Ese alfa era un completo idiota, le decía su mente una y otra vez, haciendo que bufara. ¿Qué tan idiota se tenía que ser como para tener un maldito hijo, pero no saber que era un beso?, pensó mirando como el saiyajin aun parecía confundido por el beso que le había dado cuando había despertado, pero ahora estaba demasiado enojado a decir verdad, por lo que únicamente prendió la luz de la maldita habitación.
No importaba la hora que fuera, despertaría a la mujer y le diría que el idiota estaba despierto y parecía estar perfectamente bien, igual de idiota que siempre, le dijo su mente, bufando por lo que había ocurrido.
— ¿Por qué estas enojado ahora, Vegeta? — Le preguntó sin llegar a comprender del todo, aún estaba atontado por lo que había dormido, ni siquiera recordaba en realidad que había ocurrido. Recordaba estar luchando con Vegeta, su entrenamiento de siempre, pero luego simplemente nada, sólo el fuerte dolor en su pecho, que había hecho que cayera inconsciente en realidad. — ¿Qué es lo que ocurrió?
— Ocurrió que eres un idiota que se enferma. Tuviste una enfermedad en el corazón — Le comentó como si nada, siendo que iba a salir de la maldita habitación. — Iré a despertar a la mujer, para decirle que estar bien — Gruñó y sin más salió de aquella habitación dando un fuerte portazo, aquel idiota sólo empeoraba su humor, pensó.
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— Pareces estar mucho mejor — Soltó un bostezo sin poder evitarlo, mientras frotaba uno de sus ojos, revisando los exámenes que le había hecho a Goku después de que Vegeta la despertara de aquella manera tan bruta. Es decir, el hombre había entrado como si nada a su cuarto, prendiendo la luz y gritando una orden de que Goku había despertado para luego simplemente marcharse, no comprendía que era lo que le ocurría a ese hombre tan grosero, pensó, mirando a Goku. — ¿Quieres comer algo?
— Claro que sí — Le dijo con una sonrisa mientras se terminaba de poner una camiseta que Bulma le había dado. No era su ropa usual en verdad, aunque la verdad era que de sus trajes normales quedaban pocos completos, debido a los entrenamientos con Vegeta mucha de su ropa estaba simplemente destrozada.
— Vamos — Bulma sólo sonrió al ver que su amigo había recuperado su humor para guiarlo a la cocina, comenzando a ver que podría darle de comer, después de todo suponía que Goku debía estar demasiado hambriento, había pasado más de dos semana sin comer algo normal, únicamente lo habían alimentado con suero, pero ahora se veía que el saiyajin se comería lo que le pusiera en frente.
Le dio lo que tenía de carne y acompañamientos, para sentarse a su lado, comenzando a ver como su amigo comenzaba a comer como desesperado, haciendo que riera con suavidad, observando al hombre con su cabeza apoyado en su mano.
Recordó cuando el hombre era apenas un niño, que no sabía ni siquiera qué edad tenía, después de todo le había dicho que tenía catorce, cuando apenas tenía doce, haciendo que siempre recordara aquello.
— Bulma — La voz de él la sacó de sus pensamientos, siendo que únicamente lo miró, esperando saber que era lo que quería, si quería más comida tendría que ordenar algo, pensó.
— Dime Goku — Le preguntó, aun estaba sólo en pijama, cubierta por una bata, aunque con Goku nunca se había sentido incómoda en ese sentido, quizás cuando niños, cuando él se había ofrecido a bañarla, pero sabía que él era demasiado inocente en realidad.
— ¿Qué significan cuando dos personas juntan sus labios? — Había pensado demasiado en si preguntarle aquello o no a Bulma en realidad, por un lado sabía que le preguntaría la razón de su pregunta, pero por otra no se podía quedar con la duda, es decir, aún no sabía que era procrear, como para quedarse con otra duda como aquellas.
— ¿Quieres decir cuando se besan? — Decir que estaba sorprendida era demasiado poco, es decir, Goku se había casado con Chi-Chi, tenían un niño, ¡por Dios! ¿Cómo no sabía que era un beso?
— Sí, eso, ¿así se llama? — Le preguntó curioso mientras seguía comiendo, aunque ahora buscaba ocultar su rostro se alguna manera, para que la mujer no fuera a cuestionarle demasiadas cosas.
— Pues cuando dos personas están en una relación, ya sea como novios o casados, los besos son una muestra de afecto, Goku — Comenzó a explicarle realmente sorprendida mientras lo observaba con demasiada atención, no era posible que él no supiera, ¿verdad? — Quiero decir, tú deberías saber, Goku, estuviste casado con Chi-Chi varios años.
— Sí, pero nunca hacíamos eso — Le dijo como si fuera demasiado obvio, porque para él lo era. Las cosas que hacían con Chi-Chi no habían implicado besos, no al menos que él recordase. Dormían juntos, sí, estaban en la casa juntos, además de que alguna que otra vez hacían lo que la mujer quería, pero nunca le dio un nombre aquello, por lo que realmente no sabía muy bien que nombre ponerle.
— ¿Nunca has besado a nadie? — Si nunca había besado a nadie no comprendía por qué comenzaba a preguntarle aquellas cosas en ese momento, no era usual en Goku preguntar lo que no había visto, sino que preguntaba sobre las cosas que veía, que no comprendía en su mente.
Pudo ver como dejaba el plato en la mesa y comenzaba a reír de una manera bastante torpe, mientras pasaba una mano por su cabello, ¿cómo decirle aquello a Bulma?
— Veras... es que cuando desperté, Vegeta estaba ahí conmigo y pues simplemente me tomo de las mejillas y pegó sus labios a los míos, no sabía que aquello era una muestra de afecto — Le dijo riendo nervioso, pero el rostro de sorpresa que puso Bulma fue lo que necesito para saber que esa noticia era algo que en verdad impactaría a cualquiera y que él al parecer no había actuado de la mejor manera — Yo simplemente le pregunté que por qué hacía eso, es bastante raro para mí, pero sólo se enojó y fue a despertarte...
— Cielos, Goku, ¡eso explica el por qué Vegeta estaba tan enfadado! — No pudo evitar comenzar a reír, toda aquella situación era bastante curiosa de por sí, pero que Vegeta hubiera besado al saiyajin y este no supiera que significaba... cielos, realmente el orgullo del príncipe debía estar bastante herido en aquel momento y ella realmente lo comprendía.