Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La magia más poderosa. por phasmatos

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Una nueva oportunidad de Albus de sobresalir. La envidia puede separar incluso a la familia mas cercana. 

Batalla y lagrimas

 

El lunes por la mañana pareciera que nada hubiera ocurrido en la sala de menesteres, los amigos seguían su curso con naturalidad, pero Albus seguía preocupado, tenía miedo que la amistad con Scorpius se viera afectada por el “incidente”; como le gustaba llamar a la escena que habían protagonizado él y el rubio en el séptimo piso.

Como clase extra de duelo, los alumnos de quinto año se dirigieron a los terrenos del colegio con el profesor Kingsley. El césped estaba húmedo y había algo de barro sobre la zona debido a las tormentas que últimamente se producían en el lugar. El cielo estaba nublado y no se veía el sol entre las nubes. Había integrantes de las cuatro casas, ya que esta era una actividad extracurricular para aumentar la nota final y tener una buena idea del examen práctico de los T.I.M.O.s; todo el mundo le encantaba esta clase ya que era la más práctica de todas.

Scorpius hacia como si nada hubiera ocurrido el sábado por la noche, y el domingo se la había pasado en la biblioteca estudiando herbología. Albus había podido cruzar unas palabras con el pero parecía evitarlo. El morocho estaba indignado por la situación, él fue el que quiso besarlo cuando apareció el muérdago. No entendía cómo podía haber sido tan tonto para aceptar y destruir su hermosa amistad. Cuando el profesor logro juntar una cantidad sustancial de alumnos a su alrededor los dividio en pares, todos entre casas distintas. A Lysander le tocó con Florence Abrat, una chica regordeta de Ravenclaw; a Albus con su prima Rose y a Scorpius con Gabriel McLaggen ya que eran los que habían quedado sin pareja.

Albus por su parte no quería confrontar a su prima ya que tenia miedo que los sentimientos que el rubio tenia para con ella se vieran implicados y podía hacerle daño.

-          Hola Al, creo que nos tocará combatir juntos. No te preocupes, procurare no hacerte mucho daño –dijo la chica con confianza en que esto era pan comido para ella –supongo que sabes que Scorpius se me declaro el otro día, no se que responderle ya que es un Malfoy y creo que eso puede ser contraproducente para mi carrera y sobre todo para mi padre.

-          Creo que lo que define quienes somos son nuestras elecciones, no nuestro apellido ni de quienes descendemos –respondió indignado.

-          No me malinterpretes, pero si tengo un novio no quiero que sea un Slytherin, no pienses que soy prejuiciosa, pero me hubiera imaginado con un jugador de Quiddich –respondió saboreando que ella era la mejor en todo.

Albus estaba que explotaba por los comentarios de su prima, ya quisiera él que Scorpius se fijara de la manera que la mira a ella. Era tan inteligente como su madre pero tan terca como su tío Ron, o como una mula de hecho. De pronto antes de que el morocho le soltara un venenoso comentario a su prima el profesor interrumpio todo el palabrerío con un encantamiento silenciador.

-          Muy bien alumnos, es hora de ver lo que han aprendido en estos años. Recuerden que están permitidos todos tipos de hechizos y maldiciones, salvo obviamente imperdonables. No quiero a alguien que salga herido de gravedad ¿sí? –dijo riéndose un poco, subestimando a sus alumnos –muy bien, al sonar el silbato pueden comenzar a combatir con su pareja. Recuerden que caer no es motivo que acabe su duelo, si han perdido su varita pueden recuperarla, salvo que estén inconscientes.

El silbato sono, nadie atacaba primero, Albus sabía que era veloz pero también conocía los talentos de su prima, ella estaba mucho más avanzada que el seguramente en materia de hechizos. Scorpius y Gabriel estaban mirándose fijamente a unos metros de ellos, no podía desconcentrarse en ellos, lo importante era demostrarle a su prima que estaba mal en subestimarlo.

-          ¡Desmaius!-chillo la chica con un movimiento sumamente veloz de su varita. –el morocho logro esquivarlo con velocidad, por fin las prácticas en la sala de menesteres daban frutos. Rápidamente otro rayo de color rojo salio de la varita de la chica repitiendo su movimiento, nuevamente esquivado por el morocho.

-          Potter, si no atacas declaro ganadora a la señorita Granger-Weasley –salto el profesor supervisando a los estudiantes.

Albus se le vino a la mente de pronto una idea, devolverle con la misma moneda a la chica. Entonces gritó “Desmaius”, un relámpago rojo salio de la varita del chico, y se encontró con encantamiento escudo de su prima. Lo sorprendente fue que aun protegiéndose la potencia de los hechizos había hecho tropezar a la chica. Decidido y con confianza apunto nuevamente en guardia “Reducto” se escuchó. Un cañonazo golpeo el encantamiento escudo que seguía entre ellos y exploto haciendo saltar chispas en todos lados.

Entonces el muchacho solto una risa que hizo sacar de las casillas a su prima, volaron dos maldiciones de piernas unidas contra él; pero para su sorpresa, del susto no alcanzo a decir “Protego” pero lo pensó de manera instintiva, el escudo hizo revotar las dos maldiciones que fueron a parar contra un chico de Ravenclaw y otro de Gryffindor que estaban cercanos a ellos.

La cara del profesor Kingsley se ilumino ante el logro del chico, lo que hizo comentar que le sorprendía el talento para hechizos no verbales que tenía, aun cuando lo haya hecho por instinto.

-          Continúen, vamos, quiero ver como si pelearan contra mortifagos y su vida dependiera de ello. –grito el profesor mientras levantaba a Lorcan del suelo inconsciente.

La cara de Rose estaba descolocada, nunca la había visto así, le impartió cierto miedo a Albus que su prima estuviera tan decepcionada de no lograr aturdirlo en el primer intento, y que no solo eso, que hubiera destruido su defensa y haber logrado un hechizo no verbal de manera tan natural.

-          Bien hecho Al –su amigo Scorpius lo felicitaba desde el piso con la cara embarrada. La cara de indignación de su prima al ver esto fue indescriptible.

-          Seguramente el tio Harry estaría orgulloso de ti Al, pero la verdad es que careces de talento, nunca serás como James o Lily.  –los comentarios provocativos de su prima dieron justo en el blanco, el morocho estaba furioso.

No podía creer que su dulce prima a la que consideraba su amiga se vea tan cambiada al hecho de que alguien pueda ser mejor que ella en clases, aun siendo clases extracurriculares. Entonces cuando escucho hablar de su padre se le vino a la mente un encantamiento que había en una conversación con su tío Ron mientras recordaban algo sobre un extraño libro del colegio. Quería sorprender y humillarla más a su prima, y mientras esquivaba una maldición de cadenas, pensó “Levicorpus”. Un haz de luz broto de su varita, y de pronto escucho el grito de Rose. Estaba colgada de su tobillo por una especie de cuerda invisible, su varita había caído al suelo y no se podía liberar.

El profesor se acercó y lo felicito, además de liberar a Rose del hechizo. La chica se dirigió de nuevo al castillo totalmente indignada, el morocho por otra parte se quedó presenciando el duelo de su mejor amigo contra McLaggen. Tardaron un rato y Scorpius desarmo y encadeno a su contrincante.

-          Bien hecho, Malfoy. Buen duelo –lo felicito McLaggen extendiendo su mano y estrechándosela –por otra parte Potter, estuviste genial contra Granger ¿Cómo hiciste para dejarla colgada así?

-          Em..em..no lo sé bien –dijo el chico sonrojado mientras Gabriel le tocaba el hombro preguntando. Scorpius miraba extrañado, era la primera vez que McLaggen hablaba de otra cosa que no fuera él.

-          No cabe duda que sabes lo que haces, deberíamos estudiar juntos para los exámenes si quieres –respondio el chico con una sonrisa.

-          Ya estamos estudiando nosotros juntos McLaggen –salto el rubio frente a la falta de respuesta de Albus.

-          Bueno, de igual manera, avísame Al –le guiño el ojo y se fue.

El rubio quedo anonadado y Albus algo sonrojado por la felicitación del chico. Cuando Scorpius estuvo por romper el silencio, apareció el el profesor atrás de ellos.

-          Se ve que tienes actitudes para el duelo Potter, siempre pensé que eras tímido en clases pero se ve que me equivoque –dijo felicitándolo –creo que tienes maña de auror ¿te gustaría tomar clases particulares de defensa contra las artes oscuras?

-          Cre…creo que estaría bien profesor, de todos modos quiero mejorar mis calificaciones este año –contesto el morocho tímidamente.

-          Perfecto, le escribiré a tu padre si está de acuerdo, ya que mis clases particulares son algo rigurosas. Y hablare con la directora, te hare llegar una carta para hablar más detenidamente sobre ello –dijo despidiéndose –y antes que me olvide, diez puntos para Slytherin por tus hechizos no verbales de hoy.

-          Gracias señor

Durante esa semana se comentó, como siempre ocurre en Hogwarts, la manera en que el Potter de quinto año había superado a Rose Granger-Weasley en las clases de duelo. La chica estaba furiosa y ni le hablaba, de hecho en el último tiempo solo hablaba con sus pares de Gryffindor y con Scorpius; que estaba encantado. Por su parte, Albus estaba feliz de por una vez no sentirse invisible, de hecho hasta su hermana Lily había venido a felicitarlo por “dar su merecido a la creída de Rose”. El chico siempre había pensado en que Rose era dulce y buena amiga, pero se dio cuenta en el último tiempo que solo era asi con ellos porque no los veía como una amenaza académicamente. Quería ser la mejor de la clase, además era la prefecta de Gryffindor.

Pasó una semana y los estudiantes estaban hasta el cuello con deberes, el profesor Slughorn les había asignado una redacción de la poción conocida como “Filtros de muertos vivientes”, la directora (que seguía impartiendo clases a pesar de su puesto) les había encargado practicar el encantamiento “Colovaria”, aunque el profesor Longbottom había sido piadoso y no les había dejado tarea esa semana.

Cada vez se acercaban más el final de octubre y con ello la fiesta de Halloween. Entonces mientras Albus se dirigía a la biblioteca pudo divisar en el pasillo una cabellera rubia, era Scorpius, hablando con una chica de mediana estatura pelo rojizo y pecas. Era su prima Rose, se tomaban de las manos y hablaban muy cerca. Albus se sonrojo completamente, y con más fervor caminó. Había hablado poco con su amigo comparado como lo hacían antes. Sabía que la semana entrante eran las audiciones de Quiddich para formar el equipo del año, y el rubio se iba a presentar.

Cuando dejo los libros, fue a uno de los estantes finales para que nadie lo viera. Se puso a leer “El silabario del hechicero” y se puso a traducir un pergamino; poco a poco su mente se nublaba e imágenes de Scorpius pasaban por sus ojos. Ese beso escondido en “la sala que viene y va”, el terror de arruinar una amistad, el pensamiento de lo mal que era enamorarse de un chico y la tercera guerra mágica que provocaría en su familia al saberse esto.

De pronto se percató que alguien se acercaba dando brincos por la biblioteca, él era el único allí “ojala fuera Scorpius” pensó.

Una cabeza se asomó, una niña de sonrisa resplandeciente y ojos café apareció. Era su hermana Lily, que lo saludaba, le dio un beso en la mejilla y se sentó a su lado.

-          ¿Cómo te encuentras Alby? –corto el silencio con una sonrisa

-          Bien, gracias por preguntar, pero ahora estoy estudiando –respondio mirando su libro y tomando notas.

-          Nunca te he visto tan estudioso, creo que estas tratando de ocultarme algo o quieres ignorar algo con todos esos libros –dijo cortésmente, lo miraba fijamente analizando toda la escena.

-          No Lily, solo quiero superarme un poco este año, tengo exámenes difíciles y quiero poder terminar el colegio de la mejor manera.

-          Nunca fuiste como James, pero yo…yo siempre te respete, siempre fuiste amable conmigo aunque callado, papá y mamá estarán contentos que te esfuerzas por adquirir logros, aun si fallaras no se lo tomarían a mal, nuestro hermano solo pudo conseguir cuatro T.I.M.O.s en su quinto año y todavía no lo han corrido de casa –dijo pensante y sonando graciosa a la vez –pero estoy preocupada por ti, te noto distante de todos aunque sobresaliente. Rose ya ni te menciona por haberla superado en Defesa Contra las Artes Oscuras, y casi ya ni te veo con Scorpius… -dijo esperando una respuesta, pero no la hubo –bueno, debe ser por los acontecimientos recientes que te encuentras así…

-          ¿Qué? No sé de qué estas hablando, Rose es solo una envidiosa que no supera que la derrote en un simple duelo, y bueno, Scor esta… -no pudo terminar la frase porque su hermana lo interrumpio

-          Está saliendo con Rose, desde hace unos días. Lo siento Al si no lo sabias, pero sentí que tenía que verte, él es tu único amigo y.. –el chico la interrumpio.

-          No tienes de que preocuparte, tengo otros amigos –mintió algo afectado por la noticia pero la chica ignoro esto y continuo.

-          No quería que estuvieras solo, me he dado cuenta hace tiempo de lo que te ocurre pero quería darte tu espacio como tú me das el mío cuando tengo mis arranques. Pero no te tienes que sentir mal, el amor en cualquier forma es válido –dijo dulcemente.

-          No comprendo a lo que quieres llegar Lily –Albus estaba un poco más nervioso, rogaba que no se refiriera a lo que él pensaba.

-          Te gusta Scorpius ¿No es así? –el chico se puso palido al fatal comentario de su hermana –creo que es maravilloso, es un chico bueno y sensible, y te cuida como a nadie. Tú también lo eres y has demostrado mucho en este nuevo curso, se lo que te hizo enfadar para que vencieras con tanta destreza a Rose, te comparo con James –hizo una pausa y continuo –eso  es difícil para ti, ya que es más parecido a papá en actitudes. Pero tienes que entender que no debes sentirte mal por ser diferente a él, sería muy aburrido si los dos hijos de Harry Potter fueran un calco a su padre ¿no? –el chico era un mar de lágrimas contenidas –no tiene nada de malo que te gusten los chicos, y cuentas con mi total apoyo; y no te preocupes por los tortolitos, creo que Rose solo acepto salir con él para dejarte solo a ti. Las chicas podemos ser vengativas, pero nunca creí que llegaría a ese extremo, jugar con los sentimientos de alguien es totalmente horrible.

-          Gra..gracias Lily, no sé cómo agradecerte tus palabras, perdón por no tener el valor de decirlo –y abrazo a su hermana, después de unos segundo de un fraternal abrazo continuo –sí, me gusta Scor, nos besamos en la sala de menesteres el sábado previo a la práctica de duelo –Lily enmudeció sorprendida –pero me pidió que eso quedara allí. Eso me hizo sentir usado, como una prueba para sacarse una duda, y me lastimo. Pero ahora quiero seguir adelante y enfocarme en lo que me hace bien. No puedo enamorarme de mi mejor amigo, sobre todo si le gusta a mi prima.

De pronto una ventana se abrió, Circe entro volando y se poso en un estantería. Tenia colgada una carta en una de sus patas, iba dirigida a Albus.

-          ¿De quien es? –pregunto su hermana curiosa.

La abrió y claramente era del profesor Kingsley, la leyó en voz alta para ambos.

Señor Potter:

Me gustaría informarle que su padre ha autorizado las clases particulares impartidas por mí para usted. La directora por su parte quiere hablar personalmente con ambos y su padre para establecer algunas normas y los temas extracurriculares que trataremos. Nos reuniremos en su oficina esta noche luego de la cena.

P/D: Solo los hombres lobos le temen a este tipo de contraseña.

-          ¿Qué significa…? –la niña fue interrumpida por el dedo índice de su hermano.

-          Es la contraseña de la gárgola Lily, los hombres lobos le temen a este tipo de contraseña –dijo analizando las opciones –si yo fuera un hombre lobo…le temería a la luna llena, ya que no pueden controlar su estado, el profesor lo comento en tercer año.

-          Brillante Al, está bien, te dejo prepararte, envíale mis recuerdos a papá y pídele dinero porque ya me he gastado mucho en golosinas –beso a su hermano y se retiró de la biblioteca.

Albus junto sus libros y se retiró de la biblioteca. Se diriguio a las mazmorras hacia la sala común de Slytherin. Al entrar en el lugar, el tono verdoso estaba intenso y las velas flotantes resaltaban en el lugar. Frente a la chimenea estaba sentado su amigo.

-          Hola Al, ¿Cómo estás? –pregunto el rubio desde la comodidad del sillón, con una sonrisa magnifica.

-          Bien, Scor, tengo que alistarme, luego del banquete tengo una reunión con McGonagall, Kingsley y mi padre –contesto cortante, la tensión aumentaba, se destinó hacia las escaleras hacia los cuartos.

-          ¿Está todo bien entre nosotros Al? Perdón si estuve distante estos días estaba.. –el morocho lo interrumpió.

-          …besándote con Rose, lo sé, y gracias por contarle a tu mejor amigo –la voz del morocho desprendía furia –y por si acaso.. –se mordió la lengua y se fue al cuarto, el rubio quedo cabizbajo mirando el fuego.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).