From the lies: DESIRE HIDDEN.
El poner otra vez cada trampa en esa nueva casa era realmente un fastidio, pero lo que realmente lo fastidiaba era cada noche tener que vaciar sal, en las ventanas y puertas, con eso bastaría para pasar la noche pero se había dicho a si mismo que mañana mismo pondría los símbolos de protección tanto de demonios chulis como de ángeles fisgones, en la que sería su nueva casa, la mudanza había sido devastadora tanto para el como para Lisa y Ben. Claro que no iba a consentir seguirse quedando donde apenas unos metros habían asesinado a los que habían sido unos bueno vecinos y amigos.
Sabía que era inútil aquellos genios, habían sido masacrados y capturados, aunque aún se preguntaba para que de haber sido por él la hubiera llenado de plomo sin dudar, pero eso ya no era su decisión, ni su interés. Lo único que a él le importaba era poner la mayor distancia posible, como su bolsillo le permitiera. Claro que le pudo haber pedido ayuda a Lisa, pero no quería abusar, no podía exigirle tanto a la mujer, suficiente había sido con que lo dejara a su suerte después de lo ocurrido, o mandarlo al demonio, ja, con la petición de mudarse, para todavía pedir que desembolsara un solo centavo.
Y aunque a Ben no le agradaba tanto la idea de dejar su antiguo hogar, pero que más podía hacer los mantendría a salvo a los tres aunque fuera lo último que hiciera, no podía dejar su “familia” saliera afectada de ningún modo. Aunque claro nada impedía que otro bicho lo siguiera hasta su nuevo hogar, por eso debía ser lo más cauteloso posible. Aunque el estuviera retirado del “negocio familiar” habrían bichos que no perderían la oportunidad de vengarse.
Se encontraba poniendo la línea de sal en la última ventana de la casa cuando su teléfono comenzó a sonar, desviando su atención de su labor vio la pantalla, un ligero cosquilleo de felicidad como de nervios se apodero de él, no se esperaba que el llamará, tal vez su corazón aguardaba una ligera llama de esperanza, pero después de cómo había sido su último encuentro y despedida, realmente no se esperaba que llamara, o por lo menos no tan pronto. Pero enseguida se repuso, no debía tener esos sentimientos se recordó, así que aclarando un poco su garganta contesto.
- Sam, ¿Qué pasa? – contesto tratando de sonar lo más natural posible
- Tienes que ayudarme ahora – exigió sin saludar no estaba para ese tipo de cosas
- Sam – fue su única respuesta con un tinte de fastidio marcado al pronunciar su nombre – estoy fuera – le recordó, aunque en el fondo le agradara que Sam estuviera a seguir insistiendo. Aun si la respuesta siempre fuera la misma no podía solo pensar en lo que él quería, aunque la insistencia le llenara de un calorcito en su pecho, de manera egoísta esperaba que Sam siempre insistiera, porque así se sabía dentro de su corazón y de su mente, como el mismo siempre se encontraba dentro de él.
- No escúchame – le rugió Sam por el teléfono – tienes que ayudarme – asevero el castaño– si no te juro que en menos de veinte minutos estaré ahí y tirare la puerta a patadas – amenazo y algo en su voz le hizo creer que no mentía, que realmente Sam haría añicos la pobre entrada de su casa con su gran tamaño estaba seguro de que no le costaría nada hacerlo
- ¿Qué es tan impórtate par que tengas que amenazarme de esa manera? – le cuestiono un poco fastidiado.
se supone que Sam le había llevado bien hasta ahora, porque ahora le llama con amenazas hacia sus inofensivas puertas, había tenido un día agotador con la mudanza el ambiente ligeramente tenso en su familia por las discusiones, referente a de no dejarlos salir, pero el haría lo necesario para protegerlos y eso incluía mantener a Sam y todo lo sobrenatural fuera, estaba agotado como para que Sam viniera con amenazas, él y todo lo que él quería alejar, que intentaban una vez más ingresar en su vida.
por un momento pensó de ignorar la petición y la amenaza de Sam después de todo se acaba de mudar Sam no debería tener su dirección tan pronto, pero su voz se oía tan segura que era mejor no vacilar, no podría permitir que el bicho que estuviera cazando su hermano lo siguiera hasta su nuevo hogar, y tampoco podría permitirse que Sam llegara haciendo un alboroto en su nuevo vecindario acababan de llegar todas las miradas curiosas estarían sobre ellos, y si querían mantener un perfil bajo, de ninguna manera podía permitirse que un gigantón de casi dos metros destruyera su puerta e irrumpiera en su casa. Además que no sabía si el dichoso bicho anduviera vigilándolo a él también, como ya había pasado en la cacería pasada y terminara atacando ese nuevo lugar, no podría en riego a su familia de nuevo, y no podría mudarse otra vez, tanto como Lisa y Ben no lo verían bien seria sospechoso para las autoridades y el hecho de que llegaran y cosas extrañas comenzaran a pasar. …l tenía un largo historial de asuntos con la autoridad, por lo que quería pasar lo más desapercibido posible, además de que ya no contaba con el dinero suficiente para una nueva mudanza.
No cualquier cosa que Sam necesitara tendría que tratarse lejos de ahí en el peor de los casos, o simplemente convencer a sammy de sea lo que sea debía dejarlo fuera, aunque no estaba seguro de poder conseguir esto último.
- Dean escúchame bien, si no quieres que abandone aun bebe en medio de la carretera te verás conmigo – le aclaro –aunque es la única pista que tengo del caso en el que estoy trabajando no quiero ni puedo seguir cuidándolo, necesito que te hagas cargo – si lo primera amenaza no había funcionado, para convencer a su hermano esta sí tendría que remover algo en su hermano, pues aunque lo negara sabía que debajo de toda esa fachada de macho, se encontraba un corazón de pollo y es que aunque se dudara a veces Dean era la personas más buena que él conocía.
- Está bien vamos avernos – cedió Dean al final pactando una hora en un lugar a las entradas del nuevo pueblo al que se había mudado, lo que no sabía era que le había sorprendido más la mención de un bebe dentro de un caso, o el que su hermano hubiera sugerido la idea de dejarlo así nada más, aunque fuera solo para presionarlo para que cediera, consideraba aquello había sido demasiado, incluso más consideraba que hablaba con el siempre recto sammy, no algo pasaba y él iba averiguarlo, después de todo seguía siendo su sammy, al que juro proteger.
Dándose media vuelta, se dirigió hacia la habitación en donde se encontraba Lisa tratando de terminar de acomodar las cosas, para que su nueva casa quedara completamente habitable lo más pronto posible.
Tendría que explicar que saldría a mitad de la noche y, eso no sería tranquilizador ni para ella ni para él, pero tampoco podía dejar de lado a su pequeño hermano, el que no lo quisiera en su vida era una cosa, otra muy distinta era el que no le importara.
A varios kilómetros de ahí estacionado detrás de unos matorrales a las entradas de en su humilde opinión un pueblucho sin chiste, se encontraba Sam pues él ya estaba cerca del lugar cunado su hermano sugirió verse ahí, no entendía como un cazador como Dean había terminado a resignarse a vivir en un lugar así, y es que hasta el que no adoraba tanto la caza como su hermano no se acostumbraría ya el vivir en lugar tan aburrido, quizá Dean lo hacía solo por compromiso hacia Lisa y Ben, no entendía como es que había decidido cambiar tan drásticamente su rutina de vida, no es que esa vida fuera la mejor, o la más envídiale sin embargo era mucho mejor a la ahora llevaba su hermano en un burdo intento de familia con una mujer, que era más fácil que el mismo Dean y cuidando un hijo que ni siquiera era suyo, a saber qué clase de rufián es el que era el papa de Ben, podría apostar que ni la misma Lisa lo sabía con exactitud.
Aunque eso realmente era irrelevante, no importaba los motivos de su hermano para quedarse con ellos, porque al final él es que saldría ganando, haría que Dean regresara con él, lo haría más como comodidad y la costumbre de cazar junto a Dean, aunque hubiera pasado ya un año aún estaba acostumbrado a la rutina y confianza que Dean y él se habían impuesto de tantos años cazando juntos, que con cualquiera de aquellas personas con las que había cazado en el último año.
Además seria como pagarle a Dean de la misma manera, hace muchos años atrás el había intentado mantener una vida normal, y Dean se había aparecido de la nada para recordarle que nadie se sale de negocio familiar, por lo menos no por tanto tiempo.
Solo que Lisa no terminaría pegada el techo quemada, eso era ventaja.
Y no era por consideración hacia su hermano ni mucho menos hacia Lisa, era solamente que ya le daba igual, irónicamente hasta le causaba cierta gracia la muerte de Jess, había intentado protegerla ocultándole todo lo sobrenatural que había en su vida y eso mismo había sido la causante de su muerte.
Su muerte nunca le había importado menos, bueno noes que en el pasado realmente le haya importado mucho, claro que la resentía había compartido, casi cuatro años junto a ella, pero en realidad supo que nunca la amo, sabia porque escogía a Jess desde el inicio cuando acepto salir con ella, al llegar a la universidad, era lo más parecido a Dean en aquel lugar, solo había que pensarlo, rubia, ojos verdes, pero ni tan bellos ni llenos de aquella chispa que solo se podría encontrar en lo vivientes y resplandecientes ojos de Dean, y rostro lleno de lunares, como reemplazo de las graciosas pecas en el rostro de su hermano.
Bueno tampoco era como si ahora le importara mucho Dean, o por lo menos no como antes, en el que por Dean y solo por él estaba dispuesto a saltar en la jaula de lucifer junto con él.
Y bueno si Dean podía ser una buena puta, a decir verdad podía ser la mejor que hubiera probado jamás, aun se le ponía dura al recordar los gemidos de Dean en su oído, de ese día que lo tomo antes de el plan contra lucifer diera comienzo, a decir verdad no lo entendía recordaba ese día su corazón estallar en felicidad al tener a Dean de esa manera al fin en sus brazos. Era su más profundo deseo oscuro, aquel que había tenido que ocultar en el fondo de su alma desde siempre, y se había hecho realidad en una explosión de orgasmos, besos, caricias y promesas no dichas de amor, pero ahora recordaba ese día como un buen sexo que no tenía comparación con ninguna otra persona pero nada más.
No negaría que le gustaría probar una vez más a su hermano y las veces que fueran necesarias para saciar esa necesidad que tenia de él, realmente ahora no le molestaba el hecho de pensar abiertamente todo lo que quería hacer a ese cuerpo, y como deseaba metérsela hasta estar satisfecho, ya nada se lo impedía ni se lo impediría, ni siquiera el mismo Dean, podría impedirlo.
Pero no podía muy en el fondo sabía que algo en él no estaba bien, y aunque necesitaba a Dean para cazar y una buena sección de sexo, eso no significa que lo extrañara, quizá algo se había roto dentro de el al salir de la jaula o al estar allá, pero por muy preocupante que fuera eso, era algo que en realidad no tenía la importancia que quizá debería darle.
En fin no tenía caso preocuparse por algo que ya no tenía remedio y mejor enfocarse en el presente, en el que Dean ya no tardaría en llegar, porque realmente necesitaba a Dean de regreso para poder ir con el ya no aguanta a los Campbell con sus miradas reprochantes antes sus actos, completamente justificados durante la cacería, aunque fueran considerados extremistas.
Con Dean no sería diferente tendría que fingir si no quería a Dean queriendo exorcizarlo a cada rato, sería algo molesto pero prefería estar con la familia con la verdadera, aunque ya no sabía si consideraba a Dean como tal, pero por comodidad tendría que hacerlo, valía la pena intentar.
Quería a Dean de regreso, quizá por capricho o la ya la costumbre de cazar junto a él, pero lo haría, hasta había pensado en meterle un tiro a Lisa y a Ben tan solo para que Dean dejara de tener excusas de no ir con él, si los dos podrían pasarla de lujo como en los viejos tiempos, e incluso mejor ahora que nada lo detenía para hacer lo que realmente quería, en la cacería así como en la cama.
Y vamos que Dean también había disfrutado de su antiguo encuentro, estaba seguro Dean también necesitaba aquella dulce sensación de ser invadido por él y solo por él.
Pero ya solo era cuestión de esperar pronto, muy pronto su hermano estaría junto a él, de una u otra manera él se encargaría de eso, y este era un buen inicio.
Los repetidos gimoteos y respiración agitada le saco de sus pensamientos, volviéndose a ver, a la molestia que llevaba amarrada en el asiento trasero, sentado en una silla especial, al ver la expresión del infante supo que no tardaría en ponerse a llorar.
- O no, no de nuevo pequeña molestia – le miro con el ceño fruncido no deseaba volverlo a escuchar llorar miro hacia el suelo buscando el chupón que hasta hace unos momento el infante mantenía en su boca al encontrarlo lo llevo una vez más hacia la boca del menor introduciéndoselo, evitando un nuevo llanto y un nuevo dolor de cabeza en su persona, - aunque al final resultaste ser de utilidad – le sonrió al bebe – por ti es que Dean viene en camino.
Llevaba conduciendo alrededor de veinte minutos, después de explicarle momentáneamente a Lisa que tendría que salir para un encuentro con su hermano, realmente no había explicado mucho, había dejado a su familia juntos durmiendo en la habitación mas establecida por la mudanza y dibujado unos cuantos dibujos de protección en la puerta, después cubriría el símbolo cualquier poste o chuce que se le ocurriera, lo menos que podía hacer para mantener un poco de su tranquilidad era dejarlos lo más protegido posible.
y ahora ahí estaba a punto de llegar al punto de encuentro con Sam, incluso desde la distancia en la que se encontraba podía visualizar el auto de Sam, se preparó mentalmente para lo que venía, noes que tuviera que sr algo del otro mundo un encuentro con tu hermano ni mucho menos el motivo de la reunión, una caza era algo muy usual en lo que había crecido sí, no más bien el hecho que esta era la segunda vez se viera a sammy después de haberlo creído perdido para siempre, y en realidad no esperaba el verlo tan pronto, después de su despedida, luego del inesperado reencuentro que habían tenido.
Y aunque le costara admitirlo incluso para el mismo, aún seguía dolido, el ese tiempo necesita a su hermano vivo, e incluso más doloroso aun, ahora necesita a su hermano lejos. Pero este no parecía entender sus necesidades, o tal vez no quería.
En fin eso era adelantarse a los hechos, tendría que actuar lo más natural posible, si no quería confundir sus verdaderos motivos de estar ahí era únicamente, por eso bebe que Sam había mencionado cuando hablo con él, para solicitar su ayuda.
Pero no podía negar cierto nerviosismo en el al ver nuevamente a Sam, el mismo había dicho que no podía haber un ellos, en su anterior encuentro, pero el decirlo no quería decir que lo sentía, o facilitaba el realizar sus propias decisiones. Aparco su auto justo enfrente de el de su hermano dio un profundo respiro y descendió de su auto.
Vio a Sam recargado enfrente de su auto, noes que no quisiera preguntar, por su estado pero decidió ser directo, pero él estaba ahí solo por un motivo así Sam no tendría confusiones de que hacia ahí.
- Donde esta – le cuestiono al menor pasando de largo de él y dirigiéndose hacia el auto
- atado en la parte de atrás – escucho a Sam responder después de seguirlo unos cuantos pasos, su mirada se dirigió hacia el haciendo trasero , y ahí estaba mirándolo con unos ojos curiosos un bebe unos meses más grande que su tesoro, dio un resoplido, eso era todo oficialmente estaba dentro de ese caso
- Bienvenido abordo capitán – oyó decir de manera burlesca al otro y por un momento pensó de en darle una pata en el trasero, a ese niñato engreído pero se contuvo.
En cambio pidió que lo pusiera al tanto de lo que sabía del caso, así se enteró que el bicho este que estuvieran a punto de cazar, se dedicaba a robar bebe, no muy lejos de donde él había decidido mudarse, pero que solo robaba bebes de seis meses de edad, una ventaja que su bebe fuera unos meses menor a esa edad, aunque eso no significaba que él no fuera un objetivo o que en cuando cumpliera aquella edad no fueran a por él, por eso es que había decidido involucrarse en este caso, no podía permitir que algún bicho de la nada se metiera en su hogar para robarse a su bebe, y por lo que le había dicho su hermano se encargaba de matar a todos los que no fueran él bebe, no podía dejar Lisa y Ben salieran lastimados en todo eso.
Así que ahí estaba otra vez, conduciendo de regreso a su casa para explicarle a Lisa que tendría que salir de casería para eliminar una posible amenaza futura hacia su familia.
- Una vez más muéstramelo – le dijo Lisa mientras le entregaba un arma noes que no supiera que Lisa no estuviera preparada para disparar o que no supiera manejar un arma pero para su paranoia pedía asegurarse una vez más.
- Meter cartucho, cortar quitar seguro y poner seguro, - explico mientras realizaba cada una de las acciones del funcionamiento del arma, y algo cansada, de repetir la misma acción una y otra vez, noes que se considerara una experta en el uso de armas pero teniendo a Dean como parte de su familia era inevitable, no saber cómo funcionaba por lo menos alguna de ellas, mas por insistencia del propio Dean que el de ella por querer aprender a manejarla.
- Y sal en las ventanas y puertas – le recordó él ya se había encargado de pintar unos cuentos símbolos más en cuento había llegado.
- Por supuesto – le aseguro, estaba segura que no lo olvidaría había visto Dean hacerlo tantas veces que básicamente ya era un rutina en aquella casa casi como cocinar
- Hay más municiones en el fondo falso del armario – le informo reflexionando, mas preocupándose por el posible rapto de su bebe que cualquier otra cosa y si atacaban y él no estaba presente tales lo que le había enseñado a lisa no haya sido suficiente, no podía permitirse perderlos
- Está bien – le susurro lisa de forma conciliadora – tú quieres ir - le dijo de manera suave adivinando sus dudas, intentando hacerle saber que lo comprendía, y por qué se tenía que ir - no podemos quedarnos a la expectativa, si algún día atacaran , yo en algún momento tengo que trabajar, y tu estarás tranquilo sabiendo que algo puede atacarnos, o llevarse a nuestro bebe – enfatizo en la última frase, porque lo sabía, ella era consiente que él bebe que descansaba en su cuna a lado de su durmiente Ben no era de ella, o por lo menos no de sangre, pero ella había estado presente en el embarazo de Dean, ella estuvo para detenerlo cuando Dean había querido cometer tonterías, ella estuvo al pendiente de que todo saliera bien, ella estuvo en parto de Dean.
puede que ella no fuera la mama de ese bebe, y por bizarro que pareciera era Dean, pero ese bebe era tan suyo como lo era de Dean y el hecho que el verdadero padre de ese bebe, por decirlo de alguna manera, anduviera cerca, la hacía sentirse amenazada, sabía que las intenciones de Dean no era regresar junto a Sam, de haberlo sido la habría dejado en cuanto este decidió reaparecerse en sus vidas, pero aun así, el que este insistiera en volver a la vida de Dean no era tranquilizador para ella. …l quería destruir a su familia y ella no iba a permitirlo, porque así como sabía quien era el verdadero papa de ese bebé, también sabía que Dean no era suyo, tenían una familia juntos vivían juntos, a los ojos de los demás eran una familia envidiable.
Pero la realidad era otra, Dean no la veía como mujer, ellos incluso no eran una pareja, Dean lo había dejado claro desde un inicio, no podían ser algo más que una fingida familia porque Dean no le podía ofrecer más.
Dean, su corazón y él bebe le pertenecía a la persona que insistía en llevárselo de su lado, pero ella no lo permitiría, aún conservaba la esperanza de algún día ganarse un lugar en el corazón de Dean, y estaba tan cerca, estaba segura de que Dean había comenzado abrirse a ella pero el l había decidido aparecerse una vez más en la vida de Dean, si ya había decidido en alejarse de su vida porque no pudo mantenerse así, su vida sería mucho más sencilla de esa manera, tal vez fuera egoísta pero eso era lo que ella quería, se merecía ser feliz y su felicidad era junto a Dean y su familia, también era lo que Dean quería, solo alado de ella podría ofrecerle la vida tranquila que tanto deseaba a su bebe solo su lado, así que creyéndose que con l ventaja debía dejar a Dean partir no solo para eliminar aquella amenaza que podría lastimar a su bebe si no para que Sam dejar de tener motivos de quererse llevar Dean de su vida.
- Tal vez no debería ir – comento Dean al observar a Lisa perdida en sus pensamientos, tal vez no se sentía preparada para enfrentarse sola a alguna amenaza – Sam puede arreglárselas solo – intento justificar para restarle importancia y quedarse en aquella casa
- Dean no te ofendas – le sonrió de manera cómplice para completar – si no te vas ahora te voy a disparar concluyo, lo que quería era que Dean se fuera y regresara lo más rápido posible a su lugar y ese era junto a ella.
- Debes extrañar a tu ex el aburrido
- O cállate – le corto para ella no había no habría otro que no fuera el – cuídate si – le pidió, observando a Dean tomar su mochila, sabría dios con que chuches exorcistas
- Adiós – se acercó para darle un simple y casto beso en los labios, más para no perder la costumbre que había empezado a adquirir apenas hace unas pocas semanas atrás que lo que realmente sintiera la necesidad de besarla, necesidad, que sabía innegable para Lisa, sabía que tendría que ofrécele más a Lisa, pero saberlo no significa que el pudiera ofrecerlo, y con Sam devuelta, sus emociones y sentimientos se encontraba vueltos en un enredijo, ya ni siquiera sabía que haría, antes podía haberlo respondido sin dudar, pero ahora la duda comenzaba a surgir, pero por ahora era mejor no pensar en eso, no podía atormentarse pensando en ello, ahora lo más importante era salir a cazar aquel bicho para asegurar el bienestar de angelito.
En cuento Dean salió de la casa, se dirigió a la parte superior de la casa dirigiéndose a la habitación, donde descansaban sus hijos, se encamino en la cuna donde ahora descansaba él bebe, su bebe, y se arrodillo junto a esta, claro que era suyo, él bebe era suyo y nadie lo podía negar, estiro una mano acariciando la rosada mejilla del infante, este bebe es quien la ayudaría a conseguir el amor de Dean, siguió acariciando la mejilla del bebe mientas en que en la propias comenzaban a descender lágrimas.
Mama – el escuchar la voz aun adormilada dirigió su mirada a la cama que se encontraba a unos metros de ella Ben comenzaba a despertarse, aún era temprano para que lo hiciera el sol apenas comenzaba a salir – ¿porque lloras? – le cuestiono al observarla unas lágrimas, mientras observaba dentro de la cuna – ¿mi hermanito está bien? – cuestiono preocupado que de algo le hubiera ocurrido al infante – ¿dónde está Dean?
- …l bebe está bien cielo, solo duerme, Dean tuvo que salir por unos días, pero volverá –– hay garantía de que volverá – susurro lisa dirigiendo su mirada una vez más al pequeño durmiente
- Se ha ido con el ¿verdad? – cuestiono Ben sabiéndose el también el peligro que Sam Winchester significaba en su familia, lo que hacía que de cierta manera él también le guardara cierto resentimiento al tipo
- Si pero solo unos días y volverá y ya no tendrá excusa para apartarlo de nuestro lado, - le informo mientras recibía el cálido abrazo que le proporcionaba su hijo – él nunca se ira mientas le tengamos a el – susurro convenciendo al menor y a ella mismo mientras acariciaba con un dedo el rostro del menor, para posteriormente depositar un beso en la frente del infante.
Se encontraba conduciendo para encontrarse con su hermano y encargarse de su pequeño y babeante problema, mientras resolvían el caso y mataban al bicho en cuestión.
Esta vez habían acordado encontrarse cerca de la carretera cerca de una zona boscosa que Sam había visto de camino, para así ocultar si camioneta lo mejor sería que no usara su camioneta por si se metían en problemas con la policía como era su costumbre, lo mejor sería, no dejar ningún rastro si quería poder volver a su vida tranquila y cotidiana.
Llegando al lugar del encuentro y aparcando en un lugar en que se dificultaría poder ver, descendió y se dirigió al carro donde su hermano le esperaba, una vez más fuera de este jugando con las llaves.
- Bueno que sabemos de esa cosa – pregunto mientras tomaba de la parte trasera de la camínate su mochila
- Bueno era rápido – menciono intentando recordar lo más posibles detalles – y se aterro cuando lo corte con plata
- Eso lo reduce a – intento ver que tenía Sam hasta ahora pues conociéndolo ya habría hecho sus investigaciones
- Un gohul, un zombie un transformador o una docena de otras cosas – le dijo para que hacerle saber que en realidad no tenían nada de información en sus manos
- No recuerdo el robo de bebes en el perfil – menciono intentando sonar tranquilo, si había algo que motivara a los monstruos robarse a los bebes él debía saber para saber si bebe era un posible candidato a desaparecer miro en la parte trasera donde se encontraba aquel bebe que su hermano había encontrado en la zona del último ataque del mounstro.
– Tu puedes hablar si sabes algo – menciono haciendo sonreír al bebe – el siempre había tenido un toque especial con los niños, y ahora con el nacimiento del propio y el cuidado de Ben ese encanto natural había aumentado.
- Cinturón – menciono Sam mientras le dirigía una mirada,
- Un auto no debería dar molestias - menciono un poco fastidiado por el ruido del auto, pensando que su nena no causaría ese tipo de problemas, aunque no podía manejarla tuvo que recordarse
Un sonido, que no provenía del auto, pero un tanto conocido por el desde que su bebe había llegado a su vida seguido de un pequeño gimoteo, le había hecho recordar que quizá tuvo que haber empacado algo más que agua bendita y balas para este caso, con una mirada seria se dirigió hacia Sam – necesitaremos suministros – tengo un arsenal en la cajuela – sonrió con orgullo Sam
- No de esa clase - le hizo saber, pues si tenía experiencia como creía que la tenía no tardaría en fuertes llantos llegar a sus amados oídos.
- Bien debemos encontrar una pomada para su trasero – menciono buscando entre los estantes, las cosas que solía usar su bebe
- Algo como esto – le mostro una pequeña caja amarilla, la misma que el usaba
- Esa llévatela, estos estarán bien para su edad – tomo una caja de pañales que deberían servirles para su meses, y tomando unas cuantas cosas más como toallitas limpiadoras y todo aquello que creía necesitaría
- Como sabes todo esto – pregunto Sam tensándolo momentáneamente
- Lisa tiene una sobrina, he visto como la cuida – se excusó no estando tan convencido
- Si claro – ironizo Sam no estando tan convencido
- Oh cállate – le silencio no estaba para inventarse mentiras o lidiar con san acerca de sus adquiridos conocimientos, o tan nuevos, tendría que recordarle que él había cuidado de el de la misma manera que ahora cuidaba de su niño, o como lo haría con ese bebito, vio que Sam estaba a punto de replicarle algo más, pero fue salvado por la campana o en este caso por él bebe, que comenzaba a mostrarse más lloroso al sentirse tan sucio – hay que darse prisa o pronto tendremos lagrimas menciono – no quería dar un espectáculo en aquel supermercado, los bebes tenían poderosos pulmones, si lo sabría el, cuando su bebe se mostraba llorón por las noches nadie dormía en su hogar, había veces que tenía que pasar las noche meciéndolo estando en la mecedora y recargándolo en su pecho para conciliar un poco de tranquilidad mas no dé para descansar, pues no podía relajarse del todo pudiendo dejar al caer bebe.
- Por supuesto – menciono Sam dirigiéndose a paso presuroso a las cajas mientras el quedaba tomando unas cosas mas
Pero quién diría, que era la hora en que el mercado se encontraba con más gente, y aunque la fila avanzaba rápido, lo inevitable pasó, él bebe mostro lo sano que eran sus pulmones, al empezar a llorar incontroladamente, haciendo a la gente voltear hacia ellos, mirándolos de mal modo, y murmurando dios sabía que cosas.
Sam se encontraba mirando al bebe llorar mientras Dean le pasaba las cosas a la cajera habían tenido 5 minutos de llanto insufrible y estaba seguro de estar a punto de dejar él bebe ahí tomar a su hermano y conducir lo más lejos de ahí, pero tuvo que recordarse que eso no sería bien visto por Dean, además de que estaría abandonando la única vista que tenia del caso.
- Dean has que pare – le ordeno de manera baja pero se podían escuchar los tintes de molestia mal disimulada en su voz
- ¿Y cómo? – su la simple respuesta de Dean mientras seguía pasando cosas a la cajera, el al contrario de Sam si estaba algo más acostumbrado a los llantos prolongados, pero no quería decir que no comenzara a irritarlo
- Aliméntalo - exigió - nos ven como abusadores – mirando a su alrededor, como la gente se les quedaba viendo, no era un experto en el tema pero estaba seguro que ver un bebe llorando no era un espectáculo tan raro como para no pasar desapercibidos
- Eso ya lo hicimos, necesita un cambio de pañal – le recordó Dean – lo que necesitas es un cambio de pañal – le informo mientras pasaba las ultimas cosas a la cajera
- Oh dios no – no quería tener que ver ese tipo de cosas asquerosas, justo en el momento que creía que sus oídos estaban a punto de estallar pues el llanto del bebe se había vuelto más desgarrados ante la aparente indiferencia de sus cuidadores a su molestia, la estúpida máquina de la cajera había decido trabarse, estaba seguro que si seguía así le metería un calcetín en la boca solo para tener cinco segundos de paz
- Oh que le pasa – pregunto de la nada una anciana de tez morena que llegaba a la fila -puedo – le cuestiono a san mientras Dean seguía esperando a que la dichosa maquina reaccionara – a lo que Sam solo le arrimo el carrito para que pudiera cargarlo – como se llama – les cuestiono la anciana
- Bobby – había dicho Dean
- John – había dicho el
- Bobby John – aclaro Dean queriendo salvarse del lio
- Oh ya veo Bobby John necesita un cambio – dijo acomodase en brazos al bebe parando un poco el llanto, - puedo hacerlo si quieren - y estaba a punto de aceptar, al ver la cara de alivio de Sam el mismo quería que él bebe parara de llorar mientras el terminaba con las compras, pero al voltear a la cámara de seguridad de la tienda, lo vio, una anormal, luz en los ojos de la anciana. Sin dudarlo se acercó a la mujer empujando levemente a Sam
- Lo hare yo mismo – dijo estirando sus brazos hacia la anciana
- Oh realmente no me importa – insistió – solo dios sabe cuántos pañales he cambiado
- Deme al bebe o la apuñalare en cuello – susurro amenazante
- Dean – regaño Sam si se iba apuñalar alguien era al bebe para que dejara de llorar o a sus oídos solo para no seguir con aquel infernal tortura, a lo que Dean movió levemente su cabeza hacia las pantallas de las cámaras viendo el porqué de la actitud amenazante de su hermano
La anciana, o más bien el monstro que se presentaba ante ellos con la cara de una anciana al saberse descubierta se echó a correr con él bebe en brazos siendo perseguida por Dean, quien fácilmente la derribo y quito al bebé, pero la muy desgraciada esta, comenzó a gritar pidiendo ayuda llamando la atención del guardia de seguridad, decidió salir corriendo de la tienda, gritándole a san que trajera las cosas, que más daba robar unas cunetas objetos para bebé, si ya habían hecho un escándalo en aquella tienda, pensó mientras corría hacia el auto de Sam, con este detrás de él.
- Debió seguirme desde el ataque en la casa –hablo con frustración Sam
- Eso ya no importa hay salir de la carretera, para en el siguiente motel
Ahora se encontraba cambiando con maestría a Bobby John, lo que había en ese pañal no era nada que él no hubiera visto antes, con Sam o con su bebe, mientras era observado por Sam quien revisaba unos papeles desde la mesa, aunque no creía que en ellos viniera, por qué un transformador se dedicaba a robas bebes.
Una vez cambiado metió al bebe en la cuna, la cual les había facilitado la encargada de ese motel al ver al pequeño bebe que llevaban con ellos.
- Si, así es si te quedas en silencio te daré dinero – bromeo Dean mientras depositaba al bebe en la cuna, ganándose una leve sonrisa de Sam que claramente pudo ver por su vista periférica. – bien es hora de dormir – golpeando levemente el pecho del bebe en forma de arrullo – tarareando la nana que solía cantarle a su bebé
- Harás que llore otra vez – se burlo
- Cállate le gusta – sonrió al ver al bebe dormir en la cuna
- Haa – menciono Sam con incredulidad al ver al bebe caer dormido ante los arrullos de su hermano – tu eres realmente no tan malo en eso
- Oh vamos apenas puedo mantenerlo con vida – menciono restándole importancia, pensando no solo en ese bebe si no el que tenía en cada también.
- No, en serio tienes algo que emanas cierta seguridad en ti, con un don natural serás un buen padre - observo
- He tenido que serlo últimamente y algo se aprende
- ¿Hablas de Ben? – pregunto curioso
- Si hablo de ben – se recordó que tendría que ser más precavido, no podía dejar ningún indicio ni sospecha de su pequeño secretito, aunque de cierto modo, sabía que estaba mal ocultarle la información a Sam, pero que más podía hacer – sé que no es mi hijo pero pienso a sentir que nose que si loes – si Lisa aceptaba al bebe como suyo, no podía evitar pensar en Ben en como un hijo propio igual, y es que el hecho de que Ben se hacía querer por su propia cuanta. – además quien crees que te cambiaba los pañales cuando tenías esa edad, yo te crie enano – se burló Dean
Sam se mostró ligeramente sorprendido ante la mención de su crianza sonriendo ladinamente parándose de su lugar, mientras Dean se daba la vuelta para servirse un trago, de la porquería de licor que había en aquella cutre habitación.
- Nose cuándo pienso en nuestra crianza – dijo Dean todavía de espaldas- pienso que podría hacerlo mejor sabes – menciono para darse la vuelta encontrando a Sam muy cerca, invadiendo su espacio
- Si nuestra niñez no fue la mejor - menciono Sam tan cerca del rostro de Dean que este pudo saborear su aliento, - pero nunca te agradecí por hacerla un poco más llevadera o si Dean
- De que hablas Sam – pregunto desconcertado ante la actitud de Sam recibiendo como una respuesta un beso agresivo que pedía abriera la boca para profundizar.
Se apartó con brusquedad girando su cara hacia otro lado, empujando levemente el cuerpo de su hermano no logrando moverlo ni un poco
-SAM ¿QUE HACES? - casi chillo la pregunta
- Haciendo algo que he querido hacerse desde que te volví a ver – respondió volviendo a juntar sus labios – mordiendo esta vez el labio inferior esperando que Dean abriera la boca y asa profundizar más el beso, pero lo único que recibió fue un fuerte pisotón en su pie
- Nose que estés pensando que vas obtener comportándote de esta manera Sam, pero no lo conseguirás – intento rodear a su hermano para alejarse lo más posible, o lo que ese cuarto le permitiera, sin embargo sintió un fuerte agarrón un brazo, que logro aventarlo hacia una de las camas que encontraban en aquella habitación
- En eso te equivocas Dean, obtendré lo que quiero y tú me lo darás – dijo dejando caer todo su peso en el de su hermano para aprisionarlo de esa manera, mordiendo con fuerza el hombro derecho de Dean hasta hacerlo sangran, levemente y lamer con lugar su cuello y hombro recién lastimado, una de sus manos básicamente destruía los botones de la camisa de Dean y la otra apretaba con fuerza la entrepierna de su hermano.
- Sam ¿qué estás haciendo? ¿Sam? detente – intentaba forcejear pero se encontraba realmente aprisionado en ese cuerpo del gigantón que tenía por hermano
- Vamos sabes que también quieres, - susurro de forma lasciva mientras lamia su cuello hasta llegar a su oreja – ¿ no te comportas como la putita que eres y te abres de piernas para mí?, como la última vez – pregunto mientras mordía con fuerza su oreja
Dean estaba en completo show, que es lo que estaba pasando ahí, realmente ¿quién estaba encima suyo era su hermano?, o ¿quizá era algún transformado? que había adquirido la forma de su hermano, realmente no había hecho ninguna prueba a Sam cuando se encontraron nuevamente, n no podía ser, el no sabría que su hermano y el habían tenido ese tipo de encuentros ,o quizá estaba siendo poseído, no sabía pero alguna explicación debía haber para que el Sam que tenía encima restregándose con brusquedad en su cuerpo, se comportara de esa manera.
Pero más importante aún debía encontrar la manera de salir de esa, se recordó saliendo de su show momentáneo sintiendo los dedos de su hermano explorar y apretar con fuerza su trasero.
El sonido de una pequeña explosión, seguido de los nuevo llantos del bebe, hicieron que ambos voltearan hacia la cuna no creyéndose lo que observaban sus ojos, en la pared se encontraban restos de lo que parecía ser carne como si él bebe hubiera explotado, aquella había sido una oportuna distracción , que aprovecho, para golpear la entrepierna de Sam y poder empujarlo, corriendo hacia la cuna pero al llegar a ella, se encontró con un pequeño bebe de piel morena idéntico al de la caja de pañales, de aquel bebe de piel rosada y ojos claros ya no quedaba nada.
Volteo a ver a Sam que estaba igual de sorprendido que el olvidándose momentáneamente de lo ocurrido hace poco minutos.
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