Llego a su casa con una sonrisa, y a la vez con una tristeza.
Enterarse que Chanyeol, su Chanyeol, estaba casado por cinco años y que ya había tenido un amante, fue mucho para él. No podía negar que se había divertido en la mañana, Baekhyun fue tan dulce e inocente para llevar con el treinta y cinco años, es más, parecía el menor. Se llevó muy bien con todos, Kyungsoo—que en su opinión, si Chanyeol siguiera con el pequeño ojón no tendría como competir contra el—era serio y muy impecable, algo raro para una persona de veinticinco años, pero el único que lo hacía reír y sacar su lado divertido, era Baekhyun. Tenían mucha química, algo muy tierno pero sospechoso.Tao era el menor, llevaba tan solo veintidós años, era perspicaz y divertido, por supuesto, no había que olvidar lo impulsivo que era. Él era el segundo mayor, tenía veinseis años. Muy pocos novios en su vida, para nada aventurero, prefería estar en su casa que de viaje. Había estudiado gastronomía siendo el mejor de su clase, sin embargo quién iba a decir que el estudio no era todo, a veces sin el apoyo correspondiente uno termina en el lugar equivocado como el, trabajando de cocinero en un restaurante de comida rápida, freír pollo y papas era algo que no se esperaba, pero pagaba la renta y su comida.
¿Cómo conoció a Chanyeol?
Lo conoció cuando decidió inscribirse al gimnasio. Tenía tres kilos de más, esos tres kilos que lo traumaron tanto como para llevarlo ahi. Ese día recuerda que lo vio por primera vez sentado en una banca comiendo una hamburguesa como si fuera una ardilla. Había terminado su rutina de ejercicios y ese hombre se había presentado comiendo una deliciosa combinación entre pan y carne frente a él ¿El destino era cruel? Si, si lo era. No paraba de mirarlo, aunque en realidad miraba la comida, cuando de pronto su modelo falso de comercial de comida rápida se dio cuenta que lo estaba observando, Minseok no supo que hacer, asi que rápidamente saco su celular y comenzó hablar con "alguien". Chanyeol—Que en ese momento no sabía cómo se llamaba—se acercó a él con una cara de confusión y una mancha de mostaza en los labios.
Flashback
—Disculpa, pero... ¿Te conozco o te debo algo? —Minseok comenzó a ponerse rojo de la vergüenza.
—No, solo...—Apagó la pantalla de su teléfono, lo guardo en el bolsillo de su mochila y trato de planear una mentira en su cabeza—Te confundí con alguien, lo siento—Se iba a ir pero Chanyeol lo retuvo del brazo.
—Toma—Saco una hamburguesa de su maleta y se la dio—Vi como mirabas esta delicia, no es sano comer estas cosas después de hacer ejercicio, aun asi ¿La vida es corta no? —Chanyeol rio y Minseok tomo con lentitud la comida.
—Gracias, no debiste molestarte—Chanyeol lo soltó y lo hizo sentarse en la acera.
—No hay de que, cada vez que termino una rutina muero de hambre ¿Cuánto tiempo llevas aquí?
—Es mi primer día—Minseok probo la hamburguesa, estaba deliciosa.
—Vaya, yo ya llevo dos semanas, pero aun no me acostumbro a comer solo verdura como conejo, la grasa es lo mejor—Minseok pensó que aquel joven alto y de orejas grandes era divertido y sincero.
—Filosofía pura—Dijo Minseok comiendo su pan.
—¿Cómo te llamas? —Chanyeol le sonrió tan cálidamente, que hasta pensó decirle su dirección, correo, Facebook, y hasta su partida de nacimiento.
—Kim Minseok—Estiro su mano hacia Chanyeol.
—Park Chanyeol—Tomo su mano, cuando lo hizo las mejillas de Minseok se pusieron de color del tomate de la hamburguesa. —Eres muy tierno.
—Gracias—Minseok miro el suelo.
—Se dice gracias hyung—Minseok lo miro de nuevo y ahí estaba, la sonrisa que lo derretía.
—¿Eres mayor que yo? No parece.
—Sí, tengo treinta años.
—Entonces si, eres mayor que yo, siento mi falta de respeto—Chanyeol hizo una mueca de desagrado.
—No seas tan educado conmigo, solo se cómo hace un minuto—Minseok dejo de lado su hamburguesa para concentrarse en esos ojos tan brillantes.
—Está bien Chanyeol—Lo dijo bajito.
—Así me gusta, ¿Minseok? —Chanyeol se acercó más a él.
—¿Si?
—¿Quieres salir mañana por la noche? Podemos pedir una Big Mac—Minseok se sonrojó y asintió.
Fin de Flashback
Se sentó en su sillón pensando.
¿Se arrepentía de ese día? Tal vez, pero ya no podía retroceder el tiempo y lamentarse era una pérdida de tiempo.
Las lágrimas aparecieron por su rostro, solo era uno más para Chanyeol, jamás fue especial ¿Has sentido que cuando te duele algo te comienza a doler el pecho, que cuando aguantas el llanto duele más, y cuando lo sueltas sale un llanto con un poco de grito? Sí, eso le paso a Minseok, se permitió llorar todo lo que quiso ya que los sentimientos no son juguetes ni se borran de un momento a otro. Llevaban saliendo dos meses, era más que obvio que lo quería, se destruyeron sus sueños de amor y felicidad, tenía permitido llorar lo que quisiera.
Después de que comenzaron hablar sobre lo bueno que estaba el entrenador en la mañana, no volvieron a tocar el tema "Chanyeol y Minseok", el sentía que era una falta de respeto hacia Baekhyun, aparte de que le avergonzaba hablar de eso. Se llevó bien con ellos, pero eso no impedía el hecho de quienes eran, definitivamente hoy había sido un día muy cansado. No, estaba equivocado, la noche sería peor. Chanyeol iría a su casa a cenar, no tenía ganas de fingir estar bien y no querer pegarle al alto. En la mañana habían acordado de que Chanyeol no se enteraría de que todos se conocían, tenía que terminarle como lo hizo Kyungsoo, de manera seca y fría, sin explicaciones ni detalles, no podía traicionar a Baekhyun. Ahora ahí estaba el problema ¿Cómo lo haría? Necesitaba ayuda. Con rapidez tomo su teléfono y marcó rápidamente el número uno de su lista de contactos.
—¿Kai? Te necesito ahorita en mi departamento—Colgó sin esperar respuesta, miro su reloj, faltaban nueve horas para encarar a Chanyeol.
Terminó de firmar unos documentos y cerró el folder con cansancio. Su trabajo era cansado, demasiado, no obstante valía la pena, tenía mucho dinero. Tenía tanto, que podría tener una mansión ahorita, junto con un carro de lujo aunque no podía. Faltaba poco para que su dinero ya no sea papel, solo debía esforzarse más, solo un poco más y lo lograría. Por ahora era de economía promedio, tenía una buena casa de dos pisos, jardín alrededor, una piscina, y un esposo temporal. Si, por ahora era suficiente. Se paró para descansar un poco y fue a la oficina de su mejor amigo. Ni siquiera se molestó en tocar la puerta, simplemente entró para tirarse sobre el sillón que había ahí.
—¿Cuántas veces te he dicho que no entres sin antes tocar?
—Mmm, esta vez debe ser la número, un millón.
—Y nunca aprendes—El rubio que tenía enfrente lo miro y sonrió—¿terminaste tu trabajo?
—Sí, me estoy dando un descanso sino me estresare, y ya tengo otras cosas en las que preocuparme.
—Como tu vida personal, por ejemplo—Kris, así se llamaba su amigo, se levantó y se sentó en su escritorio.
—Sí, hyung, mi vida personal—Kris se fue hacia su mini bar y saco una botella de vodka.
—¿Un trago? —Chanyeol sonrió y asintió—Debo admitir que eres un maldito bastardo con suerte.
—¿Por qué lo dices hyung? —Kris volteo, camino hacia él, se sentó y le dio el vaso.
—Mira donde trabajas, donde vives, con quien vives, y a quien metes a tu cama ¿Eso no es suerte?
—No, es trabajo—Chanyeol tomo un sorbo. —Es simple, quien trabaja sale adelante.
—Yo hago lo mismo, pero ¿Sabes porque no estoy a tu nivel?
—Porque eres tonto hyung, no sabes aprovechar oportunidades, nunca lo haces.
—No, si se aprovecharlas, pero resulta que mi madre me educo con valores—Chanyeol borró su sonrisa, y tomo todo de un sorbo.
—¿Me regañaras por lo que hago?
—No, es en vano, sabes que siempre te apoyare, eres mi mejor amigo, aunque a veces solo quiero golpearte.
—Sabía que no debías pasar mucho tiempo con Baekhyun, te lava el cerebro con su inocencia e ingenuidad.
—No hablo con el hace años, no tiene que ver eso sino el hecho de que siempre te veo con alguien diferente, si quieres hacer estupideces no las hagas aquí donde todos pueden verte, donde él puede verte.
—Jamás sabrá de lo que hago, él es tan ingenuo como su hijo—Chanyeol se fue a servir más.
—Channie, te conozco como la palma de mano y sé que amas a Baekhyun sin embargo no te lo permites, lo que me lleva a formularte la siguiente pregunta otra vez como todos los días, ¿Por qué no te dejas amar por él?
—¿Enserio hablaremos de esto? —Chanyeol ya se estaba molestando.
—Bien, entonces hablemos de ¿Kungsoo? ¿Así se llamaba? O ¿El cara de bollo? Ah ya sé, del sexy chino que te conseguiste hace unos días en la playa.
—Ok, basta, no tienes que ser así de sarcástico, entiendo que hago mal todo, lo sé, sé que les hago daño ¿Me importa? No, tengo una meta, y no parare hasta cumplirla.
—Entonces no los metas en esto.
—Mira Kris hyung, entiendo que a veces te den tus ataques de moralidad, pero no entiendo porque insiste con esto si sabes que no te hare caso.
—Algún día me escucharas mis consejos, para que cuando todo se derrumbe para ti, te diga: te lo dije, me burlare y después te apoyare, siempre serás mi dongseng.
—Odio cuando te pones sentimental—Chanyeol se sentó sobre el escritorio de Kris.
—Jamás te pregunte esto, ¿Alguna vez has amado a alguien de verdad?
—Sí, los de ahora solo me calientan la cama y me tratan bien lo cual es un buen bono, cada uno tiene algo en especial.
—¿Y esa persona es alguien de ellos?
—Si te digo siquiera una pista, te darías cuenta quien es.
—Bueno me rindo, ese chico que me mostraste, el bajito que es abogado ¿No terminó contigo?
—Nadie termina conmigo hyung, él dice eso pero si lo visito un día de estos terminará debajo de mi gritando por más—Chanyeol se rió y Kris suspiró cansado, Chanyeol no tenía remedio, iban a seguir conversando pero la puerta se abrió de pronto dejando ver la figura de un hombre mayor.
—Oh chicos, están de descanso.
—Si señor—Kris se paró e hizo una reverencia a su jefe.
—Así debe ser, no todo es trabajo—Chanyeol asintió ante lo dicho por el señor y se acercó a abrazarlo.
—¿Cómo esta padre?
—Muy bien Chanyeol, fui a tu oficina pero no estabas así que supe que estarías aquí, quería decirte que mi esposa quería hablar contigo para la fiesta sorpresa de cumpleaños que le haremos a Baekhyun—Chanyeol sonrió. En realidad estaba sorprendido, se había olvidado ese detalle.
—Claro, la llamaré enseguida.
—Chanyeol—El señor miro a Kris y este salió rápidamente. —Hijo, no es que quiera presionarte pero ¿Cuándo voy a tener la dicha de ser abuelo? —Un balde agua fría, eso es lo que sintió Chanyeol ante lo dicho por su jefe y suegro.
—Bueno padre, por mi parte no me siento listo aun, Baek...
—Baekhyun ya esta mayor, ya es hora Chanyeol, cinco años de matrimonio creo yo, que son suficientes para pensar en una familia. Quiero a mi heredero.
—Si padre, hablare con Baek sobre el tema—El señor sonrió y se fue—Viejo verde ¿Un hijo con Baekhyun? Si claro, idiota.
Su teléfono sonó, con cólera contestó, mas esta se fue esfumando lentamente con la voz del otro lado, su sexy rubio extranjero lo esperaba, tenía que quitarse el estrés. Tomo un vodka más y salió de la oficina de Kris.