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Historias perv-didas. por SigmaIII

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Notas del capitulo:

Los gemelos regresan al pueblo, y hay muchos cambios. 

 Esta historia sirve como continuación de "NO es la cabaña del misterio", pero no es parte de la misma, la escribía aparte y por eso la forma en la que Bill y Stan entablan la relación es un poco diferente. Igual está divertida. 

ACOTACIONES:

-Diálogos de Dipper-

=Doble guión, es Mabel= 

Día 1. El arribo. 

 

Su tío los fue a recoger a la estación de autobuses. Faltaba poco para llegar, pero en vez de seguir Stan se frenó. 

-Tío Stan, te detuviste en medio del camino.

=¿Nos quedamos sin gasolina?= Tardó en responder. 

-Niños, hay algo muy importante que he querido decirles desde hace meses.

=¿Qué sucede tío Stan?= Preguntó Mabel preocupada. 

El hombre estaba tieso, con ambas manos sujetas al volante y sudaba de los nervios. 

-Debe ser muy importante como para hacerte detener a mitad del camino. ¿Qué es lo que sucede? ¿Le pasó algo a la cabaña?

=¿Remodelaste la cabaña? 

-No linda. Ni siquiera pude decírselo a sus padres ¿Qué dirán?- Comenzó a entrar en pánico.  

=¿Qué es? ¿Qué es? 

-Yo….Me casé.

=¡TÍO STAN! ¡ESO ES GRANDIOSO! ¡Grandioso! ¡Felicidades!

-¡Es una gran noticia! ¿Por qué no quisiste decirnos? 

=¿Es linda Susan? ¿Quién es? ¡Debo saber quien es! ¿Cómo se llama eeella? = Agitó con desespero al hombre. 

-Es un él... creo. 

-¡Wow!- Dipper se tomó su tiempo para procesar la noticia, movió las manos cómo ordenando sus ideas- Nunca lo vi venir de ti Stan, pero tomaste tu decisión. Lo respeto. 

=¿Y el anillo? ¿Por qué no llevas anillo?= El hombre, mecánicamente sacó la cadena de oro que llevaba bajo la camisa, de esta pendía uno, se los mostró para probar que si lo llevaba encima y como evidencia. 

-¡Tío Stan! ¿Por qué no nos invitaste?- Reclamó Dipper. 

=¡Sí Tío Stan! ¿Por qué? Te habríamos ayudado con los preparativos ¡Yo pude organizar la recepción! ¡Pato pudo ser el padrino!  

-Creanme que me habría encantado todo eso, pero no era buena idea, fue muy rápido y….  

-¿Tío Stan?-Dipper fue muy receptivo- ¿Acaso es alguien que no quieres que conozcamos?- Con está pregunta el viejo reaccionó. 

-¡Fue una mala idea!- Stan pusó la palanca en reversa, giró medio cuerpo sobre su asiento para mirar atrás y aceleró, el auto se movió, pero en vez de seguir el camino, súbitamente se encontraron en un patio rodeado por árboles y a unos pasos de ellos había una casa. La puerta se abrió de súbito. 

-¡Niños! ¡Digan hola a su nueva tía!- 

Con bastón y estirando los brazos el triángulo amarillo hizo su presentación. 

 Los chicos gritaron. Tras el shock inicial, pudieron dirigirse a Stan.  

-¡Tío Stan es Bill! ¡Acelera! ¡Acelera!- Pero el hombre dejó el volante y se frotó la frente cansado. 

-Llegamos, es aquí. 

=Tío Stan, ¡Dinos que es una broma, una horrible broma!= Pero el hombre se hundió en su asiento, estaba perdido. 

-¡Oh, alguien está sobreactuando! ¡Ven aquí!- El demonio, tan grande como fue necesario, sujetó el techo del auto y lo arrancó. Con ayuda de tres brazos más los sacó de allí y los depositó en el suelo. Volvió a poner el techo del auto en su sitio, y esté se arregló como por arte de magia, sin ningún rasguño. 

=¿Tío Stan?= Instintivamente Mabel se acercó a Dipper. 

-Así que sí pospusiste la noticia, hasta que fuera demasiado tarde como para ocultar-  Con una gran naturalidad el triángulo, ya pequeño, flotó y pasó un brazo tras la espalda de Stan. 

Los chicos miraron con espanto el anillo que lucía Bill en su mano izquierda. Imposible no verlo, contrastaba con el color de su piel. 

-¡STAN!- Pidió Dipper. 

-Es una historia muy loca- Stan, desvió la mirada nervioso. 

-Demente diría yo- Aclaró Bill. 

-¡Es muy complicado para que los niños entiendan!

-¡Oh no, no, no!-Siguió Dipper- No es complicado, es más que obvio-Se dirigió a Bill-  ¡Le lavaste el cerebro a nuestro tío! ¡Y planeaste estas vacaciones para nosotros en Gravity Falls para vengarte por vencerte el verano pasado! -Acusó. 

-Vencerme, seguro ¿Algo que decir Stan? 

-Niños- El hombre se frotó la cara cansado- No hubo un lavado de cerebro. 

-¡Es lo que quiere que pienses! ¡Así funciona un lavado de cerebro! 

-No y no. Miren vamos adentro. La casa les va a encantar.

=Tío Stan ¿Y la cabaña? 

-La cabaña sigue en pie, allí vive tu tío Ford ¿Apuesto a que quieren visitarlo? Descansemos un rato y después iremos a verlo. ¿Qué les parece esa idea?- Los hermanos se miraron con preocupación. Y sin opciones entraron a la casa. 

El interior. Contrario a sus suposiciones es… acogedor. En realidad tenía un aspecto hogareño y muy limpio. La mayoría de los muebles eran nuevos lo que la hacía lucir muy distinto al aspecto rústico de la cabaña. Únicamente la alfombra a rayas les recordó un poco la época retro. Las grandes ventanas la hacían muy luminosa. 

Stan los llevó adentro y tras unas palabras más regresó al automóvil para bajar las valijas. 

-¿Qué tal el viaje?- Les preguntó Bill. Los chicos no contestaron, lo miraban enfadados. El triángulo, incómodo se acomodó la corbata - ¡Guau! Público difícil. Muy bien, qué tal algo de beber- Bill materializó una jarra con agua de sabor y vasos. 

-Estamos bien- 

El triángulo frunció el ceño. Igual sirvió un vaso. Cuando Stan entró lo tomó. 

-¡Qué delicia!- Tomó asiento en el sofá de la sala- ¿Qué sucede? ¡Oh sí!- La obvia incomodidad, lo que sea que sea esto. -Vamos chicos, ¡Relájense!- Los gemelos se sentaron en el sillón pero sin hablar y sólo mirando con desaprobación. 

……………..

-Sé que extrañan la cabaña, pero este lugar les encantará. Déjenme mostrarles su cuarto- Stan abrió una puerta. Un cuarto de escobas. Con dos sacos de papas colgando como si fueran hamacas. 

-¡Tío Stan!- Al unísono.

El viejo se soltó a reír.

-Es broma, es broma- Siguió- ¡Tenía que hacerlo! Es por aquí.- La siguiente puerta, una habitación amplia, dos camas. Buen aspecto- Pueden colgar todos los posters que quieran. ¿Qué les parece? 

-Esta bien- Dipper contestó más por cortesía, no estaba contento con nada de lo que ocurría. 

-¡Excelente! ¿Qué les parece si se instalan, comemos algo y visitamos a Ford? 

=Ajá= 

………………………..

Stan y Bill habían construido su casa en el terreno antes ocupado por la tienda de telepatía de Gideon. A unos metros se encontraba la “Nueva cabaña del Misterio”, aunque en realidad sólo era el espacio constituido por el museo y la tienda de recuerdos. Ahora Stan también conducía un tour en las inmediaciones del bosque, la grieta a la otra dimensión que surcaba el cielo era la atracción final. 

Si cruzaban la carretera y caminaban un poco, se llegaba a la cabaña de Ford. La entrada estaba tapizada de letreros que decían cosas como “Aquí no es la cabaña del misterio” “Márchese” 

Ese tono poco amigable preocupó a los hermanos. 

Llamaron a la puerta. Nadie atendió. 

-Parece que no está. Le dije a ese tonto que hoy llegarían. Seguramente se fue a una expedición al bosque- Sin éxito regresaron.

-Tío Stan, ¿No te preocupa que el tío Ford se meta en problemas? 

-Debe estar bien, no es la primera vez que desaparece- Pero los chicos notaron, por su tono de voz, que ya estaba cansado de este tema. Volvieron a la casa, esta vez repararon en algunos detalles. Tenía arbustos con flores al pie de las ventanas, un buzón rojo y aspecto sospechosamente alegre. 

Se hizo de noche. 

Luego de la cena, era hora de acostarse. 

-¡Hora de dormir! Los niños no deben estar despiertos a esta hora- Comentó Bill. 

=¿Qué? Pero apenas son las siete. 

-¡Parece que tienes prisa porque durmamos!- Contestó Dipper. Mantuvieron un enfrentamiento visual hasta que Stan interrumpió.  

-Es hora de dormir. 

=¡Pero tío Stan! 

-Fue un largo viaje, deben reparar energías, descansen bien, porque mañana trabajarán con su tío favorito en la tienda- 

Los chicos se fueron a la alcoba, sin perder de vista la complacencia en el ojo de Bill. Tal vez ganó esta primera batalla, pero no ganaría la guerra. 

Apagaron las luces, y pasadas unas horas Dipper se levantó. 

=¿A dónde vas? 

-Creo que ya están dormidos. Sólo iré a investigar. 

=¡Dipper no!

-Mabel, Bill es un demonio de las pesadillas. ¿Por qué crees que tenía tanta prisa por mandarnos a la cama? Seguro para aterrorizarnos mientras dormimos. Sólo iré a mirar y descubrir que pretende.

=Voy contigo. 

-¡No! ¡Quédate aquí! Si no vuelvo, escapa- Mabel no quería dejar sólo a Dipper, pero hizo caso. Con Bill había que ser precavidos. Aunque tenía el presentimiento de que el demonio no intentaría nada con Stanley aquí.  

=Ten cuidado= El chico asintió. Sin encender las luces se desplazó lentamente y muy silencioso fuera de la alcoba, de vez en vez se alumbraba con una pequeña lámpara que llevaba. 

La casa entera estaba vacía. Sólo al fondo del pasillo, en la puerta que él imagina es la recámara principal, se asomaba un haz de luz. Se acercó. Se escuchaban voces al otro lado. Por el ojo de la cerradura pudo apenas distinguir el interior. Había una cama y sobre esta se encontraba sentado Bill. A los pies Stan, este habló. 

-Es lindo tener a los niños aquí. 

-Disfrútalo porque no volverá a pasar. 

-¿No?

-¡No! 

-Te estás esforzando. Gracias. 

-¡Más vale que lo notes! 

-Te recompensaré- Stan posó su mano en el muslo del triángulo. Dipper se tapó la boca para no gritar y dio media vuelta derechito a la habitación cuidando de no hacer ruido. Cerró la puerta tras de sí y la atranco con una silla. Mabel, sentada en la cama comentó en un susurró.   

=Volviste pronto. Dipper, ya entendí qué es lo que sucede. Stan y Bill solo son dos solteros disfrutando la vida de fiesta. Fingen que están en una relación para que...

-¡MABEL!

=Es lo que hacen en las películas. Era obvio, nuestro tío es el soltero más codiciado del mundo ¡Mnnn!= Dipper le tapó la boca, enseguida la soltó cuando ella lamió su mano. 

-¡Mabel no puedes creer lo que acabo de ver!  ¡Es peor de lo que pensé!

=¿Qué? 

- Creo que es físico. ¡Físico! ¡Voy a vomitar! -Lo hizo. 

=¡Dipper! ¡Que asco!=

Continuará…..

 

Notas finales:

Gracias por leer. Saludos. 


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