Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un nuevo camino a casa por Aria Rovimare

[Reviews - 45]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

...

 .


El problema de Naruto.


.


 . 


Sasuke permanecía inmóvil, afirmando fuertemente sobre su escritorio los brazos que amenazaban con ponerse a temblar. Aquella angustia que le llenaba cada vez que pensaba en cómo se desarrollaron sus anteriores vidas, regresó a él fuertemente, seguido de una gran revelación, pues jamás creyó que al no conocerle físicamente en esta vida, creciera en él la sensación de haberle echado de menos. En ese momento, e intentando respirar con normalidad, sintió que su camisa le apretaba tanto que fácilmente podía ser dos tallas más pequeña de lo que Sasuke recordaba. Aun así, intentaba estabilizar su respiración después de sentir que en cualquier momento se ahogaría por el desconcierto de encontrarse frente a Naruto en una circunstancia tan increíble como aquella. Y él que se atrevió a creer que durante esos días descansaría de su búsqueda para encontrarle…


Tras unos segundos que para todos fueron eternos, Sasuke al fin se sintió capaz de pronunciar una palabra coherente ante la situación —Naruto…— y eso fue lo único que dijo.


Por un breve segundo, Sasuke vislumbró un tinte de oscuridad y desconcierto en la mirada contraria en respuesta a la enunciación de su propio nombre. No obstante, casi inmediatamente el regreso del mal humor en las facciones de Naruto provocó que Sasuke, con todo el autocontrol que pudiera ejercer en una situación como aquella, respondiera como correspondía. ¡Él era un profesional, y esto no debería cambiar nada! —Uchiha Sasuke, investigador privado.— añadió después, sacando una de sus tarjetas de uno de sus bolsillos y dejándolas sobre la mesa.


—No quiero su ayuda, Sakura. Puede ser cualquiera, menos él.— Enunció Naruto firmemente, sin quitarle los ojos de encima de Sasuke. Sasuke se impactó ante el rechazo inmediato, aunque supo disimularlo.


Sakura, acostumbrada a que su hermano no quisiera cooperar, ignoró completamente sus palabras y le respondió: —Dije que te llevaría con quien creo, se tomará tu problema con más seriedad, y ese es Sasuke, el primo de Hinata. Así que, saluda como corresponde Naruto. —Le instó Sakura dándole un pequeño empujón en el brazo. Naruto le dirigió una leve mirada para inmediatamente regresarla al otro chico.


Resignándose y dejando caer los brazos todavía cruzados a ambos lados de su cuerpo, decidió que de nada serviría seguir negándose a esas alturas.


—Hola— saludó Naruto después de dar un paso al frente para acercarse al escritorio de Sasuke, no le agradaba nada que su hermana le tratara como a un niño cuando ya era un adulto. —Como ya dijo Sakura, mi nombre es Naruto… —Sakura carraspeó dándole a entender que debía proseguir. —Mucho gusto en conocerte.— Sasuke percibió cuanto le costó a Naruto arrancar esas palabras desde sus entrañas.


—Como puedes ver, Naruto no quería venir a pedir ayuda, y al parecer no la tuya en específico.— Sakura confirmó las sospechas de Sasuke mientras tomaba una de las tarjetas que este había dejado antes sobre la mesa.  


—Eso no importa.— Enfatizó Naruto, cosa que intrigó a Sasuke. —Lo más importante es que yo puedo…


—Cuidarte solo, si, ya lo dijiste antes.— Sakura suspiró, ante la actitud orgullosa de su hermano. —Naruto, si fueses capaz de eso, no estaríamos aquí en primer lugar.— dichas esas palabras, la joven tomó asiento frente a Sasuke. —Desde hace semanas Naruto ha sentido que le siguen, eso mientras estaba en Suna y al venir aquí el problema no ha desaparecido.


—¿No dieron ningún aviso a la policía?— cuestionó Sasuke, siguiendo los esquemas establecidos en su trabajo, aunque internamente lo único que quería era averiguar si Naruto recordaba algo acerca de él y su vida anterior. El hecho de negarse a necesitar su ayuda en específico era demasiado relevante en su situación como para simplemente dejarlo pasar. Pronto se encargaría de conocer sus verdaderas razones para quererle lejos.


—No, Naruto no quiere que nuestro padre se entere de esto, por lo que no lo hicimos.


—¿Sabes que probablemente esto se hubiese resuelto más rápido de haberlo hecho?— Sasuke se dirigió directamente a Naruto con esta pregunta. En sus ojos azules Sasuke logró visualizar un esbozo de pesar que con esfuerzo el otro se preocupaba en ocultar


—Mi padre, me ha mantenido oculto del mundo por años para que no pasaran cosas como estas… tiene muchos enemigos.— aclaró Naruto.


Debido a esa confesión Sasuke lo comprendió todo. El padre de Sakura y por tanto de Naruto, era un reconocido político en toda Konoha y el país, y por tener tantos enemigos era bastante lógico que hubiese decidido ocultar a Naruto en algún lugar del extranjero para evitar que le dañaran. El por qué Sakura siempre estuvo a la vista de todo el mundo lo averiguaría más tarde.  


—Creo que puedo entender eso…— Sasuke de pronto recordó algo importante.— Naruto, ¿Cómo te apellidas?


—Wakahisa*… es el apellido de mi madre.— Sasuke no recordaba a ningún Wakahisa Naruto en los registros del gobierno.


—¿Creen que exista algún registro donde pudiesen descubrir quién eres?


—No— respondió Sakura rápidamente. —Papá se encargó de eliminar cualquier registro o pista que pudiera ayudar a que dieran con mi hermano, es demasiado sobreprotector.— Y así, Sasuke se dio cuenta de que jamás le hubiese encontrado por sus propios medios.


—Entonces, ¿Tienen alguna idea de quien pueda estar siguiéndote?


—Ninguna, por eso es que Sakura-chan y Hinata me obligaron a venir aquí.— respondió Naruto sin mirarle directamente, quien cada vez que terminaba una frase hacía una extraña mueca imperceptible casi para todos, menos para Sasuke claro. Posiblemente fuera a causa de su frustración.


—No seas quejica, Naruto, queremos cuidarte.— Agregó Sakura.


—No, quieren que él me cuide.— Replicó Naruto a Sakura. Pareciendo verdaderamente enfadado, apuntaba a Sasuke con su mano derecha mientras veía firmemente a su hermana menor. Sakura no se preocupó por eso y se dirigió nuevamente a Sasuke.


—Este idiota, intentó enfrentar por si solo a un hombre que parecía ser quien lo seguía, sin siquiera estar seguro de que lo era. Como no conocemos las intenciones que tiene al perseguirlo, Hinata y yo decidimos que sería mejor que alguien averigüe quien es exactamente y qué es lo que quiere.


—¿Y eso implica que lo vigile a él también de hacer cualquier estupidez?— añadió Sasuke, quien a pesar de todo se divertía por la situación. No importaba cuanto tiempo pasase, aún con su imprudencia, Naruto seguía siendo Naruto.


—Nos estamos entendiendo.— Sakura se acomodó más en su asiento esperando la réplica segura que le daría su hermano.


—¡Intentar defenderme de un extraño no es una estupidez!


—¡Lo es si no sabes a quien te enfrentas idiota!, ¿Qué pasaría si es algún tipo de asesino?— Naruto se quedó quieto ante la última pregunta que Sakura hiso. —Piensa en las personas que te queremos… si te pasara algo grave…— Sakura no le miró mientras decía eso. Sasuke notó que ella verdaderamente estaba afligida por todo aquello.


—…Está bien. Lo acepto…— dijo Naruto después de una pausa, apenado. —Por ti, Hinata y mis padres…— añadió esta vez mirando a Sasuke a los ojos completamente decidido, sin rastro del enfado anterior. —Puedes comenzar hoy si quieres. — esa extraña mueca nuevamente apareció en el rostro de Naruto como si estuviese conteniendo algo más, pero, tras un instante decidió regresar su mirada a otro lugar como hacía antes de hablarle directamente.  


—Bien.— respondió Sasuke a secas, comenzando a irritarse debido a la evidente necesidad de Naruto de evitarle.  


Tras dejar en claro las condiciones del trabajo que Sasuke realizaría con varios disgustos de por medio, un Naruto más tranquilo y una Sakura bastante preocupada dejaron su oficina.


Sasuke al fin pudo relajarse. Comenzaría su trabajo de vigilante de Naruto al día siguiente y, no lo podía creer, al final todo se estaba desarrollando como el zorro predijo. Naruto llegaría solo, con el tiempo. Lo que le parecía más increíble de todo era que este fuese hermano de Sakura. Quizás, si hubiese aceptado esas invitaciones a fiestas que ella siempre le hacía cuando eran más jóvenes se hubiese encontrado antes con Naruto, aunque con lo dicho ese día, probablemente no hubiese servido de nada pues este vivió en Suna por todos esos años.


Agotado, decidió que pasaría por el templo a darle las noticias al zorro y se marcharía a casa, pues al siguiente día comenzaba su rutina junto a Naruto. Cuando llegó al templo, Kurama no pidió grandes explicaciones acerca del encuentro, pero Sasuke notó que la noticia logró calmarle mucho en comparación a cómo se encontraba con anterioridad. Dejaron el claro que resolverían el problema de Naruto y averiguarían más de su actual vida antes de realizar cualquier acción importante.


De camino a casa, Sasuke se percató de que en esta primera impresión, notó varías diferencias en la personalidad de este Naruto con el que había conocido en sus recuerdos, pues aunque seguía manteniendo ese espíritu confrontacional e impulsivo, muy a su pesar, le faltaba esa chispa que irradiaba entusiasmo a cuanto le rodeara. Probablemente el también tuviese muchas diferencias de ese tipo con su anterior vida. ¿Kurama las habría notado en él como él hiso con Naruto? Posiblemente no, ya que en varias ocasiones se dirigía a él como si fuese el Uchiha Sasuke del pasado.


Cuando llegó a casa, no pudo evitar comparar el recuerdo reciente de Naruto, de aquel que estuvo en su oficina, con la imagen del libro de su padre. Al revisarlo, eran prácticamente iguales, exceptuando el cabello algo más largo que en el dibujo y que ya no portaba esas marcas en las mejillas. A Sasuke le hubiese agradado verlas.


Guardando el libro, salió del estudio se preparó algo de comer y más tarde se preparó para dormir.


Ya estando recostado sobre la cama y con la vista centrada en el techo, rió quedamente al darse cuenta de que al verlo nuevamente frente a él, sus deseos de patearle el trasero que reunió durante años habían quedado completamente en el olvido. Al contrario, el darse cuenta de que echaba de menos al Naruto que conoció en sus sueños (porque aun no conocía del todo a este nuevo Naruto), fue capaz de reconocer que si las cosas se desarrollaban como él NO quería intuir ni creer que lo harían, estaría completamente perdido. Debido a esto, no sabía si su deseo de encontrar parte del antiguo Naruto en este que se presentó frente a él era en realidad una buena o mala idea.


Después de que el cansancio le superara y se adentrara en un profundo sueño, y tras muchos años, Sasuke se encontró nuevamente en uno de sus recuerdos. Se vio a sí mismo luchando lada a lado junto a Naruto fusionando sus fuerzas para derrotar al enemigo y también se vio sonriendo a causa de la emoción. Muchos más recuerdos pasaron por su mente, pero ninguno que no hubiera visto con anterioridad.


Sorprendentemente al despertar, las emociones que creía permanecerían en su interior por bastante tiempo angustiándole no estaban allí, en cambio, solo estaba el alivio de verse por fin separado de ellas. Quiso atribuirlos a que el paso de los años había cambiado algo, y no a que justo el día anterior Naruto hubiese regresado físicamente a su vida.  


Tras darse un baño y vistiendo ropa informal, solo una camiseta y chaqueta negra, más unos jeans y las infaltables zapatillas para pasar desapercibido, tomó su desayuno para partir al lugar donde trabajaba Naruto: Una escuela primaria privada.


Si, increíblemente Naruto era profesor, y no sabía si para desgracia o fortuna, profesor de la asignatura más odiada por Sasuke durante toda su vida: Historia. Sasuke llegaba a creer que todas las coincidencias que les rodeaban eran absurdas.


Se suponía que alrededor de esa hora de la mañana Naruto llegaría al lugar, pero desde su auto y tras varios minutos durante los cuales todos los chicos y chicas ingresaron al lugar, Sasuke no lo vio aparecer en ningún momento. Veinte minutos después de que los niños estuvieran en clases, Sasuke le vio acercándose por la esquina que estaba a espaldas de donde se estacionó. Parecía preocupado por algo, y de una manera bastante sigilosa para sorpresa de Sasuke, vigilaba todo a su alrededor. Estando a unos pocos metros de la entrada de la escuela, se detuvo, relajó sus hombros y retomó su camino con mayor tranquilidad. Cuando el guardia de la entrada le abrió la puerta Naruto hizo una leve reverencia y se adentró en el lugar a pasos apresurados.


Durante las horas en que Sasuke permaneció vigilando el lugar, esperando a que Naruto terminara su turno de trabajo Sasuke no llegó a ver a nadie sospechoso rondando por allí ni en ninguna de las calles cercanas a la escuela. Cerca de las dos de la tarde, dejó su auto estacionado cerca de la escuela y se dirigió a comprar algo para comer y mientras regresaba notó como un hombre de mediana edad y apariencia algo desaliñada le dio una mirada que rápidamente desvió para seguir caminando hacia la dirección contraria en que Sasuke lo hacía. Sasuke tomó nota del aspecto del sujeto, pues lucía bastante sospechoso.


Unas pocas horas más tarde, después de que la mayoría de los niños se retiraran para ir a casa, Naruto salió del recinto despidiéndose de otro de los profesores. Caminó hasta su propio automóvil que era bastante sobrio al igual que su actual apariencia. Una parte de Sasuke deseó que este hubiese mantenido al menos ese rasgo de su personalidad intacto, aquel que le hacía resaltar, no como ahora lucía. Desconcertándose ante su propio pensamiento, encendió el automóvil para seguir a Naruto a donde quiera que se dirigiera.


Al llegar a una biblioteca Naruto se detuvo y saliendo del auto se adentró en ella. Sasuke volvía a fruncir el ceño pero ahora por algo diferente… ¿Naruto? ¿En una biblioteca? Le parecía tan irreal como que él hubiese aceptado una petición de Sakura de ser su pareja. Seguramente esa era otra de las tantas diferencias entre el Naruto que él recordaba y el que se encontraba frente a él en ese momento. Sin embargo, no creyó que esto pudiese significar algo malo para él.


Cuando Naruto se perdió en el interior del lugar, Sasuke pudo ver al mismo hombre sospechoso que vio horas antes, acercándose desde la distancia. Colocando su cámara fotográfica en dirección al sujeto, le tomó una fotografía, sin embargo, cuando este estuvo un tanto más cerca notó en su rostro una señal de reconocimiento del auto de Naruto. Sin pensárselo demasiado, Sasuke dejó rápidamente a un lado la cámara y salió del auto para rápidamente adentrarse en la biblioteca.


El lugar tenía varios pisos con estantes por doquier. Tras recorrer el primero y ver que lo que buscaba no se encontraba allí, subió hasta el segundo piso y entre dos estanterías de libros obviamente de historia, encontró a Naruto que estaba a su parecer, increíblemente inmerso en la lectura.


Cuando estuvo bastante cerca del otro, Sasuke decidió llamarle.


—Naruto.— dijo seriamente.


Naruto se espantó a tal grado que lanzó el libro por los aires y tras caer frente a él en el piso creando un ruido sordo, clavó su mirada en Sasuke.


—¿¡Q-qué haces aquí!?— no pudo evitar exaltarse ante la compañía. Dio rápidamente un paso hacia atrás para alejarse, la incomodidad en sus ojos.


—¡Shhh!— se escuchó como la bibliotecaria del piso a los lejos le reprendía.


—¿No eres capaz de guardar silencio, idiota?— reprendió Sasuke, manteniendo su tono se voz bajo, aunque sin perder su fuerza.


Alejando la incomodidad de su semblante e instalando en su rostro la molestia, Naruto respondió: —No me llames idiota.— Y al decirlo manteniendo la calma, sorprendió de Sasuke. El Naruto del pasado le hubiese contestado con otro insulto, y claramente, sin estar calmado. Comenzaba a pensar que estaba comenzando a comparar demasiado.


—¿Cómo quieres que te llame si haces escándalo en una biblioteca?— Sasuke decidió finalmente, contrarrestar.


—Me sorprendiste, es razón suficiente para exaltarse.


—Pero no para gritar como lo hiciste.


—Para mí lo es.— Sin dudas el enfado de Naruto seguía allí. Después de recoger el libro que estaba a sus pies, continuó. —¿Qué haces aquí, Sasuke? Creí que ayer llegamos a un acuerdo.


—Mi trabajo.— dijo Sasuke en respuesta, mientras leía los títulos de algunos libros a su alrededor.— ¿No es eso obvio?


Mirándole de reojo, Sasuke pudo notar como Naruto estaba conteniendo las ganas que tenía de recriminarle por acercarse. Y aunque a Sasuke incordiarle un poco antes le hubiese resultado divertido, no era la ocasión para ello así que, optó por aclararle lo que hacía allí, en ese momento frente a él.


—Me vi en la necesidad de acercarme, he visto a alguien sospechoso allí afuera.


Naruto no parecía sorprendido. Guardando el libro que aun sujetaba entre sus manos en el estante frente a él, cerró sus ojos un instante, parecía realmente cansado.


—Hoy en la mañana al salir de casa todo estaba bien, pero unas cuadras antes de llegar a mi trabajo le sentí. No sé cómo pero, aunque no he podido verlo directamente, sabía que estaba allí.— Al oír esto, Sasuke comprendió la actitud de Naruto mientras llegaba a trabajar.— Como has podido ver, eso me retrasó un poco en la mañana.— terminó, sacando otro libro y comenzando a revisarlo.


—Sí, lo noté.


—¿Por qué entraste?, ¿Es porque él está aquí también?— Claro, esa era la razón más obvia para pensar, pero Sasuke no le diría que entró allí sin pensárselo ni siquiera un segundo, al reconocer un instinto de protección que recordaba solo de sus sueños más que por otra cosa.


—No sé si ha entrado a este lugar, pero yo vine para evitar que hagas otra “estupidez”.— inventó Sasuke como respuesta, pues ni si quiera tomó aquella opción como una posibilidad.


A Naruto se le crisparon los nervios.


—Bien.— tras esa seca y contenida respuesta, Naruto cerró el libro en sus manos y se alejó de Sasuke para acercarse a la bibliotecaria. Detrás del escritorio de esta se podía ver hacia la calle ya que las paredes en realidad eran grandes ventanales que abarcaban todo el largo y ancho de lo que debió ser una muralla. Sasuke se acercó un poco a esta, y afuera reconoció al mismo hombre que antes vio, pero ahora estaba junto al auto de Naruto, esperando. Sasuke decidió que entrar allí fue la mejor opción.


—Sakura dijo que intentaste enfrentarte a quien creías que te estaba siguiendo ¿No es cierto?


Naruto algo confundido por la repentina pregunta, volteó a verle mientras la bibliotecaria hacía el papeleo que necesitaba para llevarse el libro a casa por unos días, dispuesto a responderle, pero cuando lo hiso, notó que Sasuke ni siguiera le miraba al cuestionarle aquello. Con molestia regresó su atención a la bibliotecaria y respondió: —Así es.


Con leve sospecha, Sasuke consideró una nueva posibilidad que antes no pudo ver. Tal vez, el hombre que se encontraba afuera, afirmado junto al automóvil de Naruto fuera el mismo al cual Naruto quiso enfrentar.


—¿Recuerdas como era?— Sasuke le miró directamente ahora pero Naruto solo se preocupaba de guardar el libro en su mochila y sin verle, contestó:


—Debía tener como treinta años, casi calvo y alto, más que nosotros, casi del metro noventa.  ¿Por qué?


—De casualidad ¿No era aquel tipo?— Sasuke apuntaba con su mano hacía el sujeto en el exterior.


Naruto se acercó ha Sasuke para ver desde la ventana hacia abajo para posar sus ojos donde su auto estaba estacionado. El enojo se hizo notar tanto en su cara como en su tono de voz.


—¿Qué hace ese idiota junto a mi auto?


—¿Es él?


—¡Claro que es él!— Gritó sin poder evitarlo, y sin que Sasuke pudiera detenerlo Naruto corrió hasta las escaleras para ir a enfrentarse al tipo. Sasuke solo le siguió mientras escuchaba la reprimenda que les hacía nuevamente la bibliotecaria por no guardar silencio. Cuando llegó a la entrada, Naruto se encontraba frente al hombre, quien al sentir pasos detrás de quien le enfrentaba, apartó la vista y la puso sobre el recién llegado Sasuke.


—¿¡Qué diablos es lo que quieres y por qué me estás siguiendo!? ¿¡Responde!?— Interrogaba Naruto.


Sasuke logró ver como aquel sujeto llevaba ambas manos al frente después de guardar algo que planeaba retirar de su bolsillo antes de que él llegara. Alzó ambas manos a modo de disculpa.


—¡No sé de qué me habla! ¡Solo estoy esperando a alguien!— el hombre podría parecer sincero para cualquiera, pero no para Sasuke.


—Naruto, deja al hombre en paz.


—¡Pero Sasuke!, ¡Él es…!


—Déjale, solo ha sido un malentendido… ¿No es así? Señor… ¿?— Sasuke dejó aquella indicación para que aquel tipo soltara aunque fuera su nombre de pila. Pero cuando este se disponía a responderle, algo comenzó a sonar.


El hombre rápidamente contestó a su celular. La voz del otro lado de la línea no llegó a ser escuchada ni por Naruto ni por Sasuke, pero la mirada sorprendida que el extraño sospechoso les envió a ambos, dejó claro que algo que este no esperaba había sucedido. Segundos más tarde y sin decir una palabra más, se alejó corriendo del lugar dejando a Naruto desconcertado e irritado y a Sasuke con una serie de dudas creciendo en su cabeza.


—¿Por qué interferiste?— preguntó Naruto después de voltearse a verle, acercándose hasta él rápidamente. —¿¡Ese era tu sospechoso verdad!? , ¿¡Por qué lo dejaste ir!? ¡Dime!— exigió mientras afirmaba fuertemente entre sus puños el cuello de la chaqueta de Sasuke.


—Idiota, ese hombre tenía un arma.— afirmó Sasuke, inmutable.  


—¿Qué? ¿Dónde?


—Lo más probable es que la hubiese sacado de su bolsillo si no me hubiese aparecido. Por si no lo notas, la calle está casi vacía excepto por nuestra presencia. El escenario casi perfecto para un crimen.— Naruto lo soltó pero no apartó la mirada de los ojos contrarios. Aunque se notaba algo arrepentido por sus acciones, esperaba más explicaciones.— Cuando recibió la llamada, se vio completamente sorprendido por algo.


—Eso pudo deberse a cualquier cosa.— Replicó Naruto.


—Claro, pero no tomas en cuenta que este hombre tenía un arma, te ha seguido desde Suna y la sorpresa que reflejó obviamente se dio por algo que no esperaba. Algo que él y quien sea que lo esté ayudando no esperaban.— Explicó.


—¿Crees que hay alguien más en todo esto?— Naruto no podía ni quería creerse eso.


—Es solo una posibilidad.


Permanecieron en silencio hasta que Naruto, después de haber procesado la información agregó:


—Suponiendo que todo lo que dices es cierto… ¿Qué es lo que se supone no estaba en sus planes?


—¿Qué más crees? Idiota. No esperaban que alguien te acompañara.


Naruto se enfadó tanto por el insulto, como por no darse cuenta de eso antes.


—Deja de llamarme idiota, bastardo.—en respuesta, Sasuke solo se limitó a esbozar una media sonrisa que para Naruto más que tener sentido era exasperante, sin embargo, para Sasuke lo significaba todo. Si lo llamó “bastardo” significaba que estaba llegando a él, aunque no fuera de la mejor manera. —Me voy a casa.


Sasuke observó a Naruto hasta que este con movimientos demasiado rápidos subió a su propio auto. Segundos más tarde y estando ya en el suyo propio, Sasuke condujo siguiendo a Naruto tal y como había hecho todo el día. Estaba claro que aquel hombre ocultaba mucho más de lo que dejaba ver a simple vista. Él estaba casi seguro de que la mirada que le dirigió el hombre tras la llamada, era una de reconocimiento. Aquel sujeto sabía quién era Sasuke.


Muchas calles más adelante a Sasuke comenzó a hacérsele conocido el recorrido por el cual Naruto estaba conduciendo. Demasiado conocido, y Sasuke en verdad se preguntó si el destino, después de haberle alejado tanto de Naruto, ahora quería retribuirle dejándole estar demasiado cerca. Su respuesta se respondió cuando Naruto estacionó su auto frente a la casa que se ubicaba exactamente frente a la suya, y se adentró en ella.


Afirmando su frente sobre el volante del auto, Sasuke no sabía si ponerse a reír o llorar por su absurda vida y las extremas coincidencias que le daba el destino a estas alturas. Le preguntaría cuanto antes a Naruto cuanto tiempo llevaba viviendo en ese lugar.


Verificando que no había nadie sospechoso cerca, Sasuke aparcó su propio auto y se acercó al lugar donde residía Naruto, quien ya se había adentrado en su propia casa. Tocó a la puerta dos veces antes de que este se dignara a atenderle. Tras el sonido de una llave removiendo una cerradura la puerta se abrió.


—¿Sasuke? — Naruto estaba más confundido que antes. El día anterior Naruto estuvo de acuerdo en que le vigilarían para averiguar quién le estaba siguiendo y con qué motivos pero, no se esperó que Sasuke se le apareciera para hablar con él dos veces el mismo día y menos en su propia casa. Sasuke, por su parte, recordaba claramente su trato, pero no pensaba cumplirlo al pie de la letra, después de todo tenía otros asuntos pendientes con él.


—¿Desde hace cuanto vives aquí?— Sasuke fue directo al lo importante. Naruto le dio una mirada fastidiada, seguida se una sonrisa que Sasuke no le había visto antes, estaba llena de ironía, al igual que sus siguientes palabras.


—Esto no forma parte de tu trabajo, ¿O sí, bastardo?


—Es información relevante para el caso.— dijo Sasuke, completamente serio. Dejándose una nota mental de averiguar la verdadera razón detrás de la infundada aversión que tenía Naruto hacía él.


 — Y yo soy tu caso.


—Responde.


Naruto desvió su mirada y todavía molesto respondió: —Desde hace casi un mes.


Sasuke no se lo podía creer, ¿Tantas diferencias de horarios tenían? No, probablemente fuera culpa suya por estas tan enfrascado buscándole lejos que jamás se había concentrado en sus alrededores. No existían palabras para definir como se sentía Sasuke en ese momento, pero sí que las había para como estaba Naruto.


—Escucha, Sasuke.— este le prestó atención.— Sé que lo has notado, pero yo no quería nada de esto y fue por eso que acordamos algo ayer. Yo no sentiría tu presencia durante todo el tiempo que esto dure, pero de todas formas Sakura y Hinata estarían felices. Jamás he necesitado que alguien más me cuide bastardo, así que espero que comprendas que tu presencia es una completa molestia para mi, incluso ahora.


Sasuke no se negó a sí mismo que esas palabras le dolieron más de lo que esperaba, después de todo aunque Naruto no le quisiera cerca, su forma de interactuar actual era bastante similar a la que tenían mientras formaban un equipo aunque solo llevaran un día de “conocerse”. Este Naruto era tan similar y tan diferente a su vez del Naruto del pasado, que le complicaba todos los planes, los que tenían que ver con su antigua vida y los planes que tenía para sus sentimientos, porque sus emociones, oh, esas sí que no las podía controlar.


Ahora, este Naruto no le quería cerca, mientras que el de sus recuerdos le buscaba para que volviera con él a Konoha. Para calmarse, y fingir indiferencia como siempre hacía, se repitió a si mismo que este no era Uzumaki Naruto, sino que era Wakahisa Naruto, el hijo oculto de un político.


—Tengo eso más que claro, Wakahisa Naruto.— Sasuke se obligó a nombrarle de esa manera. Y por alguna razón incomprensible él notó que a Naruto no le agradó en lo más mínimo que le llamara por su nombre completo, pues su agresividad y confrontación disminuyeron al desviar la azul mirada de la suya. —Pero cuando estoy haciendo mi trabajo, me involucro todo lo que sea necesario, incluso si le desagrado a mis clientes. De hecho me extrañaría que no sintieras molestia ante mi presencia. —decidió terminar con una de sus más arrogantes sonrisas de medio lado.


A los ojos de Sasuke, Naruto se enfadó todavía más con él ante ese gesto. Se alegró al saber que el menos eso no había cambiado en él.


—Ahora —agregó Sasuke empujando a Naruto para entrar en su hogar, recordando su nota mental. —Necesito recabar información.— terminó sentándose en uno de los asientos de la sala de Naruto.


—¿¡Qué se supone que haces!? ¡Vete de mi casa!— le gritó todavía desde la entrada.


—No lo haré. Ayer no me quisiste dar toda la información que necesitaba para el caso, ahora lo harás.— Aunque claro, Sasuke quería más información aparte de la que sí concernía al caso.


—Maldición— masculló Naruto para luego cerrar la puerta e ir en busca de algo para beber a la cocina y de camino soltó: — No sé por qué Hinata decía que eras el hombre perfecto. No eres nada agradable…


—Ser agradable no tiene nada que ver con ser perfecto.— aclaró Sasuke.— además, no sé por qué te habrá dicho algo como eso.— Sasuke no pudo ver la tensión repentina en los hombros de Naruto ante sus palabras.


—…Así que estás consciente de que no lo eres.— Afirmó Naruto más tarde, mientas tomaba asiento frente a él bebiendo lo que parecía ser café.


—Si, no lo soy.— Sasuke recordó todo lo que hiso en su anterior vida y lo poco que había logrado en esta para saber que eso era verdad. Nadie podía ser perfecto.— ¿Qué dijo Hinata exactamente?


—Que eras un buen primo… que le cuidabas aunque tuvieras grandes problemas. Aunque no quiso decirme que problemas eran.— respondió viendo fijamente a su tazón de café.


Sasuke se alegró de que Hinata supiera que él no quería que nadie más se enterara de lo que a él le atormentó por tantos años. —Eso está bien. Pero, no es suficiente como para que creyera que soy perfecto.


Naruto parecía haberse incomodado por algún motivo. Y eso era porque todas y cada una de las definiciones que Hinata hiso de Sasuke durante todos los años que llevaban de conocerse le hicieron apodarle “don perfecto”. Pero jamás lo diría.


—…Ella dijo muchas cosas más, no las recuerdo ahora.— eludió el tema.


—¿Desde cuándo conoces a Hinata?


—Desde que llegó a Suna.— Sasuke no pudo evitar preguntarse sobre el por qué su prima no le habló de él en ningún momento, solo hasta ahora. — Estudiamos en el mismo lugar hasta que nos separamos para ir a la universidad. Hemos sido amigos por mucho tiempo.


—Demasiado tiempo.— dijo Sasuke sin pensárselo mucho. Ahora que recordaba, Hinata al parecer estaba interesada en Naruto románticamente hablando. Le incomodó un tanto pensar que quizás Naruto también lo estuviera por ella. Pero si lo veía por otro lado, quizás eso podría ayudarle a definir su propia situación. — Naruto. ¿Qué piensas de Hinata?


—¿Acaso esto es parte de información esencial para el caso?— Dijo Naruto, suspicaz — yo no lo creo.— Sasuke no replicó nada, porque Naruto tenía razón esta vez.  —…aun así, te diré que es una persona muy amable y un gran apoyo en mi vida.  


—Debo suponer que me conocías a través de ella desde hace bastante tiempo, aunque no en persona.


—No, solo sé lo que me han dicho sobre ti dos personas. No puedo basarme solo en eso.— Naruto recompuso la cara de fastidio que tenía al principio (aunque seguía sin verle directamente) y agregó: —Aunque por ahora puedo decir que no me agradas.


—¿La otra persona fue Sakura?— Sasuke estaba seguro de que se trataba de ella.


—¡Claro que fue mi Sakura-chan! —ahora parecía más molesto que antes debido a él. — Ella era Naruto-niichan todos los días hasta que te conoció a ti. — Sasuke intentó imaginarse a una Sakura pequeña llamando a Naruto de esa manera pero no lo logró. Era una idea que no llegaba a calzar en su cabeza.— ¡eso me recuerda! Te atreviste a rechazar a mi hermana menor Sasuke, y de la peor manera.


—No existe una buena manera de rechazar a alguien.


—Bastardo, pudiste ser más considerado.— Naruto se levantó de su asiento para enfrentarle.


—Fui considerado con ella.  


—¡Tener una cita con ella dándole esperanzas para después rechazarla no es ser considerado, bastardo! ¡Eso es ser cruel!— terminó por recriminarle a Sasuke, nuevamente apuntando con sus manos a Sasuke y este, nuevamente indiferente ante el ataque se dignó a responder.


—Ella y yo llegamos a un acuerdo antes de tener esa cita, que ella malentendiera todo no fue culpa mía. Idiota.


Naruto se tranquilizó y regresó a su asiento anterior desviando nuevamente su mirada, pero todavía molesto.


—…Ella todavía te ama.


—Pero yo a ella no. Siempre se lo he dicho.— Sasuke comenzaba a hartarse del tema, al igual que se enfadaba en su anterior vida. Por un instante Naruto le miró directamente, pero al ver que nuevamente planeaba desviar la vista, decidió que este era justamente el momento para aclarar sus dudas.  —Naruto… ¿Por qué no querías que fuera yo quien te ayudara con esto?


Esta vez, Naruto si le miró directamente y sus ojos mostraban tal desconcierto y miedo al mismo tiempo que Sasuke se atrevió a cuestionarse si aquella había sido una buena idea. No quería por ningún motivo provocarle algún tipo de daño ahora, sin embargo, tan rápido como estas emociones aparecieron, se fueron sin más, desplazadas por un inminente enfado.


—Eso no es algo que deba importarte —Dijo cortante.— Además dije que no importaba. Solo haz tu trabajo como acordamos y estaremos bien.


—Creo que tengo derecho a saber porqué te molesté al instante de verme, considerando que no nos conocíamos.


Naruto desvió nuevamente la mirada y Sasuke se irritaba cada vez más.


—Tienes razón. No nos conocíamos. Nunca nos habíamos visto. Solo fue porque recordé todo lo que sufrió mi hermana por ti.— Dijo finalmente, ahora sí mirándole. Sasuke tuvo la leve sensación de que Naruto estaba mintiéndole, pero a la vez, le sentía enfrentándole, tal y como hacía en otros tiempos.


Su corazón dio un latido extraño en respuesta. El Naruto frente a él con sus ojos azules firmemente puestos en los suyos, inamovibles y su expresión decidida le permitieron ver al Naruto que estuvo buscando por años, aquel al que por su creciente emoción reconocía que extrañaba, aquel que un día dijo que moriría con él.


Esta vez, fue Sasuke quien se encontró en la necesidad de alejar los ojos del otro para recomponer en su interior su estado de inmutabilidad. Decidió que aunque aquella respuesta por parte del otro no le convencía del todo, lo mejor para él sería regresar a un terreno seguro.


—¿En qué situaciones sentiste que este sujeto te perseguía?— Preguntó Sasuke al fin, levantando nuevamente sus oscuros ojos hasta su ahora, vecino. Naruto parecía más tranquilo también ante ese tema. Tema que sí debían tratar.


—… Siempre que regresaba a casa del trabajo y cuando daba paseos por las tardes. Hoy es la primera vez que lo hacen también por la mañana.


—Mañana comenzaré a buscarle en los sistemas de archivos. Cuando sepa quién es, te avisaré sobre ello.— Sin más que decir, Sasuke se levantó de su asiento aparentando control y Naruto de igual forma le siguió hasta que Sasuke salió por la puerta, para cerrarla nuevamente con llave.


Al ver hacia el cielo, Sasuke notó que ya estaba comenzando a oscurecer. No iría a visitar al zorro ese día y además nada demasiado importante se desarrolló en esas horas con Naruto que tuviera relación con su pasado en común, que era el único tema del que hablaba con Kurama. Y aunque era relevante para sí mismo el descubrir cuán fuertemente le afectaba la determinación de Naruto aún ahora, no lo era para el zorro.


Mientras se encaminaba hasta su propio hogar, soltó su leve suspiro. Al parecer no importaba cuanto tiempo tardaron en conocerse cara a cara, su destino era llevarse mal en un principio, pero ya se encargaría de cambiar eso, él no era como el Uchiha Sasuke del pasado y si Naruto terminaba siendo igual de valioso como amigo que en sus sueños, el esfuerzo valdría la pena, además, no quería cometer los mismos errores con él esta vez.


Tal y como prometió, Sasuke comenzó a buscar información del desconocido al día siguiente. Tardó un día más en encontrar información sobre el sujeto. Era un hombre común y corriente, sin un lugar de residencia donde encontrarle, lo que era sumamente extraño. Su característica más propia era que no tenía ningún pariente vivo con él, jamás se casó y no tuvo hijos. Pero lo que fastidió a Sasuke más que nada fue no encontrar en sus archivos ningún tipo de delito cometido.


—Entonces… ¿No hay forma de atraparlo?— preguntó Naruto, molesto ante la información que Sasuke le estaba dando. Después de cuatro días sin resultados, Sasuke decidió que era tiempo de darle las noticias a Naruto, quien se moría de ganas de enfrentarse al sujeto. Durante ese tiempo Sasuke se acercó a Naruto solo lo estrictamente necesario. Entablaban conversaciones que aparentaban ser estrictamente laborales, sin embargo, Sasuke quería que Naruto depositara su confianza en él, nuevamente. Esa estrategia parecía funcionar para ambos, por el momento.


—No si no comete algún delito antes, un delito que realmente pueda confirmarse ante la ley, y es conocido por todos lo jodido que es hacerlo aquí en Konoha.


—No me puedo creer esto. Bastardo ¿Estás seguro de que haces bien tu trabajo?— preguntó Naruto, seriamente.  


—¿Con quién crees que hablas? Idiota, es por una razón que te trajeron conmigo en vez de llevarte con otro investigador.— Sasuke suspiró para calmarse. Comenzaba a sospechar que este sujeto tenía algo que ver con ellos y su pasado, todavía daba vueltas en su cabeza la imagen del hombre sorprendiéndose al verles juntos después de recibir esa repentina llamada.  Además, desde ese día, este no se acercó más a Naruto como lo hizo antes. Solo cuando creía no ser vigilado por Sasuke intentaba algo más osado, pero al descubrirle retrocedía sobre sus pasos y no hacía nada más.— Ya encontraré la manera de descubrir por qué te está persiguiendo y lo detendré. Juro que lo haré.


Al parecer esto último lo dijo con demasiada efusividad pues Naruto dirigió la mirada a un punto alejado de los ojos del otro y parecía un tanto incómodo por la situación. Tras permanecer en silencio unos largos segundos, se levantó de su asiento y sin decir nada le ofreció a Sasuke una cerveza. Este se negó a beberla, si no necesitara estar tan concentrado por su trabajo la bebería. Naruto por su parte, dejó una sobre el mesón de la cocina y se bebió la que debió darle a Sasuke aunque más rápido de lo que cualquiera lo haría.   


—No te lo tomes tan seriamente.— Dijo Naruto después de un trago demasiado largo.— Seguramente sea solo un acosador…—  por alguna razón que Sasuke no llegaba a comprender, Naruto intentó restarle importancia al asunto, pero el resultado fue peor. Sasuke se molestó ante la repulsiva idea de un acosador.


—Tengo que hacerlo, es mi trabajo.— aseguró Sasuke, aunque claro, para él todo lo relacionado con Naruto significaba más que eso. Todavía no podía llevarle con el zorro, por lo que, hasta que ese día llegara, debía mantenerle a salvo por el bien de todos y de sí mismo. Sinceramente, preferiría enfrentarse a un enemigo como en los viejos tiempos y poder hacer algo con sus propias manos sin que le apresaran por ello, pues con el pasar de los días ese instinto protector que solo reconocía en sus recuerdos de cuando todavía era un niño, ahora parecía haber comenzado a ser parte de su propia naturaleza, aunque tenía bastante claro que Naruto podía cuidarse por sí mismo.  


—Lo sé.— Replicó Naruto, para beber otro trago de cerveza. —Hinata y Sakura están más tranquilas ahora. Fue una buena idea hacerles caso…— le envió una mirada extraña a Sasuke, a lo que esté le respondió solamente levantando una ceja por la duda, pues no supo lo que esta significaba con exactitud. —…aunque conocerte en persona no fuera tan buena idea.— agregó al final, pero más como el reproche de un niño que como un rechazo total.


Sasuke ya comenzaba a acostumbrarse a esos rechazos directos, aunque eso no significaba que dolieran menos.


—Idiota, lo mismo digo.— Respondió Sasuke para no quedarse atrás, aunque claramente estaba mintiendo. Por alguna razón incomprensible para Sasuke, Naruto rió un poco, lo atribuyó a que la cerveza se le estaba subiendo demasiado rápido.


—¿Sabes? Tengo una idea para mañana-tebayo…— propuso Naruto de pronto. Sasuke aceptó escucharle ya que nada perdía al hacerlo.  


Al día siguiente, Sasuke tranquilamente llevó a cabo su rutina como cada mañana antes de salir al trabajo. Solo que esta vez, con la idea de Naruto en mente, que aunque en todo caso no fuera una idea muy desarrollaba, brillaba en su simplicidad y a Sasuke no se le había ocurrido antes por ser tan poco práctica. Aquel día ninguno usaría su automóvil, así de simple. Naruto había dicho que probablemente el sujeto y su ayudante reconocían estos al momento de ir a buscarle.


Ese día en particular, Naruto solo permanecería en su trabajo por medio día. Luego se atrevería a pasear por calles poco concurridas con Sasuke siguiendo su paso, y que después de resignarse a que nada podían hacerle al sujeto así como así, primero Naruto se sacrificaría solo para que pudiesen detenerle como era debido, después de que este cometiera un delito.


Ese día, la vestimenta que ambos llevaban era lo más común posible, los pantalones simples al igual que las chaquetas sobrepuestas a las demás prendas en sus cuerpos ya que se acercaba el invierno. Los zapatos de Naruto resonaban en el suelo de aquella calle poco transitada. Durante la mañana el extraño no apareció para perseguir a Naruto como siempre hacía, no hasta entradas las tres de la tarde justo después de que Naruto se retirara del un restaurante de comida rápida donde se dispuso a almorzar. No se sacrificaría pasando hambre.


Caminaba a paso seguro con Sasuke siguiéndole sigilosamente desde cerca, a la vez que vigilaba los alrededores y los pasos del extraño. En un breve instante, el hombre salió de su escondite temporal y se acercó caminando hasta la ruta que Naruto seguía. Con sus pasos todavía calmos, el hombre se encontraba a por lo menos diez metros de Naruto, continuó de esta manera a lo largo de tres cuadras donde unas tres personas a parte de ellos caminaron.


Se encontraban en una zona muy alejada del centro de Konoha que estaba casi abandonada a su suerte, pocas personas vivían allí ahora por lo que hasta sus parques se veían mal cuidados. El hombre cada vez se acercaba más a Naruto y cuando este se detuvo en un parque y se encontraba rodeado de arbustos, el extraño se encontraba a solo tres metros de él. Sasuke, en silencio, se acercó por la espalda hasta el sujeto, escondiéndose entre los arbustos.


Rompiendo el silencio mientras se volteaba a enfrentar al sujeto. Naruto dijo: — Voy a preguntarlo una vez más… ¿Qué es lo que quieres?


Después de un silencio en que el hombre se decidía entre ser diplomático o usar la fuerza, contestó.


—Lo diré solo una vez… Entrégame al Zorro. —Ordenó sin titubeos. Sasuke sintió como todo su cuerpo se tensaba ante la inminente amenaza, sus sospechas previas con respecto al hombre había sido acertadas. Naruto por su parte, solo veía al otro sujeto en estado de completa confusión. —Por lo que veo, no es parte de ti todavía, ¿Dónde te pidió que lo sellaras?


Naruto no podía estar más confundido ¿Este hombre había estado siguiéndole todo este tiempo porque creía que tenía un “zorro” encerrado en algún lugar? De todas formas, ¿De dónde sacaría él un zorro? Sasuke, al ver a Naruto entrecerrar los ojos supo de inmediato que estaba completamente confundido, aunque su enemigo pensara que este estaba pensado en cómo defenderse y evitar entregarle al Zorro, lo más seguro era que Naruto intentara encontrar una respuesta que no delatara que no tenía idea sobre ese animal. Porque si, Naruto posiblemente pensaría que hablaba de un zorro común y corriente, no de un demonio ancestral.


—El “zorro” no está sellado en ningún lugar.— fue lo más coherente que Naruto atinó a decir. Sasuke quería salir de allí y detener al tipo con sus propias manos ya que ahora sí estaba seguro de que tenía que ver con los desastres que seguían a la absorción de bijuus. Y gracias a esa respuesta, ahora el sujeto creería firmemente que el zorro estaba fusionado a Naruto como en el pasado y la única opción de obtenerlo sería eliminando a Naruto.


 — Así que no perdieron el tiempo, Uchiha y tú.— ahora si se podía ver la sorpresa aumentar en Naruto, ya que sus hombros se movieron levemente ante la frase dicha por el extraño. — Sabían que vendríamos por él y lo absorbiste una vez más.


Naruto no alcanzó a pronunciar ni una sola palabra para preguntar a que se refería con todo aquello y el extraño ya tenía un arma apuntando directamente hacia él. Sasuke, horrorizado, salió rápidamente de entre los arbustos donde se mantenía oculto para enfrentar al enemigo.


Creo que deberías calmarte— dijo Sasuke, colocándose de espaldas a Naruto y enfrentando a quien de ahora en adelante sería su enemigo también.— Al zorro lo tengo yo.— Afirmó seriamente.


Naruto, quien no entendía nada de nada no quiso contradecir a Sasuke ni intervenir en aquella discusión.


—¡Ha!— rió el sujeto a quien ahora su casi calva cabeza y su ropa algo raída le hacían ver como un verdadero delincuente ante Naruto. —Al fin te hiciste con el Zorro, Uchiha, ¿Por qué no has destruido nada todavía? — preguntó seriamente.


—No es de tu incumbencia lo que haga con él. Además, el plan que tengo para él es demasiado importante como para tomarlo a la ligera.— afirmó Sasuke, creyéndose fácilmente el papel de villano, incluso tomando el riesgo de acercarse hasta el hombre y su arma ¿Estaría en sus venas?


—Lo lamento, Uchiha Sasuke, pero nuestro plan es más importante que cualquier otro.— Y movió su arma hacia Naruto con la clara intención de dispararle.


—¡Te dije que soy Yo quien lo tiene!— exclamó rápidamente Sasuke, intentando sonar firme a pesar del miedo que sentía ante la posibilidad de que el otro intentara cualquier cosa contra Naruto.


—Te creo, pero al ser él “Naruto”, debo despejar todas mis dudas


En un instante y como si de una visión se tratase, Sasuke claramente vio el movimiento que haría el otro en sus manos para disparar el arma, y ante esto, no encontró mejor solución que interponerse entre el arma y su objetivo. Milésimas de segundo más tarde un sonido estridente rompió el silencio del lugar.


—¡¡Sasuke!!— escuchó gritar a Naruto tras de sí, mientras un dolor lacerante se irradiaba alrededor de todo su hombro derecho.


Enfocó su ahora furiosa mirada en su oponente y antes de que volviera a disparar desvió su brazo de un rápido y certero golpe, e ignorando el dolor que aun pulsaba en su cuerpo, afirmó la mano que sostenía el arma con su brazo herido mientras que con la otra dejaba caer fuertemente su puño sobre el rostro de su enemigo. Tras desestabilizarlo, le propinó dos golpes en el estómago con su pierna derecha todavía tirando de su otro brazo hacia abajo para evitar que disparara.


De pronto una fuerte e inesperada punzada de dolor le inmovilizó y el otro aprovechó la oportunidad para recomponerse y darle un fuerte puñetazo que Sasuke resintió en la boca del estómago, seguido por una fuerte patada que le obligó a dar varios pasos hacia atrás mientras liberaba el brazo que retenía al otro, dejándole la opción de dispararle para acabar con él de una vez.


Cuando Sasuke regresó la vista hasta los ojos del hombre, este le dijo con un tono de voz tan frío que le causó temor: —Seguirás estando maldito Uchiha, y nada podrá cambiarlo.— Sasuke sintió como esas palabras le calaban más profundo de lo que creyó posible, pues esa debía ser la única razón por la que ambos, él y Naruto volvieron a nacer.


Sintió como el frío del arma le tocaba la frente, una extraña sensación previa a la muerte ya muy conocida para él. Aliviado, pudo notar en un instante que Naruto no se encontraba cerca, y que seguramente saldría con vida de todo aquello, aunque al parecer el no podría seguir ayudándole. Antes de resignarse por completo, en solo un instante, escuchó el sonido de un fuerte golpe provenir desde atrás del extraño. Un segundo más tarde, le vio caer al piso inconsciente frente a él.


Al levantar la vista, pudo ver como Naruto sostenía aun en sus manos un gran pedazo de madera que había conseguido de algún lugar cercano y con el cual le había propinado un fuerte golpe al sujeto en la cabeza. Sasuke solo emitió una leve sonrisa antes de que el dolor le hiciera caer de rodillas al piso.


—¡Sasuke!— se alarmó Naruto nuevamente, lanzando lejos el arma improvisada que sostenía entre sus manos para detener a Sasuke antes de que se diera un fuerte golpe al caer contra el piso.


—Cálmate, Naruto.— Habló Sasuke, adolorido y llevándose una mano hasta la herida que todavía sangraba. —Fue solo un disparo…


—  ¡El tipo casi te mata, Sasuke!— alegó Naruto firmemente y con el miedo arraigado todavía en sus ojos, que en ese momento, Sasuke vio mas azules que nunca.


—Pero no lo hizo…gracias a ti.— Naruto desvió la mirada ante el agradecimiento y no respondió nada, solamente le ayudó a ponerse de pie. Debían llegar rápido a un hospital. 


Horas más tarde, cuando Sasuke despertó tras desmayarse por la pérdida de sangre al llegar al hospital, se encontraba en una sala privada, con el hombro vendado y algo anestesiado. Dos pares de ojos le veían preocupados. Su madre y Hinata estaban allí, esperando a que despertara.  


—¡Sasuke, hijo! ¿Cómo te encuentras?— preguntó su madre quien vestía su uniforme de policía, acercándose para tomarle la mano derecha. Hinata a su lado solo tenía los ojos aguados por las lágrimas que no quería soltar.


—Estoy bien, mamá.— respondió intentando calmarle, aunque su voz sonaba algo extraña. —Solo fue un disparo.


—¡Pudieron haberte matado hoy, no fue solo un disparo!— le regañó, enfadada ante su intento a aminorar la situación. Sasuke recordó que Naruto le había dicho algo similar.


—Pero no lo hicieron… de verdad estoy bien mamá.


Sasuke percibió un cambio en ella tras repetirle que se encontraba bien.


—Te obligaría a dejar este trabajo, Sasuke, si no supiera que es de verdad importante para ti… — ella le soltó la mano — te dejaré con Hinata un momento, ella quiere hablar contigo en privado.


Cuando ella dejó la habitación, Hinata se sentó en un banquillo que estaba cerca de la camilla donde estaba recostado. Sasuke la observó atentamente, parecía verdaderamente afligida.


—Lo siento por todo esto Sasuke.— dijo Hinata quedamente, comenzando a llorar.


—…Sabía los riesgos que tenía un caso como este, Hinata. No tienes la culpa de nada.— Sasuke realmente no sabía cómo reaccionar ante su llanto silencioso. Pasaron unos cuantos minutos para que ella fuera capaz de pronunciar otras palabras.


—Gracias, Sasuke… Naruto-kun me ha dicho que le salvaste.  


Sintiéndose extrañamente vacío ante la mención del nombre Naruto saliendo de la boca de Hinata, respondió rápidamente: —Solo hice mi trabajo. —Pero él sabía, que sus acciones frente a Naruto siempre serían por causa de algo más. 

Notas finales:

*Wakahisa: conformado con los caracteres Waka “joven” y Hisa “Longevidad, aquello que es perpetuo”. Juventud eterna o Joven para siempre. Lo escogí al asociarlo con la longevidad característica del clan Uzumaki.

¡Hola otra vez!

Como se esperaba, Naruto no estuvo muy de acuerdo con que tuvieran que “cuidarle” y menos por Sasuke.

Con el sujeto roba bijuus tan cerca, y un Sasuke baleado ¿cómo se desarrollarán las cosas ahora? 

Hasta la próxima actu~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).