Seo Hyun: ¡Suéltalo! –La mujer le quito a Taemin, protegiéndolo entre sus brazos, haciendo que ambos volvieran en sí. Taemin se sobreprotegió en los brazos de su madre mientras veía la confusión de Jinki.
Jinki: ¿Es tu hijo?
-Seo Hyun empezó a retroceder ante la forma en que la miraba el chico.- Vamos, Taemin.
Jinki: No tan rápido.- Jinki tomó el brazo de la mujer. Pero esta se soltó de inmediato, apretando más a Taemin debido a que el castaño no perdía tiempo en mirarlo de vez en cuando.- Necesito hablar contigo.
Seo Hyun: Lo siento pero no puedo. Estoy en mi hora de trabajo y necesito volver.- Seo Hyun empezó alejarse.
Jinki: ¡Entonces esperare!- Seo Hyun escucho aquello, pero aun así no se inmuto en subir al escenario, dejando a un lado de ella a Taemin. El cual miraba también al joven de ojos oscuros.
Cuando Seo Hyun termino de cantar. JinKi se acercó a ella, que cargaba a su hijo en brazos, dormido.
Jinki: Ambos son omegas.
Seo Hyun: No sé quién seas y que quieras de mí. Pero te lo advierto, si eres de la familia Lee, he cumplido con mi trato y le he dado edu…
Jinki: Soy el hijo de Jung Yong Hwa. –Seo Hyun abrió sus ojos. A pesar de todo, aquello le había afectado.- Te vez una mujer decente a pesar del lugar en donde trabajas, y quiero disculparme por el escándalo que hice hace un momento, pensé que eras alguien… diferente.- Seo Hyun seguía ida, dejándoselo saber a Jinki.- Ese hombre no habla mucho de mí, no le gusta hablar de su hijo de 17 años.- Seo Hyun volteó a verlo cuando empezó a reír con melancolía.- Sin embargo, espero comprendas esto que te voy a pedir. Por favor, aléjate de él… o por lo menos un tiempo.
Seo Hyun: ¿Perdón?
Jinki: Ese hombre… aún está unido a mi madre.
Seo Hyun: ¿Tú padre, tiene pareja?
Jinki: Solo por poco tiempo.- El chico parecía cada vez más cansado; parecía que no quería hablar sobre el tema.- ¿Lo harás? ¿Te alejaras de él?
-Seo Hyun, a pesar de haberlo escuchado, podía ver la mirada cansada del joven sobre su hijo.- Esta bien, cumpliré mi promesa.- Las facciones de Jin Ki cambiaron a una de tranquilidad.- Pero con la condición de que no te acerques a mí hijo.- Fue entonces que la mujer lo vio de nuevo. Los músculos de Jin Ki se tensaron al escuchar su petición. Sus ojos se abrieron a más no poder, casi aterrorizados.- Lo veo, quieres crear un lazo con él.
-Jin ki retrocede, riéndose con nerviosismo.- ¿De qué demonios habla? Él es solo un niño.- Dijo aquello como broma, pero aun así se podían ver las ansías en sus manos, de sostenerlo y protegerlo.
Seo Hyun: Tú alfa. Esa parte tuya quiere reclamar al omega de mi hijo.
-Jin Ki negó y empezó alejarse. Dejando su atención al pequeño que yacía dormido en los brazos de su madre.- Esto es absurdo.
Seo Hyun: ¡Niño, no me dijiste tu nombre!
-El castaño paro, sin voltear, con miedo a que viera sus nervios.- Jung Jin Ki.
-Jin Ki salió corriendo de ahí, subiéndose al auto donde lo esperaba su mejor amiga. - ¿Qué te dijo? ¿Te pidió dinero? –Luna se encontraba extrañada ante el nerviosismo de Jinki.- ¿Qué sucede?
-Jin Ki se despabilo prendiendo el auto.- Ella dijo que está bien. No dejara que mi padre se vuelva acercar.
-Luna lo abrazo, haciendo que se tensara.- ¡Eso es bueno, Onew! Eso ayudara a tu madre a calmarse un poco.- Jin Ki le sonrió levemente a la omega.
Ella, era su mejor amiga de la infancia, su cómplice, consejera. Siempre pensó que estaría con ella hasta el final, tomándola como su pareja… hasta que lo conoció. Sus ojos se dirigieron a la figura que salía de aquel bar con un niño en brazos. Sus manos se alzaron, tratando de buscar aquel pequeño cuerpo que pedía protección.
Luna: ¿Onew?- Sus sentidos volvieron, haciendo apretar fuertemente el volante. -¿Qué te sucede?
Jin Ki: No debo volver aquí. – Encendió el auto y se dirigió a la casa de la chica. Cuando aparcaron, Luna no dejaba de verlo con una sonrisa.- Gracias por acompañar…- Ni siquiera término de hablar cuando los labios de la chica estaban sobre los suyos. Eran dulces, pero no lo suficiente para complacer a su alfa. Luna termino el beso, mostrando en sus ojos todo el amor que tenía hacia el joven.-
Luna: Te amo, Onew.- Fueron sus últimas palabras antes de bajar del auto.- Nos vemos mañana en el instituto.- Jin Ki no dijo nada, solo asintió con una leve sonrisa. Se estaba perdiendo.
Jin Ki: No debí ir.- Ahora el pequeño niño llenaba su mente. Inclino su cabeza en el volante, dejándose caer.- Quiero verte.
(…) Jin Ki llego a su casa dejando las llaves del auto en su lugar. Sin embargo, al voltearse, recibe una bofetada de su padre, que tenía una mirada fría y aterradora. El alfa del joven se estremeció ante aquella autoridad que emanaba el líder de su hogar.
Yong Hwa: Cuando aprenderás a no tomar él auto. ¿Qué acaso se te olvida que eres menor de edad?
-Jin Ki volteó los ojos. Se le olvidaba que ese hombre a veces actuaba de verdad como un padre.- Era algo importante.
Yong Hwa: ¿Y qué es eso tan importante?
-Jin Ki apretó sus labios. No podía decirle que fue a buscar aquella mujer, y que por si fuera poco, se sentía un pedófilo al empezar a tener interés por un pequeño omega. Su estómago se revolvió por el ultimo pensamiento, decidiendo mentir.- Luna me hablo; ella dijo que me necesitaba.
-El rostro de Yong Hwa se ablando, apaciguando su enojo.- ¿Nada grave?
Jin Ki: Todo está bien ahora.- El castaño no levanto el rostro.- ¿Puedo retirarme?
Yong Hwa: Esta bien.- Su hijo hizo una leve inclinación ante él y subió las escaleras para llegar al segundo piso. Camino hasta la habitación de su madre, viéndola dormida y a la vez acabada.
-Shin Hye abrió los ojos al sentir las caricias de su hijo en su cabello, dándole una sonrisa cansada.- ¿Tuviste un lindo día?
-Jin Ki asintió con calidez.- ¿Qué hay de ti?
Shin Hye: Hoy salí al patio trasero, tu padre me acompaño. – Los ojos de su madre mostraban alegría por el pequeño afecto que le mostro su marido.- Y estuvimos conversando.
Jin Ki: ¿De qué?
-La castaña de cabello corto, tomo la mano de su hijo con cierta añoranza.- De tu compromiso con Luna.
-Jin Ki trago en seco al escuchar la noticia. No era que le desagradara la idea, pero Luna, no era la omega que él quería.- Aún somos muy jóvenes para pensar en ello.
Shin Hye: Cariño, Hay algo de lo que tenemos que hablar.- La mujer suspiro profundo. No quería romperse en llanto frente a su hijo.- Hoy vino el doctor… no me queda mucho tiempo.- Shin Hye, cuando vio que su hijo se levantó de golpe, tomo su mano, aferrándose a ella.- Solo, quiero verte con un buen omega. Quiero que seas feliz.
-Jin Ki negó.- ¿Qué te hace pensar que Luna es esa persona?- Los ojos de aquel pequeño estaban en su cabeza. Se sentía idiota por seguir pensando en alguien que apenas acababa de conocer.
Shin Hye: ¿Hay alguien, cariño?- Aquello, hizo que se calmara y volteara a ver a su madre, quien permanecía tranquila.- ¿Hay alguien en tu corazón?
-Jin Ki empezó a confundirse ante la pregunta, pero sabía que contestar.- Aun no lo sé, necesito averiguarlo.- Sus ojos se posaron en el cuerpo acabado de su madre.- ¿Crees poder perdonar a tú hijo ingrato?
Shin Hye: ¿Por qué dices eso?
“Porque estoy a punto de romper una promesa que se supone te ayudaría” Eso quería decirle, pero sus palabras quedaron en su cabeza, únicamente dándole una leve sonrisa a su madre, negando.- Por nada. Ideas mías. Pero madre, te prometo que si no encuentro a la persona ideal para mi me uniré con Luna.