Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Nightmare por valeeop

[Reviews - 17]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Kakashi estaba recogiendo sus cosas para regresar a casa junto a su doncel Iruka y así pasar lo que quedaba de esa templada y tranquila tarde de domingo, su jefe y estudiante, Sasuke Uchiha, ya había regresado a suplirlo en su tarea de cuidar de Naruto de aquella cosa sobrenatural ciclada con mal genio, recordó su primer día viviendo esas experiencias fuera de lo normal, creyó en su inocencia impropia de un adulto de su edad que no se exaltaría por un par de cosas que se movieran, pero verlo a través de la pantalla de la televisión en tu casa sin espectros completamente seguro es distinto a estar en una casona victoriana con un doncel y una bebé a quienes tienes que proteger de algo a lo que no puedes simplemente golpear para alejarlo, la hombría y valentía que creía poseer se le iba por el caño, al menos las primeras veces, es horrible experimentar algo que no entiendes y que no puedes controlar, antes, al ver esa cantidad de series sobrenaturales quería ser explorador paranormal y experimentar tales situaciones, ahora que las experimentaba, había decidido que las evitaría en la medida de lo posible después de que el asunto de la casa de su jefe fuera solucionado. Los programas los seguiría viendo, sí, pero solo hasta ahí, esas cosas era mejor experimentarlas desde bien lejos.

 

— Bueno Sasuke, me voy por hoy — anunció Kakashi ajustándose la máscara médica que portaba al puente de su nariz, Sasuke, quien miraba por una ventana de la sala de la televisión cargando a Suzume volteó hacia él de cabello blanco, los movimientos rítmicos con los cuales mecía a la bebé mostraban que el azabache tenía intención de que ella durmiera su siesta de la tarde que siempre tomaba después de comer.

 

— Bien, Kakashi, saluda de mi parte a Iruka — respondió Sasuke tranquilamente sentándose en el sofá, la bebé había cerrado los ojos ya, sus manos pequeñas y empuñadas descansaban en el pequeño pecho que se movía a un ritmo algo elevado, los bebés respiraban relativamente rápido en comparación a los adultos.

 

— El lunes a las...

 

— a las 7 — completó Sasuke la frase que Kakashi había dejado en el aire.

 

— aquí estaré — dijo antes de desaparecer en el recibidor, lo siguiente que se escuchó fue la puerta de entrada cerrándose con delicadeza, aún así el sonido de la madera maciza recorrió toda la sala de la televisión donde estaba Sasuke haciendo cierto eco en las paredes. 

 

En esa soledad silenciosa se sintió enormemente incómodo, cohibido de estar en su propia casa, una sensación tal, como si fuera intruso en el hogar ajeno pero era amablemente bienvenido y ser bienvenido en su propia casa por un desconocido era precisamente lo que lo incomodaba, trató de tranquilizarse viendo las noticias y un par de capítulos sueltos de series en la televisión y así permaneció un par de horas, pero más temprano que tarde se puso de pie y buscó el coche de Suzume , iría por Naruto quien en esos momentos seguro estaría en la tienda para comprar la cena, el rubio había salido para ir al registro para sacar copias originales de registros personales, Naruto volvería a estudiar para terminar el último año que dejó a medias, y después había declarado sus intenciones de ir a la tienda a comprar algunos ingredientes que faltaban en la alacena, esta noche tenían planes de cenar pastas, hacía mucho que no comía esa especialidad de Naruto, sus pastas.

 

Metió a Suzume en el coche y la abrigó debidamente, la tarde estaba bastante fresca y si no abrigaba correctamente a su hija Naruto lo mataría, Sasuke se puso su chaqueta sobre su habitual estilo de camiseta negra y jeans oscuros que adoptaba para estar en casa siempre que tenía la oportunidad de usar otra cosa que no fuera trajes, por supuesto, eso no quitaba que su vestuario variara según la temporada, en invierno usaba los mismos jeans sí...pero usaba un suéter cuello tortuga de lana, aunque fuera negro eso era variar algo... 

 

Tomó las llaves de la casa, su cartera y su identificación, también las llaves de su auto por si fuera necesario, este estaba estacionado fuera en la entrada del garaje y después de ponerse unos tenis salió tal y como Kakashi había hecho hacía un par de horas, sin mirar hacia atrás bajó la incesante idea de que si lo hacía vería algo extraño detrás de él...cerró la puerta mientras aquello en las escaleras le veía irse...en su oscuro rostro difuminado sin facciones era indescriptible su sentir.

 

Una vez fuera caminando con el coche Sasuke se sintió ligero, diferente, liberado. ¿Por qué estaba siendo oprimido? Él no tenía idea, para empezar no sabía siquiera que se sentía incómodo, dentro de la casa estaba incómodo, pero esa sensación al mismo tiempo estaba siendo sedada quizá por aquello mismo que producía tal incomodidad, se preguntó si Naruto era capaz de sentir esa opresión incómoda sin calmante alguno y sin encontrar respuesta decidió que después de la cena hablaría con Naruto seriamente respecto a la casa.

 

No se había alejado mucho del embrujado motivo de sus preocupaciones cuando vio a Naruto después de dar la vuelta a la esquina, en el suelo cerca del adolescente doncel una bolsa semi abierta mostraba los ingredientes faltantes para la cena de ese día, cerca de esa bolsa estaba Naruto, abrazando a un desconocido, demasiado apegado a él, demasiado aferrado a esa otra persona, fue un instante mínimo en el que la ira de Sasuke se hizo presente pero tal y como llegó la ira su parte racional la mandó a volar con una patada exponiendo sus razones y posibles motivos para tal escena impidiéndole a Sasuke montar una escena de celos de la que quizá se arrepentiría, Sasuke se acercó a las dos personas abrazadas, una de ellas su esposo, el otro un varón alto y calvo, que pese a la fresca tarde usaba una bufanda de lana verde alrededor del cuello mientras portaba un traje gris oscuro aparentemente demasiado ancho para sus delgadas extremidades, cuando su esposo se separó de esa persona pudo verle por fin la cara al varón que abrazaba a su doncel y con ello cualquier teoría de infidelidad por mínima que fuese, cualquier duda que resguardaba en contra de Naruto terminaron por desaparecer, Nagato, el tío de Naruto, se veía completamente distinto a como Sasuke lo recordaba y sin ver su cara le hubiera sido imposible reconocerlo, primero que todo su cabello rojo como fuego había desaparecido dejando tras de sí un cráneo envuelto en piel anormalmente blanca, ahora se veía demacrado, mas pálido y con una mirada cansada, su piel ya de por si pálida a los ojos de Sasuke asemejaba el vidrio quebradizo, daba la impresión de ser transparente, daba la impresión que se desharía con tan solo tocarla, estaba delgado, solo un poco más delgado de lo que medicamente debía ser sano sin embargo aquella figura larga de piernas como ramas quebradizas envuelta en ropa ancha no era ni sombra de lo que antes era el atlético Nagato. Tantas cosas malas se le pasaron por la cabeza a Sasuke cuando acompañando la nueva apariencia de Nagato vio el rostro lloroso de Naruto. Su doncel, observaba a su tío, su única familia, como si fuese la primera vez en mucho tiempo que lo veía, y al mismo tiempo, como si fuera la última vez que lo iba a ver. Tal era el sentimiento, que a pesar de estar tan cerca, Naruto no cayó en cuenta de la presencia de Sasuke ni de Suzume , en cambio Nagato poco tardó en voltear al sentirse observado, una vez sus ojos hundidos y ojerosos se toparon con los de Sasuke quienes los observaba desde una distancia prudente, lo único que hizo el hombre fue sonreírle con parsimonia, aquella sonrisa acompañada de tal mirada, aunque fuera tal vez una impresión falsa, Sasuke sintió que aquel hombre había visto todo lo que tenía que ver y había vivido todo lo que tenía que vivir, daba esa impresión de una persona satisfecha con su vida y lista para partir, tal cosa solo hizo a Sasuke sentirse más inquieto.

 

— sin duda se parece mucho a Kushina cuando era bebé — soltó Nagato de repente permitiéndole a Naruto por fin caer en cuenta de la presencia de su marido y de su hija en el lugar, el rubio doncel decaído se limpió las lágrimas y cambio su semblante a una velocidad difícil de ver con el ojo humano a continuación esbozó una sonrisa que difícilmente encajaría con sus ojos hinchados por el llanto contenido de hace tan solo un segundo, Sasuke supo que ya era momento de acercarse así que con paso lento eliminó la amplia distancia reuniéndose con los otros dos.

 

— ¿se le parece? — preguntó Naruto cargando a Suzume quién con ojos despiertos y alerta observaba todo a su alrededor, sobre todo al desconocido de cabello inexistente, su calva cabeza resplandecía curiosamente con el sol que ya se estaba empezando a ocultar en el horizonte.

 

— es como una foto de Kushina con el cabello y los ojos negros — señala Nagato extendiendo su mano delgada de uñas cortas las cuales parecía haberse mordido quiza en un momento de sumo estrés, con el fin de acariciar ligeramente la cabeza de la bebé y rozar las mejillas abultadas de la criatura de la cual era tío abuelo — esos los heredó de su papá — Nagato volvió a mirar a Sasuke y sonrió ante la mirada de escrutinio que el varón le dirigía.

 

— bueno, en los Uchiha los ojos y el cabello oscuro es rasgo habitual — Sasuke miró a Naruto — incluso Sai que es adoptado tiene esa característica, imagino que mis padres se habrán fijado en el inconscientemente por eso — el silencio se hizo, un silencio un tanto incómodo para todas las partes, ninguno sabía que decir, fueron pocos instantes que les permitieron escuchar a lo lejos la sirena de una ambulancia, una persona que regresaba a casa del trabajo, al parecer un asalariado en traje aún con las prisas miró extrañado a esas tres personas que miraban el suelo en silencio con una sonrisa indescriptible. Una vez este desconocido se alejó Naruto se decidió a hablar, entendiendo que quizá su tío Nagato no sabía muy bien como romper el hielo con Sasuke, y estaba en lo correcto, Nagato estaba incomodo, porque era consciente de la muy mala impresión que debía causarle a Sasuke debido a su comportamiento pasado, el trato estoico con Naruto y el hecho de que le hubiera permitido a Naruto irse de su casa sin detenerlo. Puede que desde fuera las cosas se vieran mal desde afuera, pero Nagato no era un ser sin corazón, él quería a Naruto pues era su única familia, solo habían pasado tantas cosas que en su momento no supo apreciar la compañía del ultimo regalo que le había dejado su hermana Kushina, aquel día, cuando Naruto se fue de su casa, Nagato ya sabía que Sasuke lo vigilaba, ese día, cuando Naruto decidió irse de la casa pues el en su estupidez ante la noticia de que su sobrino estaba en cinta solo pudo quitarse la corbata y encender el televisor sin responderle vio como fuera la pareja de su sobrino se lo llevaba con él y poco después quedó tranquilo en su triste soledad después de firmar los papeles que como tutor legal debía firmar para aprobar el matrimonio de su sobrino. Si, una mala impresión, una terrible impresión devastadora la que debía tener el marido de Naruto de él, Nagato se preocupaba por su sobrino, pero era un idiota por seguir ahogado en pasados desgarradores de los que nadie tenía la culpa más que el mismo, era débil como todo el mundo.

 

— Mi tío tiene cáncer Sasuke — y tal como si le hubiesen llamado por su propio nombre Nagato reaccionó y salió de sus propios pensamientos. Lo primero que hizo fue observar al marido de su sobrino, la causa de sus preocupaciones y vio como el rostro de este se endureció por completo en una expresión entre ligera sorpresa y severidad. 

 

— ¿qué tipo de cáncer? — preguntó Sasuke tratando de relajar sus facciones.

 

— leucemia linfoblástica aguda — respondió Nagato esperando que Sasuke siguiera preguntando en busca de más explicaciones sin embargo el de cabello negro solo lo volvió a examinar de arriba abajo en silencio antes de dibujar una ligera sonrisa y ponerle la mano en el hombro. 

 

— te veo bastante bien para tener algo así — dijo Sasuke.

 

— ya me estoy recuperando ―respondió Nagato — evolucionó muy rápido pero se me detectó en una etapa muy temprana, la recuperación es lenta pero estoy tratándome correctamente — Naruto observaba a su tío con una sonrisa, Sasuke se agachó y recogió la bolsa con los ingredientes que faltaban para la cena.

 

— bueno, me gustaría hablar con usted a cerca de eso y otros temas que seguro le interesaran — Sasuke miró a Naruto enviándole mensajes codificados que solo una pareja enamorada podría entender, Naruto asintió — regresemos a casa a cenar y ahí podremos hablar tranquilamente, cenaremos spaghetti a la boloñesa — Sasuke le dio la bolsa con las pastas a Nagato en una invitación discreta y espontanea que el mayor aceptó completamente agradecido, así, arrastrando el coche vacío pues Suzume no se quería despegar de Naruto, Sasuke regresó a casa habiendo hablado por primera vez con la única familia de su esposo, de quién Naruto mucho le había hablado...

 

...

 

— Ya que hemos terminado de comer les puedo contar al fin como descubrieron que tenía cáncer — dijo Nagato completamente en confianza, estaba sentado en la mesa del comedor con Suzume en brazos, la bebé ya estaba dormida y el tío abuelo estaba encantado de haber podido compartir con ella, era como si recibiera de nuevo a su hermana menor en brazos, como un viaje al pasado.

 

— adelante, al parecer es única esa historia — Sasuke estaba terminando de beber el jugo, a diferencia de los dos Uzumaki que comían como si la comida fuera a salir huyendo él siempre era muy paciente para comer y por tanto de los tres había sido el último en acabar.

 

— fue hace unos meses, fui a hacerme una prueba para saber si tenia cancer ― empezó a decir Nagato.

 

— ¿te estabas sintiendo mal? — preguntó Naruto.

 

— bueno siempre me sentí cansado o deprimido así que vine a darme cuenta de los síntomas cuando ya se me había detectado...

 

— Pero si no sospechabas nada ¿Por qué fuiste a examinarte? — volvió a preguntar Naruto y Nagato sonrió algo avergonzado.

 

— fui a hacerme el examen obligatorio de cáncer de próstata de los cuarenta y cinco años — respondió Nagato al fin. 

 

— Oh... — exclamo Naruto en silencio — ¿te metieron el dedo?

 

―...Naruto — dijo Sasuke en voz baja algo avergonzado.

 

— No te preocupes Sasuke, su madre, Kushina, era mucho peor — explicó Nagato sin haberse mosqueado en lo más mínimo por las expresiones que usaba su sobrino tan libremente en un hombre de mediana edad como él, sobre todo en un tema tan sensible — no, no me hicieron el examen, el medico al parecer se dio cuenta de algo y en vez de eso me hicieron otros exámenes, el cáncer apenas estaba en su etapa inicial así que fue fácil tratarlo aunque avanzara tan rápido, lo que me tiene en este estado es la quimioterapia a la que me sometí. Quería recuperarme lo antes posible, he perdido mucho tiempo— bajo la mirada enternecida de Naruto, Nagato acomodó los pocos mechones de cabello de Suzume.

 

— me alegro que haya sido de esa manera tío Nagato — de los labios de Naruto aquellas palabras salieron como la fuerza que impulsó a Nagato a decir todo aquello que lo había llevado a reencontrarse con su sobrino. 

 

— al momento de escuchar la palabra cáncer... — empezó a decir Nagato con la cabeza gacha, de haber tenido cabello posiblemente le cubriría la cara — solo pensé que iba a morir, no esperé a escuchar las explicaciones antes de empezar a arrepentirme por todas las cosas mal que hice en mi vida y por todo el tiempo desperdiciado. Había estado viviendo en automático desde la muerte de mi hermana, no pensaba en nada y nunca en todos estos diecisiete años me cuestione nada de eso, vigilar que no te faltara nada, trabajar, dormir, ver las noticias, perdí amistades, mi pareja me abandonó cosa que agradezco porque resulto tener el alma podrida ya que no quería a Naruto porque "estorbaría" el futuro de nuestra familia — una risa sarcástica escapó de sus delgados y pálidos labios — no espere a escuchar que mi cáncer era curable antes de tirarme al piso a chillar pensando que no había conocido todavia al bebé que diste a luz — después de decir esto su risa se esfumó y miró a Naruto, solo a Naruto, de una forma tan familiar e íntima como un padre a su hijo, con una apariencia arrepentida — de verdad, lamento mi indiferencia, no dejo de pensar que le fallé a mi hermana... — Naruto puso las manos sobre la mesa y dibujó una sonrisa en su rostro mientras miraba a su tío encogido. 

 

— No voy a decir que tu indiferencia no me lastimó — dijo Naruto, en sus palabras el tono alegre aminoraban el peso de antes, Sasuke escuchaba atento sin interrumpir, él no tenía parte ahí — fue eso lo que me hizo irme de casa, la verdad sentí que no te importaba por primera vez cuando te dije de mi estado y solo te sentaste a ver televisión sin inmutarte...

 

— ¿por primera vez...? — eso sorprendió a Nagato, Naruto asintió.

 

— yo sé que te preocupabas por mi tío Nagato, las vecinas me contaban como me cuidaste de bebé, siempre que me ibas a recoger o a llevar a clases eras sumamente puntual, hasta que aprendí a cocinar por mí mismo nunca me faltó una comida, siempre estaba el desayuno, el almuerzo o la cena en la mesa, mi mesada era buena y cada tanto mi ropa se renovaba misteriosamente, sin importar a qué hora llegara en la noche tú me estabas esperando sin dormir aunque tuvieras trabajo y por eso no me gustaba llegar tarde a casa, jamás fallaste al recordar mi cumpleaños, el regalo en la mesa, la mesada extra y el pastel en la nevera te delataban fácilmente tío Nagato — Naruto rio apoyando la barbilla en sus manos— si de verdad yo no te importara las cosas hubieran sido muy distintas, me sentía solo porque nunca me hablabas pero sabía que me querías — ver a un hombre en la cuarentena llorar como un niño era algo que Sasuke jamás creyó ver, Naruto se levantó de su silla y se sentó al lado de Nagato para poder pasarle el brazo por los hombros. 

 

— lo siento....de verdad lo siento Naruto... fallé mucho — cada vez, al menos a los ojos de Sasuke, Nagato se hacía más pequeño, las lágrimas corrían por sus pálidas y hundidas mejillas a borbotones, aquel llanto silencioso y lastimero dejaban en vergüenza los berridos que lanzó Suzume al nacer. 

 

— no fallaste tío, tenías tus razones, seguro — Naruto le daba golpecitos en la espalda con una sonrisa, después de tanto tiempo, era mejor que aquel hombre que vivió en automático ajeno a sus propias emociones durante diecisiete años se desahogara debidamente, Sasuke recogió la mesa entre tanto y se dirigió a la cocina, poco después salió con un vaso de agua en la mano.

 

— me asusté mucho cuando te fuiste, no pensé que lo harías — y el seguía llorando, hablando para sí mismo, echándose la culpa de errores pasados — estaba aterrorizado pensando que estabas mal, pensaba en si habías comido debidamente, iba a declararte desaparecido no sabía si el varón con el que te habías ido era de verdad tu pareja, casi me desmayo del alivio cuando vi al funcionario con los papeles que solicitaban mi permiso para tu matrimonio... — habló tan rápido entre el llanto que se le fue el aire, su garganta seca agradeció enormemente el gesto del marido de su sobrino al traerle un vaso de agua que necesitaba para aclarar su garganta contraída.

 

— Tome con calma tío Nagato — dijo Naruto viendo a su tío beber el agua del vaso — menos mal tenemos el resto de nuestras vidas para hablar sobre todo eso, puede quedarse a dormir si quiere, Sasuke... ―Naruto llamó a su marido quién seguía de pie observándolos ―...trae el flan de chocolate y el té verde — Sasuke asintió entendiendo una subliminal indirecta de Naruto que le pedía ayudarlo a entretener a su deprimido tío con comida para evitar que se deshidratara por llorar.

 

— que penoso... — Nagato miró el vaso vacío en sus manos, Suzume ahora estaba siendo cargada por Naruto.

 

— ¿Qué es penoso? — preguntó Naruto extrañado poniéndose de pie para acostar a Suzume en el coche en donde había estado acostada durante la cena y que estaba en el comedor al lado de la silla de cabecera donde se sentaba Sasuke.

 

— Un viejo llorando como un recién nacido...

 

— Bueno es lo que pasa cuando ignoras todo a tu alrededor por diecisiete años — puede que Naruto haya dicho esto a broma y sin reproche pero eso caló hondo en el ahora sentimental Nagato... se hizo el silencio unos instantes, Sasuke regresó al comedor con una bandeja en la que se encontraba el té y un flan bastante grande de chocolate con todos los implementos de porcelana y cubiertos necesarios. En ese momento, Nagato recordó algo que lo había estado molestando pero que había olvidado preguntar por todas las emociones del momento, Naruto se sentó en su antiguo puesto, a la derecha de Sasuke y frente a Nagato, Suzume dormía apacible en el coche entre las sillas de su papá y su papi doncel, Sasuke empezó a servir el te y Naruto a cortar el flan.

 

— olvidé preguntarles ¿Quién más vive con ustedes? — ante la mirada extrañada que le dirigieron Sasuke y Naruto a Nagato después de escuchar la pregunta el último continuó buscando aclarar — cuando veníamos pude ver desde una ventana a una persona que nos observaba llegar.

 

— ¿Cómo se veía? — preguntó Sasuke deteniendo sus acciones sin haber terminado de servir la primera taza y Nagato solo pudo extrañarse por tal pregunta y aquella situación.

 

— era como un doncel...supongo por la contextura, no lo vi bien — empezó a responder Nagato — ¿Por qué no bajó a comer? — Entonces, Naruto y Sasuke se miraron, como muchas veces ese mismo día, pero esta vez nerviosos, tragaron fuerte. 

 

Te mostrare una dulce pesadilla, la próxima noche.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).