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Caminos cruzados por Aoi Namikaze

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Notas del capitulo:

¡Hola! Lemento mucho la demora para subir esté capítulo x_x quienes me siguen en facebook sabrán la razón, en fin espero que el capítulo les guste ;)

5

Sentimientos

 

 

Cuando Naruto abrió descubrió con horror que ese lugar no era la habitación de la Universidad. Cuando bajó la mirada abrió los ojos con sorpresa, pues eso que llevaba puesto no era su ropa. Respiró profundo y se tomó unos segundos para recordar todo lo que había sucedido. Las imágenes de la noche anterior comenzaron a llegar a su cabeza y pronto todo estuvo nuevamente en su memoria. Sasuke lo había salvado de un Alfa que intentó abusar de él y lo había llevado a su casa. Su última memoria era de haberse quedado profundamente dormido. Aun así, podría jurar que en algún momento de la noche sintió la puerta del cuarto ser abierta, aunque quizás sólo era producto de su imaginación.

 

Corrió las cobijas y se levantó de la cama. La ropa de Sasuke le quedaba demasiado grande, así que para no caerse al momento de caminar, el Omega arremangó la parte inferior del pantalón. De esa manera caminó hacia el baño para asearse como todas las mañanas. Cuando estuvo listo salió del cuarto y caminó por el pasillo, bajó las escaleras y sintió ruidos que venían de uno de los cuartos del lugar, supuso que el Uchiha se encontraba ahí así que se encaminó hacia el lugar que no era otro más que la cocina. Sasuke se encontraba preparando café. Cuando vio al Omega lo saludó.

 

—Buenos días, pensé que ibas a dormir un par de horas más —le dijo mientras servía el café.

 

—Hola. No, cuando despierto ya no puedo seguir durmiendo —explicó el Omega. Naruto miró a su alrededor y se encontró con una cocina muy amplia, sin pensarlo demasiado corrió una de las sillas de la mesa y se sentó en ella.

 

El Uchiha lo miró y enarcó una ceja. Había pensado que Naruto era el típico chico que dormía demasiadas horas durante los fines de semana, pero se había equivocado, apenas eran las diez de la mañana. Otra nueva actitud que hacía que el Namikaze le interesara aún más.

 

—¿Quieres café? —le preguntó. Naruto frunció el ceño, no le gustaba demasiado. Pero pensó que sería muy descortés de su parte rechazarlo así que simplemente asintió.

 

El Omega miraba un punto fijo en la mesa, podía escuchar como el Alfa le hablaba pero su mente estaba en otro lugar. Se sentía extraño, tenía calor y podía jurar que quizás tendría un poco de fiebre. Respiró profundo e intentó relajarse. Todo eso seguramente era producto de lo sucedido la noche anterior.

«No es nada, deja de pensar tonterías», se dijo así mismo.

 

Unos minutos después. Sasuke puso frente a él una taza de café humeante con algunas tostadas y mermelada. Era extraño ver a un Alfa ocupándose de la cocina, pues la mayoría no hacía eso, pero Sasuke era diferente. Odiaba los extraños en casa y por eso prefería ocuparse el mismo de las pequeñas cosas de su hogar. Sólo una mujer iba dos veces a la semana a limpiar el departamento. El Uchiha se sentó frente a Naruto y guardó silencio, debía habar con Naruto sobre lo sucedido la noche anterior y creía que ese era un buen momento.

 

—Naruto —lo llamó. El Omega levantó su mirada—. ¿Quién es Dei? —preguntó sin rodeos. Cuando el Namikaze escuchó aquello la sorpresa se hizo presente en su mirada.

 

—¿Por qué preguntas eso?

 

—Anoche mientras dormías dijiste ese nombre, es simple curiosidad. —Se encogió de hombros. La verdad esperaba que el Omega quisiera hablar sobre eso, pues de eso dependían muchas cosas. Naruto apretó los puños con fuerza. No deseaba contarle a Sasuke sobre su hermano, no ahora. Él se había portado muy bien a pesar de que toda su relación estaba basada en un chantaje. Pero no estaba convencido de si Sasuke era una persona confiable para saber sobre su pasado.

 

—No es nadie —mintió. Le dolía decir aquellas palabras, pero era lo mejor—, estaba dormido, suelo decir tonterías cuando lo estoy. —Sasuke no creía para nada en sus palabras.

 

—Estás mintiendo —dijo con seguridad. Naruto lo miró con molestia.

 

—No me importa lo que tú pienses. —Se levantó de su lugar—, ya debo irme, nos veremos de nuevo en la Universidad. —No pudo ni siquiera llegar hasta a puerta de la cocina porque Sasuke rápidamente se levantó y lo tomó del brazo.

 

—¿Por qué no quieres contarme la verdad? —preguntó. El Omega hizo un movimiento bruco intentando soltarse del agarre del Alfa, pero fue imposible.

 

—Porque no es algo que te interese, ¡ya suéltame! —Le gritó. Pero eso sólo molesto a Sasuke.

 

—No lo haré hasta que me digas lo que sucede. —No iba a ceder, necesitaba conocer la verdad para entonces tomar una decisión sobre lo que debía hacer.

 

La paciencia de Naruto estaba llegando a su límite, lo único que deseaba hacer en ese momento era propinarle un fuerte golpe al Alfa. Odiaba cuando Sasuke se comportaba de esa manera. Iba a replicar, pero en ese momento un fuerte dolor de cabeza lo hizo cerrar sus ojos y se quejó de dolor, eso no era normal. Además nuevamente sentía mucho calor. Pero estaba seguro que no era causa de su celo, pues para eso faltaban algunos meses, sentía su cuerpo muy débil y podía jurar que en cualquier momento podía desmayarse. En un intento de controlarse puso su mano libre sobre el brazo de Sasuke para sostenerse. Ese gesto no pasó desapercibido para el Uchiha. Quien rápidamente soltó su brazo y lo tomó de los hombros.

 

—Naruto. ¿Qué te sucede? —preguntó alarmado. El Omega negó.

 

—No lo sé. Me duele mucho la cabeza y siento mucho calor —le explicó mientras lo miraba fijamente.

 

Sasuke lo observó y estaba seguro que no se trataba de un Omega que estaba a punto de entrar en celo pues hubiera percibido su aroma. No, definitivamente se trataba de otra cosa. Fue en ese momento en el que recordó que seguramente Naruto había consumido algún tipo de draga en el bar y que a pesar de que había vomitado la sustancia aún se encontraba en su cuerpo.

 

—Sasuke… —La voz de Naruto lo sacó de sus pensamientos—. Me siento muy mal, ayúdame —rogó el Omega mientras se sujetaba con más fuerza de su camisa. El Alfa madijo a ese maldito bastardo del bar, por su culpa Naruto se encontraba en esa situación.

 

Si el Naminaze sentía calor seguramente esa droga provocaba ese tipo de efecto secundario en el cuerpo. Sasuke tenía algunos conocimientos sobre esas sustancias, la única manera de que el Omega se sintiera mejor era un baño de agua fría, aunque no estaba seguro que tan bueno podía ser eso si se encontraban en invierno. Pero debía hacerlo. El aroma de Naruto podía causar estragos en su comportamiento si no solucionaba el problema lo más pronto posible.

 

—Naruto, tienes que escucharme —le dijo sujetándolo más fuerte de los hombros—, lo que te sucede es por causa de la droga que seguramente ayer pusieron en tu bebida —explicó—. No sé qué clase de sustancia sea, pero para solucionar esto deberás soportar un baño en agua fría, ¿podrás hacerlo? —le preguntó. Naruto no entendía demasiado lo que Sasuke le estaba diciendo. Su vista era borrosa y apenas si distinguía las facciones del rostro del Alfa.

 

—No puedo, siento que si doy un sólo paso voy a caer —murmuró.

 

—Yo te ayudaré. —Y sin esperar respuesta tomó a Naruto entre sus brazos y subió rápidamente las escaleras hacia su cuarto.

 

Dejó a un mareado Omega en la cama y rápidamente fue al baño en donde abrió la llave de la regadera. ¡Vaya que el agua estaba helada! Pero era necesario. Cuando todo estuvo listo regresó por el Namikaze.

 

—Sé que no será un baño placentero pero es necesario —le dijo. Pero Naruto no respondió, su mirada estaba pérdida y parecía que no tenía intención de moverse—, medición… —masculló. Sin más alternativa tomó nuevamente en brazos al Omega y tuvo que entrar con él al pequeño cubículo en donde se encontraba la regadera. Cuando el agua fría hizo contacto en sus cuerpos Naruto se estremeció y abrió los ojos con sorpresa.  

 

—¡El agua está muy fría! —le gritó e intentó separarse. Pero Sasuke lo abrazó con más fuerza.

 

—Crees que no lo sé —musitó—. Pero necesitas esto para sentirte mejor —le aclaró. Naruto ya no dijo nada y simplemente abrazó a Sasuke mientras escondía su rostro en el pecho del Alfa. Su cuerpo no podía evitar estremecerse por el frio, pero debía soportarlo. No quería sentirse tan mal como hacía unos minutos. 

 

Estuvieron juntos bajo el agua helado por alrededor de diez minutos. Cuando el Omega ya se sintió mejor. Sasuke abrió la llave del agua caliente, poco a poco sus cuerpos comenzaron a recuperar su temperatura normal. Salieron y rápidamente Sasuke buscó unas toallas para que pudieran secarse, luego le entregó una nueva muda de ropa a Naruto. Mientras el Alfa terminaba de abrochar su camisa Naruto se encontraba sentado en la cama envuelto en una frazada gruesa. Sus mejillas estaban sonrojadas porque el Uchiha no había tenido vergüenza en cambiarse frente a él. Para Naruto Sasuke era muy guapo –demasiado segundo su opinión -, y ahora entendía un poco más porque muchos en la Universidad lo miraban con odio.

 

—Gracias —se atrevió a murmurar. El Uchiha volteó a verlo y enarcó una ceja—, gracias por ayudarme —le aclaró. Sasuke bufó.

 

—Eres mi novio, es mi deber cuidarte —Y cuando dijo aquellas palabras se sorprendió al igual que Naruto “novio”, se supone que lo suyo era sólo una mentira, pero demasiadas cosas habían cambiado en tan poco tiempo y ya ninguno de los dos estaban seguros si lo que estaba sucediendo entre ellos era una simple mentira—. Vístete y luego baja a terminar de desayunar. —Sasuke salió del cuarto dejando a Naruto más confundido que nunca.

 

~**~

 

Los días trascurrieron rápidamente. Era martes e Itachi terminaba de arreglarse mientras Dei lo observaba sentado en la cama. Era el día en que finalmente Deidara tendría su primera cita con la psiquiatra. El Alfa ya había hablado con ella y aunque aún no la conocía personalmente por su tono de voz le parecía una buena persona. Cuando estuvo listo miró a su esposo y le sonrió.

 

—Ya debemos irnos o se nos hará tarde —le dijo mientras extendía su mano. El Omega simplemente asintió y aceptó la ayuda del Alfa para ponerse de pie.

 

Salieron del cuarto y bajaron las escaleras, al salir de la casa Itachi cerró la puerta principal con llave. Una vez que Dei subió al auto Itachi hizo lo mismo. Se colocaron sus respectivos cinturones de seguridad y una vez listos el Alfa emprendió la marcha hacia el hospital. 

 

El camino era un poco largo ya que ellos vivían fuera de la ciudad. Pero el Omega no parecía incomodarle aquello ya que se dedicó a observar el paisaje. Aunque el día estaba nublado y hacia mucho frio a él parecía no importarle. En su mente trastornada podía recordar algunos momentos en los que creyó iba a morir congelado, pero ahora con la ropa que utilizaba sabía que eso no iba a suceder, y aunque él no estuviera muy consciente de su situación sabía que podía confiar en la persona que estaba a su lado. En la parada del semáforo, Itachi se tomó unos segundos para mirar a su esposo y mientras le sonreía puso una de sus manos sobre la del Omega.

 

—Todo estará bien. Yo estoy contigo —le recordó. Y por un instante Deidara le sonrió.

 

Fue un viaje de cuarenta minutos. Cuando llegaron al hospital aparcaron en el estacionamiento y luego se dirigieron a la recepción. Itachi habló con la recepcionista y ella amablemente les indicó el camino hacia el consultorio de la psiquiatra, Haruno Mebuki. Subieron en el ascensor hasta el piso 3, y se sentaron en la sala de espera. Deidara estaba nervioso. Sólo una vez había visitado un lugar así y no fue una visita placentera. Instintivamente tomó al Alfa del brazo y lo miró con sus ojos llenos de súplica como si estuviera rogando para que el Uchiha lo sacara de ese lugar.

 

—Dei, no estés nervioso. Yo estoy aquí, nada malo te sucederá. —Extendió sus brazos y el Omega se refugió entre ellos. El Alfa suspiró. Odiaba ver así a Deidara, pero era necesario que él viera a la psiquiatra, era la única persona que podía ayudarlo a recuperarse y finalmente conocer su pasado.

 

Estuvieron abrazados hasta que la puerta del consultorio se abrió. Dos personas salieron y luego una mujer –a quien Itachi reconoció como una Alfa -, Era una mujer de aproximadamente unos cuarenta años de edad. Su cabello era rubio y sus ojos verde esmeralda. La expresión de ella era sería. Pero al ver el estado del Omega relajó sus facciones y le sonrió para luego presentarse.

 

—Buenos días, soy Haruno Mebuki. Pueden pasar. —Lo invitó a entrar al consultorio.

 

Itachi asintió, y tomando a Dei de la mano lo hizo ponerse de pie. Ambos entraron al consultorio junto a Mebuki, comenzando de esa manera una nueva etapa en su vida, una en la que buscarían ayudar a Deidara y saber lo que le había sucedido.

 

 ~**~

 

Sasuke se encontraba consternado mientras sostenía en sus manos un pequeño sobre de color amarillo. A su lado Naruto intentaba guardar la calma y no comenzar a reír como si fuera un completo maniático. Ese día, Sasuke había anunciado que el sábado realizaría en su casa una fiesta de temática “Victoria con antifaz”. Pero no sería una fiesta como cualquier otra que ella hubiera organizado. Dentro de cada sobre –el cual contenía la invitación -, se encontraba un pequeño trozo de papel de colores diferentes. A quienes le hubiera tocado el color rosado debería usar vestido, peluca y todo lo que correspondiera a la época, mientras los que tuvieran un papel azul podría usar ropa de hombre del mismo estilo.

 

El Alfa estaba consternado al descubrir que en el interior había un pequeño trozo de color rosado. Cuando el Namikaze lo vio sedeó tanto poder reír, pero al ver la mirada asesina del Uchiha tuvo que contenerse. El Uchiha masculló algunas palabras y luego salió del comedor, llamando la atención de los presentes. Naruto sin pensarlo fue a buscarlo. Pues estaba seguro de que el Alfa no iba a aceptar algo así, y aunque Naruto lo negara si tenía deseos de asistir junto a él a la fiesta. Todos irían en parejas y él no quería terminar solo. Llegaron hasta su cuarto y el Omega cerró la puerta.

 

—¿Tanto te afecta que te tocara un estúpido papel rosa? —le preguntó. Sasuke lo miró frunciendo el ceño.

 

—No pienso asistir a esa fiesta ridícula —respondió—. Muchos menos rebajarme a ese nivel. Sigo siendo un Alfa —le recordó. Naruto suspiró. El tan “importante” estatus como Alfa, seguramente muchos de sus compañeros pensaban igual. Pero era una fiesta para divertirse, a nadie le importaría si un Alfa se ponía un tonto vestido o una Beta usaba un traje de gala. Eran jóvenes y sólo querían divertirse.

 

—Es sólo una fiesta, Sasuke —le recordó.

 

—No me interesa, no pienso asistir —dijo de manera cortante. Naruto se mordió el labio inferior. Realmente quería que Sasuke fuera con él, en las últimas semanas muchas cosas habían comenzado a cambiar, parecía que ambos en algunos momentos olvidaban como habían comenzado las cosas entre ellos y que supuestamente su “noviazgo” era una mentira. Pero se habían besado demasiadas veces y no siempre frente a los estudiantes de la Universidad. Habían salido juntos y Naruto visitó más de una vez la casa de Sasuke. No ninguno de los dos sentía que eso seguía siendo sólo un chantaje. Aunque tampoco querían admitirlo.

 

—Yo quiero ir contigo —le dijo con sinceridad pero no hubo respuesta. El Omega se tomó unos minutos para pensar que podía hacer para que el Uchiha cambiara de opinión. Finalmente una sonrisa apareció en sus labios—. Tengo una idea. —Sasuke volteó a verlo—. Yo tomaré tu invitación y tú la mía. Pero a cambio tendrás que hacer algo. —Sasuke enarcó una ceja.

 

—¿Qué quieres? —Naruto se acercó a él y susurró algunas palabras en su oído. El Alfa abrió los ojos con sorpresa.

 

—No haré eso —se negó rotundamente. El Omega suspiró. Pero luego haciendo uso de su “encanto” como Omega puso sus manos sobre las del Alfa. Aquella acción tomó al Uchiha por sorpresa.

 

—Por favor, hazlo por mí —murmuró con voz dulce.

 

Y cuando Sasuke escuchó aquello algo en su mente hizo “clic”. Ningún Alfa podía resistirse a los encantos de un Omega, y aunque Naruto nunca los utilizaba lo hizo en ese momento. El Alfa lo miró y vio los brillantes ojos azules del Namikaze, esos que le gustaban demasiado. Y unos segundos después terminó aceptando. Lo que recibió en agradecimiento fue un beso de parte de Naruto, el cual él aceptó sin pensarlo demasiado.

 

~**~

 

Sakura se encontraba supervisando la decoración del salón de su casa ya que ese día sería la fiesta. Estaba emocionada y esperaba que todo saliera bien. Si bien sus padres estarían en casa ellos habían prometido no salir de su cuarto hasta que el evento finalizara, así como ella juró que todos sus amigos tendrían buen comportamiento en su casa.

 

—Hija, ¿podemos hablar un momento? —preguntó Mebuki quien acaba de bajar las escaleras. La joven dejó de dar órdenes y miró a su madre.

—Sí. ¿Qué sucede? —quiso saber.

 

—Sé que no debo hacer esto porque va en contra de mi ética profesional —comentó ella—. Pero… ¿Naruto nunca te ha contado si tuvo o tiene un hermano? —preguntó. Desde que Deidara había llegado a su consultorio junto a Itachi no podía dejar de pensar en el gran parecido que tenía con el amigo de su hija. Sakura por su parte se sorprendió ante aquella pregunta. Era una locura, Naruto no podía tener un hermano, si fuera así seguramente se lo habría contado.

 

—No mamá. No creo que sea posible, si fuera así él me lo hubiera contado —respondió. La Alfa simplemente asintió.

 

—Sí, tienes razón, fue una locura de mi parte. —Le sonrió—. Continua con los preparativos para la fiesta, el lugar está quedando precioso. —Abrazó unos segundos a Sakura y luego se marchó a la cocina. La joven se quedó en silencio por algunos segundos y luego continuó supervisando todo lo que los decoradores estaban haciendo, aunque no podía dejar de pensar en las palabras de su madre.

 

~**~

 

—¿Quieres dejar de reír? —preguntó el Uchiha mientras se dejaba caer en el sillón. Naruto a su lado no dejaba de reír mientras observaba la fotografía que había tomado con su celular.

 

—Lo siento, es que ese look te quedaba maravilloso —bromeó. El Alfa frunció el ceño e intentó quitarle el celular, pero el Omega fue más rápido y no se lo permitió—. Ahora yo podría chantajearte con esto. —Movió el celular frente a sus ojos —Sasuke bufó.

 

—No lo harías, eres demasiado amable —dijo el Uchiha. Naruto dejó de reír y se acomodó de mejor manera en el sillón. Observó nuevamente la foto y esta vez sonrió. Le había pedido a Sasuke que a cambio de que fuera él quien usara un vestido para la fiesta, Sasuke tendría que hacer el gran “sacrificio” de posar para él con una peluca de color azabache, y el Alfa había accedido. Cuando Naruto lo vio no pudo contener su risa y tomó algunas fotografías las cuales ahora estaban en su poder, podía hacer lo que quisiera con ellas. Pero Sasuke tenía razón, él era demasiado bueno como para chantajear a alguien.

 

—Sí, pero aun así no pienso borrarlas —le advirtió. Vio la hora en el reloj que estaba en la pared y supo que estaba con el tiempo justo para prepararse—. Iré a tomar un baño y luego me vestiré para la fiesta —le dijo mientras se levantaba de su lugar.

 

—De acuerdo, yo lo haré luego. —Naruto asintió y sin pensarlo besó a Sasuke quien no dudó en corresponderle. Luego se marchó rápidamente hacia el baño. Prácticamente sentía el departamento de Sasuke como su propia casa.

 

Cuando estuvo solo el Alfa suspiró. En tan poco tiempo muchas cosas habían cambiado. Sí, su relación con Naruto se suponía que sería una mentira, pero al ir conociendo más al chico algo comenzó a cambiar, y ahora no quería pensar en que lo que había entre ellos aún era por el miedo que el Omega sentía si su secreto fuera revelado. Sasuke nunca había sentido nada por un Omega, pero el Namikaze era diferente. Y eso era lo que él  deseaba, algo diferente con Naruto y esperaba poder conseguirlo. Luego de pensar en todo lo que sucedía se levantó y fue a su cuarto para comenzar a prepararse para la fiesta, a la que sin duda nunca habría asistido si no fuera por el Namikaze.

 

~**~

 

Una hora después, Sasuke esperaba el pie de las escaleras a que Naruto terminara de arreglarse. El Alfa vestía un traje de color negro con chaleco de color rojo y un pañuelo en su cuello del mismo color, mientras que su máscara era sencilla y de color plata. Miró la hora y seguramente estarían justo a tiempo. Sintió unas pasos acercándose y cuando vio a Naruto bajar las escaleras no sabía si reír o sorprenderse porque debía admitir que lucía demasiado bien.

 

—Lo siento, no podía acomodar la estúpida peluca —se quejó. Miró al Alfa cuando no tuvo respuesta—, ¿sucede algo?

 

—No es nada, sólo que luces bien —lo alagó. Las mejillas de Naruto se sonrojaron. El Omega vestía un hermoso vestido color rojo y negro de mangas largas y con holanes. Se había colocado una peluca larga y rubia con algunos rizos. Finalmente completó su traje con un antifaz de color rojo con encaje, plumas y una flor en color negro.

 

—Gracias, ya vámonos o llegaremos tarde. —Quería salir de ahí antes de sentirse aún más avergonzado. El Uchiha simplemente asintió y salieron del departamento. Naruto había sido inteligente al comprar un vestido largo y de esa manera poder usar zapatos bajos, porque aunque hubiera tenido que usar en vestido se negaba a ponerse tacones. Todo tenía un límite.

 

~**~

 

La casa de Sakura no estaba demasiado lejos del edificio en donde Sasuke vivía, así que no les tomó más de veinte minutos llegar. Avanzaron lentamente detrás de la cola de autos que se habían formado. El Uchiha buscó un lugar para estacionar, cuando lo hizo se bajó, y antes de que Naruto abriera la puerta el Alfa ya lo estaba haciendo. Sasuke se puso su antifaz y juntos avanzaron por el pequeño jardín delantero del lugar, vieron a sus compañeros quienes también vestían ropas iguales a las suyas. Naruto rio, podía jurar que vio a algunos de sus amigos con vestidos similares al suyo. Subieron las pequeñas escaleras. En la entrada se encontraba el mayordomo junto a una de las sirvientas quienes les pidieron sus invitaciones, cuando fueron revisadas le permitieron la entrada. Se sorprendieron al ver el lugar, definitivamente Sakura se había esmerado en la decoración. En el salón principal se podían apreciar algunas estatuas muy características de la época, candelabros iluminaban el salón y las mesas habían sido dispuestas a los costados para así liberar el centro en donde las parejas podían bailar. En las mesas se podían apreciar distintos aperitivos que lucían exquisitos, las sirvientas se movían entre los invitados ofreciendo bebidas a quienes lo desearan. 

 

—¡Naruto! —la voz de Sakura lo hizo voltear su mirada. La joven caminaba hacia el luciendo un hermoso vestido color esmeralda y un antifaz plateado con plumas blancas.

 

—Sakura-chan, ¿Cómo supiste que era yo? —le preguntó. La Alfa sonrió.

 

—Reconociera esas marcas en tu rostro a kilómetros —dijo tocando sus mejillas con cariño—. Buenas noches, Sasuke-kun. Gracias por aceptar la invitación —le agradeció al Uchiha.

 

—Estoy aquí sólo por Naruto —advirtió. La Alfa rio.

 

—Bien, espero que la pasen bien. Te veré luego, Naruto. —El Omega asintió y luego vio a su amiga caminar hacia Lee, quien la abrazó y besó con cariño.

 

La pareja comenzó a moverse entre la multitud saludando a algunos conocidos. Todos alababan lo bien que lucia Naruto con ese vestido a pensar de ser un chico. Esos comentarios y los sonrojos del Omega no le agradaban al Uchiha, aun así no dijo nada. No quería que el Namikaze supiera que ese tipo de comentarios hacia que una parte de él sintiera celos. Mientras hablaba con sus amigos, el Omega conoció a Yuu… un Alfa que por sus comentarios a Naruto le resultaba desagradable, el Omega miraba a su alrededor buscando a Sasuke quien había ido a buscar algo de beber. En ese momento Yuu lo tomó de la mano.

 

—Vamos a bailar. —Eso ni siquiera había sido una pregunta, parecía más una orden. Antes de que Naruto respondiera, Sasuke apareció y apartó al Alfa del Namikaze.

 

—Naruto sólo bailará conmigo, soy su pareja —le dijo con sus ojos brillando de furia, si fuera en otras circunstancias seguramente habría golpeado a ese sujeto, pero no podía hacer algo así y arruinar la fiesta en la cual todos se estaban divirtiendo—. Ven, vamos a bailar. —Naruto asintió y el Alfa lo guió hacia la pista en donde una suave melodía comenzó a sonar.

 

El Uchiha era muy buen bailarín aunque no solía hacerlo en demasiadas ocasiones. Con delicadeza colocó su mano derecha en la cintura de Naruto, mientras él colocaba la suya en el hombro del Alfa.  Finalmente Sasuke juntó sus manos izquierdas. De manera lenta comenzó a moverse y el Omega siguió sus pasos, Naruto no resultaba muy bueno bailando, pero sentía que junto a Sasuke todo era más sencillo. Recorriendo la pista y el Alfa lo hacía girar en algunas ocasiones. Sus miradas se encontraron y ambos sonrieron. Sí, definitivamente entre ellos todo había cambiado y ya nada sería igual. Pronto las demás parejas se reunieron a su alrededor y comenzaron a bailar. Logrando así un momento único en el salón, pues todos la estaban pasando mejor de lo que habían imaginado. Cuando la música terminó Naruto tenía las mejillas sonrojadas.

 

La fiesta continuó hasta la madrugada y poco a pocos todos los invitados se despidieron y comenzaron a marcharse a sus respectivos hogares. Sakura le propuso a Naruto dormir en su casa, pero él se negó ya que iría a pasar la noche en el departamento del Alfa y luego ambos regresarían a la Universidad. Fue así como la pareja se despidió de la chica y salieron del lugar, subieron al autor y emprendieron la marcha hacia el edificio en donde vivía el Uchiha. Ninguno decía absolutamente nada. Naruto miraba por la ventana mientras pensaba en todo lo que Sasuke hizo esa noche por él. Sonrió, no podía seguir negando en el Uchiha le gustaba demasiado, pero no estaba seguro si sus sentimientos serían correspondidos. Quizás debía arriesgarse y hablar con él.

 

~**~

 

Cuando llegaron dejaron el auto en el estacionamiento y subieron hasta el piso correspondiente. Cuando finalmente entraron al departamento Sasuke suspiró, al fin estaba en casa.

 

—Debo quitarme este estúpido traje —dijo mientras se quitaba la chaqueta.

 

—Sasuke, ¿podemos hablar? —preguntó el Omega. El Alfa enarcó una ceja. Era muy tarde para tener una plática en ese momento.

 

—Hablaremos en la mañana, ya es tarde —le respondió. Pero Naruto negó.

 

—No, debe ser ahora —dijo con seguridad. El Uchiha comprendió en ese momento que se trataba de algo importante.

 

—De acuerdo, iré a cambiarme y luego te buscaré en tu habitación.

 

—Sí, te estaré esperando. —Y sin más que decir Naruto subió las escaleras. Necesitaba quitarse toda esa ropa ahora mismo. Sasuke por su parte hizo lo mismo, aunque no dejaba de pensar sobre que podría querer hablar el Namikaze.

 

~**~

 

Cuando Sasuke entró al cuarto que ocupaba Naruto él ya se había cambiado de ropa y se encontraba sentado en la cama. Cuando el Omega lo vio le sonrió y luego dio unos golpecitos en el colchón, invitando de esa manera a Sasuke para que se sentara a su lado y el Alfa así lo hizo. Estuvieron unos segundos en completo silencio hasta que Naruto habló.

 

—Sasuke. ¿Qué sientes por mí? —preguntó directamente. No iba a estar dando vueltas para expresar lo que sentía, debían hablar con la verdad. Esa pregunta descolocó por completo al Uchiha.

 

—¿A qué te refieres? —Naruto enfrentó sus miradas.

 

—Sé que esto de nuestro noviazgo es una mentira, pero creo que para mí ya no lo es —confesó mordiéndose los labios—. Te aprovechaste de mi secreto para chantajearme. —Frunció el ceño—, pero eres diferente a todos los Alfas que he conocido y creo que me gustas más de lo que desearía. Y por eso quiero saber si tú has cambiado tu manera de pensar o aún deseas que esto sea sólo una mentira. —El corazón de Naruto latía rápidamente, ya que lo que más quería en ese momento era que el Uchiha le dijera que su relación ya no era una mentira.

 

La confesión del Omega dejó sin habla al Uchiha. Desde hacía semanas que Sasuke sentía lo mismo que Naruto, su relación había cambiado demasiado, se suponía que era una mentira, pero al conocer al Namikaze, pasar tiempo con él y hasta reír por sus tonterías lograron que algo diferente sucediera con sus sentimientos. Sí, Naruto le gustaba, le gustaba todo de él, era simplemente diferente a todos los Omegas que había conocido en su vida. Creía que junto al Namikaze podía tener algo real y que seguramente se consolidaría en un futuro. Con delicadeza tomó las manos de Naruto y se permitió sonreír.

 

—Sí, Naruto. Yo siento lo mismo que tú. Me gustas y quiero que nuestra relación sea real. Nunca revelaré tu secreto y me encargaré de que nadie lo descubra —le prometió—, creo que lo mejor que me sucedió hasta ahora es haber cruzado mi camino con el tuyo ese día en la dirección de la Universidad —le recordó y Naruto sonrió. Sí, aun recordaba ese momento.

 

—Lo recuerdo, me pareciste un Alfa engreído —le dijo.

 

—Y tú un despistado —contraatacó el Uchiha—. Pero ahora será diferente, haremos que esta relación funcione. —Naruto asintió.

 

—Sí, lo haremos juntos. —Sasuke se acercó al Omega y juntó sus labios con los ajenos. Naruto no dudó en corresponderle sinceramente.

 

Era hora de darle un nuevo sentido a sus vidas. Tal vez lo que ahora sentían no era tan fuerte para decir un “te amo”, pero ambos estaban seguro de que algún día esas palabras podían ser pronunciadas y serian reales. Dejarían atrás ese comienzo tormentoso que había tenido y comenzarían a escribir una nueva historia juntos. Cuando se separaron Sasuke abrazó a Naruto y él le correspondió. El Omega pensó en ese instante que tal vez ya era hora de contarle a Sasuke sobre su hermano, aunque ese no era el momento indicado. Tendría que esperar un poco más. Seguramente el Alfa se asombraría al saber su historia. Aunque el Omega no sabía que el sorprendido sería él, cuando conociera al esposo del hermano de su ahora novio.

Notas finales:

Y esto fue todo, espero les haya gustado :) Al fin Sasuke y Naruto aceptaron que se gustan y están dispuesto a darse una oportunidad como una pareja real. Pero recuerden, eso aun no es amor así que tendrán que pasar muchas cosas juntos ;)

 

Dei ya comenzó con su terapía! ¿tendrá resultados y sabremos su pasado? Pues eso lo sabremos pronto :)

 

Ya saben que tengo mi facebook en donde anuncio las actualizaciones y futuros proyectos. Y si quieren saber como era la ropa que usaron Sasuke y Naruto en el baile las subiré a facebook :) https://www.facebook.com/profile.php?id=100014163828895

 

Ahora sin más me despido y nos leemos la próxima semana!

 

Adiós <3


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