Vagando por las calles del pueblo, Simon recorrería la zona comercial. No contaba con el dinero para adquirir nada, pero disfrutaba viendo toda clase de cosas. Las personas del pueblo se agolpaban en cada establecimiento como era de diario, regateando precios o haciendo trueques.
Había pasado por algunas experiencias y su nivel ya era seis, aun si el de los demás era de 10. Laxus había formado alguna especie de equipo con Hideki aventurándose en misiones, a las cuales Simon no era bienvenido, no lo decía de frente, pero lo sabía por la terrible expresión en la mirada de Laxus. Por otro lado Arima y Doko también salían por su cuenta llevando a Simon, aun así no lo presionaban para acompañarlos. Zoro se la pasaba durmiendo desde la última misión, un día se levantó siendo nivel 4 y regreso por la tarde echo un desastre con nivel 10 y volvió a dormir.
Un destello desde una de las vitrinas llamo la atención de Simon. El establecimiento no parecía ser el mejor, los artículos en las vitrinas parecían ser de mala calidad y estaban empolvados. Un cristal aguamarina destellaba tenue por tanto polvo, aun así Simon podía ver unas venas en el cristal por las cuales circulaba luz.
Entro sin más al establecimiento, la iluminación era pobre. Las mesas de madera parecían no haber recibido cuidado en mucho tiempo. Había objetos apilados en las esquinas juntando polvo. Una corriente eléctrica subió por la columna de Simon, dirigió la mirada al techo, multitud de cristales incrustados en la madera, en cada uno por delgadas venas circulaba luz, fluidos, gases y muchas otras sustancias.
-¿Quién eres tú?- Una voz áspera saco a Simon del trance
-Yo no quería…- Se apresuró a decir, pero no había nadie. Simon volteo de un lado a otro sin encontrar a quien le hablaba.
-¡Aquí abajo!- La voz sonó con frustración
Simon miro hacia abajo, un hombrecillo barbón y calvo con la cara llena de hollín que no llegaba más arriba de sus rodillas lo miraba furioso.
Con un respingo brinco hacia atrás
-Disculpe, no quería entrar sin permiso. Es solo que…- Simon fue bajando la voz sosteniendo el báculo tembloroso
-¿Es solo que?- grito el hombrecillo
-Los cristales ¿Qué es lo que hay dentro de ellos?- Simon volvió a mirarlos
El enano parpadeo y se acercó a Simon -¿Puedes ver dentro de los cristales?-
-Si…- Respondió muy bajo
-Lo que ves en ellos es Brío Elemental- Dijo el enano sacando un fragmento de sus desgatados bolsillos y arrojándolo a Simon. Lo miro detenidamente emanaba una luz y humo blanco, de pronto este se desintegro y el humo ingreso por el conducto sanguíneo de Simon, la pantalla de estatus emergió y vio como un +10% apareció frente a cada una de las barras de estatus y no solo eso ahora era nivel 7.
-¿Qué es esto?-
-Ahora cada vez que subas un nivel, cada estadística que eleves se le sumara un 10% adicional- El enano hizo una pausa-Ese objeto era de nivel único-
Simon de quedo helado, había leído varios manuales desde su llegada a ese mundo y sabía bien el valor de los ítems de tipo único, según el artículo se podría comparar un pueblo, ciudad y hasta un continente entero.
-¡Yo no tengo como pagar esto!- grito Exasperado y arañando su mano para intentar sacarlo
-Es una lástima- Dijo el enano- Ahora tendrás que convertirte en mi aprendiz-
Una solicitud apareció frente a Simon, en una pantalla de color verde. Dudo, pero no lo quedaba de otra, presiono aceptando y vio como una pequeña barra de nivel apareció por debajo de su barra de clase y decía: Sub clase Crafter Nivel 1
Bajo la sombra de los arboles Doko descansaba recostando la cabeza sobre los brazos y su espada enfundada a su lado. Arima tocaba una suave melodía, pequeñas notas giraban en torno a él, con tonos iridiscentes.
-Suena hermoso- Dijo Doko con los ojos cerrados. Ambos ya eran nivel 14.
Arima sonrió, pero luego dejo de tocar.
-¿Qué es lo que te preocupa?- pregunto Doko
-Es Simon- Miro al cielo, las nubes se arrastraban lentas en un cielo azul- Él no está progresando-
Doko tomo la mano de Arima y la guio hasta su pecho, presionándola Arima sentía sus latidos serenos.
-El encontrar su camino- Ambos se miraron de forma fija, el viento soplaba meciendo el cabello de Doko- Y cuando lo haga estaremos ahí para apoyarlo-
-¿Confías mucho en él?- Arima acarició el cabello de Doko, luego su mejilla –Pero hay que mantener en secreto esto-
-¿De qué hablas?- Miro confundió hacia Arima
-¿Qué es crees que Simon piensa acerca de ti?- Pregunto Arima zafándose
-El me admira y trato de ser un ejemplo para el- La sonrisa de Doko fue amplia y sincera- Él es muy inocente, tenemos que cuidarlo-
Arima cerró los ojos y sonrió, luego se puso en pie y miro hacia el bosque
-Creo que el inocente eres tú-
Doko lo miro-¿De qué hablas?-
-No importa, ya lo descubrirás. Sigamos entrenando-
Lejos en la parte opuesta del bosque donde el terreno era árido, Laxus y Hideki habían acabado con un escuadrón de hombres lagarto. Lleno de tierra y con heridas leves Hideki sonreía bajo el sol. Las gotas de sudor rodaban por la cara de ambos mientras caminaban hacia una cueva cercana. Sus pisadas se dibujaban en la tierra estéril y agrietada.
-Esto es un asco- Dijo Laxus cruzando los brazos- Hemos trabajado tanto y apenas logramos el nivel 15-
-Es porque eres débil- Dijo Hideki Mirando hacia Laxus
-Y tú pierdes demasiado el tiempo-
La elevación de roca se alzaba frente a ellos, ingresaron en un pequeño espacio en la piedra, era fresco y al resguardo del sol. Ambos tomaron asiento uno frente al otro
-Si usaras tu varita, avanzaríamos más rápido-
-Nunca usare ese artefacto repugnante- Dijo Laxus- Te tengo a ti, tu complementas mi habilidades-
Hideki sonrió- Sigues siendo débil-
-Y tu un idiota-
Habían pasado dos días desde que Simon se volvió aprendiz de Crafter, su nivel de Clérigo era 8, sin embargo su nivel de Crafter ya era 20. El solo salía de su apartamento sin decir nada y regresaba por las noches, nadie sabía lo que hacía realmente.
Devoro libros completos en pocas horas gracias a una pasiva del clérigo llamada Absorción, en batalla le permitía regenerar vida más rápido absorbiendo energía de la naturaleza, pero descubrió que si la aplicaba en los libros mágicos, podía adquirir la información sin leer el contenido con solo absorber la energía del libro.
El pequeño duende, cuyo nombre era Bruce, se complacía con los progresos Simon.
-Escucha Simon- Dijo bruce sentado sobre una de las mesas, mientras Simon trabaja en un nuevo artefacto- No debes descuidar tus niveles como clérigo. Si deseas crear mejores objetos tendrás que buscar materiales de calidad en sitios peligrosos-
Arima se dio la vuelta para encáralo con la cara llena de hollín
-Pero yo soy débil- Dijo mirando al suelo
-Es por que huyes de tus problemas- En duende saco una pipa y comenzó a fumar-Como tu maestro te ordeno que salgas a subir de nivel-
-Yo…yo- tartamudeo- No puedo, ni siquiera puedo matar a un Goblin solo-
Bruce lo miro y exhalo humo que dibujo una espiral antes de disiparse
-Nunca lo has intentado, busca tus propios métodos, no tiene que será elegantes o sobresalientes como los demás- Saco una Piedra de su bolsillo y la arrojo hacia Simon quien la atrapo
-¿Qué es esto?- Pregunto Simon mirándola
-Es la llave del jardín Slime- Dijo Bruce- Son Mobs que hasta un Clérigo debilucho como tu podría matar de un golpe, entrena en ese jardín, nadie te molestara es un lugar prohibido para los aventureros. En tu nivel actual unos 300 slime serían suficientes para el siguiente nivel-
-¡Son demasiados!- Grito Simon
-¡Piensa quejarte de todo!- Grito Arrojándole la pipa contra la frente-¡Si no lo haces no te dejare volver a mi tienda!-
-¡No, no tengo a donde ir! ¡Soy solo un estorbo para los demás!- Las lágrimas rodaron por los ojos de Simon
-Entonces has algo, Lárgate y no regreses hasta que hayas subido 5 niveles- Bruce lo miro de forma severa. Simon sabía que hablaba enserio y no quería perder su lugar, así que no le quedaba ms remedio que aceptar. Sin pensarlo dos veces Salió de la tienda de bruce.
-Ese idiota- Dijo bruce sobándose la frente- Ni siquiera le dije donde era-