Capítulo final: ¡Sí, sí! ¡Dale lo suyo!
Kyouka se quedó de piedra cuando abrió la puerta y vio cómo sus amigas estaban masturbándose.
¿Cómo habían llegado a esa situación?
La verdad es que todo fue idea de Hagakure.
Cuando Yaoyorozu y Jirou habían salido corriendo del baño, las demás se habían quedado con los penes al aire sin saber qué hacer. La vergüenza del momento y ver cómo era un pene real, afectó a Uraraka y se le paró.
—¡Wow! —Exclamó Tooru.— ¡Ahora es más grande y está erecto!
—¡¿Q-Qué debo hacer con esta cosa?! —Preguntó Ochako mucho más avergonzada.
—¿Te has excitado? —Supuso Ashido.
—¡M-Me siento extraña! —Respondió la pobre Uraraka.
—Ochako-chan... —Susurró Asui algo sonrojada.
Al parecer a Tsuyu también se le había parado.
—Tsuyu-chan, tú también. —Dijo Ochako avergonzada señalando el genital de su amiga.
—¿Esto es lo que les pasa a todos los hombres? —Preguntó Ashido a la cual empezaba a parársele.
—¡Tengo la solución! —Añadió Hagakure.— ¡Hagamos lo que los chicos hacen!
—¿Y qué hacen en esta situación? —Prosiguió Mina.
—Hay que sujetar el pene con una mano y subir y bajar repetitivamente. —Explicó la chica invisible alegremente.— Creo que a veces se ayudan mutuamente...
—¡T-Tsuyu-chan, hagámoslo! —Exclamó Ochako optimista pero aún ruborizada.
—De acuerdo. —Aceptó Asui bajando su mirada para ocultar su rostro sonrojado.
Y así fue como terminaron masturbándose. Uraraka y Tsuyu estaban frente a frente sujetando el pene contrario y subiendo y bajando tal como Tooru había explicado; Ashido lo hacía con Hagakure. Mina estaba ejercitando un pene invisible a la vez que una mano que no podía ver le daba placer; era una situación algo extraña.
Pero en ese momento entraron Jirou y Yaoyorozu por la puerta.
—¿Qué estáis hacien...
Lo que vio Kyouka le impidió terminar su pregunta.
—¡C-Chicas! —Añadió Momo bastante sonrojada al ver lo que hacían sus amigas.
—N-No sé por qué... —Suspiraba Ochako.— ¡N-No podemos parar!
—Ya casi... —Comentó Ashido.
Aizawa, el cual había seguido a las chicas, se hallaba a un paso de la puerta del baño. Cuando entró lo primero que vio fue como sus alumnas se corrían en ese mismo momento.
—Por Dios... —Dijo el profesor cansado de todas las locuras que hacían sus estudiantes.— Ya está bien, es suficiente por hoy.
Dicho esto, las obligó a limpiar todo lo que habían manchado y a ponerse ropa.
—Me esperaba esto de los chicos, pero de vosotras no. —Regañó con la mirada en las jóvenes que se hallaban sentadas y de rodillas.
—L-Lo sentimos... —Se disculparon todas avergonzadas y arrepentidas.
—Ahora mismo iréis cada una a vuestras respectivas habitaciones y no saldréis hasta que termine el efecto del cambio de género. —Informó Aizawa aún enfadado.— Iré a por los chicos, adiós.
Y se retiró de aquel lugar dirigiéndose hacia los otros jóvenes problemáticos.
—Supongo que fue mala idea... —Comentó Tsuyu cabizbaja.— El profesor se ha enfadado mucho...
—¡Pero ha sido una sensación genial! —Añadió Hagakure.— ¡Repitámoslo mientras podamos!
Todas intercambiaron miradas ante la idea de la chica invisible.
—¡N-No debemos! —Yaoyorozu se negó.
—¡Jirou-chan podría ayudarte! —Animó Tooru.
—¡¿E-Eh?! —Kyouka se sorprendió y ruborizó ante el comentario.
Y así iba a terminar el día para ellas, aunque al parecer iban a gozar de ser hombre hasta el último segundo.
[…]
Mientras tanto, Aizawa había llegado al sitio en el que dejó a los chicos por última vez; solo que ahora faltaban tres. Todoroki estaba sentado sin causar ningún desastre mientras grababa cómo Bakugou le hacía ciertas "cosas" a Midoriya, el cual no dejaba de pedir que se detuviera.
—¡NO TE MUEVAS, MIERDA! —Gritaba Katsuki mientras sujetaba las manos de Izuku.
Genial. Nada como contemplar una violación en directo donde uno de tus alumnos abusa de otro mientras un tercero lo graba con el teléfono.
—Suficiente, no lo voy a soportar más. —Suspiró Aizawa alejándose.— Me largo, haced lo que queráis; necesito un descanso.
Y se fue.
[…]
Por otro lado, Kaminari seguía en el baño junto a Kirishima, Iida y All Might; los cuales consiguieron a saber de dónde un tampón para Denki.
—¡No pienso meterme esa mierda en mi vagina! —Gritó el rubio eléctrico.— ¡Me niego!
—¡Pero si ya te has metido otras cosas más grandes cuando eras hombre! —Reclamó Eijirou mientras le ofrecía aquel tampón.
—¡¿D-De qué estás hablando?! —Se sorprendió Kaminari al ver que Kirishima conocía su más oscuro secreto.— ¡¿Qué te hace pensar eso?!
—Como el buen amigo que soy, tengo la misión de velar por tu seguridad todas las noches. —Informó el pelirrojo tratando de parecer una gran persona.— Y ya sabes, veía y oía ciertas cosas en tu habitación...
—¡No des más detalles! —Interrumpió Kaminari rojo a más no poder.
—Jaja, vaya. Me gustaría no haberme enterado de eso. —Comentó All Might algo incómodo.
—¡Kirishima-kun, eso es acoso! —Regañó Iida.
Al parecer el día de Denki iba a terminar en el baño. Como el rubio se negaba a cooperar, el profesor y Tenya se retiraron.
—No temas, sis; yo estaré contigo hasta el final. —Dijo Kirishima con una sonrisa.
[…]
Toda esta locura continuó hasta que desapareció el efecto del quirk de aquel villano. El día había finalizado con Kirishima y Kaminari durmiendo en el baño, Bakugou encima de Deku, Todoroki con más de dos horas de grabación en su teléfono, las chicas con una noche de masturbación mutua, y con Iida tranquilamente durmiendo en su cuarto como buen ejemplo a seguir.
—¡V-Vuelvo a tener pene! —Exclamó Kaminari realmente feliz.
—Me alegra saber eso, bro. —Comentó Kirishima con una sonrisa.— ¡Mi masculinidad ha regresado!
Por un lado, las chicas parecían algo decepcionadas. Por otro, Bakugou se veía realmente satisfecho.
—Midoriya. —Introdujo Todoroki.— No te importa que suba el vídeo al grupo, ¿verdad?
—¿Q-Qué vídeo? —Preguntó el joven pecoso.
—Nada. Ya lo hice.
No tardaron en llegar los comentarios al respecto.
Uraraka: ¡Deku-kun! ¿Te ha dolido?
Tsuyu: Parecías disfrutarlo, Bakugou-chan.
Denki: Eh, Midoriya, sí que lo has gozado.
Eijirou: Bakugou, eso fue poco varonil.
Tokoyami: Esto fue inesperado...
Yaoyorozu: ¡N-No tenéis vergüenza!
Hagakure: ¡Sí, sí! ¡Dale lo suyo!
Lo único que deseaba Midoriya en aquellos momentos era que la tierra se lo tragase.
[…]
Y así terminó aquel día de género opuesto...
Espera, faltaba alguien.
—Ha sido la mejor experiencia que he vivido hasta ahora... —Susurraba Mineta con los ojos rojos después de salir de su habitación.— ¡Necesito más! —Finalizó mientras se dirigía hacia la celda en la que tenían retenido al villano causante de todo.
Según Mineta Minoru, las mujeres tenían unos agujeros increíbles.
…
¿FIN?