Volví a casa después del trabajo. Eran cerca de las ocho de la noche cuando abrí la puerta del departamento.
Deje mis zapatos en la entrada, el bolso en el sofá y fui directo a la ducha.
Tenía cinco días sin ver, chatear o ver en persona a Yoongi, de alguna manera él siempre estaba ocupado llegando a leer mis mensajes sin responderlos. Yo sinceramente no sabía que había hecho mal. Ya no sabía ni que pensar.
Suspire bajo los hilos de agua tibia y seguí enjuagando mi cabello.
Ya era viernes por lo que había quedado con Taelien para vernos en un club. ¡Nos veríamos en persona por primera vez!
Como me había mencionado que llevaría a un "amigo" decidí hacer lo mismo e invitar a alguien. Se me ocurrió escribirle a Suga, sin embargo, este no respondió. Terminé por invitar a Justin, quien animado, acepto rápidamente.
En hora y media estuve listo y saliendo de casa a tomar un taxi.
En el camino volví a textear a Yoongi.
<<Amor, saldré con unos amigos ¿No te importa, verdad?>>
Esperaba que no me respondiera. Pero mi sorpresa fue grande cuando el celular vibro en mi mano.
<<Sólo si puedo ir...>>
Una sonrisa se dibujó en mi rostro.
<<Claro amor, estaremos en el purple rouge, te enviaré la dirección>>
Comencé a textear emocionado porque vería a mi novio después de tanto tiempo. Tendría la oportunidad de reprocharle su abandono y pedirle una explicación para toda esa apatía hacia mí y...
- Oh...mierda... - Fue después de enviar el mensaje que me di cuenta de algo tan grande que no sabía cómo lo había pasado por alto. Justin estaría allí... - ¿qué hice?
El corazón comenzó a latirme muy rápido mientras intentaba inventar una excusa o comunicarme con el castaño para informarle. Pero varios mensajes comenzaron a llegarme. De Tae pidiéndome que me apresure, que estaba en la fila y faltaba poco para entrar, de Justin diciéndome que esta noche me daría tan duro que me iba a sacar los órganos por la boca, de Yoongi con un "ok" y de la empresa de telefonía para informarme que me quedaba poco saldo.
Pero además había un mensaje más.
<<Lamento no haber respondido antes, estaré en el Purple Rouge hoy, nos vemos allí. Hoy serás mío sí o sí>>
Era Suga. Había cometido el pecado de anticiparle horas antes donde estaría con Tae.
- ¡¿QUÉ?! – Exclamé en voz alta y el taxista me vió por el espejo retrovisor.
¿Yoongi, Suga y Justin en el mismo lugar?
¡No, no, no, no, no!
Para cuando me di cuenta. Entre intentar comunicarme con cualquiera de los tres – sin saber realmente que excusa decirles a cada uno – y el leer los mensajes, de alguna manera había llegado más rápido de lo que esperaba a las puertas del club nocturno. La fila de personas se extendía hasta llegar a la esquina de la calle, todos esperando para entrar al lugar. Pagué y baje aun intentando comunicarme con alguien, pero parece que no tenía señal o habían apagado los celulares...
Camine por la acera concentrado en traer a la vida la señal de mi móvil cuando escuché aquella voz.
- ¡Joder, Hoseok! Siempre me haces lo mismo... ¡No! No quiero escuchar tus jodidas excusas. ¡Jódete!
Subí la cabeza y busque con la mirada al dueño de aquella voz tan conocida para mí.
- ¡Vete a la mierda, J-hope!
Mis ojos se pasearon entre la fila de personas hasta que nuestras miradas se encontraron.
- ¡Minnie! – El peli naranja corrió hacia mi abandonando la fila y se me echo en los brazos.
Lo recibí con los brazos abierto y listo para aguantar su peso.
Nos abrazamos un rato y volvimos a la fila. Estábamos tan cerca de la puerta que podíamos escuchar las mezclas de Rihanna que sonaban en ese momento colarse por la puerta y salir.
- Tae, necesito tu ayuda. – Me aseguré en sonar preocupado.
El chico quien se movía al ritmo de la música me prestó atención.
- Yoongi vendrá – Le vi esbozar una sonrisa pero borrarla enseguida al verme negar con la cabeza
- ¿Qué tiene de malo?
- Que también viene Justin y por si fuera poco; Suga también me estará buscando...
- ¡¿Qué?! ¿Cómo es que te metiste en ese lío, Minnie? – Exclamo dejando de bailar y abriendo desmesuradamente la boca - ¿Qué piensas hacer?
Observe a todos lados buscando que hacer cuando mi celular vibró en mi bolsillo.
Con las manos temblando, respondí la llamada.
- Estoy caminando hacia la entrada, no te veo ¿Dónde estás?
Trague hondo y miré a Tae. Le hice señas susurrando el nombre de Justin.
- Oh...eh...yo estoy cerca de la puerta, muy cerca...
- Umm... - Le escuché dudar un rato – Creo que ya te vi...
Finalizó la llamada y entro la siguiente.
- Voy en el taxi ¿Ya estás allá?
Perfecto, Min Yoongi. Le hice señas nuevamente a mi amigo.
- S-sí amor...yo... - De repente sentí la mano cálida de alguien posarse sobre mi hombro derecho.
- ¿Cómo no reconocer ese trasero? – dijo muy cerca de mi oído y me estrujó una nalga.
- ¡¿Cómo?! ¿Quién está allí contigo, Park Jimin? – Exclamó Yoongi al otro lado de la línea y yo quise que el mundo parara y bajarme.
Estaba seguro que estaba pálido.
- Eh... ¡No! Sólo es Tae y...y ¡Su novio! Sí, ha sido con él...
Yoongi guardó silencio por un momento mientras mis acompañantes me veían con una expresión de confusión en el rostro y mi amigo me pedía explicaciones mediante señas y susurros.
- Bien, en diez estoy ahí. – Concluyó dudando un poco y finalizó la llamada.
Enseguida mire a Tae y a Justin quien se había parado a su lado, Ambos compartían la misma expresión de incredibilidad y confusión en el rostro.
Yo miré al peli naranja y le puse mi cara de perrito entrelazando mis manos como si a rezar me pusiese. Él entendió enseguida.
- Oh no...no, no y no. ¡Ni siquiera nos conocemos! – Respondió señalando a mi amante.
Justin seguía sin entender. Suspiré.
- Yoongi, mi novio, viene en camino – Expliqué – ¿Ustedes podrían...fingir...ser... novios?
El castaño abrió los ojos todo lo que pudo.
- Tae, él es Justin – Comencé a presentarlos pero el menor me interrumpió carraspeando.
- En realidad es Jungkook---
Al fin supe su nombre real...
- Taehyung – contesto mi amigo viéndolo a la cara.
Bien, ahora sabía el nombre real de mis acompañantes.
- Yo soy Jimin – Decidí sincerarme – Y... sólo será por hoy, sean naturales ¿Sí?
Jungkook sonrió como estaba acostumbrado a hacer; Con esa picardía nata y tomó a Taehyung envolviendo su cintura en un abrazo. El peli naranja enseguida se sonrojo hasta las orejas.
Acto seguido sentí otro par de manos tomar mis hombros desde atrás y comprendí por qué Jungkook aceptó ayudarme.
Era Yoongi. Le sonreí con nerviosismo.
Cuando menos lo pensé nos adentramos en el club sin siquiera darme tiempo a sugerir ir a otro local, además que ¿Con cuál excusa podría sugerir tal cosa? Era ridículo, el ambiente estaba genial, la música era perfecta, era mitad de precio en la barra hoy y habíamos estado muy cerca de la puerta.
Aun si me hubiera dado oportunidad de sugerirlo, estaba seguro que – por más que Tae y Jungkook me apoyaran- seria simplemente forzado y absurdo siquiera mencionarlo...
No fue hasta que el ambiente me envolvió que caí en la realidad, una realidad que aunque no había ignorado, no le había prestado la cuidadosa atención; El sexy internauta que se supone que hoy me estaría buscando...
Volví a intentar la llamada, pero seguía sin caer. Sólo caía el molesto y odioso buzón de mensajes.
Los nervios me carcomían a medida que avanzábamos adentrándonos cada vez más al lugar con dirección a la barra a buscar nuestro servicio. Yoongi, increíblemente, estaba disfrutando de la música moviendo la cabeza y los hombros al ritmo de la melodía y el beat mientras nos abríamos paso entre la multitud.
Jungkook y Taehyung caminaban tomados de la mano, siguiendo con el cuerpo el ritmo de la música.
Yo solo tragaba fuerte mientras intentaba una y otra vez comunicarme con Suga. Tenía que advertirle que estaría con Yoongi para que no se acercase o que si lo hacía no lo haga de ninguna otra manera que amistosa...
Pero no lograba dar con él...
Me acerqué a Jk.
- Oye, estuve tratando de comunicarme contigo para avisarte de Yoongi – Le grité contra el oído para que solo el pudiera escucharme – Pero no caía la llamada...
- ¿Eh? Tal vez porque estaba pasando un túnel en ese momento... -Respondió simplemente.
Yo no sabía que pensar mientras los nervios me revolvían las tripas y mis dientes masticaban mis uñas con todo y cutículas.
Llegamos al fin a la barra y el pelinegro animado pidió cuatro Sex in the beach.
- ¿Te sucede algo? – Me preguntó con tranquilidad mientras esperábamos a que nuestras bebidas estuvieran listas.
- ¿Yo? S-no...estoy perfecto – Le di una sonrisa fingida. Él me sonrió y deposito un limpio beso en mis labios.
Era el primer beso que me daba en mucho tiempo.
Los tragos estuvieron listos y brindamos, todos bebieron pequeños sorbos mientras yo apuré el mío hasta el final. No sabría decir si por los nervios o por el plan que secretamente mi subconsciente formaba.
- ¡Tengo que ir al baño! – Grité a los chicos.
- ¿Te acompaño? – Se ofreció Yoongi
De alguna forma se estaba comportando raro...
- ¡No! ¡Tae, vamos!
Lo halé del brazo haciendo que su bebida se derramara un poco y lo arrastre conmigo.
Una vez en el baño y verificando que Yoongi no nos haya seguido cerré la puerta y me dirigí a él.
- Aún no me comunico con Suga, temo que me encuentre y bese frente a Yoongi – Le expresé con desesperación.
Tae torció el gesto.
- ¿Le dejaste un mensaje? – Pregunto mientras de arreglaba unos mechones de cabello naranja frente al espejo.
- Ummm...no...no se me ocurrió.
- Déjale uno, en algún momento lo notará...
- ¿Y si no?
Dejo su cabello y me miro a través del espejo con la expresión seria.
- Pues... tendrás que prepararte para dar muchas explicaciones a Yoongi...
Trague en seco y saqué mi celular. Marque el número que ya tenía cerca de 30 intentos fallidos de comunicación. La contestadora naturalmente, cayó.
<<Deje su mensaje después del tono *Beep*>>
- Hola, es Minnie. Oye hoy estaré en el club con mi prometido. Por favor no me saludes. Espero entiendas y lo siento... Te escribo luego...
Colgué la llamada dando por finalizado el mensaje.
Mire a Tae y él me sonrió dándome ánimos. Dio un trago a su vaso y me ofreció. Tomé el recipiente y justo cuando iba a tomar mi celular sonó.
<<Estoy en el club, te veo en la barra>>