Una tras otra las lágrimas seguían fluyendo, en la oscuridad de aquella habitación que alguna vez fue de Naruto, desde que él rubio se había ido de la casa había cerrado aquella habitación, porque entrar ahí le traía tantos, tantos recuerdos malos, buenas pero más que todo malos, si le llenaban de tristeza pero ahora su corazón se estrujaba de dolor, no podía detener sus lágrimas la escena de Naruto besando a Gaara se repetía una y otra vez en su cabeza era tan doloroso, se sentía como si le hubieran clavado dos puñales en el corazón nunca en su vida se imaginó sufrir un dolor semejante.
Sabía que cuando volvería a ver a Naruto sería algo difícil, que tendrían que hablar, y pedirle disculpas por todo lo que había sucedido el no confiar en Naruto, él nunca poderle hablar con la verdad por su maldito orgullo, no nada de lo que se había imagino pasó.
Naruto le había tratado como si nada hubiera pasado, no le dijo absolutamente nada y claramente tampoco sentía ya nada por él. ¡Sí! Eso era lo que más dolía, ¿Por qué? Simple aquella actitud que tenía el rubio claramente dejaba ver que ya no sentía absolutamente nada por él y eso ha Sasuke le partía el corazón en mil pedazos. Hace algún tiempo cuando estaba buscando a Naruto solamente pensaba que tenía que encontrarlo para pedirle perdón por ser un ciego por no haber creído en él, ni en su amistad y tantas otras cosas más... pero ahora después de lo que vio en la fiesta el como Naruto trataba a alguien más de aquella manera le dolía aquel rubio que había sido su esposo, el imaginar que si las cosas habrían sido diferentes seria a él al que le trataría de esa manera tan dulce y no ha Gaara, si antes alguien le hubiera dicho que una persona podía morir de amor se habría reído a carcajadas de esa persona, pero ahora era diferente sentía que él se estaba muriendo de amor, cuántas cosas tuvieron que pasar, cuánto tiempo tuvo que desperdiciar, para ahora darse cuenta de que amaba ha Naruto era tan lamentable ser consciente de eso cuando ya no podía estar con él rubio, porque él ya tenía a alguien más, y el saber eso le causaba tanto, pero tanto dolor, nunca pensó sentir un dolor tan lacerante.
—¡AH!— se le escapó un grito a Sasuke un grito cargado de dolor y frustración, en aquella habitación tan oscura que solamente era iluminada por la tenue luz de luna que entraba por la ventana quería gritar a los cuatro vientos que amaba Naruto quería gritar que quería que estuviera con él, pero ya era tarde ¡tarde! para todo para llorar, para lamentarse sentía tanta impotencia de no poder decir lo que sentía, y lo peor es que era su culpa, era enteramente su culpa nunca se imaginó que estuviera enamorado de aquel Rubio de sonrisa brillante cómo había confundido los sentimientos, Cómo había confundido el anhelo con amor, porque eso era lo que sentía por Haku anhelo, el anhelo del primer amor, el anhelo a ese primer amor no correspondido, Pero eso también fue su culpa porque no tuvo el valor de declararle sus sentimientos a Haku, al final terminó culpando de todo Naruto, de aquel matrimonio pero no era su culpa si él hubiera querido, en aquel momento se habría opuesto pero su amor por Haku no era tan fuerte, y ahora que se había dado cuenta del sentimiento que tenía por Naruto no podía hacer absolutamente nada, porque tubo la felicidad en las manos y la dejo escapar.
Al recordar lo que había pasado en la fiesta se le partía el alma, tenía tantas ganas de ahogar su dolor con licor pero eso es solamente, aria que recordara más, y sus sentimientos aflorarían más lo que más le dolía era recordar lo que paso después de aquel beso.
Flash-back
Después de aquel beso que Naruto le había dado a Gaara, el rubio se separó del pelirrojo con una sonrisa, no podía saber de lo que estaban hablando, porque el pelinegro estaba a cierta distancia, pero pudo observar como los padres de Naruto se acercaban a la pareja, y como Naruto tomaba la mano de Gaara entrelazando sus dedos con una sonrisa, los padres, el primo de Naruto y la señora Chiyo la abuela de Gaara, rodearon a la pareja se notaba a la distancia lo felices que estaban todos, porque abrazaban al pelirrojo, no pudo saber que estaban diciendo, pero podía sentir que la familia de Naruto ya había aceptado a Gaara. Al observar todo aquello Sasuke apretó fuertemente las manos volviéndolas puños por la impotencia, porque ese lugar en el que estaba Gaara en algún momento fue suyo, recibiendo la bienvenida de Minato, escuchado los chistes sin gracia de Kushina y las advertencias de Deidara alguna vez las vivió, cuando estaba casado cuando nadie sabía por el dolor que pasaba el rubio.
Todos ellos dándole una cálida bienvenida pero ahora ese ya no era su lugar, ahora ese lugar era de otro, y ese otro era Gaara. Y lo peor es que no podía culparlo porque se había ganado a pulso el lugar que tenía, y él había perdido a pulso el lugar que había obtenido sin siquiera luchar, esos eran los pensamientos de Sasuke estaba callada no sabía qué decir no sabía, cómo actuar Sentía tanta importancia, se sentía terrible, porque ya no era dueño de los sentimientos ni pensamientos de Naruto.
Solamente salió de su ensoñación cuando vio a Naruto tomado de la mano de Gaara se acercaba hacia ellos, aquello le hizo dar un paso hacia atrás, no quería que Naruto lo viera con lágrimas en los ojos y débil no podría soportar que él rubio le tuviera lastima, así que dio otro paso hacia atrás se dio la vuelta y comenzó a caminar lo más rápido que podía, cuando por fin salió del salón de recepción, dio un gran suspiro se dirigió al estacionamiento, y al estar frente a su automóvil comenzó a temblar, quería irse Ya no quería estar ahí, ni sentir tanto dolor, las lágrimas no querían cesar, se quedó parado un momento quería tranquilizarse aunque sea un poco, respiro hondo una vez más estaba a punto de entrar a su auto se detuvo porque de pronto sintió que alguien le toco el hombro aquel toque le hizo paralizarse pensó que era el rubio pero al voltear vio a su hermano con un semblante que demostraba claramente preocupación.
— ¿Qué quieres Itachi?— fue lo que pregunto trataba de mantener un semblante tranquilo aunque le temblaba la voz y las lágrimas aun no cesaban por completo
—Sasuke hermano ¿estás bien?— fue la pregunta de Itachi y Sasuke Al escuchar sus palabras quiso gritar decir que no. No estaba bien que se odiaba, que deseaba tanto retroceder el tiempo, que odiaba todo que no quería estar ahí, que quería huir que quería que todo fuera un sueño, que no quería haber visto aquel beso, que quería pensar que no había cometido tantos errores, que no le estuviera doliendo tanto el amar a Naruto.
—No... No... no estoy bien Itachi solo quiero irme— dijo con la voz entrecortada —Necesito irme— decía casi suplicante Mirando a su hermano el cual sólo asintió con la cabeza el pelinegro se subió a su auto lo encendió y salió de ahí lo más rápido que pudo, no quería pensar, sólo quería estar en su casa que alguna vez fue de los dos, no podía ver más Era tan doloroso sólo quería... ni siquiera sabía lo que quería, el camino fue largo y tortuoso cuando llegó a su casa lo primero que hizo fue tirar la mesita que estaba en la entrada estrelló el florero contra la pared, pisoteo las flores odiaba todo pero más se odiaba a sí mismo, cuando llegó a aquel cuarto que todo ese tiempo había permanecido cerrado con llave, entro en él necesitaba estar ahí sentir aunque sea un poco la esencia de Naruto.
Fin flash-back
El pelinegro se encontraba recostado en la cama que una vez fue de Naruto aún podía sentir el olor de su perfume, las lágrimas hasta ese momento no habían dejado de fluir era sorprendente, nunca pensó que tuviera tantas lágrimas, y por un momento se cuestionó, Cuántas veces Naruto había llorado ahí en esa misma habitación Cuántas lágrimas habría derramado por su culpa le dolía que sin saber había causado tanto dolor a la persona que amaba irónicamente se dio cuenta que lo amaba cuando ya lo había perdido.
El tintineo muy parecido al de una campana le llamó la atención que retumbó cerca de sus oídos, y ahí se dio cuenta que el sonido era proveniente de aquel collar que llevaba lo buscó para sostenerlo con su mano derecha, se levantó de la cama para ver Aquel collar con detenimiento al abrir la mano sus lágrimas comenzaron a fluir con mayor intensidad porque en esa cadena que colgaba de su cuello estaban los Anillos que alguna vez Naruto compró para ellos, los que encontró en su cuarto hace algún tiempo en aquella cajita envuelta con papel de regalo, los apretó fuertemente no podía creerlo aquella cadena se la había puesto en aquella ocasión tratando inútilmente de estar cerca de Naruto —Qué tonto... Qué tonto soy —se dijo una y otra vez era obvio que Naruto en algún momento se enamoraría de alguien, cuan conciertas habían sido las palabras de Sakura en Aquel entonces aún las recordaba "Un amor por muy grande que sea también se acaba" ¿porque? se cuestionaba una y otra vez porque no podía volver el tiempo atrás, de haber hecho las cosas bien en su momento, ahora podría tener a Naruto entré sus brazos, Tal vez ahora ya habrían tenido un hijo...
Pero todo había sido su culpa, lo había arruinado todo se lamentaba tanto no sabía cómo iba a seguir la vida a partir de ahora cómo podría ver a Naruto feliz con alguien que no fuera él, es que era verdad después de todo lo que pasó no podía esperar qué Naruto siguiese enamorado de él, pero pensándolo cuidadosamente si tenía aquella leve esperanza.
Quería volver el tiempo atrás no confundir sus sentimientos y haber confiado en Naruto y en su amistad, si tan sólo hubiera hecho algo diferente Ahora las cosas también serían diferentes. Él le había entregado a Naruto en bandeja de plata no es que hubiera luchado y perdido ya lo tenía y no había luchado por conservarlo por tonto —soy un estúpido— dijo Sasuke sin poder acallar sus pensamientos y él dolor de su corazón esa noche fue la peor para el pelinegro, no supo ni cómo ni cuándo se quedó dormido quería dejar de pensar tan sólo quería dejar de pensar en aquélla realidad quería dejar de pensar en lo tonto que fue pero desgraciadamente el tiempo no puede volver atrás.
Ring, ring, ring ese detestable sonido fue lo primero que escucho incluso antes de abrir los ojos, ese sonido provenía de su celular, sintió incomodidad en los ojos por la luz que entraba por la ventana, esto le hizo darse cuenta que ya era de día hubiera querido seguir durmiendo, hubiera querido que su celular no sonara porque No quería hablar con nadie, no tenía ánimos de hablar con nadie, así que tomó su celular para ver quién era... pero la llamada provenía de un número desconocido Así que decidió colgar para luego ponerlo encima la cama comenzó a sujetarse la cabeza con ambas manos porque le dolía mucho, pero era raro porque no había bebido demasiado la noche anterior, un nuevo ring de su teléfono le llamo la atención, era otra vez ese número desconocido volvió a colgar, en realidad no quería hablar con nadie, porque no podían entenderlo, un nuevo ring se hizo presente el pelinegro dio un gran suspiro esta vez decidió contestar, quería decirle a la persona que le llamaba que le dejara de molestar así que abruptamente oprimió el botón que decía "contestar" y dijo
—Quien habla—Se notaba el enojo en su voz pasaron unos segundos hasta que por fin la otra voz escucho.
—Hola Sasuke, soy yo Naruto discúlpame por molestarte tan temprano pero quería hablar contigo—