijamente con molestia.
-Bueno chicos retírense-
Dijo sonriendo la chica vampiro, mientras hacía señas con las manos para después pasar su vista a Zero, este la miro detenidamente ella parecía ser de su edad o un poco más grande.
Camino hacia él y se detuvo justo enfrente extendiéndole una mano, la cual Zero tomo con duda.
-Mucho gusto, mi nombre es Victoria Seras-
Dijo apuntándose ella misma con un dedo.
-¿Cómo te llamas?-
-Zero Kiryuu…-
-Creo que tienes muchas dudas en este momento, si puedo ayudarte a responder algunas con gusto lo hare-
Jugo nerviosamente con sus manos mirándolo.
La observo con duda. ¿Realmente podría confiar en ella? De cualquier modo no había alguien más que pudiera responderle.
-¿En qué parte de Inglaterra estamos y que es este lugar?
-Estamos en Inglaterra en la sede de Hellsing, La organización tiene la misión de defender las fronteras del país de toda y cualquier amenaza sobrenatural. Es una organización que sirve a la reina, cazamos y destruimos los desechos que dejan los vampiros. Cuando un vampiro se alimenta de un humano no virgen sin matarlo este se convierte en un monstruo sin conciencia que ataca a otras personas alimentándose de ellos, a estos los llamamos ghouls, es como un virus que tenemos que erradicar, si estos son vírgenes se vuelven vampiros controlados por el que los mordió. También nos deshacemos de los vampiros que violan las leyes de coexistencia, los que matan indiscriminadamente o crean ejércitos de ghouls atentando contra la raza humana o de los vampiros creados artificialmente por el mercado negro.
Se sorprendió, ghouls ¿Se refería a los niveles E que caían en la locura? Se tocó el cuello sin pensar para después dejar caer su mano.
-¿Que son los vampiros artificiales?-
-Son vampiros que son creados artificialmente por medio de un chip insertado en su cuerpo, esto es ilegal y normalmente lo hacen en el mercado negro, nosotros los cazamos y los exterminamos-
Jamás había escuchado de eso. ¿Acaso la organización de cazadores conocía aquella información?
Detuvo sus pasos junto a la chica y la miro.
-¿Quién es Alucard?-
-El amo Alucard es el mejor peleador de la organización y está bajo las ordenes de la actual cabeza de la familia Integra Hellsing, él es muy poderoso y también es mi maestro, el me convirtió en vampira-
Sonrió, apuntando con un dedo sus colmillos.
Zero fruncido el ceño.
-A pero yo lo quise así veras el me salvo, yo era policía y todo mi escuadrón fue aniquilado por un vampiro y transformados en ghouls atacándose unos contra otros, ese vampiro iba a asesinarme entonces apareció el maestro Alucard y lo mato, yo iba a morir y el me dejo escoger si quería vivir como vampiro así que me mordió, más adelante me ofreció que bebiera su sangre para que quedara libre, pero yo no creo pertenecer a otro lugar más que aquí, aquí soy feliz.-
Estaba sorprendido de lo que había vivido esa chica y la manera en que podía soportar todo eso con esa sonrisa y esa actitud infantil, le sonrió un poco, la chica lo noto y le regreso la sonrisa aún más grande, pero aquel vampiro no creía que pudiera ser tan amable y eso era lo que más le sorprendía.
-¿Por qué una organización de cazadores al servicio de la reina tiene bajo su mando a dos vampiros?-
-Bueno… no puedo contestar eso correctamente pero el maestro Alucard ha servido a muchas generaciones de la familia Hellsing y yo sirvo a la familia desde hace poco junto a él.
Se rasca la cabeza de manera nerviosa riendo un poco.
-Entiendo-
-¿Eres de algún país cercano Zero sama?-
-No, vengo de Japón. ¿Por qué me llamas Zero sama?-
-Pero no pareces ser japonés, a eso es porque eres la pareja del maestro Alucard-
La miro fijamente, esa chica sabia más de lo que parecía y era su oportunidad para aclarar esa locura.
-Yo no soy su pareja-
-Si lo eres. ¿Están casados no es así? Además estuvo mucho tiempo buscándote-
-¿A qué te refieres con buscándome?-
-Ah creo que no debería responder eso, sería mejor que lo hablara con el maestro.-
Creo que me estoy metiendo donde no debo, lo mejor será que Alucard sama y el hablen de esto. No quiero que después me regañe hasta morir por hablar de más.
-Este.. Oh mira la hora creo que deberías regresar a la mansión yo debo ir por allá-
Señalo a ninguna parte en específico y se fue corriendo.
-Nos vemos después-
-De acuerdo-
Suspiro pesadamente, lo había dejado frente a la mansión.
Se adentró en esta menos sigilosamente pero a paso rápido, realmente no tenía ganas de verse con el vampiro, pero quería que contestara sus preguntas, recordaba aquellas imágenes y escenas que había visto la otra noche realmente no tenían sentido y no lograba unirlas. ¿Que tenían que ver con él y ese hombre?
En su camino al sótano encontró al mayordomo de antes que le sonrió al verlo.
-Zero sama me alegro de que haya vuelto, tengo que comunicarle que el amo Alucard ha salido en una misión y tardara en regresar alrededor de unos 2 o 3 días de acuerdo al tiempo que le tome llevarla, pero no se preocupe el suele terminar rápido esos asuntos.-
Le entrega una carta, sonriéndole.
-Me pidió que le diera esto, y si necesita cualquier cosa puede pedírmela, al igual que si tiene dudas, está la señorita Victoria Seras a quien me parece ya conoció, la vi frente a la casa alejándose-
Le cede el paso frente a la puerta de la habitación sin borrar esa sonrisa y le da una leve reverencia.
-Con su permiso me retiro-
-¿Usted sabe algo no es así?-
-No sé a qué se refiere-
Zero lo miro con desconfianza sabía que mentía, frunció el ceño molesto y entro a la habitación viendo al hombre marcharse.
Así que estaría solo un tiempo sin aquel molesto vampiro rondándole, suspiro y paso una mano por su cabello sintiendo lo que había crecido y le recordó a Ichiru, mostro una pequeña sonrisa triste y se concentró en otra cosa, dejándose caer en la cama.
-Tengo que pensar claramente lo que hare, si ese vampiro no está tengo muchas oportunidades para salir de este lugar.-
No podía apartar las imágenes de su cabeza. ¿Por qué las tenía? ¿Por qué veía esas cosas que no sabía interpretar y que sucedía en aquel lugar? Todo era tan extraño.
Paso un brazo sobre su rostro mientras sostenía la carta arrugándola ligeramente.
Recordó las palabras de la chica y algo en su mente pareció reaccionar, si Alucard la había transformado en vampiro y no había bebido sangre de él. ¿Cómo es que no se había transformado en un nivel E? ¿De qué se alimentaba?
Miro la carta nuevamente y la abrió sin cuidado, seguramente le seria desagradable el contenido, desdoblo el papel leyéndola.
Zero.
Regresare en poco tiempo. No intentes escapar de mí, porque yo siempre te encontrare y te traeré de regreso a mi lado donde perteneces. Pídele lo que quieras a Walter y él te lo traerá, tiene permiso de Integra la líder de la familia. Si quieres salir de la mansión dile a la chica policía que te acompañe.
Por ultimo te recuerdo que tienes que alimentarte apropiadamente en mi ausencia.
Alucard.