El día siguiente lo pasaron en la “limpieza” de la casa, o bueno limpiar de Voldemort porque la casa estaba impecable; alrededor de las cinco de la tarde que ya se habían bañado y estaban comiendo lo que los elfos con extremo aprecio les habían hecho, Draco dijo
-Deberíamos salir
-¿A dónde?- pregunto interesado Harry
-No sé, a donde sea- Harry enarco una ceja- vamos Potter, hagamos algo, aprovechamos la amabilidad de tus amigos, dudo mucho que se dé en mucho tiempo
-Está bien- Draco no dijo en realidad a donde y era porque no sabía así que cuando estuvieron listos se dejó arrastrar del castaño por donde este iba, pasaron por el callejón Diagon, aunque no se quedaron, igual el rubio no esperaba que eso pasara, salieron a Londres muggle y caminaron por un rato, hasta que se detuvieron en un establecimiento que por fuera parecía normal pero había fila para entrar, Draco elevo una ceja
-¿Dónde estamos?- pregunto
-Es una discoteca, te traje a que te untes de mundo muggle- Draco entrecerró los ojos, como esperando algo más pero Harry solo sonrió y se fue a formar, el rubio bufo y se fue con él
-Increíble, me trajiste a hacer fila-Harry se rio con ganas
-Esperemos a entrar y luego me dices- Draco bufo de nuevo; aunque menos mal no dijo nada, porque si no le hubiese tocado tragarse sus palabras, por dentro el sitio estaba muy bien ambientado y había excelente música, tomaron un mesa y pidieron unos tragos, pronto Harry lo invito a bailar e increíblemente (para lo que había visto en Hogwarts)lo hacía bien, su explicación es que no sabía nada de bailes formales, de cualquier forma, ambos pasaron la noche entre bailes, charlas a medias por la música que requerían estar pegados uno al otro, pero que no les molestaba y varios tragos, bailaron, rieron, incluso cantaron (Harry se sorprendió que Draco supiera algunas canciones) fue una gran noche; solo cuando apagaron la música y dejaron de atenderlos se fueron del sitio, salieron sin ganas de volver a casa y empezaron a caminar-Ven, quiero que conozcas un lugar- gracias a la hora no había nadie en los alrededores y seguramente en ningún lado, así que usaron la aparición, llegaron a una calle desolada con todas las casas apagadas
-¿En dónde estamos?- pregunto Draco
-Aquí me crie- fue lo único que respondió Harry y empezó a caminar por la calle en silencio, Draco se mantuvo a su lado- En esa casa viven mis tíos- señalo pero no se detuvo
-¿Por qué?- fue lo único que pregunto
-Solo quería que lo vieras, aunque no tuve una muy feliz infancia, es parte de mi pasado- Draco sintió que así como él ayer, hoy Harry necesitaba ser consolado, así que guardo silencio y tomo su mano entrelazando sus dedos mientras seguían caminando por la mitad de la calle, Harry le mostro el colegio, las tiendas, y por último el parque donde se sentaron a contemplar el barrio a esa hora de la madrugada
-Es tu pasado, pero ahora tienes un presente diferente y definitivamente un gran futuro- menciono Draco mirando alrededor y finalmente fijando su mirada en Harry quien lo miraba sonriendo, se besaron
-Tienes toda la razón
-Como siempre-ambos se sonrieron y volvieron a besarse, Draco se acurruco contra Harry suspirando profundamente
-Siempre es así de tranquilo- conto Harry- no tenía amigos, todos querían ser amigos de mi primo- Draco rio
-Mejor para ti, ellos se lo pierden
-¿Por qué es mejor para mí?
-Pues aunque tal vez no te guste, entre menos amigos muggles tuvieras era más fácil integrarte en el mundo mágico y vaya que no te costó nada- Harry soltó una risotada, al igual que Draco
-Puede ser
-No, no puede ser, es
-Porque tú siempre tienes la razón
-Ya aprendiste- ambos rieron y se fundieron nuevamente en un beso
-¿Quieres volver a casa?- pregunto Harry después de unos momentos de silencio
-Creo que no, me siento raro de que James no este
-Creí que solo yo me sentía así- Fue turno de Draco de soltar la risotada
-No porque no te lo diga, no significa que no los quiero- para Harry no pasó desapercibido el hechos de que esa frase fue en plural, no dejo que Draco añadiera nada más y lo beso con ganas
-Y nosotros te queremos a ti- tampoco dejo que el rubio dijera nada más y lo beso de nuevo, Draco se dejó besar y dominar de ese pasional beso
No hablaron más del tema, pasearon por los lugares que a ambos se le iban ocurriendo, hasta que el sol despunto y decidieron que después de desayunar irían a casa; alrededor de las tres de la tarde el hambre los obligo a levantarse, o bueno Harry se levantó y llevo comida a la cama, volvieron a acostarse mientras veían un poco de televisión y hablaban de todo y nada, alrededor de las cinco Draco decidió bañarse y Harry lo acompaño, un hora después iban saliendo del baño
-¿A qué hora crees que tus amigos traigan a James?- pregunto Draco mientras se secaba el cabello
-No dijeron pero no creo que demoren, además creo que con todo lo que ha pasado ya puedes considerarlos tus amigos también
-Puede ser…- el sonido de la chimenea les hizo interrumpir la conversación
-¿Crees que...?- menciono Harry extrañado, no era temprano pero tampoco tarde, Draco solo se alzó de hombros y juntos fueron a ver de quien se trataba
-¿Qué te paso?- pregunto en un obvio tono burlón Draco, mientras Harry trataba de aguantarse la risa; Hermione venía con el cabello cien veces más esponjado que de costumbre
-No es gracioso- se quejó la chica y Ron la apoyo
-James siempre quiere que estemos con él, llora si no nos ve-conto Ron
-Eso no pasa aquí- aclaro Draco
-Puede ser porque era un lugar extraño-opino Hermione
-Puede ser, en uno de los libros que leí mencionaba algo parecido- Para Draco fue muy obvia la forma en como la castaña desviaba un poco la mirada ¿será que como decía Harry, ellos se estaban planteando tener hijos? Sería razonable y que siendo Hermione como era había empezado con lectura de libros; Draco había tomado a James en sus brazos y como estaba cerca de la chica aprovecho para decir en voz baja-Creo que nunca se está totalmente preparado para un hijo y siempre habrán errores pero vale la pena- la miro directamente y supo que lo que había considerado Harry era cierto y que además ella sabía que él sabía, espero su reacción, le sorprendió cuando una sonrisa se formó en su rostro
-No recordaba que dieras tan buenos consejos- Draco sonrió
-No éramos amigos-fue turno de Hermione sonreír
-Lo somos ahora- y como tontos ambos sonrieron, hasta que Hermione levanto a Ron de donde estaba y se lo llevo a rastras
-¿Qué paso?- pregunto extrañado Harry
-Creo que iban a ir a hacerle un primo a James- y con solo eso, Draco dejo a Harry plantado en su sitio, subió las escaleras hasta la habitación de James cuando sintió a Harry correr por la casa y alcanzarlo para pedirle explicaciones, vaya que si era lento el cuatro ojos pensó con una sonrisa.
El lunes llego y como todos los lunes desde que Draco había llegado, Harry no quería ir a trabajar, se abrazó al cálido cuerpo a su lado para aferrarse a la idea de que aún era temprano, pero la realidad lo alcanzo y con realidad se refería a un regaño de parte de Draco diciéndole que iba a llegar tarde; se estaba volviendo costumbre de lunes (cosa que adoraba) que se bañaran juntos, bueno no solo se bañaban pero la idea era esa, además de desayunar los dos y hablar de todo y nada, cuando se fue de la casa todo parecía perfecto, como todos los días siguiendo su rutina, todo normal, entonces no entendió el mensaje que le llego por vociferador alrededor de las cuatro de la tarde en donde la voz de un enfurecido rubio le decía: “Te voy a matar Potter, eres un completo inepto, no quiero verte, tienes prohibida la entrada a la habitación”, eso lo dejo más que extrañado, preocupado, o por lo menos fue así, hasta que alguno de sus compañeros se rio y menciono en un tono demasiado burlón: “uyy esta noche a Potter le toco el sofá” y todos los demás estallaron en risas, nunca jamás en su vida creía que iba a pasar tanta vergüenza como ese día, pero eso no quitaba el tema de que era lo que había pasado con Draco.
Draco había empezado su día con el pie derecho, había hecho el amor con Harry en el baño, habían desayunado y hablado de un sin números de cosas sin real importancia y cuando se fue, se enfocó como desde que llego, en James, el pequeño era un sol y cada día sentía que lo adoraba más y más, ese sentimiento en verdad le asustaba, no sabía que era lo que iba a pasar en cuanto se terminara el tiempo del trato, no quiso pensar en eso y procedió en darle su desayuno a James, para después bañarlo y vestirlo con un trajecito que personalmente adoraba, estaba bajando las escaleras cuando sonó el timbre, su corazón latió rápido, solo una vez había sonado el timbre desde que había llegado y era el sujeto del ministerio ¿y si era él? ¿Qué iba a hacer? ¿Qué quería? ¿Por qué siempre venia cuando Harry no estaba? Suspiro con ganas para calmarse y fue a abrir la puerta con James en brazos, grave error, casi se le cae al ver las personas al otro lado de la puerta, sus ojos y boca se abrieron de forma significativa
-Draco- saludo el hombre
-Hola cariño- saludo la mujer, era un saludo “cariñoso” pero se notaba que ambos estaban muy lejanos de sentir aquello, trago duro
-Mamá, Papá- fue lo único que pudo decir
-Draco…-inicio la mujer pero la risotada de James los distrajo a los tres, el niño miraba a la pareja y se reía con ganas manoteando y tratando de llamar la atención de Draco
-¿Qué?- pregunto Draco a James, el niño señalo a la pareja mirándolos y luego lo miro a él y volvió a reírse, Draco quedo más confundido
-Creo que sabe que somos tus padres- menciono Lucius mirando con interés al pequeño Potter
-Aja- fue lo único que dijo Draco y se hizo a un lado con la clara intención de dejarlos pasar
-Bella…casa- menciono Narcisa como quien no quiere la cosa
-Es pequeña- reconoció Draco- pero es suficiente- defendió; error, sus padres enarcaron cada uno una ceja, volvió a tragar
-¿Suficiente?- sudo frio y ahora ¿Qué iba a decir?
-¿Qué hacen acá?- Bravo, genial, era lo más estúpido que pudo haber preguntado, pasar tanto tiempo con Harry le estaba afectando, de hecho ahora que lo pensaba no se suponía que Potter debía encargarse y sí, ahora era Potter
-La pregunta Draco es ¿Qué haces tú acá?- cuestiono Lucius penetrándolo con la mirada
-Han pasado muchas cosas- comento mirando para otros lados, en especial a James que de vez en cuando reía y miraba fijamente a sus padres, si supiera lo que pasa no estaría así
-Lo sabemos- respondió con tranquilidad Narcisa
-¿Lo saben?- cuestiono Draco muy diferente de la forma en como sus padres se expresaban y es que ¿Cómo se enteraron? ¿Lo deducirían?
-No por ti, eso es seguro, nos tuvimos que enterar por un periodista- ataco esta vez Lucius con menos calma de la que había aparentado apenas unos segundos, pero un momento ¿Qué había dicho?
-¿Periodista?- cuestiono en voz alta
-Ah sí, imagina nuestra sorpresa cuando un periodista nos preguntó cómo tomábamos el atropello que sufrió muestro hijo en San Mungo por tratar de llevar a urgencias al hijo de su pareja…-dejo una pausa dramática, que bastante bien le sirvió porque Draco sudo mucho más- Harry Potter- completo y Draco sabía que estaban furiosos, el problema es que no sabía que decir, se supone que ellos nunca debieron enterarse, ¿Qué debía hacer? ¿Decirle la verdad?
-Recuperamos la mansión- conto, la pareja volvió a enarcar una ceja, como odiaba que hicieran eso
-No eres un prostituto- estallo Narcisa- preferiría dormir en la calle antes de que durmieras con alguien por…-Draco supo de inmediato a lo que se refería y se apresuró a interrumpirla
-No duermo con Harry por eso- contra ataco y de hecho era cierto, su “trato” no se refería a sexo, era a otra cosa, pero ya había tomado la decisión de no decirle nada de eso a sus padres, no después de lo que acababa de decir su madre- yo no inicie mi relación con él para recuperar nuestras cosas- mintió- fue…-dudo y miro a James- fue amor- susurro, sus padres parecieron quedar en completo shock
-¿Amor?- cuestiono Lucius y Draco puso una cara de perro apaleado que sus padres no tuvieron otra solución que mirarse y hablarse con la mirada
-Draco, ven conmigo- pidió Narcisa saliendo de la sala y yendo a lo que pensaba era el comedor, no se equivocó- y deja el niño- menciono cuando vio que Draco no se movía, este muy reticente, dejo a James cerca de Lucius mirando con cautela a su padre
-También te cuide un par de veces, estará bien- no sin algo de duda Draco asintió y salió de la sala mirando a cada paso hacia atrás, Lucius suspiro y fijo su mirada en el pequeño que miraba el sitio por donde Draco se había ido, después fijo su mirada en Lucius y señalo la dirección que estaba mirando antes-No te preocupes, ya pronto vendrá- respondió el mayor pensando en lo tonto que era hablar con un infante, aunque este sonrió como si le hubiese entendido y con pasos vacilante se dirigió hasta él, “interesante pequeño” fue el pensamiento de Lucius.
-Y ¿bien?- hablo Draco, el silencio lo estaba matando
-Creo que esa debería ser mi frase- contra ataco Narcisa
-Madre, por favor- Draco se cubrió la cara con las manos, ya no estaba seguro de poder mantener la fachada frente a sus padres, menos frente a su madre, la mujer suspiro
-¿Quiero que me cuentes como paso todo esto? y lo más importante ¿Por qué nosotros no lo sabíamos?-Bien, era hora de sacar la artillería pesada marca Slyterin y mentirle en la cara a su madre, solo le rogaba a todas las deidades que le creyeran, suspiro y se descubrió la cara
-¿Recuerdas el día que les conté que me había encontrado con Harry en el Ministerio y que él se había disculpado por ser un patán conmigo?- inicio Draco, la prensa aseguraba que de allí había iniciado su relación, de hecho daba muchos detalles que esperaba sus padres no conocieran bien porque planeaba usarlos, y si los conocían diría que aún no sabían quién lo había contado
-Lo recuerdo- reconoció Narcisa, Draco había tenido la costumbre de ir al Ministerio por varias razones, la principal era porque les devolvieran sus bienes, pero ese día en especial había llegado feliz contando que Potter le había pedido disculpas
-Pues es cierto que discutimos un poco, para variar- inconscientemente sonrió y dicha acción no pasó desapercibida para su madre- pues no les conté que me había dicho que fuéramos a comer juntos, lo rechace ese día pero como a los tres días nos volvimos a ver y le cobre la invitación-Narcisa torció la boca, habían días, en especial si era fin de mes que ni siquiera tenían para una comida decente
-¿Y siguieron viéndose?-Draco asintió
-No les dije nada porque no esperaba realmente nada, quiero decir él era el héroe y yo era…-Draco no termino la frase
-¿Y entonces?- pidió Narcisa
-Pues ya sabes, una cosa llevo a la otra y cuando menos me di cuenta estábamos teniendo citas; me conto lo mal que le iba en su matrimonio y yo le conté como me iba en mi trabajo y con ustedes, no sé exactamente cómo fue que nuestra relación paso al siguiente nivel, solo estamos comiendo y de un momento a otro nos besamos y después estábamos en un hotel y…-Draco freno, repasaba cada mentira con lo que había leído en los diarios y con lo que habían vivido esos meses para que cuadrara, pero eso último sería mucha información para su madre-Yo en realidad no iba al Ministerio para solucionar las cosas, iba por Harry, es por esa razón que fue papá quien se enteró de la venta de la mansión y no yo-Narcisa debía aceptar que en eso tenía razón, nunca lo comentaron pero Draco iba al ministerio y nunca supo de eso, mientras que Lucius con una sola ida lo averiguo. La verdad es que al fin y al cabo la gente temía a Lucius y por eso fue que le dieron esa información mientras que Draco no inspiraba ese sentimiento, así que solo lo ignoraban.
-Y le pediste ayuda a Harry, tú mismo nos lo contaste- Draco asintió- y nosotros nos tragamos el cuento de que habías apelado a su lado gentil y heroico, pero que tontos fuimos.
-Madre- hablo entrecortado Draco, quería decirles la verdad y no hacerla pensar que lo que consiguió fue por dormir con Harry
-¿Eres feliz?- pregunto, Draco se sorprendió
-¿Qué?
-¿Eres feliz?- Draco desvió la mirada, no se esperaba esa pregunta, aunque si lo pusiese en consideración debía reconocer que no se sentía tan feliz desde hace mucho tiempo, tener a Harry y James era increíble, de nuevo una sonrisa aparecía en su cara y claro que no pasaba desapercibida por Narcisa, que solo se limitó a suspirar
-Creo que sí- fue lo único que respondió al final Draco y Narcisa asintió
-Volvamos con tu padre- fue turno de Draco de asentir y volvieron a la sala, ambos se quedaron en el umbral al ver la escena que se desarrollaba en el sillón, un muy estoico Lucius tenía sentado en su regazo a James mientras le hablaba de cosas que el niño no entendía pero que le ponía total atención, riendo de vez en cuando.
-Eres adorable- reconoció Lucius para sorpresa de su hijo y su esposa
-Lo sé- se acercó Draco- No entiendo como algo tan bonito salió de Harry- sus padres estallaron en risas y James igual, tomo en brazos al pequeño y sintiéndose mejor les pregunto-¿Almorzamos?- ambos asintieron y se fueron a comer con su hijo y “nieto”; la charla fue amena y hablaron de las muchas cosas que habían hecho en Francia y como el negocio había sido un completo éxito, de hecho podían pagar más de la mitad de la multa (o completa si les rebajaban los intereses), de cualquier forma Draco se sintió feliz de lo bien que les iba a sus padres.
Las cosas fueron bien y su madre decidió poner al tanto a su padre de lo que habían hablado en el comedor, Lucius escucho la historia sin interrumpir ni una sola vez, solo mirando fijamente a su hijo quien de vez en cuando se ruborizaba con alguna frase dicha por su madre, al final solo pudo suspirar con resignación.
-Por lo menos no le abriste las piernas a la primera insinuación – Lucius dijo muy fresco y Narcisa retuvo un jadeo por lo dicho por su esposo, Draco solo se tensó por eso.
-¿Cómo se te ocurre decir eso? Nuestro hijo no es un cualquiera – Narcisa lo defendió de su padre, mientras el rubio recordaba que realmente si se lanzó a los brazos de Potter a la primera insinuación, maldito y sensual Potter.
-Por eso lo digo, porque no lo hizo, sería una vergüenza que lo hubiese hecho – Lucius le hecho más sal a la herida, ahora Draco se preguntaba que demonio se apodero de él para dárselo a Potter a la primera, sus padres tenían razón, era un fácil, ofrecido.
-Entonces no lo digas que Draco no es tan fácil – Sin saberlo sus padres lo estaban masacrando sin piedad, todo era su culpa y es que llevaba tanto sin sexo y Potter le había gustado desde el colegio y pues solo fue un momento de debilidad, un momento que se transformó en muchos momentos y él ahí como el amante indiscutible y fácil del héroe del mundo mágico.
-Me disculpan un momento que debo hacer algo, cuiden de James – Draco se encamino hacia la habitación lleno de ira por ser la puta de Potter y sin siquiera saberlo, hizo un vociferador para el estúpido moreno y volvió con sus padres mucho más relajado e iniciando otra conversación mucha más llevadera.
Después del almuerzo pasaron a la sala a tomar el té, James decidió que Lucius era un buen amigo de juegos y lo insto a sentarse en el piso y mostrarle todos sus juguetes para que pudieran jugar juntos, el rubio no se negó ante eso.
-Esto tengo que grabarlo para la posteridad, iré por mi cámara – Draco salió corriendo para inmortalizar esa escena, sabía que su padre era sensacional porque él mismo lo vivió y es que Lucius Malfoy podría ser todo lo malo que la gente quisiera, pero era un excelente padre. Los Malfoy se quedaron abajo y el rubio aprovecho para hacerle una pregunta a su esposa sin siquiera pronunciar palabras, los beneficios de entenderse y compenetrarse a puntos inimaginables.
-Está enamorado- reconoció Narcisa a la pregunta muda que le hizo su esposo, no podía asegurar que lo estuviera cuando se fueron pero definitivamente lo estaba ahora, Lucius asintió y miro a James
-Hay algo de esto que me encanta- dirigió la mirada a su esposa-Somos abuelos- y volvió a mirar a James, logrando que Narcisa sonriera igual, estaba completamente de acuerdo con Draco y Lucius, James era adorable.
-James dale juguetes a mi papá – Draco le dijo mientras apuntaba la cámara, el niño obedeció y le entrego un tren de juguete que el rubio mayor recibió y agradeció al niño, Draco estaba súper feliz con eso y más por la foto que logro captar.
-Harry no me va a creer cuando le cuente – En ese momento recordó que estaba molesto con el moreno por volverlo “fácil” y es que Draco jamás había actuado como con Potter, claro está que el moreno lo saca de sus estándares, siempre fue así y algo le dice que siempre será así.