Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Las estaciones, Roxas por Riolu

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

"Hola gente nyan, lo se, me tarde muuuuuuuuucho en subir el capitulo pero veran, tengo algunas excusas para que intenten no matarme, ultimamente me ha dado por comenzar un fanfic de undertale, otro de kingdom hearts, luego este, a final de cuentas tengo varias cosas, sumado a los estudios me tomo tiempo esto, ademas de que el capitulo me quedo tan largo que pense que me demoraria mas tiempo, por lo que decidi cortarlo en dos partes pero espero les guste, saludos a todos quienes me han apoyado :3"

 

"Te amo, siempre lo he hecho"

 

Esas palabras resonaban en mi mente al momento de despertar, apoye mi mano en mi cabeza, sintiendo algunas gotas de sudor, un sueño, una pesadilla, no estaba seguro pero me había alterado, respiraba algo agitado, sentía como si esas palabras quisieran recordarme que hay cosas sin resolver, cosas que aún no me permiten tener una noche de pleno descanso como he intentado conseguir estos días. Apenas pude llegar a sentirme más calmado cerré mis ojos, aun tenia las visiones de lo que paso en mi mente mientras dormía, estaba la imagen de mi gemelo, este se ubicaba frente a mí, como un fantasma que quiere torturarme, mejor dicho sobre mí, yo me encontraba acostado, su peso me aplastaba pero sin herirme, me observaba con su rostro lloroso pero no había nada que hacer, era mi hermano, mi familia.....no, ya no lo era, no después de lo que me provoco, el único modo que puedo verlo ahora es con desprecio, aun si este me suplicaba el perdón apegándose a mí, no era posible, cada quien debe tomar la responsabilidad por sus actos, no puede simplemente hacerme algo así de malo y salir impune, menos cuando me ha traicionado de un modo tal....menos cuando es la persona con quien he crecido toda tu vida.

 

-"¿Es porque lo tienes a el ahora?"-me pregunto y esta vez mi expresión se suavizo un poco para dar paso a la confusión-"¿es por qué tienes a Sora que no me necesitas a mí?"-murmuro y sin dudarlo llegue a asentir, dos lagrimas cayeron por sus mejillas, una triste sonrisa se ubicaba en su rostro y como si fuera un reflejo quite una lagrima con mi dedo, observe mi mano confundido por aquella acción, este solo mantuvo su expresión y entonces comenzó a desaparecer-"aun eres mi hermano"-fue lo último que llegue a soñar, después de ello me desperté y así lo he estado por los últimos minutos.

 

Solté un pequeño suspiro, comencé a observar mi alrededor, la habitación de Sora, exactamente donde me dormí, apoye mi mano en mi frente, deseaba saber qué es lo que mi atormentado cerebro quería decirme ahora, ¿qué significó ese sueño?, Ventus estaba hablándome y se veía arrepentido, adolorido pero eso no basta, cada uno debe aceptar las consecuencias de sus actos, por otro lado, no dejaba de ser mi único hermano, peor aún, mi gemelo, puedo guardarle rencor pero no podría agredirlo físicamente, al menos no al punto de romperle la cara o alguna parte de su cuerpo......aun soy su hermano, quiera aceptarlo o no, todo eso paso a segundo plano al escuchar un gimoteo, voltee a ver al castaño que dormía apegado a mi pecho, bastante a decir verdad, buscando mi calor y entendí porque, su espalda estaba destapada, me moví con cuidado para cubrirlo, hacia bastante frio y no era de extrañar, las nubes por la ventana se veían grises, amenazando con llover nuevamente, escuche un pequeño quejido a mi lado, entre sueños él estaba acurrucándose en mi pecho y simplemente sonreí para abrazarlo suavemente.

 

-Roxas-susurro y baje mi mirada hacia él, aún estaba dormido y me preguntaba qué era lo que soñaba conmigo, extendí mi mano, toque suavemente su rostro con mis dedos sintiendo la suavidad de su piel.

 

"¿Es por qué tienes a Sora que ya no me necesitas?"-esas palabras se quedaron impregnadas en mi cerebro, observe al castaño entre mis brazos durmiendo sin hacer más que unos ruidos de vez en cuando, quizás lo he estado utilizando, quizás sin darme cuenta ambos llenábamos el vacío de la falta de nuestros hermanos con el otro, pero su compañía era diferente y lo sabía, porque podía confiar plenamente en él y algo me decía que él lo hacía de igual modo, me reí suavemente, ¿cuándo me volví tan sentimental?, ¿fue cuando mi vida se fue al diablo o cuando llegaron ellos a arreglarla?, solo lo aferre más a mí, me sentía cálido y apreciado en este hogar, esperaba eso no cambiara.

 

-Roxas-volvió a llamar mi nombre y esta vez note como se estaba aferrando más a mi-Roxas-nuevamente pero esta vez fue un tono más suave, casi al tono de un.....gemido.

 

-¿Sora?-susurre algo incómodo y entonces note como su temperatura comenzaba a subir, sus brazos se aferraban a mí con fuerza y entonces su respiración se comenzaba a agitar....¿acaso el?.

 

-Roxas......Roxas......ahh-un gemido sonoro y entonces mis mejillas me ardieron por completo, no podía ser que él estuviera fantaseando conmigo, lentamente lo intente a separar de mi pero este me sujeto más fuerte, podía sentir algo duro apoyado en una de mis piernas, intente no mirar hacia abajo ni imaginarme nada malo pero en cuanto comenzó a frotarse me comencé a alterar-Roxas......no te vayas-gimoteo con un tono más triste, eso me hizo calmarme más pero sus leves espasmos no se detenían, lentamente comencé a alejarme esperando que sus fantasías hubieran terminado con ello, lo que no me espere es que se moviera contra mi empujándome.

 

-¡Ahh!-grite al encontrar el borde de la cama y caerme de espalda en el piso haciendo un ruido seco.

 

-Mmm ¿Roxas?-cuestiono Sora abriendo uno de sus ojos mientras restregaba con su mano el otro-¿te caíste de la cama?-me pregunto somnoliento y yo agradecía que hubiera despertado, me comencé a reír nervioso y me incorpore sin dejar de sentir su mirada sobre mí-¿estás bien?, estas rojo-me menciono y toque mis mejillas notando que en verdad me ardían recordándome lo vivido, respire profundo y me calme a lo cual el inclinó la cabeza confuso.

 

-Sí, debió ser por el golpe-le calme dándole una sonrisa algo nerviosa, al menos el pareció creerlo y se acurruco de nueva cuenta en las sabanas haciéndome espacio-Sera mejor que regrese a mi cama, si Iris me encuentra aquí nos castrara a ambos-dije a modo de excusa, terminamos dándonos una mirada, intentando adivinar los deseos del otro pero yo solo quería ir a relajarme un momento, más que nada para no recordar lo anterior a esto.

 

-¿No me lo darás?-me cuestiono el viéndome adormilado bastando para dejarme más confundido que en toda la mañana-mi beso de buenos días -respondió apartando los mechones de su frente, lo mire algo perplejo y entonces el parpadeo unos momentos, yo creo que despertando bien y ahora dándose cuenta de lo que dijo sonrojándose -olvídalo....s-solo, fue una idea tonta-me pidió antes de darme la espalda y cubrirse por completo con las sabanas, el frio me recordó que estaba descalzo en el piso, lo más prudente hubiera sido irme pero algo en mi me lo impidió, rodee la cama para quedar de pie en el lado que el miraba, suavemente le quite la sabana.....más bien batalle por unos minutos, cuando logre que la soltara solo me miro unos momentos y yo le toque una mejilla con mis dedos, le sonreí y me incline para besar su frente.

 

-Buenos días Sora-sonreí cariñosamente alejándome de su frente viendo como él tenía los ojos abiertos-espero no se te olvide que pasare este día contigo-le recordé y este me asintió antes de cubrirse nuevamente, pese a ello no pudo esconderme esa amplia sonrisa que alcance a observar, sin decir más me retire a lo que ahora era mi habitación procurando no hacer ruido, apenas llegue fue que note que el reloj decía que eran las 7:30 de la mañana, no me sentía cansado pero aun así sabía que no tenía mucho que hacer y no quería causar problemas, sin más opciones me metí en las frías sabanas sufriendo un escalofrió en parte agradable, cerré mis ojos e intente apartar todo lo ocurrido hasta ahora, pero yo sabía que algo vendría a impedir que descansara.

****************

 

-¡Vamos!, ¡más rápido!-

-No puedo, ¿que no te cansas?-

-No seas un llorón, guárdate tus quejas para la almohada-

-Pero enserio duele, hemos estado así desde la mañana-

 

-¡Deja de llorar y hazlo más rápido!-los gritos de Iris resonaban en las calles mientras mis pies me llegaban a arder, a las 9 de la mañana me había jalado de la cama diciendo que iríamos a correr, mejor dicho, me ordeno que fuéramos a correr y aquí me encuentro, dando vueltas a la manzana con ella gritándome y yo a punto de desfallecer o vomitar, me gustaría saber que escupiría pues ni siquiera me había dejado comer algo.

 

-¡Vamos Roxas!, ¡tú puedes!-me gritaba Sora haciendo de mi animador personal, cada vez que pasábamos por la casa este se encontraba ahí, moviendo sus brazos de arriba a abajo con esas sonrisas de que todo saldría bien, ¿por qué el no corre con nosotros?, no tengo idea, pero al menos él no está sufriendo esta tortura que ella llama ejercicio, este mismo donde dijo que daríamos 5 vueltas y ya íbamos en la novena, pese a todo verlo de apoyo me ayudaba a ignorar el dolor y seguir corriendo sin perder el ritmo. Tras aproximadamente una hora de tortura física finalmente lo dio por terminado, no solo corrimos, sino que nos estiramos, me hizo hacer barras y como si no hubiera sido suficiente castigo práctico conmigo defensa personal donde mis brazos parecían ser su saco de boxeo por como debía protegerme, arrastrando los pies me dirigía a la ducha, Sora solo me felicitaba por aguantar tanto tiempo, la verdad, solo una cosa rondaba en mi cabeza.

 

-Un día de estos ella va a matarme-gimoteaba adolorido mientras Sora cruzaba los dedos esperando tanto como yo que eso no ocurriera, por estúpido que suene, me bañe en agua helada a pesar de este frio infernal, mis músculos se relajaban, el dolor se desvanecía por momentos, fue un alivio que tuve que cortar pues sabía que si me quedaba mucho tiempo así solo conseguiría una pulmonía, me lave algo apresurado con agua tibia, tras terminar me coloque una toalla en la cintura, maldita sea la hora en que por cansancio no quise traerme mi ropa, ahogando una grosería salí con nada más a mi habitación.

 

-Vamos date prisa, el desayuno está listo-Sora se encontraba en la cama y yo me cuestionaba que hacia aquí-rápido-me regaño lanzándome la ropa a la cara, sentí en ese momento que se me cayó la toalla y me quite las prendas de la cara, parecía que el mismo las había elegido, hasta mi ropa interior por lo que eleve la mirada notando como el desviaba la suya, estaba sonrojado y una pequeña venganza se me vino a la cabeza.

 

-¿Por qué tan apenado?, ya me lo has visto-mencionaba con un falso tono de inocencia únicamente provocando que él me diera la espalda lo cual aproveche para colocarme los boxers y los pantalones- ¿lo de ayer te incómoda?-le cuestione provocando que su cuerpo diera un pequeño salto, aun no hablábamos del tema, mejor dicho, no sabía si debíamos hacerlo, solamente estábamos excitados y.....bueno si, no estábamos alborotados al inicio pero igual es un momento que puede tensar todo.

 

-¡No me arrepiento de nada!-me respondió al instante que volteaba a verme molesto-nada ha cambiado entre nosotros, así que no me arrepiento, supéralo de una vez-bufo únicamente provocando que lo viera como un niño apenado, tierno a decir verdad.

 

-Actúas como un niño, tenemos 18, nuestras hormonas están alocadas, no es algo malo-me acerque para revolver sus cabellos, este me aparto la mano, me observo unos momentos y solo le sonreí indicando que todo estaba bien, unos momentos después el pareció pensar lo mismo y pudo volver a sonreírme-ahora a desayunar antes de que alguien suba y nos mate-le mencione colocándome desodorante y después la playera, este me asintió levantándose, no llegue a colocarme el abrigo antes de que tomara mi mano, una sonrisa traviesa apareció en su rostro, lo siguiente fue como se levantó, beso mi mejilla y entonces se dirigió a la puerta como si nada.

 

-No es mi culpa, tengo las hormonas alocadas-se burló antes de sacarme la lengua e irse por el pasillo, me quede unos segundos procesando lo ocurrido, me toque la mejilla y solté un suspiro, algo me decía que me acababa de meter en serios problemas por mi gran bocota, pero bueno, ¿que podría salir mal?. Dejando ello de lado baje a la sala donde ellos ya estaban sentados desayunando aunque más bien Sora devoraba todo a su paso puesto que nosotros entrenamos en ayuna, según ella así agradeceríamos más la comida y realmente llegaba a tener razón, claro que el castaño no puede comer tampoco.

 

-Parece que lloverá más tarde, aun así hará mucho frio-suspiro la castaña viendo por la ventana en la cual aún se veían las nubes de un tono gris y oscuro, voltee la mirada al reloj viendo que apenas y pasaban de las 10:30, me senté al lado de Sora para prepararme algo de chocolate mientras el comía unos huevos gustoso.

 

-Ojala no llueva, detesto llevar paraguas-bufo el castaño mientras yo notaba como su hermana alzaba una ceja.

 

-¿Vas a salir con Riku?-cuestiono curiosa y por un instante los movimientos de mi compañero se detuvieron, me miro de reojo a mí y luego a ella antes de beber de una taza-Ahh ya veo, ¿entonces es una cita?-pregunto ahora y el chorro de leche que Sora escupió llego al otro extremo de la mesa, como reflejo comencé a darle pequeñas palmadas en la espalda mientras el tosía y ella suspiraba por como sus tostadas ahora estaban bañadas en leche y saliva.

 

-Solo......una salida de amigos.....no siempre que estoy a solas con una persona es una cita-gimoteaba este con un pequeño rubor en las mejillas, seguramente debido a que se estaba recuperando de casi haberse ahogado.

 

-Que delicado, entonces voy con ustedes-menciono con calma, por mi parte era buena idea pues ella también descansaba hoy, seguro lo pasaríamos bien, bueno, nunca he salido con amigos ya que las fiestas a las que iba con Axel eran más.....una borrachera en la que solo me reía de ellos, así que esperaba que saliera bien, cuando iba a aceptar escuche un crujido, el pedazo de pan que Sora tenía en las manos se hizo pedazos cuando este lo apretó, parecía molesto y decidí mantenerme al margen sintiendo que había algo mal aquí.

 

-Iremos a la zona de videojuegos, quizás a comer algo, de seguro te aburres mucho-decía el mientras ponía una sonrisa realmente falsa, se notaba más que nada por como enseñaba los dientes y agitaba lo que quedaba de leche en su taza con una cuchara haciendo ruido.

 

-¿Entonces irán solo a aburrirse?-cuestiono provocando que el castaño comenzara a agitar sus manos intentando negar ello-además tu sabes que me gustan los videojuegos, podría aprovechar de buscar algunos manga que quiero, además de que Roxas necesita otras ropas-murmuro ella viéndome mientras yo también lo hacia sintiéndome algo apenado.

 

-¿Me veo muy mal?-cuestione confundido, Sora me negó con la cabeza y yo creía que tenía razón, no debería verme mal puesto que recupere toda mi ropa y aunque no tengo un gran sentido de la moda me sentía cómodo con lo que llevaba, más que nada unos jeans y los diversos chalecos producto del invierno pero ninguno parecía con mal diseño.

 

-Aun así serviría aprovechar el viaje, también podría invitar a Xion ella es buena para estas cosas-murmuro y sin esperar nada tomo su celular dispuesta a llamarla al parecer.

 

-También tengo buen gusto y tu detestas ir a comprar ropa, podríamos ir nosotros dos y ya, total lo de sentido femenino para estas cosas no tienes nada-menciono el castaño aunque su tono de voz había cambiado a uno más fuerte y agresivo.

 

-Hey, soy como 40% femenina-se defendió mientras ambos la miramos con la ceja alzada ante lo dicho, no es que ella se vea mal, es solo que.....bueno con lo poco que la conozco no la clasificaría como femenina-okey, quizás un 15 pero de ahí no me bajo-gruño molesta desviando la mirada al parecer ofendida y me sentí mal por ello-el punto es este, no te estoy preguntando, te estoy diciendo que iré con ustedes y ese es todo el cuento-esa pareció ser su última palabra, estaba a punto de asentir pero Sora se levantó de su asiento.

 

-¡No quiero que vengas!-grito apoyando sus manos en la mesa viéndola molesto, me encogí un poco en mi asiento sintiendo como todo el ambiente se llenó de tensión en un solo instante, más por cómo le había gritado dejándola algo perpleja y esta cerró su celular-¿por qué a cada cosa que quiero hacer te tienes que sumar tú?-murmuro molesto antes de sentarse nuevamente en la silla, la observe unos momentos a ella y luego a él, no sabía que hacer la verdad, ella soltó un fuerte suspiro.

 

-Tu sabes porque-respondió juntando sus manos sobre la mesa, una mirada dura caía sobre Sora, este se quedó viéndola fijamente mientras su ceño fruncido poco a poco iba desapareciendo quedando una mirada cabizbaja, pasaron unos minutos así, me limitaba a dar pequeños bocados dudando si era lo correcto en ese momento pero la verdad no entendía que había dicho, parecía algo delicado y por no decir más la curiosidad me estaba torturando-Aff, tu ganas, vayan solos, buscare algo con que entretenerme-murmuro para volver a comer, no hubo palabra alguna, de hecho el castaño no volvió a probar bocado y yo buscaba su mirada, estaba en un punto perdido, cuando me enfoqué más note que observaba de reojo una de las fotografías de su familia, ¿sería algo relacionado a lo que decía?.

 

-.....Tu sabes que te quiero-susurro a lo bajo antes de beber lo que quedaba de su taza, pude percibir una sonrisa en la castaña pero eso no me aclaraba nada, de hecho, estaba más confundido que nunca pero por respeto era mejor guardar silencio, el desayuno más incómodo de mi vida, incluso cuando mis padres estaban molestos no se sentía ese aire de tensión y nuevamente me sentía como un extraño que no encajaba con la situación. Agradecí cuando todos terminamos de desayunar, me dispuse a lavar los platos en compañía de la castaña con una esperanza de que me llegase a platicar de ello pero no parecía de humor, menos cuando Sora no se había levantado y jugaba con su celular haciendo bastante ruido, alguien debía decir algo y lamentablemente tuve que ser yo.

 

-Hey Iris-esta hizo un sonido con su garganta indicando que me escuchaba-¿cómo aprendiste tanto de defensa personal?-le cuestione decidiendo sacar un tema al azar, más bien uno que mis adoloridos brazos me hacían querer saber y ella me observo de reojo más relajada.

 

-Bueno, de pequeña siempre los chicos de otros salones me iban a molestar, me tiraban sus cosas, escondían las mías, me ponían apodos y todo solo por usar frenos y gafas-iba relatando ella con calma y sin planearlo mi mente la comenzó a imaginar más pequeña y vulnerable con aquellos accesorios-cuando me iban a tirar el peluche que siempre llevaba me abalance sobre él, comenzamos a forcejar hasta que le di un golpe en la nariz, creí que me haría pedazos pero en lugar de ello comenzó a llorar porque le salía sangre, se sintió bien hacerlo y más porque me hacía respetar, así que me inscribí en muchas clases de defensa, pero no te mentiré, fue más porque me encanto ver a ese desgraciado llorar y retorcerse en el suelo-sonreía ella con una mirada de satisfacción y maldad alzando su puño, cosa que me hizo alejarme unos dos pasos de ella, un clásico caso de bulling supongo aunque no esperaba que ello llegase a generar a una chica de este tipo.

 

-Pfff ella siempre tuvo suerte, la suspendieron una semana por pelearse pero nuestros padres estaban orgullosos-menciono Sora sin apartar la mirada de su juego, aun así cuando voltee a verlo se veía algo molesto.

 

-Solo estas envidioso porque cuando a ti te suspendieron te dejaron encerrado en tu habitación-

 

-Oh vamos, cualquiera rompe una ventana jugando fútbol-bufo el castaño cruzado de brazos-ojala no hubieras roto tus fotos de pequeña, seguro Roxas se hubiera muerto de la risa al ver lo fea que eras-mencionó y yo note como esta se puso tensa-debiste verla, tenía frenos, usaba lentes, toda una fealdad de 10 años-siguió hablando el mientras note como la castaña apretaba un cuchillo con fuerza.

 

-Seguro se veía tierna-mencione para evitar un baño de sangre, ambos hermanos se enfocaron en mi por el comentario-q-quiero decir, mírala ahora, es bastante linda, no puedes negarlo-sonreí yo notando como esta desviaba la mirada con una sonrisa apenada y el castaño me estaba matando con la mirada.

 

-¿Ahora qué?, ¿me dirás que te gusto?-se burló ella dándome una dolorosa palmada en la espalda, la soporte pues me animaba saber que estábamos más relajados.

 

-Apúrate, no quiero andar hundido en gente-el tono molesto de Sora me hizo reaccionar, apenas termine de secar el ultimo plato y nos lavamos los dientes tomamos nuestros abrigos, aun ante las quejas del castaño yo iba a llevar un paraguas, Iris nos acompañó hasta la puerta y por su mirada parecía que iba a estar aburrida en la casa, si fuera por mi iríamos los tres pero algo me decía que Sora se enfadaría, supongo que porque le prometí pasar el día con él y debo mantenerlo.

 

-Al menos tráiganme un pastelillo o algo-nos despidió ella mientras su hermano le sacaba la lengua como si fuera una burla, le guiñe un ojo a ella y esta hizo lo mismo, un gesto para decirle que yo si lo recordaría y parece que bien interpretado, al menos por ella pues apenas comenzamos a caminar por las calles hacia la parada más cercana me percaté de que Sora me veía de mala manera y solo me pude reír nervioso.

 

-Si llegas a coquetear con mi hermana, te asesinare-me dijo en un tono frio y molesto pero que aun así me pareció tierno, ¿el motivo?, muy simple, ahora el hacía de hermano sobreprotector.

 

-Entonces ¿está bien si coqueteo contigo?-cuestione en un tono pícaro acercándome a él, solo me miro perplejo antes de reírse un poco, me dio un pequeño golpe en el hombro que me dejo la zona palpitando, ¿la fuerza será cosa de familia?

 

-Olvídalo rarito, ya tengo a alguien en mente-dijo mientras me sacaba la lengua de manera burlona, lastima para el que yo este de buen humor pues le sigo el juego.

 

-¿Alguien llamado Riku?-cuestione elevando las cejas con una mirada picara y nuevamente me dio un golpe, por su sonrojo sabía que había dado en el blanco pero otra duda más llego a mi cabeza -dime pequeño romántico, ¿al menos ya has tenido tu primer beso?-pregunte una vez llegamos a la parada y para nuestra fortuna el autobús ya había llegado, ambos subimos a este notando aliviado que habían justamente dos asientos desocupados en la parte trasera.

 

-Claro que he besado-gruño a lo bajo mientras se me adelantaba para sentarse por el lado de la ventana y observar por esta, mala suerte para el que el reflejo me dejaba ver sus expresiones-solo que....creo que besarlo a él me dará lo que busco-murmuro mientras se sonrojaba levemente y yo me senté a su lado con una pequeña sonrisa.

 

-El amor, al menos en su lado bueno-suspire yo captando su atención, moví mi mano para restarle importancia, me quede viendo por la ventana al igual que este hasta que recordé algo-¿no viniste al centro ayer con Riku?-cuestione recordando que esa fue la mentira que dije para que salieran juntos.

 

-¿Mmm?, no, no tenía dinero y el tampoco, solo nos pusimos al corriente y terminamos en su casa jugando videojuegos-dijo con calma mientras yo me quedaba confundido-le mentí a Iris, no le iba a decir que fui a su casa, no dejaría de molestarme-explico el volviendo a enfocarse en el paisaje.

 

-Oh.....y ¿de que hablaron?-pregunte queriendo seguir el tema, este apretó su puño y solo me miro de reojo.

 

-De ti-fue su respuesta, no está por decir que me quede tenso pues temía haber causado algo malo-me decía que quería conocerte, me pregunto cómo nos conocimos y si tenías novia, esas cosas, hasta me pidió tu número, aunque claro, yo tampoco lo tengo-lo último lo dijo en un tono más enfadado, me encogí un poco en mi lugar, por primera vez desee ser una tortuga para así poder esconderme, el viaje siguió, no dure más de dos paradas en hacer sonar mi garganta para hablar.

 

-.... ¿Estas molesto conmigo?-el tono tímido en el que salió eso ocultaba mi preocupación, este no me dijo nada, solo saco su celular y vio la pantalla.

 

-No....si, algo, pero no por eso, sino porque me ibas a fallar otra vez, si no digo nada seguro estaría mi hermana aquí y tu muy apegado a ella-dijo sin voltear a mirarme, no entendí que significaba, también estaban las miradas, significaba un hermano protector no......esperen un segundo, acaso.

 

-Oh por dios, estabas celoso, estas celoso-le acuse señalándole con mi dedo notando como casi se le cae el celular de la mano por el pequeño salto que dio.

 

-¿Qué cosa?-gruño finalmente viéndome a la cara, sonaba molesto pero su rostro expresaba algo de temor, lo atrape.

 

-Le dije tierna y luego linda, desde ahí me has estado matando con la mirada, no por ser hermano protector, sino porque estas molesto de que no te diga eso a ti-dije de modo triunfante notando como estaba comenzando a balbucear y mover los ojos a varias direcciones.

 

-Ya quisieras-gruño dándome la espalda, aun así el reflejo de la ventana me ayudo a ver como hacia un pequeño puchero, incluso se encogió en su asiento un momento.

 

-Solo para que sepas-dije tocando su hombro notando como se puso tenso-eres mi favorito-le dije para poder colocarme mis audífonos ahora más relajado, este no me miro, sin embargo podía sentir que ya estaba más tranquilo, la gente seguía subiendo, las paradas eran más constantes llegando a ser molesto y con los minutos pasar temía caerme dormido.

 

-¡Roxas nos bajamos acá!-grito el castaño y el susto que me dio me hizo sujetarme el pecho, prácticamente me empujo del asiento casi tirándome al suelo, no me dejo recuperarme y básicamente arrastrándome del brazo nos bajamos, estaba dispuesto a regañarlo pero eso paso a segundo plano cuando comenzaron a caer unas gotas sobre mí, había comenzado a llover y sin querer abrir el paraguas fui yo quien lo jalo para ponernos bajo el techo de la entrada, mientras la gente iba saliendo y entrando yo agitaba un poco mi cabeza quitando las gotas que si me llegaron a caer.

 

-El de Twilight town es más grande-murmure para mí mismo cuando decidimos entrar, claro está que solo lo había visitado para acompañar a mi madre en sus días que me usaba de mula de carga o cuando Axel me invitaba al cine.....creo que comienzo a odiar estos lugares.

 

-Algún día iremos a ese, pero tu invitas-sonrió mientras se sacudía un poco sus cabellos húmedos, yo en cambio dirigí mi mirada hacia uno de los mapas del lugar, al menos esperaba orientarme, algo que no iba a lograr pues nuevamente sentí un jalón en mi brazo y me veía arrastrado, mientras caminábamos este me iba diciendo que cosas le gustaba, de que lugares prefería apartarse y como hablo y hablo de una cafetería viéndome con un peculiar brillo en sus ojos, era muy obvio que también quería un pastelillo pero eso preferí reservármelo para después, tras casi darle la vuelta a todo el lugar me llevo a un lugar algo.....peculiar.

 

-.....¿Una juguetería?-cuestione al estar frente al local, para cuando quise decir algo este ya había entrado y se me había perdido en las estanterías, solté un suspiro y tuve que entrar a alcanzarlo, sentía la mirada de algunas personas sobre mí por como veía algunos juguetes, si he de ser honesto, no recordaba cómo eran las jugueterías, más bien, si había entrado a alguna antes, supongo que es lo que se gana de solo centrarse en estudiar, me comencé a sentir mal por un momento, ver a tantas familias alrededor me hacía tener un sentimiento de abandono por lo que apresure mi paso, finalmente pude divisar una cabeza castaña y desordenada, cuando estuve a unos pasos note que estaba revisando una estantería en particular-No sabía que eras alguien de peluches-murmure acercándome más a él provocando que diera un pequeño salto por la sorpresa.

 

-No es para mí, es para un regalo-respondió mientras intentaba sonar serio pero le salió muy mal el intento pues se había puesto nervioso, alce una de mis cejas provocando que desviara su mirada-okey, quizás tenga uno o dos peluches en mi armario, pero los tengo porque son unos regalos que aprecio, no porque los necesite para dormir o algo así-admitió mientras acariciaba la cabeza del juguete que tenía en sus brazos.

 

-Claro, pues tu peluche estos días he sido yo-mencione ganándome un pisotón de su parte, aparte de dolerme me dio un poco de risa por como vigilaba el alrededor temiendo que alguien hubiera escuchado, finalmente suspiro y comenzó a revisar los peluches, me distraje viendo volar una mosca hasta que pareció decidirse por un.....perro?, gato?, no sé qué era pero tenía un cuerno, lucia algo panzón, era celeste con el abdomen blanco y los botones que tenía por ojos eran negros, por ultimo tenía un símbolo que parecía un corazón, digo que parecía pues no estaba seguro, solo llevaba una etiqueta que decía "dream eater".

 

-Es para mi hermano, no es una ocasión especial o algo, pero seguro que le alegrara una sorpresa-me menciono el mientras lo apretaba suavemente, al parecer también serbia de almohada, seguro seria mas útil así.

 

-¿Le gustan los peluches?-cuestione sin poder imaginarme al chico serio de las fotos abrazando eso.

 

-Los odia, dice que son un gasto de dinero-

 

-Entonces ¿por qué?-

 

-Porque si ve el peluche sabrá enseguida que es de mi parte, no se atreverá a tirarlo y tendrá que lidiar con él, será como tenerme a su lado, de ese modo sabe que aun pienso en el-explico el mientras bajaba un poco la mirada acariciando la cabeza del juguete -no vino estas vacaciones a casa, aun si hablamos un poco.....solo quiero que sepa que no estoy molesto-susurro algo decaído.

 

-Si es universitario entonces es normal, además, quizás le sea más difícil decir adiós si los ve por un rato-dije como un modo de excusarlo pues no quería verlo así.

 

-Puede ser-afirmo mientras no se veía muy convencido, al menos volvió animarse al poco tiempo, al ir a la caja le dijeron que podía ponerle un nombre en una de sus patas, infle las mejillas para no reírme cuando lo nombro "meow-wow", apenas tuvo el paquete envuelto pareció recordar el hecho de que lo acompañaba, sin ninguna palabra tomo mi mano para hacerme caminar más rápido, casi aplastando a los niños con sus madres, jamás vi a alguien pagar e irse tan rápido como lo hizo el-Por favor olvida los últimos 5 minutos de tu vida-me pidió mientras se le veía claramente avergonzado, creía que en cualquier momento su rostro estallaría por lo rojo que estaba así que decidí permanecer callado, eso sí, la sonrisa burlona que llevaba encima no me la quitaba nadie.

 

-¡Sora!-escuchamos como llamaban su nombre y ambos volteamos la mirada a todos lados, cuando escuchamos un segundo llamado nos dimos la vuelta y me enfoque en una pelirroja que estaba acercándose a nosotros, me quede unos segundos analizándola bien, estaba seguro de haberla visto pero no lo podía recordar.

 

-Kairi-murmuro antes de sonreír cuando la joven llego a nuestro lado-¿qué haces aquí? ¿Estás sola?-preguntaba mientras le besaba su mejilla a modo de saludo y esta lo hacía de igual manera.

 

-Vine con mi prima, quería comprarse unas pinturas y de paso comer algo-respondió mientras señalaba a una joven de su misma altura pero rubia que veía algo en su celular algo apartada-¿qué hay de ti?, ¿otra vez escapando para no estar con iris en su día libre?-pregunto mientras yo alzaba una de mis cejas curioso de ese último dato.

 

-Algo así, quería comprarle algo a Vanitas, ya sabes que no volverá hasta el verano-suspiro bajando un poco la mirada y esta le dio una palmada en el hombro para animarle-también quería que Roxas se distrajera un rato, ah sí, ¿ya lo conoces?-cuestiono mientras me señalaba con la mano donde estaba la bolsa del peluche.

 

-Solo de paso-me sonrió de manera gentil mientras yo le devolvía el gesto-A todo esto Sora ¿por qué van de la manito?-cuestiono la pelirroja, ambos nos miramos confundidos y entonces bajamos nuestras miradas percatándonos de ello, en verdad no nos habíamos soltado, siquiera me había llegado a dar cuenta pues me había arrastrado por todo el lugar, solo ahora que lo note pude sentir su tacto cálido y algo húmedo, parecía estar nervioso-no te conocía esas mañas Sora-murmuro con un leve tono pícaro mientras este balbuceaba sonrojado intentando excusarse de alguna manera, afortunadamente yo si pude pensar aunque estaba algo avergonzado.

 

-¿Que te puedo decir?, una agresiva hermana mayor me ordeno que no se me perdiera, tú debes saber lo inquieto que es y créeme que no quiero escucha por el alta voz, "el joven Roxas, presentarse en servicio al cliente"-dije en el clásico tono de esas jóvenes del servicio cuando se perdía un niño.

 

-Jeje buen punto, aunque debiste traerte una correa es más seguro-se reía esta al parecer creyéndose mi mentira, aunque quizás no lo fuera tanto, si no me hubiera arrastrado a todos lados para esta hora ya lo hubiera perdido con lo inquieto que es.

 

-Estoy aquí-gruño inflando las mejillas por nuestros comentarios y nos dio la espalda claramente indignado, me rasque la nuca algo incómodo por creer que había metido la pata y la pelirroja solo me sonrió como si quisiera calmarme.

 

-Aprovechando que están aquí, ¿quieren ir al cine con nosotras?-propuso Kairi mientras el castaño la veía de reojo-tengo entradas extra y es algo raro ir solas las dos, además aún es temprano-explico mientras juntaba sus manos en una pequeña suplica.

 

-....Supongo que si tienes entradas no hay de otra-suspiro Sora mientras le daba una sonrisa, esta pareció animarle y fue a hablarle a su prima-¿por qué siempre me convence?-susurro cruzado de brazos mientras se le veía algo molesto, bueno, el quería que fuéramos nosotros dos hoy, supongo que si alguien se cola en tus planes te molestaras sin importar que.

 

-¿Quieres ir al cine?-le dije yo mientras este alzaba la ceja

 

-Kairi ya nos invitó-

 

-Lo sé y vi que te molesto un poco la idea, así que pensé que si te invitaba yo sería mucho mejor-explique con calma mientras este intentaba no reírse-¿qué?, ¿no te gusta mi razonamiento?, porque la verdad ya veo una sonrisa en esa cara-dije yo señalándole con mi dedo y este se cubrió la boca con su mano pero aun así seguía riéndose.

 

-Jajá okey okey, quizás si me anima más-admitió el mientras me daba un golpe en el hombro-pero solo si compras las golosinas-excusa barata para defenderse pero si está sonriendo todo lo vale.

 

-Trato, ahora, ¿me devuelves mi mano?-cuestione bajando la mirada mientras este lo hacia también.

 

-Bien, pero te costara el almuerzo también-dijo soltando mi mano, solamente me reí nervioso y agradecí que me hubieran pagado el día anterior, ambas regresaron en unos momentos, aquella rubia se presentó, Naminé, un nombre algo curioso pero aun así intente mostrarme amable.

 

-Kairi estudiara turismo, yo entraré en la facultad de artes-los cuatro caminábamos en dirección al cine del lugar, Sora iba más adelante con Kairi discutiendo que verían así que ella y yo estábamos hablando para no ir callados.

 

-Parece que todos iremos a la misma, eso es bueno-sonreí yo pues al menos Sora no estaría sin sus amigos, seguí hablando con ella relajadamente, la verdad era algo tímida pero era buena chica, también era educada, saco su celular para mostrarme algunos de sus dibujos, no era de muy buena definición la cámara pero podía admitir que eran buenos trazos-en verdad tienes talento, seria genial verlos algún día-le elogie yo haciendo que sonriera algo apenada, nunca he sido del tipo que va a museos a menos de que sea por una tarea, pero se reconocer trabajos con esfuerzo y por lo que veía, ella realmente ponía todo en sus creaciones.

 

-¿Me das tu numero?-aquella pregunta me descoloco un poco-así podríamos juntarnos y te mostraría mis dibujos, aunque claro, no son la gran cosa-susurro ella mientras desviaba la mirada, estaba por sacar el mío y dárselo pero.

 

-No tiene celular-la voz de Sora nos llamó la atención a ambos-se le cayó en el retrete-añadió antes de que yo pudiera negarlo provocando que ambas comenzaran a reírse por ello, solamente me quedo sonreír de modo apenado mientras veía al castaño, ¿por qué había mentido así?

 

-Bueno, seguro podremos vernos algún día-murmuro ella mientras veía que ya habíamos llegado.

 

-C-Claro-afirme mientras ahora sentía que en verdad me estaba matando el castaño con la mirada, decidí mantenerme en silencio mientras ellas elegían la película, una vez se decidieron por un drama y acción nosotros fuimos a uno de esos puestos del lugar que son más caros que nada, luego se preguntan porque la gente cola comida en cine, aunque aprovechando que él se decidía que comprar decidí abordar el tema-¿ahora que hice?-le susurre yo mientras este me miraba de reojo.

 

-Coquetear con la prima de mi mejor amiga-respondió como si fuera obvio.

 

-.....Sora, tu sí que eres celoso-murmure haciendo que este se sonrojara y me pellizcara mi brazo con fuerza-¡ouch!, okey okey me callo-gimotee mientras me frotaba la zona, tras pagar por las cosas fuimos algo cargados hacia ellas, lo bueno es que la película recién había comenzado así que nos dirigimos a la sala.

 

El lugar estaba a oscuras, apenas iluminado por la luz de la pantalla donde se veían las normas de seguridad, entramos a tiempo al parecer, con cuidado de no tirar nada nos ubicamos en nuestros asientos, Sora estaba en el ultimo a mi derecha mientras que Naminé estaba a mi izquierda, los clásicos avances de película, los movimientos para pasar las cosas y lograr acomodarnos, el silencio del lugar que hace sobresaltar a todos por el repentino sonido que casi rompe los tímpanos, todo normal, tal como recordaba de la última vez que vine a una, donde en ese entonces Axel decía amarme y me pedía acurrucarme con él, de vez en cuando intentando meter su mano en mi pantalón cuando no había alguien cerca, mas disimulado si había mucha gente alrededor y solamente insistía ir a casa para tener sexo, me pregunto si puedo clasificar eso como una cita....no lo sé.

 

-"Al menos esta vez será mejor"-ese pensamiento fue una súplica, parecía respondida conforme el tiempo iba pasando, todo comenzaba normal, la escena tranquila, el protagonista, los eventos siguientes, nos manteníamos en silencio para disfrutar de ello, en un momento sentí como el castaño se había movido pero solo era para beber de su vaso, cuando lo volvió a dejar en su lugar su mano se quedó apoyada en la mía, no dije nada, pensé que se daría cuenta de ello y la apartaría, en cambio paso a apoyar su cabeza en mi hombro, tuve que morderme el labio para no intentar decir algo que nos delatara, era una posición que se podía malinterpretar, al menos la oscuridad nos cubría pues no quería dejarlo mal frente a su amiga, aunque realmente, ellas parecen más centradas en la película que nada, cosa que yo debería hacer también, en lugar de ello lo mire de reojo a él, se le ve calmado, como si no estuviera haciendo nada malo o raro, simplemente suspire y recargue mi cabeza con la suya, buscando estar cómodo también e increíblemente lo logre, podía sentir su fragancia, me relaje un momento y fue entonces que sentí como entrelazo sus dedos entre los míos, apretó suavemente mi mano, como si quisiera hacerlo disimulado, no me resistí, no me moví en absoluto, intentaba mantener la mente ocupada en otras cosas, de vez en cuando escuchaba como ellas hablaban a lo bajo pero no sé de qué realmente, intente enfocarme en la película pero me era difícil por tener esa cercanía, por cómo me dejaba ser, por como aquello simplemente me resultaba agradable, el no sentirme amenazado u hostigado.... solamente me queda preguntarme algo.

 

¿Esto es normal?


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).