En la mañana antes de partir le dije a Meghan que tipo de atuendo debe llevar a la cena ya sea Kimono o un vestir estilo inglés, vi que no le agradó pero el chofer ya me esperaba así que sin decir más subí al automóvil que me llevará a la casona principal de la segunda familia para hacer todo lo que respecta con las tradiciones, en sí, no podemos vernos hasta ese momento, pero lo que no entiendo es ¿Qué hace el a mi lado?, me le quedo viendo horrible
- ¿Qué?- pregunta Carlos que esta asombrado por el lugar
- ¿Por qué estás aquí?- cuestiono directo, se bien que hicimos las paces, cosa que en si nunca estuvimos en guerra, pero en verdad no entiendo
- Bueno Japón es famoso por sus tradiciones al igual que México, pero cada uno en lo suyo y ese par de mellizos lo último que tienen son tradiciones, así que solo tu podrías enseñarme eso- habla suelto y sonriendo
- ¿Y?- no lo puedo creer
- Pues quiero ver, tomar fotos, conocer- su emoción es tanta que la manifiesta perfectamente en su voz
- ¿Cómo pueden manifestarse así?- le pregunto señalándolo
- Jajajaja pues mira, en México somos un poco más expresivos, bueno yo diría diferente, pero también era muy serio- platica viendo la casa como si estuviera en un museo- yo siempre he sido muy popular
- No te ofendas pero eres bastante varonil y atractivo- suelto sin pensar, claro si con Meghan y Alice no me detengo con este sujeto menos y no entiendo él porque
- Uuuuuyyy pero que linda eres- me toma en sus brazos- gracias es todo un alago y más viniendo de ti- su sonrisa sin duda conquista- pero aun siendo popular soy algo impenetrable hasta que empecé a hablar con Meghan, esa mujer me hizo reír más y con sus locuras me pude sentir más libre- sí, su voz es melosa
- ¿no te molestó el saber sus preferencias? ¿O fue porque ya tenías claras las tuyas cuando supiste?- rayos mi discreción ¿dónde quedo?
- Mmmm no, no sabía en ese entonces- dice pensativo- a los trece años lo que menos me atraía eran gustos y romances- comenta con simpleza- y de ella no, no me afectó, por alguna razón no me perturbé y solo quería protegerla – alzo mi ceja incrédula- si protegerla, aunque no lo creas muchos quisieron hacerle bullying
- ¿quisieron?- o sea que no pudieron
- Bueno pues tener a su mellizo hizo que nada pasara, además que también me tenía a mí- habla orgulloso
- ¿Qué hace este joven aquí?- mi padre pregunta formal pero yo sé no le agrada
- Te presento a Carlos el prometido de Meghan- digo tranquila
- Un placer Sr- Carlos le da la mano antes de que mi papá pueda reaccionar- le comentaba a Maia que me encantaría conocer costumbres y me colé, traigo un traje para esta noche y no daré lata le juro- sí, Carlos está fascinado y más porque mi papá trae la yukata- espero no estorbar pero si sí me dice- papá abre los ojos
- Oh pero que joven tan guapo- exclama mamá y Carlos se pone súper rojo
- M m M muchas gracias- eso me dio risa- oh pero que hermoso ríes- dice coqueto, ¿Qué este hombre no se contiene?
- Si la tiene y ¿con quién tengo el gusto?- por eso quería presentarlo cuando estuvieran los dos ufff
- Mamá él es Carlos el prometido de Meghan- mamá sonríe
- Mírala tiene buen gusto- y se lo está checando todo, que oso
- Amor- dice papá entre dientes
- Ay que es un niño no me lo voy a comer- se ríe
- Mamá, el habla y entiende perfectamente el japonés- hablo rápido antes de que diga otra barbarie, la sonrisa de Carlos es única, mamá esta rojísima
- Ow- se ríe- bueno no es mentira, ¿no debería estar con su novia?- le pregunta amable y sé que papá quería preguntar también
- Ah no, no es una cena donde me vayan a presentar- a él le vale- además le comentaba a Maia que quería conocer tradiciones y con esos mellizos no se puede, son anti tradiciones- finge molestia y mis papás ríen bajo
- Entonces acompáñenos al té- comenta papá que está contento por el joven
Carlos se ganó el afecto de papá y coquetea amablemente con mamá sin pasarse, aunque claro cómo se va a poder pasar si sus gustos son otros.
- Es hora de arreglarnos Maia, espero Meghan mínimo cumpla esta parte de la tradición- papá comenta con media sonrisa, saliendo de la sala con mamá
- Yo también espero eso- digo con pesadez
- Lo hará no te preocupes- Carlos pone su mano en mi espalda
- Meghan estos son los atuendos que puedes llevar- le entrego las opciones que están traídos de la tintorería
- ¿Es enserio Maia?- pregunta con pesadez y me ve molesta
- Lo prometiste- alego rápido
- ¿Cuándo?- se cruza en brazos
- Dos noches después de que llegué a tu casa y hablamos de esto- respondo frunciendo el ceño
- Osh- se da vuelta y estrella su cabeza con la pared en pequeños golpecitos
- Maia el chofer llegó- me habla Luca y antes de que pase algo salgo
- Eso espero porque cuando se pone así es bien pesada- suelto con fastidio y él se ríe
- Lo hará créeme- argumenta seguro levantándose y como un caballero ayudándome a pararme- ¿en dónde me cambiaré?- y por su cambio de platica me hace reír
- Por acá sígueme- le señalo y el hace que lo tome del brazo
Llegar a la casa principal siempre me ha puesto nerviosa, pero es algo que no puedo dejar que se vea, en eso siento como Carlos toma mi mano y la pasa por su brazo para que entremos
- Esto no va con las tradiciones- le digo bajo
- ¿Cómo de que no?- comenta extrañado, o sea el diciéndome a mí eso
- No- susurro
- Es la tradición de amigos- y comienza a caminar sin que yo lo suelte, debo decir me saco una media sonrisa y mis padres nos observan.
Llegando a la puerta principal Carlos me suelta, me da ánimos y me hace seña de que irá con los hermanitos de Meghan que se ven a lo lejos, asiento y me acerco a mi padre para que entremos los tres
- Muy buenas noches tengan todos- comienza la Sra Kana con todo el porte que le destacan- hoy es un gran día, la tradición se hace presente y Meghan por fin tomará su lugar como corresponde- al ver a Meghan no lo puedo creer, creo que jamás pensé verles de este modo, toda la familia trae Kimonos y yacatas respectivamente
- Es un placer para nosotros reunirnos hoy con todos los miembros de la familia- el Sr Kano habla quitándole la palabra a su madre que supongo es para que no pase algo demás- hagamos esto rápido y así podemos comenzar con la deliciosa cena que nos espera- anuncia feliz.
Bien, describiré esto, la Sra Kana trae un hermoso Kimono negro con detalles florales blancos que a pesar de la edad la hacen ver hermosa junto con ese tradicional peinado aunque ya es blanco su cabello; el Sr Kano también una yukata negra con líneas doradas como detalles; el de la Sra Marian es blanco con detalles ligeros de rojo y rosas, Nana un verde como el de sus ojos; Alice uno rojo cereza que la hacía lucir hermosa; la pequeña Mariana uno amarillo; Itan uno azul rey; mientras que Luca uno azul obscuro con líneas blancas; pero Meghan traía uno rosa palo con detalles morados, un peinado suelto del lado y un pequeño pero muy apreciable detalle en el del mismo color que el kimono, se veía hermosa sin duda.
- Así que favor de tomar sus lugares- comentó la Sra Kana y todos tomaron sus puestos no sin antes ver la cara de extrañeza cuando Carlos se puso alado de Meghan tomando su mano, que ahora que me fijaba la traía un poco temblorosa
- Takeshi empecemos- dijo con una formalidad que si no lo conociera se la creería
- Esta noche ante toda la familia- (hare un paréntesis mamá no está junto a nosotros, ella está en su puesto)- vengo a presentar a quien seguirá las tradiciones de seguir sirviendo a la cabeza principal de la familia…- la presentación siguió yo hice la reverencia y tal como ensayamos Meghan y yo ella hizo su parte tal cual la presentación hasta que me acomodé a su lado para servirle
- Bien, la tradición por ha seguido su curso- dijo satisfecha la Sra Kana- algunas palabras querida- le hizo referencia a Meghan y sólo vi como se hizo presente el brillo en sus ojos que me decían no era buena idea
- Gracias abuela- sonrió satisfecha- familia muy buenas noches- dijo formal, sin gritar solo la voz firme y sin perder su sonrisa- como bien dijo mi abuela la tradición ya se hizo presente- se detuvo a observar a todos, quienes debo decir siempre me vieron como inferior y mamá odia eso- como veo muchas miradas curiosas les presentare a mi novio Carlos- éste se puso de pie y saludo cordial, las miradas no fueron de agrado porque eso rompía con una tradición que el padre de Meghan ya había quebrantado anteriormente- mi prometido- sí, debo decir que los ojos de la Sra Kana casi se salían y la mirada que le hizo a su hijo fue peor- y ya que estoy rompiendo tradiciones- ahí estaba esa sonrisa petulante, segura y bastante atractiva- debo agregar que he aceptado a Maia según las tradiciones, pero- hizo pausa y la cara ahora de la Sra Kana era de temor- la tradición se termina aquí, ella es mi amiga y compañera y nadie le volverá a ver, decir o manifestarse con ella de manera denigrante, ella tiene todo mi respeto y mi respaldo, no permitiré que nadie la menos precie- la sonrisa de mamá cada vez se hacía más grande- les recuerdo que ella también es hija de la tía Manami quien tiene un nombre y lugar social muy importante, así que espero ser bastante contundente al decir que no se pueden referir a ella de otra manera más que su igual- y hasta ahí llegó la tradición- ni la vean- claro mi cara esta igual de descompuesta que la de todos- que si vine de kimono fue por ella- se ve que está gozando esto
- Meghan- habló rápido la Sra Kana queriendo quitar lo dicho
- Abuela, estoy tomando mi lugar como deseabas, solo que no con las reglas que jamás seguiré, soy un ser libre, me sé mover mejor que nadie aquí- Luca hizo un “jermp”- bueno que la mayoría de aquí y no me pienso rajar a lo dicho, la familia toma un rumbo nuevo y es lo que viene conmigo
- Tienes más hermanos- reclamó la Sra Kana
- Madre, Luca como bien sabes se hará cargo de lo que respecta a la familia de mi mujer y los pequeños no pueden ni serán metidos en nada que tenga que ver con negocios o familia- habló calmo pero firme el Sr Kano
- ¿Cómo es esto posible?- la pobre mujer estaba eufórica
- Abuela, es lo que hay, solo yo, quien llevará la empresa a la grandeza- dijo segura
- Las tradiciones- dijo la Sra pero ya un tono más bajo
- En el momento que uno de mis antecesores se casó con un inglés se rompieron- expresó suave haciendo que todos la vieran de nuevo- solo que eran muy necios para aceptar eso- tomé el brazo de Meghan para llamar su atención y ella asintió
- Sra Kana- dije suave, ella me vio y todos, sorprendidos de mi voz, creo que jamás hable con alguno- su nieta es un remolino, pero no todo está perdido- mis ojos no podían dejar de ver los suyos, ella siempre estuvo al pendiente de mi- Meghan aun seguirá ciertas tradiciones y de eso me encargaré yo- un brillo de esperanza apareció en sus ojos y uno oscuro en los de Meghan
- ¿Cómo?- alcanzaron a decir a la vez en susurro
- Confié en mí, sabré llegar a ello- la vi dulcemente y ella asintió a lo que se puede decir satisfecha
- Bueno pues vayamos a cenar- dijo relajado el Sr Kano como si todo hubiera salido de maravilla
Fue la noche más pesada que he tenido en toda mi vida, pensé que Meghan iba a respetar en su totalidad el día, pero no, tenía que salir con sus cosas, aunque debo aceptar que una parte de mí, con todo esto, se sintió libre, de alguna forma que quito un extraño peso de encima.
Fuimos llamados a las oficinas desde muy temprano, apenas tuvimos tiempo porque despertamos tarde los 4, no sé en qué momento me quedé dormida observando a Meghan.
- Supongo jovencita ahora estas feliz- comenzó el Sr Kano de forma recriminatoria
- Me hubieras ahorrado todo esto si tú lo hubieras hecho cuando te correspondía- dijo quitando la importancia al asunto y el Sr sonrío
- Cierto, perdona a este padre miedoso de lo que pueda decir la sociedad- fingió dolor
- Lo perdono buen padre,- le contestó sonriente sacando comida del frigobar- nada más porque se hizo cargo de su familia que venía en camino- y soltaron la carcajada, yo negué con la cabeza
- Bueno Maia- me dijo serio- ¿ahora qué harás?- pregunto haciendo seña para que todos nos sentáramos- ya eres libre ¿Qué quieres hacer?- y hasta mis padres que iban entrando a la oficina me veían
- Eso fue totalmente trampa- señalé a Meghan quien sonreía victoriosa- sin embargo yo seguiré con la tradición en lo que pueda- dije orgullosa, nada más escuche el golpe del vaso de Meghan en la mesa- pero con un poco más de libertad- finalice viéndola retadoramente al igual que ella lo hacia
- Pusha esto va a ser pesado- dijo pasándose la mano por la cara
- Jajajaja, esto va a ser divertido- se reía Luca y Carlos lo seguía
- Bueno chicas, necesitan ponerse de acuerdo pronto- señaló el Sr Kano- así que vayan a la oficina de Meghan y mínimo pónganse en un solo canal, es incómodo que ustedes apenas se dirijan la palabra- cruzo las cejas y nos señaló la salida- mientras tanto yo veo unas cosas con estos jóvenes- giró su vista seria a ellos y estos se miraron nerviosos.
Salimos de la oficina del Sr Kano para ir a la de Meghan, todos nos veían, incluso la Sra Marian y Nana que iban llegando.
- Pasa, toma asiento- me indicó Meghan la salita- ¿gustas algo de tomar?- preguntó relajada
- No gracias- vi a donde se dirigía y ahora mi pregunta era ¿si tiene su frigo bar, porque siempre asalta el de su padre?
- Maia solo pregunta y no te quedes con ella en la cabeza- soltó sacando un agua
- ¿Cómo?- solo alcance a preguntar en lo que ella se sentaba a mi lado
- Tu mirada, he estado aprendiendo a leerla- dijo pesadamente- y créeme no eres fácil- me recriminó, abrí la boca asombrada
- ¿Por qué?- no entendía por qué a tantas cosas, así que era una pregunta muy abierta
- Mujer porque nunca dices nada, no sé qué te gusta o disgusta, solo intuyo y ya- suelta frustrada
- ¿Por qué tienes tanto interés en mí? ¿Por qué no seguir las reglas? ¿Por qué no seguir las tradiciones? ¿Por qué quieres ser mi amiga?- en realidad nunca nadie había tenido un interés real en mí y bueno no puedo negar que ella lo está haciendo
- Pufff- se paró, dio unos pasos, regreso, me vio- siempre he sabido de ti- soltó y mis ojos se abrieron más- o bueno de tu existencia, conozco perfectamente todas las tradiciones de la familia- puedo decir que sonaba triste por eso- no me mal entiendas, me gustan las tradiciones, no por nada Luca y yo las estudiamos tanto, no solo las japonesas si no que, también las mexicanas- apareció su media sonrisa
- Me confundes más- bueno dijeron que teníamos que arreglar las cosas y ella pidió que hablara ¿eso tenía que hacer o no?
- Me gustan muchas de ellas, pero no estoy de acuerdo a la idea de que alguien sea superior a otra persona, eso es una completa bazofia que no estoy dispuesta a seguir, un día estamos arriba y al siguiente estaremos abajo- soltó
- Meghan déjate de tus cosas y habla claro- le exigí
- Si hablo claro- empezó con tono dudoso- ¿tú también lo harás?- sus ojos brillaron y ahí estaba el primer trato que debía pactar si quería llegar a algún lugar con ella
- Bien, pero no esperes que lo haga en público- le apunte con el dedo, Dios su sonrisa era un perfecto poema y ella asintió con la cabeza
- Yo no quiero y necesito una sirvienta- dijo con voz calmada y tomando asiento frente a mí para vernos cara a cara- lo que necesito aquí es una amiga- se veía tierna diciendo aquello, sus expresiones- todo el mundo espera algo de mi aquí, todo el mundo quiere algo de mi aquí- abrió sus brazos haciendo énfasis al espacio- mi casa es el único refugio y tú sabes que amo a mi molesta familia y el nefasto de mi mellizo- ah, sí que lo sé- pero mi mundo no es solo ellos- habló con pesadez- y me tengo que enfrentar a gente carroñera que siempre querrá despedazarme- ahí estaba la mirada triste
- Puedes declinar ¿sabes?- le dije viendo como eso le pesaba, ella negó con la cabeza
- Ni Luca ni yo podemos- su voz seguía triste
- ¿Por qué?- subió su vista nuevamente a mis ojos
- Porque les tocaría a mis hermanos y ni Luca ni yo dejaremos que ellos tengan el infierno que nosotros hemos vivido- ahí recobró la seguridad de sus palabras- ellos tendrán una niñez lo más normal que puedan tener- su sonrisa a pesar de ser triste mostraban que eso la reconfortaba
- Entiendo- dije poniendo una de mis manos en su rodilla- en cuanto a lo que pregunte- dejé la frase inconclusa para que ella continuara…